Eü PAPA BENEDICTO XV

Homenaje de !a Prensa Gatólica
A
SU
SANTIDAD
E ü P A P A BENEDICTO XV
aí?a Jíectura
dominical
en prueba de incondicional adhesión al^Vicario de Jesucristo, maestro infalible de la verdad, augusto defensor de loS
derechos de la Iglesia y apósíol incansable de la paz entre todos los pueblos del mundo.
Año XXIT.—Número 119S.
Madrid, 10 de Julio de 1915.
Viva el .Papa Benedicto XV
iPADREI...
Ardían ya en Europa las terribles'hogueras de odio prendidas en casi lOdas
las naciones del continente; tronaban los
cañones, la ciencia se habla puesto al
servicio del demonio de la destrucción;
el arte había pedido arreos militares, y
sólo cantaba o glorificaba ya hazañas bélicas, esplendorosas, cegadoras, pero sembradoras de la muerte; sólo la Iglesia de
Dios, bellísima aurora y anticipo de una
Humanidad futura enlazada por el amor,
podía ofrecer, y ofreció, al mundo estremecido el espectáculo de paz que representa el concertarse, con menosprecio de
toda idea de bando o de nacionalidad,
los Príncipes de esa Iglesia para nombrar
su Jefe y su Padre, de modo que no faltase la divina dirección encomendada al
Sumo Pontífice por Jesucristo nuestro
Señor, que le hizo su Vicario en la tierra.
En.plena pelea, cuyo polvo y cuyo
humo cegaba los ojos y los corazones,
los encargados de mantener rutilante la
luz espiritual salvadora, velaban y laboraban en provecho de todos.
Muchas Veces en la Historia adquirió
relieve singularísimo la reunión del Conclave, que tuvo siempre la gravedad de
ser la reañrmación de la palabra de Dios;
pero el Conclave que eligió a Benedicto XV en las pavorosas^ circunstancias
conocidas, parece además la cristalización del deseo universal de la paz, cla-
iPADREi...
morosamente salido de los pechos angustiados por la miseria, por la viudez,
por la orfan lad, por el desamparo, por
cuantas calamidades son obligado y espantable cortejo de la guerra. Sí: Benedicto XV es el Papa, y es el Papa de la
paz, por de pronto en el ferviente anhelo
que por ella muestra en palabras de suavidad y serenidad inconmovibles y en
actos de caridad inefable; mañana, Dios
lo querrá, el actor principal, el promovedor augusto y elevadisimo del abrazo
universal con que por fin acabe esta contienda horrorosa.
la fuerza inconcebible e incontrastable
de la Religión conduciendo a los hombres; es el esplendor del Verbo del catolicismo iluminando los destinos actuales
y futuros de los hombres, y es la figura
ingente del que habla, con pleno derecho, en nombre de Dios, y es, en lo que
toca a fe y costumbres, la palabra misma
infalible, indefectible de Jesucristo.
Ella enriquecerá a los desposeídos,
contendrá el orgullo o la ambición del
vencedor, confortará al vencido, salvará,
en fin, al mundo.
Y Dios ha querido depararle en el
Pontífice de la Paz, elegido en medio de
la guerra, una inteligencia soberana, un
corazón ardiente y una prudencia acrisolada en los negocios diplomáticos, en
que no hay actitud indiferente ni palabra sin importancia.
Así como los hijos se agrupan junto al
Padre común en las horas negras de su
desgracia, buscando el amparo que les falta, y pensando en que la experimentada
madurez de su juicio les consolidará y
les salvará, así vuélvense ios ojos al Pontífice Romano, y acaso más que en el esNuestro homenaje filial, devotísimo y
fuerzo marcial de los reyes temporales se acendrado a Benedicto XV es, a un
fia en el prestigio de este Soberano cuyo tiempo, gozo y esperanza, alegría y graseñorío pasa toda frontera, burla toda titud por lo que en él y de él tenemos;
asechanza, evita toda trinchera o embos- anhelo confiado por lo que en él y de él,
cada y se esparce en las direcciones to- por la divina permisión, que de rodillas
das del horizonte como los rayos del impetramos, ha de lograr la gran familia
faro en la noche obscura desde lo alto y humana, hoy rota, dispersa y envuelta
hacia todas partes, vistiendo y embelle- en nubes de rencor mortífero, de las
ciendo con su luz los mismos obstáculos cuales salen, mezclados aún con los grique se le oponen.
tos del odio, los llamamientos angustioEs el espíritu, es el triunfo del espíritu sos de los hijos sin ventura, que gritan:
VÍCTOR.
sobre la vil carroña que lo ^aprisiona; es iPadrel... ¡Padrel...
LA LECTURA DOMINICAL
CRÓNICA
SEMANAL
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435
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SegTÍn anunciábamos en nuestra última crónica, y se dio cuenta en la sección
de efemérides del mismo número, el
miércoles 30 de Junio fué la reunión en
el Círculo conservador para dar posesión de su cargo de presidente al señor Dato, eri realidad para proclamarle
jefe del partido. Aunque muy reducido
el local, asistió numerosa concurrencia,
toda la plana mayor oficial de los ministeriales residentes en Madrid y alguna,
poca, de la de provincias, pues se habla
suplicado a muchos que ya tenían empuñada la maleta para venir a la corte, que
desistieran del viaje.
Apareció en el saloncito D. Eduardo
Dato entre los dos presidentes de las Cámaras, Sánchez de Toca y González Besada, y saludáronle los concurrentes con
vivas al jefe y estrepitosos aplausos. Habló primero González Besada, diciendo
que al depositar la Corona su confianza
en el Sr. Ddto había dado un jefe al partido conservador, y que esta soberana
designación estaba confirmada por el
acierto y fortuna en el ejercicio del Poder. «El partido conservador tiene un
jefe, y sigue abierto a cuantos quieran
colaborar en su obra; avancemos sin volver la vista atrás. >
El 3r. Sánchez de Toca habló después,
agradeciendo su elevación a la presidencia del Senado, elogiando la discreción,
perspicacia política y penetrante sentido
de la realidad que brillan en el nuevo
jefe del partido y apuntando que en las
últimas consultas, sobre tres puntos habían estado unánimes los prohombres
consultados: i ° En que el >r. Dato debía seguir presidiendo el g ibinete. 2.° En
que todos los partidos gubernamentales
debían apretar en estos momentos de
crisis universal su disciplina y cohesión;
y 3.° En el mantenimiento de la neutralidad. D. Eduardo Dato, como jefe del
partido solemnemente proclamado en
esta reunión y continuando al frente del
consejo de Su Majestad, satisface cumplidamente esta triple aspiración.
Levantóse, por último, el Sr. Dato,
siendo saludado de nuevo con vítores y
palmadas. Dijo: «Soy el menos indicado
para ocupar el primer puesto; pero lo habéis querido, y yo digo: sea». Elogió al
general Azcárraga y a varios conservadores conspicuos recientemente fallecidos. Recordó que cuando D. Antonio
Cánovas fué jefe, los moderados históricos no lo aceptaron; que de Silvela disintieron Romero Robledo y el duque de
Tetuan, y... «cuando proclamamos por
nuestro jefe a D. Antonio Maura, que
será S'empre recordado por nosotros con
respeto y cariño, separánronse del partido los Sres. González Besada, cunde de
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LAS ARMAS PONTIFICIAS
de B e n e d i c t o XV
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Bugallal, Romero Robledo y otros. A nadie se ocurrió entonces que necesitara
el partido de concentraciones para gobernar; pero yo deseo que los hombres
políticos que coinciden con nosotros
vengan aquí. Todos serán recibidos bien,
aun aquellos que nos agraviaron.»
Habló luego de la neutralidad y de su
reflejo en la política interior. Aunque sin
nombrarle, se refir ó a lo dicho por el señor Vázquez de Mella en el teatro de la
Zarzuela, sobre que el Estado debe ser
neutral, sin perjuicio de que la nación
manifieste su preferencia por el beligerante que le,parezca mejor, rechazando
esta especie, «El Estado, dijo, en relación con otro Estado, representa a la nación entera, y no es posible nunca que
haga una cosa el Estado y la nación otra.
Kl Estado español, representado por su
gobierno, es neutral entre los pueblos
beligerantes, y si los políticos, los periódicos y las turbas se dedican a insultar a
unos y otros, ijqué neutralidad será ésta,
ni qué formalidad la del E^tado y la del
g(jbierno que lo representa? Las únicas
dificultades con que tropezamos para
mantener la neutralidad se derivan de
esa causa: de la atmósfera densa y pesada que producen entre nosotros y los gobiernos extranjeros esos discursos vehementes, esos artículos exaltados, esas
reuniones calenturientas en pro o en coa
tra de unos o de otros Estados en guerra. Ha dicho muy bien Echegaray que
como mejor se sirve ahora a la patria es
con el silencio.»
grave para la patria. Hizo votos por el
pronto restablecimiento de la paz europea, y manifestó su confianza en que,
con la ayuda de Dios, saldremos incólumes de los peligros actuales, pero indicando ser muy necesario estar unidos y
alerta para defendernos si fuese menester.
Tal ha sido el acto. El Comité central
de Acción mauíista, compuesto por los
señores Ossorio y Gallardo, Sartos Ecay,
Goicoechea, Redondas, García Cernuda
y Ballesteros, ha publicado en los periódicos una declaración en que h ' c e constar que la proclamación de la jefatura del
Sr. Dato por las mayorías parlamentarias
es consecuencia prevista de la deserción
colectiva realizada en Octubre de 1913,
con tres particularidades: 1.* Haber escogido para un acto de política menuda
el momento en que el mismo gobierno
recomienda dar de lado a las cuestiones
partidistas para atender exclusivamente
a la internacional. 2.° Ratificar el partido
conservador su confianza a uno de sus
individuos el día siguiente en que se la
había negado un elemento tan típicamente constrvador como es el capital;
y 3." Persistir en la idea de que basta la
confianza de la Corona para conferir jefaturas.
La declaración concluye así: «El Comité central de Acción maurista no necesita discutir las cualidades de estadista
del Sr. Dato; pero cree de su deber en
el día de hoy reiterar la afirmación de
que, con separatión del gobierno y de
los representantes en Cortes que le siguen, existe en España una democracia
conservadora que ratifica su confianza
en las doctrinas, los procedimientos y el
ejemplo del Sr. Maura, para el cual el
gobierno podrá no guardar—según la
frase del Sr. Dato—otra cosa que un recuerdo respetuoso, pero a quien otros
muchos españoles están dispuestos a no
abandonar».
