“Entre el Discurso Oficial y las Decisiones Concretas de Política: ¿A Quién Creer? Por Mario Brodersohn EL DISCURSO CONFRONTATIVO SOBRE LA DEUDA VERSUS LA CONVENIENCIA DE PONER PUNTO FINAL AL DEFAULT La estrategia de negociación de la deuda pública anunciada por el Gobierno gira en torno a dos carriles. Por un lado, esta el carril de negociación relacionado con la magnitud de la quita a realizar sobre la deuda en default. El Gobierno ha ofrecido recientemente reemplazar cada 100 dólares de la deuda en default por un nuevo bono valuado en 27 dólares, esto es, propone una quita del 73%. Los acreedores han rechazado esta oferta y plantean que el canje se realice a un precio de 62 dólares, es decir, reducen la quita del 73% propuesto por el Gobierno al 38%. ¿Qué piensa el mercado financiero internacional del valor de la deuda en default?. El precio de mercado de los títulos públicos en default se acerca mucho más a lo planteado por el Gobierno que al de los acreedores. En efecto, los títulos en default se cotizan a un precio que varia en torno a los 32 dólares, lo cual implica una quita del 68%. El otro carril de negociación de la deuda esta dado por el límite de tiempo que se fijo el Gobierno para definir estas negociaciones. El Gobierno acordó suspender hasta fin de año el acuerdo con el FMI y en el ínterin seguir haciendo frente a todos los vencimientos de deuda Septiembre de 2004 y de intereses con los organismos financieros internacionales sin contar con ninguna contraprestación de esos organismos. En consecuencia, el Gobierno cancelará los vencimientos de deuda con esos organismos en el periodo agosto-diciembre por 1.800 millones de dólares. Este esquema no se puede sostener en el tiempo dado que los vencimientos de capital con esos organismos financieros en el 2005 suman 6.600 millones de dólares (incluye el vencimiento de los 1.100 millones renovados recientemente por un año por el FMI). A ello hay que agregar que vencen 4.200 millones de dólares de la deuda en bodens y otros títulos que se vienen cancelando regularmente. Mas allá de las diferencias que hoy en día se observan entre las partes negociadoras, ¿habrá o no acuerdo con los acreedores? Nuestra hipótesis es que luego de una etapa inicial de discursos y pronunciamientos confrontativos finalmente habrá un acuerdo sobre la deuda en un precio cercano al del mercado, esto es, 32 dólares. Esta negociación no debería extenderse más allá de febrero 2005 para no tener que seguir pagando a los organismos internacionales. Para alcanzar este objetivo el Gobierno deberá realizar nuevas concesiones que permitan subir el precio de 27 a 32 dólares con la finalidad de lograr un nivel de aceptación cercano al 80% de la deuda en default. El Gobierno ha dejado Econométrica S.A economic research and forecasts 1 “Entre el Discurso Oficial y las Decisiones Concretas de Política: ¿A quién creer? Por Mario Brodersohn trascender que tiene prácticamente asegurado un nivel de aceptación entre el 50 y 60%. Este es un planteo equivocado porque las mismas características que definen el proceso de toma de decisión en la negociación conducen a un planteo que podríamos definir como binario: o todos entran o todos quedan afuera, no hay soluciones intermedias. Por supuesto, este razonamiento excluye a los fondos de pensión, que pueden recibir otras compensaciones del Gobierno. ¿Cuáles son los instrumentos técnicos que tiene a su disposición el Gobierno para subir la oferta de 27 a 32 dólares? Los acreedores han propuesto un pago cash inicial de 5.200 millones de dólares. Si bien no va ser nada sencillo dejar de lado el pago en efectivo, el Gobierno cuenta, además, con una amplia variedad de instrumentos para mejorar su oferta. Ellos son: subir la tasa de interés, acortar los plazos, pagar una suma inicial en efectivo