Gramáticos y gramáticas humanistas en el contexto internacional

Anuncio
Maria José Corvo Sánchez
Universidad de Vigo; [email protected]
Gramáticos y gramáticas humanistas
en el contexto internacional
del Occidente Europeo
1. Introducción: La reforma humanística de la lengua latina y de su enseñanza.
A partir del siglo XV se abre para el Occidente europeo una nueva etapa de cambios y de descubrimientos, de nuevos mundos, geográficos, sociales, ideológicos, culturales, etc., en la que se desarrolla un nuevo y moderno panorama lingüístico y educacional.
Este período que comienza, del Renacimiento, del Humanismo y de la Reforma,
trae consigo la pérdida del monopolio y del estatus social de la lengua latina. Dicha
pérdida, anunciada ya desde finales de la Edad Media ante la influencia creciente ejercida por las lenguas nacionales en el camino hacia su consideración oficial como las
nuevas lenguas modernas de Europa1, determina las grandes novedades que, desde el
punto de vista lingüístico, nos aportan las nuevas circunstancias en todo el Occidente
europeo, originadas por un cambio de actitud generalizado hacia las lenguas clásicas y
hacia las lenguas nacionales nacientes o modernas y que conduce a una reforma en el
sistema educativo y a una modificación significativa de la enseñanza de lenguas dentro
de él.
En las páginas siguientes nos ocuparemos, en primer lugar, de presentar el papel
ejercido por la gramática en el plan de educación de los humanistas, una gramática
basada en la lengua clásica, escrita bajo la idea humanista de la restauratio linguae
Latinae y glorificada dentro de las siete artes liberales como instrumento de estudio y
1 Entre los posibles antecedentes en el largo camino hacia su reconocimiento oficial como lenguas
de cultura recorrido por estas lenguas destaca la labor desarrollada ya en el siglo XIII por Alfonso X El
Sabio en España, otorgando por primera vez un estatus distinguido a una lengua vulgar europea, sólo
sustentado hasta entonces por la lengua latina. En Italia había ocurrido algo similar con los poetas del
dolce stil nuovo y las obras de Dante, Petrarca y Boccaccio, llegándose aún más lejos, pues con ellos el
florentino no sólo se convirtió en una lengua distinguida y apta para la poesía, sino que también se erigió como modelo impulsor de la questione della lingua y, por consiguiente, de la legitimidad lingüística que debían perseguir los demás países europeos.
685
MARIA JOSÉ CORVO SÁNCHEZ
análisis del conocimiento aportado por los grandes autores clásicos. En segundo lugar
y complementando lo anterior, nos detendremos en conocer la labor de los principales gramáticos latinistas en el contexto humanista internacional del Occidente europeo.
2. El latín o gramática humanista
El latín humanista, “esencialmente, un desarrollo de las formas y las aplicaciones
del latín medieval” (Jensen, 1998: 93), surgió entre los altos cargos de la administración
civil y eclesiástica en la Italia del siglo XIV y principios del siglo XV, quienes recurrían
a él como lengua internacional para el desempeño –por correspondencia o mediante
emisarios– de las funciones diplomáticas y las negociaciones con los demás países. Su
uso, como veremos, simboliza el rechazo y abandono del latín medieval, a favor de la
elegante lengua latina de la época dorada romana por parte de los escolares del Renacimiento.
La actitud antiescolástica y los ataques de los maestros humanistas al sistema medieval de la descripción de su gramática, sustentada sobre unas bases “filosóficamente
ostentosas, indeseables desde un punto de vista educativo, y por estar encubiertas en
una bárbara degeneración del latín”, en palabras de Robins (1987: 114), que conduciría a la sustitución de las gramáticas didácticas medievales por las nuevas gramáticas
humanistas, tiene como más inmediata consecuencia, como decíamos, la reconstrucción renancentista de los estudios del latín y su reformulación dentro del currículo
escolar.
De acuerdo con esto, se desecha el dominio ejercido en el último tramo del período
anterior en las universidades por la dialéctica sobre la gramática y la retórica, de tal
modo que la lógica dialéctica medieval se reduce teóricamente a la dialéctica y vuelve
a contemplarse como el arte de razonar bien o ars bene dissere; la retórica, relegada a
un segundo plano y casi inexistente dentro de la jerarquía interna de las artes del trivium medieval, con la pedagogía humanística recupera igualmente su dominio como
arte de hablar bien o ars bene dicendi; y la gramática, que se había convertido en una
ciencia especulativa, recupera su lugar preferente y su propósito original como el arte
de hablar correctamente o ars bene loquendi, volviéndose a contemplar el curso de
gramática como estudio de primer orden e importancia2.
