Concentrados de plaquetas procedentes de sangre total (buffy coat

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Med Clin (Barc). 2012;138(12):528–533
www.elsevier.es/medicinaclinica
Revisión
Concentrados de plaquetas procedentes de sangre total (buffy coat) u obtenidos
por aféresis; qué producto emplear?
?
Marı́a Luisa Lozano *, José Rivera y Vicente Vicente
Centro Regional de Hemodonación, Unidad de Hematologı´a y Oncologı´a Médica, Hospital Universitario Morales Meseguer, Murcia, España
I N F O R M A C I Ó N D E L A R T Í C U L O
R E S U M E N
Historia del artı´culo:
Recibido el 11 de mayo de 2011
Aceptado el 31 de mayo de 2011
On-line el 31 de julio de 2011
Los concentrados de plaquetas (CP) procedentes de donaciones de sangre total por el método de capa
leucoplaquetar (buffy-coat [BC]) o de plaquetaféresis se emplean en la prevención o tratamiento del
sangrado en pacientes trombocitopénicos, existiendo en la actualidad un debate abierto sobre qué
producto utilizar. El empleo de cada uno de estos dos productos es muy heterogéneo entre diversas
instituciones y paı́ses, y oscila entre el 10 y el 90%, con una relación de 50:50 en Europa. Respecto a
eficacia y a reacciones adversas en el receptor, no existen ventajas de las plaquetas obtenidas por
aféresis. Desde el punto de vista del donante, la evidencia está a favor del empleo de donaciones de
sangre total. Teniendo en cuenta la disminución progresiva en el riesgo de transmisión viral, la ventaja
de los productos de aféresis en relación con la reducción a la exposición a donantes disminuye. En el caso
de la aparición de agentes infecciosos emergentes transmisibles por hemoderivados y considerando el
análisis de coste-eficacia, la inactivación de patógenos de CP de BC de sangre total serı́a una estrategia
más adecuada que el empleo de aféresis.
ß 2011 Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
Palabras clave:
Aféresis
Donaciones
Concentrados de plaquetas
Platelet concentrates from whole-blood donations (buffy-coat) or apheresis:
Which one to use?
A B S T R A C T
Keywords:
Apheresis
Donations
Platelet concentrates
Platelet concentrates (PCs) prepared either from whole-blood donations by the buffy-coat method (BC),
or by plateletpheresis are indicated to prevent or treat acute hemorrhage secondary to thrombocytopenia, and there is an ongoing debate about which platelet product should be used. Usage of each of
these two products is highly heterogeneous among countries and individual institutions, ranging from
10 to 90%, with a 50:50 ratio in Europe. In comparison of pooled platelets prepared by the BC method and
apheresis PCs, data suggest similar efficacy of the products. Regarding recipients’ adverse reactions,
there is no advantage for apheresis concentrates. From the donor’s point of view, evidence favours using
the abundance of platelets available from whole-blood donation. As residual viral transmission risk
continues to fall, the advantage of apheresis products related to the decrease to donor exposure lessens.
While the cost-effectiveness of apheresis products is comparable to that of other accepted blood safety
interventions, in case of emerging pathogens, probably pathogen inactivation of pooled BC PCs would be
a more desirable strategy.
ß 2011 Elsevier España, S.L. All rights reserved.
La transfusión de plaquetas alogénicas constituye la medida
terapéutica más eficaz en el control de las hemorragias de
los pacientes con defectos cuantitativos o cualitativos plaquetarios,
y ha posibilitado el tratamiento de pacientes oncohematológicos y
los procedimientos de trasplantes1.
* Autor para correspondencia.
Correo electrónico: [email protected] (M.L. Lozano).