En cuanto a comentarios periodísticos,
es muy d e notar el contraste entre los d e
El Tmpardal y El Liberal. Para el primero, el acto del 30 significa que la tendencia liberal del Sr. Dato ha triunfado definitivamente dentro del partido conservador sobre la reaccionaria del Sr. Maura;
para el segundo, por lo contrario, don
Eduardo Dato es un reaccionario de tomo
y lomo que no respeta las libertades
constitucionales, y si se puede transigir
con él, es gracias a la garantía que le
presta D. Joaquín Sánchez de Toca, el
Declaró una vez más su resolución de cual, aunque ultramontano de origen, tieno consentir estas peligrosas manifesta- ne un pie en la democracia. lAteme usted
ciones sin llegar a la suspensión de ga- , todas estas moscas por el rabol
rantías, que no es necesaria y sí antiEn los círculos y corros políticos todo
pática al partido conservador, que lo es el mundo se reiría, como de un zafio lude las libertades públicas t-n cuanto no gareño, de quien tomase por lo serio esto
constituya su ejercicio un riisgo,cierto y de las sjgüi&cacioacs Eberales o reacció-
r436
narias. La verdad es que el acto del 30
tiene su origen en el enojo produddo a
muchos personajes conservadores por las
censuras, más o menos genéricas o veladas, de orden moral, o mejor dicho, inmoral, procedentes del campo maurista.
A un prohombre conservador oímos decir hace ya bastantes días: «La verdad es
que no tenemos vergüenza si después de
lo que se ha dicho y murmurado de los
idóneos guardamos todavía consideraciones a los que nos atacan en ese terreno;
debemos desde luego cortar el cable, ya
tan débil, que nos une con esa gente;
para esto nada mejor que proclamar jefe
a Dato».
Desde que oímos esto hemos ido observando cómo hacía la idea su camino
y 'progresaba constantemente, no sin resistencia del Sr. Dato, que repetía sin
cesar que no ambicionaba él la jefatura,
que no se sentía con condiciones ni con
vocación para ello, que sólo deseaba la
conclusión de esta difícil etapa de gobierno para retirarse a descansar, etcétera, etc. Se han librado con el presidente verdaderas batallas con este motivo.
A otro personaje ministerial oímos hace
poco: «Dato es muy cuco, y sabe perfectamente que con el aparato de la proclamación no va ganando nada y puede perder algo. ¿No fué proclamado jefe don
Francisco Silvela? ¿y pudo evitar con eso
que ViUaverde no le dejara vivir? ¿No lo
fué D. Antonio Maura, y todos vemos
lo que ha sucedido? Dato posee esa misteriosa cualidad de la fortuna que Carlos V echaba de menos en su vejez. Si
Maura no sale con la carta famosa y
luego con su actitud en Octubre de 1913,
Dato no hubiera sido presidente del Consejo. Y ya en la cumbre, ha venido cosa
tan imprevista como la guerra europea
para hacer de él un presidente popular
e insustituible. Si por bien de todos,
acabamos de salir incólumes del tremendo conflicto actual, su prestigio quedará tan firme y asegurado, que no tiene
para qué molestarse Bergamín por sentarlo sobre un pavés a que subirá él sin
necesidad de que lo aupe nadie».
El problema interior del momento es
el empeño de las izquierdas en que se
permitan los mítines para despotricar a
gusto contra alemanes, austríacos y turcos. Han ido los conspicuos del radicalismo a ver al presidente y comunicarle
los acuerdos tomados sobre que deben
autorizarse tales reuniones y discursos;
el Sr. Dato trató de convencerles de lo
contrario, repitiéndoles que él, por su
cargo, está perfectamente enterado de
que los insultos y acres censuras contra
las naciones beligerantes son muy peligrosos porque no quedan en casa, sino
que resuenan fuera y motivan reclamadones y exigendas que la más vxilgar J
LA LECTURA DOMINICAL
prudencia aconseja evitar. ¡Como si no!
Que tal artículo de la Constitución reconoce el derecho de pronunciar discursos,
cada uno como quiera, y que contra tal
derecho no hay peligros ni prudencia
que valga.
Rodrigo Soriano y Pablo Iglesias han
declarado que si el gobierno persiste en
sus propósitos liberticidas, ellos no han
de cejar, y que harán los mítines sin permiso gubernativo. A lo que ha replicado
el Sr. Dato que en este caso se hará uso
de la fuerza pública. ¿Acompañarán Romanones y García Prieto a republicanos
y socialistas por ese camino de la violencia revolucionaria? Se nos resiste creerlo; pero en 1909 lo hicieron para derribar al Sr. Maura.
De África siguen contando los periódicos de oposición izquierdista especies
e historias que nos parecen cuentos.
Ahora dicen que si el general Silvestre
ha comprado unos terrenos en Larache,
y que eso, no sabemos por qué, no está
bien. Insisten en que fué verdadero el
incidente de la comitiva del Raisuli con
fuerzas del general Silvestre, y que el
gobierno tuvo circunstanciada noticia de
todo por el general Marina, habiendo
éste presentado la dimisión de su cargo
por haber dicho el Sr. Dato que nada
sabía; añaden que el gobierno tiene singular empeño en que se conceda al general Marina la gran cruz de San Fernando, y que ha encontrado enérgica
resistencia en algunos consejeros del Supremo de Guerra y Marina.
Repetimos que nos parecen todos éstos cuentos tártaros, y que si tienen algún fundamento real, cosa que absolutamente ignoramos, debe de ser reflejado
por esos periódicos, atentos sólo a llamar la atención con noticias sensacionales, de un modo inexacto. ¡Y todavía piden más libertad, cuando la tienen tan
amplia para llevar y traer inconsideradamente a los caudillos del ejército en tierra extraña, y para mentir, difamar y aun
calumniar de la manera más soez y grosera! iCualquier día se toleraría esto en
Alemania ni en Francia, en Austria ni
en Italia!
Esta semana empieza de nuevo en el
Banco la suscripción de obligaciones del
Tesoro. Veremos si ahora se cubre. El
Banco ha entregado ya los 150 millones
por obligaciones con que se queda para
revender a particulares. Eíi los cinco primeros meses de este año las contribuciones han rendido cerca de 55 millones
menos que en igual período de 1914; la
baja principal es en Aduanas (36 millones). También lian disminuido: las cuotas militares (5 millones y tercio). Lotería
(3 millones). Tabacos (3 millones). Timbre (2 millones). Consumos (un millón).
Alcoholes (millón y medio). Únicamente
los derechos reales acusan un aumento
de millón y medio.
En cambio hemos gastado cerca de
34 millones más que en 1914, correspondiendo 10 a Guerra, 5 a Gobernación,
2 a Instrucción pública, 8 y medio a Fomento, 3 y medio al ramo de Hacienda
y 15 a Marruecos. Tan enorme déficit se
ha llenado con obligaciones del Tesoro.
Bien que tan inmensa trampa es una insignificante bagatela si se la compara con
la de las naciones beligerantes. La imaginación se pierde si se fija en ese colosal consumo de millones. Los Estados
europeos pueden decir como aquel comerciante amenazado de quiebra: ya no
me queda más que una esperanza de
no quebrar, y es que quiebren todos los
comerciantes de esta plaza. Efectivamente, como la quiebra es una situación relativa (de relación entre acreedores y deudores), si todo el mundo quiebra a la vez,
nadie quiebra.
Los que ahora no van en camino de
quebrar, sino todo lo contrario, son los
Estados Unidos de América. Hasta hoy
son los únicos que ganan con la guerra
europea. Como tenían perfectamente organizada su industria, y servida por una
banca y un comercio no menos perfectos, están haciendo su agosto. Inundan
nuestro continente de productos, artículos y géneros de toda clase, dándolos en
las mejores condiciones; hasta se contentan en Francia con que se les pague en
bonos del Tesoro; esto es, se conforman
con que no se les pague realmente hasta
que termine la guerra y pueda pagar el
gobierno francés.
Efecto de la intervención de esta po
tencia, tan colosal en la esfera económica como pueda serlo Alemania en la militar, es el para nosotros tristísimo caso
de que ya no se hagan pedidos de géneros a nuestras fábricas, con lo que la
crisis iudustrial reaparece en Cataluña
harto más grave y pavorosa que en Agosto del año pasado..
Dícese también que algunos especuladores sin conciencia han cometido indignas estafas mandando a Francia una
basura de géneros cobrados en buena
moneda de oro; puede haber coadyuvado
a la crisis esta indecencia, pero la verdadera causa es que los yankis, con sus
superiores recursos industriales y financieros, han acaparado momentáneamente
el mercado francés. Ahora que muchos
franceses, encontrando ventajosísima la
compra a los yankis, se dan tono de patriotismo con nosotros, diciendo que no
nos piden géneros porque abundan los
germanófilos en España, y sobre todo,'
por el panegírico del Kaiser que hizo
Vázquez de Mella. iQue les tuviera cuenta comprar en España, y dirían que el
discurso les había sabido a gloria!
43?
fLA LECTURA!, DOMINICAL
Hoy rendimos con toda la Prensa católica nuestro homenaje a Benedicto X V ,
ai Vicario de Jesucristo en la tierra, al
patrón de la barquilla de San Pedro, que
por efecto de la guerra europea corre
deshecha borrasca. Ahora se ve con evidencia la necesidad del poder temporal
para que nadie pueda dudar de la neutralidad de la Santa Sede; ahora el odio
desenfrenado de unos y el cariño condicional de los otros, el deseo de todos de
que la Santa Sede les sirva y ayude en
sus intereses temporales en vez de servirla a ella. Rindamos nuestro fervoroso
tributo de cariño y adhesión al Vicario
de Jesucristo, cuya devoción ha constituido siempre y seguirá siendo en el orden espiritual uno de los más fuertes,
poderosos y tiernos amores de todo corazón genuinamente cristiano y español.
r i a 13. Martes.—Stos. Anacleto, p,, y
Serapión, mrs.—Jubileo en la par, de San
Sebastián.—Ador, noo,: turno fcancti Spiritus.
Día 14. Miércoles.— Stos. Buenaventura, ob., oard, y doo., y Camilo de Lelis, confesóles.—Jubileo en l a p a r . d e S. Ginóa.—
Ador, noo.; turno Cor Mariae.
Día 15. Jueves.—Stos, Enrique, I, emperador, y Jaime, cfs.—Jubileo eñ la pa
rroquia de S. ttinéa.— Ador, n o o : turno
t a n Ildefonso, Por la intención de don
M, S. V.
Dia 16, Viernes,-Piesta de la B. Virgen María del Carmen, El Triunfo de la
Sea. Ciuz. S. Atenógenes, mr.—Jubileo en
las religiosas de N tra. Sra. de las Maravillas.—Ador, noo.: turno La Inmaculada
y Santiago, Patronos de España.
Lía 17. Sábado.—Stos. León IV, p , y
Alejo, cfs.—Jubileo en las religiosas de
Ntra. Sra. de las Maravillas,—Ador, nocturna: turno S. Agustín,
sus frutos, pues, los podréis conocer. No
todo equel que me dice: ¡Oh Señor, Señor!
entrará por eso en el reino de los cielos;
sino el que hace la voluntad de mi Padre
celestial, ese es el que entrará en el reino
de los cielos.» (San Mateo, cap. vil.)
* *
CONSIDERACIÓN
Tales falsos profetas no sólo levantan
edificios a cultos reprobados, sino que en
nuestros días alzan su voz en los Parlamentos," se sientan en elevados sitiales a
inandan la prensa con libros perversos y
periódicos fatales. Procuremos no sólo
despreciarlos, sino exterminar sus obra»
por cuantos medios podamos; así, en esa
parte, no seremos árboles dignos de ser
cortados para el infierno.