Su enfoque, primordialmente lingüístico, es muy práctico, pues su finalidad es la de
aprender el latín, la lengua clásica, y el estudio de la literatura romana deja de ser un
fin en sí mismo relegado a los más grandes intelectuales para ponerse a su servicio,
pues en las principales obras de sus autores se conservan todos los recursos y expresiones lingüísticas que garantizan el discurso correcto.
Esto es así, pues la pretensión del hombre culto es hablar latín como Cicerón y
Terencio, principalmente, y la mejor forma de conseguirlo, como hicieran los romanos
para aprender el griego, es estudiando su propia lengua y creando un entorno apropiado para ello, en el que el estudio de la gramática debe enseñar el manejo del latín,
identificado con la lengua de los autores antiguos, y el uso clásico, que es el que dicta
la norma.
2 La gramática teórica queda fuera de nuestro estudio en la medida en que discrepa de la concepción humanista gramatical, interesada fundamentalmente en la morfología. Una clara aproximación a este
tema puede encontrarse, no obstante, en Padley (1985).
686
GRAMÁTICOS Y GRAMÁTICAS HUMANISTAS EN EL CONTEXTO INTERNACIONAL DEL OCCIDENTE EUROPEO
Su enseñanza, desarrollada dentro del marco de una enseñanza bilingüe latín-vernácula, además, conlleva un aprendizaje que, en muchos casos desde la enseñanza primaria, corre paralelo al de las otras lenguas clásicas: el griego, la lengua de los grandes maestros, y el hebreo, la lengua bíblica3.
La introducción de los textos de los autores clásicos en el aula y en los libros de
texto permite constatar y rechazar el conocimiento limitado e imperfecto que de la lengua latina poseyeron los maestros medievales –formados a través más de fuentes orales que escritas debido a la ausencia de libros de textos estándares impresos–, así como
la metodología seguida por éstos en sus gramáticas, resultando con ello las dos grandes novedades que este período traería consigo en la educación, de acuerdo con Watson (1968: 2): la nueva reformulación del papel de la gramática en el currículo escolar
–a la que hacíamos referencia más arriba– y la evolución de los libros de gramática y
la introducción de otros textos escolares de nuevo cuño que pasan a sustituir las gramáticas medievales en el proceso de enseñanza y aprendizaje del latín.
No debemos dejar de tener presente que el latín en estos siglos que nos ocupan, como
en los anteriores, continua siendo la lengua sobre la que se sustenta el sistema educativo
en el Occidente europeo, lo que justifica la relevancia del estudio de su gramática como
parte esencial de una instrucción, si bien no sistematizada, sí fuertemente mediatizada por
la Iglesia e insertada en la tradición anterior y en una estructura medieval de los estudios.
Entre las primeras y principales gramáticas humanistas de la lengua latina en el contexto internacional del Occidente europeo se encuentran las que pasamos a referir en
los apartados siguientes, comenzando desde sus inicios en Italia y pasando por otras
partes de Europa fuera de Italia, por las que también se difundió la idea humanista de
la gramática4.
3. Gramáticos y gramáticas humanistas en Europa
Con su obra Elegantiae linguae Latinae libri sex Lorenzo Valla propugna el establecimiento del latín humanístico como lengua internacional (Jensen, 1998: 95) y su
influencia en el latín escrito, que se evidencia primero en Italia en el siglo XV, continúa
extendiéndose por el resto de los países fundamentalmente durante el siglo siguiente,
contándose a Erasmo5, Nebrija y Valdés entre los principales impulsores de la renova3
Altamente esclarecedoras resultan las siguientes palabras de Robins:
El carácter de lengua bíblica le confirió un lugar relevante, como lengua merecedora de especial
atención, junto al latín y al griego. San Isidoro, en el siglo VII y muchos otros la veneraron como lengua divina, y por tanto, como la primera que se habló sobre la Tierra. Pero con el relajamiento de los
vínculos clericales durante el Renacimiento, el hebreo fue objeto de estudio más amplio y más profundo.
