Guías de práctica clínica en cáncer ginecológico y mamario Con los auspicios de: PARTICIPANTES Comité organizador y metodología Jordi Ponce i Sebastià (Coordinador programa Oncoguías SEGO y facilitador) Hospital Universitari Bellvitge (Barcelona) Javier Cortés Bordoy (Coordinador) Palma de Mallorca Lola Martí Cardona (Secretaría) Hospital Universitari Bellvitge (Barcelona) Asesores externos de la oncoguía Antonio González Martín (Oncología Médica) Secretario de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) Ismael Herruzo Cabrera (Oncología Radioterápica) Presidente de la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) Josep Maria Lailla Vicens (Ginecología) Vicepresidente de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) Jordi Xercavins Montosa (Ginecología) Presidente de la Sección de Ginecología Oncológica y Patología Mamaria de la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) Consenso de expertos Pluvio Coronado Martín (Ginecología) Hospital Clínico San Carlos (Madrid) Orlando Falcón Vizcaíno (Ginecología) Hospital Universitario Materno-Infantil (Canarias) Enrique García García (Ginecología) Instituto Valenciano de Oncología (Valencia) Matias Jurado Chacón (Ginecología) Clínica Universitaria Navarra (Pamplona) José Lombardía Prieto (Ginecología) Hospital Provincial (Toledo) Ana Oaknin Benzaquen (Oncología Médica) Institut Català d’Oncologia (Barcelona) Jaume Ordi Majà (Anatomía Patológica) Hospital Clínic (Barcelona) M.José Rubio Pérez (Oncología Médica) Hospital Universitario Reina Sofía (Córdoba) Enrique Sáez Lara (Ginecología) Hospital Universitario Carlos Haya (Málaga) Javier de Santiago García (Ginecología) Hospital Universitario La Paz (Madrid) Aureli Torné Bladé (Ginecología) Hospital Clínic (Barcelona) Rafael Torrejón Cardoso (Ginecología) Hospital Virgen del Rocio (Sevilla) Ramona Vergés i Capdevila (Oncología Radioterápica) Hospital Universitari Vall d’Hebrón (Barcelona) Diseño Gráfico Adriana Martinez Vila-Abadal CONFLICTO DE INTERESES Todos los participantes declararon, explícitamente y por escrito, no estar sometidos a ningún tipo de conflicto de intereses con el contenido de esta oncoguía. Sus aportaciones han estado exclusivamente basadas en la revisión de la evidencia científica disponible y en su experiencia profesional contrastada. CITACIÓN Y AUTORÍA La SEGO como entidad impulsora de las oncoguías facilitará los medios y recursos necesarios para el buen desarrollo del proceso, comprometiéndose a que la propiedad intelectual, fruto de la participación y del consenso, recaiga tanto sobre el comité de expertos como sobre la totalidad de los agentes involucrados en la producción, considerándose entre ellos a todas las sociedades científicas participantes y afines. Se alienta como mecanismo de difusión a la citación de la totalidad o partes de esta oncoguía en distintos trabajos científicos o conferencias, por lo que no es necesaria la concesión de un permiso explícito para ello, aunque siempre deberá hacerse constar la fuente y autoría como: “Oncoguía SEGO: Cáncer de Cuello Uterino 2008. Guías de práctica clínica en cáncer ginecológico y mamario. Publicaciones SEGO, Octubre 2008.” Oncoguías ISBN: 978-84-612-7418-5 ISBN Vol. 1: 978-84-612-7418-2 Depósito Legal: ÍNDICE PARTE I. Proceso y metodología de las Guías de Práctica Clínica del Programa Oncoguías SEGO Introducción. Definición y valores Proceso Metodología. Estandarización de evidencia y consenso PARTE II. Oncoguía SEGO: Cáncer de Cuello Uterino 2008 Introducción. Epidemiología Terminología. Definiciones Clasificación citológica e histológica Niveles de radicalidad quirúrgica Tratamiento Radioterápico. Conceptos básicos Diagnóstico Algoritmo 1. Diagnóstico de la lesión visible macroscópicamente Algoritmo 2. Diagnóstico de la lesión no visible macroscópicamente Estadificación Valoración de factores pronósticos Algoritmo 3. Estadificación del cáncer de cuello de útero Tratamiento Guías generales de planificación del tratamiento Algoritmo 4. Tratamiento del estadio FIGO IA1 (LV-) Algoritmo 5. Tratamiento de los estadios IA1 (LV+), IA2, IB1 y IIA (< 4 cm) Algoritmo 6. Tratamiento de la enfermedad localmente avanzada: IB2, IIA (> 4 cm), IIB, III, IVA Tratamiento Radioterápico: indicaciones, técnica y planificación Tratamiento Quimioterápico: indicaciones, agentes principales y esquemas Seguimiento Algoritmo 7. Propuesta de protocolo de seguimiento postratamiento Tratamiento de las recidivas y de la enfermedad metastásica Algoritmo 8. Tratamiento de la enfermedad recurrente Algoritmo 9. Tratamiento de la enfermedad metastásica Referencias bibliográficas II II II III 1 1 1 1 5 6 7 7 7 8 8 10 11 11 12 13 14 15 16 17 17 18 18 19 20 ÍNDICE DE ALGORITMOS Algoritmo 1. Diagnóstico de la lesión visible macroscópicamente Algoritmo 2. Diagnóstico de la lesión no visible macroscópicamente Algoritmo 3. Estadificación del cáncer de cuello de útero Algoritmo 4. Tratamiento del estadio FIGO IA1 (LV-) Algoritmo 5. Tratamiento de los estadios IA1 (LV+), IA2, IB1 y IIA (< 4 cm) Algoritmo 6. Tratamiento de la enfermedad localmente avanzada: IB2, IIA (> 4 cm), IIB, III, IVA Algoritmo 7. Propuesta de protocolo de seguimiento postratamiento Algoritmo 8. Tratamiento de la enfermedad recurrente Algoritmo 9. Tratamiento de la enfermedad metastásica 7 7 10 12 13 14 17 18 19 ÍNDICE DE TABLAS Tabla 1. Recomendación de datos a incluir en el informe anatomopatológico Tabla 2. Tipos histológicos (OMS, 2003) Tabla 3. Niveles de radicalidad quirúrgica de la EORTC / Querleu-Morrow Tabla 4. Criterios de mal pronóstico prequirúrgico Tabla 5. Grupos de riesgo de recidiva (según criterios anatomopatológicos tras la cirugía) Tabla 6. Estadificación FIGO/AJCC (TNM) del cáncer de cuello de útero I 3 4 5 8 8 9 PARTE I Proceso y metodología de las Guías de Práctica Clínica del Programa Oncoguías SEGO INTRODUCCIÓN: Misión y valores tación y la inclusión de un sistema de registro de datos que actúe como control de calidad, testigo de la necesidad de revisión y actualiza- La Sociedad Española de Ginecología y Obstetri- ción de la oncoguía (basado en las premisas del cia a través de la Sección de Ginecología Onco- modelo europeo de calidad, EFQM). lógica, ha elaborado el plan estratégico “PROGRAMA ONCOGUIAS-SEGO 2008-2010” para el PROCESO desarrollo e implantación de las principales guías de práctica clínica en el cáncer ginecológico y mamario. Proceso de elaboración, implantación y revisión Las oncoguías se conciben como la herramienta que utiliza la Sociedad Española de Ginecología 1. Designación de Facilitador, Coordinador, Secretario, comité de expertos y revisores externos. y Obstetricia (SEGO) para lograr la equidad de atención oncológica en su ámbito de influencia, 2. Predocumento basado en guías y procolos internacionales y nacionales de contrastada solvencia. científico y territorial, con el objetivo de desarrollar medidas de mejora concretas, basadas en la mejor evidencia científica disponible y su aplica- 3. Revisión crítica fragmentada y asignación de niveles de evidencia para cada proceso. bilidad. Los valores fundamentales que rigen la elaboración e implantación de las oncoguías se definen 4. Documento previo para consenso en plenaria. Niveles de evidencia y de