como contrapartida por el reconocimiento de atrasos de intereses o señalando que los fondos fueron provistos por el FMI, mejorar los términos del bono atado al crecimiento, etc.. El simple listado de la variedad y complejidad de los mecanismos técnicos con los que cuenta el Gobierno para mejorar la oferta pone claramente de manifiesto las dificultades para elaborar un discurso que intente transparentar si hubo o no nuevas concesiones a los acreedores. En otras palabras, la discusión sobre las características positivas o negativas del acuerdo final con los acreedores va a estar dominado por conceptos tecnocráticos que van a atentar Septiembre de 2004 contra una accesible transmisión de ideas en términos políticos-electorales. Nada más ilustrativo sobre este tema que la ausencia total de un análisis serio y claro de las evidentes concesiones realizadas a los acreedores por el Gobierno cuando modificó la propuesta de Dubai en septiembre del 2003. En efecto, en Dubai y a partir de entonces, el Gobierno sostuvo reiteradas veces: • Primero, la inflexibilidad de su propuesta de una quita del 75% sobre un valor nominal de lo adeudado. Esta deuda ascendía a 81.200 millones de dólares, de la cual proponía pagar 20.300 millones de dólares. • Segundo, no reconocería los intereses atrasados por 16.000 millones de dólares. • Tercero, la tasa de interés del bono de descuento a 32 años por la nueva deuda comenzaba en el 1% anual, subía gradualmente en el tiempo hasta alcanzar una tasa máxima del 5% anual. Nueve meses después, en junio del 2004, el Gobierno modificó la propuesta de Dubai. En lugar de los 20.300 millones propuso pagar 43.200 millones de dólares. Además, propuso un nuevo bono descuento a 30 años y una tasa de interés fija del 8.5% anual durante esos 30 años. Dado que la oferta inicial de Dubai y la más reciente de junio difieren no sólo en el monto de la quita sino también en los plazos de pago y en las tasas de interés, ¿cómo comparamos una oferta con la otra? La técnica financiera para hacer esa Econométrica S.A economic research and forecasts 2 “Entre el Discurso Oficial y las Decisiones Concretas de Política: ¿A quién creer? Por Mario Brodersohn comparación se basa en actualizar al momento actual, para las dos alternativas, los pagos a realizar en el futuro tanto por los vencimientos de capital como de intereses. en el riesgo Brasil (100 puntos básicos) permitió por si sólo mejorar la oferta argentina en 3 dólares. En efecto, cuanto más baja es la tasa de descuento más elevado es el valor presente de la deuda. Para actualizar esos flujos futuros se requiere definir previamente la tasa de descuento de esos flujos futuros. En Estados Unidos se toma la tasa de interés de un bono del Tesoro a 30 años (en la actualidad esa tasa es del 4.8% anual) si la deuda es a treinta años o la tasa de interés de los bonos del Tesoro a plazos menores si la deuda es a menor plazo. En la Argentina hay que agregar a la tasa de interés de los Estados Unidos lo que se denomina el riesgo país. Obviamente, en las actuales circunstancias el riesgo argentino es excesivamente elevado porque supone que no hay acuerdo de la deuda (el 54,7% anual, es una versión más digerible que la tradicional de 5.470 puntos básicos). Por ello, una alternativa razonable es tomar el riesgo país de Brasil, que en la actualidad es del 5 % anual por encima de la tasa de interés en Estados Unidos. Todo este introito tiene el objetivo de cuantificar la magnitud de la mejora de la nueva propuesta realizada en junio en relación a la anterior de Dubai. En el caso de Dubai, bajo el supuesto de una tasa de descuento del 12% anual (tasa prevista antes de la disminución del riesgo país en Brasil), el valor presente del nuevo bono era 8 dólares; es decir, la propuesta de Dubai implicaba una quita