Los grupos de psicoanalistas rivales y sus influencias en los candidatos a psicoanalistas Angel Garma * "No pude conseguir establecer entre sus miembros [del círculo Inicial de disclpulos] las relaciones cordiales que deberlan exlstir entre individuos que se dedican a la misma difIcil tarea." Freud, S., Sobre la historia del movimiento psicoanalftlco. los grupos de psicoanalistas rivales En el afán por contribuir al conocimiento de lo que H. Kohut (1964, pág. 844) ha denominado "nuestra peor enfermedad", que son las rivalidades entre analistas ("actitudes de irrespetuosidad mutua y de enojo entre colegas"), expongo una tentativa de descubrimiento y. caracterización de grupos de psicoanalistas rivales. El presente estudio tiene también como objetivo delinear un modelo explicativo de estas conductas que se repiten en distintos momentos y lugares, y con diferentes contenidos. Para ello, me apoyo en el material de las sesiones de los candidatos por mí analizados, lo cual creo que constituye un aspecto original de esta investigación. Como cualquier otro conjunto de seres humanos, los psicoanalistas tienen tendencias a organizarse en grupos entre los cuales pueden también desarrollarse rivalidades. Las disidencias que llevaron a un grupo de psicoanalistas a separarse de la Asociación Psicoanalítica Argentina hace poco tiempo, las federaciones distanciadas que existen en otros países, son exponentes más actuales de estas tendencias. Dejando a un lado el presente y refiriéndome al pasado trataré de describir dos grupos antagonistas alguna vez existentes entre los psicoanalistas de Buenos Aires. La existencia de esta rivalidad se hizo presente, por ejemplo, en el siguiente sueño de uno de mis candidatos. "Iba a concurrir a un partido de fútbol entre argentinos e ingleses. Para conseguir los boletos había que seguir cuatro colas." Del análisis del sueño de este candidato, que no era argentino, resultó que "los ingleses" del contenido manifiesto simbolizaban a los psi* Dirección: Avda. del Libertador 2392, 39, Buenos Aires, Argentina. 683 Angel Garma coanalistas argentinos que insistían más en ser partidarios de la "escuela inglesa" de Melanie Klein y sus discípulos, mientras que los futbolistas "argentinos" simbolizaban otros psicoanalistas que el candidato incluía en un grupo distinto. Las "cuatro colas que había que seguir" simbolizaban a los cuatro años de seminarios en el Instituto de Psicoanálisis, obligatorios para los candidatos. Al conducirse de este modo se conseguía entrar en el estadio de fútbol. Este simbolizaba a la Asociación Psicoanalítica Argentina. Una vez en ella, según expresaba el sueño, el candidato podía contemplar las peleas entre 105 dos grupos rivales de psicoanalistas, que estaban simbolizadas por el enfrentamiento de los dos equipos de fútbol. Como lo expresaba claramente el sueño al caracterizar como "ingleses" a uno de 105 equipos, uno de los dos grupos de psicoanalistas rivales afirmaba más que el otro su adhesión a la escuela psicoanalítica inglesa de Melanie Klein. Los que serían componentes de ese grupo insistían en que la génesis más importante de las neurosis se hallaba en 105 conflictos del individuo con su pecho materno. En cambio los psicoanalistas del otro grupo daban más importancia a los conflictos genitales. De acuerdo con dicha orientación el primer grupo hacía con mayor frecuencia interpretaciones de contenidos orales y el otro grupo interpretaciones de contenidos genitales. Para precisar más las características de dichos dos cesario realzar sus actitudes extremas. En la realidad, de 105 dos grupos estaban bien delimitados ni en lo que se componentes, ni a su ideología. Además, muchos de los bonaerenses no podrían ser incluidos en estos grupos. Los pslcoanaüstas del grupo. con tendencias grupos es neningún modo refiere a sus psicoanalistas a las interpretaciones orales buscaban más que los del otro grupo hacer sus interpretaciones refiriéndolas al pecho materno y a los instintos "orales", que en realidad son "digestivos", por lo cual los designo como "oraldigestivos". Afirmaban llamativamente que, además de a Freud, seguían a Melanie Klein 684 y a sus