Cátedra Odontología Social, Sanitaria y Legal Fuente: Artículo publicado en Boletín de SOLP Año 8 Nº 59 julio 2006 Autor: Dr. Dardo A. Pereira DOS SISTEMAS ENFRENTADOS Es cierto que frente a un problema suele haber siempre por lo menos dos opciones para resolverlo, en el ámbito especifico en que nos movemos nosotros, que es la salud tal vez como en ninguna disciplina estas dos visiones son muy claras y en gran medida antagónicas, y expresan mucho mas que dos respuestas, se trata de diferentes concepciones de la salud y en ultima instancia de la sociedad. Existe una visión tradicional, muy difundida, que se desarrolla desde la enfermedad, y que equivocadamente se suele asociar al concepto de salud, pero en realidad esta bastante lejos de dicho noción. Por otro lado existe una corriente de pensamiento que trata de trabajar sobre las cusas que provocan la enfermedad, para asegurar, preservar o mantener el estado de salud. Es por ello que vamos a utilizar para clarificar mejor nuestra exposición la denominación de sistema de enfermedad por un lado y sistema de salud por el otro. Es obvio que nuestro país y gran parte del mundo occidental han privilegiado a lo largo de su historia el sistema de la enfermedad, que al igual que los bomberos llega siempre cuando ya se desato el incendio. Pensamos que esto deberá ser revertido urgentemente para beneficio de nuestra sociedad y de todos nuestros compatriotas, pero también sabemos que las intenciones suelen transitar por un camino que no siempre es coincidente con el de las realizaciones. En economía se sostiene con claridad y se suele hablar clásicamente de los tres grandes factores que generan la actividad económica y la producción. Es así como hablamos en primer lugar del factor trabajo, que constituye el capital humano, luego vienen los recursos naturales, que es el capital físico, y luego los recursos económicos, que constituyen el capital financiero. Hoy las nuevas tendencias sociales le han incorporado a estos tres clásicos factores, uno muy importante para los tiempos que corren que es el capital social y que no es otra cosa que tratar de concebir una sociedad mucho mas ética, mas transparente, mas confiable y menos clientelistica y asistencialista de la que existe. Para llegar a ese capital social se necesita en primer lugar de la confianza en las relaciones interpersonales, los valores éticos positivos que deberán tener los ciudadanos, la capacidad para trabajar juntos, y por ultimo la conciencia en la defensa de los valores republicanos y de Página 1 de 3 Cátedra Odontología Social, Sanitaria y Legal Fuente: Artículo publicado en Boletín de SOLP Año 8 Nº 59 julio 2006 Autor: Dr. Dardo A. Pereira los bienes públicos. Se insiste en estos casos que si se logran estos valores la economía crece mucho más que lo habitual, es decir que crece más que si lo hiciera únicamente con los otros recursos arriba mencionados. Nuestra nación ha tenido desde siempre recursos naturales, ha recuperado en los últimos años su capital financiero, y presenta en líneas generales un fuerte capital humano, que tal vez se haya extraviado un poco en los últimos tiempos, por causas por todos conocidas como son la perdida del rumbo económico, la aparición de las recetas neoliberales del “derrame”, y el alto endeudamiento del estado, con las consiguiente consecuencia de pobreza y desocupación de nuestra gente. Nuestro país tiene que emprender definitivamente el camino que lo lleve a incrementar su capital humano y social, y así podrá resolver además otros problemas que hoy son insolubles para la sociedad como es la criminalidad y la inseguridad creciente. Hay un propósito plausible en este gobierno y en especial en su ministro de educación que es llegar lenta, pero inexorablemente en el 2010 al 6 % del PBI en materia de inversión educativa. Si desterramos definitivamente aquel concepto del neoliberalismo, que los rubros salud y educación constituyen un gasto, cuando en realidad son una inversión, una sana, grata, y lucida inversión para mejorar la sociedad, estaremos en la senda correcta. Esta, al parecer es la única forma valida a futuro de evitar las calamidades como la inseguridad y la alta criminalidad que hoy conviven con nosotros. Debemos pues comenzar a transitar el sendero de la equidad y abandonar las desigualdades que anidan en el cuerpo social, esta es la gran tarea de la hora y si emprendemos este viaje seguramente vamos a concebir un país diferente para ello se deberán establecer prioridades las cuales no serán abandonadas. Y ente ellas estará además de la inversión educativa, reemplazar lenta pero irremediablemente el sistema de la enfermedad por el sistema de la salud. Debemos comenzar a llegar antes que se instale la patología y reconocer que las enfermedades que afectan masivamente a nuestra población son en primer lugar enfermedades sociales, que no se resuelven siempre haciendo mas hospitales, como algunos equivocadamente proponen. Se resuelve en la mayoría de los casos cambiando el modelo, preocupándonos por mejorar nuestro medio ambiente, tan conciente para defenderlo del otro lado de la frontera, pero tan Página 2 de 3 Cátedra Odontología Social, Sanitaria y Legal Fuente: Artículo publicado en Boletín de SOLP Año 8 Nº 59 julio 2006 Autor: Dr. Dardo A. Pereira desatentos para corregirlo límites adentro. Debemos dejar de contaminar los grandes ríos que se transforman en cloacas abiertas por la inacción oficial, la desaprensión de las grandes fábricas y la falta de educación de muchos ciudadanos que depositan sus desechos orgánicos en esas aguas. Pero lo mismo sucede con los efluentes gaseosos y los sólidos, que contaminan y mucho. Con ese triangulo perverso de la inacción oficial, la desaprensión industrial y la falta de educación ciudadana, el cóctel resultante siempre se traduce en más enfermedad. Se deberán erradicar los basurales clandestinos, realizar la red de cloacas de la cual carece el 62 % de los argentinos, e instalar el agua potable que el país requiere para el 33 % de sus castigados ciudadanos. Además de las campañas de vacunación que la legislación prevé, y de ocuparnos cada vez más de las causas de las enfermedades única vía posible para mitigar sus consecuencias. Instalar concepciones preventivas y de atención primaria de la salud. Articular lo público con lo privado, aprovechando por un lado la capacidad ociosa de los establecimientos particulares, y la demanda creciente de atención de nuestra población por el otro. Tal vez si realizamos todo esto, los profesionales de la salud accionaremos de la forma que mas disfrutamos de nuestra profesión, que es convertirnos en agentes propagadores de salud en nuestra gente. Página 3 de 3