El griego, el latín y el hebreo eran las tres lenguas de las que se jactaba el homo trilinguis del Renacimiento (Robins, 1987: 102).
4 Para la elaboración de este resumen representativo de los primeros autores y obras humanistas en
el territorio europeo occidental nos hemos ayudado básicamente de la visión que sobre el tema plantea
Tavoni (1998).
5 La crítica de Erasmo al sistema de los modistas se refleja en su propia producción gramatical –su
tratado sobre sintáxis, Libellus de octo orationis partium constructione; un diálogo sobre la correcta
pronunciación del griego y del latín, De recta latini graecique sermonis pronunciatione dialogus; y sus
Epitome in elegantiarum libros Laurentii Vallae, un resumen organizado alfabéticamente de las Elegantiace de Lorenzo Valla– y en su mayor aportación lingüística, su manual de estilo De copia verborum ac rerum libri duo. Véase Percivall (1975: 241).
687
MARIA JOSÉ CORVO SÁNCHEZ
ción pedagógica por toda Europa, encaminada a la consecución de un dominio de la
lengua latina comparable al alcanzado en Italia.
3.1. Italia
Respondiendo a una tradición enmarcada en las necesidades de la sociedad italiana,
la obra Elegantiae linguae Latinae libri sex de Lorenzo Valla6 –en torno a 1444– es
aceptada como la primera7 del gran número de gramáticas concebidas retóricamente
con la que se inaugura la nueva evolución seguida por el latín humanístico y la renovada tradición gramatical representada por la gramática humanista, que contempla los
preceptos antiguos sobre la base de las variaciones y la corrección del uso.
Esta obra es un manual a medio camino entre la gramática y la retórica y auna el
doble objetivo de aprender el latín clásico y postclásico y la riqueza de sus posibilidades comunicativas.
Se halla estructurada en los seis libros siguientes: Libro I: morfemas, desinencias y
sufijos, en el área de los nombres y de los verbos; Libro II: otras partes del discurso;
Libro III: variaciones e implicaciones semánticas en los diferentes comportamientos sintácticos y gramaticales de los grupos de palabras; Libros IV y V: distinción de sinónimos nominales y verbales, respectivamente; Libro VI: revisión crítica de juicios equivocados y repetidos en la tradición gramatical.
Esta estructura, en palabras de Tavoni, merece la siguiente caracterización:
It is a clear, but wholly unusual, structure. If we take as reference the distinction, derived from Quintilian, which Valla takes as his banner, between grammatice loqui (i.e. the simple respect of grammatical ratio) and latine loqui (i.e. the more mature ability to conform to
the latinitas found in the writers’ consuetudo), we can say that the way the subject matter is
organized in the Elegantie reflects the ambitious attempt to describe and teach latine loqui;
to try to extract from a systematic (comparative, open and non-Ciceronian) examination of
prose writers the rationality inherent in usus. This rationality is wholly outside the patterns of
a grammar that depends on logic (Tavoni, 1998: 5).
Entre los primeros gramáticos seguidores de sus enseñanzas y restauradores de la
unidad de la instrucción latina más conocidos en Italia figuran Niccolò Perotti, con su obra
Rudimenta grammatices de 1468 –“the first complete Latin grammar in the new huma6
Obsérvese la siguiente caracterización resumida que de su autor y de esta obra realiza Seisdedos:
… un hombre que estuvo vinculado al poder político –Alfonso el Magnánimo–, eclesial –Nicolas V–,
que fue historiador, traductor, autor en suma de una densa obra. Baste decir que convencido de la fuerza
de la lengua latina como vehículo de expresión científica, instrumento de renovación cultural y lenguajeobjeto en el que pueden analizarse los fenómenos más complejos de la estructura racional del hombre,
dedica varios textos a la recuperación de la latinidad, bajo el modelo de Cicerón y Quintiliano, destacando Elegantiae de lingua latina, libri sex, una de las gramáticas más perfectas de las escritas sobre el
latín (Seisdedos 1998: 632).
