MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) Alberto González Vergel (Alacant, 1922). (Arxiu Assaig de Teatre.) n 184 TEXT Tiestes (tragedia) Adaptación para la escena, en verso libre o rimado Alberto González Vergel Atreo reina en Micenas. Tiestes, su hermano, codicioso del reino, le roba un bellocino de oro en cuya posesión creíanse vinculados los destinos del reino. La reina Pélope, mujer de Atreo, a quien Tiestes sedujera, le secunda en esta empresa. Ello origina una lucha violenta entre los dos hermanos. Después de victorias y de derrotas alternas, Tiestes, arrojado del trono y de Micenas, lleva una vida miserable en el exilio. No satisfecho Atreo, quiere intensificar la venganza e igualar y, aún superar, las afrentas recibidas de su hermano, y simula una reconciliación. Tiestes, invitado por su hermano, vuelve a Micenas, que le recibe con flores, laureles y cantos de bienvenida, como a un hijo muy querido y deseado. Atreo le abraza con fingida cordialidad y vivo recelo, lo que Tiestes recibe con suspicaz desconfianza. Mas habiendo recibido de éste a sus dos jóvenes hijos, Atreo los acepta como rehenes y los degüella al pie del altar de los sacrificios; adereza sus tiernos y delicados miembros en manjar, que sirve al padre, y mezclada con vino, le da a beber la inocente sangre. Esta maldad anochece el Sol y lo hace retroceder de espanto. Y Atreo, en el paroxismo de un gozo feroz, comunica a Tiestes cuales han sido los aderezos del banquete, y hace escarnio de las horrendas imprecaciones del padre, enloquecido de dolor. 185 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) Apagadas las luces del recinto, se oye un ronco y estridente sonido que inunda la escena, iluminada ahora por intermitentes y cegadores relámpagos. Aparece, envuelta por una densa niebla, la sombra de tántalo, condenado a eternidad por sus muchos crímenes en su pasado terrenal. Sombra de tántalo ¿Por qué se me ha arrancado de mi oscura y eterna morada, condenado a no apagar mi sed en medio de cristalinas ondas, ni saciar de manjares huidizos el hambre que muerde mis entrañas? ¿Por qué un dios ignorado me muestra de nuevo este palacio, mansión de mi progenie en Micenas, donde se fraguaron mis desdichas y va a forjarse la de mis nietos: Tiestes y Atreo, esclavos del Mal? ¿Por qué se me condena a asistir, cual testigo inclemente, a la más execrable venganza que de ley fraterna se ha infringido, añadiendo a mi horrible expiación negras fauces que desgarran mi alma? ¿Por qué se me reserva de Sísifo el reiterado canto, que acompaña la cruel tarea de revivir un ayer nefando, en la resbaladiza pendiente de eterna noche que perdió el día? ¿Por qué se me revela de Ticio el vasto antro de su pecho abierto, y excavada la entraña que sigue latiendo eternamente, hurtando un festín a buitres negros que coronan el cielo sangriento? 186 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) ¿Por qué se me transfiere, Rey de las Sombras, tan cruel suplicio de ver a mi estirpe envilecida superarme en odios y rencores, víctimas al tiempo que verdugos del horrendo crimen que se trama? Aparecen las furias, enmascaradas. furia i Lacerada y vil sombra de tántalo, abuelo infausto de Tiestes y Atreo. ¡Que no tenga límite tu enojo, que se te perpetúe la rabia, que te hostigue incesante la furia ciega, por un crimen execrable! furia ii No tengas holgura para odiar la maldad añeja transmitida de tu sangre a la de tus dos nietos, y quizá a biznietos inmolados. ¡Que el crimen acreciente el castigo, y el cetro de ambos puños se caiga! furia i ¡Que a los soberbios hermanos vuelva, tras los ayunos en el destierro, con odio y ambición desmedida! ¡Su miseria se torne pujanza, para que vuelvan a las maldades que los dioses han establecido! furia ii ¡Que el hermano tiemble del hermano, del hijo el padre, del padre el hijo; perezcan éstos de muerte mala, pero peor sea el nacimiento, pues la adúltera esposa de Atreo, amenaza con viles escarnios! 187 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) furia i ¡Que el adulterio más leve sea la coyunda de hermano y cuñada, pues toda ley y lazo natural, sean injustamente abolidos, para beneplácito de quienes siembran el trigo y cizaña juntos! furia ii ¡Que se traslade a Minos la guerra, y empape la tierra la inocente sangre de los jóvenes micenses; y un viento huracanado derribe mástiles y velas de navíos propios, y despliegue al enemigo! furia i ¿Por qué resplandecen nuestros astros en el cielo? furia ii ¿Por qué la hermosura de sus lumbres sigue mostrándose al mundo? furia i ¿Por qué no se hace noche profunda... furia ii ...que convoque los odios, la epidemia, el duelo y las matanzas? sombra de tántalo ¡Séame permitido volver a la hondura negra de mi cárcel, al río de aguas escurridizas; a mis ciénagas empantanadas! ¡Dejadme, dioses, volver al cauce donde se desborda lava y fuego! ¡Vosotros, cualesquiera que fuereis; los que expiáis penas señaladas 188 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) por ley inexorable del Destino; los que veis con horror las abiertas fauces de ávidas fieras hambrientas, y las crueles bandadas de aves carnívoras, ¡escuchad la voz de Tántalo, que añora torturas del Averno en que habitáis ajenos a este otro, donde sufro un suplicio desmesurado, por vaticinios tan crueles como irremediables! ¡Bendecid el dolor que os aqueja y renegad del que me atormenta! furia i ¡Perturba a los que en tu casa habitan! furia ii ¡Introduce en ella guerra y caos! furia i ¡Inspira en tus nietos la fiereza! furia ii ¡Mete en ellos el amor nefando! furia i ¡Distribuye el furor en palacio! furia ii ¡Que odios fraternos comulguen sangre! Sombra de tántalo ¡No!...¡Yo debo padecer la pena, pero nunca ser pena yo mismo! Se me envía a las rotas entrañas de la Tierra, como un vaho maligno, como una exhalación pestilente, para difundir mortal contagio a generaciones venideras. Condenado a arrastrar a mis nietos a la más horrorosa maldad. ¡Escúchame, padre de los dioses!... 189 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) —También padre mío a mi pesar—. Aunque mi lengua locuaz merezca castigo, no he de callar por eso: Jamás seré cómplice de vuestro sangriento designio, ni mi boca sedienta, ni mi hambre encarnizada aceptarán tal inmolación. Presente estaré en el sacrificio; de sed abrasado el corazón y, de piedad, mi alma calcinada. ¿Cuándo será posible escapar de este angosto mundo de estrechez agobiante y física tortura? ¿Cuándo volveré de donde vine? ¡Reclamo ese otro mundo alejado de los recuerdos y las vivencias, sin ese alarido de la sangre, en el que gritan hijos y nietos reclamando mi obligado apoyo! furia ii ¡Ese furor, esos arrebatos, que resuenen por toda tu casa y los asuman quienes la habitan! furia i ¡Que el odio recíproco, la sed de su propia sangre, les incite a morir! furia ii ¡O a vivir!... A la espera de poder coronarse cual reyes de tu propia y cruel dinastía. furia i Alterados por tu inesperado regreso espectral. furia ii Y horrorizados por si se alarga aquí tu presencia. 