CITAB Centro de Investigaciones Territoriales y Ambientales Bonaerenses 14 /////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////////// > X X Juicio al siglo XX en 1500 palabras El dios “progreso” muta el cosmos lomense POR LUIS OSCAR BUJAN COMP. E ILUST. PAMELA ETCHEVIGARAY Y M. BELEN JONAS RYMAREZUK H emos sintetizado en breves páginas un trabajo anterior de Luis Buján miembro de número del Instituto Histórico Municipal de Lomas de Zamora, profesor muy querido por todo su alumnado y colegas, plantando en cada uno de nosotros una semilla de amor a la historia que él, solo él, en cada clase podía regar mediante su increíble conocimiento y trasmitiéndonos el deber ser del docente. Recibió su titulo de Profesor de Historia en el Instituto Superior del Profesorado Joaquín V. González, Buenos Aires. De esta manera comenzó su brillante carrera docente en diferentes escuelas secundarias para luego destacarse en algunas casas de estudios universitarios; como la Universidad Nacional de Lomas de Zamora, la Universidad Católica de La Plata, la Universidad Católica de Buenos Aires, la Universidad del Salvador y el Colegio Militar de la Nación. También fue docente de las materias Historia Americana del siglo XIX e Historia Argentina del siglo XIX en el Instituto de Profesorado Pbro. Dr. Antonio María Sáenz por décadas. Allí, en el “Sáenz” fue, hasta su sorpresivo deceso en septiembre de 2009, el jefe de departamento de la Carrera de Historia. Siempre estaba a nuestra entera disposición para ayudarnos y aconsejarnos en lo que fuere y decidido a poder solucionar cualquier problema que tuvieran sus queridos alumnos. Luis Buján fue maestro tanto de historia como de la vida, y su compromiso misional cuanto su pasión argentina fueron inolvidable magisterio. 80 BREVE ANALISIS DE LA SOCIEDAD Y ECONOMIA LOMENSE Cualquier análisis de la sociedad y la economía lomenses no puede prescindir de los factores que le proporcionan dinamismo, y en ese sentido, será la ciudad de Buenos Aires la que oriente la producción y las vías de circulación de hombres y productos, e influya sobre hombres y mujeres a través de modas, gustos y toda otra forma de conducta social. Es así que esa realidad socioeconómica irá evolucionando junto con toda la llamada Pampa anterior, de una economía pastoril a otra altamente evolucionada, con predominio del sector terciario de la economía; de una sociedad tradicional a otra moderna, y que en nuestros días podríamos calificarla ya de posmoderna. A lo largo de ese tránsito, ese cosmos lomense irá perdiendo su individualización, su personalidad propia, sus tradiciones; en definitiva, su cultura, para ir adquiriendo casi sin notarlo el patrón cultural indiferenciado de la gran megalópolis porteña. El territorio que perteneció y pertenece al partido de Lomas de Zamora presenta en su evolución social y económica tres etapas claramente definidas La primera se extiende desde 1583 hasta aproximadamente 1861, presentando el territorio características netamente rurales; la segunda de ellas abarca el período entre 1861 y 1914, en el cual el desarrollo demográfico produce la urbanización del Partido, desplazándose así en forma realmente acelerada, las actividades agropecuarias; y finalmente, en la tercera, de 1914 en adelante, la región transforma totalmente su fisonomía, completando su urbanización, perdiendo poco a poco su personalidad, convirtiéndose en una gran ciudad, pero al mismo tiempo alejándose de la causa final de toda ciudad: el bien común a través del orden social, basado en el orden natural de las cosas, y la unión de todos en una vida virtuosa; una ciudad donde los intereses particulares arrasan con el bien común, en la búsqueda de inacabables propósitos de lucro. (…) LA SOCIEDAD DE TRANSICION Entre 1861 y 1914 se producen las transformaciones que llevarán a Lomas de Zamora de la sociedad tradicional a la sociedad moderna. Desde la fecha de la fundación del Partido hasta el Tercer Censo Nacional, nuestra comunidad irá sufriendo transformaciones ubicadas en su población y economía, que harán que el comportamiento social se transforme raudamente. La población crece