Básicamente existen dos procedimientos para obtener concentrados de plaquetas (CP) humanas: la extracción selectiva directa
del torrente sanguı́neo mediante procesadores de aféresis (disponible desde comienzos de 1970), y la separación o fraccionamiento
a partir de unidades procedentes de donaciones de sangre total,
desarrollado inicialmente para obtención mediante método de
plasma rico en plaquetas (PRP), lo que cuenta con más de 50 años
de experiencia2. A principios de los años 80, y desarrollado por
investigadores de los paı́ses nórdicos, se dispuso de un nuevo
método de preparación de CP de sangre total usando el método de
0025-7753/$ – see front matter ß 2011 Elsevier España, S.L. Todos los derechos reservados.
doi:10.1016/j.medcli.2011.05.008
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capa leucoplaquetar o de buffy-coat (BC). Comparado con los CP de
PRP, los de BC tienen numerosas ventajas, como mayor recuperación de plasma, parámetros funcionales superiores en estudios in
vitro, mejores incrementos de recuentos corregidos (CCI), facilidad
en aplicación de estrategias de seguridad transfusional como el
cribado bacteriano o la inactivación y la simplificación del proceso
de transfusión3.
Por estos motivos, en la actualidad en los paı́ses desarrollados,
excepto en EE.UU. donde se emplea de forma minoritaria CP que
provienen de PRP (lo que representa el 12,5% de las plaquetas
transfundidas), el método de BC es el empleado predominantemente para obtención de CP de sangre total. Sin embargo, es más
difı́cil distinguir entre ventajas e inconvenientes de los otros dos
tipos de CP, pooles de BC y aféresis, y existe un debate vivo en la
actualidad sobre qué tipo de producto emplear. El grado de
utilización de ambos tipos de productos es muy heterogéneo entre
diferentes instituciones y estados. En paı́ses como Finlandia,
Holanda y Dinamarca, los CP procedentes de combinaciones de
plaquetas provenientes de sangre total (pooles de BC) suponen el
85-95% de las plaquetas transfundidas, mientras que en Francia
casi el 90% de estas unidades provienen de aféresis de donante
único4,5. En España, la situación es intermedia; ası́, en el año 2009
algo más del 20% de las dosis terapéuticas de plaquetas infundidas
provenı́an de aféresis. Durante los últimos 15 años, muchos paı́ses
han variado sus polı́ticas relacionadas con donación y transfusión,
pasando de plaquetas de aféresis a CP de pooles, o viceversa. En
2004, cuando la Asociación Americana de Bancos de Sangre (AABB)
requirió que todos los establecimientos donde se obtenı́an
hemoderivados detectaran y limitaran la contaminación bacteriana en todos los componentes plaquetarios, EE.UU. y Québec se
decantaron hacia las donaciones de aféresis (lo que supone ya el
87,5% en EE.UU.), mientras que el resto de Canadá prefirió
modificar el sistema de obtención de plaquetas de unidades de
sangre total desde el método del PRP al de BC6.
Durante años se ha abogado por el uso de plaquetas de aféresis,
en base a las posibles ventajas de funcionalidad in vitro, reducción
en el riesgo de transmisión de infecciones, frecuencia de
inmunización HLA, y, posiblemente, menor riesgo de contaminación bacteriana. Sin embargo, muchos de estos argumentos
postulados durante 10-20 años no han sido corroborados en
estudios robustos posteriores. Hace siete años, a partir de la
evidencia existente entonces, analizábamos las ventajas e inconvenientes de CP de sangre total (PRP y BC) y de plaquetas de
aféresis7. Una vez que los CP de PRP están prácticamente
abandonados, es útil en base al conocimiento actual comparar
nuevamente ambos tipos de CP, los procedentes de BC y los de
plaquetas de aféresis, considerando parámetros de calidad,
seguridad, perspectiva del donante y análisis de coste-eficacia,
teniendo en cuenta las propuestas de diversas instituciones y
paı́ses dirigidas, entre otros, a la disminución del daño pulmonar
asociado a la transfusión (TRALI), y a la implantación de tecnologı́a
de reducción de patógenos.
Parámetros de calidad in vivo e in vitro
Contenido en plaquetas y en otros componentes
Entre los argumentos a favor del empleo de plaquetas
procedentes de donaciones de sangre total se incluyen las razones
éticas de: 1) no malgastar el «regalo» de las plaquetas de los
donantes de sangre total, sino emplearlo para la transfusión, y 2) no
exponer a los donantes al riesgo adicional de la plaquetaféresis. Sin
embargo, se rebaten estas razones con las consideraciones de que,
en la actualidad, la tecnologı́a de aféresis moderna permite la
obtención de todos los componentes sanguı́neos (concentrados de
hematı́es dobles, CP dobles, y también de plasma), y hace posible el
529
abandono de sangre total. Además, se argumenta que los donantes
de aféresis asumen mediante el consentimiento informado los
riesgos inherentes al procedimiento.