MOVIMIENTO CATÓLICO
MÁXIMO.
SANTO EVANGELIO
SECCIÓN
PIADOjSAJ
INDICADOR RHLIGHOSO]
Día 11, Domingo VII después de Penteooatéa.—Ntra. bra, del Milagro. 8. Pío I,
papa.—Jubileo en la par, do Santiago.—
Ador, noo.: turno S, Juan Bautista.
^ Día 12. Lunes.^—btos. Juan Gualberto, ab,, y Jaeón, cís.—Jubileo en la par. de
8. Sebastián.—Ador, noo,: turno S. Franoiioo deBorja.y ti, Juan^BeTcbmans. Por
ei^alma de]D7joeé;^de^0jó¡y[üóm'ez.
Dominica Vil después de Pentecostés,—
cBn aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: Guardaos de los falsos profetas,
que vienen a vosotros disfrazados con
pieles de ovejas, mas por dentro son lobos
voraces: por BUS frutos lo» conoceréis.
¿Acaso 66 cogen uvas de los espinos, o h i gos de los abrojos? Así es que todo árbol
bueno produce buenos frutos, y todo árbol
malo da frutos malos. Un árbol bueno no
puede'.dar frutos malos, ni un árbol malo
darlos buenos. Todo árbol que no da buen
fruto eerá cortado' y'echado al fuego. Por
L a deTOción
= al Papa. =
Hermoso ejemplo de
a m o r a l P a p a ha
dado el pueblo español con su entusiasta adhesión a l homenaje t r i b u t a d o a Su S a n t i d a d Benedicto x y .
Los volúmenes d e pliegos, q u e contienen millares y millares de firmas de
todas las clases sociales, desdecías m á s
elevadas a las m á s humildes, y q u e
s e r á n ofrecidos a |.Su S a n t i d a d como
t r i b u t o d e adhesión en estos momentos difíciles y tristes, constituyen u n
monumento elocuentísimo d e la religiosidad espafiola, del sólido catoli-
ÍS-'«'^W^a!SSÍíS35^rrs'^a|^^^''Ví»?^t.«>7^^^
,! iíji|jj iii^p- i i || pifpifii fn §¡ y«ií?si??
438
cismo, arraigado en el corazón d e
nuestro pueblo t a n h-indamente que
h a sab do resistir los embates de la
impiedad, y subsiste y responde en
los momentos suorf mr^s.
La prensa catóílca t a m b i é n h a ocup a d o el puesto de honor que le cf rrespoudía en el homensja, y en j a n t a cel e b r a d a por sui direccortís en ei Centro
de Det^n-a Social acordóse qua los
diarius p u b l i c a r a n u n n ú ñero extraordinario consagcado al P a p a el próximo día 16 del c o r r i e t t e , feotividad de
Nuestra Señora del Carmen, y las r e vistas en la fecha m á s p r ó x i m a al 16.
G r a n consuelo h a de d a r al corazóa
del Santo P a d r e t a n hermoso homonaje, paes por él v e r á la solidez de nuestro catolicismo, y a que la devoción al
P a p a es p r e n d a s e g u r a d e l a ñ r m s z a
de la fe.
T a m b i é n a nosotros mismos h a de
servirnos de aliento y de enseña''.zi.
este grandioso plebiscito, que viane a
p r o b - r n o s n u e s t r a v e r d a d e r * faerza.
¡Ddoios par todo g r a c i a s a Dios,
p o r q u e don suyo es, y m u y valioso,
el h a b e r conservado en España, a pesar d e las continuas corrientes d e imp i e d a d e iDdíferetitismo, esta devoción al P a p a , flir preciosa del f «cundo
e indestructible árbol del catolicismo
español!
El Pontifica-^^ elocuencia d e los
__ __ ¿Q __ _
hechos viene en estos m-imentos — en
que la devoción de los catolices españoles se dirige al Pontíüce ofreciéndole u n asilo fc^garo—a r u b m t e c e r u n a
ttísis sustentada y defendida por los
ver laderos amigos uel P a p a , y que
t a m b i é n ha sido c o m b a t i d a , o por lo
menos pu«-std en e n t r e a i c h o por aljíOuijs qu-}, bín dejar de llamarse cató iooB, quieren transigir con el enemigo.
Nos referimos a la necesidad del Pod a r tem^ioral. E J l a r e a l i d a d la que e n
estos tt:om'?ntos viene a p r e s t a r los
más sólidos a r g u m e n t o s a nuestra i i t a .
E J la r e a l i d a d la que nos dice que la
l e y d e g a r a n t í a s (que n u n c a fué acept a d a por el P a p a ) , «sólo h a podido cons e r v a r d u r a n t e medio s g l o u n a a p a
riencia de eficacia porque d u r a n t e este
tiempo no se h a ofrecido ocasión de
someter a p r u e b a su v a l e r real», y que
en la p r i m e r a ocasión que se presenta,
la famosa ley h a p r o b a d o su ineficacia. El P a d r e espiritual de t e d a s las
gentes tiene q u e g u a r d a r p a r a todos
los pueblos el mismo a m o r , p a r a nadie odios ni rencores; p a r a todos igual
sentimiento p a t e r c a ) ; por modo i g u a l
h a de sentir ios dolores y las a m a r g u r a s d e todos sus hijos. Mas h e a q u í
que en los momentos presentes, c u a n do precisamente son más necesarios ia
luz, les const-j )S y los consuelos dsl
r e p r e s e n t a n t e de Cristo, u n a m u r a l l a
infrmiqutjab e s« Interpone e n t r e el
corüZjn del P a d r e y algunos a e sus
hijos.
T i e n e qu'» presenciar el P a p a , con
h a r t a a m a r g u r a de su a i m » , q lO u n a
. p a r t e de sus h j j s q u e d e n incomunicados con él.
Asi, no p u d l e n d o t e n e r ralaeiones
dírestas sino únicaoiente con una de
las partes beligerantes, no podrá oír
las peti<^ones de todos. No llegan hasta él la fiel,expresión de todos los con*
fUctos y de todas las ueoeeidadea,
LA LECTURA DOMINICAL
E n estas circunstancias, ¿cómo pod r á intervenir p a r a a p l a c a r las iras,
d a r solució i a los p r o b l . m a s , a r r ^ g ' a r
l9s div"irgencins. i l ' g r a confvusi nes
y pjícíflciis a c u e r d a , si le f^lta completo (.-onocimientü de caus»?
D spoj ido de la p ena soberanía e
indí-pendeoeia que requiere la n a t a raleza y es-eu8ión d i eu a a í s i m o mi
nistiirio, queda matí-^rialmente impo^ibillta.do p a r a cumplir su d i v i n a miaión
de p»z.
Taoibióa n r s d i r á la r e a l i d a d los
g r a v e s peligros (no só'o materiales,
sino morale.-) a que el P a d r e comÚQ
de los fieles ha de v e r é e x p i e s t o ,
¡Con caáat>i, Sr»aa h i de m a q u i n a r
entre las sombras el sectarismo p a r a
combatir la sasírada Persona, d 1 Vicario d e Cristo!
¡Cuántos maquiavélicos a r d i d e s h i
de emplear p a r a que la opinión inter
órete m a l loj más prudentes actos y
U i má» discretas p a l a b r a s del Bene
dicto XV!
E 1 la t x l i t a d a efervqseñncia de patriotismo, la serena, e l e v a d a y neces»r i a a c t i t u d del P a d r e Santo será pres e a t a d a c i m o sospschos*. ¡ I l i s t a sus
oraciones p r la paz serán condena
das, y los caritativos desvelo.< por el
bien de todos, como deseo d e humilla
ción p a r a determinados elemento^!...
¡Caáatos recelos y c u á n t a s calumnias se esparcirán, recelos que en la
g r a v e d a d de las circu staofias a c t ú a
les pueden a d q u i r i r g r a n s i m a s propor ñones!
Todo ello d e m o s t r a r á con luz c^arí
ííima que la d i v i n a misión del Sum-^
Pont'ti,;e exige u n a l i b a r t a d . indepena e n c t a y s e g u r i d a d que fólo put-de
conseguirse por madio del Poder temporal tal y como lo entiendHU los verdaderos amigos dei P a p a , los católicos
sinceros, los que por e icima de tod; s
los intereses h a m ' U ' ' s poneu los intereses de J e s u c í i s t o , que al fl i y »1 cabo
esos son los intereses del Poaúflcado.
L.
SECCIÓN
DE
POLÉMICA
FUEGO GRANEADO
Ya habrán visto ustedes en qué ha
quedado todo eso de la junta de las izquierdas. Ni ellas mismas saben lo que
quieren. Los demás si lo sabemos, y por
eso no les abrimos.
Contando con que son tontos todos
los españoles que no son de su parroquia
(cosa que no se justifi- a más que atendiendo a que no los hemos echado de
aquí definitivamente todavía), se empeñaron en hacer pinos intervencionistas,
y para ello, y en vista de que empezaban
a faltarles facilidades para el negocio, se
reunieron, anunciando que su reunión
seria el principio de algo muy serio, y...
¡aún nos estamos riendo!
El parto de lus montes fué un caso
ginecológico fúnebre al lado de arquiridlculiis suus que salió dé la junta y junto a los cómicos incidientes y rectificadones dé palabra y d e conducta que se
advirtieron en todos y cada uno de los
congregados.
Que vamos a pedir la suspensión de
las garantías constitucionales; que no la
vamos a pedir; que queremos intervención; que no queremos intervención; que
queremos neutralidad; que la queremos
matizada; que la queremos absoluta.,.
¡Una cosa enteramente bufa!
A la hora terrible en que estamos parece que nadie, aspirante al título de director de la vida pública española, debería preocuparse de cosa que no fuera
ayudar a su patria a salvar la crisis presiente y a prevenir los peligros de lo porvenir. Mercados, industria, habilitación
del país para una vida intensa, consciente, que nos permitiera, acaso, con el favor de Dios, sacar bienes de los mismos
males... ¡Si, sí!
En el sector liberal—como ahora se
dice—no se preocupan da nada de eso.
Los derechos de reunión, y de libertad
de palabra, y las garantías constitucionales, y la pretendida dictadura del gobierno... ¡Lo mismo exactamente que si el
mundo no estuviese ardiendo, o que si
a España no le fuese nada en el incendio!
Y ¡vamos! los que detrás de eso tienen
su chanchullito de intervención o de ayuda interesada a los aliados, aunque de un
modo infame, ya se han dado a conocer,
y bien corridos están y aun fugitivos, en
una verdadera carrera de baquetas.
Pero a los que aprovechan el tremendo instante para hacer politiquita menuda, de esa de quítate tú, que quiero
ponerme yo, echando paralelas para el
asalto al puchero del presupuesto, no sabemos qué nombre darles.
Es decir, si lo sabemos. £1 lector, también.
Por eso no hay que escribirlo.
Por de pronto, la rechifla nacional ha
acogido el imporHnte acto de las izquierdas, convocadas por D. Gumersindo de
Azcárate, según dijo, a titulo de más
viejo.
