LA IDENTIDAD DEL CRISTIANO Cantares 2:1 INTRODUCCIÓN: En el libro del Cantar de los Cantares la Biblia nos muestra el amor que debe existir entre Jesucristo y su Iglesia, nos enseña los requisitos que debe obtener el grupo de personas que son parte de la Novia que se casará con Él, de igual forma el proceso de preparación necesario para alcanzar tal galardón. DESARROLLO: Cuando leemos el Cantar de los Cantares, vemos el reflejo del amor que existe entre Jesucristo y la Iglesia, por ello leemos la mujer de Cantares muestra a un grupo de personas que ha pasado por un proceso de restauración, para poder llegar a amar a Jesucristo. Uno de estos aspectos lo vemos cuando dice: "Yo soy la rosa de Sarón el lirio de los valles" (Cnt. 2:1), en donde podemos ver que su personalidad estaba dañada, y que ella no tenía identidad de sí misma, ya que la rosa de Sarón y el lirio eran plantas que se producían en cualquier clase de terreno, no tenían nada de especial, pero ante esta afirmación vemos la respuesta del Señor: "Como lirio entre las espinas, así es mi amiga entre las doncellas" en donde él le hace ver el gran valor que ella tiene ante sus ojos. Es por ello que muchos hijos de Dios necesitan que el Espíritu Santo restaure su alma para hacerles saber y comprender cual es su verdadera identidad. Identidad es a) El carácter propio y diferenciado de un individuo o conjunto de ellos, b) Hecho de ser una persona; ante esta situación leemos en Romano 12:3 que el apóstol Pablo indica: "Digo pues por la gracia que me es dada, á cada cual que está entre vosotros, que no tenga más alto concepto de sí mismo que el que debe tener, sino que piense de sí con templanza conforme a la medida de fe que Dios repartió a cada uno. Veamos detenidamente este verso: · "Mas alto concepto de sí", estas palabras se traducen del griego Huperphroneo que significa pensamiento extremadamente alto, pensamiento más alto de sí mismo de lo correcto; lo que nos enseña que hay en el pueblo de Dios personas que no tienen identidad porque se creen más que el resto del pueblo, lo cual es erróneo porque no es de acuerdo a la fe que Dios le ha dado. · "Sino piense de sí con templanza", las palabras piense de sí, se traducen del griego Sophroneo que significan tener mente correcta, ser sobrio, ser de sobrio pensamiento, ser de mente clara, enseñándonos muchas veces que es en el alma, es decir en la mente en donde existe el problema de la falta identidad. Teniendo en cuenta que la mujer del Cantar de los Cantares representa a la Iglesia y el amado al Señor Jesucristo, veamos algunos ejemplos: A HIJO PRODIGO, Lc. 15:11­24: En la Biblia encontramos el caso del hijo prodigo, quien después de haber salido de la casa de su padre, vivió perdidamente, malgastando su herencia llegó a cuidar cerdos y sin poder comer de las algarrobas; en ese estado pierde su identidad, ya no se cree hijo, sino que se considera como un esclavo; pero vemos como cuando va de regreso cómo el padre lo recibe con un beso y con una fiesta. Esto nos enseña que en la Iglesia del Señor, existen cristianos que no se consideran hijos de Dios, como el caso del hijo prodigo, perdieron su identidad de hijos a causa del pecado que en algún momento cometieron; otras personas como en el caso de Moisés, a consecuencia de problemas en la niñez y no tener una relación adecuada con sus padres también son dañados en su identidad (Ex. 1:22; 3:1­10); pero de la misma forma como el padre del hijo prodigo lo recibió con amor, Dios sana con su amor nuestra alma para que comprendamos que nuestra identidad es de hijos de Dios. B ONÉSIMO, Fil. 1:8­20: Otro caso es el de Onésimo, quien aunque su nombre significa útil, no era útil, no se sentía útil; de igual forma esto nos enseña que, por diferentes razones, existe pueblo de Dios que no se