Materiales para la Formación de los Agentes de Pastoral. Diócesis de Teruel y de Albarracín. 2007 INTRODUCCIÓN El mundo ha recibido una Buena Noticia. Todos los siglos la esperaban. Es para todos los tiempos. También para el nuestro. Esta Buena Nueva es Jesucristo. Dios ha cumplido su promesa: ha enviado a su propio Hijo. Estamos salvados. Nosotros creemos y confesamos que Jesús de Nazaret, nacido judío de una hija de Israel, en Belén, en tiempo del rey Herodes y del emperador Cesar Augusto; de oficio carpintero, muerto en la cruz en Jerusalén bajo el procurador Poncio Pilatos, durante el reinado del Emperador Tiberio, es el Hijo eterno de Dios, hecho hombre. (Catecismo 423). Movidos por el Espíritu Santo, decimos con San Pedro: “Tu eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo”. Sobre la roca de esta fe, Cristo ha construido su Iglesia. (Catecismo 424). Jesús es la promesa de Dios. Es la salvación del hombre. La fe cristiana no es una filosofía o un modo de concebir la historia o la vida. La fe cristiana es una Persona: Jesucristo. Él es el Maestro, el centro y el fin de la catequesis. Transmitir la fe es anunciar a Cristo para que crean en Él. (Catecismo 425-427). Quien conoce a Cristo tiene la vida eterna y acepta gustoso perderlo todo por ganarlo a Él. Y de ese conocimiento amoroso brota el deseo de anunciarlo a todos, para que todos se salven por Él. (Catecismo 428-429). “Señor, tú conoces todo, tú sabes que te quiero” (Jn 21,15ss) q u i e r e d e c i r : J e s ú s e s t á Jesús es el verdadero Hijo de Dios, completamente identificado con su en los concilio ecuménicos (= misión. No hay un sólo instante en universales) de Nicea (325) y el que Jesús no sea el Cristo -el Mesías- el Salvador del pueblo. Por consiguiente, Jesucristo quiere decir: Jesús se halla por completo bajo la misión de Dios. Los que le siguen se llamarán cristianos, 1. Jesús es el Cristo. derivando de él su nombre. Este no mbr e imp on e ex igencias. San Pablo, en sus cartas, (Catecismo 437-439). habla a menudo de Cristo Jesús (cf. 1 Cor 4,17). Con ello llama la 2. Jesucristo es el Hijo de Dios. atención sobre el hecho de que JesuCristo no es doble nombre. “Cristo” En el Antiguo no es nombre propio, sino un título Testamento se le da el título de “hijo que se aplica a Jesús. Esto quiere de Dios” a los ángeles (cf. Dt 32,8; decir: Jesús es el “Ungido”. Jesús Jb 1,6); y a los hijos de Israel (cf. Dt Constantinopla (381) se formuló un tiene una misión especial; está lleno 14,1; Os 2,1). Pero todos son hijos texto que sería la confesión de fe de del Espíritu Santo, está “UNGIDO” en sentido de vocación y elección. la Iglesia. Este texto es el Credo que por Él (Lc 4,18), y es el Salvador No es lo mismo cuando se trata de se recita actualmente en la por el que suplicaba constantemente Jesús, “el Cristo, el Hijo de Dios celebración de la misa. En él se el pueblo escogido. Cuando los vivo”, como confesó Pedro (Mt dice: el Hijo es consustancial con el cristianos confiesan que Jesús es el 16,16). Fue una revelación especial Padre, es decir, de la misma Cristo, entonces están convencidos de Dios Padre a Pedro (cf. Mt naturaleza que el Padre. (Catecismo de que en Él se han cumplido las 16,17). Es una filiación distinta la de 441-445). esperanzas de Israel acerca de un Jesús respecto al Padre Dios. Jesús Salvador real. (Catecismo 430-434). mismo la distingue cuando, 3. Jesucristo es el Señor. hablando a sus discípulos, dice refiriéndose a Dios: “Mi Padre, y “Señor” es el título que según vuestro Padre” (Jn 20,17). Desde el Antiguo Testamento, sólo toda la et er nida d ha sido corresponde a Dios: “Yo soy el engendrado, no creado, como Señor y no hay otro” (Is 45,5). profesamos en el Credo. El Hijo es Cuando los cristianos designan con la segunda persona de la Santísima este nombre a Jesús, confiesan su fe Trinidad (cf. Jn 10,36). Jesús pide la en que Dios mismo está presente y fe en el nombre “del Hijo Único de actúa en Jesús el Cristo. Dios” (cf. Jn3,18). Para nosotros, el nombre Después de la Resurrección “Señor” está asociado con la idea de aparece para los discípulos más poder. Pensamos quizás en alguien clara esa filiación divina de Jesús que oprime a otro. Jesús quiere (cf. Rm 1,4; Hch 13,33; Jn 1,14). realizar una forma distinta de Antes de la Resurrección se sentían señorío. Dice:”Yo estoy en medio Es verdad que, al principio, impresionados por la manera de ser, de vosotros como el que sirve” (Lc es t e c u mp l i mi en t o p a r ec ía de actuar y de hablar de Jesús. 