consenso. explícitamente en: 5. Revisión y confección del documento final. Equidad - Garantía de aplicabilidad para cual- 6. Distribución a revisores externos y agentes afines. Edición de versión final. quier paciente independientemente de su localización territorial 7. Implantación y difusión. Cursos itinerantes. Internet. Protección - Facilitación de pautas concretas de 8. Registro básico de datos. buena praxis para pacientes y profesionales sa- 9. Evaluación objetiva de resultados a los 2 años de la implantación. nitarios 10. Análisis y aprendizaje. Actualización bianual de la oncoguía. Fiabilidad - Estandarización mediante la integración de la evidencia científica disponible sobre la base de la aplicabilidad real de nuestro entorno 1. La Sección de Ginecología Oncológica y Patología Mamaria de la SEGO actúa como agente dinamizador sobre los profesionales sanitarios que serán los actores principales del desarrollo de las oncoguías. Con tal fin se designa un coordinador y secretario para cada proceso asistencial (oncoguía) coordinados por un agente facilitador común a todos los procesos (responsable del programa Oncoguías-SEGO 2008-2010). 2. Coordinador y secretario son los responsables de la revisión y elaboración de un primer predocumento resumen de las principales guías internacionales y protocolos de trabajo en el ámbito de la práctica clínica basada en la evidencia. sanitario Consenso - Elaboración dinámica mediante la participación de diversos expertos en un ámbito interdisciplinario Transparencia - Concurrencia de todos los actores para la aprobación e implantación del documento final (Ginecología, Oncología, Anatomía Patológica...) Se consideran rasgos diferenciales y de innovación respecto a otras iniciativas similares, la formalización explícita de sistemas de implanII 3. Posteriormente, el predocumento se fragmenta de manera temática coherente y se difunde entre el comité de expertos (10-15 profesionales de todos los ámbitos de influencia) para revisión crítica, modificación y asignación de bibliografía y nivel de evidencia. 4. La secretaría reagrupa las separatas y confecciona un documento previo global que será revisado, discutido y consensuado en la primera sesión plenaria de donde debe extraerse el borrador del documento final. 5. El borrador final será de nuevo sometido al trabajo individual de los expertos para su último debate en una segunda sesión plenaria donde se cerrará el documento final consensuado. 6. Dicho documento adecuadamente maquetado se difundirá entre diversos revisores externos considerados actores de prestigio internacional en el tema y entre las diversas asociaciones científicas que pudieran estar involucradas (Ginecología, Oncología, Anatomía Patológica...) para garantizar la equidad e idoneidad científica y de aplicación. Con ello se finalizará el proceso de edición e impresión de la versión final de la oncoguía. 7. Posteriormente y siguiendo el modelo de calidad europeo (EFQM), quedará establecido un calendario para la implantación de la oncoguía mediante el desarrollo de diversos cursos itinerantes por la geografía del estado, aprovechando la ocasión para la docencia video quirúrgica asociada. Se garantizará una correcta difusión a todos los centros hospitalarios, así como su publicación escrita e informática de amplia accesibilidad. 8. Cada oncoguía se acompañará de un registro básico de datos, informatizado, cuya finalidad principal es la de garantizar la evaluación objetiva de los criterios de implantación y sus repercusiones en la mejora de calidad asistencial (incluyendo, protocolo terapéutico, supervivencia global y libre de enfermedad...). 9. El proceso se cierra mediante una evaluación objetiva a los 2 años de la implantación, con revisión crítica de los resultados y aprendizaje sobre la metodología previamente utilizada. 10. Actualización de la oncoguía, responsabilidad del comité de expertos constituido para la primera redacción. Periodicidad mínima bianual, siempre que la evolución científica o tecnológica no aconseje introducir addendums intermedios. METODOLOGÍA: Estandarización de evidencia y consenso La principal característica de la oncoguía debe ser su sencillez trasmitiendo el conocimiento de manera básica, clara y fácilmente inteligible. Conscientes de las limitaciones para conjugar la evidencia científica disponible con la aplicabilidad a nuestro entorno sanitario, el proceso de elaboración se basará en la evaluación y registro de 2 indicadores de estandarización fundamentales: Nivel de evidencia científica disponible Las “Guías de práctica clínica” consisten en recomendaciones al clínico para ayudarlos en la atención al paciente con determinadas condiciones clínicas. Se basan en la evidencia bibliográfica más potente sobre el tema (revisiones sistemáticas de la literatura e identificación de estudios con fuerza científica suficiente) y en la experiencia práctica. Por lo general, concede el nivel más alto de la clasificación a los estudios en que la asignación de pacientes ha sido aleatoria y el nivel mínimo a la exclusiva opinión de un grupo de expertos. El sistema GRADE (Grading of Recommendations, Assessment, Development and Evaluation) es el más ampliamente aceptado. Originalmente el Grade incluye dos niveles numéricos (1 y 2) que indican la fuerza de la recomendación y cuatro letras (A,B,C,D) reflejan la evidencia de la calidad que sustenta la recomendación. En esta guía, con finalidades prácticas, seguimos una modificación del sistema Grade en la que los dos niveles de evidencia más bajos (C y D) quedan agrupados en uno solo. Se asume como una limitación del método la ausencia de evaluación del riesgo de yatrogenia, ni de la conveniencia de la intervención, ni de sus costes. Fuentes de información consultadas • Fédération Française de Centres de Lutte Contre le Cancer (www.fnclcc.fr/) • Institute for Clinical Systems Improvement-ICSI (www.icsi.org/) • Cancer National Institute NCI (www.cancer.gov/cancerinfo/pdq/) • National Comprehensive Cancer Network-NCCN (www.nccn.org/) • National Institute for Clinical Excellence NICE (www.nice.org.uk/) • National Health Service NHS Scotland (www.show.nhs.uk/sign/guidelines) • Guías de práctica clínica en cáncer en Cataluña. Agència d’Avaluació de Tecnologia i Recerca Mèdiques. CatSalut. Departament de Sanitat i Seguretat Social. Generalitat de Catalunya. (www.aatrm.net ) Nivel de consenso entre los expertos Como limitación del método hay que atender a que no se han hecho votaciones formales en el seno de los grupos de trabajo y el grado de consenso ha sido estimado por el coordinador para cada una de las intervenciones. Posteriormente, la clasificación provisional del grado de consenso era confirmada, o modificada si se daba el caso, en las reuniones plenarias del grupo de trabajo. III Tabla I. Sistema GRADE para la asignación de evidencia científica Grado de recomendación Riesgos/beneficios Evidencia soportada por estudios randomizados o ensayos controlados. 