del 92% en términos de valor presente neto. Estas consideraciones sugieren que la tasa de descuento se ubicaría en torno al 11% anual. En este sentido, un aporte significativo para mejorar la oferta argentina ha sido la caída del riesgo país de Brasil en los últimos cinco meses en un 2% anual. Este descenso en la prima por riesgo de Brasil pesó mucho más en la disminución de la tasa de descuento a utilizar para descontar los flujos futuros de la oferta oficial que los recientes aumentos en la tasa de interés de corto plazo de la Reserva Federal de los EE.UU.. Es decir, por cada 1% de caída Septiembre de 2004 A su vez, el valor presente de la última propuesta es de 27 dólares (sin incluir ningún valor adicional por el bono de crecimiento y utilizando el 11% como tasa de descuento). En consecuencia, el Gobierno de un plumazo más que triplico su oferta inicial al pasar de 8 a 27 dólares. Este porcentaje de mejora es muy superior al que surge de comparar la oferta de 20.300 millones con la de 43.200 millones. El método de valor presente es mucho más adecuado porque en la nueva propuesta de deuda no sólo la quita es menor sino que, además, incluye una tasa de interés más elevada. Dada la sustancial mejora que significó la nueva propuesta de deuda del Gobierno, ¿cuál fue su costo político? Ninguno. En efecto, la decisión de triplicar la oferta de Dubai no dio lugar a ningún comentario crítico de los sectores políticos más reacios a esas concesiones, ni tuvo ningún impacto en la opinión pública. Mas aún, el Gobierno siguió con el mismo discurso Econométrica S.A economic research and forecasts 3 “Entre el Discurso Oficial y las Decisiones Concretas de Política: ¿A quién creer? Por Mario Brodersohn confrontativo que tenía antes de realizar esa concesión. En consecuencia, el Gobierno tiene un amplio margen de maniobra para mejorar la oferta si decide, para facilitar un nivel de aceptación cercano al 80% de la masa de acreedores, subir el precio de 27 a 32 dólares. Este salto es mucho menor que el ya realizado cuando pasó de la oferta de Dubai de 8 a la más reciente de 27 dólares. En realidad, el Gobierno puede adoptar una actitud triunfalista aún después de conceder un precio de 32 dólares. El Gobierno podría señalar que la quita en la deuda argentina puede ser considerada como uno de los arreglos más exitosos en relación a las experiencias recientes de quita en otros países. En efecto, frente a la quita del 68% que implica un precio de 32 dólares Rusia en 1999/2000 tuvo una quita del 30 %, Ecuador del 35% (200001) y Uruguay del 15% (2003). Mas aún, la propuesta de renegociación de la deuda realizada por el Gobierno de la Provincia de Mendoza no tuvo ninguna quita sobre el valor nominal y sólo logra bajar a la mitad la tasa de interés y diferir en el tiempo la amortización de capital. EL DISCURSO CONFRONTATIVO SOBRE LAS PRIVATIZADAS VERSUS LA NECESIDAD DE HACER CONCESIONES PARA TERMINAR CON LAS INCERTIDUMBRES Y ACORDAR CON EL FMI Llegar a un acuerdo con los acreedores es condición necesaria pero no suficiente Septiembre de 2004 para cerrar trato con el G7 y por ende con el FMI. Se requiere además solucionar los temas relacionados con la rentabilidad futura y la autonomía de decisión de las empresas privatizadas. Muy probablemente estos temas sean para el G7 más importantes que los vinculados con la negociación con los acreedores. En este sentido preocupan dos temas. Primero, el proyecto de ley de regulación de las empresas privatizadas contiene algunos puntos que son rechazados por las empresas y por el G7. Segundo, el aumento de las tarifas a nivel de los consumidores finales de los servicios privatizados. La negociación con las empresas privatizadas será un tema más espinoso y delicado en su presentación política para el Gobierno. El impacto político