190 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) furia i ¡Vuélvete a tus antros infernales! furia ii ¡Vuelve al río y laguna estancados, que pueblan criaturas monstruosas! furia i ¡Vete para siempre con un viento de fuego!... furia ii ¡Que barra negras nubes precursoras de oscuros presagios! furia i ¡Micenas, furiosa, no tolera ya ni la huella de tu sandalia! furia i Y ¡Vete, vete!... ¡Aléjate ya! i furia ii ¡Vete, vete!… ¡Aléjate ya! furia i furia ii ¡Aléjate, sombra de tántalo! furia i ¡Pues no hay fuente que no absorba el agua! furia ii ¡Ni arroyo que no aparezca seco! furia i ¡Si los árboles amarillean!... furia ii ¡Si desnudas se quedan sus ramas!... furia i ¡Si los frutos se caen en racimos!. 191 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) furia ii ¡Si no se oye ningún batir de alas!... furia i ¡Si no cruzan el mar gaviotas!... furia ii ¡Si no se oye el embate del agua!... furia i ¡Si en invierno se inicia el deshielo!... furia ii ¡Si las cumbres dejan de ser blancas!... furia i ¡Si el carro del Sol desobedece!... furia ii ¡A las riendas que su lumbre apaga!... furia i ¡Sólo la presencia de tu sombra!... furia ii ¡Las voces de Micenas acalla!... i furia ii ¡Aléjate, aleja tu sombra! ¡Vete, vete!… ¡Aléjate ya! furia i La sombra de tántalo desaparece, acompañada de un fragor de tormenta y el humo del Averno. Las furias, cual oficiantes de una trágica ceremonia, introducen en escena al coro, y asumen el papel de corifeos. Diez jóvenes micenses, mujeres y hombres, forman el coro, cadencioso y ritual. coro [Mientras evoluciona coreográficamente.] Amada de algún dios soberano es la arcaica y noble tierra de Argos, pues alejado Tántalo-Sombra, ha renacido la vida en Minos. 192 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) Algún dios sensible ama el reino del istmo de Corinto y entrambos puertos, con sus mares divergentes; pues han vuelto a poblarse de blancos veleros y de raudas galeras. Volvió Tántalo a su antro infernal, pues nieva otra vez en el Invierno y llega el deshielo en el Estío. Los árboles se doblan al peso de sus ramas cargadas de frutos. Ha cambiado el caudal de los ríos, que nutrieron sus lechos de polvo y de muerte sus verdes riberas. Ya se abastecen de cristalinas aguas, plantaciones y sembrados, al mover cangilones de norias que hacen correr agua por hileros procedente de acequias y azarbes. Vuelven juegos a nuestros estadios y la vida apacible retorna. La licitud ya tiene valía, pues atrás quedó el crimen impune. i corifeo b ¡Soberanos y divinos moradores del Olimpo!... corifeo a corifeo a ¡Acorrednos de ese horror que atenaza la garganta!... corifeo b ¡Y la obstruye de alaridos, por vivencias innombrables! 193 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) corifeo a ¡Que al abuelo no suceda una estirpe incestuosa y asesina! corifeo b ¡Que se acabe para siempre la porfía de crímenes memorables! coro ¡Que la culpa de los unos, de los otros no mitigue, alejados o cercanos de los tiempos que vivimos! corifeo b ¡Que la impía descendencia de la sombra de tántalo, se despoje de su sed de venganza!... corifeo a ¡Que ha enfrentado a un hermano contra el otro, por robarle la mujer y luchar por el trono! coro ¡Cuando la fiebre y la sangre privan la mente del hombre del frío razonamiento, nada ni nadie es capaz de sujetar el furor, 194 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) maniatado e insostenible, de que un antiguo rencor perviva y se fortalezca! Una brillante ráfaga musical, subraya y potencia la entrada mayestática de atreo en escena, al que se acercan dos miembros del coro que asumen, enmascarados, a dos cortesanos. cortesano a ¡Aquí llega el Rey Atreo, muñidor de cruel venganza! cortesano b ¡Quiere compartir el Trono con Tiestes, su odiado hermano! coro Ya resuena en todo el Orbe el fragor de fraticidas y muy poderosas armas. Los cascos de caballos atridas, golpeando el suelo con galopar legendario, agitan los cimientos de todas las fortalezas. [Con orgullo y rencor.] Inerte, cobarde y enervado, y lo que tengo por el mayor de los oprobios en un caudillo: El poder e incultura a la vez. Entregado a quejas y lamentos, soy fiel adicto a la ineficacia, al desánimo y la pesadumbre. Entrambos mares ya deberían promover constantes oleajes, hasta elevar sus aguas al cielo; agitarse mi potente armada a un lado y otro del imbatido istmo, donde se asientan coraje y valor de mis nobles ancestros. ¡Que alumbren incendios campo y villa, atreo 195 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) y la fría desnudez del hierro brille y llame a muerte por doquier! ¡Que este gran palacio se desplome sobre mí, también sobre mi hermano, origen de todas mis desdichas! ¡Ánimo, alma mía, perpetra una hazaña que la posteridad desapruebe, pero no silencie!... ¡Haz que me atreva a esa atroz maldad que mi hermano quisiere por suya! No puede vengarse ningún crimen, si no se consigue superarlo. ¿Y qué crueldad va a sobrepujar la que sufre Tiestes exiliado? ¿Yace sumido en la humillación? ¿Se modera en la prosperidad y está sereno en lo adverso? Conozco bien su índole rebelde, incapaz de doblegarse a nada. Entre nosotros anida el crimen, ¡sea, pues, del que antes lo prevenga! cortesano a ¿No os amedrenta nada, del pueblo la opinión, si de veras aspiráis a su fiel y permanente apoyo? atreo El gran privilegio del que reina, obliga a ese pueblo a soportar y alabar los actos de su dueño. cortesano b La sincera alabanza la obtiene, hartas veces, el varón humilde; el poderoso, tiene la falsa. cortesano a Quiera el que gobierna cosas nobles, que el vasallo las querrá también. 