1A Fuerte recomendación Evidencia alta calidad Los beneficios claramente superan los riesgos 1B Fuerte recomendación Evidencia moderada Los beneficios claramente superan los riesgos 1C Fuerte recomendación Evidencia baja Calidad de la evidencia Los beneficios parecen superar los riesgos No se esperan modificaciones con nuevos estudios Evidencia soportada por estudios randomizados o controlados con limitaciones importantes Futuros estudios pueden modificar la estimación del beneficio Evidencia basada en estudios observacionales, en la experiencia clínica o estudios randomizados con déficits severos La estimación del beneficio es incierta 2A Débil recomendación Evidencia alta 2B Débil recomendación Evidencia moderada 2C Débil recomendación Evidencia baja Beneficios equilibrados con los riesgos y costes Beneficios equilibrados con los riesgos y costes, con cierta incertidumbre en la estimación de los mismos Incertidumbre clara en la estimación del equilibrio entre beneficios y riesgos/costes Evidencia soportada por estudios randomizados o ensayos controlados. No se esperan modificaciones con nuevos estudios Evidencia soportada por estudios randomizados o controlados con limitaciones importantes Futuros estudios pueden modificar la estimación del beneficio Evidencia basada en estudios observacionales, en la experiencia clínica o estudios randomizados con déficits severos Implicaciones Fuerte recomendación. Puede aplicarse en la mayoría de pacientes y circunstancias sin reserva Fuerte recomendación. Aplicable en la mayoría de pacientes Recomendación relativamente fuerte. Puede modificarse cuando haya evidencia de más calidad Débil recomendación. Otras alternativas pueden ser válidas en función del paciente Débil recomendación. Otras alternativas pueden ser de elección Muy débil recomendación. Otras alternativas son igualmente válidas La estimación del beneficio es incierta Tabla II. Metodología para la asignación del nivel de consenso entre expertos Categoría E Estándar Cuando todo el grupo de trabajo está de acuerdo en considerar recomendable la intervención que se plantea en el contexto concreto del algoritmo Categoría OC Opción de consenso Cuando la mayoría (90%) del grupo de trabajo considera recomendable la intervención que se plantea en el contexto concreto del algoritmo Categoría O Opción Cuando hay discrepancias mayores sobre si la intervención es recomendable y no se ha llegado a un consenso por parte de la mayoría del grupo de trabajo IV PARTE 2 Oncoguía SEGO: Cáncer de Cuello Uterino 2008 INTRODUCCIÓN. EPIDEMIOLOGÍA cursoras confiere al cáncer de cérvix un período de latencia prolongado. Asimismo, el reconocimiento de una causa infecciosa necesaria ha El cáncer de cérvix es el segundo cáncer en fre- abierto la posibilidad, ya real, de vacunar contra cuencia en la mujer a nivel mundial. Un 83% de esta enfermedad los casos se dan en países en vías de desarrollo. En España la incidencia del cáncer de cérvix se Desarrollado el cáncer invasor, el pronóstico está halla en el segmento bajo europeo, con una tasa directamente relacionado con el estadio en el poblacional media de 7.6 x 100.000 mujeres año. momento del diagnóstico. En los países desa- Se registran fuertes diferencias territoriales, con rrollados, gracias al conocimiento de los factores límites del 3 x 100.000 mujeres año en el registro pronósticos y al establecimiento de tratamientos poblacional de Cuenca al 12 x 100.000 mujeres multidisciplinarios la mortalidad por cáncer de año del Registro de Mallorca, tasa ya situada en cérvix ha disminuido un 75% en los últimos 50 la franja alta europea. La tendencia de esta in- años. Sin embargo, en países en vías de desarro- cidencia refleja, en conjunto, estabilidad en los llo sigue siendo un cáncer con una tasa de mor- últimos años, aunque se ha registrado un incre- talidad cercana al 50%. mento claro y sostenido en mujeres de menos de 45 años. Este hecho se refleja en la mortalidad que el cáncer de cérvix provoca en nuestro país: 3.6 x 100.000 mujeres año, siendo la decimoter- TERMINOLOGÍA. Definiciones cera causa de muerte por tumores de todos los tumores en la mujer para cualquier edad, pero la sexta para mujeres entre 15 y 44 años. CLASIFICACIONES CITOLÓGICAS E HISTOLÓGICAS. Enfermedad propia de mujeres sexualmente activas, la infección por Virus del Papiloma Humano (VPH) de alto riesgo es necesaria en la patogéne- Citología (Test PAP): intenta predecir, mediante sis de la enfermedad. Determinados factores de el estudio de células aisladas, una lesión histoló- riesgo predisponen a la infección por VPH (inicio gica subyacente. precoz de las relaciones sexuales, elevado número de parejas sexuales, etc.) y determinadas situa- Estudio histológico: estudio de un fragmen- ciones actúan como cofactores y predisponen al to tisular completo obtenido mediante biopsia. desarrollo del cáncer (inmunodepresión, consu- Ofrece un diagnóstico definitivo de la lesión. mo de cigarrillos, etc.). El diagnóstico de lesión intraepitelial y cáncer reEl conocimiento de la historia natural y la exis- quiere de estudio histológico obtenido mediante tencia y reconocimiento de fases premalignas biopsia exocervical, endocervical o de la lesión con posibilidad de tratamiento efectivo y sencillo tumoral. El tratamiento se indica en función de confieren la posibilidad de instaurar medidas de dicho estudio histológico. Nunca, salvo alguna cribado frente al cáncer de cérvix. La lenta pro- excepción muy concreta, se indicará en función gresión y transformación de estas lesiones pre- del diagnóstico citológico. 1 Clasificación Citológica: • Carcinoma invasor: lesión micro o macros- Sistema Bethesda cópica con infiltración del estroma (ver tabla 6, estadificación FIGO): Agrupación de los cambios observados en la 1. Estadios iniciales: enfermedad limitada al muestra citológica en función del pronóstico y cuello o con afectación del 1/3 superior de vagi- orientación terapéutica. Incluye además informa- na. Por las connotaciones pronósticas y terapéu- ción sobre la calidad de dicha muestra y factores ticas se excluyen los tumores de volumen supe- limitantes. rior a 4 cm (“Bulky”). • L-SIL (Lesión escamosa intraepitelial de bajo 2. Estadios localmente avanzados: la enfer- grado): incluye cambios sugestivos de CIN 1, medad sobrepasa el límite del cérvix (excepto 1/3 cambios coilocíticos y condilomatosos como ex- superior de vagina) y se extiende a parametrios, presión citológica de la infección por el Virus del anejos o órganos pélvicos. Se incluyen también Papiloma Humano (VPH). los tumores limitados a cérvix de volumen supe- • H-SIL (Lesión escamosa intraepitelial de alto rior a 4 cm. grado): incluye cambios sugestivos de CIN 2, CIN 3. Enfermedad diseminada y metastásica: 3 y CIS. afectación de órganos a distancia del foco tumoral primario. Introduce nuevos términos para la expresión de cambios de significado incierto. De por si no son Tipos histológicos diagnósticos de lesión preinvasiva, por lo cual no justifican instaurar tratamiento, pero obligan a estudiar la posibilidad de lesión histológica sub- Al igual que las lesiones premalignas, práctica- yacente: mente todos los carcinomas del cérvix uterino, • ASC-US (Atipia de células escamosas de signifi- independientemente de su tipo histológico, se cado indeterminado). originan en la zona de transformación, desde • ASC-H (Atipia de células escamosas. No se des- donde se extienden al exocérvix, al endocérvix o carta lesión de alto grado). bien a ambos. • AGC (Atipia