Derecho Tributario Andrés Jiménez y Luis Rodríguez-Ramos Madrid, 20 de enero de 2015 Novedades relativas a los esquemas de inversión en producciones cinematográficas La Ley 55/2007, del Cine previó la utilización de Agrupaciones de Interés Económico (“AIEs”) para incentivar la inversión privada en el sector. Desde su entrada en vigor, se han ido popularizando esquemas de inversión en los que inversores ajenos al mundo audiovisual invierten en AIEs, generalmente, a cambio de un retorno en forma de incentivos fiscales (una deducción por inversión en producciones cinematográficas y la imputación de determinadas bases imponibles negativas) que reducen la carga fiscal del inversor en un importe superior a su inversión. A raíz de la decisión de la Comisión Europea que consideraba el tax lease español como una ayuda de estado no compatible con el Ordenamiento Comunitario y obligaba a devolver la ayuda, la Dirección General de Tributos (“DGT”) planteó a la Comisión Europea la compatibilidad de estos esquemas con el Derecho Comunitario. La respuesta de Bruselas confirmó su validez por estar amparados en la excepción cultural. Ley 27/2014, de 27 de noviembre, del Impuesto sobre Sociedades, modifica la deducción por inversiones en producciones cinematográficas, de modo que, a partir de este año, existen nuevas reglas del juego a la hora de estructurar esquemas de inversión en cine. El objeto de la presente Newsletter es analizar las modificaciones operadas por la Ley 27/2014 y los condicionantes que imponen a las estructuras de inversión con un componente fiscal. Dichas modificaciones no afectarán a los inversores (que seguirán obteniendo el retorno previamente definido), pero sí a los productores y deberán tenerse en cuenta a la hora de diseñar la estructura de inversión. Porcentaje y condiciones de la deducción. Elevación de los porcentajes de deducción, límite del importe de la deducción y localización del gasto. El porcentaje de deducción se eleva del 18% al 20% para el primer millón, manteniéndose en el 18% sobre el exceso de dicho importe. Se establece un límite de deducción de tres millones de euros por producción, lo que hace que la deducción esté topada en ese importe para películas con un presupuesto superior a 16.555.555 euros. Además, para la aplicación de la deducción ya no basta con que la película sea española, es preciso que más del 50% de la base de deducción se corresponda con gastos realizados en territorio español. En caso de coproducciones, las cifras anteriores se determinarán para cada coproductor en función de su porcentaje de participación. Generación y aplicación de la deducción. Limitaciones para la deducción si la AIE no desarrolla todo el proceso de producción. De acuerdo con la nueva redacción de la Ley, la deducción se generará en cada período impositivo por el coste de producción incurrido en el mismo, si bien se aplicará a partir del período impositivo en el que finalice la producción de la obra (entendiendo por tal la obtención del certificado de nacionalidad y el depósito de una copia en la Filmoteca Española o la obtención del certificado de nacionalidad en el caso de producciones de animación). A la espera de que se concrete el significado de lo anterior por la Dirección General de Tributos, parece que la modificación determina que si se incorpora la AIE a la producción con posterioridad al inicio de la misma, la AIE sólo generará derecho deducción por el coste incurrido desde su entrada en la producción. Ayudas públicas. Reducción de la base de deducción en el importe de las subvenciones. Límite conjunto de la deducción y otras ayudas públicas. La disposición derogatoria segunda de la Ley 35/2006 (en la redacción dada por la disposición final segunda de la Ley 55/2007, de 28 de diciembre, del Cine) señalaba que: “Con efectos para los períodos impositivos que se inicien a partir de 1 de enero de 2014 quedan derogados el apartado 1 del artículo 34 y los apartados 1, 3 y 7 del artículo 38 del texto refundido de la Ley del Impuesto sobre Sociedades, aprobado por Real Decreto Legislativo 4/2004, de 5 de marzo”. Según lo anterior, en el ejercicio 2014, la base de la deducción no se minoraba en el importe de las subvenciones percibidas, minoración que estaba prevista en el apartado 7 del artículo 38 del Texto Refundido de la Ley del Impuesto sobre Sociedades y que quedó derogado por la disposición derogatoria segunda antes citada. La nueva regulación de la deducción establece que la base de la deducción se minorará en las ayudas públicas percibidas y, además, siguiendo la respuesta de la Comisión Europea a la DGT, señala que el importe de la deducción y las ayudas públicas percibidas, no pueden superar el 50% del coste de producción. En relación con las ayudas públicas, considerando que, en ocasiones, éstas se reciben años después de aplicar la deducción, es preciso tener en cuenta el criterio manifestado por la DGT en su consulta V0442-14. En dicha consulta, la DGT entiende que cuando en el momento de aplicar la deducción no haya nacido aún el derecho a percibir la subvención, no se tendrá en cuenta la misma a efectos del cálculo de la deducción, si bien en la autoliquidación del ejercicio en que se perciba la subvención deberá corregirse la deducción practicada en su día y abonar la cuota correspondiente más los intereses de demora. Más Información Andrés Jiménez [email protected] +34 91 576 19 00 Luis Rodríguez-Ramos [email protected] +34 91 576 19 00 www.ramonycajalabogados.com Almagro, 16-18 28010 Madrid T +34 91 576 19 00 F +34 91 575 86 78 Caravel•la La Niña, 12, 5ª planta 08017 Barcelona T +34 93 494 74 82 F +34 93 419 62 90 © 2015 Ramón y Cajal Abogados, S.L.P. 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