Síndromes de dolor muscular funcional

Anuncio
ISBN: PPI201402DC4571
WWW.BOTICA.COM.VE
TRABAJO ACADÉMICO
ISSN: 2443-4388
N° 9, Año 2012
Síndromes de dolor muscular funcional
El sistema musculoesquelético es el sistema de órganos
más grande que existe en el cuerpo humano al tomar
en cuenta su peso; comprende más de 400 músculos
esqueléticos. Los problemas asociados a dolor o fatiga en
este sistema se encuentran entre las causas principales de
consultas médicas.1,2 La mayoría de estos pacientes entran
en la categoría de Síndrome de Fibromialgia (SFM) o su
subtipo Síndrome de Dolor Miofascial (SDM).
El SFM es un desorden caracterizado por dolor
generalizado, como consecuencia de un procesamiento
anormal del dolor en el Sistema Nervioso Central (SNC).
Como evidencia confirmatoria estudios recientes han
demostrado que los pacientes con SFM presentan niveles
elevados de glutamato y sustancia P3. El SFM es uno de
los síndromes somáticos funcionales que se solapa con
el dolor lumbar idiopático, cefalea tensional, síndrome
de colon irritable, síndrome de fatiga crónica, disfunción
temporo-mandibular, síndrome premenstrual, trastornos
del sueño entre otras.
“reumatismo muscular” en 1852 para describir cambios
palpables en los músculos como consecuencia de una
fiebre reumática.5
A inicios de 1900 Gowers discutió la presencia de dolor
musculoesquelético en una variedad de condiciones,
incluyendo el lumbago, el cual consideró que era causado
por una inflamación, acuñando el término de “fibrositis”.6
Stockman con frecuencia discutía la hiperplasia
conectiva tisular, la cual fue un acercamiento hipotético
de la fisiopatología de la condición fibrosítica.7 Kellgren
fue el primero en reportar el dolor referido durante la
palpación de puntos dolorosos en el músculo.8
En la última parte del siglo XX, con los trabajos
extraordinarios de Travel, Simons y Gerwin sobre el
síndrome de dolor miofascial (SDM), el trabajo de Wolfe,
Yunus y Bennett en fibromialgia (FM) y los esfuerzos de
muchos otros clínicos, se vino a entender una distinción
entre esos dos síndromes de dolor muscular.9,10,11
Travel definió el síndrome de dolor miofascial como un
El SDM es un desorden común, que consiste en dolor desorden de dolor regional asociado con áreas dolorosas,
muscular que se origina en el tejido que lo recubre que al ser palpadas generaban un fenómeno sensitivo
(fascia), es uno de los diagnósticos más frecuentes en las (dolor referido) en áreas anatómicas distintas.
clínicas del dolor
La fibrositis y posteriormente FM, fue caracterizada como un
El dolor miofascial puede causar dolor local o referido, proceso más sistémico, frecuentemente asociado a desórdenes
sensación de tensión, crepitación, rigidez, limitación del sueño y algunas veces a síndromes afectivos.12,13,14
del movimiento, fenómenos autonómicos, respuesta de
espasmo local (REL) en el músculo afectado y debilidad
Fisiopatología
muscular sin atrofia muscular. Puntos Gatillo (PG
o trigger points) que causan dolor referido en áreas La presencia de una banda taut ubicada en un músculo
características para músculos específicos, restricción del es necesaria como precursor de un PG (Gráfico 1). La
rango de movimiento y una REL visible o palpable, son fisiopatología del dolor miofascial no está totalmente
signos clásicos de dolor miofascial.
aclarada. Investigaciones recientes sugieren una
sensibilización de mecano-receptores sensitivos de bajo
Recuento Histórico
umbral, asociado con disfunción de las placas motoras
terminales en el área de un PG, proyectándose a neuronas
Casos de dolor que resultan de la palpación de zonas del asta dorsal sensibilizadas en la médula espinal. El dolor
sensibles en el músculo comenzaron a reportarse en la referido desde PG, así como las REL, pueden ser producidas
literatura a inicios de 1800. Virchow acuñó el término en la médula espinal después de estimular un locus sensitivo.