de células glandulares) – sugiere lesión de células glandulares, endocervicales o El carcinoma escamoso constituye el tipo his- endometriales. tológico más frecuente de carcinoma cervical. Con gran frecuencia, en especial en los tumores pequeños se identifica CIN en la superficie o la Clasificación Histológica periferia y en ocasiones puede ser dificil la distinción entre carcinoma invasor y rellenos glandu- • CIN 1 (Neoplasia intraepitelial cervical de gra- lares. También puede resultar dificultoso el diag- do 1): lesión displásica del epitelio escamoso con nóstico de invasión ante la presencia de epitelio una alteración madurativa limitada al tercio basal displásico con características de CIN2 o CIN3 sin del epitelio. estroma. El sistema de graduación mas usado in- • CIN 2 (Neoplasia intraepitelial cervical de gra- cluye tres grados, bien, moderada y pobremente do 2): lesión displásica del epitelio escamoso con diferenciado, representando los tumores mode- una alteración madurativa que afecta los tercios radamente diferenciados el 60% de todas las basal y medio del epitelio. neoplasias escamosas. • CIN 3 (Neoplasia intraepitelial cervical de grado 3): lesión displásica del epitelio escamoso con Aunque se reconocen diferentes variedades de una alteración madurativa que afecta más allá de carcinoma escamoso, se recomienda usar fun- los 2/3 basales del epitelio (Debe considerarse si- damentalmente dos categorías: carcinoma esca- nónimo de carcinoma escamoso in situ -CIS-). moso queratinizante y no queratinizante, siendo • AIS (Adenocarcinoma in situ): alteración celular esta última variedad la más frecuente. en el epitelio glandular con atipia citológica clara. 2 No se recomienda el uso del término de carcino- moco. En cualquier caso el adenocarcinoma en- ma microinvasor, debiéndose realizar, en los ca- dometrioide endocervical tiene idéntica relación sos de tumores de pequeño tamaño, la medición etiológica con VPH que el resto de los adenocar- del tumor en superficie y en profundidad, dando cinomas endocervicales y no debe ser confundido en el informe estos valores y teniendo en cuenta con la extensión endocervical de un adenocarci- especialmente los tamaños límites para el estadio noma de endometrio. IA de la estadificación de la FIGO (7 mm en superLos carcinomas adenoescamosos ocupan el ter- ficie y 3 ó 5 mm en profundidad). cer lugar en orden de frecuencia. Se caracterizan El adenocarcinoma constituye el segundo tipo por la presencia simultánea de diferenciación es- histológico en frecuencia en el cérvix uterino y se camosa y glandular. define por la formación de estructuras glandulares. Se distinguen diferentes tipos histológicos Los tumores neuroendocrinos son poco frecuen- de adenocarcinoma endocervical, aunque en su tes pero sus formas más habituales, el carcinoma mayoría son adenocarcinomas mucinosos en sus de células pequeñas y el carcinoma neuroendo- diferentes subvariedades. El adenocarcinoma en- crino de células grandes presentan un pronóstico dometrioide representa en algunas series hasta mas agresivo. Este diagnóstico debe confirmarse un 30% de los adenocarcinomas endocervicales, mediante la demostración inmunohistoquímica mientras que en otras series es prácticamente de la expresión de marcadores neuroendocrinos inexistente, siendo considerado en estas series (sinaptofisina, cromogranina, CD56). como adenocarcinoma mucinoso con escaso Tabla 1. Recomendación de datos a incluir en el informe anatomopatológico: 1.Tipo de muestra 2.Diagnóstico (tipo histológico) Localización del tumor (opcional) Medida del tumor en superficie Grosor máximo de la invasión de la pared Grado histológico Invasión vascular Parametrios Lesión premaligna acompañante Márgenes de resección Otros hallazgos Ganglios linfáticos: (especificar número total y número de ganglios afectos si existieran, separar cadenas pélvicas y paraaórticas si se reciben) 3 Tabla 2. Tipos histológicos (OMS, 2003) Carcinoma escamoso M80703 M80713 M80723 M80833 M80513 M80513 M80523 M80823 M80763 Queratinizante No queratinizante Basaloide Verrucoso Condilomatoso (warty) Papilar Tipo linfoepitelioma Escamotransicional Tumores escamosos y precursores Carcinoma escamoso con invasión incipiente M70763 Neoplasia escamosa intraepitelial M80772 Adenocarcinoma M81403 M84803 Adenocarcinoma mucinoso Endocervical Intestinal De células en anillo de sello De desviación mínima Villoglandular Tumores glandulares y precursores M84803 M82623 Adenocarcinoma endometrioide M83803 Adenocarcinoma de células claras M83103 Adenocarcinoma seroso M84413 Adenocarcinoma mesonéfrico M91103 Adenocarcinoma con invasión incipiente M81403 Adenocarcinoma in situ M83802 Carcinoma adenoescamoso M85603 Variante de células esmeriladas (Glassy) Otros tumores epiteliales M84823 M81443 M84903 M80153 Carcinoma adenoide quístico M82003 Carcinoma adenoide basal M80983 Tumores neuroendocrinos Carcinoide Carcinoide atípico Carcinoma de células pequeñas Ca. Neuroendocrino de células grandes Carcinoma indiferenciado M82403 M82493 M80413 M80133 M80203 4 NIVELES DE RADICALIDAD QUIRÚRGICA Tabla 3. Niveles de radicalidad quirúrgica (EORTC / Querleu-Morrow) EORTC (Piver) Tipo EORTC (Piver) Límites anatómicos Tipo I Querleu/Morrow Tipo Querleu/Morrow Límites anatómicos Tipo A Resección medial al uréter sin movilización de éste de su lecho. No resección de úterosacro ni pilar vesical Histerectomía simple extrafascial (No histerectomía radical) Resección mínima del lig cardinal Tipo II Disección del uréter en el punto de entrada en vejiga. Exéresis de vagina superior, tejido paracervical y mitad medial de parametrio y uterosacro Tipo B 1 Histerectomía radical modificada Tipo III Histerectomía radical Tipo IV Histerectomía radical extendida Tipo V Exenteración parcial Resección a nivel del túnel del uréter Tipo B 2 Exéresis de 1/3 superior de vagina y parametrio y uterosacro en su totalidad Ligadura de vasos uterinos en su origen Tipo C Sección de lig cardinal hasta el sistema vascular de ilíaca interna Tipo III pero con exéresis de ¾ partes superiores de vagina Movilización lateral del uréter y resección a nivel de su lecho. Resección parcial de pilar vesical y uterosacro Con linfadenectomía paracervical Movilización completa del uréter y sección de lig cardinal, pilar vesical y uterosacro, con 20 mm de vagina (con paracolpos correspondiente) C1 Preservación nerviosa C2 No preservación nerviosa Tipo D Cirugías de exenteración pelviana Extensión de la resección lateral. D1 Exéresis de uréter Terminal y/o resección parcial de vejiga o recto D2 Exéresis total del paracérvix Incluye fascias musculares Histerectomía radical. Con la finalidad de estandarizar los procedimien- La histerectomía radical tipo III ha sido, clásica- tos quirúrgicos, la GCG-EORTC (Gynecological mente, el procedimiento indicado para el trata- Cancer Group of the European Organization miento quirúrgico del carcinoma de cérvix FIGO for Research and Treatment of Cancer) publica IB-IIA (< 4 cm). En la actualidad, estudios rando- en 2007 una modificación de la clasificación de mizados demuestran claramente que la histerec- Piver, Rutletge and Smith. Recientemente (2008) tomía tipo II es igualmente efectiva pero con una se ha publicado una nueva clasificación basada disminución significativa de la morbilidad, espe- únicamente en la extensión de la resección lateral cialmente en las complicaciones urinarias. del parametrio; mediante subdivisiones se consideran las opciones de preservación nerviosa y linfadenectomía paracervical (ver Tabla 3). 