discípulos. Elfo no significaba que lo hiciesen más que los del otro grupo, sino que lo exponían como enarbolando una especie. de bandera. Influencias de los grupos de analistas rivales en los candidatos Solían considerar como imagen de la mayor satisfacción instintiva la de un pecho materno bueno que diese leche inagotablemente al individuo, mientras que el otro grupo la colocaba en un coito. También hacían depender las manifestaciones de la genitalidad de un individuo más de las elaboraciones previas de los instintos oraldigestivos que de las elaboraciones de los propios instintos genitales, como podría ser el complejo de Edipo. A su vez correlacionaban estas elaboraciones oraldigestivas con la intensidad de los instintos sádicos; según ellos, la maldad de un individuo lo llevaba a destruir con su envidia y avidez oral el pecho materno, y esto constituía la matriz de sus ulteriores reacciones neuróticas. Algunos de los psicoanalistas de este grupo hacían investigaciones novedosas a partir de concepciones psicológicas que en parte habían caído anteriormente en desuso en psicoanálisis. Entre los psicoanalistas que constituirían el otro grupo, las interpretaciones tendían a centrarse más alrededor de contenidos genitales. Insistían más que los otros analistas en la trascendencia de la satisfacción genital y en lo enfermizo de las toxicomanías, como el fumar, el alcoholismo y la ingestión indiscriminada de medicamentos, Consideraban que el núcleo patógeno de las neurosis se centraba en el complejo de Edipo, pero no en el clásico de los 3 a 5 años, sino en uno mucho más precoz, que se iniciaba en los primeros meses de vida y cuyos contenidos primordiales provendrían de fantasías hereditarias. A los conflictos y síntomas pregenitales les daban un significado regresivo, proveniente de la genitalidad, aunque pensaban que los contenidos pregenitales tenían gran importancia patoplástica. Los psicoanalistas de este grupo se exteriorizaban con frecuencia en el significado castratorio de la circuncisión del recién nacido, tanto la ritual judía, como la "higiénica" del cristiano. (Ni una ni otra forma de circuncisión son practicadas por la mayoría de los psicoanalistas y candidatos argentinos, a la que además le resulta extraño que psicoanalistas de otros países acepten este comportamiento.) Las ideas del grupo se apoyaban también en las de Melanie Klein y su escuela, pero no tan explícita- 685 Angél Garma mente como ocurría con el otro grupo. Se apoyaban igualmente en investigaciones novedosas de algunos de sus componentes, las cuales tenían independencia de investigaciones previas que no fuesen pslcoanalíticas. Por la trascendencia que tuvieron entre los psicoanalistas argentinos las ideas de Melanie Klein, un prominente psicoanalista norteamericano, defensor acérrimo de la moderna psicología del yo, los calificó despreciativamente de "melanesios". Esto constituye un claro exponente de la rivalidad entre grupos psicoanalíticos, pero ya en un nivel internacional. Cabe comparar dicho término "melanesio" con el de "melanoma" al que aludiré más adelante, también proveniente de situaciones de rivalidad entre psicoanalistas. Los dos grupos rivales 686 y los padres enfrentados Con los grupos mencionados parece que ocurría algo parecido a lo que sucede en el seno de una familia, en la que, bajo el influjo de un superyó severo patológico, los padres no están unidos afectivamente, tienen conflictos entre sí y han desarrollado rasgos caracterológicos contrapuestos. En tal caso cada uno de los padres actúa en sus comportamientos uno de los aspectos resultantes de la división de las tendencias instintivas en cariñosas y sensuales. Concretamente, en una familia con tales características la madre se vuelve hogareña, sacrificada, casta, hipocondríaca y "oraldigestiva", porque, como se suele expresar corrientemente, reúne "alrededor de su pecho" a la prole, de la que se preocupa mucho que coma bien, pero bastante menos de favorecerle adecuadamente comportamientos genitales. Por el contrario, el padre tiende a pasar mucho tiempo fuera del hogar, al que descuida, se dedica sobre todo a su profesión y a sus amigos y se