SENTARSE A LA MESA ¿Qué Es Sentarse A La Mesa? Existen

ACERCARNOS A LA MESA ORDENADAMENTE- A.A.
SENTARSE A LA MESA
Éxodo 40:4 Meterás la mesa y la pondrás en orden; meterás
también el candelero y encenderás sus lámparas,
Es necesario saber sentarse a la mesa y no se refiere a cualquier mesa sino
a la del Señor.
¿Qué Es Sentarse A La Mesa?
Es participar de la Santa Cena; del vino y el pan y que nuestra vida esté en
orden a la hora de hacerlo.
ESTAR EN ORDEN NO SIGNIFICA ARREGLAR UNA MESA DE MANERA
NATURAL, SINO ORDENAR NUESTRAS VIDAS DE MANERA INTERNA.
Existen Algunos Principios A Cumplir Para Acercarnos A La
Mesa Ordenadamente:
ACERCARSE CON HUMILDAD
ACERCARSE SIN IRA
VALORAR LO QUE SE SIRVE ENCIMA DE LA MESA
ACERCARSE CONFIADAMENTE
ACERCARSE CON HUMILDAD
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1Samuel 16:11 Entonces dijo Samuel a Isaí: ¿Son éstos todos tus
hijos? Y él respondió: Queda aún el menor, que apacienta las
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ovejas. Y dijo Samuel a Isaí: Envía por él, porque no nos
sentaremos a la mesa hasta que él venga aquí.
Samuel había ido a la casa de Isaí a ungir a un rey, pero el menor no se
encontraba en ese momento. El Señor no comenzará a obrar hasta que el
menor se presente a la mesa.
¿Qué Entendemos Cuando Nos Hablan Del “Menor”?
Representa acercarnos a la mesa reconociendo nuestra condición y para ello
es fundamental la humildad.
 El profeta Samuel no podía comenzar con el acto profético hasta que no
viniese el menor.
EL MENOR DELANTE DE DIOS FUE EL MÁS GRANDE DELANTE DE TODA LA
NACIÓN DE ISRAEL.
EN EL MOMENTO DE SENTARNOS A LA MESA HAY ALGO QUE NO NOS PUEDE
FALTAR: HUMILDAD.
Sentarnos humildemente representa dejarnos partir el pan, la palabra,
dejarnos enseñar, direccionar, aconsejar, señalar el destino, marcar
una meta, entendiendo que no somos enseñados según sabiduría humana,
sino según conceptos escriturales en donde están plasmados la voluntad
de Dios.
 En la Santa Cena el Señor habla y debe encontrar en nosotros un
corazón correcto, no un corazón altivo, poco hambriento, una mente
llena de fortalezas y argumentos que impidan que el conocimiento de
Dios sea establecido, pues todo esto representaría sentarnos a la
mesa de manera desordenada.
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ACERCARSE SIN IRA
1Samuel 20:34 Y se levantó Jonatán de la mesa con exaltada ira,
y no comió pan el segundo día de la nueva luna; porque tenía
dolor a causa de David, porque su padre le había afrentado.
A la mesa no deberíamos sentarnos con ira.
¿Qué Es Ira?
ENOJO. Cualquier formato de enojo lo tenemos que desechar porque Satanás,
a través del mismo, querrá robarnos momentos de bendición.
ES INDISPENSABLE DESECHAR LA IRA A LA HORA DE SENTARNOS A LA MESA
AUN CUANDO EXISTIERAN MUCHOS MOTIVOS QUE SE LEVANTEN PARA
PROVOCARLO.
La ira que se despertó en Jonatán fue ocasionado por un incidente familiar
en el vínculo padre e hijo, pero el vínculo en el cual es más frecuente que
ocurran contiendas es en el ámbito del matrimonio, pero la palabra nos
enseña claramente cuál debe ser nuestro actuar: “Airaos, pero no pequéis;
no se ponga el sol sobre vuestro enojo” (Efesios 4:26)
VALORAR LO QUE SE SIRVE EN LA MESA
Mateo 15:26-27 Respondiendo él, dijo: No está bien tomar el pan
de los hijos, y echarlo a los perrillos.
Y ella dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos comen de las migajas
que caen de la mesa de sus amos.