5 Traquelectomía. Niveles de disección ganglionar Exéresis quirúrgica del cérvix por debajo del nivel de la arteria uterina: 1. Linfadenectomía pélvica: exéresis bilateral 1. Traquelectomía simple: exéresis extrafascial, del tejido ganglionar desde la arteria ilíaca común respetando el tejido parametrial hasta la vena circunfleja, incluyendo fosa obtu- 2. Traquelectomía radical: incluye colpectomía su- ratriz; y lateralmente desde la porción media del perior y exéresis del tejido paravaginal y parame- músculo psoas hasta el uréter. trial por debajo del nivel de la arteria uterina. Re2. Linfadenectomía aórtica baja: exéresis quiere de disección del segmento distal del uréter del tejido linfático desde la arteria ilíaca común Exenteración hasta la arteria mesentérica inferior. Debe incluir Exéresis en bloque del aparato genital interno el tejido ganglionar sobre la vena cava inferior, más los órganos pélvicos afectados: interaorto-cava, preaórtico, y paraórtico izquierdo 1. Exenteración anterior: cistectomía hasta el uréter izquierdo. 2. Exenteración posterior: resección rectal 3. Exenteración total: cistectomía más resección 3. Linfadenectomía aórtica alta: extensión rectal de la linfadenectomía aórtica hasta la altura de los vasos renales. TRATAMIENTO RADIOTERAPICO: CONCEPTOS BASICOS Radioterapia: Uso terapéutico de las radiacio- bruscamente a medida que se incrementa la dis- nes ionizantes en pacientes con neoplasias ma- tancia a las fuentes, se pueden administrar dosis lignas (y ocasionalmente benignas). El objetivo es altas a una región localizada en un breve periodo administrar una dosis precisa de irradiación a un de tiempo. volumen tumoral definido con el mínimo daño • Braquiterapia intersticial: Colocación de posible al tejido sano. Una vez definidos la indi- fuentes radioactivas directamente en el tejido. cación y el objetivo, deberemos definir el volu- • Braquiterapia intracavitaria: Colocación de men a tratar, la técnica de irradiación y la dosis fuentes radioactivas en una cavidad anatómica. prescrita. ICRU: Siglas de “International Commission on Volúmenes a tratar: Radiation Units and Measurements”. Comisión de • GTV o “Gross Tumor Volume”: Tumor ma- consenso que elabora documentos, recomenda- croscópico conocido. ciones para la prescripción, registro y publicación • CTV o “Clinical Target Volume”: Incluye el de los tratamientos con radiaciones ionizantes. GTV y la enfermedad subclínica con sospecha de enfermedad microscópica. Tasa de dosis: Dosis administrada en relación al • PTV o “Planning Target Volume”: Incluye el tiempo. Según “ICRU report 38”, podemos clasifi- CTV con márgenes definidos para las incertidum- car la braquiterapia según la tasa de dosis en: bres geométricas y variaciones anatómicas. • Baja tasa de dosis o LDR o “Low Dose Rate”. Implante que administra la dosis a una Radioterapia externa o teleterapia: Ra- tasa de 0.4-2 Gy / hora requiriendo tiempos de diación administrada a través de fuentes externas tratamiento de 24-96 horas. como las unidades de cobalto 60 o aceleradores • Alta tasa de dosis o HDR o “High Dose liniales. Rate”. Implante que administra la dosis a razón de 0.2 Gy / min (12 Gy/h) o 0.12 Gy/segundo Braquiterapia: Radiación administrada a muy (430 Gy/h), resultando en tiempos de tratamien- corta distancia del tumor. Dado que la dosis cae to de pocos minutos. 6 DIAGNÓSTICO Síntomas asociados como dolor pelviano, disuria, tenesmo rectal y linfedema de extremidades infe- La enfermedad en estadios iniciales con frecuen- riores harán sospechar enfermedad avanzada. cia es asintomática. Se sospechará ante: En la mayoría de casos de cáncer invasor hay lesión cervical visible, pero el rango puede ir desde • Sangrado genital anómalo la normalidad cervical macroscópica hasta todo el • Sangrado postcoital cérvix (y vagina) substituidos por tumor. • Flujo maloliente El diagnóstico requiere ineludiblemente de CONFIRMACION BIÓPSICA. Algoritmo 1. Diagnóstico de lesión visible macroscópicamente Lesión visible macroscópicamente Evitar el área central de la lesión por riesgo de obtener únicamente tejido necrótico Algoritmo 2. Diagnóstico de lesión no visible macroscópicamente Lesión no visible (Citología compatible con carcinoma) Colposcopia (visualización completa de la zona de transformación) Lesión colposcópica • No lesión colposcópica • Colposcopia no satisfactoria Biopsia de la lesión Biopsia/legrado endocervical Carcinoma invasor Seguir protocolo con estadificación del tumor • Lesión intraepitelial o • Infiltración no valorable CONIZACIÓN 7 No diagnóstico histológico Reevaluar material citológico Vaginoscopia ESTADIFICACIÓN La estadificación del cáncer de cérvix es esencial- Tabla 4. Criterios de mal pronóstico prequirúrgicos (Evidencia 1B. Consenso E) mente clínica, basada en la exploración exhaustiva del tumor y los resultados de determinadas pruebas complementarias. 1. Afectación ganglionar: factor pronóstico más significativo El objetivo es asignar un pronóstico a la enfer- 2. Tamaño tumoral > 4 cm. medad y orientar la planificación terapéutica de 3. Invasión del espacio linfovascular (ILV) forma homogénea. El estadio se determina en el 4. Profundidad de invasión del estroma cervical. momento del diagnóstico primario y no se modifica ni siquiera ante las recurrencias. Para una correcta estadificación es prioritario un Tabla 5. Grupos de riesgo de recidiva examen físico exhaustivo, si es necesario, bajo (según criterios anatomopatológicos tras anestesia general. Debe incluir la palpación del la cirugía) (Evidencia 1C. Consenso E) tumor primario y valorar la extensión a parametrios y vagina (extensión epitelial y subepitelial). El Alto riesgo de recidiva, vinculado a la presencia tacto rectal combinado con la exploración vaginal de uno solo de ellos: permite una mejor medición del volumen tumo- • Márgenes quirúrgicos positivos ral y asesoramiento sobre el grado de afectación • Afectación ganglionar parametrial y del tabique rectovaginal. La explo- • Afectación parametrial microscópica ración de áreas ganglionares debe incluir tanto la Riesgo medio de recidiva, requiere la presencia zona inguinal como el área supraclavicular. de al menos dos de estos factores: VALORACIÓN DE FACTORES • Tumores de tamaño superior a 4 cm PRONÓSTICOS. • Infiltración profunda del estroma (>1/3 del estroma) Valoración preterapéutica • Invasión del espacio linfovascular Una correcta valoración preterapéutica permi- Bajo riesgo de recidiva, en ausencia de criterios te seleccionar el grupo de pacientes candidatas para medio o alto riesgo descritos en los párrafos a tratamiento quirúrgico o a tratamiento radio- anteriores. quimioterápico; y en éste último caso, adecuar los campos de irradiación en función del nivel de afectación ganglionar detectado (ver Tabla 4). Valoración postquirúrgica El estudio anatomopatológico de la pieza quirúrgica permite establecer definitivamente la presencia de criterios de mal pronóstico. En función