Tipos de Puntos Gatillo:16
• PG Activo: es un PG que provoca dolor, restricción
de la movilidad y debilidad de forma espontánea.
• PG Latente: es un PG que no ocasiona dolor, salvo se
realice presión sobre el mismo, pero puede ocasionar
limitación de la movilidad y debilidad del músculo
afectado. Es un área con potencial a comportarse
como un PG activo en el futuro.
• PG Secundario: es un punto hiperirritable en el músculo
que se hace activo con la hiperactividad de otro músculo.
• Punto miofascial satélite: es un punto hiperirritable
que se hace activo debido a que el músculo limítrofe
está localizado en la región de otro PG.
Diagnóstico Diferencial
Características diferenciales entre Dolor Miofascial con
puntos gatillo de Fibromialgia17
Gráfico 1: Maniobra de palpación en músculo
que presenta una banda taut
Criterios para la Identificación de Puntos Gatillo15
• Presencia de una banda taut palpable en el músculo.
• Punto de dolor en un nódulo ubicado en una banda taut.
• Reconocimiento por parte del paciente de dolor con
la presión a un nódulo.
• Dolor limitante con movimientos de estiramiento
del músculo.
Factores Generadores de Puntos Gatillo2
Ningún factor independiente puede ser apuntado como
responsable de la producción de puntos gatillo. Las
posibles causas se mencionan a continuación:
• Traumatismo al sistema musculoesquelético o discos
intervertebrales.
• Condiciones inflamatorias (colecistitis, apendicitis,
gastritis).
• Isquemia miocárdica.
• Falta o exceso de ejercicio y mala postura.
• Fatiga generalizada, alteraciones del sueño y estrés
emocional.
• Deficiencias nutricionales.
• Enfriamiento intenso de áreas corporales (dormir al
frente de un aire acondicionado)
• Obesidad.
• Uso de tabaco.
2
Características
Síndrome de Dolor
Miofascial con
Puntos Gatillo
Síndrome de
Fibromialgia
Razón
Femenino:Masculino
1:1
4-9:1
Dolor
Local o regional
Generalizado o
difuso
Músculo
Aumento de tensión
con bandas taut
Se siente suave
Rango de
movimiento
Restringido y/o
disminuido
Hipermóvil o
normal
Examen físico
Presencia de
puntos gatillo
(trigger points)
Presencia de
puntos dolorosos
(tender points)
Otros síntomas
asociados
Infrecuentemente
asociado a fatiga,
sueño no reparador,
parestesias, cefalea,
colon irritable,
sensación de
hinchazón
Frecuentemente
asociado a fatiga,
sueño no reparador,
parestesias, cefalea,
colon irritable,
sensación de
hinchazón
Tratamiento
La piedra angular del tratamiento del SDM consiste en
aliviar el dolor y la inflamación, prevenir el desarrollo de
mayores lesiones, reducir el espasmo muscular, corregir
las posturas anormales y mejorar la circulación.18
Inyecciones en Puntos Gatillo
Las inyecciones en puntos gatillo (gráfico 2) son realizadas
con bupivacaína, etidocaína, lidocaína, solución salina
o agua destilada estéril.19,20,21,22 La técnica de punción
seca (dry needling) es realizada ocasionalmente, sin la
inyección de ninguna sustancia.
N° 9, Año 2012
Los resultados de las inyecciones en PG son más efectivas del tratamiento. Las técnicas de masaje de liberación
si existe una REL. El uso de ultrasonido puede ser útil miofascial son importantes en el tratamiento del SDM.5,29
para visualizar las REL en músculos más profundos, pero
no es de ayuda en la identificación de PG.23
Terapia Ocupacional
Esteroides pueden ser usados en áreas posiblemente
asociadas con inflamación, como en el síndrome de
hombro congelado. Las inyecciones de PG con toxina
botulínica (BOTOX) han mostrado que proveen de un
efecto duradero, su mecanismo de acción posiblemente
esté relacionado con el bloqueo de la liberación de
acetilcolina a nivel de la unión neuromuscular en las
placas motoras terminales disfuncionales.24,25,26,27
Relajantes Musculares y Anti-inflamatorios
No Esteroideos (AINEs)
El rol de la terapia ocupacional está en la corrección postural
y la ergonomía para evitar que el proceso se perpetúe.
