Estudios actuales de la lengua española y la literatura iberoamericana... Sanguínova F. (Universidad MGIMO, Rusia) El lenguaje de la crisis: los rasgos principales y cambio de objetivos Язык эпохи кризиса: основные характеристики и новые цели Статья посвящена исследованию изменений испанского языка в период мирового финансового кризиса на примере испанских СМИ. Основное внимание автором уделяется статьям экономического содержания в печатных изданиях. Выявляются основные способы терминообразования и объясняются причины появления неологизмов. Кроме того, на основе проведённого анализа нового пласта лексики автором отражаются цели, для достижения которых в социальном и политическом дискурсе используются те или иные языковые средства. La relación de la lengua con la economía cada vez está suscitando un mayor interés debido a las necesidades de la sociedad del conocimiento en que vivimos, caracterizada por un aumento constante del volumen de datos, de la información y del conocimiento. Los estudios sobre el valor económico de la lengua reconocen que la externalidad positiva de compartir una lengua, entendida como instrumento de comunicación e intercomprensión, refuerza su valor y su impacto en los intercambios con el exterior. Actualmente una de las realidades que influye más en la lengua como tal, y en el lenguaje económico es la crisis que afectó a casi todos los países del mundo. Cada vez que nos referimos al mal estado en el que se encuentra un sistema, nos referimos a un estado de “crisis”, hablando en particular de la economía, se utiliza el término para hacer referencia al punto en que cesa bruscamente la expansion económica o a una situación de aguda recesión. A veces en nuestra vida cotidiana es difícil percibir la influencia directa que tienen las estructuras políticas y las dinámicas económicas, pero estas siempre van a tener repercusión en ámbitos sociales, como la lengua. ¿Cómo influye la situación que vivimos desde hace años en el modo en que hablamos? ¿Y cómo influye nuestra manera de hablar en el modo en que la vivimos? La crisis es una buena oportunidad para demostrar que el lenguaje no es ajeno a la realidad de los que lo emplean, sino que está en constante ebullición y se adapta a las necesidades expresivas de sus hablantes». A menudo, los términos que ahora afloran en las conversaciones cotidianas habían estado escondidos para el gran público en 111 Институт международных исследований МГИМО–Университет lenguaje especializado en la economía o el derecho (dación en pago, prima de riesgo, deuda soberana, rating, recesión…) La mayor influencia de la crisis se observa sobre todo en el lenguaje de los medios de comunicación, sobre todo en los apartados económicos. Es aquí donde aparecen nuevas tendencias lingüísticas, surgidas gracias a la crisis y que después se extienden a la lengua cotidiana. Además hoy en día la lengua se convierte en una herramienta poderosa en manos de los polίticos para conseguir diferentes objetivos, tales como: ocultar, tanquilizar, incementar su número de votos, etc. Y la función más importante del periodista es hacer el mensaje comprensible y adecuado a la realidad. El lenguaje de la economía no es sencillo: para empezar, esta ciencia trabaja con modelos parciales que no siempre son generalizables y es prácticamente imposible hacer predicciones. Además, la jerga económica, con sus tecnicismos y extranjerismos, no es la única que interviene a la hora de conformar el mensaje económico, hay otros códigos, como el institucional y el europeo, que vienen a entremezclarse y a añadir complejidad. Esta amalgama de códigos tan complicada se emplea, sin embargo, porque de lo que se trata es de asegurar la integridad del mensaje, de estar diciendo lo que se quiere decir. La clave está en compartir, desde las instituciones, los códigos para que los medios de comunicación, que actúan como interlocutores, puedan entenderlo. Los propios periodistas a menudo no entienden los procesos económicos y financieros, por eso es útil que el experto en economía participe en el debate público. Los economistas tienen que dar más información a los ciudadanos. En lo que se refiere al ámbito puramente lingüístico podemos observer lo siguiente: —creaciones léxicas (austericidio, copago, repago), —préstamos (escrache, corralito, rating, troika). Hace falta destacar un creciente número de los préstamos de Latinoamérica. Algunos términos han ampliado su significado original, como desahucio, que inicialmente hacía referencia solo a los casos de desalojo de un inquilino y no al de un propietario en apuros. O, por ejemplo, el término corralito.En Argentina se denominó corralito a la restricción de la libre disposición de dinero en efectivo de plazos fijos, cuentas corrientes y cajas de ahorros impuesta por el gobierno en 2001, y se prolongó por casi un año cuando se anunció oficialmente la liberación de los depósitos retenidos. El término fue acuñado por el periodista económico argentino Antonio Laje en 2001, cuando tenía una columna económica. Posteriormente este término trascendió a todos los países de habla castellana. Otros términos han pasado, en ciertos contextos, a tener significados muy concretos (indignados, como nombre