Miocarditis chagásica aguda: Reporte de un caso y discusión. José Ignacio Castro 1, Ramón Rivera 2, Arístides 8altodano 3 (1) Médico Residente de Pediatrfa, Hospital Nacional de Niños "Dr.Carlos Saénz Herrera", (2) Jefe del Servicio de Cuidado Intensivo, Hospital Nacional de Niños "Dr. Carlos Saénz Herrera" (3) Medico Asistente del Servicio de Cuidado Intensivo. Hospital Nacional de Niños "Dr. Carlos Saénz Herrera" Dirección para correspondencia: Dr. José Ignacio Castro, Apartado Postal 31-1260 Plaza Colonial, Escazú Correo Electrónico: [email protected] Acta Pediátrica Costarricense 2003, volumen 17, número 3. La enfermedad de Chagas, descrita por Carlos Chagas en el año 1909, es actualmente un problema sanitario del continente americano, estrechamente relacionada con aspectos socioeconómicos y culturales 1. Se estima que alrededor de 16-18 millones de individuos están infectados y que otros 90-120 millones (25% de los habitantes de América Latina) se encuentran expuestos al riesgo de contraer esta infección 2 ,3,4,5.6.7,8 ventricular en la electrocardiografía que suelen ser transitorios, sin conllevar a trastornos de conducción o arritmias 10,11. La mortalidad asociada a la fase aguda es inferior al 10% 3. La literatura pediátrica costarricense carece de un registro de casos y es probable que su diagnóstico pase desapercibido o confundido con otras causas de miocarditis en el paciente infantil. CASO CLlNICO. Su cuadro clínico comprende tres periodos: agudo, crónico e indeterminado. El período agudo, caracterizado por un inicio inmediato posterior al contacto infeccioso, suele observarse principalmente en la población pediátrica, clínicamente manifiesto en un porcentaje inferior al 10% del total de casos1•8 , con síntomas inespecíficos como fiebre, dolor articular, adenopatías, esplenomegalia y dermato~atfas; que pueden remitir en 4-6 semanas o específicos como el complejo oftalmoganglionar descrito por Romaña 9 . El caso reportado corresponde a este primer período. Según Rosenbaum et al., solo un pequeño grupo de los pacientes (1-5/100000 infectados) con alguna manifestación aguda mueren a consecuencia de miocarditis o meningoencefalitis severa 8 ,10. En el período inicial de la fase aguda, menos del 5% de los pacientes suelen presentar signos cardiacos o extracardíacos dejando al 1 restante 95% como portadores asintomáticos . La detección de la miocarditis aguda suele ser excepcional, documentándose en un 5% de los pacientes infectados; tanto niños como adultos, y 1 suelen curar sin dejar secuelas . Aun más rara es la insuficiencia cardíaca. Pueden observarse cambios muy inespecíficos de la repolarización Se trata de una paciente femenina de 6 años y 3 meses de edad, vecina de la provincia de San José, Cantón Escazú y Distrito Los Anonas, en Costa Rica. Sin antecedentes familiares de importancia, pero con el antecedente personal de haber presentado una lesión periocular que fue valorada y tratada como una conjuntivitis 3 semanas antes. Acude al centro médico con historia de 8 días de evolución de cuadro clínico caracterizado por fiebre y dolor abdominal difuso, por lo cual recibió inicialmente paracetamol. Es revalorada dos días después por asociar fatiga, diaforesis, adenopatía auricular derecha, distensión abdominal, edema facial y en miembros inferiores. A su ingreso al Hospital Nacional de Niños se documentó peso de 21,5 Kg, frecuencia cardíaca de 130 latidos por minuto y presión arterial de 130/60 mmHg, aspecto tóxico, somnolencia, febril, edema bipalpebral, ingurgitación yugular a 45°, taquicardia, ruidos cardiacos rítmicos con un tercer ruido, levemente apagados, campos pulmonares con crepitaciones, murmullo vesicular conservado en bases, hepatomegalia 6 cm bajo reborde costal derecho y