ELEMENTOS DE BASE SOBRE CRISIS DEL ESTALINISMO (presentado por Ernesto Blanc a la Tercera Conferencia del Grupo Germinal -agosto de 1993-) 1.- La casta burocrática se adueñó del poder político mediante el combate contra la clase obrera y sus intereses históricos. En el curso de ese combate adquiere plena conciencia de sus intereses específicos como capa social. La usurpación del poder soviético por la burocracia no la convirtió en clase social: dicha usurpación la realizó como excrecencia parasitaria del estado obrero, como agente de la burguesía en el seno de dicho estado . La burocracia del Kremlin hundía sus raíces en las relaciones sociales nacidas de la revolución de Octubre, no obstante su naturaliza social estaba perfectamente determinada: fue la expresión en la urss de la reacción burguesa mundial, de la preservación a escala mundial de la dominación imperialista que resultó de la derrota de la revolución alemana. 2.- En la oleada revolucionaria que abrió el nuevo periodo en 1968 se expresó plenamente la naturaleza contrarrevolucionaria de la burocracia como agente del imperialismo en el seno del estado obrero y a escala internacional. Esta política contrarrevolucionaria, ejercida en el marco de la oleada revolucionaria, repercutió, a causa de la situación mundial, en el desgaste de las condiciones de existencia de la burocracia traduciéndose en la modificación de las relaciones con los aparatos, Esa ha sido la clave de la crisis del aparato estalinista, expresión y componente de la crisis de la burocracia del Kremlin, crisis que procede de la del imperialismo. 3.- La Internacional comunista, bajo la égida del estalinismo, se embarcó muy pronto en una política de colaboración de clases que la orientó hacia una práctica reformista. Cuando el estalinismo la destruyó definitivamente como organización revolucionaria se adentró totalmente en la vía de la colaboración de clases pasando definitivamente al lado del orden burgués e hizo suyos los atributos tradicionales de la política socialdemócrata en función de los intereses de la burocracia del Kremlin. Pero no se transformó en auxiliar o ‘doble’ de los partidos reformistas, se constituyó como aparato internacional dependiente de la burocracia contrarrevolucionaria del Kremlin y este aparato y sus componentes nacionales se sometieron al imperialismo a través de ella. Se situó en el mismo terreno político que los partidos reformistas: del lado del orden burgués. 4.- El ‘oportunismo soviético’ se desarrolló sobre la base de la degeneración del estado obrero en Rusia. La burocracia solucionó su propia ‘cuestión social’ a través del parasitismo sobre el estado obrero. Los partidos socialdemócratas y estalinistas tienen en común que son partidos obrero-burgueses, partidos contrarrevolucionarios. Constituyen el ‘escudo social del imperialismo’. 5.- A diferencia de la socialdemocracia que configuró su oportunismo en la época del crecimiento capitalista, el estalinismo se encaminó por la vía de la socialdemocracia en la época del declive del imperialismo. Este hecho confirió un crácter particularmente cínico y abierto a la colaboración de clases pues en la época de declive del imperialismo los periodos de ‘prosperidad’ se basan en un monstruoso crecimiento del parasitismo del desarrollo de la economía de armamentos. Ello se tradujo en que la política de colaboración de clases del estalinismo no se apoyó, ni se apoya, en una nueva era de reformas ligada a un desarrollo orgánico del capitalismo. Incluso cuando la potencia social del proletariado impuso conquistas que minaban y minan el sistema imperialista. Por tanto los lazos con la clase obrera, su diferenciación con la socialdemocracia, provienen de su relación con la Revolución de Octubre victoriosa y sus conquistas. 6.- La expropiación de los medios de producción permitió, a pesar de las disfunciones y parasitismos introducidos por la burocracia, un expansión económica y mejora de las condiciones de vida de las masas tanto en la urss como en los países en los que también fue expropiado el capital bajo la bota de los burócratas. Pero este breve lapso de progreso contenía el germen de su futura destrucción de la economía planificada y de un gigantesco retroceso en las condiciones de vida de las mas amplias masas. “...la función progresiva de la burocracia soviética coincide con el periodo de asimilación... Pero cuanto más se avance más se chocará con el problema de la calidad y la solución a éste escapa a la burocracia...”