vuelve "genital" con objetos poco valiosos. Influencias de los grupos de analistas rivales en los candidatos La ideología de cada uno de los grupos mencionados tenía características que de algún modo corresponden a las de aquellos padres desunidos y enfrentados. Influencia de la ideología de cada grupo en las interpretaciones de los candidatos Como consecuencia de la dependencia de sus psicoanalistas, los candidatos se inclinaban, a veces fervorosamente, hacia uno u otro grupo. Por lo tanto, cada ideología especial forzaba el contenido de las interpretaciones de los candidatos, más todavía que entre los psicoanalistas de los mismos grupos. Esto ocurría con alguna frecuencia en uno de mis candidatos que se inclinaba a la ideología del grupo con tendencias a las interpretaciones genitales. Muestra de ello fue el siguiente episodio. Una noche, poco después de haberse casado, fue rechazado por su esposa en una tentativa de coito. La esposa durmió inquieta y a la mañana siguiente se despertó con picaduras cutáneas pruriginosas del "único mosquito" que había en la habitación. Fiel a lo que consideraba la ideología de su grupo preferido, el candidato, en un tipo de actuación, le hizo la interpretación, de tipo genital, de que ella se encontraba en tal estado molesto porque había rechazado el pene de él, al que había vivenciado como agresivo. Después añadió, también de acuerdo con una supuesta ideología grupal, que si hubiesen tenido relaciones genitales ella hubiese dormido mejor, ya que "el mejor hipnótico es un buen coito". En cambio, no se le ocurrió hacer a la esposa una interpretación en el nivel de un pecho materno perseguidor, que en aquel episodio hubiese sido adecuada. En efecto, hacia dicha interpretación empujaban dos antecedentes. En la mañana previa al sueño la esposa había recibido una carta de la madre del marido. Con tierno amor de suegra le comunicaba que ahora que ellos dos se habían casado y que los sentía 687 Angel Garma tan felices, lo único que deseaba era morirse. Como consecuencia de esta actitud la joven esposa se angustió mucho inconscientemente y reaccionó abandonando a su marido durante todo el día, que fue a pasar en compañía de su mejor amiga de soltera. Además, por la noche se negó al coito. Las sesiones psicoanalíticas correspondientes del candidato parecieron demostrar que, en la esposa, por un lado, su culpabilidad edípica (incrementada por la carta) ante un sustituto materno como la suegra, por haberle quitado el hijo y, por otro lado, la seducción homosexual latente proveniente de las horas pasadas en compañía de su amiga íntima, la habían llevado regresivamente de la genitalidad a una situación oraldigestiva masoquista. Por ello, durante la noche no le interesó el pene del marido sino su sometimiento a un pecho materno perseguidor. En el mosquito que no la dejó dormir y que la picó tan molestamente, debió de haber proyectado contenidos de un pecho materno chupador, mordedor, envenenante y fálicamente agresivo. Vale decir que dicho mosquito simbolizaba para ella, además del pene de su marido, a su madre internalizada perseguidora, creadora de culpa y de remordimientos. sufriéndolo Por eso probablemente a modo de castigo. no hizo tentativas de librarse de él, Su preferencia por la ideología del grupo que tendía a interpretaciones genitales, había llevado al candidato a formular una ínterpretación psicoanalítica inadecuada e incompleta, que no sólo no alivió las tensiones psíquicas de su esposa, sino que además les trajo malas consecuencias. En efecto, poco después de la interpretación la esposa, en un movimiento torpe, rompió un valioso jarrón y luego se quejó al marido de un tumor órganos genitales en el pecho. El valioso jarrón debía de simbolizar sus psíquicamente destruidos por la persecución del susti- tuto materno que era la suegra, por su rechazo del coito y por la interpretación actuada e incompleta de su esposo, que vivenció como una agre- 688 sión. El tumor fantaseado en el pecho parecía simbolizar nalizado malo que no fe, fue" señalado en la interpretación al pecho íntery también a la Influencias de los grupos de analistas rivales en los candidatos misma