Psicología
El rol del psicólogo es ayudar a prevenir y/o corregir
conductas mal adaptativas, adicionalmente facilitar la
reintegración funcional completa en conjunto con la
rehabilitación vocacional. Los pacientes con SDM tienen
mayores niveles de ansiedad y depresión,4 por tanto la
terapia cognitiva conductual es muy importante en el
tratamiento de estos pacientes.
Relajantes musculares y AINEs pueden ser usados como
tratamiento adjunto al tratamiento activo con inyecciones
Otras Disciplinas
en PG y terapia física y ocupacional. En raras ocasiones
el uso de este tipo de medicamentos de forma aislada es La terapia con láser de bajo nivel ha mostrado resultados
efectivo en el tratamiento del SDM.
controversiales. En un meta-análisis no mostró ningún
efecto sobre patologías de dolor muscular. En un ensayo
Terapia Física
clínico mostró efectos positivos■31
La terapia física es una de las modalidades fundamentales
en el tratamiento del SDM. En la presentación aguda,
técnicas pasivas como el hielo o la iontoforesis
(electroterapia) puede ser usada. El uso de ultrasonido
ha demostrado ser tan efectivo como las inyecciones en
puntos gatillo.28 El uso de férulas o inmovilización debe
ser muy breve y sutil, la progresión a ejercicios de rango
de movimiento activo debe realizarse tan pronto como
sea médicamente factible.
En la presentación subaguda cuando el paciente
comienza a presentar síntomas más consistentes con
un SDM, comportamientos/actividades que perpetúan
una lesión deben ser identificados y corregidos. Los
desbalances posturales, la debilidad muscular, disfunción
cinética y los espasmos son todos importantes objetivos
Referencias
1. Victoria Wapf, Andre Busato. Main health related
problems patients attended their physicians for. BMC
complementary and alternative medicine 2007;7:41.
2. Schneider M, Veron H, Ko G, Lawson G, et al. Chiropractic
management of fibromyalgia syndrome, a systematic review
of the literature. J Manipulative Physiol Ther 2009;32:25–40.
3. Harris RE, Sundgren PC, Pang Y, Hsu M, et al. Dynamic
levels of glutamate within the insula are associated with
improvements in multiple pain domains in fibromyalgia.
Arthritis Rheum 2008;58:903–7.
4. Simons DG: Myofascial pain syndromes: Where are we?
Where are we going? Arch Phys Med Rehabil 1988;69: 207–12.
5. Virchow R: Ueber parenchymatose entzudung. Arch
Pathol Anat 1852;4:261–79.
Gráfico 2: Técnica de inyección en punto gatillo.
N° 9, Año 2012
3
6. Gowers WR: Lumbago: Its lessons and analogues. Br Med
J 1904:117–21.
7. Stockman R: The causes, pathology and treatment of
chronic rheumatism. Edinburgh Med J 1904;15:352–5.
8. Kellgren JH: A preliminary account of referred pains arising from muscle. Br Med J 1938;1938:325–7.
9. Travell JG Simons DG: Myofascial Pain and Dysfunction.
The Trigger Point Manual. The Lower Extremities. Baltimore, MD, Williams and Wilkins, 1992.
10. Yunus M, Masi AT, Masi AT, et al: Primary fibromyalgia
(fibrositis): Clinical study of 50 patients with matched
normal controls. Semin Arthritis Rheum 1981;11:151–71.