de éstos se considera el riesgo de presentar recidiva de la enfermedad (ver Tabla 5) 8 Tabla 6. Estadificación FIGO/AJCC (TNM) del cáncer de cuello de útero ESTADIO FIGO CORRELACIÓN FIGO-TNM Descripción de los hallazgos T N M T0 N0 M0 El tumor primario no puede ser determinado Tx No evidencia de tumor primario FIGO 0 Carcinoma in situ (carcinoma preinvasivo o CIN3) FIGO I Carcinoma de cérvix confinado a útero (la extensión a cuerpo no cambia el estadio) IA Carcinoma invasivo diagnosticado sólo con microscopio. Todas las lesiones visibles macroscópicamente (incluso con invasión superficial) son IB/T1b T1a N0 M0 Invasión estromal < 3 mm en profundidad y < 7 mm en extensión horizontal T1a1 N0 M0 IA2 Invasión estromal > 3 mm y < 5 mm en profundidad y < 7 mm en extensión horizontal. El compromiso del espacio vascular, venoso o linfático, no altera el estadio T1a2 N0 M0 Lesión clínicamente visible confinada al cérvix o lesión microscópica mayor que IA2/T1a2. La invasión de los espacios preformados no debe alterar el estadio, pero debe anotarse específicamente para determinar si afectará a las decisiones terapéuticas T1b N0 M0 IB1 Lesión clínicamente < 4 cm en su mayor dimensión T1b1 N0 M0 IB2 Lesión clínicamente > 4 cm en su mayor dimensión T1b2 N0 M0 IA1 IB FIGO II El tumor invade más allá del útero, pero no invade la pared pélvica o el tercio inferior de vagina IIA (1) Sin invasión de parametrios T2a N0 M0 IIB Con invasión de parametrios T2b N0 M0 FIGO III El tumor se extiende a pared pélvica y/o invade el tercio inferior de vagina y/o causa hidronefrosis o riñones no funcionantes IIIA El tumor invade el tercio inferior de vagina pero no la pared pélvica T3a N0 M0 IIIB El tumor se extiende a pared pélvica y/o causa hidronefrosis o riñones no funcionantes T1 T2 T3a T3b N1 N1 N1 Cualquier N M0 FIGO IVA El tumor invade mucosa de vejiga o recto y/o se extiende más allá de la pelvis verdadera (la presencia de edema bulloso no es evidencia suficiente para clasificar el tumor como T4) T4 Cualquier N M0 FIGO IVB Metástasis a distancia Cualquier T Cualquier N M1 (1) Homologamente al estadio IB, la FIGO propuso subdividir el estadio IIA en IIA1 (< 4 cm) y IIA2 (> 4 cm) (IGCS 2008, Bangkok, pendiente de publicación). Sistemas de estadificación Estadificación FIGO Establecido por la “International Federation of Gynecologists and Obstetricians” (FIGO) en colaboración con la World Health Organization (WHO) y la International Union Against Cancer (IUCC) y publicada su última revisión en el año 2000. Es el sistema de estadificación utilizado en esta oncoguía. Estadificación AJCC Propuesta por la “American Joint Comittee on Cancer” (AJCC). Consiste en el sistema TNM y se pueden establecer equivalencias con el estadio FIGO. La AJCC añade los hallazgos quirúrgicos y patológicos (pTNM) para una completa caracterización del tumor, sin que ello suponga variación del estadio clínico. 9 Algoritmo 3. Estadificación del cáncer de cuello de útero Biopsia Si tumor microscópico Cáncer invasor Conización · Imprescindible para el diagnóstico de estadíos incipientes · Terapéutica en estadío IA1 · Valoración de factores pronósticos adicionales Valorar: · Tamaño tumoral · Extensión a parametrios y vagina · Áreas ganglionares inguinales y supraclaviculares Estadificación Exploración clínica (imprescindible) Tacto vaginal Tacto rectal Exploración áreas ganglionares Otras pruebas complementarias: Sólo en caso de sospecha clínica de afectación RX tórax Cistoscopia Rectoscopia Urografía endovenosa Opcionales (1) (No contempladas por la FIGO) TAC (2) Resonancia magnética (3) PET/TAC (4) (1) Pruebas complementarias no contempladas por la FIGO (con posible eficacia en el estudio de extensión y planificación terapéutica, pero NO contempladas como método estándar, sujeto a disponibilidad y previa valoración individualizada del caso) (Evidencia 2B. Consenso OC). (3) Resonancia magnética: demuestra mayor sensibilidad e igual especificidad que la TAC en la detección de enfermedad ganglionar. Permite la valoración de invasión parametrial, una medición muy aproximada del volumen tumoral y aporta información adecuada sobre la afectación rectal y vesical. (2) Tomografía axial (TAC): Útil en el estudio de las vías urinarias y en la evaluación de áreas ganglionares, especialmente el área paraórtica. (4) Tomografía por emisión de positrones (PET): Eficaz para la detección de enfermedad extrapélvica. Demuestra mayor sensibilidad que las dos anteriores en la detección de enfermedad ganglionar. 10 TRATAMIENTO GUÍAS GENERALES DE PLANIFICACIÓN DEL El conocimiento previo de la afectación ganglio- TRATAMIENTO nar permite seleccionar el grupo de pacientes que pueden beneficiarse del tratamiento RDT- Existen diversas opciones terapéuticas en función QMT y adecuar los campos de irradiación en caso del estadío clínico y factores pronósticos: de afectación ganglionar paraórtica. • Conización • Traquelectomía simple o radical Si el conocimiento de los factores pronósticos es • Histerectomía simple (extrafascial) o radical posterior a la cirugía, se indica tratamiento adyu- • Radioterapia radical (RDT) + Quimioterapia con- vante en función de la presencia de los mismos y comitante (QMT) grupo de riesgo determinado (ver tabla 5). Como tratamiento adyuvante a la cirugía en situaciones En estadios precoces se considera de elección de alto riesgo de recidiva (ver Tabla 6 y algoritmo el tratamiento quirúrgico (Evidencia 1B. Con- 5), la asociación concomitante con RDT-QMT dis- senso E), aunque la RDT es una alternativa vàlida minuye el riesgo de muerte por la enfermedad en función de la experiencia del centro y de las y riesgo de recidiva (Evidencia 1A. Consenso E). condiciones de la paciente. El tratamiento quirúr- Como tratamiento adyuvante en situaciones de gico ofrece algunas ventajas como: riesgo medio de recidiva, un estudio randomiza- • Permite la conservación de la función ovárica do del GOG con radioterapia externa observa que • Mantiene una vagina más funcional disminuye el riesgo de recidiva local y a distancia. • Facilita el conocimiento de los factores pronós- No hay otros estudios randomizados; pero, por ticos anatomopatológicos consenso y ante la evidencia demostrada en las otras situaciones, la GOG recomienda también el Los resultados ofrecidos por las diferentes vías de tratamiento RDT (Evidencia 1C. Consenso E). abordaje (vaginal, abdominal, laparoscópica) se consideran equiparables si son practicadas por En estadios localmente avanzados el trata- personal con suficiente experiencia (Evidencia 1B. miento de elección es la asociación RDT-QMT Consenso E). con finalidad radical (Evidencia 1A. Consenso E). El tratamiento quirúrgico no es recomendable en El conocimiento previo de la afectación ganglio- estadios incipientes con presencia de factores de nar, especialmente paraórtica, permite adecuar mal pronóstico que permitan prever la necesidad los campos de irradiación. Para ello siempre es de tratamiento adyuvante. El objetivo es evitar la recomendable un abordaje laparoscópico puesto suma de morbilidad derivada de la asociación de que disminuye el riesgo de formación de adhe- tratamientos. rencias y de fijación de estructuras intraperitoneales, con lo que disminuye la morbilidad del