interpretación del esposo que se le había metido dentro perjudicialmente. Por lo menos, fueron éstos los contenidos psicoanalíticos que surgieron en la sesión del esposo. En esa misma sesión el candidato me comunicó también que un hijo de su primer matrimonio estaba triste porque no había terminado bien sus deberes escolares y porque se les había marchado la sirvienta. Se pudo deducir psicoanalíticamente que en estas asociaciones su hijo representaba al candidato mismo y que los deberes escolares malos representaban sus interpretaciones psicoanalíticas inadecuadas e incompletas. En cuanto a la sirvienta, en primer término representaba para el candidato a la esposa que en el día y la noche anteriores se había alejado de él. Pero también me representaba a mí ya que el candidato me sentía, por un lado, alejado de él porque él no interpretaba adecuadamente y por otro, como "rechazándolo en el coito", es decir simbólicamente, no preocupándome por enseñarle psicoanalíticamente a interpretar bien. Impactos en los candidatos de la ideología específica de cada grupo En algunos aspectos de los impactos psíquicos inconscientes que causaban a los candidatos las rivalidades entre los dos grupos de psicoanalistas, era posible reconocer las características de índole oraldigestiva o genital propias de la ideología de cada uno de los dos grupos. Así, uno de mis candidatos consideró que ciertas explicaciones de una psicoanalista perteneciente al grupo con tendencias a las interpretaciones oraldígestivas eran agresivas y nocivas, y sufrió un síntoma hipocondríaco. Reaccionando a la ideología oraldigestiva de aquella psicoanalista, a la que se sintió y me sintió sometido, el candidato inconscientemente hizo provenir el síntoma mencionado de una fantasía con el contenido de una agresión hecha por una mujer mediante su pecho y dirigida contra el pecho. 689 Angel Garma Esto ocurrió del siguiente modo. En una sesion este candidato se quejó de tener algo raro, que posteriormente calificó de tumor, "debajo del ojo derecho, en la región del pómulo". En el transcurso ulterior de la sesión lo diagnosticó como "melanoma maligno", añadiendo que tal vez fuese mortal. (En esa misma región anatómica tengo yo una cicatriz pigmentada, que el candidato suponía que provenía de la extirpación de un tumor.) La sesión psicoanalítica aclaró bien la génesis de este síntoma hipocondríaco tan intenso. Fueron surgiendo claramente las circunstancias exteriores en las que se proyectaban las tendencias autodestructivas de este candidato. El día anterior otro candidato lo había criticado por tener las mismas concepciones psicoanalfticas que yo, diciéndole que él "era más garmiano que Garma" y llamándolo "chupamedias". Por la tarde se vio obligado a concurrir, por motivos de su formación, a un seminario donde una profesora del grupo con tendencias a las interpretaciones oraldigestivas y que con frecuencia criticaba veladamente a los psicoanalistas del otro grupo, había defendido con mucho énfasis como causa primordial de las neurosis la realización psíquica por parte del individuo de' intensas agresiones contra el pecho materno. El candidato consideró que éste era un empleo con finalidades "malignas" de las enseñanzas de Melanie Klein. Apoyándose en el resto diurno de "garmiano", proveniente de "Garma", "melanoma" del tumor hipocondríaco "maligno" derivaba de "Melanie" Klein y representaba a aquellas explicaciones "malignas". De acuerdo con lo que asoció el candidato, poseer él este .tumor y yo mi cicatriz pigmentada significaba que ambos estábamos dañados por tener que sufrir e~ .reuniones psicoanalíticas dicho tipo de expllcaciones, que se hacían provenir de. Melanie Klein, pero que en ocasiones estaban al servicio de una agresión contra mi modo de pensar psicoanalftico. 