V I DA E L NORT E - Domingo 25 de Marzo del 2012 pERfILEsEhIsTORIAs Editora: Rosa Linda González Empresario inusual, el regiomontano Jorge Vázquez ha decidido adquirir bibliotecas de figuras de la cultura nacional y abrirlas al público; ya compró la primera, de Fernando Benítez Cazador de acervos Daniel de la Fuente E n “El Libro de los Desastres”, el escritor y periodista Fernando Benítez abordó algunas destrucciones en la historia de México, como las de las culturas indias y de edificios y archivos religiosos. En un capítulo, el escritor, quien fuera además director de algunos suplementos culturales importantes, escribió sobre la desaparición de grandes bibliotecas de fines del siglo 19 y principios del 20. “Todo lo que fue institucional, lo perteneciente a la Nación se conserva”, apuntó el autor de “Los Indios de México”. “Lo que perteneció a particulares emigró, se atomizó, se fue para siempre”. No fue el caso del acervo personal del propio Benítez: tras su muerte, en el 2000, su archivo y biblioteca permanecieron una década en su casa de Coyoacán y su destino parecía ser, como el de otros acervos de intelectuales, alguna institución de la capital del País o del extranjero. Hasta que su existencia llegó a oídos del empresario regiomontano Jorge Vázquez González, quien secretamente trabajó para adquirirla y clasificarla. Finalmente el pasado 15 de diciembre, en vísperas del centenario del natalicio de Benítez , en el 2012, se inauguró el acervo como centro de estudios en una hermosa residencia de San Pedro Garza García. “Los libros siempre han estado alrededor de mi vida”, dice Jorge al mirar los volúmenes que lucen en libreros hechos a la medida en la residencia. Decorada con buen gusto, la casa huele en su interior a maderas, óleos y libros, muchos exquisitos, como la edición original, en francés y en cuatro volúmenes, de “Historia de las Naciones Civilizadas de México y América Central (1857-1859)”, del abate Brasseur de Bourbourg; la monumental “Historia de Méjico Desde Sus Tiempos Más Remotos hasta Nuestros Días (18761882)”, en 18 tomos, de Niceto de Zamacois, y el archivo de Benito Juárez, con documentos, discursos y cartas en 15 tomos. Jorge dice que de chico le llamó la atención que las grandes bibliotecas mexicanas estuvieran en Estados Unidos. “¿Qué hace esto aquí?”, me preguntaba. “¡Esto es de México!”. Con los años contactó a corredores de arte para ver si sabían del acervo en venta de algún escritor. Hasta que surgió la oportunidad del de Benítez. La noticia de la adquisición, que corrió por todo el país, no d El acervo del escritor, disponible al público, está integrado por casi 10 mil libros, piezas prehispánicas y su archivo personal con papelería diversa, entre ella su valiosa correspondencia. era usual. ¿Un empresario regio amante de los libros? ¿Una casa en una zona exclusiva de San Pedro para albergar el acervo de un intelectual mexicano? Al parecer, Monterrey aún puede ser noticia también a nivel cultural. s Es muy temprano. Jorge bebe un licuado y mira sin ver un documental de felinos. Lejos de sus oficinas en la Ciudad de México, dice que el estar en la residencia que sirve de sede al acervo le permite un momento de paz y esparcimiento. Pese a la distancia, este hombre de 51 años, alto, grande, de tez blanca y que viste de traje gris con chaleco incluido, se mantiene atento a su iPad y al celular. Más tarde, recorrerá con parsimonia y sonrisa amplia los pasillos en los que se encuentra la biblioteca recién inaugurada. Él no habla de sus negocios, pero él preside Double V Holding, que da servicios a la construcción y a la industria energética. Su amigo César Humberto Cadena, presidente de Grupo Energéticos, lo califica de alegre y entusiasta, pero también de empresario tenaz y agresivo. “Es muy pegado a su negocio”, describe. “Lo tenía catalogado como buen lector, pero no que quisiera invertir de manera filantrópica en esto, porque ahí no hay negocio de ningún tipo. “Me tomó por sorpresa”. Jorge es el cuarto de ocho hijos que tuvieron Orfelinda González y el médico militar Ildefonso Vázquez Santos. Nació en Mon- [email protected] terrey el 7 de diciembre de 1961 y pronto vivió en Reynosa, por labores de su padre, donde se acostumbró a estudiar por las