final va a depender mucho más de si se atenúa en el tiempo el aumento de las tarifas para los consumidores que de la negociación de la ley de regulación de los servicios privatizados. En el caso de los aumentos tarifarios suponemos que las empresas privatizadas van a estar predispuestas a reconocer y atenuar en el tiempo el costo político de estos aumentos de precios en la medida que el Gobierno este dispuesto a negociar otros mecanismos de compensación, sea a las privatizadas o a los consumidores. En síntesis, dado que el Gobierno no puede continuar más allá de enero o febrero su estrategia actual de cancelar deuda a los organismos internacionales sin recibir nada a cambio, suponemos que finalmente en enero/febrero estarán dadas Econométrica S.A economic research and forecasts 4 “Entre el Discurso Oficial y las Decisiones Concretas de Política: ¿A quién creer? Por Mario Brodersohn todas las condiciones para definir un nuevo acuerdo con el FMI. EL DISCURSO LIMITANDO EL SUPERAVIT PRIMARIO AL 3% DEL PBI VERSUS EL SUPERAVIT DEL 6% QUE MUESTRAN LAS CUENTAS FISCALES EN EL 2004 decir, no incluye el pago de intereses por la deuda en default. Como se observa en dicho cuadro el superávit primario (medido en dólares) fue de 9.200 millones y los pagos por intereses y amortizaciones de deuda del Gobierno Nacional y los provinciales fueron de 4.500 millones de dólares. Frente a este enfático y contundente discurso oficial de no exceder el 3% del PBI no podemos menos que quedar totalmente perplejos cuando observamos que en el 2004 se alcanzará un superávit primario (Nación mas provincias) del 6,1% del PBI. Duplicamos la meta acordada con el FMI sin que ese organismo lo haya planteado. Grata e inesperada sorpresa para el FMI . ¿Cuál fue el destino de ese exceso de superávit primario? Un aumento en la caja del Gobierno por 4.700 millones de dólares. En efecto, aumentaron los depósitos en cuenta corriente del Gobierno Nacional y de los gobiernos provinciales en el Banco de la Nación Argentina en 11.000 millones de pesos (o en 3.700 millones de dólares si los convertimos a esa moneda). Además, aumentaron los depósitos en dólares del Gobierno en el Banco Nación en 1.000 millones, lo cual contribuyó a aumentar las reservas internacionales del Banco Central por el aumento en el efectivo mínimo depositado en el Central. No va a ser nada fácil encontrar en la historia económica argentina otro Gobierno que se haya manejado con la misma prudencia y ortodoxia fiscal y monetaria. El Gobierno resistió exitosamente todas las tentaciones y sugerencias de utilizar ese exceso de caja para bajar los impuestos o subir el gasto público más allá de lo anunciado. Sólo aceptó cancelar deuda con el FMI. El Cuadro Nº 1 presenta las cifras de superávit primario de la Nación y Provincias que estimamos para el 2004 así como el monto total de los pagos por intereses y amortizaciones de deuda con los organismos internacionales y los acreedores que no están en default; es Obviamente, los sorprendentes resultados fiscales del 2004 debilitó la tesis oficial para el 2005 de mantenerse inflexible en la meta de superávit primario del 3% del PBI. Frente a esta nueva realidad fiscal, el Gobierno tomó la iniciativa. Antes de negociar una nueva carta de intención con El convenio firmado con el FMI en septiembre del año pasado establecía para el 2004 un superávit primario del 2.6% del PBI para el Gobierno Nacional y del 0.4% del PBI para el conjunto de los gobiernos provinciales. A partir de entonces, el discurso oficial fue no aceptar un superávit primario mayor al 3% del PBI. El FMI aceptaba esa tesis sólo para el 2004 dado que sostenía que la misma carta de intención daba a entender que el Gobierno subiría el superávit primario en el 2005 y 2006 a niveles superiores al 3% del PBI. Esta