¡Ya sabía él que no podía convocar en
nombre de la opinión española, sino en
contra de ella, que no es lo mismo!
Por eso tuvo que echar mano de la
cédula, ascendida ahora a la insólita categoría de argumento político.
Una especie de patriarcado bufo.
** *
El famoso Duende de la Colegiata, en
vista de que no pudo entrar en Totana,
se ha ido a Roma, según dicen, y desde
allí envía artículos bélico-descripdvos a
un diario del trust.
En uno de ellos nos descubrió cómo
las autoridades de la Ciudad Eterna han
procesado a cinco Dominicos de un convento de aquella capital, acusándolos
nada menos que de traición a la patria.
L A "LECTURA D0MI?vICAL
Aunque afirmando que se lleva el proceso con todo sigilo, el corresponsal dedica al caso dos columnas de prosa cerrada que tiene un tufillo, un tufillo...
Del convento se vieron salir luces; un
vecino avisó a una patrulla; la patrulla
entró, poco menos que a la fiíerza, en el
convento, violó la clausura y lo recorrió
de punta a cabo, y pudo averiguar cosas
horribles, a saber: que en el convento, a
las diez de la noche, había cinco frailes
levantados; en el convento halláronse
mapas geográficos con alfileres de esos
que sirven para marcar las posiciones de
los beligerantes, es decir, alfileres de esos
que no sirven para nada; en el convento
se vio abierta una ventana, y en la celda
un fraile junto a un escritorio, estudiando. La ventana se juz^jó por la autoridad
«muy a propósito para hacer señales>;
por último, en el convento había una linterna de proyecciones, que es cosa enteramente diferente de un reflector, como
sabe todo el mundo. Bien se comprende
que si hubiese más hechos, y más importantes, que aducir, se hubiesen aducido.
Y, francamente, los expuestos de ningún modo dan la sensación de que en
ese convento (si otras, altas consideraciones no lo hicieran abiolutamente inverosímil) se estuviese conspirando contra Italia.
En cambio, conociendo, como conocemos, el origen masónico de la intervención de Italia en la guerra y el espíritu
inicial de sus movimientos bélicos actuales, no parece extraño que ese impulso
sectario llegue a tratar de influir, con
propósitos que no es preciso explicar,
en el ánimo italiano, poco ecuánime en
general, y menos en el trance por que
ahora pasa, en un sentido antirreli),'ioso,
comenzando por un movimiento antimonástico, que es la táctica de nuestros
enemigos en todas partes.
ü e s d e luego, procesar, y aun desterrar,
y aun entregar frailes a la ira inconsciente de la muchedumbre, es más fácil que
triunfar definitivamente contra los Impeperios centrales.
Benavente está resuelto a que los intelectuales, después de rebajz.r su categoría
artística, le nieguen el agua y el fuego,
como no fuese para ahogarle o hacerlo
tostón.
Hace poco publicó D. Jacinto una crónica en la que se leen estas palabras,
que van a acabar con la poca autoridad
que le quedaba a Benavente después de
El collar de estrellas, en opinión de los
chuchos que no quieren que se les ponga ese collar.
Además son palabras germanófilas. De
modo que el caso no tiene compostura:
«¡Ah, señores de la nación organizada
por leyes escritas con palabras sonoras
sin realidad! ¿Ven ustedes cómo no son
las leyes las que hacen a ios pueblos, sino
los pueblos las leyes.' Eso que ustedes llamaban fuerza bruta, militarismo, representa mucha ciencia, mucho estudio, mucho entendimiento, y sobre todo esto,
representa la fuerza moral del sacrificio
de cada uno en su día, para hallar la
suma en el día de todos. Representa no
ser el patriotismo lo que se exige a los
demás o al gobierno, como único respon
sable, sino lo que cada uno ha de pon^r
de su parte, fin escurrir el hombro a la
carga personal o monetaria; representa
no buscar la recomendac ion para eludir
el servicio penoso, no defraudar en provecho propio o del amigo lo que ha de
emplearse en el mejor servicio de todos;
represer^ta orden, disciplina social, virtud, espíritu religioso, en el más ampHo
sentido de la palabra...»
Ciencia, estudio, fuerza moral del sacrificio, orden, disciplina social, virtud,
espíritu religioso...
Vamos, sí, coVno si dijéramos los cañones espirituales del 42, sin ios cuales, en
efecto, los otros, los de bronce, no sirven de nada, como no sirve de nada una
admirable linterna áurea cuajada de gemas y vidrios costosos, pero con la luz
apagada.
¡Bueno van a poner a Benavente los
del flamante Mensaje de los intelectuales
a los aliados! ¡Bueno de veras!
Todo se lo quitan de esta hecha.
Todo... menos la razón.
Y a propósito del Mensaje de los mfele:tuaies. Como si los que no firmamos
careciésemiis de intelecto.
Muchas firmas son tales que, a conocerlos bien los hi>mena)Pad''S, acaso tuvieran la rara virtud, por contradicción, de
producir la paz. l'uede que en el campo
aliado prefirieran mirar al enemigo con
simpatía inicial, que sentirse satisfechos
de tener ta'es amig )s. A Galdós le dirían: ¡Qué amigos tienes, Benito!...
ViESMO.
MOVIMIENTO
Pax hpmlní=
bus.
=
SOCIAL
Exaltado a la suprema jerarquía de Vi.-ario de Cristo en la tierra cuando la maycjr parte de las naciones cristianas se hallan entregadas a los
horrtires d é l a guerra. Benedicto XV ha
sido el único scA;eran(j que con absoluta
imparcialidad, y atento sólo al bien de
los hombres, ha clamado incesantemente
por el advenimientu de la paz, dirigiendo
a todos su voz de padre que por igual
desea el bien de sus hijos. Jamás se vio
poder alguno de la tierra en trance tan
amargo como el que por designios de la
Providencia divma, que todo Iv dirige al
bien de los hombres, ha correspondido
439
al augusto Pontífice al ocupar su trono;
luchan en la ocasión presente, no sólo
pueblos de distinta contextura étnica,
sino ideas e intereses de la más diversa
condií ion, vinculados, al parecer, en grupos de tendencias ojjuestas. Reina en todas fiartes una confusión espantosa, que
ha venido a sumir a Europa en un caos
del que surgirá para la humanidad una
vida nueva, que los espíritus religiosos
prevén con inquietud, aunque con la seguridad de que, sean cuales fueren las
ci nsecuencias inmediatas de esta tuibación. la Verdad católica ha de quedar
triunfante, sin que contra ella puedan
prevalecer las puertas del infierno.
Lo más triste de la actual situación es
el retroceso que en la vida de los pueblos
civilizados supone el predominio de la
fuerza material, ciega y espantosa, a la
que los progresos de las ciencias modernas han venido a dar un poder destructor que no pudieron imaginar los más
feroces guerreros de los pasados sig'os.
Al calor de las ideas de candad, de paz,
de amvT al próiimo, de indulgencia para
los extraviados, se iba fraguando en
Europa un estado social que permitía
abrigar la dulce esperanza de que la fraternidad humana, dogma de la doctrina
de Cristo, podría pronto ser una viviente
realidad. El derecho internacional había
quitacio a las fronteras su hostilidad; los
tratados de Cf>mercio procuraban armonizar los opuestos intereses de las naciones concurrentes; las instituciones internacionales de todo linaje, elevando las
cuestiones a las más altas cumbres de la
idealidad, venían a borrar las deferencias
del ras de tierra y a poner a todos los
hombres en un nivel superior de igualdad, en consonancia con su identidad
específica; la facilidad de las comunicaciones permitía a los ciudadanos de las
más a¡)artadas regiones conocerse y tratarse mutuamente, quitando así su natural hosquedad, su suspicacia, su egoísmo
y su timidez a quienes no ven máá que
el limitado horizonte de su aldea.
En el orden [impíamente social, la tendencia a un estado de paz y de bienestar
era no menos notorio, debida especialmente a la intervención de la Iglesia en
el camiio de las contiendas sociales, recordando sus deberes a todos, ricos y
pi'bres, patronos v obreros, y llevando
a la esfera del Dere< ho po-itivo gran
parte del contenido substancial de la moral Cristi ina. La obra de reforma social
que en todos los países civilizados se ha
hecho en estos últimos tiempos no ha
sido, en efecto, otra cosa que la cristianización de la vida del iratjajo para evitar la fxplotación inhumana del débil
por el fuerte y el predominio del egoísmo
sobre la caridad. Gloria inmarcesible de
la Sociología católica será siempre haber
demostrado con hechos y no con palabras, gracias a las enseiianzas de los
dos últimos Pontífices, que las reivindícacitmes de los humildes pueden alcanzar su justa realización, para bien de ellos
y de la sociedad, mediante una restauración de la moral cristiana en la legislación y en las costumbres, sin necesidad
de aiielar ala violencia.
Y he aquí que de pronto, por causas
que todavía no son bien conocidas, pero
que la histoiia en su día ha de juzgar
severamente, toda esta obra de progreso
y de paz social se desmorona, y loa pue^
blos que parecían más ótti^tus/ agü^Upj
440
LÁ LECTURA DÓMÍÑÍ:AL
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INTERIOR DE SAN PEDRO EN ROMA
que más se habían distinguido en esta
bella y provechosa evolución, se lanzan
a la guerra, chocan entre si con fragor
nunca visto, se destrozan, se difaman y
convierten a lo más selecto de la humanidad en una manada de fieras. Con el
mayor cinismo se menosprecia el derecho internacional; los hombres superiores, que antes confraternizaban por encima de las fronteras para convivir en los
supremos ideales de la humanidad y la
justicia, se rechazan con bárbaro odio y
aun en hombres que se precian de espirituales encuentran las sangrientas catástrofes atenuaciones inadmisibles en todo
pecho honrado.
No es éste el anhelo de nuestro santísimo Padre Benedicto XV, el cual, desde
que ocupa la silla apostólica, viene clamando por la paz. En los varios admirables escritos que ha dirigido a los fieles
de todo el mundo ha encarecido, como
padre de todos, que depongan la furia
de las armas y vuelvan a vivir en frater>a. La pasión y d odio se han hecho dia- nal concordia para poder cumplir la vá-
tía construyó pacientemente durante si'
glos, y hasta esas leyes protectoras de los
humildes se dejan a un lado para que los
obreros, las mujeres y los niños puedan
extenuarse fabricando municiones con
que sembrar por todas partes la muerte,
la desolación y la ruina.
