El Tabaquismo.

El Tabaquismo.
Dr. Eduardo Kalina (autor).
La antigüedad del uso del tabaco queda demostrada con el descubrimiento de pipas y
otros receptáculos para tabaco en túmulos arcaicos de Estados Unidos, Perú y México.
Cristóbal Colón vio fumar a los indígenas americanos las hojas secas de la planta, en
caños con forma de pipa. Otros, las enrrollaban y fumaban en ocasiones solemnes para
ratificar un pacto o sellar una amistad con un personaje importante. Francisco
Hernández Toledo llevó la semilla a España en 1510.
La forma habitual de consumir tabaco es fumar cigarros o cigarrillos, absorbiendo el
humo por la boca e introduciéndolo en los pulmones. También se consume en pipa,
hebra, picadura y rapé.
El comienzo del hábito de fumar suele producirse a edades muy tempranas y depende de
factores diversos: desde la facilidad con que se puede procurar un cigarrillo hasta por
saber qué sensaciones provoca. El hábito de fumar es nocivo para la salud del fumador y
para la de los no fumadores afectados por el humo. La aspiración de humo del cigarrillo
por el fumador incorpora al organismo una gran cantidad de sustancias que originan y
desarrollan enfermedades y que afectan en primer lugar al aparato respiratorio y al
sistema circulatorio. El humo generado por la combustión del tabaco ingresa al
organismo y provoca diversas lesiones en el sistema respiratorio. Irritan las paredes de
los bronquios (provocando bronquitis). LA acumulación de sus productos tóxicos puede
generar cáncer de pulmón.
En estudios realizados en base a estadísticas en relación de cantidad de tabaco
consumido e incidencia de ciertas enfermedades se llegaron a las siguientes
conclusiones:
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La relación entre consumo de tabaco y mortalidad precoz resulta evidente no
sólo en el caso de tumores pulmonares sino también con otras afecciones
pulmonares como bronquitis crónica y enfisema y otras cardiovasculares.
Los que empezaron a fumar antes de los 20 años tienen tasas de mortalidad
sustancialmente mayores que los que empezaron después de los 25 años. Los
riesgos de mortalidad aumentan con la duración del hábito y son mayores en
aquellos que dejaron de fumar después de los 55 años que en los que dejaron a
una edad más temprana.
En los ambientes cargados de humo, se puede experimentar irritación de ojos, nariz y
oídos, náuseas y dolor de cabeza, malestar general, etc.
El fumador voluntario "hace" cáncer de boca, garganta, laringe, pulmón, esófago, riñón
y páncreas, en tanto que el involuntario es más proclive a cáncer de cerebro, pulmón y
tiroides. Mientras que en los hombres el consumo va disminuyendo, aumenta día a día
en las mujeres. Las estadísticas indican que el aumento de consumo es mayor cuanto
menor en el nivel socioeconómico. Los hijos de mujeres embarazadas pesan al nacer
200 gramos menos que los de mujeres no fumadoras, el tamaño del cráneo y la caja
torácica del bebé también son menores. Entre las mujeres fumadoras hay mayor
frecuencia de partos prematuros.
De acuerdo con las Encuestas Nacionales ( ENA,1993), se considera que el
25% de la población de 12 a 65 años de México, son fumadores activos.. mientras que
en Nuevo León la prevalencia de fumadores en este rango de edad es 26.79%, es decir
que existirían en nuestra comunidad mas de 700,000 fumadores activos. Fumador activo
es aquella persona que ha fumado mas de 100 cigarrillos en su vida y fuma actualmente:
en base a este punto de referencia se ha considerado la valoración de ex- fumadores,
personas que han fumado mas de la cantidad mencionada pero que han abandonado el
consumo de tabaco; las Encuestas han revelado que un 22.2% de la población del
Estado, de 12 a 65 años, son ex-fumadores.
Los problemas derivados del tabaquismo no se limitan únicamente a los consumidores;
se han confirmado científicamente los estragos que se provocan en la población que
convive con los fumadores, a quienes se considera "fumadores pasivos"; en nuestro
Estado el 32.6% de la población se consideró fumador pasivo en las últimas Encuestas
Nacionales. Un aspecto importante es 1a relación que existe entre la secuencia de
consumo, la cantidad y el tiempo de impacto del tabaco en los individuos; por esto es
importante subrayar que la edad de inicio en consumo de estos productos oscila en mas
del 55% de los fumadores entre los 15 y los 18 años, casi el 18% inician entre los 11 y
los 14 años y casi 20% inician entre los 19 y los 24 años. Es alarmante que mas del 90%
inicien antes de los 24 años de edad, ya que es el grueso de nuestra población. Está
demostrado que la cantidad de cigarrillos guarda una proporción directa con la
probabilidad de padecer enfermedades; se considera que el solo hecho de consumir
tabaco es ya en si un riesgo muy importante, por ejemplo: El fumador leve ( consume
menos de 5 cigarrillos en promedio al día tiene hasta 15 veces mayor probabilidad de
padecer enfermedades malignas respiratorias que la población no fumadora; el fumador
moderado ( fuma de 6 a 15 cigarrillos promedio diario ) incrementa hasta 40 veces las
probabilidades antes mencionadas; y el fumador severo o dependiente fuma mas de 16
cigarrillos promedio diario') las incrementa hasta 60 veces.
¿QUÉ IMPACTO TIENE EN NUESTRA POBLACIÓN?
El tabaco impacta además en la economía de la sociedad; provoca cuantiosos gastos a
diferentes niveles de la comunidad; por ejemplo, los gastos elevados que se tienen que
efectuar para otorgar la atención a las personas con enfermedades producidas por el
consumo de cigarrillos; padecimientos que requieren de tratamientos prolongados,
métodos de laboratorio y medicamentos muy costosos.
En Nuevo León, cada año mueren mas de 6,500 personas a causa de enfermedades
relacionadas al uso de cigarrillos, mas adelante se mencionaran la principales; por lo
pronto habría que resaltar que esto representa casi 1s mitad de las muertes en el Estado.
Es muy importante reflexionar sobre lo anterior ya que la cantidad de fumadores en
nuestro Estado es elevada, y se estima que si no se detiene el consumo, en los siguientes
años habrá que esperar un incremento importante de estas enfermedades ya que son
cada vez mas los adolescentes, jóvenes y mujeres que se inician en el tabaquismo.
Fuente: http://www.fedesoft.com.ar/tabaquis.htm
Fecha de consulta: 26 de febrero de 2005.