edemas bipodáJicos. El ecocardiograma mostró derrame pericárdico y función ventricular disminuida con una fracción de eyección inferior al 10%. El 12 procedente de las heces del vector , un triatomideo; insecto hematófago, del cual existen mas de 100 especies diferentes en el continente 3 american0 , tales como Triatoma dimidiata y Triatoma infestans. La forma infectante del parásito se aloja en el intestino terminal del insecto pasando a la sangre a través de heridas en piel o de mucosa intacta 8 . Otras formas de infección son las transfusiones con sangre contaminada, la transmisión congénita y, excepcionalmente, la infección accidental (personal de laboratorio) o por transplantes de órganos de pacientes infectados 12,13. En el caso descrito no se reportan datos acerca de la puerta de entrada del tripanosoma. No obstante, la madre de la paciente en el lapso del internamiento, recogió insectos en su hogar que al analizarlos se determinó que pertenecían a una especie del género triatomídeo: un Triatoma dimidiata (figura 1). diagnóstico probable al ingreso a Cuidados Intensivos, fue miocarditis viral indicándose tratamiento con furosemida, dopamina y nitroprusiato de sodio asociados a oxacilina y cefotaxima. Una vez intubada y ventilada, se procedió a realizar punción pericárdica guiada por ecocardiografía, drenándose 220 mL de un líquido amarillo transparente. Un día después del ingreso el ecocardiograma mostró una disfunción contráctil bilateral severa con una fracción de acortamiento del 11 %, insuficiencia tricuspídea, pulmonar y mitral leves, con dilatación biauricular, posterior a lo anterior se inicia la administración de gamma globulina a 2 g/Kg. Dos días después de ser admitida se observa disminución de derrame pericárdico, escaso derrame pleural y mejoría de la función sistólica, con una fracción de acortamiento del 16%. No obstante la paciente no muestra una mejoría franca por lo que se considera descartar la etiolog ía de Chagas, haciendo los estudios serológico, frotis y gota gruesa y Strout. El Strout y la serología son reportados como positivos. Se inicia itraconazole 200 mg/día y se solicitan títulos de IgG antiTrypanosoma cruzi. Al tercer día de internamiento y debido a la falta de respuesta al itraconazole se inicia tratamiento con benznidazole 5 mg/Kg/día, el cual 72 horas después se aumenta a 7.5 mg/Kg/día a completar un mínimo de 30 días. La paciente muestra mejoría en su función cardíaca y se inicia disminución de soporte inotrópico. Al octavo dia, se suspende la dopamina y se traslada al Servicio de Infectología, manteniendo digoxina, hidralazina, enalapril, acido acetilsalicílico, furosemida y benznidazole. Se egresa al décimo quinto día de internamiento en buen estado general. Ecocardiografía de control preegreso mostró una fracción de acortamiento del 25%, disfunción ventricular izquierda leve, sin insuficiencia mitral ni derrame pericárdico. Figura 1: Triatoma dimidiata La figura 2 representa los tres períodos de la enfermedad de Chagas 14. El período de incubación es de 4 a 10 días, encontrándose la puerta de entrada del vector en sólo el 10% de los casos, manifestada por un proceso inflamatorio local, si es conjuntival, se caracteriza por edema duro bipalpebral unilateral, inyección conjuntival, dacrioadenitis y adenopatía preauricular, parotídea o submaxilar1,9 y si ocurre en la piel entonces se observa chagoma de inoculación, infiltración rojiza, poco dolorosa con adenopatía satélite. Las principales manifestaciones sistémicas son: cuadro gripal, fiebre, astenia, adinamia, hepatoesplenomegalia, edemas en extremidades y adenopatías generalizadas, correspondientes al período agudo, en donde menos de un 5% de los individuos infectados (generalmente niños) presentan estos signos