Y lo más triste es que esta perturbación social se quiere llevar también a la
región serena de las ideas, intentando
justificar con argumentos sofísticos la
barbarie que se ha apoderado de Euro-
•e iojuriss como groseros eaemigos; »e
^fptroye «D m» bor» todo lo (pie w dm- éet{Q09 par» ledncir a Im ta^uto», y
f
ti6n que U» eorr«spoii4fl «s e»t^ mSÍ<)ii
'LA LECTURA DOMINICAL
Y esta labor por la paz, que puede decirse que absorbe la vida del Pontífice,
está para él erizada de dificultades. Porque por un lado las confusiones de la
política internacional han hecho que algunos pueblos católicos se hayan aliado
con otros protestantes y aun mahometanos, mientras que en el bando opuesto,
países también católicos y de elección
tengan su suerte unida a la de gobiernos jacobinos y perseguidores de la Iglesia y a otros pueblos luteranos o cismáticos; que la ciega acción de la guerra
haya arruinado iglesias y monasterios e
infligido enormes daños y vejaciones a
personas eclesiásticas, algunas de eminente jerarquía; que se hayan destruido
obras e instituciones que la Iglesia ñindó
y sostuvo con predilección, y que en el
propio solar del Pontificado se haya
creado a la Santa Sede una situación
dificilísima que ha hecho pensar a muchos fieles en la posibilidad de que el
Papa tenga que abandonar su ciudad de
Roma.
En tan tristes circunstancias el Sumo
Pontífice^ no ha dejado ni un momento
de'j cumplir su misión pacificadora. ¿Le
hemos ayudado todos sus hijos en esta
santa misión? Ponga cada uno la mano
en su pecho "j conteste lo que le dicte.
t
441''
La paz no vendrá sólo cuando cese el
fuego de los cañones, sino cuando se
extinga el odio en las almas.
F.
LEÓN.
NOTAS DEL EXTRANJERO
Al tomar hoy la pluma para escribir esta cróuica de los sucesos de carácter internacional acaecidos en la
semana anterior, sea nuestro primer
pensamiento para Su Santidad Benedicto XV, en cuyo honor se publica el
presente número. Exaltado a la cumbre vaticana, desde donde habla Dios
a los pueblos para señalarles el camino de salvación, el Sumo Pontífice a
quien por inexcrutables designios de
la Providencia Divina ha correspondido gobernar la, Iglesia católica en estos calamitosos tiempos, es el único
faro de esperanza que luce en el mar
proceloso de la historia contemporánea. El solo, elevado sobre los egoísmos y miserias de la vida, atento sólo
al bien de todos los hombres, porque
de todos es Padre amantísimo como
Vicario de Cristo en la tierra, ha de
salvar a la humanidad y a l a civiliza-
ción cristiana, puesta en crisis por las
ambiciones de unos y otros. Así lo
han comprendido los gobiernos de todos los países, que en estos últimos
calamitosos meses, aleccionados por el
dolor, que es el gran maestro de la
vida, se han apresurado a rendir a
Su Santidad público testimonio de veneración, declarando así de modo elocuentísimo que la Iglesia Católica, aun
desprovista de los medios materiales
que le ha arrebatado la Revolución,
sigue siendo el más grande poder del
mundo y el arca santa donde ha de
salvarse la civilización cuando pase
el huracán que hoy conmueve a las
naciones.
El Sumo Pontífice clama incesantemente por la paz: por la paz en los
campos de batalla y en los corazones
de los hombres. Sigámosle todos sumisos, diciendo con elsublime poeta florentino:
Tu duca. tu signor e tu maestro.
* * * Viniendo ahora a dar noticia
de los sucesos de] la guerra en la forma sucinta que venimos empleando
desde que comenzó la campaña, diremos que continúa el repliegue de los
rusos en la Galitzia, donde reciente-
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m e n t e h a n cnírido reveses de inmensa
coDBideracion. Según di(•^n los ü timos
p a r t e s rt-cibiaos, ios a n s ro a e m a r e s ,
m a n d a d a s por el ge,¡eral Liusu g - n ,
h ^ n legrado forzar el pasa d.;l río
Düieste'', desalojando a sas enem go-!
de las importatittís posicioues q'ie aiií
o c u p a b a n Parí-Cf eer que en esra r e giÓQ es donde el Estado M a y r r alemán
tíenfl puesta h o y su a t e ición, por entender que lo que imperta es qu* bcant a r el poder de les rusos p a r a acudir
lufgo a detener el empuje de Icalia y
c m p r e r d r r de nuevo la ofensiva en la
línea francr-belga.
E n les D a r d a n e l r s l a lucha Bjgue
m u y e n c a r n i z a d a sin é x to decisivo
pe r u n a u otra p a r t e . Los turcos, segú.Q ios partes de sus enemigos, P.Om i e r z a n a d a r muestras de cansancio
y agotamiento, notándose también fdl
t a d'' municiunes, y que e.^ta sitnií-ióa
h a htcho que el propio Enfi-r P a c h a
t( m e el m a n d o de la v a n g u a r d i a o t r manfi p a r a l e v a n t a r el espíritu de la
t r o p a . Di< ho se está que los telegram a s de Coristantinopla dicen, como es
de rigor, todo lo contrario.
En la línea italo-austriaca la f irtun a sigue fdv^reciendü a ios i t a ü a n o s ,
que a v a n z a n , a u n q u e muy lentamente,
y se detienen allí en d o n d e empiezan
las v e r d a d e r a s defensaM da los a u s t r í a cos. Dícese en los partes de Roma, qu«í
sc'giia p a r e c í no pecan de e x a c t i t u d
Di d e i m p a r c i a l i d a d , q u e fe h a entab l a d o u n a g r a n batalla entre Caporeto y l a región de Idrlo, llevando la
mej ir parce los italianos, qu? haceo
mu-:h«s b i j a s a los atiscriacos. S i dice
t a m b i é n que los aviadores italianos
h a n arrojado b t m b a s sobre la ciudad
díj Trieste, c a n s a n d o algunos destro
zos en e d i ü d o s de valor ertístico y
motivando reclamaciones del cónsul
de los Estados Unidos, que protestó de
este b á r b a r o procedimiento de g u e r r a .
S guen los cí^mbates parciale» con
éxito vario en la línea occidental de la
g u e r r a , a u m e n t á n d o s e la, (f^nsiva alem a n a en ia r e g ón CwUiprenüida e n t r e
el Mi^sa y el Mus-la, doLde U artiileríí^ g e r m á n i c a h a hecha much^^s bajas
a los aliados.
^*^ l i a producido g r a n impresión
en todo el m u n d o la t e n t a t i v a da aseainato del multimillonario norteamericano Pierpont H u r g a n por un pro
fesor a l e m á n llamado Erich, loco de
r e m a t e , segiin p a r e c e . E-iie disparó
varios tiros sobre el famoso b a n q u e r o , q u e , como es sabido, se halla al
frente de n a grupo tinanciero e o c a r
gi-áo de colocar en I00 Estados Unidos
cien millones de dolara a e l empréstito
inglés.
Coincidiendo eon este atentatio h ^ n
ocurrido a l g u n a s explcsiones de b imb a s de d i n a m i t a en varios edilicics
p ú b l i c t s , sin q u e , i.forinnadam'-nTe,
h a y a n producido desgracias personales. A t i b ú y t n s e esi< s crímenes a la
exalvacióa del feEtimi«nio patriótico
d e u o g r u p o d e alemanes r t s i d e n ' e s
en los Estados Unidos, patriotas qut^
no C!-een en f» n e u t r a id>.d del go^i^rno de A juí'lla nación, ai q u e >rt ibuy^^n
u n a política de p a r c i a l i d a d favorable
a los aliados.
, % A los ochenta y cinco años h a
fallecido e n P a r í s el famoso político
mejlcaao D . Porfirio Díaz, t a n conoci-
LA LECTÜP.A DOMÜTICAL
do en n u e s t r a p s t r i a . D u r s n t o sesenta
añ'-K ha t, mario parte activa en todos
li"8 sacfsfR 'le Méj'co, lo mípmn en el
orfien militar quw en e' pr^iíticn, habiendo |!tg.»do a ocupsr la p r ^ i d ^ n cia de la He-'úbl'ca casi a títnio perpetuo, hasta q'ip, de'-engr<'ñsdo de )a
vida pública y cor-sid.'-ránd'se imp-^
tente o»'^» d o m i n a r la a n a r q u í a q u e se
iba extendiendo por todo e'i país, se retiró a Europa, coincidipndo ppta riecisión s u y a con el dei-b idamiei t o r e v o
lueionario que h v t ' e n e a Mi^ji^'O en
c r m p l e t a disclucíón y r u i n a . Aunque
afecto a la masoni-ría. ccmn cai-i t- d r s
los políticos Fudamtricarop, D. P ' ^ t i firio Díaz fué u n o de los rrp] i-ep g^
h u m a n t e s que ha tenido Méjico, de
f x t r a o r d i n a r i o talento y e n e ' g i a s , dis
tii-gu'énrtose i-iempre por FU amor a
España. l i a vivido )o- ú titn- s años de
su vida reconciliado con la Ig esia, a
la qnfi n u n c a pers'guió, sino que favoreció en 8u paíd, m u y d a d o a prácticas
de piedad, a c a b a n d o c o r n n a m u e r t e
edificante y cristiana. D. E P .
Adpmás, e n t r e cuantos trabajos de
reacción h a provocado eu nuestro
campo Is a p a r i c K n d" ese mitin contra ,a i i d i s o i u lilidad del roaTiraonio,
en rloi a'-ti'fi y en p^osa, quíi se Uí:i.ma
La Garra, Chte estudio de *E. div< rcio
en el teatro» debido a la agí í-ima y
e l e f a n t e p ' u m a del P a d r e ffguia descuella como a e lo U-ás f u a d a m e u t a l .
***
Barcelona v a a tener pronto su teatro d e la N a i u r a u z a , q u e , trad.uoido por los gar'iparii'iitea del francés
Theotre de la Nature, t i m e n algunos por
progfreso e x t r a o r d i n a r i o , cuando, e n
dt ñijitiva, no es sino volver a lo q u e
fué, nunt'nivm dt>l progreso v e r d a d e r o
en tantos cosas importantes.
Al aire libre fupron las p r i m e r a s r e presentaciones d e los p n m e r o s d r a mas—en el sentido amplio —con q u e
los pueblos bus-j!ron solaz. Muchos
siglos m á s tai de, las piezas te^-trales
que están en la cima del teatro u n i versal reoresentáronse en las p a z a s y
en los campos.
^t** En Lisboa h a ocurrido un suceH y, a IOS g r a v e s peligros morales
so l a m e n t a b l e que muchos relacionan del teatro a'-tual se ag^rega-a las moj"-,
con el estado de v t r d a d e r a , a n a r q u í a b' sas i! flancias do un aire viniadó,t
política en a u e se halla el pal». Yendo de un decorado que hiere la vihta p o r '
en u n t r a n v í a con varios a m i g s el la crudeza d e sus matT-es, del hacinaexoresidente del Ccnsej-i do ministros miento de los espectadores,' oe l a siAlfonso Costa, se prcdujo u n a explo- tuación misma de los locales, rodeasión q u e ocasionó el incendio del ca- dos de casas r e p etas de vecinos e n
rruaje, motivando q u e el mencionado constante peligr(> de incineración.
político, creyendo que se t r a t a b a f e
El teatro de Ja Naturaleza, de Barceu n a t e n t a d ' i , se arrcj-ise p<r u n a ventanilla, produciéndose heridas gravísi- loní-, se construirá en el monte de Vallm a s q u e p e n e n en g r a v e peligrro su v i d r e r a , próximo, cerno es sabido, a
existencia- P a r e c e ser que hace días ia capital.