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Esta mujer cananea tenía una hija atormentada por los demonios y clamó a
Jesús que la sanara, pero Él le respondió que el pan era sólo para los hijos.
Para Jesús ella no era digna de sentarse a la mesa, sin embargo la mujer no
se conformó con esto y le contestó: “aun los perrillos comen de las migajas
que caen de la mesa de sus amos” Ella valoró lo que había encima de la
mesa que son el vino y el pan: el Cuerpo y la Sangre de nuestro Señor
Jesucristo.
UNA DE LAS FORMAS DE ORDENAR LA MESA SERÍA VALORAR LO QUE SE ESTÁ
SIRVIENDO EN ELLA.
ACERCARSE CONFIADAMENTE
A muchas personas no les han enseñado a acercarse a la mesa de manera
confiada y como consecuencia no pueden desarrollar el carácter, el
potencial que tienen dentro.
Jueces 1:7 Entonces dijo Adoni-bezec: Setenta reyes, cortados los
pulgares de sus manos y de sus pies, recogían las migajas debajo
de mi mesa; como yo hice, así me ha pagado Dios. Y le llevaron a
Jerusalén, donde murió.
Sabemos que el lugar para estar en la mesa no es debajo, sino sentado en
una silla, alrededor de ella.
No se puede comer debajo de la mesa ¿por qué comían de esta manera?
Porque había algo que les impedía acercarse a la mesa con seguridad.
Salmos 128:3 Tu mujer será como vid que lleva fruto a los lados de
tu casa;
Tus hijos como plantas de olivo alrededor de tu mesa.
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Es importante acercarnos a la mesa del Señor confiadamente; no sentirnos
inferiores, lejanos, apocados, ni señalados, sino seguros de lo que somos en
Dios: HIJOS.
NO PODEMOS ACERCARNOS A LA MESA CON NINGÚN SENTIMIENTO DE
INSEGURIDAD.
DELANTE DE DIOS ES CORRECTO SENTIRNOS LOS MÁS PEQUEÑOS, PERO
DELANTE DEL SISTEMA NOS DEBEMOS VER GRANDES.
Comer debajo de la mesa está relacionado con una expresión utilizada en la
biblia: sentirse indigno de sentarse a ella.
1Corintios 11:27 De manera que cualquiera que comiere este pan
o bebiere esta copa del Señor indignamente, será culpado del
cuerpo y de la sangre del Señor.
Ser indigno significa no ser merecedor, pero por la gracia de Dios
deberíamos sentirnos dignos de sentarnos a la mesa y si hubiera algo que
nos hiciera sentir lo contrario, arreglarlo a como diera lugar.
2Samuel 9:7-8 Y le dijo David: No tengas temor, porque yo a la
verdad haré contigo misericordia por amor de Jonatán tu padre, y
te devolveré todas las tierras de Saúl tu padre; y tú comerás
siempre a mi mesa.
Y él inclinándose, dijo: ¿Quién es tu siervo, para que mires a un
perro muerto como yo?
Mefi-boset se sentía un perro muerto y esa es una forma en la cual no
podemos acercarnos a la mesa, por esa razón le dijo el Señor a la mujer
cananea que el pan no era para los perros.
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NO PODEMOS SENTIRNOS COMO PERROS SINO TENER SEGURIDAD DE LO QUE
SOMOS PARA DIOS; Y PARA ÉL SOMOS MUY VALIOSOS.
 Muchas personas le dan mayor importancia al valor que le dé la gente al
que Dios le da.
Los hermanos de José no daban nada por él, lo tuvieron en poco, sin embargo
los ismaelitas pagaron un alto precio para comprarlo; los del mundo
estuvieron dispuestos a pagar un mayor precio que sus propios
hermanos, pero cuando se reencontraron en Egipto José les dijo: “Así, pues,
no me enviasteis acá vosotros, sino Dios, que me ha puesto por padre
de Faraón y por señor de toda su casa, y por gobernador en toda la
tierra de Egipto” (Génesis 45:8) José tenía seguridad acerca de quién era
delante de Dios y cuanto valía.