mañanas en Estados Unidos y, por las tardes, en México, a fin de formarse en el bilingüismo y no perder a la vez el ciclo mexicano. Cuenta que le gusta la lectura desde niño. Gabriel García Márquez, dice, le cambió la vida. Pero antes de que la obra del colombiano llegara a él, un vendedor de la Enciclopedia Británica le explicó lo que hacía y le dijo que, con que vendiera cinco o seis colecciones al mes, la hacía. Se entusiasmó. Picado por la curiosidad, su padre le dio permiso de vender acompañado de un hermano, pero se sorprendió cuando sólo en el primer mes Jorge vendió 370 enciclopedias de la empresa que, por cierto, hace días anunció que no la imprimirá más luego de más de 200 años de existencia. Sin embargo, Jorge aclara que sus aspiraciones de entonces no eran comerciales, sino empresariales. “Papá estaba preocupado por- biblioteca y la colección arqueoque mis pretensiones eran muy lógica”, comenta. “La primera la grandes”, comenta con aires de integran 9 mil 130 volúmenes soautosuficiencia. “Él me decía que bre todas las materias, con énfaestudiara para ser director de sis en antropología, etnografía e compañías, pero le dije: ‘no quie- historia de México”. ro eso: quiero ser el dueño’”. En la colección arqueológiAsí fue. Tras estudiar admi- ca hay 151 piezas y lotes desde la nistración de empresas en el Tec y época preclásica hasta la llegada años de trabajo, Jorge preside una de los españoles, en tanto el archiserie de empresas. Este éxito le per- vo personal –cuadernos, corresmitió nutrir su biblioteca personal pondencia y originales– eleva el con más de 20 mil ejemplares, pero número de piezas a 15 mil. un día se preguntó por qué no tra“La sección de la que don bajar por retener en el País bibliote- Fernando se sentía más orgullocas de grandes intelectuales. so era de su colección de edicio“Nunca olvidé que nuestros nes facsimilares de códices”, afirgrandes acervos estaban fuera; ma Von Ziegler, quien no tiene en me propuse hacer lo posible por mente biblioteca de esta envergadejarlos en el País”. dura que haya sido adquirida por Un corredor de arte comenzó un mexicano para su difusión. a buscarle bibliotecas. Los pocos Parte de los libros está autoque sabían de sus afanes le pregun- grafiada por sus autores. Si se totaban para qué acervos si los co- ma en cuenta que Benítez fue el leccionistas exquisitos lo que ha- difusor de lo mejor de la inteleccen es reunir arte o antitualidad mexicana, uno VIDEO güedades. puede imaginar el valor ELNORTE.COM de las firmas, así como de “Esto también es arte”, respondía convencila correspondencia con do. Aun así, Jorge también colec- autores. Por poner dos ejemplos: ciona obra plástica. la primera edición, autografiada, Al principio le ofrecían bi- de “Capítulos de Literatura Esbliotecas incompletas, lo que no pañola” (1945), de Alfonso Reyes, era su objetivo. Finalmente, hace y la primera edición, autografiada, tres años la corredora le trajo no- de “El Coronel No Tiene Quien le ticias: estaba disponible un acer- Escriba” (1961), de Gabriel García vo muy particular: el de Fernan- Márquez. do Benítez. Abierto a investigadores, lo “‘Fernando Benítez’, pensé, mejor del acervo irá siendo digi‘revista Siempre, suplemento cul- talizado y puesto en internet. tural. ¡Guau!’”, dijo. “‘Tengo que hacerla mía’”. Dice que compitió en su ad- El proyecto de Jorge no es sóquisición con un empresario que la lo de difusión de los libros siquería para su biblioteca personal, no un ajuste de cuentas con su pero que convenció a la viuda del pasado. Por un lado, la fundaperiodista con una oferta “que no ción que preside lleva el nompudo rechazar”: la de darle al acer- bre de su padre, nacido en 1927 vo una casa propia para que fuese en Lampazos de Naranjo, tierra cuidado, digitalizado y compartido. de generales, como Antonio I. ViAceptada la transacción, cuya llarreal, Pablo González Garza y cifra el empresario se guarda, in- Juan Zuazua. vitó a Jorge von Ziegler, ex direc“Tenemos de ancestros a tor de Bibliotecas del Conaculta, 13 generales”, afirma orgulloso. para asesorarlo. “Uno fue el primo hermano del De hablar prudente, éste des- bisabuelo paterno: Ildefonso Vázcribe el acervo de Benítez el cual quez, quien fue Gobernador Indebió ser