de la infección, de modo tal que prácticamente un 95% de los casos adquieren la enfermedad sin advertirlo. En citas control 1, 4 Y 6 meses después del egreso la paciente se encuentra en excelente estado general, sin síntomas de insuficiencia cardíaca y una función ventricular izquierda normal (fraccion de acortamiento del 35%). Es dada de alta por Infectología y actualmente es controlada en Cardiología y en el Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (INCIENSA). DISCUSiÓN La infección de la enfermedad de Chagas, ocurre por penetración del Trypanosoma cruzi al torrente sanguíneo 112 Incubación 4-10 días Asintomático Infección Sintomático MUERTE Permanente Período Crónico I Curación espontánea I Forma Cardiaca I FOnTIa Digestiva I Figura 2. Períodos de la enfermedad de Chagas Tomado y modificado de: Apt W. Enfermedad de Chagas. En Meneghello J, Fanta E, Paris E, Puga TF (eds). Pediatría. Buenos Aires, Argentina. Editorial Panamericana. 1997; 1050-1053. Si existe carditis se encontraran: taquicardia, soplo sistólico funcional y, excepcionalmente, un reducido número de pacientes pueden desarrollar insuficiencia cardíaca, reflejando la miocarditis severa subyacente 10,12, El caso descrito concuerda con los signos y síntomas de la fase aguda agregándose la miocarditis. El diagnóstico certero conllevó al tratamiento adecuado dando por resultado la mejoría y el egreso de la paciente en el lapso de 2 semanas, la cual es menor de las 4 a 6 semanas señaladas por la literatura como el rango de duración de la fase aguda chagásica. La miocarditis aguda se detecta en alrededor del 5% de los pacientes infectados, que por lo general curan sin dejar secuelas. La insuficiencia cardíaca es rara y en algunos pacientes se logra observar, en la radiografía de tórax, un aumento de la silueta cardíaca. En el ECG suelen observarse cambios inespecíficos y transitorios de la repolarización ventricular sin evidenciar arritmias ni trastornos de la conducción atrioventricular y/o intraventricular. Los bloqueos de rama derecha pueden observarse solo en casos fatales 10.11. El electrocardiograma de ingreso de la paciente mostraba complejos de bajo voltaje. PR normal y ritmo sinusal, lo cual es inespecífico ya que estos cambios se pueden observar en cardiomiopatías de cualquier otra etiología. De los pacientes que manifiestan alguna forma aguda de la enfermedad sólo un número muy reducido pueden morir principalmente como consecuencia de miocarditis severa 11 o, en inmunosuprimidos, por meningoencefalitis 15. Se ha estimado que esto ocurre entre 1 a 5 de cada 10.000 sujetos infectados 10.12. Rassi et al. Describe una mortalidad de <5% 16. Pueden observarse formas severas de miocarditis aguda que conlleven a la muerte del paciente. En estos casos la histología evidencia una severa miocarditis, con alteración estructural de las miofibra e infiltrados inflamatorios intersticiales con distribución difusa en todo el corazón 10 ,11,17. Un 50% de las histologías revelaron la presencia de parásitos. abundantes en algunos y muy escasos en otros. 113 durante 90 dias, administrado en 3 tomas diarias. Es necesario realizar un estricto control clínico y de laboratorio. Los efectos colaterales más importantes son: anorexia, insomnio, parestesias, dermatitis alérgica, gastritis y 3 depresión de la médula ósea . La fisiopatología de la miocarditis en la enfermedad de Chagas aún no ha logrado ser dilucidada ni entendida, siendo los mecanismos autoinmunológico y la inmunidad mediada por el parásito los más investigados actualmente12.18. La muerte del paciente puede deberse a la insuficiencia cardíaca, muerte súbita arrítmica y, en menor grado, por tromboembolismo. Una baja fracción de eyección asociada a arritmias ventriculares complejas son