7 Con anterioridad al año 1418 Guarino Veronese había compuesto ya su obra Regulae grammaticales. Se trata de un tratado de gramática latina para estudiantes con conocimientos básicos de la lengua –la declinación de los nombres y la conjugación de los verbos– continuadora de las enseñanzas de
fines del Medievo, pero con un marcado carácter humanista, que la convierte en el primer tratado gramatical humanista y en el “prototipo sobre el que se basó la gramática humanista latina” (Percivall, 1975:
238; Padley, 1985: 3). Guarino enseñaba gramática y retórica en una escuela pública de Verona y a él y
a sus discípulos se le atribuye el haber difundido “la esencia de la educación humanista por los países
de Europa” (Breva-Claramonte, 1994: 28).
688
GRAMÁTICOS Y GRAMÁTICAS HUMANISTAS EN EL CONTEXTO INTERNACIONAL DEL OCCIDENTE EUROPEO
nistic style (…) consists of three parts: an elementary morphology, a syntax in the style
of Guarino’s Regulae, and a treatise on epistolary composition” (Percival, 1975: 238)– y
Giovanni Sulpicio Verulano, con su Grammatica (c. 1470); como ellos, otros muchos coinciden en creer que el latín puro sólo puede encontrarse en las obras de los autores clásicos y que éste, válido para la literatura, es el más adecuado también para la gramática8.
3.2. España
Fuera de Italia, en primer lugar, debemos recordar a Antonio de Nebrija, su obra
Introductiones latinae, impresa en 1481, y su labor reformadora en el sistema universitario del estado español, dentro de la corriente de renovación gramatical y filológica
introducida por él en España a su vuelta de Italia.
Con su obra Nebrija rompe con la tradición anterior fijada por Quintiliano al no
incluir parte histórica y, al centrarse en la parte metódica de la morfología y de la sintáxis, refleja los nuevos cánones pedagógicos renacentistas defensores de la sencillez y
de la brevedad9.
Fue una obra que disfrutó de un enorme éxito y de una gran acogida, tanto en
España, donde fue reimpresa en diversas ocasiones en los años siguientes, como a
nivel internacional10, llegándose a traducir a otras lenguas11.
Junto a Nebrija, otra figura que debemos destacar es la Pedro Simón Abril.
Como consecuencia lógica de su profesión docente12, su preocupación por la gramática –que incluye en el tratamiento de la gramática histórica– y por su enseñanza se
halla representada en su extensa producción, la cual, de acuerdo con Breva-Claramonte
(1994: 149), se puede dividir en cinco apartados: obras gramaticales, traducciones de
otras obras, cartillas para aprender a leer y escribir, notas sobre la reforma de la enseñanza y, finalmente, libros de carácter filosófico y traducciones de Aristóteles.
Desde el punto de vista de la didáctica de lenguas, Abril ocupa un lugar destacado
en la metodología bilingüe y trilingüe. Así, por ejemplo, su primera gramática, Latini
8 En este sentido, sin embargo, son diferentes las preferencias propuestas: Sulpitius Verulanus, por
ejemplo, consideraba a Varro, Caesar y Quintiliano como los más importantes gramáticos junto a Donato;
Lonrenzo Valla, por su parte, había ensalzado principalmente a Donato, Servio y Prisciano, nombrándolos como “Triumvirat unter den Gelehrten”, de acuerdo con Ising (1970: 53).
9 Con relación a esta preocupación por la enseñanza de lenguas, Erasmo de Rotterdam afirmaría en
su obra De rations Studii de 1511:
La lengua exige el primer puesto en el curriculum y debe incluir desde el principio tanto el latín
como el griego (…) aunque el conocimiento de las reglas de morfología y sintaxis es necesario al estudiante, las reglas deben ser pocas, sencillas y claras. Me impaciento con la estupidez de profesores
mediocres que malgastan unos años preciosos martilleando las cabezas de los niños con reglas. Pues no
es aprendiendo reglas como adquirimos la capacidad de hablar una lengua, sino mediante la intercomunicación diaria con aquellos que la hablan adecuadamente (Sánchez, 1995: 490).
10 Su tercera edición, la de Salamanca de 1495, conocida como Recognitio, constituye, además, su
redacción definitiva, de ahí su valor especial; pues bien, sólo de ella son innumerables las reimpresiones y la ediciones, tanto extensas como abreviadas, localizadas: véase al respecto Esparza (1995: 58-59).