ordenado, clasificado y terino de Nuevo León, pero dejó empacado cuidadosamente. el cargo para pelear a las órdenes “Está conformado por tres co- de Carranza”. lecciones: el archivo personal, la Lo mató una bala perdida en s batalla, la séptima que recibió en vida. Murió soltero en 1915. Su tumba, en el Panteón del Carmen, está junto a la del padre de Jorge y otros héroes lampacenses. El acervo personal del militar caído, así como otro de libros antiguos de Pedro Pérez Bravo, enriquecen el de Benítez, cuya fundación tiene el sobrenombre de Biblio-Red, A.C. El padre de Jorge solía decir que había que trascender en la vida. De ahí que la fundación lleve su nombre: fue inspirador. Orfelinda, viuda del médico militar, lo recuerda con amor: un hombre de convicciones firmes, devoto, fanático del deporte y luchador por el bien familiar. “Decía: ‘Hay que ser más antes de tener más’. Por eso me da orgullo lo que Jorge ha hecho. “Es una noble intención y va mucho en la línea que su padre decía de vivir la vida ‘de tal suerte que algo te quede después de la muerte’: la familia, las obras”. Pero el afán del empresario no quedará aquí. Dice que ha desplegado de manera literal una caza de bibliotecas y ya tiene algunas en la mira, listas para ser albergadas en residencias que él quiere remozar y poner a disposición del público. “Pondremos la historia al alcance de la mano de cualquiera a través de la digitalización. Quiero hacer esto en Monterrey, en San Nicolás, en Escobedo, y en otros estados. ¡Hay que descentralizar la cultura!”. Benítez escribió alguna vez sobre Monterrey: “Cuando una metrópoli construye tréboles gigantes de pasos a desnivel, tiende puentes, multiplica su caserío, dedica enormes espacios a sus campos deportivos, a sus escuelas y fábricas, está revelando su poderío y su fuerza creadora”. El viejo intelectual no habló esa vez del poder cultural de Monterrey. De lo que eran capaces sus hombres y mujeres. Hasta de salvar de la extinción las bibliotecas de otros. La de él, por ejemplo. Informes: www.fundacionvazquezsantos.org Celebrarán a Linares d Para celebrar sus 300 años, Municipio presentará exposiciones, talleres danza y música Olivia Guzón Para los habitantes de Linares, el municipio es glorioso no sólo por sus tradicionales “glorias” sino por su rica cultura, historia y nivel educativo. “Lo glorioso te transporta a las glorias, pero también una ciudad gloriosa de pertenecer y ser parte de Nuevo León y ser un inventario donde hombres y mujeres se han desarrollado”, dijo el Alcalde Francisco Medina, al anunciar el evento “Glorioso Linares, celebremos juntos el 300 aniversario”. d El Municipio de Linares festejará su historia con actividades en el Museo de Historia Mexicana. Por la celebración de los 300 años de la fundación de Villa de San Felipe de Linares, el 10 de abril de 1712, el Gobierno municipal, en colaboración con 3 Museos, realizará un conjunto de exposiciones, talleres, y presentaciones de música y danza en la Ciudad. “Nuestro objetivo es trascen- der, es precisamente dar la otra cara de los pueblos rurales”, expresó Medina. “En los momentos críticos en los que atravesamos, el País, Nuevo León y las ciudades rurales requerimos precisamente la otra cara, la otra visión de la ciudad, de la cultura de la nobleza, de la tradición”. Alberto Hernández 16 La fiesta iniciará el jueves 29 de marzo a las 19:00 horas en el auditorio del Museo de Historia Mexicana con una charla del cronista Armando Leal Ríos, quién hará una reseña histórica del municipio, desde sus hombres ilustres hasta su transformación a la época actual. Ese mismo día se inaugurará la exposición “Imágenes de la Pasión. Pintura religiosa del siglo 18”, una colección de 16 óleos del linarense Javier Guidi Kawas, que se exhibirá en el marco de la Semana Santa hasta el 29 de abril. Pero será el fin de semana del 31 de marzo y 1 de abril cuando la plaza de Santa Lucía y la explanada del museo se llenarán de música y color con talleres de gastronomía y tambora y clarinete; presentaciones de grupos norteños y bailes folklóricos, y la presencia del colectivo Madonnaris que pintará al ritmo del violín de la joven Valeria Reyes de la Garza. Todos las actividades serán gratuitas. Más informes en www.3museos.com.