690 . El hecho de considerar que su "melanoma" era mortal expresaba su temor a verse obligado a aceptar en su mente dichas explicaciones "me- Influencias de los grupos de analistas rivales en los' candidatos lanokleinianas" destructivas. Según el candidato, a mí me había sentido en las últimas sesiones psicoanalíticas como si yo también las aceptase, y consideraba que esto era muy dañino para mi capacidad analítica. Justamente por sentirme a mí igualmente sometido, su melanoma, que simbolizaba el sometimiento a algo muy destructivo, estaba en la misma región anatómica que mi lesión facial destructiva. Otras circunstancias determinantes de la localización especial fueron que la región dañada era una saliente de algún parecido con un pecho, y que las explicaciones de la profesora se referían a agresiones contra el pecho. El candidato asoció pómulo con pecho y su tumor fantaseado y mi cicatriz, ambas pigmentadas, con un pezón o una aureola mamaria. Otro factor determinante para su elección de algo que estuviese pigmentado era el tabaco. Este candidato vivenciaba a los analistas del grupo con tendencias alas interpretaciones oraldigestivas como muy fumadores y nos sentía a él y a mí como obligados por ellos a ingerir en las reuniones científicas su humo de tabaco, que nos lo introducían como si fuese el contenido de un pecho malo. El candidato equiparaba esto a introducir forzadamente en nuestro psiquismo contenidos perjudiciales, de los cuales no nos podíamos librar. Pero los otros analistas que me había mencionado lo representaban también a él mismo agrediéndome. En efecto, el candidato había intentado infructuosamente dejar de fumar; el hecho de no haberlo conseguido lo valoraba como destruirse y destruirme como objeto libidinoso positivo y como psicoanalista capaz. Otro aspecto determinante de la localización del tumor "debajo del ojo", como el candidato lo describió textualmente, provenía de que él vivenciaba las explicaciones de la profesora como una aqreslón de una madre fálica contra nuestro "ojo del culo", es decir, el ano. Su reacción de desagrado contra aquellos psicoanalistas se apoyaba en que en' su infancia su madre lo sometió a críticas contra su padre, 691 Angel Garma del que ella finalmente se separó. Llevó al paciente. a vivir con ella a otro lugar, y esto tuvo consecuencias desfavorables para su buen desarrollo. Días antes de esta sesión este candidato vio incrementados sus sometimientos a sustitutos maternos porque había recibido noticias provenientes de su hermana mayor referentes a una grave enfermedad del padre. Dicha hermana, que para él era un sustituto materno, criticaba al padre y al paciente mismo como poco capaces de resolver problemas económicos. Por ello los equiparaba con "ídolos con pies de barro". 692 Esto lo hizo sentirse muy disminuido. Cuando posteriormente soportó las agresiones de las críticas de ser "más garmiano que Garma", de "chupamedias", de la conducta de la profesora del seminario y de mi supuesta aceptación de explicaciones psicoanalíticas que él no valoraba, todo ello le impidió en la transferencia identificarse con mis aspectos de psicoanalista capa? Y lo obligó a hacerlo con mis aspectos de persona destruida. Para lo cual fantaseó con tener él una lesión similar a la mía, con un significado latente de castración, de sometimiento anal y de pecho destruido. En otras palabras, el síntoma hipocondríaco de este candidato, es decir su pretendido "melanoma maligno", estuvo desencadenado por el temor a que la influencia nefasta de las rivalidades entre psicoanalistas, que para él eran repetición de las rivalidades entre sus padres que destruyeron su hogar y sobre todo de las persecuciones de sus padres internos contra él y contra mí, destruyesen también nuestro tratamiento psicoanalítico. Según el candidato, las agresiones de los psicoanalistas del grupo rival incrementarían en nosotros los sometimientos homosexuales anales a sustitutos internos y externos de padres internalizados malos, que regresivamente tomaban el aspecto de pechos maternos perseguidores. Esta situación nos llevaría a ambos en nuestra práctica profesional a hacer interpretaciones erróneas no liberadoras, y esto anularía nuestra capacidad psicoanalítica y, por lo tanto, nuestros resultados terapéuticos. Influencias de los grupos de analistas rivales en los candidatos Conflictos creados a los candidatos por los grupos antagónicos El tratamiento psicoanalítico didáctico no puede ser llevado a cabo en la misma situación de aislamiento ambiental que