de un colectivo y un movimiento; marea, para referirse a cierto tipo de protesta). Y no faltan los que han viajado desde lejos para sembrar la polémica, como escrache, 112 Estudios actuales de la lengua española y la literatura iberoamericana... una palabra usual en el español de Argentina y Uruguay y cuyo desembarco en España, de la mano de los activistas contra los desahucios, ha sido y es objeto de discusiones que van más allá de lo lingüístico. Escrache apareció en Argentina en 1995 para definir manifestaciones frente a las casas de los que apoyaban la dictadura. Y empezó a usarse en España en 2013 a raíz de las acciones protagonizadas por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, en las que se hicieron manifestaciones contra diversos políticos del Partido Popular. —metáforas que nos sirven para entender realidades abstractas a partir de otras que conocemos con mayor facilidad. Las metáforas explican la realidad, pero ocultan una parte de ella, hay que ver con qué intención se emplean y qué componente emotivo conllevan. Las metáforas sobre la crisis recurren a todo tipo de imágenes. Así, la crisis es una fuerza natural (tormenta, tsunami financiero, mareas blancas o verdes…), un ser vivo (la crisis amenaza, sigue un proceso, crece…), un espacio cerrado (del que se entra y del que se espera salir) o una enfermedad (que se diagnostica y para la que se aplican remedies: Los Gobiernos, en vez de comportarse como médicos que buscan recuperar las constantes vitales de una economía enferma, actúan como sus enterradores.). O hasta un animal bravo frente al que otros nos ayudan (Alemania echa un capote a España ante la crisis de deuda). —Se emplea mucho oxímoron (crecimiento negativo, destrucción creativa) —Una superabundancia de siglas (FLA (Fondo de Liquidez Autonómico), PAH (La Plataforma de Afectados por la Hipoteca), etc.) —Otro de los recursos más empleados en el lenguaje de la crisis son los sustitutos eufemísticos, la utilización de expresiones que se creen menos ofensivas que la forma a la que sustituyen y que sirven para proteger la propia imagen (reformas o ajustes en lugar de recortes; planes de saneamiento y viabilidad o redimensionamiento de la red para obviar despidos o reducción de plantilla; devaluación competitiva de los salarios por bajadas salariales; crecimiento negativo por recesión, o ticket moderador del gasto en vez de copago, flexibilización del mercado laboral por despido libre). El uso de los sustitutos eufemísticos en el terreno económico puede contribuir a que determinadas decisiones, difíciles de justificar, queden disimuladas. Uno de los procedimientos más utilizados es el uso de unos términos más genéricos que otros, a los que sustituyen, pues esto contribuye a disminuir su concreción y, por tanto, su claridad. Uno d los términos que los políticos evitan cuidadosamente y para el que buscan sin descanso alternativas menos dolorosas es subida de impuestos. Recargo temporal de la solidaridad, modulación del esfuerzo fiscal, novedad tributaria y cambios en la ponderación fiscal son sólo algunas de las que han podido escucharse en los últimos tiempos. 113 Институт международных исследований МГИМО–Университет —Se ha recurrido además a técnicas propias de la propaganda (la repetición y la persuasión), a los llamados factoides (La culpa es del anterior Gobierno), las tautologías (Haremos lo que tenemos que hacer). Para los profesionales de la comunicación, es innegable que la crisis nos ha dado un vocabulario muy rico, pero hay que estar alerta: hay palabras que tienen la vocación de engañar y es obligación del periodista detectarlas. Muchos supuestos expertos no lo son en realidad y muchos de los que verdaderamente lo son, sencillamente, no supieron ver la crisis. En las redacciones se necesita, por supuesto, al experto en economía, pero la democracia consiste en poder pedirles responsabilidades tanto a los expertos como a los gobiernos. En ocasiones la economía se percibe, más que como una ciencia, como un lugar donde se enfrentan las ideologías. Los medios son quienes tienen la obligación de hablar claro y de llamar a las cosas por su nombre. Nunca como hasta ahora ha sido tan demandada por la ciudadanía una explicación de lo que está pasando. 1. 2. 3. 4. Literatura Alarcón Alarcón, A. (2004), Economía, política e idiomas. Intercambio lingüístico y sus efectos sobre la eficiencia y la distribución de los recursos, Consejo Económico y Social, Colección Estudios, Madrid González Cueto, F. y A. Moreno Santamaría (2001), «La lengua española y la cultura en español en Internet. Aproximación a su estudio», Economía Industrial, núm. 338 http://elpais.com/ http://www.elmundo.es/ Shaliukhina A. (Universidad MGIMO, Rusia) Empatía en el idioma español Эмпатия в испанском языке В статье дается определение термина «эмпатия». Представлен краткий обзор исследований, посвященным этому явлению. В статье также описаны вербальные и невербальные способы проявления эмпатии и приведены некоторые примеры выражения эмпатии в испанском языке. La palabra empatía proviene etimológicamente de la voz griega ∏αθεûv, epathón, sentir, y del prefijo εv, preposición inseparable que significa dentro. Fue Tichener quien 114