tesis era rechazada por el Gobierno. Septiembre de 2004 Econométrica S.A economic research and forecasts 5 “Entre el Discurso Oficial y las Decisiones Concretas de Política: ¿A quién creer? Por Mario Brodersohn el FMI para el 2005, decidió proponer un superávit primario del 3.9% del PBI (Nación y Provincias) en el presupuesto enviado recientemente al Congreso Nacional. El superávit primario consolidado proyectado en el presupuesto para el 2005 medido en pesos es de 18.600 millones. Si suponemos, tal como lo hace el Gobierno, que el tipo de cambio promedio del 2005 es de 3.05 pesos por dólar, este superávit medido en dólares es de 6.100 millones. ¿Alcanza este superávit para pagar los intereses de la deuda una vez que se acuerde normalizar la deuda en default? La respuesta es afirmativa porque el Gobierno ha propuesto pagar en los primeros cinco años el 4,15% anual y capitalizar la diferencia con el 8,5% anual. A medida que transcurre el tiempo el Gobierno propuso reducir el monto de los intereses que se capitalizan. Recién en el año 2016 propuso comenzar a pagar la totalidad de los intereses, esto es, el 8,5% anual. Esta política de capitalización de intereses le da aire al Gobierno, desde el punto de vista financiero, para hacer frente a los pagos de intereses. Hasta ahora esta política de diferimiento y capitalización de intereses no ha sido cuestionada por los acreedores. Bajo estos supuestos, el pago de intereses en el 2005, incluyendo los correspondientes a la deuda en default, asciende a 3.100 millones de dólares. Esta suma es inferior al superávit primario (Nación mas provincias) proyectado para el 2005 bajo la hipótesis de un superávit del 3.9% del PBI. Queda, tal como Septiembre de 2004 ocurrió en el 2004, un exceso de caja de 3.000 millones de dólares que podrían ser utilizados para cancelar deuda u otros destinos. Las estimaciones de superávit primario para el 2005 se basaron en el proyecto de presupuesto enviado al Congreso Nacional. En Econométrica estimamos un superávit primario más elevado dado nuestros supuestos de una mayor recaudación impositiva (Cuadro N 2). Si ello es así el superávit de caja es aún mayor. Todo ello sugiere que salvo una explosión de gastos y/o disminución abrupta de la recaudación por caída en los precios internacionales no se prevén dificultades en el campo fiscal. EL DISCURSO SOBRE EL EMPLEO Y EL CRECIMIENTO VERSUS LA EFECTIVIDAD DE LA GESTION DE GOBIERNO El análisis que hemos desarrollado hasta aquí supone que hacia principios del 2005 el Gobierno cerraría trato con los acreedores, con las privatizadas y con el FMI. Nuestro supuesto es que el Gobierno no pagará ningún costo político por las concesiones que muy probablemente termine realizando para concretar esos acuerdos. Por el contrario, es de esperar que el Gobierno no sólo niegue esas concesiones sino que persista con su discurso confrontativo con los acreedores, el FMI y las empresas privatizadas. Al mismo tiempo, el análisis comparativo del acuerdo de deuda argentina con el de otros países, jugará a favor de una presentación triunfalista. Econométrica S.A economic research and forecasts 6 “Entre el Discurso Oficial y las Decisiones Concretas de Política: ¿A quién creer? Por Mario Brodersohn Sin embargo, los efectos positivos de esos acuerdos pueden irse diluyendo en el tiempo en la medida que el año 2005 se presente menos favorable que el observado en el 2003 y 2004. Ello podría ser el resultado de la acción concurrente de dos factores que podrían debilitar el ritmo de crecimiento e inversión en el 2005. Primero, el contexto internacional es mucho menos favorable que el del 2004. El gráfico Nº 1 presenta la evolución del precio internacional del maíz y la soja desde la devaluación del peso en enero 2002. Tal como surge en dicho gráfico los precios