un tratamiento corriente. El candidato convive con su psicoanalista didacta en las actividades de su Asociación. Observa las reacciones de su psicoanalista en situaciones de rivalidad con los colegas, donde hay triunfos y derrotas. Como el candidato suele conocer el grupo hacia el que se inclina su psicoanalista, en muchas ocasiones reacciona de acuerdo con la ideología de este último y no por la liberación lograda a través del tratamiento psicoanalítico, sino por repetición transferencial de sometimientos infantiles a padres,' maestros y educadores. A menudo imita al grupo de su psicoanalista o bien, en actitudes de rebeldía, al grupo rival. Con esto disminuye su capacidad psicoanalítica e intensifica las discordias entre psicoanalistas. No resulta fácil elaborar estos contenidos en las sesiones pslcoanalíticas. El candidato teme, por ejemplo, exteriorizar opiniones negativas hacia el grupo rival del de su psicoanalista, ante la posible interpretación (a menudo justificada) de éste, de que en esta asociación el otro grupo representa un desdoblamiento del propio psicoanalista. Por otra parte también el psicoanalista didacta puede tener dificultades contratransferenciales en comprender e interpretar serenamente este tipo de ocurrencias del candidato, que manifiestas o enmascaradas son frecuentes en los análisis didácticos y que se refieren a otros psicoanalistas, con los que él está ambivalentemente ligado. Todos estos conflictos se pueden incrementar cuando el candidato intensifica su relación con algún psicoanalista de cualquiera de los dos grupos, como puede ser cuando inicia una supervisión o ingresa en un grupo de estudios. Un candidato que habia iniciado una segunda supervisión, tuvo un sueño en el que se encontraba en una fiesta y se asustaba porque iban a venir policías para pedir documentos de identidad. La fiesta sirn- .693 Angel Garma bolizaba su tratamiento y su formación en el Instituto Psicoanalítico. En cuanto a los policías y el pedido de documentos, se referían al temor inconsciente del candidato de que su psicoanalista supervisor, pero también yo -por eso eran varios los policíasinvestigásemos inquisitivamente hacia qué grupo psicoanalítico él se iba a inclinar. Esto derivaba también de sus vivencias infantiles con sus dos padres que le inquirían a cuál de ellos se inclinaba, cuando tenían disputas en las que le impedían intervenir y después de las cuales lo solían criticar. Los "psicoanalistas 694 internos" y los externos En parte, debido a la existencia de los grupos de psicoanalistas rivales, los objetos internos perseguidores de los candidatos a menudo se manifiestan en su psiquismo con el aspecto de los psicoanalistas reales, aunque tengan comportamientos muy distintos. He propuesto denominar "psicoanalistas internos perseguidores" a este tipo de objetos internos específicos de los candidatos, relativamente constantes. Dichas imagos inconscientes tienen comportamientos perjudiciales. Intentan reallzarlos apoyados en contenidos procedentes de las rivalidades existentes entre los psicoanalistas reales. Muestra de ello fue el siguiente episodio. En reuniones de un seminario de supervisión colectiva una candidata expuso varias sesiones de una de sus enfermas. No comprendía los contenidos psiquicos latentes, pero, a pesar de ello, cada tanto dicha candidata hacía interpretaciones a su enferma que, claro es, no resultaban adecuadas. Ante nuestro asombro nos explicó que se conducía así porque algunos psicoanalistas, a los que ella respetaba mucho, le habían enseñado que en la técnica pslcoanalítica moderna hay que interpretar frecuentemente, y que los psicoanalistas del otro grupo se conducían de otro modo, pero porque eran anticuados, ya que actualmente la técnica del silencio estaba superada. · Influencias de los grupos de analistas rivales en los'candidatos En esta conducta absurda la candidata cumplía con mandatos no de los psicoanalistas externos reales de cualquiera de los dos grupos, que reaccionaban de un modo más sensato con sus enfermos, sino de sus propios "psicoanalistas internos perseguidores". Estos últimos estaban creados por ella misma, pero actuaban en su