rápidamente: en 1869 son 1.723 habitantes; en 1881 se cuentan 4.299; en 1895 llegan a 11.389, y en 1914 ascienden a 59.874. Este incremento coincide con un marcado proceso de urbanización. Para estos mismos años se pasa de un 0 por ciento en 1869, al 70,7 por ciento en 1881 ( se había perdido una fracción de terreno rural en 1873, al crearse Almirante Brown), al 51,4 por ciento en 1895, y al 72,3 por ciento en 1914 ( influenciados por la cesión de gran parte de su sector rural, al crearse el partido de Esteban Echeverría en 1913). Pero los cambios más decisivos están dados de por la radicación de importantes grupos de extranjeros en el Partido: en 1869 son 648, en 1881 llegan a 1.715; en 1895 se cuentan 5.537, y en 1914 ascienden a 23.792. Estos grupos trataron de conservar sus tradiciones europeas, al agruparse en Sociedad Italiana Unión y Estrella, Sociedad Italiana de Socorros Mutuos Estrella del Sur, Sociedad Italiana Nueva Roma, Logia Giuseppe Mazzini (ya existía una logia masónica desde 1864, “compuesta por vecinos que intervinieron eficazmente en la iniciación 81 Esas rápidas transformaciones económicas complejizan la estructura social vigente hasta 1861. Más que hablar de clase o grupos sociales, preferimos el término, utilizado por Pérez Amuchástegui, de mentalidades, por éste el más apropiado para esa sociedad. Así hablamos de la oligarquía paternalista, representada por los grupos dirigentes, que serán los que desde el poder político den el impulso al progreso positivista a través de una profusa legislación municipal, destinada a convertir a Lomas de Zamora en una sociedad moderna. Dentro de este grupo, por su cosmovisión y por compartir en lo fundamental la idea del progreso, debemos incluir a la comunidad británica. Este grupo representará, para las otras mentalidades, el modelo al que se debe imitar y repetir en el comportamiento social. La mentalidad del gringo, producto de la inmigración masiva, tiene su principal característica en un fuerte sentimiento de desarraigo. Los atavismos de su país de origen los harán buscar supervivencias en su nuevo hogar, y procurar la inserción en la nueva realidad social en la que se mueve, lograda por la imitación de las pautas sociales de la oligarquía paternalista, buscando con esto su vínculo con lo nacional, y el rechazo por el país bárbaro. El resultado será la conformación de una sociedad y una cultura híbridas. El gaucho sería inexistente desde el período de predomino del lanar, ya que este animal había distorsionado fuertemente la vida del gaucho, por cuanto su cuidado “no requiere la baquía del ganado mayor, ni especiales ejercicios de fuerza y arrojo”. La inmigración masiva y el progreso infinito, dan a esta mentalidad el golpe de gracia. EL CAMBIO DE LA IDENTIDAD LOMENSE de los progresos locales”), Sociedad Española de Socorros Mutuos y Comunidad Israelita Doctor Teodoro Herlz. Este cosmopolismo repetía el que vive la ciudad de Buenos Aires, a la que Lomas estaba vinculada por un importante número de mensajerías, el Ferrocarril Sud (desde 1865) y el tranvía (1908), que reducía a menos de una hora las cinco o seis que demoraba hacer el trayecto a caballo. A estos nuevos grupos, que cambian totalmente la fisonomía tradicional, se agrega la presencia de la comunidad británica, que con sus clubes, colegios, toponimia, construcciones y templos, acentúa el cosmopolitismo social. (…) 82 La vieja aldea había desaparecido, y también la sociedad tradicional. Estamos ante lo nuevo, fruto de la imitación y el farolerismo, y hasta el nombre (La Paz) fue cambiado. El período que se inicia en 1914, continúa las tendencias generales que se afirmaron en el período anterior. Si bien la falta de datos hasta 1947 entorpece la tarea, ese año la población alcanza a 127.880; en 1960 está en 272.116, y en 1970 asciende a 410.806. Estas cifras permiten hablar de verdadera explosión demográfica en el Partido. Este crecimiento hará desaparecer casi totalmente la participación del sector primario de la economía en la conformación del producto bruto interno. Paralelamente, crece- CITAB Centro de Investigaciones Territoriales y Ambientales Bonaerenses