11. Wolfe F, Smythe HA, Yunus MB, et al: The American
College of Rheumatology 1990 criteria for the classification of fibromyalgia: Report of the multicenter criteria
committee. Arthritis Rheum 1990;33:160–72.
12. Smythe H, Moldofsky H: Two contributions to understand- ing
of the “fibrositis” syndrome. Bull Rheum Dis 1977;28: 928–31.
13. Wolfe F: Fibrositis, fibromyalgia, and musculoskeletal
disease: The current status of the fibrositis syndrome.
Arch Phys Med Rehabil 1988;69:527–31.
14. Wolfe F, Simons DG, Fricton J, et al: The fibromyalgia and
myofascial pain syndromes: a preliminary study of tender
points and trigger points in persons with fibromyalgia
myofascial pain syndrome and no disease. J Rheumatol
1992;19:944–51.
15. Chandola HC, Chakraborty A. Fibromyalgia and Myofascial Pain
Syndrome-A Dilemma. Indian J Anaesth. 2009;53:575–581.
16. Peggy A, Houglum. Therapeutic Exercise for
Musculoskeletal Injuries. 2nd ed. Human Kinetics; 2005.
Myofascial Trigger Points; 165.
17. Hans SC, Harrison P: MPS and TP management, Reg
Anesth 1999; 22:89–101.
18. Harden RN. Muscle Pain Syndromes. Am J Phys Med
Rehabil 2007;86(Suppl:S47-S58).
19. Hameroff SR, Crago BR, Blitt CD, et al. Comparison of
bupivacaine, etidocaine, and saline for trigger-point
therapy. Anesth Analg 1981;60:752-5.
20. Hong CZ. Lidocaine injection versus dry needling to
myofascial trigger point. The importance of the local
twitch response. Am J Phys Med Rehabil.1994;73:256-63.
21. Venâncio Rde A, Alencar FG, Zamperini C. Different
substances and dry-needling injections in patients with
myofascial pain and headaches. Cranio 2008;26:96-103.
22. Wreje U, Brorsson B. A multicenter randomized controlled
trial of injections of sterile water and saline for chronic
myofascial pain syndromes. Pain 1995;61:441-4.
23. Rha DW, Shin JC, Kim YK, Jung JH, Kim YU, Lee SC.
Detecting local twitch responses of myofascial trigger
points in the lower-back muscles using ultrasonography.
Arch Phys Med Rehabil 2011;92:1576-1580 e1.
24. Aoki KR. Evidence for antinociceptive activity of
botulinum toxin type A in pain management. Headache
2003;43 Suppl 1:S9-15.
25. Lang AM. Botulinum toxin therapy for myofascial pain
disorders. Curr Pain Headache Rep. Oct 2002;6(5):355-60.
26. Jeynes LC, Gauci CA. Evidence for the use of botulinum
toxin in the chronic pain setting--a review of the literature.
Pain Pract 2008;8:269-76.
27. Cheshire WP, Abashian SW, Mann JD. Botulinum toxin
in the treatment of myofascial pain syndrome. Pain
1994;59:65-9.
4
28. Esenyel M, Caglar N, Aldemir T. Treatment of myofascial
pain. Am J Phys Med Rehabil 2000;79:48–52.
29. Gam AN, Warming S, Larsen LH, et al. Treatment of
myofascial trigger-points with ultrasound combined with
massage and exercise--a randomised controlled trial. Pain
1998;77:73-9.
30. Gam AN, Thorsen H, Lonnberg F: The effect of low-level
laser therapy on musculoskeletal pain: A meta-analysis.
Pain 1993;52:63–6.
31. Simunovic Z: Low level laser therapy with trigger points
technique: a clinical study on 243 patients. J Clin Laser
Med Surg 1996 Aug;14:163–7.
Autor
Dr. Romer Mosquera
[email protected]
Síndromes de dolor muscular funcional by Dr. Romer Mosquera / Botica Revista Medica Digital N° 9 is licensed under a
Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 4.0 Internacional License.
Creado a partir de la obra en http://botica.com.ve/.
N° 9, Año 2012
Descargar