psiquismo apoyándose en las rivalidades existentes entre grupos de psicoanalistas reales. Las sesiones que esa candidata presentó para su supervisión procedían de una enferma que se refería a un episodio de psicosis puerperal por el cual había atravesado. El mismo provino de que durante el parto y el puerperio se reactivaron en su psiquismo las persecuciones de una madre interna mala que trataba de desposeerla de su recién nacida, 16que la llevó a una tentativa de suicidio. Durante el transcurso de la supervisión surgió la suposición de que cuando la candidata analizaba a la paciente el episodio de psicosis puerperal, se había identificado contratransferencialmente con ella. Es decir, se pensó que la candidata se encontraba entonces en una situación psíquica parecida a la de su enferma, lo que hizo que se sometiese a sus psicoanalistas internos perseguidores. Estos últimos, apoyándose en acontecimientos reales surgidos de las rivalidades entre analistas, actuaron dentro de ella a modo de una madre mala que no le permitía cuidar bien a "su hija", o sea a su paciente. El comportamiento de la candidata puede ser también considerado como una reacción maníaca, en la que son demostrables los dos factores determinantes esenciales de cualquier reacción de este tipo: 1) el engaño del superyó a un yo masoquista, y 2) los esfuerzos del yo para exonerar de culpa a los objetos perseguidores mediante la propia culpabilización. En otra candidata se exacerbó una situación de sometimiento a las rivalidades entre los grupos de psicoanalistas cuando al final de su embarazo se agudizó su dilema referido a la circuncisión ritual del futuro hijo. En una de sus sesiones analíticas, entre otras asociaciones, expresó que los psicoanalistas de uno de los grupos mencionados reprochaban a un 695 Angel Garma psicoanalista del otro grupo haber tenido una conducta sexual punible. Con ello se refería indirectamente a mí, porque inconscientemente pensaba que yo actuaba de un modo análogo, o sea con una conducta sexual socialmente punible al no estar, según ella, de acuerdo con la circuncisión. A continuación tuvo otras asociaciones referidas a no poder pagar mis honorarios, lo que latentemente significaba que no se sentía capaz de reaccionar de modo potente para evitar aquella circuncisión. En otras asociaciones se refirió a que los familiares de su esposo, que simbolizaban a los psicoanalistas del grupo reprochador, siendo su esposo yo, no iban a tolerar que ella no hiciese a su hijo la circuncisión ritual. Latentemente este contenido significaba que dichos analistas y, en otra capa psíquica, yo mismo, no le íbamos a permitir que se liberase, en el tratamiento psicoanalítico conmigo, de sus sometimientos a los objetos internos castradores. Los psicoanalistas reprochadores que esta candidata me describía, aunque ella los creyese reales, eran fantaseados, creados por sus propios comportamientos internos destructivos. O sea que eran "psicoanalistas internos perseguidores". Pero para crearlos en su mente la candidata se apoyaba en comportamientos destructivos de los psicoanalistas reales, tal como a menudo se manifiestan en las rivalidades en los grupos de analistas. 696 En una reunión científica un psicoanalista relató que durante sus numerosos años de actividad profesional sus psicoanalizados, como consecuencia de la mejoría psicoanalítica, no solían someter sus hijos a la circuncisión. Aunque todos los asistentes no eran partidarios de la circuncisión ni tampoco la practicaban en sus hijos, la afirmación anterior provocó, junto a reacciones de simpatía de los psicoanalistas de un grupo, otras de oposición de los del otro grupo. Estos últimos apoyaron su oposición en diversas racionalizaciones, entre ellas la de afirmar que 'más perjudicial que la misma circuncisión era no practicarla en un hijo por obediencia a prohibiciones del analista. Pero el primer analista no se había conducido de este modo y, por otra parte, tampoco hubiese Influencias de los grupos de analistas rivales en los candidatos podido conseguir aquel resultado mediante prohibiciones. Se trataba, pues, de un tipo de reacción en el que por motivos de rivalidad