EL PLAN DE DIOS ES LEVANTARNOS, RESTAURARNOS, POSICIONARNOS,
PERO SI NOS SENTIMOS MENOS, INFERIORES, QUE NO SOMOS TOMADOS EN
CUENTA, ESTO IMPEDIRÁ QUE EL SEÑOR PUEDA OBRAR EN NOSOTROS.
 Todas las personas que llegan al Señor tienen diferentes oportunidades
para servir dentro del reino, pero si no terminan de ver lo que son, el
potencial que tienen dentro no podrá ser dado a luz.
 Debemos aprender a vernos como Dios nos ve, a llamar las cosas
que no son como si lo fueran, vernos terminados, pues el Señor no nos
llamó para estar siempre en la misma condición sino para ordenarnos y
que el día de mañana pueda utilizarnos en su obra.
2Samuel 9:7-8 Y le dijo David: No tengas temor, porque yo a la
verdad haré contigo misericordia por amor de Jonatán tu padre, y
te devolveré todas las tierras de Saúl tu padre; y tú comerás
siempre a mi mesa.
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El Señor nos ha llamado para hacer misericordia, sentarnos a la mesa y
devolvernos nuestra herencia, pero primeramente debemos desechar los
miedos, las inseguridades, pues la inseguridad es contraria a la fe y sin fe no
podemos agradar a Dios.
LA FE ES LA CERTEZA DE LO QUE SE ESPERA, QUE HOY TAL VEZ NOS
ENCONTREMOS EN UNA CONDICIÓN PERO QUE NOS COMENCEMOS A VER
TERMINADOS, QUE SEPAMOS QUE DIOS NOS UTILIZARÁ MAÑANA.
 Las inseguridades impedirán que lleguemos a ser lo que Dios ha
soñado que seamos, pero cuando sabemos lo que tenemos por dentro
abriremos la boca y marcaremos a hombres para siempre.
Cuando impartimos la palabra, ésta debe ser como un martillo que está
quebrantando la roca, demoliendo las estructuras, las fortalezas que se
levantan, pero es necesario estar seguros de lo que tenemos en nuestras
manos para golpear con fuerza.
2Reyes 13:18-19 Y le volvió a decir: Toma las saetas. Y luego que
el rey de Israel las hubo tomado, le dijo: Golpea la tierra. Y él la
golpeó tres veces, y se detuvo.
Entonces el varón de Dios, enojado contra él, le dijo: Al dar cinco
o seis golpes, hubieras derrotado a Siria hasta no quedar ninguno;
pero ahora sólo tres veces derrotarás a Siria.
Este rey golpeó la tierra sólo tres veces, pero Eliseo le dijo que si hubiera
golpeado más veces habría derrotado al enemigo.
A VECES NO GOLPEAMOS TANTAS VECES COMO ES NECESARIO PORQUE
TENEMOS TEMOR, PERO TENEMOS QUE GOLPEAR CON LA PALABRA SIN
MIEDOS, PORQUE LO ÚNICO QUE OCURRIRÁ SERÁ QUE VENCEREMOS.
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ACERCARNOS A LA MESA ORDENADAMENTE- A.A.
2Reyes 6:16-17 Él le dijo: No tengas miedo, porque más son los
que están con nosotros que los que están con ellos.
Y oró Eliseo, y dijo: Te ruego, oh Jehová, que abras sus ojos para
que vea. Entonces Jehová abrió los ojos del criado, y miró; y he
aquí que el monte estaba lleno de gente de a caballo, y de carros
de fuego alrededor de Eliseo.
Eliseo estaba rodeado por el ejército sirio y su criado tuvo temor y el profeta
tuvo que pedirle a Dios que abriera sus ojos para que se diera cuenta que
eran más los que estaban con ellos que los que estaban en contra.
 Es importante orar correctamente para poder ver lo que está
pasando en nuestro entorno, pues muchos están atentos a lo que
estamos viviendo; ya sea que cometamos un error o que avancemos
para poder seguirnos.
Tenemos que preparar nuestro corazón para acercarnos a la mesa
confiadamente, derribar todo tipo de inseguridad que nos impida
ejecutar aquello que estamos destinados a hacer como hombres de Dios
en la tierra. La seguridad debe ser un sello en nosotros.
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