COMERCIO INTERNACIONAL Cualquier economía está ligada al Resto del Mundo a través de la comercialización de bienes y servicios (comercio y finanzas) y otro tipo de actividades. Aquí se tratará, de manera breve, de identificar algunas variables determinantes en esta relación. Comercio de bienes: Los producidos por los países interiormente y que se pueden exportar, y estos mismos países pueden comprar bienes de otras naciones. Hay economías más abiertas al comercio internacional que otras. Por ejemplo, Holanda es una economía muy abierta y donde tanto las importaciones como las exportaciones representan, aproximadamente, el 60% del PNB (Dornbusch y Fischer, Macroeconomía). Las relaciones comerciales dan lugar, además, a una influencia internacional en los precios de cada país. Es importante observar cómo este tipo de relaciones internacionales afecta los precios interiores y la demanda de los bienes producidos interiormente. Tienen influencia en la producción y en los precios: costos de los insumos y condiciones de oferta y demanda. Un ejemplo típico en las economías es: el aumento del precio del petróleo. LA BALANZA DE PAGOS Y LOS REGÍMENES DE TIPOS DE CAMBIO La balanza de pagos es el registro de las transacciones de los residentes de un país con el resto del mundo. Hay dos cuentas principales en la balanza de pagos: la cuenta corriente y la cuenta de capital. La cuenta corriente registra el intercambio de bienes y servicios, así como las transferencias. Los servicios son los fletes, los pagos de royalties, y los pagos de intereses. Las transferencias consisten en las remesas, las donaciones y las ayudas. Hablamos de superávit por cuenta corriente si las exportaciones son mayores que las importaciones más las transferencias netas a los extranjeros. La cuenta de capital registra las compras y ventas de activos, como las acciones, los bonos y la tierra. Hay un superávit por cuenta de capital cuando nuestros ingresos son mayores que nuestros pagos debido a nuestras compras de activos extranjeros. La balanza comercial registra simplemente el comercio de bienes. Si se añade el comercio de servicios y las transferencias netas, se obtiene la cuenta corriente. Tipos de cambio fijos: En un sistema de tipos de cambio fijos, los Bancos Centrales extranjeros están dispuestos a comprar y vender sus monedas a un precio fijado en dólares. Los Bancos Centrales tienen que financiar cualquier superávit o déficit de la balanza de pagos que surja al tipo de cambio oficial. Lo hacen comprando o vendiendo toda la moneda extranjera que no se ofrezca en las transacciones privadas. Para garantizar que el precio (tipo de cambio) permanece fijo, es necesario obviamente, mantener ciertas existencias de divisas que puedan ofrecerse a cambio de la moneda nacional. Reservas: Los Bancos Centrales mantenían reservas que podían vender en el mercado cuando había un exceso de demanda de dólares. Inversamente, cuando había un exceso de oferta de dólares, compraban los dólares. La intervención: La intervención es la compra o venta de divisas por parte del Banco Central. La balanza de pagos mide la cuantía de la intervención del Banco Central en el mercado de cambios. Si un país tiene, de forma persistente, déficit de la balanza de pagos, el Banco Central acabará agotando sus reservas de divisas y no podrá continuar su intervención. Antes de llegar a esa situación, es probable que el Banco Central decida que no puede mantener el tipo de cambio y devalúe la moneda. Tipos de cambio flexibles: En un sistema de tipos de cambio flexibles, los Bancos Centrales permiten que el tipo de cambio se ajuste para igualar la oferta y la demanda de divisas. Para profundizar en ésta temática, podrías ver el video presentado por aula de economía, en el siguiente link: http://www.auladeeconomia.com/presentaciones16.htm El equilibrio monetario y la balanza de pagos. Para que haya equilibrio en el mercado monetario es necesario que la demanda de saldos monetarios en términos reales sea igual a la cantidad existente de dinero en términos reales. La balanza comercial depende de la renta y de los precios relativos. La tasa del flujo de capital es una función de la diferencia entre nuestro tipo de interés, i, y el del resto del mundo, i*. Si nuestro tipo de interés se incrementa en relación el del resto del mundo habrá un flujo de entrada de capital. Los tipos de cambio, el dinero y los precios: Partimos de dos supuestos estratégicos: en primer lugar, siempre que la producción es superior a la de pleno empleo, suben los precios. Por el contrario, cuando la producción es inferior al nivel potencial, bajan los precios. En segundo lugar, suponemos que la movilidad del capital es perfecta. Gráfica: Fuente: FISCHER, Stanley y DORNSBUSCH, Rudiger. Macroeconomía. 4a edición, Mc Graw-Hill, Madrid, 1992. En cualquier punto del gráfico situado a la derecha de Y, los precios están aumentando y en los puntos situados a la izquierda, están disminuyendo. Los puntos situados por encima de BB originan flujos de entrada de capital y una apreciación; los puntos situados por debajo dan lugar a flujos de salida de capital y una depreciación. LA POLÍTICA CAMBIARIA La política monetaria se refiere el conjunto de decisiones que las autoridades monetarias adoptan con el fin de buscar la estabilidad del valor del dinero y evitar desequilibrios permanentes en la balanza de pagos, y ejercer influencia sobre las tasas de interés y la inflación. Cuando se habla de temas monetarios se está haciendo referencia a temas relacionados con el dinero, particularmente con la moneda. La política monetaria, en particular, es el conjunto de medidas que adopta la autoridad monetaria con el propósito de buscar la estabilidad del valor del dinero e, igualmente, evitar desequilibrios prolongados en la balanza de pagos. La política monetaria está estrechamente ligada a la Política cambiaria (para garantizar el adecuado control de la cantidad de dinero en circulación) y a la Política fiscal (cuando la autoridad monetaria debe otorgar créditos al sector fiscal o financiarle sus déficit presupuestarios). La estrategia de política monetaria ha sido implantada dentro de un régimen de flexibilidad cambiaria, sujeto a unas reglas de intervención con las cuales se han buscado los siguientes objetivos: Mantener un nivel adecuado de reservas internacionales que reduzcan la vulnerabilidad de la economía frente a choques externos, tanto de cuenta corriente como de capital, Limitar la volatilidad excesiva de la tasa de cambio en horizontes cortos, y Moderar apreciaciones o depreciaciones excesivas que pongan en peligro el logro de las metas de inflación futuras, y la estabilidad externa y financiera de la economía. Para que profundices acerca de este tema, te invitamos a visitar el siguiente link del Banco de la República: http://www.banrep.gov.co/es/contenidos/page/objetivopol-tica-cambiaria