los principales 8 factores determinantes del pronóstic0 . El benznidazole, un nitroimidazol que inhibe la síntesis proteica y de ARN del Trypanosoma cruzi se emplea a dosis de 5 mg/Kg/día durante 60 días. Sus principales efectos secundarios son: cefalea, nauseas, vomitos, dolor abdominal, neuritis, dermatitis 3 urticariforma y agranulocitosis . El Trypanosoma cruzi casi siempre puede ser encontrado en sangre periférica durante las primeras 10 semanas después de la 8 infeccion . Ambos fármacos tienen un pobre 3 rendimiento en el período crónic0 , lográndose mejores resultados con el itraconazol en dosis de 6 mg/Kg/días durante 120 días. A la terapia específica es necesario agregar el tratamiento de la insuficiencia cardíaca congestiva cuando esta existe y la colocación de un marcapaso en casos de bloqueo AV completo. En el período agudo suelen utilizarse métodos directos: un examen microscópico al fresco tiene una sensibilidad del 50%, gota gruesa (permite la detección del parásito en un 70-75%), o métodos de centrifugado, Strout (detección en 95% de casos)19 o micro-Strout, dan mayor positividad. El hemocultivo seriado tiene también buen rendimiento. La medición de IgM e IgG específicas alcanzan concentraciones medibles entre las semanas 3 y 6 postinfección19. La curación durante la fase aguda se sustenta en la mejoria del cuadro clínico y la negativización de la parasitemia y de la serología; en los chagásicos crónicos, se basa en la negativización permanente de los parásitos sanguíneos determinado por xenodiagnósticos seriados, en hemocultivos y en la negativización de los anticuerpos líticos. Si estos exámenes persisten negativos durante 4 años o más debe considerarse como criterio de curación sin importar el resultado de la serología convencional, que puede persistir positiva de por 14 vida . Otra metodología; el xenodiagnóstico, tiene mayor aplicación en los casos crónicos: obteniéndose un 70% de sensibilidad con dos exámenes diarios durante tres días. Los reacciones inmunobiológicas tienen mayor rendimiento en el período crónico: PCR 20 reacción de hemaglutinación indirecta, inmunofluorescencia indirecta, fijación del complemento (Machado-Guerreiro) y ELlSA. Todas estas reacciones tienen alta sensibilidad y especificidad. CONCLUSIÓN La enfermedad chagásica en niños se presenta en menos del 10% del total de la población. Dicha enfermedad se manifiesta como una infección viral y puede ser diferenciada mediante una historia clínica exhaustiva, un examen físico meticuloso. las pruebas hematológicas y serológicas correspondientes. En nuestro conocimiento este es el primer caso pediátrico reportado. de enfermedad de Chagas con míocardíopatía tratado, que sobrevivió. La curación del mismo depende de la negativización permanente de sus exámenes por un período no menor de 4 anos, por lo que el seguimiento es muy importante. En el diagnóstico diferencial de la cardiopatía chagásica deben descartarse otras cardiopatías dilatadas tales como: idiopática, toxoplasmosis y viral. Las únicas drogas con especificidad para el tratamiento de esta enfermedad son los 3 compuestos nitrofuranos y los nitroimidazoles , ambos con actividad significativa en la fase aguda, variando su espectro de eficacia dependiendo de la geograffa ~ de las diferentes cepas de Trypanosoma cru¿Z1, REFERENCIAS se En la fase aguda utiliza niturtimox, un nitrofurano que inhibe la reSpiración oxidativa del Trypanosoma cruz; en do~~ de 15 mglKg/dfa 1. Elizari MV. Chagasic myocardiopathy: historical perspective. Medicina (Buenos Aires). 1999; 59 (SuppI2): 25-40. 112 Pediatría. Buenos Aires, Argentina. Editorial Panamericana. 1997; 1050-1053. 2. Pinto Dias JC. Epidemiology of Chagas disease. 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