Para una consulta sobre las ediciones de la obra de Nebrija en general remitimos a Niederehe (1994).
11 Por ejemplo, en Inglaterra, donde se publicó en 1631 como A briefe introduction to Syntax…
Collected out of Nebrissa… With the concordance supplyed by J(ohn) H(awkings), M.D., etc., de acuerdo
con Watson (1968: 273).
12 En Zaragoza llegó a ser designado catedrático de gramática y lenguas, enseñando latín, griego y
retórica.
689
MARIA JOSÉ CORVO SÁNCHEZ
idiomatis docendi, ac discendi methodus de 1561, presenta glosas castellanas de los
tiempos verbales –y que en su segunda edición, con el título Methodus Latinae linguae decendae atque ediscendae, contiene el texto latino y castellano en páginas contrapuestas–; en su trabajo de 1583, titulado Los dos libros de la gramática latina escritos en lengua castellana, las reglas de morfología y sintaxis latinas son explicadas íntegramente en castellano, para que, según su autor: “… sirva de libro de lectura en las
escuelas, para que cuando los niños comiencen a estudiar latín se encuentren medio
instruidos en los preceptos” (Breva-Claramonte, 1994: 131); y su obra La gramática
griega escrita en lengua castellana, publicada en 1586, está concebida como una gramática trilingüe para que los estudiantes aprendan al mismo tiempo el griego y el latín
ayudados por la lengua castellana13.
3.3. Portugal
Junto a los autores españoles citados en el apartado anterior, la labor humanista en
la Península Ibérica en la vertiente didáctica se halla también representada por la gramática latina del jesuita portugués Manoel Alvares o Immnauel Alvarus, publicada por
João de Barreira por primera vez en 1572.
Es una gramática descriptiva tradicional que, de acuerdo con Percival, cubría todo
el campo gramatical tal como era entendido en esta época: rudimenta, morfología, sintáxis y métrica (1975: 242) y que acabó convirtiéndose en el único manual empleado
para la enseñanza del latín en todos los colegios de la orden durante las siguientes dos
centurias y tanto en Europa como en otras partes del mundo (Tavoni, 1998: 14).
3.4. Alemania
En torno a 1570 es cuando realmente, podemos decir, que comienza en Alemania
un nuevo período en el ámbito escolar de la gramática.
Ising (1970: 89) habla de Späthumanismus en Alemania y de una sistematización
de los niveles de enseñanza llevada a cabo sobre una metodología basada en la aplicación práctica de reglas y definiciones y la inclusión del alemán o Hochdeutsch en las
clases de latín para la comprensión de su gramática.
Esta innovación metodológica, consistente en la inclusión de la lengua vernácula
en el sistema educativo, originaría la aceptación de la lengua vernácula en la escuela
en el siglo XVII y la aparición, como una nueva tendencia muy extendida, de los
manuales bilingües latino-alemanes derivados de la gramática de Donato, entre cuyos
autores destacan: Georg Rollenhagen, con su Deutscher Donat- Aelii Donati declinandi
coniugandique paradigmata latino-germanica, pro schola Magdeburgensi de 1586 y
Johannes Rhenius, con sus nuevos cursos de latín: Donatus latino-gemanicus, aparecido en Leipzig en 1611 para los principiantes –“Hier geht es ihm also nicht mehr nur
um das Wortverständnis, dem alle früheren Verdeutschungen des Donat dienten, sondern die deutsche Grammatik steht erklärend und vermittelnd neben der lateinischen”
13 De acuerdo con Breva-Claramonte, “Esta obra es un introducción a la morfología y sintaxis griega
comparada con la latina. Abril contrasta estructuras que se dicen de maneras parecidas o distintas en
esas dos lenguas, con traducciones en castellano” (1994: 131); y de tal forma que las explicaciones son
presentadas en castellano y los ejemplos en griego y latín.
690
GRAMÁTICOS Y GRAMÁTICAS HUMANISTAS EN EL CONTEXTO INTERNACIONAL DEL OCCIDENTE EUROPEO
(Ising, 1970: 107)–; Compendium latinae y la Grammatica latina, del mismo año que
el anterior, para los alumnos de los niveles intermedio y superior respectivamente; su
Nomenclator grammaticus de 1612, para el aprendizaje del vocabulario latino; su glosario de la gramática latina de Donato Vocabula latino-germanica de 1615; y, finalmente, de éste mismo año su trabajo metodológico-lingüístico más importante, su Tirocinium linguae latinae.