196 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) atreo Si quien señorea, se permite tan sólo cosas nobles y honradas, muy breve será su señorío. coro Si no hay comedimiento, ni afán de justicia y santidad, ni piedad y tampoco lealtad, el trono y poder se tambalean. [Ríe con sarcasmo.] La santidad, la piedad y lealtad son bienes privados que no obligan al poder que ciñe una corona. Lícito es en mí, lo que en Tiestes ilícito. ¿Qué me dejó intacto? Quitome este reino con vileza y a mi mujer, con vil adulterio; con engaños trastornó mi casa, con calumnias disputome el reino. Hay en una estancia del palacio un carnero enigmático, signo opulento del real tesoro. De su cuerpo pende todo el oro del cetro y la corona, que llevan los monarcas de este legendario, fabuloso reino de Micenas. El robo de esa efigie sagrada, fue intento de mi adúltera esposa, - encamada al lecho de mi hermano-; de ahí viene el mal que nos infringimos. No olvido que vagué errante y azogado por todo este reino; suicidada mi esposa, arruinada mi autoridad, herida mi casta, malentendida mi ilustre sangre... No tengo ninguna certidumbre; sólo la hostilidad de mi hermano. Pienso en mi viudez -lasciva Pélope-, fascinada por Tiestes; y en Tántalo, mi valeroso y mítico abuelo. atreo 197 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) Los recuerdos avivan mi venganza. ¡Reveladme, dioses, la manera de inmolar a un hermano al que odio! cortesano a Se dice, que si se mata a hierro, se echa afuera el suplicio que aflige. [Exaltado.] ¿Hablas de acabar con un suplicio? Pero, ¡si yo quiero ser suplicio permanente! La muerte en mi reino se me pide como un gran favor. Matar deprisa es un acto piadoso que ejecutan tiranos benignos. atreo cortesano b ¿No os anima ninguna piedad? [Furioso.] ¡Afuera, lejos de mí, piedad, que conturbas mi odio soterrado! Mi pecho todavía no hierve con la bravura y vigor de siempre. ¡Os pido, oh dioses familiares, que algo terrible llene el vacío que desde siempre ocupó un reptil! atreo cortesano a ¿Qué maquináis? atreo Nada de ese molde que llena el habitual despecho. No dejaré maldad por tratar. cortesano a ¿El hierro? atreo Es poco. 198 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) cortesano b ¿El fuego? atreo No es nada. cortesano a ¿Hay castigo que mitigue tu ira? cortesano b ¿Qué arma emplearéis que aplaque vuestro odio? [Con misterio.] Mi arma será Tiestes en persona. atreo cortesano a ¿No es algo que excede a vuestra furia? atreo Proceloso tumulto sacude mi pecho agitado con latidos que me golpean en lo más hondo. Fui arrebatado y no sé adónde se me lleva, pues perdí el Oriente. Y me debato entre el gran mugido del suelo y la calma de este día sereno y, a la vez, quejumbroso. cortesano b Pero, decid: ¿qué tramáis si puede saberse? atreo Algo más grande y terrible que el mismo crimen, y más horrible que las vilezas del ser humano. Sé con certeza que es algo grande, que me obligo a desvelar más tarde. Lo más horrible de esta maldad, es que Tiestes será ejecutor. Esto va más allá del suplicio que, sin duda, mi hermano merece: 199 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) Comensal de un infando festín para la voracidad de Tiestes. Veo en su boca un trozo de carne, que ha dejado a un padre en orfandad. [Se golpea el pecho.] ¿Por qué, Atreo, detienes la acción? ¿Por qué tu inocencia dura tanto? ¡Atrévete, ea, obra ya! ¡Pon ante tus ojos la visión de la matanza que ha de asombrar a un mundo insensible a la tragedia! cortesano a Pero, ¿qué artero ardid llevará a Tiestes a caer en la trampa? atreo Mi trono compartido con él. cortesano b ¿Quién le hará creer tu ofrecimiento? atreo La esperanza será siempre crédula. Por ello vendrá a Minos, guiado de su afán vengativo y el ansia de poder. Con la sucia esperanza de verme humillado y destruido por él; incapaz de remontar el vuelo real, ni rehacer mi vida pública y tampoco familiar. Enviaré a mis hijos al exilio donde él se halla, con mi encarecido ruego de que deje de vagar por el destierro y el infortunio; que abandone ajenos cobertizos y comparta aquí mi trono en Argos. Pienso que su mostrada indigencia y muy duros trabajos habrán domado al hombre con tanto lance envilecido. 200 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) cortesano a El tiempo y la fuerza de la costumbre hizo llevaderas sus tribulaciones. atreo Te equivocas. El sentimiento de las desgracias se acrecienta de un día al siguiente. Liviano es el peso de llevar las miserias en muy corto plazo; gravoso es llevarlas de continuo. cortesano b ¿Conocerán tus hijos la trama? atreo En años tan mozos, silenciar un secreto no resulta fácil; para ellos no existe la callada fidelidad. El callar es ciencia que se aprende en el duro transcurso y paciente escuela de la vida. cortesano a ¿Engañarás a aquéllos por quienes piensas que vas a engañar a otros? atreo Engañaré porque están limpios de crímenes y de cualquier culpa. ¿Qué necesidad hay de implicarles en la maldad? No quiero a esos hijos hacerles cómplices de mis odios. Además, en esta trama, quiero descubrir un enigma en el rostro y el normal comportamiento de ellos. Si al reencontrar a Tiestes, no pueden mostrarle odio; si al abrazarle no le llaman tío, al ser mi hermano, seguro que él es el padre de ellos. [Con despectivo furor.] ¡Hijos adulterinos de madre 201 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) promiscua y padre envilecido! [Amenazador.] ¡Os advierto, fieles cortesanos, que mi ley os obliga a ocultar la firme, sombría y pavorosa decisión mía; si de verdad, tenéis en estima vuestra vida! atreo entra en palacio. Los cortesanos se reintegran al coro y se despojánde la máscara. coro [Con ritmo acompasado y coreografiado.] Una legendaria estirpe, y la vieja Dinastía que habrá de nombrarse luego linaje de los Atridas, por la conquista del cetro se halla en lucha fraticida, entre el vigoroso Atreo —mentor de sangre vertida—, y el muy ambicioso Tiestes, que no perdona la vida a su despótico hermano, que lleva sierpe escondida. El odio y furor innobles denigran la Dinastía, desde Tántalo tirano al menor de los Atridas. corifeo a ¿Qué huracán os impele a efusión de la sangre y el esperma? corifeo b ¿Dónde está la nobleza y el honor que os exige la realeza? 202 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) corifeo a ¿Qué ambición desmedida de palacios y prebendas os agita? corifeo b ¿Dónde habitan en el hombre sus derechos, que anulasteis y os reclama? coro La púrpura no hace al Rey, ni tampoco la opulencia, ni esa diadema que ciñe su frente en días de fiesta, donde el boato y el oro, el laurel, perlas y gemas parpadean luminosos cual relumbran las estrellas. Ser rey es vencer el miedo que los vicios y crueldades, en el largo y negro trecho de un insomnio compulsivo, le renacen en el pecho. corifeo a Ser rey es no conmoverse por halagos y prebendas. corifeo b Ni por el oro maldito que causa todas las guerras. coro Un rey es aquél, que puesto por debajo de sí mismo, en seguro abrigo, mira sin vértigo ante el abismo, todo lo que al reino agita. 