rán significativamente los sectores secundario y terciario. La actividad industrial irá cobrando cada vez más importancia, no sólo en cuanto a su número, sino también en lo que respecta a su magnitud, ya que aparecerán importantes plantas industriales, que reemplazarán a la industria familiar: Cervecería Bieckert, Firestone, Compañía Química, V.A.S.A., Protto Hnos., Algodonera Lomas, entre las principales. Después de 1940, la pequeña y la mediana industrias elegirán al territorio lomense para radicarse. Las distintas localidades del partido serían beneficiarias de la presencia de esta burguesía nacional, que aprovecha la nueva coyuntura económica, impulsada desde el Gobierno a partir de 1943. La radicación industrial en la zona, sumada al crecimiento que esta actividad experimenta en todo el Gran Buenos Aires, estimulará la radicación en el área, y la extensión del proceso de urbanización, que unirá progresivamente con su trama urbana los hasta ese momento aislados barrios periféricos. El proceso se institucionaliza, el declararse ciudades a Banfield, Temperley, Turdera, Llavallol… El desarrollo del transporte colectivo acompaña a este proceso. Las líneas urbanas alcanzan su máximo desarrollo a partir de 1960, mientras que las interurbanas, que operan en el Partido desde 1936, se incrementan en número y frecuencia de servicios, aprovechando, además, las dificultades que comienza a experimentar el ahora llamado Ferrocarril Roca. En el sector terciario, Lomas de Zamora experimenta un notable crecimiento en educación primaria, secundaria y terciaria, y a partir de 1972, la universitaria; comercio (no solo en los tradicionales, sino con la aparición de otros alternativos en los barrios y villas); la actividad bancaria, oficial y privada es en la década del ´70 explosiva, para dar satisfacción a la exigencia del comercio y la industria, y acompañando la tendencia general de la economía nacional. La calle Laprida y el Barrio San José se convierten en algunos de los centros más importantes del Gran Buenos Aires, e incluso de la Provincia. Es una especie de segunda era del progreso que se devora los frutos de la primera, ya que casas quintas, palacetes y en general la arquitectura a comienzos de siglo caen bajo la piqueta del modernismo, para levantar monumentales torres, centros de compras, y otras manifestaciones de la vida confortable. Quizá ése sea el resultado de quienes en su fiebre de cambio destruyen su vínculo con el pasado cultural, por carecer de tradiciones históricas. Los grupos sociales responden a esta diversificación económica. Los grupos tradicionales desaparecen, por la presencia de los nuevos sectores que arriban al partido, haciendo valer su poder económico sobre la prosapia fundacional. Los sectores medios se diversifican, conforme al nivel educacional y el poder económico, y constituyen el grupo más importante en cuanto a número. La radicación industrial y el desarrollo del comercio producen la irrupción de la clase obrera, y sus intereses serán expresados por los diferentes sindicatos locales, y con la aparición de la Confederación General de Trabajadores en Lomas. Hoy Portela, Grigera, Manuel Castro y tantos otros nombres, para los lomenses, son calles y sólo eso. Es que esta sociedad lomense, como dijo Ernesto Palacio, no es “una cultura alimentada por las raíces, como todas las verdaderas culturas, sino por las ventosas o garfios de sus ramas, como las plantas parásitas. No una cultura auténtica, sino de imitación” FUENTES CONSULTADAS + BUJÁN, LUIS O., Y MARÍA M. GOROSITO; Lomas de Zamora – De Sociedad tradicional a sociedad moderna. Terceras Jornadas de Estudios Regionales, Univ. L. de Zamora, Avellaneda, 1983. + BUJÁN, LUIS O., MARÍA M. GOROSITO Y NINA N. NORIEGA: Lomas de Zamora (1895-1905): Características de la sociedad de transición. Cuartas Jornadas de Estudios Regionales Univ. L. de Zamora, Monte Grande, 1985. + BUJÁN, LUIS O., CARLOS PESADO PALMIERI Y FERNANDO L. SOLANES: Personajes, mentalidades y generaciones lomenses: Apuntes para una historia social. Quintas Jornadas de Historia Regional Bonaerense. Quinta de Estudios Regionales, Quilmes, 1987. 83