22,27). En el evangelio de San Juan, completamente distinto de lo que Preguntaban: ¿Quién es éste, que dice Jesús a sus discípulos en la muchos habían esperado. Ellos hasta perdona pecados? (Lc 7,49). última cena: “Vosotros me llamáis esperaban un Salvador que viniera Tan sólo después de la Resurrección el ‘Maestro’ y el ‘Señor’, y decís con poder externo; pero el Ungido cayeron en la cuenta de quién era bien, porque lo soy” (Jn 13,13). se recorrió el camino del servicio y Jesús realmente. Conocieron que Pero, al mismo tiempo, Jesús lava de la impotencia. Jesús está unido singularísimamente los pies a sus discípulos. Con esto con Dios, que Jesús es el Hijo único queda bien patente cuál es su nueva Es imp or ta nt e qu e la de Dios. forma de ser señor: el señorío de denominación “Cristo” se haya Jesús no oprime, sino que levanta. convertido prácticamente en el Como en el siglo IV surgieron Jesús es Señor, y muestra su nombre que se aplica a Jesús. Esto algunas herejías que negaban que grandeza dando ejemplo de servicio. COMPLEMENTOS DOCTRINALES La palabra JESUCRISTO. es propia y asumiendo la totalidad de nuestra esencia humana. Y al decir nuestra esencia humana, nos referimos a la que fue plasmada en nosotros por el Creador, y que él asume para restaurarla. (San León Magno, Carta 28,3-4). En nuestro lenguaje habitual, Jesucristo es una sola palabra. Sin embargo, en los orígenes del cristianismo no fue así. San Cirilo de Jerusalén se lo explica así a los catecúmenos: Se le llama Cristo, no por haber sido ungido por los hombres, sino por haber sido ungido por el Padre en orden a un sacerdocio eterno supra-humano. Y San Pedro Crisólogo dice: Cristo significa “ungido”, no con óleo común, sino con el Espíritu Santo... Pues la unción figurativa, por la que antes fueron constituidos reyes, profetas y sacerdotes, sobre Él fue infundida con la plenitud del Espíritu divino, para que su reino y sacerdocio fuera, no temporal -como la de aquellos-, sino eterno. Nuestro Señor. Carta de San Pablo a los Filipenses: Jesucristo, verdadero Jesús al vaciarse totalmente de sí mismo, en Dios y verdadero hombre. obediencia filial, se convierte en Señor de todo No es diverso de quien lo engendra y tiene igual poder que Él. No se confunde con el Padre ni forma con Él un ser compuesto. Y porque es distinto del Padre en la generación, es también hermano tuyo éste que rige con su cetro al Universo y señorea con igual autoridad al Cielo, a la tierra y a los mares. (San Ambrosio, Sobre las vírgenes, 3, 2). El que es Dios verdadero nace como hombre verdadero, sin que falte nada a la integridad de su naturaleza humana, conservando la totalidad de la esencia que le el universo: El cual, siendo de condición divina, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios. Sino que se despojó de sí mismo tomando condición de siervo haciéndose semejante a los hombres y apareciendo en su porte como hombre; y se humilló a sí mismo, obedeciendo hasta la muerte y muerte de cruz. Por lo cual Dios le exaltó y le otorgó el Nombre, que está sobre todo nombre. Para que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en los cielos, en la tierra y en los abismos, y toda lengua confiese que Cristo Jesús es SEÑOR para gloria de Dios Padre. (Filp 2,6-11). PARA LA REFLEXIÓN Y EL DIÁLOGO 1. La novedad de que Dios es Padre se corresponde con la de que Jesucristo es el verdadero Hijo de Dios. Nunca hubiéramos podido pensar que Dios eternamente, fuera Padre e Hijo, si no fuera porque el mismo Hijo se hace hombre y nos lo da a conocer. ¿Qué se piensa de Jesús en los ambientes que tú conoces? CREO EN JESUCRISTO, HIJO ÚNICO DE DIOS. Números: 79 - 84. ORAR, CELEBRAR, VIVIR LA FE - Jesús amó al Padre y se mantuvo fiel a su amor hasta el final. Toda su vida la dedicó a hacer su voluntad. Estamos dispuestos a colaborar con los designios de Dios sobre el mundo y sobre el hombre, haciendo de su voluntad nuestro alimento de cada día. Como Jesús le decimos: Señor, aquí nos tienes dispuestos a hacer tu voluntad: Padrenuestro... - Jesús dedicó su vida a curar enfermos, a liberar personas oprimidas por malos espíritus, a acoger pecadores y a perdonar a sus verdugos. Nosotros queremos hacer de nuestra vida un servicio a los pobres, enfermos, oprimidos y maltratados por la vida y por los hombres. Como Jesús decimos: Señor, aquí nos tienes dispuestos a anunciar la Buena Noticia a los pobres y a liberar a los oprimidos: Padrenuestro... 2. En muchas formas y de muchas maneras Jesús nos ha dado a conocer que era el Hijo de Dios. Hace falta leer los testimonios de sus discípulos, para ver, incluida en la confesión de fe de éstos, la conciencia, los hechos y las palabras de Jesús. A través del anuncio del reino de Dios, de la transparencia de su autoridad y libertad, de sus milagros, palabras, oración y muerte. Jesús da conocer su propia verdad: es el único Hijo del Padre. Los testimonios de los primeros discípulos no hacen sino corroborar esta manifestación y sacar consecuencias. ¿Qué aspectos del mensaje, la actuación o la personalidad de Jesús resultan más difíciles de aceptar por el hombre de hoy? ¿Por qué? 3. Lo que es ser Hijo de Dios sólo puede conocerse a través de la comunicación del mismo Dios. Sin embargo, algo de esta realidad filial divina se puede entrever en la filiación humana, supuesto que se purifique de características puramente humanas. Como se conoce mejor algo de la profundidad de este misterio filial es mediante la escucha y la contemplación del obrar y de las palabras de Jesús. ¿Qué exigencias concretas plantea a nuestras