Independientemente del debate de si la polı́tica transfusional
de los estados se puede asentar exclusivamente en productos de
aféresis, no parecen existir diferencias estadı́sticamente significativas en parámetros de eficacia transfusional entre ambos tipos de
CP8,9. Nuestros datos del control de calidad de CP del año 2010
muestran que el contenido plaquetar y el volumen de un producto
de aféresis es similar al de 4-5 pooles de BC, y tampoco revelan
diferencias significativas en contaminación bacteriana, ni en pH de
los productos, de acuerdo a estudios previos10. Uno de los
argumentos en contra del empleo de pooles de BC de sangre total
es el impacto negativo que tiene en la calidad de los concentrados
de hematı́es (CH). Las guı́as españolas para la preparación de
componentes sanguı́neos11 establecen que los CH sin capa
leucoplaquetaria deben tener 43 g de hemoglobina/unidad. La
media (DE) de hemoglobina en los CH producidos en nuestro
Centro de Hemodonación en el año 2010 fue de 51,9 (8,2) g/unidad,
y solo el 8% de los CH no cumplı́an ese requisito técnico. Aunque los
CH de BC muestran aproximadamente un 10% menos de
hemoglobina que los obtenidos con el método de PRP (datos
de 2007), se desconoce si realmente esta diferencia implica un
impacto transfusional.
Funcionalidad in vitro
Los métodos de preparación de CP pueden alterar las
caracterı́sticas funcionales, recuperación y supervivencia de las
plaquetas tras las transfusiones12. De forma tradicional, la
activación plaquetaria en plaquetas almacenadas se ha evaluado
mediante la medición en superficie de CD62P (selectina P) o de su
forma secretada. El ligando de CD40 (CD40L, o CD154) también
está implicado en la activación plaquetaria, y puede asociarse con
reacciones transfusionales adversas. Los estudios que se han
realizado no han observado diferencias entre CP de aféresis y los
obtenidos de combinaciones de BC en la expresión en superficie de
CD62P ni en su acumulación en forma soluble (sCD62P)13–15, en la
concentración de sCD40L15, ni en parámetros de viabilidad
celular14. Otros marcadores de daño plaquetar, como la exposición
de fosfatidilserina, o el potencial de despolarización de membranas
mitocondriales, fue mayor en plaquetas de aféresis13 y en pooles de
BC14, respectivamente.
Ası́, los diferentes estudios in vitro no han mostrado claramente
que uno de los productos (plaquetas de aféresis frente a pooles
de BC) sea uniformemente mejor que el otro en los parámetros
evaluados. Teniendo en cuenta la variabilidad interdonante en la
funcionalidad plaquetaria16, la realización de combinaciones de CP
de BC antes de la transfusión podrı́a contribuir a la menor
variabilidad entre los productos.
Eficacia
El incremento de plaquetas postransfusional es un marcador
indirecto relevante para el análisis de la eficacia de las
transfusiones de CP. Un metaanálisis que incluye la comparación
sistemática de los estudios que evalúan CCI entre combinaciones
de BC y aféresis de plaquetas a la 1, 18 y 24 horas tras la infusión no
ha observado diferencias significativas entre dichos productos17, ni
tampoco se evidencian diferencias en intervalos transfusionales9.
Una ventaja de las plaquetas de aféresis, en términos de CCI más
altos en receptores, se observa en pacientes aloinmunizados con
refractariedad debida a la presencia de anticuerpos contra antı́genos HLA o HPA. Estos requieren la transfusión de aféresis de
plaquetas de donantes tipados y compatibles (lo que puede
suponer un máximo del 15% de las necesidades plaquetarias
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totales). Ası́, hasta el momento no hay evidencia de peso que
favorezca el empleo de uno de los productos en base a incrementos
de CCI o de intervalos entre transfusiones en receptores noaloinmunizados. Sin embargo, por desgracia hasta el momento es
mı́nima la información referente al impacto de estos hemoderivados sobre variables clı́nicas como la incidencia o gravedad del
sangrado, marcadores más relevantes de eficacia transfusional.