203 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) corifeo a Siempre el alma virtuosa será un bien de la realeza. corifeo b Que los dioses le otorgaron por gallardía y nobleza. coro Rey es quien nada desea. Rey es quien nada reclama. Rey es quien ama la vida. Rey es quien tiene esperanza. corifeo a Rey es quien es comprensivo. corifeo b Rey es quien nunca es altivo. corifeo a Rey es quien es solidario. corifeo b Nunca es el rey visionario. corifeo a Un rey siempre es tolerante. corifeo b El rey es siempre constante. coro No necesita caballos para expandir su grandeza; ni arrasar grandes ciudades para mostrar fortaleza. corifeo a Estése quien quisiere en la cima resbaladiza de ansiado reino... 204 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) corifeo b Satúrese del dulce y sabroso lugar ocupado por el trono... coro La muerte se abatirá sobre él; será conocido por sus súbditos, y ajeno e ignorado por sí mismo. Una sonoridad brillante, entre percusión, cuerda y trompetería acompaña la entrada a escena de tiestes, acompañado de cánticos de alabanza. corifeo a [Incrédulo.] ¡No puedo dar crédito a mis ojos! [Alterado.] ¿Acabó, por fin, su injusto exilio? corifeo b corifeo a [Feliz.] ¡Sí, es él, nuestro querido Tiestes! [Lo mismo.] ¡Hermano del despótico Atreo! corifeo b corifeo a [Exaltado.] ¡Engalánate ya, pueblo de Argos! [Igual.] ¡Recibe con laureles a Tiestes! corifeo b El coro es portador de flores y ramas de laurel. Representa al pueblo de Argos, que le da la bienvenida. Dos coreutas se acercan a tiestes, que les tiende dos máscaras de aspecto juvenil, que se colocan en el rostro convirtiéndose en sus hijos: tántalo y flistenes. coro [Con jubilosa alegría.] Ha poco que crepitaron choque de civiles y fraternas armas. ¿Qué dios ha sido el que entre el clamor puso, al fin, sosiego repentino? Tiestes extiende los brazos y acalla el vocerío de bienvenida. Cesa la música y se hace el silencio. 205 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) tiestes ¡Mis nobles ciudadanos micenses!... Veo y siento en vosotros al pueblo de Argos, mi recordado y querido pueblo. Veo los muy añorados techos de la patria y sus cimientos, que todos vosotros representáis. Veo el suelo de mi natal tierra y a los dioses patrios; si es que hay dioses. Veo las ciclópeas y sagradas torres, tan erguidas y fastuosas. Veo los estadios, que frecuentan los jóvenes atletas micenses, donde yo, y no sólo una vez, me ennoblecí ciñendo el laurel de oro en la carroza de mi padre. Veo a mi hermano Atreo, vuestro Rey, venir en persona a recibirme y ofrecerme compartir su reino. Ello hace que me sienta abrumado y deseoso de retornar a los umbríos parajes donde viví largo tiempo con las fieras. [El coro acusa desasosiego.] Ese claro resplandor del trono, no va a cautivarme la mirada con su atractivo y falso fulgor; pues quien una dádiva contempla, debe también ver al dadivoso. En medio de mis pasados males, por todos ásperos de sufrir, yo viví muy tranquilo y contento. Ahora, sin embargo, tengo miedo; vuelvo a mis viejos miedos de antaño. Mi alma, indecisa, quiere llevar mi cuerpo caminando hacia atrás, mas los pies se niegan a moverse. tántalo (hijo) [Preocupado.] No entiendo qué razones os mueven a quedaros quieto, vuelto a un lado y al otro, asombrado y vacilante. 206 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) coro [Trata de convencerle.] ¿Por qué, alma frágil, das tantas vueltas a una decisión tan fácil? Mira, Tiestes, a tu hermano y la realeza. ¿Temes, acaso, aquellos antiguos males, totalmente superados? tiestes No aceptaré otra vez la desdicha. Volveré atrás el paso, si puedo, e intentaré escapar de este trance. tántalo (hijo) Pero, ¿qué razones os obligan a alejaros de añorada patria que ni siquiera habéis vislumbrado? flistenes ¿Por qué rechazáis una acogida que todo nuestro pueblo os dedica? tántalo (hijo) Tras deponer su enojo, os devuelve Atreo la mitad de su reino. flistenes Y con ello reúne, por fin, a los miembros de nuestra familia desintegrada, y os restituye a vos mismo. tiestes No me pidáis, hijos, saber la causa de mi temor. No veo nada que de temer sea, y a pesar de todo, temo. Ignoro qué fuerza misteriosa me lleva a otro lugar diferente a aquel donde me esfuerzo por ir. A mi navío le impulsan remos, y es echado atrás por la corriente que resiste al remo y a la vela. 207 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) tántalo (hijo) Arrolla todos los obstáculos que detienen vuestra alma y pondera el valor de los bienes previstos a vuestra llegada. flistenes Podéis ser Rey. tiestes Porque, sin duda, puedo morir. tántalo (hijo) ¡Es la soberanía!... tiestes Que nada vale para el que no la desea. flistenes Piensa que la heredarán tus hijos. tiestes No caben dos en un solo trono. tántalo (hijo) ¿Quién preferirá ser hombre mísero cuando puede ser hombre magnánimo? coro La grandeza nos seduce siempre por su falso nombre y, la aspereza, nos preocupa y nos asusta en vano. tiestes Mientras fui poderoso, en momento alguno, hijos, dejé de temblar y de temer hasta de la espada que llevaba colgada en mi cinto. Es un bien no estorbar a nadie y, sentado en el suelo, tomar manjares seguros que confortan. 208 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) coro Los crímenes no entran en cabañas; seguro es yantar en sobria mesa. En oro se bebe la ponzoña. tiestes Os habla experiencia, hijos míos: Más que la fortuna, me contenta el infortunio. Ningún humilde tembló ante mi mansión, que se erguía en la cumbre de un monte elevado. No brilló el nacarado marfil en artesonado de mis techos, ni jardines que se cimbrearan colgantes en huertos de mi casa. Ningún centinela vigiló mi sueño, ni alimenté mi estómago glotón con ningún otro tributo que no fuese mío; ni el incienso reverenció otro altar que el de Júpiter. Y, a cambio de eso, nadie me teme y seguro estoy donde estuviere. coro ¡Ah, cual inmensa y noble grandeza es el poder vivir sin reinar!... tántalo (hijo) ¡Vuestro hermano os suplica que reinéis! tiestes ¿Lo suplica? Me temo que el ruego encubra una acción inconfesable. corifeo a El afecto acostumbra volver al pecho de donde se apartó. corifeo b El amor legítimo recobra siempre la vehemencia que perdiera. 