Capítulo I - La tortura a través del tiempo 33 esta solamente los visigodos introdujeron este grado de tortura en sus leyes, la cual permaneció durante la historia medieval temprana de la Península Ibérica, y fue revivida en el período de la reconquista después del Siglo XI50. Aunque otros pocos códigos germánicos conservan ecos de la ley romana sobre la tortura, el hecho del proceso acusatorio y las reglas no desarrolladas sobre los testimonios operaron contra la supervivencia práctica de la tortura hasta que el proceso de introducir el derecho romano en la cultura jurídica de la Europa del norte comenzó durante el Siglo XII51. II. La tortura durante los Siglos XII a XVIII en Europa En el Siglo XII se produjo una revolución en el derecho y la cultura jurídica y modeló la jurisprudencia penal –y muchas otras– en Europa hasta fines del Siglo XVIII. El hecho constituyó en los Siglos XI y XII un acontecimiento de incalculable valor: el renacimiento de los estudios de derecho romano docto en la Italia del Norte con la Escuela de Bolonia. Derivó de una transformación del derecho que había existido entre el Siglo VI y el XII y de una creciente conciencia de la necesidad de crear leyes universalmente obligatorias y aplicables a toda la Europa cristiana, y de la posibilidad de hacerlo52. Desde la segunda mitad del Siglo XIII hasta fines del Siglo XVIII, la tortura formó parte del procedimiento penal ordinario de la iglesia latina y de la mayor parte de los Estados de Europa53. Asimismo desde su irregular aparición en el Siglo XII y su evidente papel inicial como procedimiento policial, entró en los procedimientos legales regulares del derecho continental, adquirió su propia jurisprudencia y se convirtió en una especialidad erudita entre los juristas54. En todos los sistemas legales hay siempre un grado mayor o menor de divergencia entre esos dos ámbitos; en el caso de la práctica y la teoría Ver Mellor, ob. cit., p. 65. Peters, ob. cit., p. 62; ver Reinaldi, El Derecho Absoluto a no ser Torturado, ob. cit., p. 33. 52 Reinaldi, El delito de Tortura, ob. cit., p.18; Mellor, ob. cit., p. 67; Thot, ob. cit., p. 288; Peters, ob. cit., p. 63; 53 Thot, ob. cit., p. 289; Mellor, ob. cit., p. 68; Reinaldi, El derecho absoluto a no ser torturado, ob. cit., p. 36; Barbero, ob. cit., p. 23. 54 Reinaldi, El derecho absoluto a no ser torturado, ob. cit., p. 35. 50 51