. 7.- La base social del estalinismo tenía una doble naturaleza “Por una parte vive de los subsidios del Kremlin... por otra parte los diversos mecanismo del exKomintern se nutren de las mismas fuentes que la socialdemocracia, es decir: de la sobreganancias del imperialismo” (Trotsky). Su ‘razón de ser’ históricamente provenía de la Revolución de Octubre y del estado obrero salido de ella. La base social hundía sus raíces en el parasitismo de la burocracia sobre el estado obrero y en las migajas de las sobreganancias de cada propio y particular imperialismo. Esta doble naturaleza social explica las características que han conformado y resumen la crisis del estalinismo coadyuvando en las tendencias centrífugas que han abocado el estalinismo a la crisis. Pero los dos elementos de la base social de la que se nutría el aparato estalinista en cada país no eran simétricos: uno y otro no lo determinan por igual. las prebendas que recibía gracias a su colaboración de clases con su propio imperialismo procedían de sus lazos con la burocracia y con su política internacional. el contenido social burgués de la burocracia estalinista ha nutrido las fuerzas restauracionistas que alimentaron una contradicción mortal para ella misma como capa social pues tendían a su estallido y desaparición como tal. 8.- La teoría del ‘socialismo en un sólo país’ agudizó las tendencias nacionalistas en los componentes del aparato internacional y coadyuvo a su teorización pues “si es posible, en general, realizar el socialismo en un sólo país, deber admitirse esta tesis no sólo después de la conquista del poder sino también antes” (Trotsky). 9.- A la muerte de Stalin estalla una crisis de dominación en la burocracia soviética. En 1953, con la puesta en marcha del proceso de revolución política en los países del ‘este’, comienza un periodo de continuo cuestionamiento del poder de la burocracia que provocará en su seno la agudización de los desgarros que llevaran, con la ‘desestalinización’, a la maduración de la crisis irreversible del estalinismo. La conjunción de la revolución social y de la revolución política, que el nuevo periodo de la revolución proletaria pone a la orden del día a partir de 1968, exacerba las tendencias disgregadoras al enfrentar al aparato internacional con dos frentes de la lucha contra las masas, que retroalimentan el avance de dichas luchas y, por tanto, la crisis de los componentes del aparato internacional. Los acuerdos de Helsinki, que llevaron hasta el límite la política de colaboración del Kremlin con el imperialismo en le mantenimiento del estatus quo, embellecidos por el discurso mistificador reaccionario de la ‘coexistencia pacífica’ y el fenómeno del ‘eurocomunismo’ coronan el proceso abierto en 1953. 10.- Al final de la Segunda Guerra Mundial, en los países ocupados por el Ejército Rojo, la burocracia pudo y tuvo que expropiar al capital constituyendo un ‘glacis’ frente a la ‘guerra fría’ desatada por el imperialismo. En esos países han detentado el poder burocracias parasitarias dependientes de la del Kremlin, sin posibilidad de expresión propia, sin ningún derecho para el proletariado y las masas de esos países. Las burocracias de esos países fueron simples prolongaciones de la del Kremlin. 11.- En otros países en los que el poder burgués, la sociedad burguesa, se descompuso y en los que se desarrollaron potentes movimientos y guerras revolucionarias dirigidas y controladas por pc’s pertenecientes (o que habían pertenecido) al aparato internacional del Kremlin, el capital también fue expropiado; las circunstancias políticas en esos países y a escala internacional han permitido que esos estados hayan sido controlados por burocracias parasitarias hermanas de la del Kremlin, los estados de esos países no han pasado de ser estados burocráticos desde su origen a su fin. 12.