209 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) tiestes ¿De verdad, ama a Tiestes su hermano? Antes, la noche negra dará luz al mundo; antes casará el agua con el fuego, la vida con la muerte, y el mar con el viento contraerán una fiel alianza. tántalo (hijo) Pero, ¿qué celada es la que teméis? tiestes Todas. Para mi temor no hay tasa. El poder de Atreo iguala a su odio. flistenes Pero, ¿qué es lo que puede contra vos? tiestes Nada, pues nada temo por mí. Por vosotros, se me hace temible el odio y el rencor de mi hermano. tántalo (hijo) Avisado, como estáis, ¿le teméis? coro Para el mal, no es posible cautelas. Vuestro padre os toma por testigos... tiestes De que les sigo y no les conduzco. coro Un dios enigmático os conduce, amado Tiestes, el pensamiento. No camines con paso indeciso, sino con firmeza y esperanza. Unos acordes sombríos seguidos de música inquietante, subraya la presencia de atreo en escena. Caen al suelo las verdes guirnaldas, las coronas de flores y ramas de laurel. Se hace un silencio tenso. La luz concentrada de un proyector le aisla del conjunto. 210 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) [Para sí mismo.] Presa estuvo la fiera en tendida red de cantos, júbilo y halagos. ¡Por fin, ya es un hecho incuestionable! ¡Héle ahí en persona, con la odiada prole, cual padre muy venerado! atreo Va hacia tiestes y sus hijos con expresión afable y aparente cordialidad. coro Cuando un perro sagaz de la Umbría, busca el rastro de animal herido, va sujeto a una larga correa y huele el sendero con su hocico; percibe de aquél su ya lejano olor, y sus ladridos le siguen la pista; mas cuando está esa presa cercana, pugna con el collar, tira de la correa, que rompe, y desgarra el cuello de su víctima. [Después de varios abrazos.] Me alegra, hermano, verte de nuevo. ¡Devuélveme más esos abrazos deseados durante tu ausencia! [Se abrazan de nuevo.] Cuanto hubiere entre ambos de enfadoso, haya pasado ya, mi querido y muy admirado hermano Tiestes. Desde hoy, las leyes de nuestra sangre y de la piedad, sean loadas, y queden condenados el odio y el despecho por nuestras dos almas. atreo tiestes Podría justificar mis actos, de no mostrarte conciliador. Te confieso que hice todo aquello, Atreo, que creíste de mí. La piedad fraterna que me muestras, hace intolerables mis ofensas. Culpable es todo aquel, que un hermano noble y generoso, le ha creído 211 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) reo de culpa. Abogo con lágrimas por tu perdón. Eres el primero en verme suplicante. Mis manos no han tocado a nadie las rodillas implorante. Me inclino ante ti, [Se arrodilla.] hermano mío, para pedirte que limpies tu alma sinceramente del odio, el despecho y el rencor que te mueven al saber hijos míos los que criaste como hijos tuyos. ¡Tómalos como seguros rehenes del compromiso que aquí establezco! [Lo levanta del suelo.] Quita tus manos de mis rodillas. Levanta y abrázame de nuevo. [Se abrazan.] Y vosotros, «sobrinos», también venid a mis brazos. Sois apoyo [Les abraza.] de su vejez y fe en el mañana. Y tú, hermano, arranca de tu cuerpo los harapos y viste atavíos dignos de tu rango de monarca compartido, y toma posesión gozosa de la mitad del Reino. [Los esclavos lo desnudan y visten con la ropa de la realeza.] Es mi mayor gloria: Devolver a mi hermano una parte del trono que ocupó nuestra noble progenie. Poseer un reino es cosa del azar; entregarlo, es un acto virtuoso. atreo tiestes Los dioses te compensen, hermano, de tu sacrificio y merecimientos. Mi escuálida miseria no admite en mi frente la real diadema, y rehuye el cetro de mi torpe mano. atreo Caben dos reyes en este reino. 212 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) tiestes Creo mío lo que es tuyo, hermano. [Exultante.] ¿Luego aceptas que yo obtenga gloria por cederte la mitad del Reino? atreo tiestes Ya la gozas muy insigne y colmada. Ahora queda la mía: Decido con firmeza rechazar el trono. [Contrariado.] Pues yo voy a rechazar mi parte si tú, hermano, no aceptas la tuya. atreo tiestes [Tras un silencio.] Lo lograste... Seré rey contigo; pero poder, armas y gobierno, como yo mismo, te serviremos. Le toma a un esclavo la diadema real y se la ciñe a Tiestes. atreo Lleva en tu cabeza venerada el signo real que yo te impongo. [Enigmático.] Luego ofreceré a ese dios sediento, la joven sangre de mis dos víctimas. El coro expresa su inquietud con un hondo suspiro. Salen de escena atreo acompañado de sus sobrinos. tiestes les sigue cabizbajo con docilidad y preocupación. coro De no haberlo presenciado, sería como imposible olvidarse del pasado y ver a un hermano y otro ponerse de un mismo lado, olvidando las rencillas que, ha tiempo, les enfrentaron. 213 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) corifeo a El muy poderoso Atreo quedó de estupor plantado, pues imaginar no pudo ver a Tiestes humillado. corifeo b Amor es noble virtud que enaltece a los humanos. Si es realmente sincero, logra la paz entre hermanos. coro [Rememora.] Ha poco que por Micenas lucha fraterna inquietaba, y el choque de armas civiles en dos bandos crepitaba. corifeo b Por los amados esposos, fieles mujeres temblaban. corifeo a Madres a jóvenes hijos, contra su pecho abrazaban. coro Y la estela de la muerte, por doquiera se mostraba. corifeo b Unos, contra sus deseos, las espadas empuñaban. corifeo a Otros, reparaban muros de la muralla agrietada. coro Aquéllos defienden puertas de nuestra ciudad sitiada; esotros, vigilan siempre la señal de las alarmas. 214 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) corifeo a Mas hoy se acaba el fragor de una guerra desatada entre hermanos contendientes. corifeo b Pues conciliados aguardan, que clarines enmudezcan y silénciense las armas. coro [Dudoso.] No hay lucha y ningún conflicto, ni contienda apaciguada, que en el plazo de unas horas sus llamas deje apagadas. Dolor y placer se alternan de la vida en sus jornadas, pero el que en su frente lleva de la realeza la banda, y tiene a todo su pueblo con la cerviz humillada, nunca ha de aceptar de agrado compartir su real causa. corifeo a Desconfiemos que Atreo su compromiso mantenga. corifeo b Si un dios no tuerce el destino que al nacer marcó su estrella. Una llamada de trompa anuncia la llegada del «mensaje» que traen dos jóvenes coreutas, que asumieron, enmascarados, a los hijos de Tiestes. El coro, expectante, les circunda. mensajero a ¿Qué país es éste que heredaron dos cultos y muy nobles hermanos? ¿Es Argos, Esparta o es Corinto? 