Si bien todos los cursos de latín de Rhenius disfrutaron de una muy buena acogida,
su primer tirocinio o método, su Donatus latino-germanicus fue, sin duda, el más
conocido en toda Alemania, siendo reimpreso en numerosísimos lugares y ocasiones y
permaneciendo como libro escolar en el Condado de Mansfeld y en algunas ciudades
de Prusia hasta 1730, como nos informa Ising, quien de su difusión por otras partes del
este y del sur de Alemania afirma:
Unter anderen Aspekten vollzig sich die Überlieferungsgeschichte dieses Schulbuches in
Ost- und Südosteuropa. Während in Preußen bereits in der Mitte des 17. Jahrhunderts Ausgaben des Donats mit deutscher und polnischer Glossierung entstanden, erschienen im Königreich Ungarn (Ungarn, Slowakei, Slowenien) mit Beginn des 18. Jahrhunderts Übersetzungen
in die Nationalsprachen, die teilweise bis ins 19. Jahrhundert vielbenutzte Schulbücher blieben. Ähnlich wie in Preußen entstanden auch in diesen Ländern mehrsprachige Drucke. Diese
Ausgaben stellen einen Entwicklungszweig der Donattradition dar, die sich bereits im Zeichen
der sprachlichen Toleranz der Humanismus herausgebildet hatte: den Typus der polyglotten
Grammatik (Ising, 1970: 109).
Con anterioridad a todos ellos, entre los primeros gramáticos humanistas en Alemania figuran los siguientes autores14: Bernard Perger, rector de la Universidad de Viena
y autor de Grammatica Nova, una adaptación de la obra de Perotti publicada entre los
años 1479 y 1482; Alexander Hegius, quien en 1486 publicaría su obra Invectiva contra modos significandi; Jacob Wimpfeling, con su Isidoneus germanicus de 1497;
Heinrich Bebel, autor de Commentaria epistolarum conficiendarum, 1503; Jacob
Heinrichmann, con sus Grammaticae institutiones, de 1506; Johannes Brassicanus y
sus Institutiones grammaticae de 1508; Johannes Turmair, autor de Grammatica
omnium utilissima, de 1512 y de Rudimenta grammaticae, 1517; y Philipp Melanchthon, con su Grammatica latina, dividida en Ortographia y Etymologia, publicadas
en 1525, y en Syntaxis y Prosodia, aparecidas un año después, que se convertiría en
el manual de trabajo de gramática en toda el territorio protestante.
3.5. Los Países Bajos
En Los Países Bajos Jan de Spouter –o Joannes Despauterius– escribió varias gramáticas latinas a principios del siglo XVI con el claro objetivo, expreso en nota preliminar a su Grammaticae institutiones pars prima (1512), de “restaurar la unidad en
la educación” (Dibbets, 1992: 41).
Con el título Commentarii grammatici fue publicada su obra en 1537 por su compatriota Robert Estienne –quien ya en 1530 también había publicado una adaptación
de ésta realizada por Jean Pellisson titulada Contextus universae grammaticae Des14 Una exposición más extensa y detallada sobre todos ellos, así como de sus obras, puede consultarse en Ising (1970).
691
MARIA JOSÉ CORVO SÁNCHEZ
pauterianae– y a partir de 1550 su Latina grammatica fue incluida en el catálogo
estándar de libros de la Universidad de Lovaina15.
De este modo, la obra de Spouter comienzó a experimentar una aceptación que se
mantuvo durante siglos. Debemos mencionar al respecto, su enorme influencia en la
obra de Lancelot Nouvelle Méthode pour apprendre facilement, et en peu de temps la
langue latine […], editada por primera vez en 1644, y en la de Simon Verepaeus o
Verr(e)pt –1522-1598–, titulada Grammatices Despauterianae epitomes novae y llevada a la imprenta por Plantin en Amberes en torno a 1577, y que se convirtió en el
manual clásico de gramática latina en el sur de los Países Bajos durante tres largos
siglos, apareciendo su última edición escolar en 1864 (Dibbets, 1992: 41).