La especial disposición de l a m o n t a se le h a b í a a d v e r t i d o por medio de
fia
y el desnivel de la vertiente h a r á n
a n ó n m c s q a e sería < bjeto de un atentado, y inue y a la policía v e n í a traba- que los espectadores ebtí'n colocados
j a t d o por descubrir a les m a l h - c h o r e s . Hii f r m a i^ual que en el teatro del
Pnn<-ipo Regente, de Munich, biendo
líimb^én i énticH la c o l ' c a c i ó n d é l a
A. FÁXEZ.
' r q u t s ' a , lo q u e p f r m i t i i á dxr r e p r e sentaciones wagnerii.na8 el día, que ae
crea, oportuno.
CRÓNICA T E A T R A L
l.a fcsi-.ena q u e d a r á er cuadra da, por '
dos columnas de orden d c n c o , siendo
E' ilustre crítico literario de l a sa- tamt^ién "eca.lá'•t^r d á m c o k s mctibia revista Hüzón y Fri, R P . C nstan- vcs ornamentales de la emboctídnra,
cío Eífnia, ha ^.'Ub ií-ado en el a u n tal como corresp n d e a le? ovlgen^s
admíratele estudio llterari'-d« ctrinal h 'léfiicos d - l t e a t r o a l a i r e libre. El
acerca del sugeftivo tema. El dvordo artista Sr. J u i y e n t es autor da este
en el i at.ro, y coristir.nye, ademán a e u n proyecto.
f r m i d a b l e alegato en favor de la con
lie otra n a r t e , el Sr. Pous y P a g o s ,
cep''ió 1 crÍNil8iia del matrimonio, u n a d i i e c t i r a r t í tico, t r a b a j * a c t i v a m e n nueva señal de 'a ccpioeís m a v e n a de te, p r e p a r a n d o tod^ ios elementos n e erudii-,iÓQ- j-imás empachuua en s u ' cfsarios p a r a 1» función i n a u g u r a l ,
manos—que ha reunido en pUzo rela- q u e se ve.rifie<>rá este mes coa la r e tivamente breve—el P. Ey^uía, por ci- p r e s e ' t í c o n del a r r t g o c a t a - á n de
eña de t' dos, eN joven,—y cvyos m a - La A-rlesíatia, de A. Daudet, música de
teriales y componentes, Fin a p a r e n t e G. Bizct.
esfuerzo, esiá.i en su espíritu clasift
***
cadoB y juzarados sin m á s rigorismos
Con el n c m b r e de «Movimiento del
•jue aquellos que le imponen la c nviccióu y la d o c t á n a en lo fundamen- t»atro católic » se h a iniciado en los
tal, g r a c i a s a nn sentidii critico depu- E i t a d s Uaidos, por S E t i C v d e n a l
radísimo que le e* coni atur»»!, aun- L i v e l l e , u n a obra e n c ^ m i n a o a a perque, iógicamente, se h a a g u d i z a d o ' y seguir la pornografía en el tti-«tro, de
ati a d o con ti constante estudiar, con que a su c sta se ent r < n y a e m p r e el escu r i ñ a r p e r m a n e n i e en toaos los barios y autor-^s p ' co escrupu osos.
E-!to fe logra e-xi el rep*rt-i d« u n
puntos cardinales del horizonte literaB lietín e a qUe ñ.(uran las obras q u e
rio y fi osóíico.
Edte estudio acerca do E ñivorno en pueden Ver o que d e b e a -'O ver Jos c*el Patro d e b e r í a a v e r g o i z . r , por bU tóáci-iB, sin perdf r da vista las condiciones literariit s y propiamente escéniperfección e i t t e r é s , a cuantos a n i a
mos por el siglo y nos dejamos l ' a - cas de las producciones.
No p u e d e menos de saludar esa o b r a
mar—otros se 10 h a c e n l l a m a r , q u e es
con t o d a s i m p a t í a L A LECTOKA D O M I peor—críticos t e a t r a l e s .
LA LECTURA TX)¥!NtCAX
NiCAL, qu'), hace cflr^a de veinte años
YÍtioe r e b l ' z t n d ) a.ná o g * l a b o r e n la
medicta, de sus fai^rzí.-, y st ha visto
IvLig > a y u d t d a p-jr otras paoUciCio
nes cuyos propósitos c( i a e n í a n t-on
les nufbtrns, y a l g u n a s de las cuales
nos h o a r a a a d v i r t i e n d o a sua leetor^s
q a e b-isan sus juiCiUS en ios do esta
Racista.
Pi lümoa a D'os qua los PsCue^'z^s de
toaos prop'.ií ctonei. s-i deb d o c r u n f •»
la causa de la yerria^ y de la moral
en ios espectáculos púb icos.
F . CABALLIEO.
EFEMÉRIDES DE LA SEMANA
JULIO —Dfa 2.—E'i las Argonas. las
tropas lieí ki-oap^-i; z h ui tonifido variHS triuctiriras y I :í03 prisioueroa.
Oír* vez se t i a i a de u la p-iz ííe^jara
da entPtj A!e;na'i!a y Aus^jia c j u Ka
sis., a con3^caeD••.ia ae laa deTotü-i oufridí<,s por ésca. Varios btr.-^os aliadoi
a p que, entre elios el sob-rbio trasatlántico i n g éi Árm'H a. Se. han prc'sent.ado al gobicr.io bcibáacn 4ó OÜO obre
r<^s voluntar loa par-t i r a b i j a c ou la fdbricacióa de oiuuir-jonKS na^ta el ti^a'
de la gUrtrra. —Ea Paría f-iilece el antiguo y anciano t x jr*^sid«nta d ) Aléj ca
D. Porürio Diasj —E( srúor Naucio de
Su S a n t i d a í es objeto d ? gir-rn tecibimíeato en Barctrioua.. —Lia íomeuzaau
la rr^patriación de ms 10 000 soidi.d )»
lieeuciados en M.trrutJC'js. —LJS republicanos de la co jiíicióu e s c i n d i d
didos, causee Iv que catate, a celebrar mi
tines, y han ddao cuenta al gobierno
de sus b ' a v o s prot ósitcs.
Día 3 —Los t e l e g r a m a s de la guerra
conürnian UÜ combate n a v a l eutre (-scuartT-üías rusas y a l e m a n a s en agu«s
tt« Suecia, por lo cual est-i país ua
formu'ady proie^-tas dipUimácr-as. Eu
los frentes a e brualla de E r a n ia e ita,lia. aolo pequeños en Usntros y guerra
de tn..ctinras. rtlgae la r c i v a d a da lob
moscovuas en U-.iutzia. AIJÍUDOS diari'íh franceses em)..lK2an a d e c r lo qat
ña'-e tiempo pifUian en becreto, y se
q a - j n de que Ing a t e r r a no se da,
c u e n t a de la g r a v e d a d oe la situación.—Ea Lisboa, el j - f e de los demoer ^tas, A'l'on'40 Costa, se arre j * de un
t r a n v í a en que se ni ció u n incendio,
produciéndose g aví.simas ht-ridas en
la cabeza.—Bu N u t v a i'i ilí, u n al..m á n di para nos tiros contra ei mil op a r i o i á r g a n . El agresor ba d í c a r b do q le queiÍA voDgtjr la a y u d a fi:.a. cierd. qu<i su v í c t . m a prt^st&.ba a los
ali»d s.—E tá m u y g r a v o el s a t á n
de T rquiA.
D í i 4 — Notir'ias rffcirent's al h u i dimiento do seis vapoí es a.iiaaos j/or
suboiarinoa ai> m^nes. l i a si iu herido
eu los D a r a a ' i t i u s el goi.era! eii jufe
dís las trop*.s francv^sas, tír. G a u c a a d ,
quii vuelve a E r - n c i a rtg' iñ -adoa sociáiii-tas alamaues han publicado u n
m a n i ü ' s t o e n f>iv...r do ia p^z. La prensa de P a n s publica ei himon/^j q ].e
los llamad! 8 mteinctunies espaú • ei
hacen a .as nacioaes a itidas. Lu tirm a u uuos cuencos sfñ aes c a t t d i á t i cos, pii.,tiires, pariodi, t i s , d e c o r a d o r . s
y eiCenógraÍLS, pero ni son ti dos los
que están, ni están todos los que son,
lo que no empece p a r a que d c h o s pe
ñores se llamen y se c-'-an m d - s t a mouttí 1 s úiii'^í^s que »quí tienen ^nt-1 lüifliiento ¡Pobre E-p^iñ •., si á.«i-fu9
r a ! - E a el Capitolio de W^ishington
se h a producido u n a g r a n í-xplo4ón.
.Se cree debid-i. t a u b é •. ai o d i j alemá-a
c ü t r a los yas.kis, qu-» proveen de a r
in )S a ¡os íiiia'ios. —L-i.8 potencias alia
díis h a a protestado de la o c a p a c ón de
pue-t.'s a t b a a t s c s po»" S-rvi*, Grecia
y iVL 'nteai-gro. — E.i Jilateró cí-lébrase
con g r a n s o l e m n i l a d la consagración
del naevv obispo de G-rona, Dr. .Vlas.~
L(JS radicales a e B t r c e i o u a ce ehran
varii-s mítines contra ia política didalirtiü üoi g bierno.
Día 5. — Los partes ofloiales dan
cu'-nta de vict >rias parc.iale-i de los
a e m a n e s en Francia. Los austrÍJicos
lian disti'uido un torpedero ittli;ino y
han c o n t e n i ó «-I a v t n c e eneinig'^ eu
el li 'uzo. Má-i b i r c is a lados a p que
ÜeB::r.iu í¡lcg<tu oficialmen-.e qne nn
el combate n i v a l del Bi:tico fuese
echa 10 a pij^ue u n a c i r a z a d o alemán.—A:fjn.->o C ista está gravisini.i
a consecuencia, de ias heridas recibidas.— Eu Castellón se su-pen'j.e u n mitin radical por-jue los oradores comer! z-iron a traCHT el t^ma dw la neut r a d d a d . — L a infanta D.'^ I,-<ab.-il sal«
para las provincias d i l Norte, «n vi.fi.je
di Veraneo.—El difunto I). Cá uLdo
L a r a h i deja'io u n mil Ion de pd.-,et ts
para ob-'^as b,'.néíic,as.—En los carap,)8
árí CadiZ están b a c l e u l o g r a n d e s fechorí-is I J S malhecfi(jr,.is de la «ilano
ae^ra»—-.l^ün las costa.s de! B.-ítsil se
ha Ido a pi.|ue ni v a p r español A'Me.sr,ra Sellara d¡ Begoila.. Toda ia tripuía,ción se ha s a l v a d o .
iJí-i G.—Sigae en estado m u y g r a v e
á.lfouso Cosca. H a y sospechas d 1 q u e
pudivra ser int«ni.:ionad ) ni incendio
ael t r a n v í a . — E u Nueva York ha e^tali-tdo a n a b >rnoa t-n las.oüciuas i.-en
erales ae Poii, f* —Ei m¡llOjnr o M irg i u es'á íx-\ra. de pe ig''0. i5u agresor
na iutf nt.u,d..) sui idarsti. — l.^a gente
desocupada de Valeü<;ia a n u a oiuy
u^ upad-* tstoa dí.is con u n a casa de
ámuiiev, en a o n d e se oy^.>n ruidot. y repiqu-f.s en series d-i cuatro y sftis goipts. Y ia Policía t a m o i é u se halla (,capodti eu c o n t e o t r a Ja m a c a e d u m
tire.—En los Dardanelos h.j, s.do hus;,dido un transporte f anees. El general
al m íu vou Sauders ha sido h-srido en
las o.-.eracioues de G i d í p o i i . Como
traidor a la p.itria ha sido coudetiado
el g-t^neral r u í > Rdun<^nk.ampf, q m
maudaDa u n cuerpo de ejercito de cosa- os.