215 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) mensajero b ¿A qué lugar de éstos corresponde el horror de tal monstruosidad, ni siquiera propia de las fieras? coro ¿De qué aura negra sois mensajeros? ¿Qué novedad es esa de que habláis? mensajero a ¡Que una rapaz arranque mis ojos! mensajero b ¡Que tal maldad cierre mis oídos! coro ¡Hablad claro, sea lo que fuere! ¡No dejadnos en esta penosa incertidumbre! mensajero b Pegada llevo al rostro la visión de tan cruel fechoría. mensajero a ¡Insanas tempestades, arrastradme muy lejos de aquí! El coro emite un hondo rumor al igual que el de una tormenta que se acercara. coro ¡Reveladnos la causa de vuestro espanto y señalad a su autor! Tras un breve silencio. mensajero a En la opulenta mansión de Atreo se distribuyen varios recintos de dorados techos y columnas 216 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) de alabastro y de mármoles purpúreos. La más lejana de las estancias la ocupa un muy tenebroso bosque que acoge el santuario del reino. El ciprés, el tejo y la carrasca silencian la sangre que se vierte sobre el ara de los sacrificios. mensajero b Es fama que allí, en las noches ciegas, aparecen aullando infernales divinidades, que participan en la hedionda acción de sangre y muerte. En el bosque resuenan aullidos, y en aquel recinto, apariciones de muertos que abandonan sus tumbas. El día nunca sosiega al miedo, y mora en la noche un religioso terror por los mugidos del antro. Tras ponerse la máscara de tántalo (hijo), que subraya un acorde. mensajero a (tántalo hijo) Atreo, furibundo, nos lleva hasta la losa del sacrificio. Nos ata las manos a la espalda y liga fuerte nuestras cabezas con grisáceo vendaje de lino. mensajero b ¿Quién podrá contarlo dignamente? ¿Quién justificará el sacrificio a un dios vengativo, de los hijos de hermano humillado y sometido? coro ¿Mas quién aplicó la mano al hierro? mensajero a (tántalo hijo) Atreo mismo, cual truculento oficiante de un cruel ritual. 217 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) mensajero b No omite pormenores del rito, como quien nada sobre las olas. mensajero a (tántalo hijo) Canta el himno fúnebre previsto, se yergue soberbio sobre el ara, reza imprecaciones pavorosas y hunde el hierro al rojo en nuestros cuerpos El coro emite un lamento. mensajero b Un gran vendaval agita el bosque y un fuerte temblor sacude el suelo. En la parte siniestra del cielo, un rayo abre un hondo y negro surco. [Se quita la máscara.] El vino para la libación cae sobre el fuego y se trueca en sangre. Diadema que ennoblece su frente, al suelo cae cual negro presagio. mensajero a mensajero b Estos prodigios infunden miedo. mensajero a Sólo Atreo se muestra impasible. mensajero b Sigue fiel a sí mismo y espanta incluso a los dioses que a él le asustan. mensajero a Sin mayor tardanza, se abalanza sobre el ara con gesto sañudo, preso de macabras intenciones. mensajero b Como un tigre hambriento, aún no sabe a cuál de ambos hincará el colmillo. 218 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) mensajero a Va hacia el uno; mas luego, hacia el otro, con su hambre sujeta por instantes. coro Pero, ¿a quién primero sacrifica? mensajero b La primera ofrenda la dedica a su abuelo Tántalo, de nombre igual al del sobrino que inmola. coro Mas, ¿con qué ánimo el joven cedió? ¿Con qué gestos encaró su muerte? mensajero a (tántalo hijo) [Se coloca la máscara.] Me mantuve de pie, muy seguro de mí mismo, sin súplica alguna. mensajero b Mas el fiero Atreo hundió en la herida toda aquella daga, brutalmente. Sacado el hierro, quedó el cadáver en pie hasta caer, justo de frente, sobre el propio y cruel homicida que, sañudo, fue al otro sobrino y, arrastrándolo, lo unió al hermano, para descabezarlo luego. coro [Expresa su horror.] ¿Y qué hizo después del doble crimen, de tan feroz y horrible matanza? [Se quita la máscara.] Si el crimen finalizara aquí, fuera, sin duda, una acción piadosa. mensajero a coro [Con estupor.] ¿Admite Naturaleza, acaso, mayor y más atroz villanía? 219 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) mensajero b Ese no fue el término del crimen; fue sólo el macabro principio. corifeo a ¿Qué pudo hacer más? corifeo b ¿Lanzó a las fieras los cuerpos para ser devorados? mensajero a Mejor habría sido arrojar los restos a carroñeras aves, e incluso, más humano, a las fieras. mensajero b ¡Quédese en deseo lo que suele tomarse como horrible suplicio! coro [Consternado.] ¡Ah, crimen, para ninguna edad creíble, y negado por quienes lleguen! Los dos mensajeros se colocan sendas máscaras y asumen la personalidad de las jóvenes víctimas. Al coro, con misterio. mensajero a (tántalo hijo) Desde un lugar lejano e impreciso... mensajero b (flistenes) Desde el legendario «Más Allá»... mensajero a (tántalo hijo) Vamos a relataros vivencias... mensajero b (flistenes) Que sufrimos antes de embarcarnos... 220 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) mensajero a (tántalo hijo) Tras darle la moneda a Caronte... mensajero b (flistenes) ...Y cruzar la pavorosa Estigia. coro [Con asombro.] ¡Ah, prodigio del Arte y la Vida, que desvelan Misterio y enigmas! Se oye una música entre misteriosa y mágica. mensajero a (tántalo hijo) Arrancadas de cuajo, del cuerpo vivo, nuestras sangrientas entrañas, seguían latiendo corazón y venas, aún tibios y con pulso. mensajero b (flistenes) Atreo ocúpase ya tranquilo —pues las vísceras le satisfacen—, para preparar y aderezar el hórrido y funesto banquete para nuestro padre. El coro expresa horror. mensajero a (tántalo hijo) Que tranquilo aguarda, en su estancia del palacio, felices nuevas de sus dos hijos. mensajero b (flistenes) El execrable Atreo en persona, corta nuestros cuerpos y, separa de ellos, sus más jugosos bocados. mensajero a (tántalo hijo] Sólo reserva rostros y manos, que confiaron en su lealtad. 221 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) mensajero b (flistenes) Pone vísceras en asadores, que tuesta lentamente con fuego muy bajo, que hace gotear grasa hirviente, con sonido apagado. mensajero a El fuego exhala un humo tan negro como pez, y tan denso y pesado, como aquella losa funeraria en que no se esculpió nombre alguno. mensajero b (flistenes) Bullen condimentos, crepitan las brasas, y no llega a saberse si, de verdad, algo gime o clama. mensajero a (tántalo hijo) [Exaltado.] ¡Padre, masticaste a tus dos hijos!... ¡Ha engullido tu funesta boca, carne de tu carne! El coro reacciona empavorecido. mensajero b (flistenes) [Exaltado.] ¡Lo ignorabas, y ese fue tu único bien, en medio de tanto mal como estás sufriendo! Gritan exaltados. mensajero a (tántalo hijo) ¡Tiestes, padre nuestro, aunque el Sol haga seguir a su carro dirección inversa!... mensajero b (flistenes) ¡Aunque la lúgubre noche, nacida a deshora, haya sumido en tinieblas esta pavorosa, espeluznante y tétrica hazaña!... 