- La ‘perestroika’ de Gorbachov fue el último intento de la burocracia para salir del atolladero al que había conducido a la economía soviética. Agotadas todas las fases de relanzamiento económico mediante la ampliación de la producción de forma extensiva, distorsionados todos los mecanismo de la producción agraria e industrial, enfrentada a una crisis económica mundial del imperialismo diferente a la de los años treinta (que permitió, en aquel caso, a la burocracia un respiro y un crecimiento extensivo), incapacitada para romper la costra parasitaria e ineficaz de los ‘servicios’, la burocracia ha hecho lo único que podía hacer como tal: avanzar en el camino de la restauración capitalista mediante la introducción de elementos de mercado haciendo recaer sobre las masas la miseria que su gestión parasitaria ha producido y agudizando el despotismo político bajo la mascara de las libertades ‘inherentes’ a la economía de mercado. La desregulación económica, la destrucción de los servicios públicos, el paro... todos los elementos más reaccionarios del capitalismo ‘salvaje’ se han acompañado por un refuerzo de la negación a las masas a decidir libremente sus destinos mediante la continuidad de ‘parlamentos’ ‘elegidos’ bajo mecanismos puramente estalinistas combinado con el refuerzo de poderes presidenciales eregidos por encima de cualquier control democrático por tibio que fuera. 13.- Ello llevó al estallido de la crisis definitiva de la burocracia, descomponiéndola en múltiples fragmentos que se reagrupan alrededor de banderas a cual de todas más reaccionaria. “Entre la burocracia pueden darse todos los matices del espectro político: desde el bolchevismo auténtico (I. Reiss) hasta el más completo fascismo (F. Butenko) [...] esos candidatos a convertirse en nueva burguesía compradora consideran, con razón, que la nueva capa dirigente sólo puede consolidar sus privilegios si rechaza las nacionalizaciones, las colectivización y el monopolio del comercio exterior en nombre de una asimilación a la ‘civilización occidental’, es decir, al capitalismo.” (Trotsky) 14.- El ‘eurocomunismo’ fue la forma que tomaron, en diversos países, las relaciones del aparato internacional estalinista encaminadas al sostén del status quo internacional y del orden burgués en cada uno de esos diversos países. Pero también fue la expresión que tomó a nivel internacional, y particularmente en esos países, el estadio preirreversible de la crisis del estalinismo. Su esencial contenido contrarrevolucionario era expresado por la declaración que reafirmaba la importancia de la Conferencia de Helsinki de cara a “un nuevo orden económico internacional”, resumiendo la política de sostén del orden imperialista mundial, política vicaria de la del Kremlin. Los hechos han demostrado que el eurocomunismo no expresó una tendencia a la socialdemocratización del aparato estalinista sino el proceso de dislocación y crisis irreversible del estalinismo como aparato internacional. 15.- Los continuos elementos tránsfugas no expresan un proceso gradual de socialdemocratización del aparato estalinista sino la necesidad, ante la destrucción del estalinismo, de esos elementos burócratas de solucionar su propia ‘cuestión social’. La política de acercamientos, unidad, etc... hacia la socialdemocracia, que defienden esos elementos o corrientes es producto de su progresivo acercamiento y dependencia de la burguesía. Expresaron la reacción de capas de la burocracia ante el fracaso electoral con el objetivo de salvar su propia ‘cuestión social’. No expresaron ni expresan una tendencia objetiva del estalinismo hacia la socialdemocratización pues el estalinismo es un fenómeno producto de la degeneración del estado obrero que contiene elementos comunes con la socialdemocracia. La tendencia objetiva que expresan es la que resulta de la destrucción del estado obrero degenerado: ahora sus restos sociales (burócratas) y políticos (organizaciones) quedan a disposición de la política de colaboración de clases de la socialdemocracia e, incluso y fácilmente, de la política utopicoreaccionaria de las formaciones pequeñoburguesas. 16.- Las posibilidades que se abren son (a partir del estallido del estalinismo): corrientes y grupos que se integran directamente en la socialdemocracia, reagrupamientos alrededor de ejes directamente en la socialdemocracia, reagrupamientos alrededor de ejes directamente pequeño burgueses tipo ‘nueva izquierda’, enquistamiento de corrientes en el aparato sindical. También puede preveerse el desgajamiento de grupos, corrientes, elementos, de características centristas que chocaran con la debilidad del polo revolucionario para un correcta reorientación revolucionaria; esta posibilidad tiene en contra el encallecimiento político al que ha llevado el estalinismo a sus militantes así como también la sangría humana que ha producido en las filas de los pc’s la política traidora de sus dirigentes.