actuales están muy por debajo no sólo de los elevados niveles de comienzos del 2004 sino que se acercan peligrosamente a los niveles pre devaluación. Si bien es cierto que todavía es muy temprano para sacar conclusiones negativas para el año próximo lo cierto es que los niveles actuales de precios internacionales para el maíz y la soja introducen un clima de preocupación. Las perspectivas de la tasa de interés internacional tampoco son favorables aún cuando lo cierto es que este efecto pesa muy poco en la economía argentina porque, aun luego del acuerdo con el FMI, el país seguirá siendo muy poco activo en el mercado financiero internacional. Segundo, no existe un clima favorable para la inversión privada. La tesis del gobierno es que desde fines de 2002 se observa un crecimiento constante de la inversión privada, tal como lo señalan las cifras de inversión de las cuentas nacionales. El cambio en los precios Septiembre de 2004 relativos que provocó la devaluación ha impulsado mayores inversiones básicamente en los sectores sustitutivos de importaciones. Pero el gran impulso inversor de la década del 90 asociado con las privatizaciones ha perdido fuerza y no ha sido reemplazado por otros incentivos, básicamente como resultado de los siguientes factores: • La crisis en la seguridad jurídica que derivó del default de la deuda publica y la pesificación de los depósitos y préstamos en dólares. • La incertidumbre derivada de la falta de acuerdo y el estilo confrontativo en la renegociación de los contratos con las empresas privatizadas así como la ausencia de una estrategia clara en la política de precios de los servicios públicos privatizados. • Las distorsiones que crea en la asignación de recursos el sistema impositivo, que es ampliamente dependiente de dos impuestos: retenciones a las exportaciones y el impuesto al cheque. Estos impuestos son contraproducentes para la inversión y el crecimiento económico. Las presiones y las demandas políticas para reformar el sistema impositivo van a estar presente a lo largo del 2005. • El Gobierno ha realizado anuncios orientados a asociar la inversión pública con la inversión privada a través de la constitución de fondos fiduciarios pero subsiste una gran distancia entre los anuncios y las realizaciones. Un ejemplo Econométrica S.A economic research and forecasts 7 “Entre el Discurso Oficial y las Decisiones Concretas de Política: ¿A quién creer? Por Mario Brodersohn de esta realidad esta asociado con el sector energético. Los anuncios de construcción de gasoductos a cargo de YPF-REPSOL y Petrobras no terminan de madurar. • El sistema bancario sigue siendo muy reacio a encarar una fluida política de financiamiento de mediano y largo plazo. A ello se agrega un mercado domestico de capitales muy poco activo Todos estos factores explican la anomia inversora en la Argentina. COMENTARIOS FINALES SOBRE LA DISTANCIA ENTRE EL DISCURSO OFICIAL Y El REALISMO PRAGMÁTICO DE LAS DECISIONES CONCRETAS A lo largo de este trabajo hemos puesto de manifiesto que durante la gestión del Presidente Kirchner las decisiones concretas de política tienden a desplazar al discurso oficial confrontativo. Abundan los ejemplos en este sentido. Los reiterados anuncios de que se mantiene inflexible la quita del 75% sobre el valor nominal de la deuda al mismo tiempo que en una nueva oferta se ofrece a los acreedores triplicar el precio ofrecido en Dubai. La tesis de no acordar un superávit primario mayor al 3% del PBI al mismo tiempo que el superávit primario para el 2004 es del 6%. La resistencia del Gobierno a adoptar una política populista frente al exceso de caja que arrojan las cifras fiscales del 2004. Las continuas criticas al rol del FMI en la década del 90 al mismo tiempo que se siguen pagando, sin recibir a cambio ninguna Septiembre