tratamiento RDT. 11 Algoritmo 4. Tratamiento del estadio FIGO IA1 (sin afectación del espacio linfovascular, LV -) Algoritmo terapéutico Conización (1) Valoración de márgenes (2) Afectos No valorables Libres Reconización FIGO IA1 ¡Reevaluar! o presuponer estadio superior. Seguir protocolo específico de Estadio > FIGO IA1 (pasar a algoritmo 5) Afectación espacio linfovascular (3) Sí Pasar a algoritmo 5 (tratamiento IA1 con LV+) No Histerectomía simple · Deseo fertilidad · No invasión linfovascular · Factibilidad de seguimiento · Márgenes libres No más tratamiento Seguimiento (1) La Cirugía es el tratamiento de elección (Evidencia 1A. Consenso E). El diagnóstico de los estadios FIGO IA1 es siempre postquirúrgico (postconización). (3) Tasa de afectación ganglionar en ausencia de invasión del espacio linfovascular < 1%, por lo que no hay indicación de linfadenectomía. (2) La técnica de conización (aceptables todas) no debe comprometer la valoración de los márgenes quirúrgicos (ausencia de fragmentación y artefacto técnico). (4) Alternativa a la cirugía: Radioterapia intracavitaria. 12 Algoritmo 5. Tratamiento del estadio FIGO IA1 (LV+), IA2, IB1, IIA < 4 cm (IIA1) FIGO IA1 (LV+), IA2, IB1, IIA1 (1) Si no dispone de posibilidad de estudio ganglionar intraoperatorio (3) Linfadenectomía pélvica (3) Histerectomía radical (Radicalidad II) + linfadenectomia pélvica en el mismo acto quirúrgico Sí No Linfadenectomía paraórtica para adecuación de los campos de RDT (4) Afectación espacio linfovascular (5) Según tamaño tumoral Microinvasión preclínica Preservación ovárica en mujeres premenopáusicas (2) Sí No < 2 cm Histerectomía simple Histerectomía radical (tipo II) *Traquelectomía simple (6) *Traquelectomía radical (6) 2-4 cm Histerectomía radical (tipo II) RDT-QMT Estudio anatomopatológico de factores pronósticos. Determinación del riesgo de recidiva (ver Tabla 5) Riesgo bajo Riesgo medio Riesgo alto No adyuvancia RDT adyuvante RDT-QMT adyuvante (5) El riesgo de afectación ganglionar depende de la presencia o no de invasión linfovascular (sin invasión linfovascular: 5%, con invasión linfovascular: 25%) (Evidencia 1B. Consenso E). (1) La cirugía es el tratamiento de elección (Evidencia 1C. Consenso E). (2) La exéresis de los anejos no forma parte del tratamiento quirúrgico de cáncer escamoso de cérvix. Por ello, se recomienda su conservación con transposición extrapélvica en pacientes jóvenes premenopáusicas. (3) Se recomienda practicar una linfadenectomía pélvica previa con la finalidad de evitar la suma de morbilidad por asociación de tratamientos en caso de afectación ganglionar (Evidencia 2C. Consenso 0C). (6) La opción de traquelectomía (simple o radical) se contempla en caso de pacientes con deseo genésico (Evidencia 1B. Consenso E). • Tratamiento segunda elección: Radioterapia (Evidencia 1B. Consenso E). La eficacia es equiparable a la de la cirugía, pero ésta última es de elección por presentar ventajas sobre la RDT en ausencia de factores de riesgo o de contraindicación quirúrgica formal. (4) En caso de afectación ganglionar pélvica, el conocimiento de la afectación paraórtica permite ampliar y adecuar los campos de RDT. 13 Algoritmo 6. Tratamiento de la enfermedad localmente avanzada FIGO IB2, IIA > 4 cm (IIA2), IIB, III, IVA FIGO IB2, IIA > 4cm (IIA2), IIB, III, IVA Linfadenectomia paraórtica (1) (sujeta a disponibilidad del centro) Pruebas de imagen como alternativa a la linfadenectomía (2): • RM • TAC • PET • Valor pronóstico • Terapéutico: determinar campos de iradiación RDT-QMT concomitante • RDT convencional descartada la afectación paraórtica • Ampliación a campos paraórticos en caso de comprobación histológica o alta sospecha de afectación • La histerectomía electiva post-tratamiento con RDT- (1) La linfadenectomía permite adecuar los campos de irradiación de forma más eficiente. Siempre es recomendable un abordaje laparoscópico y, preferiblemente, preperitoneal. Disminuye el riesgo de formación de adherencias y fijación de estructuras intraperitoneales, con lo que disminuye la morbilidad del tratamiento RDT (Evidencia 1C. Consenso E). QMT en ausencia de evidencia de enfermedad residual, no resulta recomendable puesto que no aporta beneficio adicional e incrementa la morbilidad (Evidencia 1C. Consenso E). • Finalizado el tratamiento con RDT-QMT y con sospecha de persistencia de enfermedad localizada exclusivamente en cérvix podría contemplarse el rescate quirúrgico mediante la práctica de una histerectomía simple (extrafascial) (Evidencia 2C. Consenso OC) (2) El papel de la linfadenectomía pélvica y paraórtica está en controversia. Hasta en un 24% de mujeres en que el estudio de imagen (TAC) ha sido negativo, se demuestra afectación ganglionar histológica (habitualmente el umbral de detección de estas pruebas de imagen es de 10 mm). No existe evidencia de que la linfadenectomía pueda sustituirse por técnicas de imagen (PET-TAC). Aún así, ante una alta sospecha de afectación por imagen e imposibilidad de confirmación histológica, se acepta la ampliación de RDT hasta incluir campos paraórticos (Evidencia 2C. Consenso E). • Actuaciones quirúrgicas específicas ante complicaciones del tumor (hidronefrosis, fístulas), en caso de persistencia/recurrencia local y como tratamiento paliativo (ver apartado específico de enfermedad recurrente – metastásica): en principio, todas estas situaciones deben individualizarse (ver algoritmo 9). 14 TRATAMIENTO RADIOTERÁPICO: indicaciones, técnica y planificación Indicaciones Planificación del tratamiento El beneficio del tratamiento con Radioterapia con Tratamiento con haces externos (primer tiem- un nivel de evidencia IA lo encontramos en: po). Volúmenes de tratamiento. (asumiendo la • En estadios iniciales (IB1, IIA) con contraindica- disponibilidad de un TC-simulador y un sistema ción quirúrgica formal, la RDT demuestra la misma de planificación en 3-D). efectividad que la cirugía considerada de primera • CTV: Engloba el cérvix, útero, 2/3 superiores de elección por las ventajas antes mencionadas. vagina o 3/3 según estadio clínico, los parame- • En estadios iniciales tratados con cirugía que trios y las regiones ganglionares de riesgo. demuestren factores pronósticos histológicos • PTV: Engloba el CTV con un margen de 1 cm desfavorables (ver Tabla 5 y algoritmo 5): en todas direcciones menos alrededor del útero, a. Con alto riesgo se benefician de tratamiento que será de 2 cm por el movimiento del órgano adyuvante con quimioterapia y radioterapia ex- y las diferentes capacidades de llenado de vejiga terna concomitantes. y recto. b. Con riesgo intermedio se benefician del trata- • Órganos críticos: Intestino delgado, vejiga y miento con radioterapia externa exclusiva. recto. • Pacientes con estadios iniciales locales, en las • Técnica: Múltiples campos (habitualmente 4) que se demuestra afectación ganglionar en la es- isocéntricos con haces de fotones de megavoltaje tadificación quirúrgica previa a la cirugía radical (6-20 MV). (ver algoritmo 5) • Especificación de dosis: Según las recomenda- • En estadios localmente avanzados (IB2, IIA>4 ciones del ICRU report 50, la dosis se especifica en cm, III y IVA) múltiples estudios randomizados el plano medio, en la intersección de los ejes de los