Hasta tener dicha información, no pueden establecerse conclusiones claras acerca de la superioridad de alguno de los productos
en términos de eficacia.
Seguridad
Reacciones febriles y alérgicas en el receptor
Las reacciones transfusionales febriles no-hemolı́ticas son la
causa más frecuente de reacciones adversas relacionadas con
la transfusión de plaquetas. El empleo de la leucorreducción
universal prealmacenamiento de los CP ha reducido drásticamente
la incidencia de estas complicaciones, ya que son consecuencia
de la acumulación de citocinas derivadas de los leucocitos durante
el almacenamiento. Por ello, si se comparan productos (CP de
pooles de BC o procedentes de plaquetaféresis) con similar
contenido en leucocitos, no se evidencian diferencias en este tipo
de reacciones18.
Respecto a las reacciones alérgicas, los concentrados de aféresis
son más proclives a inducir reacciones alérgicas en los receptores
que los derivados de combinaciones de BC, y el empleo de estos
últimos puede reducir su incidencia por un factor de unas 3 veces
en el caso de componentes preparados en plasma, y por un factor
de más de 10 veces en el caso de componentes preparados en
solución aditiva5. Esto puede deberse a que en el caso de plaquetas
de aféresis, incluso si se emplea solución aditiva, el plasma
que permanece proveniente de un donante es superior a la
contribución individual de cuatro a seis donantes en pooles de BC.
El impacto de TRALI asociado a transfusión de CP por el método
de BC parece ser menor que el relacionado a transfusión de CH y
plasma, respectivamente21. No obstante, en algunos paı́ses, como
Canadá, se están introduciendo medidas para intentar disminuir el
riesgo de TRALI, lo que parece haberse asociado a una reducción en
el número de estas complicaciones22. Ası́, las combinaciones de BC
son resuspendidas mayoritariamente en plasma de un donante
varón en el pool. Los otros tres donantes contribuyen a menos de
5 ml del plasma final del producto. En el caso de querer establecer
estrategias similares con concentrados de plaquetas de aféresis, el
inventario deberı́a basarse exclusivamente en donantes varones, o
en mujeres en las que se confirme ausencia de anticuerpos HLA, o
que no hayan tenido gestaciones previas.
No obstante, hasta que no estén disponibles más datos de
estudios bien diseñados, es difı́cil llegar a conclusiones válidas
acerca del riesgo relativo de TRALI asociado a la transfusión de CP
de BC o de aféresis.
Contaminación bacteriana
Los CP son la causa más frecuente de sepsis asociada a
transfusión. Teóricamente, uno asumirı́a que la combinación de
cuatro a seis BC incrementarı́a el riesgo de contaminación
bacteriana por el mismo factor. Sin embargo, usando donaciones
de sangre total que fueron intencionadamente inoculadas con
bacterias, se ha mostrado que el procedimiento de preparación de
combinaciones de BC puede reducir el tı́tulo de contaminación por
varios logaritmos23, lo que resulta en una tasa similar de
contaminación bacteriana confirmada entre productos de aféresis
y combinaciones de BC24, de acuerdo con estudios previos25,26.
Respecto a la incidencia de reacciones adversas en receptores
relacionadas con contaminación bacteriana, esta es de 1/50.368
combinaciones de BC frente a 1/60.591 aféresis de plaquetas, no
siendo tampoco la diferencia estadı́sticamente significativa27,por
lo que la contaminación bacteriana tampoco es una justificación
que favorezca el empleo de uno u otro producto.
Aloinmunización y refractariedad a plaquetas
Riesgo de transmisión viral y de enfermedades emergentes
En la actualidad está bien establecido que el principal factor que
lleva a la aloinmunización HLA es el contenido total de leucocitos
en los componentes sanguı́neos, y no el número de donantes a los
que se expone un receptor de productos sanguı́neos19. Ası́, en un
metaanálisis que incluye los estudios que emplean productos no
leucorreducidos, el riesgo general de aloinmunización y de
refractariedad no es diferente entre CP de sangre total (aunque
obtenidos por el método de PRP) y de aféresis17. Aunque hasta el
momento no hay estudios que comparen la tasa de aloinmunización o de refractariedad en pacientes transfundidos con CP de
pooles de BC o plaquetaféresis, no existe evidencia teórica de que
estas pudieran diferir, siempre que ambos productos estén
leucodeplecionados17,19.
