Portada - Documentación - Relatos biográficos - Elección del beato Álvaro del Portillo como primer sucesor de san Josemaría Elección del beato Álvaro del Portillo como primer sucesor de san Josemaría Salvador Bernal 13.9.2015 Tres meses después del fallecimiento de San Josemaría Escrivá el 26 de junio de 1975, don Álvaro del Portillo fue elegido para suceder al fundador del Opus Dei. A nadie sorprendió el 15 de septiembre de 1975 la elección unánime de don Álvaro: "Habéis querido -adujo después a los electores- poner el peso de la Obra sobre los hombros de este pobre hombre -sé bien que no valgo nada, que no puedo nada, que no soy nada-, lo habéis hecho porque conocíais que llevaba más tiempo que nadie al lado de nuestro Padre, y buscábais la continuidad. No habéis votado a Álvaro del Portillo, sino que habéis elegido a nuestro Padre". Don Álvaro del Portillo conoció al fundador del Opus Dei en julio de 1935. Desde entonces estuvo siempre junto a él. El mismo día 15, poco antes de la una de la tarde, bajó a la cripta de Santa María de la Paz:: fue su primera visita a la tumba de san Josemaría después de su elección. Al entrar, los que estaban allí se pusieron de pie, respetuosamente. Don Álvaro les señaló con la mano la sepultura. Se arrodilló, besó la losa, y añadió: "Donde hay patrón, no manda marinero. Y el patrón está ahí. Pedidle que sea él quien dirija la Obra desde el Cielo, y que sus sucesores sean solamente instrumentos suyos, y nada más". Monseñor Álvaro del Portillo evocó muchas veces con gran júbilo -usaba esta expresión- el consejo que recibió del Papa Pablo VI, durante la primera audiencia privada tras el fallecimiento de Mons. Escrivá: "después de encarecerme la fidelidad más absoluta a su espíritu, señalaba con seguridad y con gozo: siempre que deba resolver algún asunto, póngase en presencia de Dios y pregúntese: ¿cómo actuaría el Fundador? Y obre en consecuencia". 1/2 Mons. Javier Echevarría, actual Prelado del Opus Dei, resumiría el 23 de marzo de 1994 el trabajo de don Álvaro al frente del Opus Dei: "-Ha sido un período estupendo, una maravillosa aventura, por muchos motivos. Se trataba de recoger el testigo de un santo, y asumió ese reto, si puedo expresarme así, llevándolo adelante con el garbo, el ritmo y la fuerza con que había actuado siempre nuestro Fundador". Salvador Bernal, Recuerdo de Álvaro del Portillo, Prelado del Opus Dei, Rialp, Madrid, 1996, pp. 144 y ss. 2/2 Powered by TCPDF (www.tcpdf.org)