4Í3
D Porfirio Díaz Asisten todas la« coinniás e s p á ñ i l a s y am=>ricaaa^.—Hin
m a r c h a d o a i ' a m p o u a los r e p ' e s e n tantes en Cortes para asistir al traslado de loa restos de los reyes de N'ivafra, desde ei m o n a s t T i o de Vidve a
í^amplona. — lia, muerto en A.VLla el
muv ilu^tr^) sen >r c h a n t r e de ia catedral D J e r ó n i m o L a c a s .
Día 8 —Todos l-is informes, así públicos como privados, coinciden en
presentar como m u y crítica la situación p a r a los altados, y especialmente
p a r a 'a nación francesa, i n v a d i d a hace
un «ño y sin fuerzas p a r a la reeonq u ' s t a a pe^ar de su heroico eapíruu,
Jlí.n KÍdo echados a pique l"8 vapores
Pr'h. Wi kd'iuna, Oñgar'i, Gohhy, Hiron'lcih y Sfuh. Lis ú timos partes de
la Galirzia cuentan que los austríacos
han cogi io seis mil prisioneros rusos
y mucho material de gu»rra. El ministro de mauiciones de I n g l a t e r r a
d'ce que dentro de aigun-^s meses las
fábricas británicas producirá-i machos
más explosivos que los imperios de
Alemania y Austria. Los partes de
Londres participan que en Gallípoli
las tropas a l i a d a s h a n causado enormes bajas a sus enemigos.—Los ministros celebran C msejo, preparatorio del
que m a ñ a n a ha de presidir el R e y ,
que a e3te obj .-to v e n d r á de La G r a n j a .
Suscripción para el dinero da San Pedro.
Ftu.
Suma a n t e r i o r . . . .
A ñ " r a . — D . Bartolomé Bejarano
,
Total
836,G5
2,00
838,G5
NOTICIAS Y COMENTARIOS
La cripta donde r-'posan los restos del sHDto Pontiüco Pío X , que murió ai conti^mpiar a Europa desol^^da
por la gunrr», e-^'á s i e n i o m u y visitada, c nstiruyendo v e r d a d e r a s peregricat.iones los que v a n a r o g a r a n t e el
sepulcro del P a p a de la Eucaristía por
los que m a r c h a n a la g u e r r a , y muchos soldado^, antes de incorporarse a
tilas, hacen esta piadosa visita.
= El Cardenal-Secretario de E?tado
de Su S a n t i d a d , Mous. G-isparri, h a
dirigido ea n o m b r e del P a p a u n a preciosa c a r r a a S. M. la jeTua ü.* Victor i a ena teciendo el trab.ijo personal
que nuestra s o b e r a n a d<-dic t a ia o b r a
d«i K pero de a a n t a Vu-toria, i a s Día, 7 —Los rusos siguen oponiendo tituC'ón que desde que fué fundada
a^guua reni.-ítencia en su r e t i r a d a , pero en lOo'J proporciona tanto b i e n a los
ésta ae pfectÚA sin ce,5ar, po qu-.í ios pob >::8.
D-i-spuéí de h a b e r ordenadlo que qtieaustro aleuiAue» siguon el a v o n c ^ que
l^s permita lioiaburar en el 8;ti,> a e d a abierto a favor del Kopero dt CaVarsovia, que pa.rece ser ah r» ei < b - n d a 1 da S a n t a Vi. t o n a el tes- ro espijet vo de 1 'S I'uperioa ceuoia^es. No ritual de las indulgencias, Su Santih ' y noiicia.i ;mp •rtaniies de L s i.prra- d a d , c m o p r u e b a beñalada c e su pacioues entre austríacos a italianos, y t e r n a l benevolencia y con toda la efaiiaaiH pal t i c u t a r m m i e l a a t e o c i ó n qud aión de su »lma, dst su apostó ica beano h a y a sido d e c l a r a d a la gu>rra a diüión a S. M católica, a toda la R.^al
A eiUbiQiM, y q la itiiiia s i ^ a e n buenas familia, a la Sra. D.* Carmen G a r c í a
re.aciones alp^omáiicas con ei imperio L. ygorri, secre.íaiia genera!; a ias pret u r c o — L a s tropas france^ai do Ma- sidentas, vicíípresidentas, s e c r t t a r i a s
rruecos h a a sostenido violentos com- y asociados, como presagio de g r a c i a s
bates con las cabiias rebeldes. — En elegidas que ei Señor tiene reserva-
París se ha yáriñcado el entierro de
fias a qoienes con corazón gendroso le
LAnLECTURA DOMINICAlL
444
El Papa en su carroza acompañado de un guardia noble.
han servido con amor y caridad en las
personas de sus pobres.
= En la iglesia de San Agustín, de
Roma, se ofreció el día 2, ñesta de la
Visitación de Nuestra Señora, a la milagrosa Madona que allí se venera, un
hermoso Corazón de oro, en el cual las
familias de todas las clases sociales
han grabado el nombre de aquellos de
sus miembros que han sido llamados
a formar parte del ejército combatiente.
= Con extraordinaria solemnidad
se ha celebrado en Burriana, su pueblo natal, la consagración del Obispo
titular de Dorilea, auxiliar del Cardenal Primado de Toledo, limo, señor
Dr. D. Juan Bautista Luis Pérez. También tuvo lugar el domingo último la
consagración del Dr. D. Francisco Más,
nuevo Obispo de Gerona, en Mataró,
patria del insigne magistral de Barcelona. Fué consagrante el señor Nuncio
de Su Santidad.
Damos la más cordial enhorabuena
a los dos ilustres Prelados, de cuyos
grandes talentos y virtudes mucho
tiene derecho a esperar la Iglesia española.
nich y Colonia han dirigido al [emperador Guillermo el siguiente telegrama:
«Indignados por la ofensa dirigida
a la Patria alemana y su Ejército glorioso, por el folleto francés «La guerra
alemana y el catolicismo>, nuestro corazón nos induce a expresar a Vuestra Majestad nuestra dolorosa indignación en nombre de todo el Episcopado alemán. >
El Kaiser contestó en el acto con
otro telegrama, dando las gracias a
los Cardenales por su acendrado patriotismo.
La guerra que por la pluma y la
propaganda de todo linaje se hacen
las naciones beligerantes ha llegado
a ser tan cruda y tan inhumana como
la de los cañones y trincheras. Y aun
ésta es más noble, por menos artera, calumniadora y envenenada que aquélla.
= El Cardenal-arzobispo de París
publica en el último número de su Boletín Eclesiástico una nota relativa a la
interviú del Papa publicada en La lAlerté, en la que tan descaradamente se
tergiversan las ideas y las palabras
de Su Santidad.
En ella exhorta a los católicos franceses a que no hagan el juego de los
enemigos de la Iglesia y de Francia y
no dejen por pérfidas maniobras que
se debilite su filial confianza en el
Santo Padre.
El Cardenal-arzobispo de Lyon ha
publicado también una nota análoga
en su Boletín Eclesiástico, diciendo a
sus diocesanos que estén alerta contra
las apreciaciones temerarias o los ataques sistemáticos que llenan las columnas de la prensa, y cuyo ñn no es
otro que disminuir, hasta llegar a
destruirlos, el respeto y la confianza
que los católicos deben al Jefe augusto de la Santa Iglesia.
= Por coincidir la gran peregrinación de la Corona de Aragón a Santiago con las tradicionales fiestas de
San Fermín en Navarra, de extraordinario esplendor este año por el traslado de los restos de los reyes, y con
el Congreso litúrgico de Montserrat, de
acuerdo con Excmo. Sr. Arzobispo de
Valencia, que acompañará a los peregrinos, se ha aplazado hasta los primeros días de Agosto.
Con este aplazamiento se cumplirá
el deseo de algunos maestros de visitar y estudiar durante las vacaciones
tantas regiones como abarca el hermoso itinerario, de donde pueden sacarse
conocimientos y enseñanzas de gran
= Cuatro pastores anglicanos, coutilidad desde el punto de vista crisnocidos
y estimados en Brighton por
tiano y pedagógico.
BU piedad, su saber y su caridad, han
= La Gaceta Popular de Oolonia dice abjurado el protestantismo e ingre-
qa9 loe Cíiardeiiiales-arisofeígpoi de Mu-
convertidos son los Rvdos. Arturo
Cocks, antiguo pastor de San Bartolomé; Oliver Heny, agregado al clero
de la misma; Enrique G. Hinde, pastor
de la Anunciación, y uno de sus vicarios, el Rvdo. R. Prince.
= No se pueden calcular los daños
que están sufriendo en Asia las misiones católicas con motivo de la guerra.
De Palestina han sido expulsados más
de doscientos sacerdotes y religiosos,
y más de trescientas religiosas, y el
gobierno turco ha ocupado más de
cincuenta casas, colegios, hospitales
y escuelas. Otras misiones quedan
abandonadas por haber sido llamados
a filas los misioneros que las formaban, padeciendo muchas de ellas grandes apuros por la dificultad de comunicaciones y falta de recursos.
__ NUESTROS AMIGOS DIFUNTOS
Han fallecido:
En Santander, las piadosas señoras
D.*^ Matilde Cagigal Pe2uela, viuda de
Cagigal, y D.* Antonia Rogi Cabada.—
En Salamanca, el joven y virtuoso sacerdote D. Generoso Rivas y Rivas.—En
Avila, el chantre de aquella Santa Iglesia Catedral D. Jerónimo Lucas, sacerdote piadosísimo y muy docto.—En Granada, el beneficiado maestro de Capilla
de aquella Santa Iglesia Catedral D. Celestino Vila y Forns,—En Traspeña (Falencia), el virtuoso Sr. D. Basilio Martín
y Martín.—En Puebla de Sanabria (Zamora), víctima de un accidente automovilista, el ejemplar católico D. Nicolás
Gereda.