En los últimos 20 años, el riesgo asociado a transmisión viral se
ha reducido significativamente, por la polı́tica selectiva de
selección de donantes, y por la mejora en las técnicas de detección
microbiológica. Ası́, en la actualidad, menos del 15% de los
fallecimientos asociados a transfusión son debidos a causas
infecciosas28.
Es exactamente el riesgo de infección viral asociada a la
transfusión por combinaciones de BC 4-6 veces mayor respecto a la
de aféresis? La respuesta es «no». En la actualidad la mayor parte de
las aféresis de plaquetas derivan en la preparación de dobles
productos, y además, teniendo en cuenta que la frecuencia máxima
de donaciones es más alta para donantes de aféresis que respecto a
sangre total, esto conllevarı́a una hipotética mayor cantidad de
donaciones en el perı́odo ventana en estos casos. Adicionalmente
podrı́a darse el caso de que en un pool de plaquetas de BC, uno de
los donantes tuviera una baja carga de hepatitis B que podrı́a ser
neutralizada por anticuerpos en el plasma de otros de los donantes
que contribuye al pool. Además, teniendo en cuenta el mayor riesgo
de infecciones asociadas a la transfusión de primeros donantes,
solo deberı́an aceptarse segundas o posteriores donaciones para
preparar combinaciones de plaquetas de BC.
Es difı́cil determinar el impacto relativo de todos estos aspectos
en el riesgo final. Se han llevado a cabo modelos matemáticos
evaluando el riesgo de infecciones transmitidas por la transfusión29,30. Desafortunadamente, hasta el momento no se han
llevado a cabo estudios epidemiológicos o ensayos clı́nicos que
hayan analizado los riesgos de infecciones virales o de nuevos
El TRALI es debido generalmente a la infusión de anticuerpos
contra leucocitos en los hemoderivados procedentes de un donante
sensibilizado como consecuencia de transfusión o a embarazo, a un
receptor que, por lo general, presenta un estado crı́tico20. Debido a
su morbimortalidad, TRALI es una de las complicaciones más serias
relacionadas con la transfusión. Hasta el momento, como en el
apartado anterior, todos los datos disponibles que comparan el
riesgo de TRALI entre CP de sangre total frente a aféresis están
realizados en productos derivados de PRP, y no de BC, no
mostrando diferencia en su incidencia en relación con el tipo de
producto4.
?
Daño pulmonar agudo asociado a la transfusión
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patógenos emergentes entre ambos productos. Estos microorganismos podrı́an transmitirse por el aire, alimentos o por vectores, y
no ser sencillo no solo su detección biológica, sino tampoco la
polı́tica de selección de donantes.
Cada vez existe una mayor preocupación acerca de patógenos
emergentes transmitidos por la sangre, como los virus del Dengue,
Chikungunya, del Oeste del Nilo, u otros agentes como la
Leishmania, el plasmodio o la Trypanosoma31. Aunque nos pueda
parecer un problema lejano, no lo es tanto considerando no solo la
inmigración, sino que cada vez se viaja más, y también a zonas del
mundo con un mayor riesgo sanitario. Ası́, aproximadamente 1
millón de españoles viaja cada año a zonas tropicales o
subtropicales, de los cuales solo el 25% recibe profilaxis adecuada,
lo que contribuye a la transmisión de este tipo de enfermedades
por las transfusiones32.
El debate acerca de la introducción de tecnologı́as de reducción
de patógenos para CP apunta a la preocupación por parte de los
reguladores y de las personas implicadas en medicina transfusional acerca de infecciones por patógenos emergentes transmitidas
por la transfusión (PETT). Esta tecnologı́a, sin embargo, podrı́a no
ser efectiva contra agentes infecciosos, fundamentalmente priones. Los estudios clı́nicos hasta el momento son contradictorios
respecto a la efectividad clı́nica y hemostática: existen estudios
que sugieren que su eficacia clı́nica es menor (menores CCI y mayor
sangrado)33,34 mientras que otros no observan diferencias
significativas en funcionalidad in vitro o eficacia hemostática in
vivo entre plaquetas tratadas y no tratadas35,36.