grupos de psicoanalistas se oponen a que se superen psicoanalíticamente sometimientos destructivos. Al ir descub.riendo y caracterizando a sus "psicoanalistas internos perseguidores" durante el tratamiento psicoanalítico didáctico, los candidatos llegan a un conocimiento más profundo de sus objetos internos destructivos. Con ello secundariamente consiguen también, como en cualquier otro análisis, un mejor conocimiento de su ambiente exterior. Es decir que en su caso llegan a conocer mejor aquel ambiente que les es específico y que es el constituido por los otros analistas, donde existen muchos contenidos positivos y algunos otros negativos, entre ellos los de la rivalidad entre grupos de psicoanalistas. En situaciones de conflicto con su ambiente psicoanalítico, cuando un candidato consigue hacer conscientes y deslindar bien dentro de su psiquismo los diferentes contenidos y los factores determinantes de las persecuciones, en un principio entremezcladas, de sus fantaseados "psicoanalistas internos" y de los psicoanalistas externos, entonces se hace mucho más capaz de aprovechar lo favorable y defenderse de lo negativo procedente del ambiente psicoanalítico exterior. Con esto se encuentra también en mejores condiciones para que en el transcurso de su evolución formativa, que lo llevará a ser miembro de su Asociación, pueda buscar y crear bienestar en las relaciones entre psicoanalistas. Con lo expuesto anteriormente queda abierta a nuevos intentos de comprensión la reciente crisis de la Asociación Psicoanalítica Argentina, crisis que constituye un proceso no acabado todavía y en el cual los factores internos y externos, personales y grupales, ideológicos y científicos, llevaron a dicha institución a los sucesos conocidos. El epígrafe de este trabajo adquiere entonces especial actualidad. De nuestra comprensión y nuestras actitudes puede surgir una influencia modifica.dora positiva que variará el rumbo y el matiz pesimistas de los sucesos que Freud nos presentó. 697 Angel Garma Resumen Las asociaciones psicoanalfticas suelen tener grupos de psicoanalistas rivales. En una de ellas uno de dichos grupos tendía a interpretaciones referentes al pecho materno y el otro grupo a interpretaciones con contenidos genitales. Estos dos grupos en cierto modo representaban a padres desunidos, actuando uno de ellos las tendencias maternas cariñosas y el otro las . paternas sensuales. . La ideología de cada grupo causaba impactos especlficos en los candidatos, y esto influra en sus conductas terapéuticas con los pacientes. Además los candidatos proyectaban en los conflictos entre los psicoanalistas sus propios conflictos internos. También por este motivo creaban en su psiquismo imágenes destructivas de psicoanalistas, que se podrían denominar "psicoanalistas internos perseguidores". En los tratamientos didácticos la delimitación de dichas imágenes mejora a los candidatos y les permite enfrentar adecuadamente las rivalidades destructivas existentes entre los psicoanalistas. Summary Psychoanalytlc associations usually include antagonistic groups. In one of them one 01 such groups tended to center the interpretatlons on the maternal breast, whereas another group based theirs on genital contents. In a way, these two groups represented antagonistlc parents -one parent acted out the loving maternal tendencies and the other the sensual paternal ones. The ideology of each group made specific impacts on the candidates, and thls, In turn, in11uenced their therapeutic attitude towards their patients. Besides, the candldates projected their own inner confllcts on to the conflicts between the two groups. Thus, there arose in their psyche destructive images of psychoanalysts that mlght be called "inner persecutory psychoanalysts". In the course 01 didactic treatments, the delineation 01 such images help the candidates to face the destructive rivalries among analysts in an adequateway. Bibliografia 698 Abadl, M., "El coro y el héroe", Rey. de Psicoanál., XVI, 1959, pág. 322. -, "El grupo psicoanalltico como sociedad secreta", Rey. de PsicoanáJ., XVI, 1959, pág. 407. 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