222 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) mensajero a (tántalo) ¡Va a obligarte, al fin, a abrir los ojos!... los dos ¡¡Y todo el mal se te hará patente!! Una fuerte ráfaga sonora pone punto final al «mensaje». Sus protagonistas vivenciales, se quitan las máscaras y se incorporan a la acción como coreutas. El coro jadea y se mueve quejumbroso antes de emitir palabra alguna. coro Tiembla nuestro cuerpo estremecido de gran pavor. Tiembla el ancho mundo, que teme derrumbarse con el caos. Tiemblan tierra y mar, por si les traga Naturaleza; y tiemblan los astros vagarosos en el firmamento, por si el Sol -su antorcha inextinguible-, no marque el linde que les separa, al cálido verano, de inviernos helados. Y la Luna, que vive del carro de fuego, también tiembla, por si le asigna miedo a la noche. corifeo a Tras los hechos acaecidos, tiembla cualquier ser humano que se precie de serlo. corifeo b Y hasta la aurora tiembla, por si su primera luz, no alumbra el rocío de aljófar que siembra por verdes praderas y anchos campos. coro [Con muy honda preocupación.] ¿Se acallará el relincho de raudos corceles, que galopando aspiran a detener viajeros celestes? corifeo a Ningún eclíptico recorrido 223 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) de ese mundo legendario, puede parar del Zodiaco su viaje. corifeo b Sus signos orientan anual curso, que detenido, causaría tal cataclismo, que quienes habitan el Olimpo, no permitirían. Una música astral y mágica subraya lo que sigue. coreuta i Sin llegar la primavera es aries quien obliga, contumaz, al viento, a llenar de aire las blancas velas; no va a asfixiarle ningún evento. coreuta ii El toro, que en su luciente torso lleva al vigor y a la fuerza atados, quiere salvar su vida en el coso, a la de géminis maniatado. coreuta iii leo, que en ardientes estivales flamea —de Hércules favorito—, no ha de caer en redes mortales, ni piscis. De los astros, dos mitos. coreuta iv virgo amó siempre nuestro planeta, y libra equilibró su balanza; jamás habrá una acción tan funesta, que, a ambos, destruya desesperanza. coreuta v escorpio y capricornio defienden, con valor y a ultranza, su existencia; al igual que cáncer que nos muerde y acuario, que nos vierte su esencia. coreuta vi Con el arco y flechas sagitario 224 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) dará siempre en el centro del blanco; aunque un pesimismo visionario niegue lo que dioses otorgaron. coro [Apaciguado en su inquietud.] Son reflexiones que tranquilizan. Y la tragedia de Atreo y Tiestes se ha de tornar tragedia optimista, si se aceptan vivos referentes de Esquilo, de Marx, de Brecht y de Engels. Una ráfaga musical brillante y, a la vez, siniestra, subraya la presencia de atreo en el pórtico de palacio. El coro, expectante, se repliega. atreo Al igual que los astros, camino junto a ellos y, con sus mismos ojos, veo impasible la infinitud. Ya no me preocupa de los dioses la protección, ni de ese ignorado Olimpo, su interesado apoyo. Ahora sí puedo ostentar insignias de la realeza. Ahora sí puedo ocupar el trono de mi estirpe. Mas, distanciado de mí el Olimpo, ¿podrían ampliarse mis deseos? ¡Ojalá pudiera detener a los dioses fugitivos, para traerles después del banquete que acabo de ofrecer a mi hermano, en el que ha ingerido sustanciosas viandas y bebido hasta embriagarse. Yo lo hubiera preferido sobrio, capaz de asumir tan atroz ágape. Me conformo con verle tranquilo y risueño, tras masticar carne [El coro expresa horror.] roja de sí mismo, aderezada con sal y aromáticas especias. ¡Yo rasgaré las densas tinieblas que ocultan sus merecidas penas! A esclavos que le 225 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) acompañan. ¡Esclavos, conducid a mi hermano aquí afuera de mi real palacio!... ¡Quede patente mi casa en fiesta; que relumbre con llama de antorchas y se engalane de plata y púrpura! ¡Quiero ver a Tiestes apurar, en una copa de oro labrado, la mezcla de un vino añejo oscuro y la roja sangre de sus hijos! El coro se muestra horrorizado. Acompañado de una ráfaga musical, aparece tiestes en la puerta del palacio. Está ebrio y canturrea algo. ¡Hele aquí borracho y jubiloso, perdido, en parte, su sano juicio! tiestes [Intenta vencer la pena que le embarga y la embriaguez.] ¡Huya la tristeza de mi pecho curtido por el mal y el pavor, mis compañeros inseparables de aquél, mi exilio desesperado!... ¡Huya de mí infamante miseria, carga de insoportable infortunio! Cuando aún me abruma la torrentera de muy grandes males y desdichas, meritorio es, que tras despeñarme de aquella cumbre del poder, soporte hoy el peso de las ruinas de una realeza hundida, sin verme agobiado o vencido por males que a otro harían doblar la cerviz. ¡Expulsa, Tiestes, de tu alma el mal, y acepta de las cosas el sesgo favorable y no huyas del gozo, aunque común es del desdichado no creer nunca en vientos favorables! ¿Por qué he de recelar de esta fiesta? ¿Por qué mi cabello, sin motivo, erízase por un terror súbito? ¿Por qué lloro sin causa aparente? [Arrancándose de la cabeza la corona de flores.] ¿Por qué no quiero ceñir de flores 226 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) mis sienes? ¿Por qué de mis mejillas caen incesantes y ardientes lágrimas, y el gemido entrecorta palabras e invade mis noches el insomnio? El presagio de horrorosos males me acongoja, y vivo en la tristeza y el llanto por penas inminentes, que al igual que a viejos marineros, la tempestad se anuncia sin viento en las velas ni encrespadas olas. coro Es miedo y dolor lo que te embarga. No ofrezcas, Tiestes, tu comprensión ni le brindes nobles sentimientos, que no harán mella en el corazón de Atreo, ni mitigarán su sed de cruel e insatisfecha venganza. Atreo se ha acercado a Tiestes. atreo Celebremos, hermano, en fraternal concordia, esta jornada festiva, que consolida, al fin, la realeza y ha de darnos una inquebrantable fe y fortaleza en la paz futura. tiestes Hartos manjares comí, sin beber menos; placeres que aumentarían mi dicha, de poder compartirlos con mis dos amados hijos. atreo Piensa que los tienes al pecho abrazados, que están contigo y aquí los tienes. Ninguno te será sustraído, quedarás satisfecho, no temas. Tus hijos también se han consagrado —ellos de antemano—, a ese convite 227 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) en el que tú te saciaste, hermano. Tus dos hijos celebran contigo el real festejo que nos consagra, hasta la muerte, cual reyes de Argos. [Indica a un esclavo que le acerque la copa. Se la ofrece a Tiestes.] Toma esta copa donde bebieron nuestros ilustres antecesores. Llena está de un vino tan rojizo como si fuese teñido en sangre. tiestes Tomo con agrado, de tu mano, esta última copa que me ofreces. [Alza la copa.] ¡Ofrendemos una libación en recuerdo de nuestros difuntos padres y de sus antecesores! [Va a llevarse la copa a los labios y se detiene, como si algo o alguien se lo impidiera.] Mas, ¿qué es esto?... No puedo llevarme a la boca esta copa dorada... Mi mano no quiere obedecer, pues su peso fatiga mi diestra... Y el vino parece que quisiera huir de mis labios y fluir en torno mío... [Apura la copa con gran esfuerzo. Tras una pausa.] Noto que tiembla el suelo bajo mis pies, y el cielo apagó de pronto sus estrellas. La noche se ha ocultado en la noche, pues huyeron todos sus luceros. Sea lo que fuere este prodigio, suplico al cielo y a ti, hermano, que me devuelvas a mis dos hijos. [Enigmático.] Nada ni nadie puede ya, hermano, alejarlos de ti. atreo tiestes [Tras un silencio doliente.] Mis entrañas se agitan desde lo más profundo. 