En el norte y principalmente en Holanda, los libros que disfrutaron de mayor aceptación, puesto que se convertieron en los libros de gramática de la universidad de Leyden, fueron la Grammaticarum institutionum libri IV de Cornelius Valerius –1512-1578– y la Grammatica Latina de Ludolfus Lithocomus, publicada por primera vez en
Düsseldorf y reeditada en Leyden por Plantin –impresor oficial de la universidad de
esta ciudad– en 1584.
3.6. Inglaterra
En Inglaterra destacaron John Anwykyll, con Compendium totius grammaticae, de
1483; Wynkyn de Worde, con su obra Introductorium linguae latinae, de 1495; Thomas Linacre, autor de De emendata structura latini sermonis, publicada en Londres
en 1524; John Colet; y William Lily con su Absolutissimus de octo orationis partium
constructione libellus.
Ésta última, publicada en 1513, acabó convirtiéndose en la gramática de uso obligado en las escuelas de gramática por orden real. Y como tal se publicaría posteriormente, incluyendo dicha proclamación real a partir de 1542, de acuerdo con (Watson,
1968: 252), con el siguiente título: An Introduction of the eyght partes of speche, and
the Construction of the same, compiled and sette forthe by the commaundement of
our most gracious soverayne lorde the king, constando además de un alfabeto latíninglés y de las principales oraciones de la Iglesia.
En realidad, y a pesar de que siguió siendo conocida como la gramática latina de
Lily, se trató más bien de un trabajo de compilación, tal como nos permite saber Tavoni
a través de las siguientes palabras: “A combination of a syntax by Lili in Latin and a
morphology by Colet in English, which started to spread in the late 1520s, in 1540
became the official Latin grammar of the Kingdom of England, and remained so for
more than two centuries” (Tavoni, 1998: 10)16.
15 Cataloge van den boucken die men in de particuliere scholen den jongens sal mogen lezen ende
leren (Dibbets, 1992: 41).
16 Pues con el paso del tiempo, esta gramática impuesta o autorizada como gramática estándar, con
una primera intención uniformadora desde el punto de vista educativo, seguiría siendo aceptada e interpretada, de acuerdo con las nuevas necesidades, en lengua inglesa. Watson recoge en su obra un epígrafe con todas las traducciones inglesas de las partes latinas de Lily, mencionando la siguiente como la
primera aparecida: The Treatise of the Figures At the end of the Rules of Construction in the Latin Grammar, Construed with every Example applyed and fitted to his Rule, for the help of the weaker sort in the
Grammar Schools. By John Stockwood sometime Schoolmaster of Tunbridg, 1609. (Watson 1968:266).
692
GRAMÁTICOS Y GRAMÁTICAS HUMANISTAS EN EL CONTEXTO INTERNACIONAL DEL OCCIDENTE EUROPEO
4. Conclusiones
Con la intención de presentar las gramáticas escolares humanistas en el contexto
internacional europeo, hemos partido en nuestra exposición explicando cómo la ruptura del monopolio lingüístico educacional sustentado por el latín hasta los primeros
años de este período se traduce en una modificación radical de la enseñanza de las
lenguas clásicas, dentro de la cual el estudio de la gramática se convierte en un fin en
sí mismo para el que la instrucción y la metodología medievales resultan ya inapropiadas y en el que el interés por la retórica en detrimento de la dialéctica y las nuevas
formas de la gramática humanista, cuyas raíces se encuentran en el Renacimiento Italiano, juegan una papel determinante.
A continuación y en consecuencia con nuestro objetivo trazado, nos hemos centrado en conocer las más importantes y conocidas gramáticas humanistas, los nombres
de sus autores, así como, en casos concretos, algunas de las circunstancias particulares
más relevantes, lo que nos ha permitido obtener una visión de conjunto a nivel internacional del surgimiento de estas nuevas gramáticas en Europa y conocer cómo
muchas de ellas, como hemos podido señalar, gozaron de proyección internacional,
convirtiéndose en manuales básicos en las aulas occidentales.
Todas estas obras, citadas si bien de forma escueta, por un lado, testimonian la gran
resonancia que tuvo la obra humanista originada en Italia en todo el territorio europeo
occidental; por otro lado, además, contempladas desde la actualidad, constituyen un
testimonio importantísimo del desarrollo del proceso de enseñanza de la lengua latina
por parte de los maestros en las escuelas a partir del siglo XV.