siente útil, tanto para las actividades seculares como para las actividades de la Obra de Dios, ya sea por problemas de niñez o por dardos y mentiras del enemigo, y no saben que son útiles, ya que desde cuando el Señor roció su sangre en nosotros nos hizo aptos para toda buena obra (He. 10:20­21) C SAÚL, 1 S. 9:21; 10:1, 22: Vemos en los capítulos 9 y 10 del primer libro de Samuel, el proceso que Dios realizó en Saúl para establecerlo como rey sobre Israel, sin embargo a pesar de la palabra de Samuel (1 S. 9:21), de haber sido ungido (1 S. 10:1), de haber sido cambiado de corazón (1 S. 10:9), de profetizar con los profetas (1 S. 10:10­11) y saber que Dios estaba con él (1 S. 10: 6­7), no tenía identidad, ya que en el momento de ser reconocido delante de todo el pueblo, se escondió, por no saber ni comprender completamente que Dios lo había ungido como rey sobre Israel; esto nuevamente nos enseña la falta de identidad en el pueblo de Dios, y en este caso de líderes que a pesar de que Dios los ha ungido, levantado y los ha respaldado, no tienen consciencia del privilegio, autoridad y nivel espiritual que Dios les ha dado, es decir no tiene identidad del líder, del líder que Dios está formando en ellos, por lo que entre otras cosas, comenten errores y no llegan a desarrollar el ministerio que Dios tiene para ellos. D GEDEÓN, Jue. 6:11­15: Otro caso similar al de Saúl es el Gedeón, quien estaba escondiendo de los madianitas el trigo en el lagar, porque cuando el ángel del Señor le indica que él iba a librar al pueblo, expresa: "¿Con qué tengo que salvar a Israel? He aquí mi familia es pobre en Manasés y yo el menor de la casa de mi padre. Su identidad dependía de las cosas materiales que tenía, es decir que estaba dañada, porque su escasez no tenía nada que ver con el propósito que Dios tenía para que liberara a Israel (Jue. 6:14, 16) Con esto la Biblia nos enseña que de igual forma, por circunstancias económicas, hay pueblo que no tiene su identidad de líder y de libertador, pero de la misma forma como el Señor sanó a Gedeón, sanará a su pueblo (Jue. 6:18­22; 34) E LOADICEA, Ap. 3:17: La Iglesia de Laodicea tenía identidad equivocada, ya que decía: "Soy rico, y estoy enriquecido, no tengo necesidad de ninguna cosa" ; en este caso no vemos el problema de una identidad menor de la que se debe obtener, sino arriba de la real, con lo cual la Biblia nos enseña que es dañino, para lo que es necesario humillarse delante de Dios para que por medio de su Espíritu Santo sane nuestra alma para no estar ni por debajo, ni por encima de lo que Dios ha formado en nosotros. A lo largo del Libro de Cantares vemos como la mujer va avanzando en el proceso de restauración de su alma, y caso de su identidad; primero ella indica Negra soy (Cnt. 2:1) reconociendo su estado de imperfección, pero a la vez sabe que es codiciable para el Señor; conforme va caminando llega a decir "Yo soy de mi amado, y conmigo tiene su contentamiento (Cnt. 7:10), en esto podemos ver que el conocimiento de sí misma va progresando, porque sabe y comprende que es del Señor, y ahora sabe que El tiene su contentamiento en ella y al final dice: "Yo soy muro y mis pechos como torres (Cnt. 8:10) evidenciándose el progreso que ha tenido, al grado que ahora sabe quien es (tiene identidad) y puede que alimentar a otros (espiritualmente hablando) CONCLUSIÓN: Al igual que la mujer del libro del Cantar de los Cantares, la Iglesia debe pasar por un proceso de restauración de su personalidad, de su identidad, para que al momento de presentarnos delante del Señor conozcamos claramente quienes somos, de la misma forma como cuando Booz (tipificando a Jesucristo) le preguntó a Ruth (tipificando a la Novia) "¿Quien eres tu? Y ella le respondió "Yo soy Ruth tu sierva" y recibió la bendición (Rut. 3:8­ 13)