228 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) Oigo gemidos que no son míos, pero tampoco me son extraños. Estoy seguro de que el dolor que me remueve, cesará al veros, hijos míos. ¡Venid a mi lado!... ¡Venid a abrazar a vuestro padre! [Siniestro.] Te abrazarán en la Eternidad. [Hay un hondo lamento del coro.] Fueron ofrecidos a los dioses, como una muestra de gratitud por nuestra paz y la de Micenas. atreo Con un ronco quejido, el coro se cubre la cabeza en señal de duelo. Tiestes se queda paralizado. Tras una pausa, estalla en terribles imprecaciones. tiestes ¡¡Tierra, cielos!!... ¿Por qué no os sepultáis, conmigo y vuestro rey, que maldigo, en el caos y la infernal Estigia?... ¿Por qué a Micenas no se la arranca de cuajo y se destruye con ella, ese palacio donde se albergan el odio y rencor más execrables? ¿Por qué, Tierra inerte, no te arrastras en el lodo negro y pestilente del insondable abismo de Atreo? ¿Y por qué esos dioses fugitivos, que huyen, por no asumir tal oprobio, no estallan sobre nuestras cabezas? [Con frío cinismo.] Recibe en espíritu a tus hijos, que tan largamente deseaste. Gózate con ellos y divide con ellos nostálgicos abrazos. Tu hermano ya no será un estorbo, ni va a impedirte que los recuerdes. atreo tiestes ¿Es esa la fe que nos juramos? 229 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) ¿Es esa la fraterna lealtad, la bondad que intercambian hermanos? ¿Así abjuras del rencor y el odio que te movieron siempre hacia mí? No te pido que me los devuelvas vivos, puesto que ya es imposible, pero lícito me es sepultarlos. ¡Entrégame sus cuerpos!... Que el fuego funerario los haga cenizas, que pueda un padre venerar siempre en el túmulo que ha de construirles. [Enigmático y maligno.] Todo cuanto de tus hijos queda lo tienes ya, y tienes también lo que de ellos ya no queda. atreo tiestes [Angustiado.] No entiendo tus palabras, Atreo. Dime, pues, con claridad, ¿qué has hecho con sus restos? ¿Dónde están ahora? ¿Qué palabras habrán de bastarme cuando sepa qué has hecho con ellos? ¿En qué gemidos me desharé? ¿Qué alaridos lanzaré a los vientos? ¿Volverá a su nacimiento el día? [Impasible.] La muerte no tiene ningún límite. Matar, sí los tiene. No al cometerse un crimen, pero sí al devolverse. Sin embargo, para mí fue poco. Con aquella matanza votiva aplaqué a mis domésticos dioses; mas yo, solamente con palabras desfogué iras, y no con tu sangre vertida. atreo tiestes Tu maldad encerrada dentro de mí, lucha por salir. ¿Qué palabras habrán de bastarme 230 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) para responder a tu delito? ¡Dame, hermano, tu espada homicida, pues entintar quiero con mi sangre, el filo que segó de mis hijos sus vidas, tan llenas de pujanza! [Con sadismo.] De sus heridas vertí su sangre cálida en una copa dorada, tras degollarles en el altar cual dos ofrendas propiciatorias. atreo tiestes [Desesperado.] ¿Quién vio semejante fechoría? ¿Qué insomne morador de asperezas contempló tan horroroso crimen? [Recreándose.] Amputé los miembros de sus cuerpos exánimes, que troceé en pequeños pedazos, para luego abrasarlos. atreo tiestes [Terrible.] ¡Ah, noche negra y densa, atiéndeme las querellas!... Nada pediré para mí, pues ya nada podría haber que anulase mi dolor. ¡Tú, soberano del firmamento, que dominas la celeste corte, envuelve al mundo en hórridas nubes; desencadena guerra de vientos y truena con toda reciedumbre! ¡No con esa mano conque lanzas dardos sobre techos y moradas, sino con aquella otra que hundió guaridas que habitaban gigantes! [Impasible.] Luego eché sus trozos en caldero de bronce para que, a fuego lento, hirviesen y, con mi propia mano, atreo 231 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) Luci Anneu Séneca (Còrdova, 4 a. C.- Roma, 65) (Arxiu Assaig de Teatre.) n 232 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) fui avivando las llamas que iban a apagarse. tiestes [Desesperado.] ¡Mares, de riberas sinuosas, oíd la voz de un padre desesperado!... ¡Y vosotros, dioses, sea cual fuere el lugar donde estéis, escuchad las voces infernales del impío Atreo!... ¡Permanezcan en él, sus crímenes aberrantes!... ¡Que esta oscura noche se eternice! ¡Que sus tinieblas perduren siempre y no oculten crimen tan horrendo! [Satisfecho.] Ahora alabo mis manos; ahora está próximo el mayor trofeo. Estéril quedaría mi hazaña, si no te hiriese mucho más hondo. atreo tiestes [Exaltado.] ¿Más aún?... ¿Por qué han sido mis hijos las víctimas? atreo Por ser tú su padre. tiestes ¿Me castigaste asesinándoles? atreo No fue crimen, sino ejecución. tiestes [Intenso.] De la que tú fuiste su verdugo. [Feroz, implacable.] De la que tú has sido ejecutor; ¡puesto que los devoraste, hermano! ¡Comiste su carne aderezada, saciando tu hambre de varios días, atreo 233 MONOGRÀFIC / TEXT: Tiestes (tragedia) y bebiste su sangre en la copa dorada, que luego te ofrecí! Tiestes abre, desencajada, su boca, sin emitir sonido alguno durante varios segundos; luego, lanza un alarido estremecedor y se encoge en el suelo como un guiñapo. Atreo suelta una feroz carcajada y entra en el palacio seguido de sus dos esclavos. El coro se despliega ante el público y recita con brillantez: coro Viejas leyes ancestrales dictaron al ser humano un forzoso Destino, —del que no podía evadirse nadie—, fuere doliente, trágico o dichoso. Por ello no logró Atreo, ni Tiestes, escapar a una tragedia dictada por crueles dioses inexistentes. El temor y superstición obligan al hombre a ser esclavo de un destino, que solamente él, y nadie más que él, puede, libremente, determinar. fin de la tragedia 234