Í
En Madrid:
Don Alfredo Medina Melgarejo.—El
conocido escritor D. Juan Téllez y López.—La respetable Sra. D.*^ Amalia Cabanas, viuda de Gimcno, madre del exministro D. Amalio.—El Sr. D. Antonio
García Busto de Mediavilla.—Los conocidos editores D. Saturnino Calleja Fernández y D, Sandalia Feriado y Melero«
445
LA LECTURA DOMINICAL
EL PRIMER PECADO
Bien sabéis que el poeta Ovidio dijo
esta famosa sentencia: «Mientras fueres
feliz contarás con numerosos amigos,
mas si cambiaren los tiempos y fueres
desgraciado, quedarás en la más triste
soledad>; pero esto ha tenido a veces
muy estimables excepciones, y lo fué
para Adela Gorman el hecho de que todos sus amigos, no sólo se apenaron al
saber que la elegante dama había quedado arruinada, sino que decidieron no
abandonarla y seguir tratándola con la
misma asiduidad y afecto de siempre.
—No merecía esta desgracia nuestra
amiga Adela—decía el conde de Espá,—
que siempre ha sido prudente, juiciosa,
piadosa y de grande generosidad. Casada, no tuvo su marido para ella más que
motivos de alabanza; viuda, ha llevado
una vida ejemplar. No ha desmentido
jamás el concepto en que siempre fué
tenida su familia de nobles caballeros y
honradísimas damas y personas religiosas, porque fuera de su primo Gaspar,
que resultó una bala perdida...
—Un tronera, un desatinado, un impío
que mató a disgustos a sus padres...
Al oir estas palabras, dichas por uno
de sus más antiguos amigos, Adelina se
echó a llorar y entróle una tan grande
excitación que todos acudieron a asistirla creyendo que le acometía un ataque
de nervios.
—Déjenme, déjenme—repetía entre
sollozos,—ya me calmaré.
—Peí o ;jqué siente, Adelina?—dijo una
señora su amiga,—¿qué le pasa?
Cuando al cabo de unos minutos de
reposo y de silencio parecía que la excitación se iba aplacando, Adelina suplicó
a sus amigos que la oyesen.
—Sí—dijo,—ya puedo hablar, y ya les
explicaré la causa de mi aflicción. ¿Alguno de ustedes conoce el palacete d e la
dehesa de mis tíos los señores de Gorman en la provincia de Avila? Es una
magnífica finca esta dehesa, y el palacete
un edificio medio-eval, como ahora se
dice. Allí me he criado yo, en aquella
casa llena de cuadros antiguos y de muebles de roble tallado, y en aquellos montes de encinas y de pinos. Pues bien,
aquello era para mí un paraíso. Allí hay
todavía un portentoso árbol que bien
puede ser denominado de la ciencia del
bien y del mal. Ya os diré dónde, es decir, en qué determinado sitio hállase el
referido árbol y cómo se llama. Cuando
mis padres murieron, como sabéis, arruinodos por un desleal administrador, mis
tíos los señores de Gorman, que desde
que se habían casado vivían en la dehesa
de Zarzaruelo, en el precioso palacete,
me recogieron, y allí fui de edad de ocho
años, y me recibieron con todo cariño, y
fui dichosísima en aquel lugar saludable
y amenísimo, donde desde el corral y el
palomar hasta la pradería y los cerros no
había para mí más que motivos de gozo;
además, mis tíos me querían y mimaban
al igual que a mi primo Gaspar, y los
criados llamábanme la señorita; pero hacíase necesario atender a mi educación
e instrucción, y para ello enviáronme mis
tíos a Madrid a un colegio de señoritas,
interna, que fué como arrojarme al mismo infierno desde el Paraíso terrenal.
Entre tanto mi primo Gaspar iba creciendo y haciéndose un muchachote recio y
ágil, y un angelón por lo afable, lo obediente y, sobre todo, por lo candoroso y
crédulo, tloy, infeliz de mí-^añadió Adela volviendo a su llanto,—no puedo recordar aquel tiempo sin sentir la mordedura del remordimiento, porque esto que
cuento ahora es confesión de un gran
pecado, de mi primer pecado mortal, es
decir, el cometido deliberadamente y el
que, como todos tales pecados, trajo horribles consecuencias... La idea de que
mi primo hallábase allí en la dehesa disfrutando d e la hermosa libertad del campo llenábame de pena; pero esta pena
fué mayor cuando años después, y considerando mis tíos que yo ya estaba lo
bastante crecida y sin duda educada
para poder sin peligro pasar con ellos
los meses de vacaciones, hizo que me sacaran del colegio y me llevasen a la
dehesa. Ir yo allí y sentirme más triste y
pesarosa de ver a mi primo adorado por
sus padres y querido por todos y elogiado por su docilidad y aplicación, fué
efecto instantáneo. Aborrecía a mi primo. Por esto, un día que supe que tenía
licencia para subir a la biblioteca y leer
de todos los libros menos de a'gunos
que en ella había que le eran absolutamente prohibidos, hubo de ocurrírseme
una idea verdaderamente infernal. Sabía
yo las consecuencias de lo que en daño
de mi primo iba yo a hacer, sí, creedme,
lo sabía: sabía que iba a pervertir su corazón. ¿Tanta maldad en una muchacha?
diréis. Sí, cabía ya tanta maldad. En Madrid había sido convidada por la íamilia
de una compañera de colegio a pasar ya
esta, ya la otra festividad en su casa, y
allí las hermanas mayores leían libros malos, y el padre, que era un pernicioso farfantón, leía obras impías...
L a biblioteca era el árbol de la ciencia del bien y del mal que había en el
paraíso de la dehesa, y yo, yo hice entonces d e demonio... Vil fui como la serpiente. Primero infundí curiosidad en
mi primo proponiéndole nos apoderásí»-
mos de las llaves del estante de los libros
prohibidos no más que para ver las estampas. Después... después le vencí con
el mismo maligno y pérfido pensamiento
del demonio... «Tú padre no quiere
que ahora lo sepas todo y sepas tanto
como él...»
Pues bien, leyó, leyó... devoró todos
los maldecidos libros; perdió la fe, perdió los respetos todos, perdió la castidad
del alma... Perdió la humildad, perdió
el freno de la confianza en Dios y del temor de Dios, y cayó en las necias presunciones de la soberbia que de los grandes
hace tiranos, y de los pequeños, revolucionarios... ¿Quién es culpable de que
Gaspar se hiciera un mozo vicioso, aturdido, voluntarioso e impío? Yo, desgraciada de mí, que ahora lo comprendo.
Bien merecido tengo lo que me sucede...
y bendito sea Dios si con mayores penas
y padecimientos y estrecheces puedo purificar mi alma de aquel pecado cuya
gravedad hasta ahora no he comprendido... pecado que os confieso. Tal vez
Gaspar—que ahora se halla en la guerra, y según veo por sus cartas... convertido a Dios,— con su sangre lave
sus culpas... Concédame el Señor... esto
mismo que espero de su misericordia...
puesto que, bien lo sabéis, estoy herida
de muerte por la tuberculosis... y mi
muerte no ha de tardar.
—¿Lloras, Adela?—dijo el conde...—
Nada más grande que un sincero arrepentimiento...
Esta confesión, que ya había hecho
Adela a un sacerdote, fué la que hizo a
sus amigos Adelina Gorman, que hacía
dos meses murió apaciblemente dando
gracias a Dios porque había recibido
carta de un camarada de su primo, en la
cual dábale la noticia de que éste, herido, había muerto en el hospital de sangre como un santo.
J.
LIBRO
ZAHONERO.
RECIBIDO
«Suspiros de amor, o el libro de la eterna sabiduria», escrito en alemáa por el
Boato Enrique Suson. Traducción del Padre S. Meseguer, O. P.—TJn tomito enonademado de 155 págB.—Lib. religiosa
do M. BelengniQr, Campaneroa. 9, Valenoi».
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c a r t a s y g i r o s s e dirijan al s e ñ o r A d m i n i s t r a d o r de L A LECTURA DOMINICAL
c u a n d o d e d é b i t o s d e la R e v i s t a s e
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mejor entendida; la multitud de casos supuestos, desde el de una familia numerosa
hasta el de los solteros con casa independiente, desde el del obrero de las ciudades hasta el del pequeño empleado
que puede permitirse una i'íV/íj en las afueras, o el del labrador que ha de disponer su casita con los anexos
lequeridos por el ganado y por las industrias del campo, son cualidades que ponen la obra de Casali muy por
encima de todas las que de este asunto tratan, convirtiéndola en un consultor útilísimo para el propietario o el
constructor de una casa, y en una fuente de ideas que facilita el trazado de nuevos proyectos.
Cada uno de los 125 proyectos presentados comprende el detalle necesario de plantas, secciones fachadas
y presupuestos, bastando para dar una idea acabada de las condiciones constructivas de cada edificio.
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Para la divulgación de los conocimientos agrícolas entre
aquellas personas a quienes puedan interesar las operaciones
del cultivo, de la ganadería o de las industrias que de ellos se
derivan, este tratado ha de reportar una utilidad positiva. Por
su magnifica presentación, constituye además un bonito regalo
para los jóvenes de ambos sexos.
LA ABEJA Y LA
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Ua volumen de 6-18 páginas de 20 x 13 cms., con 243 grabados. En tela inglesa, tapas especiales, ptas. 10,
ingiesa, t r e s francesas y c u a t r o r u s a s .
Difícilmente se podría exponer en forma más amena, al propio
tiempo que científica, cuanto al apicultor interesa conocer: l a anato-
mía de las abejas, sus costumbres, sus construcciones, los diveisos
sistemas de coiraenaí, las operaciones de !a enjíimbrazón y de la
cría de r-einas y de záng-anos, la selección de ]a?i razas, ios métodos
de expedición, t r a n s p o r t e e instalación de colmenares, las operaciones inhérenles a la i n v e r n a d a , la producción y venta de miel y de cera
en g r a n d e escala, las enfcrmt'dades de las abejas y su remedio, etc.
T e r m i n a ef libro en un calendario apícola y un resumen de consejos
prácticos en forma de aforismos sencillos.
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Estadio de la leche. —Manipulación y v e n t a . Fabricación de mantecas y quesos.—Organización económica y administrativa.
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Un vol. de 306 págs. de 20 X 13 cms., con 124 grabados. Encuadernado en tela inglesa, ptas. 6.
La primera parte del libro trata del estudio de la leche, de los mé- parte comprende la organización y administración de las lecherías
todos y aparatos de ensayo, de las alteraciones, de la compra-venta }' queserías, así particulares como sociales.
de leches, etc. La segunda parte trata de la Industria lechera propiaLa Iiidiísti'ia Lechera del Sr. Mor-elli es un libro indispensable a
mente dicha: métodos de ordeño, transporte, conservación, pasteu- todos los propietarios y administradores rurales, y en particular a
rización y demás operaciones de la lechería ordinaria, fabricación los ganaderos y lecheros, que encontrarán en él cuantos datos necedélas-mantecas y quesos más renombrados, etc., etc. La tercera siten para obtener de su industria el mayor resultado apetecible.
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NOTA. — El Editor remitirá estas obras a los lectores de este periódico que las pidan acompañando su importe
más Ptas. O'oO para gastos de envío, por G^iro Postal, Giro Mutuo, Cheque o L e t r a de fácil cobro.
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Editor, Calle Universidad, 45.-BARCELONA
Tipografía del Sagrado Corazón.—-Satn^Bernardo. 7. Madrid.
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