Ası́ pues, respecto al riesgo de infecciones por PETT, existe una
preocupación realista y apropiada. Algunos paı́ses europeos, como
Suiza, han optado por la introducción de técnicas de reducción de
patógenos en CP de sangre total frente a plaquetas de aféresis. En la
actualidad, respecto al riesgo de transmisión del virus de la
inmunodeficiencia humana (VIH), virus de la hepatitis C (VHC) y
virus de la hepatitis B (VHB), aunque éste ha disminuido
drásticamente en los últimos 20 años, todavı́a el empleo de un
inventario exclusivamente de plaquetas de aféresis es una medida
de salud pública acertada que se asocia a una reducción de 2
veces el riesgo de transmisión de estos patógenos.
Perspectiva del donante
Los datos de la bibliografı́a son contradictorios acerca de la
incidencia de reacciones adversas en donaciones de sangre total
frente a aféresis de plaquetas37,38. Los datos del último informe de
hemovigilancia de nuestro paı́s no evidencian mayor gravedad en
las donaciones de aféresis, pero sı́ una mayor tasa de notificaciones
en estas últimas respecto a sangre total (150 frente a 23 por cada
10.000 donaciones, respectivamente).
Adicionalmente, la exposición al citrato en los donantes de
plaquetas por aféresis puede condicionar efectos metabólicos y
endocrinos. Ası́, la realización de plaquetaféresis induce un
incremento en la hormona paratiroidea, osteocalcina y 1,25dihidroxivitamina D, una mayor excreción urinaria de Ca, Mg, K y
Na, y un descenso de fosfatasa alcalina, parámetros poco
modificables por la ingesta de suplementos de calcio39. Además,
una tercera parte de los donantes habituales de plaquetas por
aféresis, y no los donantes esporádicos, muestran signos radiológicos de osteopenia40. El citrato también se asocial con la reducción
de tensión arterial41, y la prolongación del intervalo QTc durante la
aféresis de plaquetas es un hallazgo habitual. La donación de
plaquetas por aféresis también resulta en incrementos temporales
de trombopoyetina42, hormona que induce expresión de selectina
P, formaciones de complejos leucocito-plaqueta e incremento de
adhesividad plaquetaria bajo flujo43,44, aunque se desconoce si esto
puede condicionar un estado protrombótico.
531
El di(2-etilhexil) ftalato (DEHP) se encuentra en muchos
plásticos, incluidos los sistemas de aféresis. En animales, los
valores altos de DEHP ocasionan daño hepático y renal y afectan la
capacidad reproductiva45. Se han descrito incrementos de hasta el
232% de DEHP sérico comparados con los valores basales en el dı́a
de la aféresis46, alcanzándose concentraciones plasmáticas que
llegan a exceder la dosis de referencia de la Agencia de Protección
del Medio Ambiente de EE.UU. (EPA), y la exposición diaria
tolerable en la UE47.
Ası́ pues, en términos de seguridad del donante, no existen
argumentos a favor de la promoción de la donación mediante
aféresis si existe otro componente disponible, como son los CP
obtenidos con el procesamiento de donaciones de sangre total.
Coste-efectividad
Consideremos que en España en el año 2009 se produjeron
aproximadamente entre 175.000-220.000 combinaciones de
plaquetas (de 5 o 4 unidades, respectivamente) y obtenido unas
43.000 unidades de plaquetaféresis durante dicho perı́odo.
Teniendo en cuenta los precios públicos del Ministerio de Defensa
(B.O.E. 27/06/2009), de 162 s para combinaciones de plaquetas
filtradas y de 280 s para concentrados de plaquetas de aféresis, la
utilización exclusiva de productos de donante único respecto a
combinaciones de BC supondrı́a para el paı́s un gasto adicional de
más de 20 millones de euros en dicho año.