de 2004 contraprestación, los vencimientos de deuda con ese organismo. Si existe esa distancia entre el discurso y las decisiones, ¿por qué el Gobierno persiste en su estrategia y discurso confrontativo?. Debemos reconocer que en términos de su imagen política interna, tal como lo señalan las encuestas, le ha dado resultados positivos su discurso confrontativo. Su estilo frontal y critico en áreas que fueron emblemáticas en la década del 90 como los acreedores externos, las empresas privatizadas, el FMI, los militares y la Corte Suprema le ha permitido generar un amplio consenso en la opinión pública interna y ha mantenido en la defensiva a los potenciales opositores a ese estilo de negociación. Esa estrategia confrontativa le permitió ser pragmático en áreas cruciales y hacer más digerible en la sociedad las inevitables concesiones que envuelve toda negociación. En efecto, no pagó en este proceso de toma y daca ningún costo político. Por supuesto, también jugó a favor de esa imagen positiva en la opinión pública un contexto de fuerte reactivación económica y de estabilidad de precios. Luego de caer en el abismo de la terapia intensiva en el 2001-02, y sin que nadie pudiese anticiparlo, en el 2003-04 no sólo el PBI creció un 8,8 y 7,2% respectivamente, sino también la salida de la convertibilidad fue posible hacerla en un contexto de estabilidad del tipo de cambio y de precios y con superávit fiscales jamás imaginados. El desafío futuro para el Gobierno, una vez que se dejen atrás los “enemigos” Econométrica S.A economic research and forecasts 8 “Entre el Discurso Oficial y las Decisiones Concretas de Política: ¿A quién creer? Por Mario Brodersohn de la primer etapa, esto es, los acreedores, las privatizadas y el FMI, pasa por diseñar una estrategia de gestión de Gobierno que permita neutralizar las tendencias menos favorables que se vienen observando en los precios internacionales de nuestras exportaciones y en las tasas de interés así como crear las condiciones para hacer atractiva la decisión de invertir. Hasta ahora, la efectividad de la gestión de Gobierno, concentrada en un puñado de personas, ha sido y puede seguir siendo una asignatura pendiente. Tarde o temprano el discurso confrontativo, aislado de una gestión eficiente y desaparecidos los “enemigos” fáciles, puede constituirse en un boomerang para el Gobierno. Pero estos desafíos de gestión puede ser corregibles o interpretados como válidos en el corto plazo. Existen, además, otros desafíos estructurales que hasta ahora no contaron con ningún atisbo de que van a ser encarados por el Gobierno. Ellos son: • Contamos con un sistema impositivo regresivo e ineficiente. Tarde o temprano habrá que eliminar los impuestos al cheque y las retenciones a las exportaciones. No existe ninguna propuesta orientada a replantear el sistema impositivo. • El sistema bancario sigue siendo ineficiente, descapitalizado y poco propenso a prestar en el mediano y largo plazo. Además, el mercado de capitales no existe y las AFJP que deberían ser los invasores institucionales de mediano y largo plazo se han transformado en compradores de títulos públicos (LEBAC) de corto plazo. Septiembre de 2004 • No queda muy claro cual es la propuesta sobre el rol de las empresas privatizadas y su relación con el Estado. El rechazo a lo realizado en la década del 90 no alcanza porque no existe a cambio de ello ninguna estrategia alternativa. En efecto, no hay señales claras de si optamos por un esquema de controlar los monopolios privados con regulaciones más transparentes del Estado o si por el contrario en los mismos sectores el Estado competirá con la privatizadas, tal como el proyecto Enarsa parece sugerirlo. • El sistema jubilatorio argentino está quebrado: no es ni de reparto ni de capitalización. Las falencias