No todas ellas, sin embargo, como hemos podido ir viendo, disfrutaron de una
misma aceptación como gramáticas escolares. De manera concluyente, es destacable al
respecto la gran acogida que tuvieron algunas a lo largo de todo el siglo XVI en diferentes puntos de Europa, como fue la obra de Nebrija, no sólo conocida en España,
pues gozaría de gran proyección internacional; la de Despauterius en Francia y Bélgica;
la de Melanchthon en toda la zona protestante alemana; la de Lily en Inglaterra, principalmente, y también en los Países Bajos y la de Manoel Alvares en todas las provincias donde se encontraran colegios de la orden de los jesuitas.
693
MARIA JOSÉ CORVO SÁNCHEZ
BIBLIOGRAFIA
BREVA-CLARAMONTE, Manuel (1994), La didáctica de las lenguas en el Renacimiento.
Juan Luis Vives y Pedro Simón Abril. Con selección de textos, Bilbao, Universidad
de Deusto.
CIPOLLA, Carlo (1970), Educación y desarrollo en Occidente, Barcelona, Ediciones Ariel.
DIBBETS, Geert R. W. (1992), “Dutch Philology in the 16th and 17th Century”, in Noordegraaf, Jan et al. (eds.), The history of Linguistics in the Low Countries, Amsterdam, Philadelphia, John Benjamins Publishing Company, pp. 39-61.
ESPARZA-TORRES, Miguel Ángel (1995), Las ideas lingüísticas de Antonio de Nebrija,
Münster, Nodus Publikationen.
ISING, Erika (1970), Die Herausbildung der Grammatik der Volkssprachen im Mittelund Osteuropa, Berlin, Akademie Verlag.
JENSEN, Kristian (1998), “La reforma humanística de la lengua latina y de su enseñanza”,
in Kraye, Jill (ed.), Introducción al humanismo renacentista, Madrid, Cambridge
University Press, pp. 93-114.
NIEDEREHE, Hans-Josef (1994), Bibliografía cronológica de la lingüística, la gramática y la lexicografía del español (BICRES). Desde los comienzos hasta el año 1600,
Amsterdam, Philadelphia, John Benjamins Publishing Company.
PADLEY, G. A. (1985), Grammatical Theory in Western Europe, 1500-1700. Trends in
Vernacular Grammar – I, Cambridge, London, New York, New Rochelle, Melbourne, Sidney, Cambridge University Press.
PERCIVAL, W. Keith (1975), “The Grammatical Tradition and the Rise of the Vernaculars”, in Sebeok, Thomas A. (ed.), Current Trends in Linguistics, Den Haag, Paris,
Mouton, pp. 231-75.
ROBINS, R. H. (1984), Breve Historia de la Lingüística, Madrid, Paraninfo, S.A.
SÁNCHEZ PÉREZ, Aquilino (1995), “La renovación metodológica en la enseñanza de
idiomas en el «Ianua linguarum» de Salamanca (1611) in Fernández, F. (ed.), Pasado,
presente y futuro de la Lingüística Aplicada en España. Actas del III Congreso
Nacional de Lingüística Aplicada, Valencia, Edición a cargo de F. Fernández, pp.
483-499.
SEISDEDOS-SÁNCHEZ, Carmen (1998), “El concepto de método en el Renacimiento”,
in Caballero, Juan Matas et al. (coords.), Actas del Congreso Internacional sobre
Humanismo y Renacimiento II, León, Universidad de León, Secretariado de Publicaciones, pp. 629-638.
TAVONI, Mirko (1998), “Renaissance Linguistics”, in Lepschy, Giulio (ed.), History of
Linguistics. Renaissance and Early Modern Linguistics, London, New York, Longman Linguistics Library, pp. 1-108.
WATSON, Foster (1968), The English Grammar Schools to 1660.Their Curriculum and
Practice, –Reimpresión de: 1908, Cambridge, Cambridge Univ. Press, London, Frank
Cass & Company Limited.
WIPPICH-ROHÁCKOVÁ, Katrin (2000), Der Spannisch Liebende Hochdeutscher. Spanischgrammatiken in Deutschland im 17. und frühen 18. Jahrhundert, Hamburg,
Helmut Buske Verlag.
694
Descargar