La forma más aceptada de realizar el análisis coste-efectividad
es mediante el estudio del coste de años de vida logrados ajustados
a calidad, en función de la estrategia terapéutica empleada. Los
trabajos han mostrado que la ganancia de un año de vida ajustado a
calidad (QALY) utilizando CP de donante único respecto a
combinaciones de CP de sangre total se situarı́a en torno a los
470.000 s en el contexto de enfermos hematológicos, y de 200.000
s en pacientes sometidos a cirugı́a cardiaca48.
En los paı́ses desarrollados una modalidad terapéutica se
considera coste-efectiva si el QALY gracias a aplicar el tratamiento
no supera los 50.000 s49. Sin embargo, en medicina transfusional
se aceptan ratios coste-efectividad relativamente altas50,51. Ası́,
trabajos previos han mostrado que las intervenciones dirigidas a la
mejora de la seguridad transfusional han tenido una mediana de
incremento en la ratio coste-efectividad (IRCE) de 355.000 $ por
QALY, con intervalos de valores que oscilan entre reducción de
coste hasta incrementos de 8,7 millones $ por QALY52.
En la actualidad, las causas principales de mortalidad asociadas
a transfusión de sangre alogénica por orden de frecuencia son el
TRALI, reacciones transfusionales hemolı́ticas ocasionadas o no por
incompatibilidad ABO, y la sepsis asociada a la transfusión,
mientras que solo un 15% de los fallecimientos relacionados con
la transfusión se deben a enfermedades infecciosas28. Sin embargo,
este panorama puede variar con la aparición de nuevos PETT para
los que el cribado de donantes puede ser ineficaz o para los que no
existan tests de detección. En este sentido, debe evaluarse qué es
más ventajoso desde el punto de vista de la protección de
receptores de transfusiones de plaquetas, si los concentrados
procedentes de donante único, o los sistemas de reducción de
patógenos.
El análisis del coste-efectividad de la transfusión de componentes plaquetarios sometidos a inactivación de patógenos, en
relación con los virus y bacterias conocidos, ha mostrado un coste
neto por año de vida ganado de 554.000 s (678.600 s en pacientes
hematológicos)53. Sin embargo, si se considera el riesgo de PETT
para los que no existieran estrategias de cribado o tests de
detección, en la población hematológica el coste del QALY serı́a
de 266.500 s en el caso de inactivación de combinaciones de CP,
y de 1.525.000 s en el caso de inactivación de plaquetaféresis54.
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532
Ası́ pues, el coste-efectividad de CP de sangre total sometidos a
inactivación de patógenos es comparable al del empleo de CP de
donante único en el momento actual. En el caso de patógenos
emergentes, sin embargo, para los que no existiesen estrategias de
cribado aplicables, posiblemente fuese forzosa la inactivación de
todos los productos plaquetarios, siendo relativamente más costeefectivo el empleo de CP de sangre total tratados que de aféresis de
donante único.
Conclusiones
En la actualidad, de todas las ventajas que han sido atribuidas a
los CP de aféresis, la única que permanece vigente es la reducción
del riesgo infeccioso por la exposición a un menor número de
donantes. Sin embargo, su impacto es sensiblemente menor que
hace años debido a la dramática reducción que se ha producido en
la tasa de transmisión de los virus conocidos. En el caso de que se
generalizara la tecnologı́a de reducción de patógenos, su impacto
probablemente se limitarı́a al riesgo de transmisión de priones.
Desde el punto de vista de las reacciones transfusionales en el
receptor, los CP de aféresis no muestran superioridad respecto a
combinaciones de BC, y desde la perspectiva del donante, este tipo
de donación es desfavorable respecto a la de sangre total.
Finalmente, el empleo de CP de donante único muestra un
coste-efectividad que es comparable al de otras intervenciones
dirigidas a la mejora de la seguridad transfusional, aunque en el
caso de nuevos patógenos emergentes, posiblemente la adopción
de tecnologı́as de inactivación serı́a una estrategia más adecuada
contra el riesgo de transmisión de los nuevos agentes infecciosos.
Financiación
Nuestro Grupo de investigación está financiado por el Fondo de
Investigaciones Sanitarias-Instituto de Salud Carlos III y Fondos
Feder (PI10/02594), Fundación Séneca (04515/GERM/06, 03116/
PI/05), y Red RECAVA (RD06/0014/0039).
Conflicto de intereses
Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
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