del régimen vigente de AFJP son evidentes. No existe no sólo ninguna propuesta sino tampoco discusión sobre el camino a seguir. El listado anterior es incompleto y sólo pretende poner de manifiesto que, más allá de la falta de gestión actual del Gobierno, subsiste la falta de una política clara en cuanto a que se propone como alternativa a la década del 90. No basta con confrontar se requiere además plantear reformas de fondo y que el Gobierno defina el modelo alternativo al de la década del 90 que intenta transitar. En otras palabras el desafío pasa por definir un modelo de crecimiento económico sostenible, modelo que a su vez tiene como pre requisito un superávit fiscal sustentable en el tiempo. De esta forma, será posible convivir con la deuda post default dado que esta deuda requerirá transferir anualmente al exterior en concepto de intereses por lo menos 3% del PBI. Econométrica S.A economic research and forecasts 9 Cuadro N 1 Destino del Superávit Primario del Sector Público Consolidado Acumulado anual - en millones a precios corrientes 1. Superávit Primario del Sector Público Gobierno Nacional Gobiernos Provinciales 2. Intereses Gobierno Nacional Gobiernos Provinciales 3. Amortización de Capital con Org. Inter. 5. Superávit de Caja Depósitos en $ en Bco. Nación Depósitos en u$s en Bco. Nación en $ en u$s En % del PBI 2004* 2004* 2004* 27.661 9.220 6,1 18.661 6.220 4,1 9.000 3.000 2,0 9.132 3.044 7.362 1.770 2.454 590 2,0 1,6 0,4 4.500 1.500 1,0 14.029 4.676 3,1 11.029 3.000 3.676 1.000 2,4 * Estimación de Econométrica S.A Fuente: Econométrica S.A en base al Ministerio de Economía Econométrica S.A economic research and forecasts 0,7 Cuadro Nº 2 Recursos Tributarios del Sector Público Nacional Serie Anual - en millones de pesos a precios corrientes Ganancias IVA Neto Internos coparticipados Ganancia mínima presunta Otros coparticipados Combustibles Bienes personales Créditos y Débitos en Cta. Cte. Otros impuestos Comercio Exterior Derechos Exportación Derechos Importación y otros Seguridad Social Aportes Personales Contrib. Patronales Capitalización y otros (-) Total Recursos Tributarios 2002 8.919 14.020 1.715 535 155 4.483 524 4.857 706 2003 14.751 19.580 2.223 1.363 183 4.973 1.603 5.900 725 2004* 23.062 30.340 2.962 1.220 202 5.361 1.632 7.633 1.372 2005* 24.625 34.540 3.415 1.080 226 5.855 1.865 8.700 1.320 6.328 11.305 13.533 13.134 5.022 1.306 9.212 2.093 10.313 3.220 9.000 4.134 8.183 9.668 12.369 13.669 3.564 6.369 -1.750 4.692 7.529 -2.553 6.340 9.812 -3.783 7.220 10.865 -4.416 50.476 72.275 99.685 108.429 16,1% En % del PBI 19,2% 22,0% Fuente: Econométrica S.A en base al Ministerio de Economía Nota: En el Presupuesto 2005 se proyecta una Recaudación total de $106.900 * Proyección de Econométrica S.A Econométrica S.A economic research and forecasts 21,5% Gráfico N 1 Evolución de los Precios Internacionales de la Soja y del Maíz Evolución del Precio Internacional del Poroto de Soja 350 330 310 290 270 250 230 210 190 170 150 2000 2001 2002 2003 2004 326 213 173 ene-00 mar-00 may-00 jul-00 sep-00 nov-00 ene-01 mar-01 may-01 jul-01 sep-01 nov-01 ene-02 mar-02 may-02 jul-02 sep-02 nov-02 ene-03 mar-03 may-03 jul-03 sep-03 nov-03 ene-04 mar-04 may-04 jul-04 sep-04 en dólares en dólares por tonelada - Precio Fob Fuente: Econométrica S.A en base al Ministerio de Economía Evolución del Precio Internacional del Grano de Maíz en dólares por tonelada - Precio Fob 135 2000 2001 2002 en dólares 125 2003 2004 123 115 105 95 91 88 85 ene-00 mar-00 may-00 jul-00 sep-00 nov-00 ene-01 mar-01 may-01 jul-01 sep-01 nov-01 ene-02 mar-02 may-02 jul-02 sep-02 nov-02 ene-03 mar-03 may-03 jul-03 sep-03 nov-03 ene-04 mar-04 may-04 jul-04 sep-04 75 Fuente: Econométrica S.A en base al Ministerio de Economía Econométrica S.A economic research and forecasts