El Control de Tráfico Centralizado (CTC) El Control de Tráfico Centralizado (CTC) consiste en la regulación de todas las señales y agujas situadas en el trayecto desde un punto único y mediante sistemas informáticos, lo que permite establecer la ruta de los diferentes trenes en circulación con las mayores garantías de seguridad y fiabilidad. PINAR DE LAS ROZAS L01 L02 P1 L07 P9 P5 P4 P6 P01 L09 También desde la mesa del CTC se gobierna y controla la apertura y el cierre de los pasos a nivel dotados de semibarreras enclavadas, que funcionan normalmente de forma automática. P5 X2 L14 L08 P8 Los sistemas están diseñados de manera que aunque se produjera un error humano se garantizaría la seguridad: una vez el tren está en un tramo de vía, el ordenador no ejerce ninguna orden contradictoria. L16 J9 X1 L13 P14 P15 P16 P7 L03 P3 L12 HLP P2 Las operaciones se realizan mediante un sistema de retroproyectores que reproducen la topografía de las vías y visualizan los diferentes trenes en circulación y una serie de ordenadores que dictan y ejecutan las órdenes. Los centros de Control de Tráfico Centralizado están previamente programados para cada itinerario, de manera que automáticamente ajustan las agujas y señales al paso del tren. La simple pulsación de un botón permite el cambio de agujas, que se mueve por impulsos eléctricos. L17 P17 ESTACIÓN PINAR H5 L04 X6 P11 P13 H5 L15 P12 L18 H2 X7 J00 7H5 L19 X8 L10 P1 PHT L21 H4 H8 L05 J1 J2 J3 H9 L06 V6 V5 V9 P5 V4 B5 B5 L20 V7 X9 L11 V3 L22 L23 V8 En la pantalla grande se reproduce una simulación del estado de las vías, con la que trabaja el operador correspondiente. A cada operador se le asigna un tramo para controlar la gestión, en función de otras circulaciones. El operador realiza desde su pantalla aquellas operaciones necesarias para la gestión adecuada del tráfico, controlando los cambios de aguja correspondientes, señales e itinerarios. La utilización de sofisticados sistemas informaticos que controlan los elementos de la infraestructura impiden la ejecucion de órdenes contradictorias y que, a la vez, visualizan en cada momento la situacion de los trenes aumentan considerablemente las condiciones de seguridad de la explotación ferroviaria. El regulador orienta al operador sobre las funciones que debe realizar en cada momento, Solventa las posibles dudas y concede las prioridades de la circulación. En los centros de Control de Tráfico Centralizado también operan dos técnicos o jefes de circulación, supervisando las actuaciones del regulador y evaluando el estado de las vías. La efectividad del CTC se completa con la duplicación de todos los elementos vitales del puesto de mando. De esta manera se evita que un fallo pueda afectar al sistema. La primera instalacion europea de CTC en vía única se realizó en españa en el año 1954.