Palabras de despedida a Josep Palau i Fabre

un teatro europeo y un teatro clásico mientras en la Sala Tallers se da paso, sin más condicionantes que el del interés y la calidad del
espectáculo, a los jóvenes autores que pue-
dan renovar la escena catalana.
Soy consciente de que cuesta menos decirlo
que hacerlo.
MONOGRÁFICO
XXVIII MUESTRA NACIONAL DE TEATRO DE ZACATECAS
VIII. Dos finales de época
Palabras de despedida a
Josep Palau i Fabre
Amigos, amigas,
Ha llegado el doloroso momento de decir adiós a Josep Palau i Fabre. De despedir a una gran
personalidad de la cultura catalana y una de las personalidades de gran proyección internacional de nuestras artes y nuestras letras.
Palau i Fabre ha sido un intelectual y un verdadero creador; un innovador constante, un trasgresor permanente, un alquimista en estado puro.
Palau ha sido uno de los máximos representantes de la poesía y la literatura catalanas desde la
posguerra.
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Amigo y confidente de Picasso, su conocimiento y divulgación de la obra del artista han sido
una constante durante toda su vida. Palau ha sido reconocido como uno de los grandes especialistas mundiales en la obra de Picasso.
Palau fue miembro de la generación literaria de la República, especialmente marcada por la
Guerra Civil y escogió la vanguardia como una opción vital y estética.
Rompedor, rebelde, innovador, vanguardista, su espíritu subversivo dominó toda su obra. Él
fue un outsider de su tiempo, un poeta a contracorriente que hizo de su vida y de su poesía la
manifestación de un modo de ser y de comprender la existencia. Fue un príncipe de nuestras
letras. Aunque en algunos momentos se le quiso presentar como príncipe maldito.
Con Palau i Fabre desaparece uno de los grandes creadores catalanes del siglo XX, un intelectual comprometido y honesto. Un hombre que abrió la cultura catalana a los aires que venían
de afuera y que ha contribuido al conocimiento de nuestra cultura más allá de nuestro país.
Su compromiso con el país lo llevó a donar su valiosa colección de obras de arte, libros y objetos que constituyen un legado permanente y que se encuentra al alcance de todos en la Fundació Palau de Caldes d'Estrac.
Como Presidente de la Generalitat, le quiero rendir un último tributo de admiración y, a la
vez, de agradecimiento por lo que ha aportado a la cultura universal desde Cataluña. Y pido a
los catalanes y catalanas, que sean partícipes de esta admiración y de este respeto por su categoría literaria y artística.
Muchas gracias.
José Montilla
Muy Honorable Presidente de la Generalitat de Catalunya
25 de febrero de 2008
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