han demostrado mejor supervivencia con la con- haces. La no homogeneidad de la dosis en el PTV comitancia de quimioterapia y radioterapia (ver no debe ser inferior al 5% ni superior al 7%. algoritmo 6). Braquiterapia útero-vaginal (segundo tiemTécnica de tratamiento po): Administración de dosis en el centro de la Modalidad. El tratamiento óptimo consiste en pelvis tan altas como sean posibles sin exceder radioterapia externa y braquiterapia endocavi- las dosis de tolerancia de los órganos críticos, ve- taria. Se empieza por la externa, dosis total de jiga y recto. Según la disponibilidad y experiencia 45-50 Gy en 25 fracciones durante 5 semanas y de cada centro, se puede administrar con LDR, posteriormente braquiterapia. En algunas ocasio- PDR o HDR. Para que el tiempo total de trata- nes se requerirá sobreimpresión de pared pélvica miento sea inferior a 55 días, las sesiones de bra- con haces externos. quiterapia deben administrarse inmediatamente Dosis. Siguiendo las recomendaciones del ICRU después de la radioterapia externa o intercaladas report 38, el PTV (volumen de tratamiento plani- durante ésta. ficado) debe estar como mínimo englobado por la isodosis de referencia de 60 Gy (para baja tasa Sobreimpresión parametrial o de pared pél- LDR o tasa pulsada PDR) teniendo en cuenta la vica (tercer tiempo): Sólo indicada en aquellas dosis de radiación externa. Esto equivale a 75-80 pacientes con afectación parametrial distal, has- Gy administrados al Punto A de Manchester. ta pared pélvica (Estadio IIIB) o con enfermedad Tiempo. La duración total del tratamiento debe- ganglionar ilíaca. El volumen puede ser uni o bi- ría ser inferior a 55 días puesto que la prolon- lateral y debe adaptarse a la distribución de dosis gación del tiempo disminuye el control local. En con braquiterapia. La dosis total, contabilizando caso de tratarse de tratamiento adyuvante, el pla- la dosis inicial con haces externos más la contri- zo de tiempo entre cirugía e inicio de RDT debe bución de la dosis de braquiterapia a la pared pél- estar entre 1 y 2 meses. vica, no debe exceder 65 Gy. 15 TRATAMIENTO QUIMIOTERÁPICO: indicaciones, agentes principales y esquemas La asociación de la QMT al tratamiento RDT de- 3. Recurrencias y enfermedad metastásica: la muestra su efectividad en las siguientes indica- quimioterapia constituye una opción terapéutica ciones: importante en este grupo de pacientes aunque siempre, con carácter exclusivamente paliativo 1. Tratamiento de los estadios iniciales (IB-IIA) (ver algoritmo 8 y 9). con criterios de alto riesgo de recidiva post- Estándar de tratamiento: Cisplatino a dosis de cirugía (Evidencia 1B. Consenso E) (ver tabla 5 y 50mg/m2 cada 3 semanas (Evidencia 1B. Consen- algoritmo 5). so E). Se deben de administrar esquemas de QT que Algunos recientes estudios demuestran la mayor contengan Cisplatino ( CDDP ). efectividad de la combinación de Cisplatino/Pacli- Esquema de QT estándar en la actualidad es el taxel (presentado en ASCO 2008) (Evidencia 1A. CDDP 40mg/m2 semanal, por seis semanas, Consenso OC). como radiosensibilizador. Otros agentes activos son el Topotecan, la Ifosfa- Alternativa: CDDP 70mg/m2, 1o día y 5-Fu 1g/ mida y la Vinorelbina, con respuestas que oscilan m2, 1o a 4o día, cada 21 días como radiosensi- en torno al 18%. Estos agentes no-platino son bilizador; en estadios avanzados no existen dife- considerados tratamiento de elección en aquellas rencias entre ambos esquemas, siendo la combi- mujeres que han progresado al tratamiento con nación de fármacos más tóxica. platino o en aquellas pacientes, que debido su pobre estado general o a la presencia de Insufi- 2. Tratamiento de la enfermedad localmente ciencia renal severa y/o neurotoxicidad, no son avanzada (IIB-IVA) (ver algoritmo 6). La asocia- candidatas a recibir tratamiento con platino. La ción de RDT-QMT muestra una mejoría en la su- elección de uno u otro de estos agentes deberá pervivencia del 50% frente a la RDT sola (Eviden- individualizarse con cada paciente atendiendo a cia 1A. Consenso E). Estándar: CDDP 40mg/m2 su perfil de toxicidad y metabolismo. semanal (70 mg dosis máxima) como tratamiento radiosensibilizador, durante 6 semanas coincidiendo con la RDT externa. 16 SEGUIMIENTO Objetivo Efectividad Detectar recurrencias cuando aún son suscepti- El seguimiento de las pacientes después del trata- bles de tratamientos potencialmente curativos. miento primario de la enfermedad se recomienda Localización de las recidivas de forma unánime aunque no existen datos fir- El 30% de las pacientes con cáncer de cérvix pre- mes respecto a su efectividad. sentan una recidiva. La mayoría de las recurren- La citología sistemática del lecho cervico-vaginal cias (aproximadamente el 75%) van a presentar- tratado ha demostrado escasa sensibilidad en se en los dos primeros años de seguimiento, y la detección precoz de recidiva aunque sea una de localización preferentemente a nivel pélvico y práctica extensamente generalizada (Evidencia ganglionar paraórtico. 2C. Consenso 0). El patrón de dicha recidiva varía en función del Por ello no existe un protocolo de seguimiento tratamiento primario: tras histerectomía radical rutinario universalmente aceptado ni en el tipo en la pelvis (60-70 %) y con menos frecuencia de exploraciones ni en la periodicidad. No exis- en el 1/3 superior de vagina o parametrio. Tras te evidencia de que el seguimiento rutinario sea radioterapia en el cérvix (27%) y vagina superior, efectivo en la detección de la enfermedad recu- parametrio (43%) y en los 2/3 inferiores de la va- rrente precoz. Tampoco se ha demostrado que gina (6%). la detección de la recidiva en fase asintomática La metástasis a distancia representan 1/3 de las represente un beneficio en supervivencia, ya que recidivas y suelen producirse a nivel ganglionar las opciones terapéuticas son limitadas. (adenopatías supraclaviculares, especialmente izquierdas) o en órganos distantes (principalmente metástasis pulmonares u óseas). Algoritmo 7. Propuesta de protocolo de seguimiento posterapéutico Exploración física • Examen de áreas ganglionares inguinales y supraclaviculares Periodicidad: Primeros dos años: cuatrimestral Hasta cinco años: semestral Posteriormente: anual • Exploración abdominal y vaginal Citología de fondo vaginal Periodicidad: anual Radiografía tórax Otras pruebas más específicas (TAC, RM..) sólo en función de hallazgos clínicos A partir del 5º año seguir control clínico y radiológico anual 17 TRATAMIENTO DE LAS RECIDIVAS LOCALES Y DE LA ENFERMEDAD METASTÁSICA Algoritmo 8. Tratamiento de la enfermedad recurrente Diagnóstico de recidiva No afectación de pared pélvica (2) Afectación de pared pélvica (1) No RDT previa (3) Sí RDT previa (4) • RDT-QMT en casos de tratamiento quirúrgico previo Descartada afectación ganglionar mediante linfadenectomía paraórtica • QMT paliativa • Paliativo (soporte) si no existe posibilidad de RDT-QMT RDT-QMT Valorar Exenteración pelviana (5) Histerectomía simple / radical (6) (1) Recidivas con afectación de la pared pélvica: no tienen indicación quirúrgica. El tratamiento es RDT en caso de no haberlo recibido previamente, o paliativo si no existen esta alternativa terapéutica. tras haber confirmado histológicamente la indemnidad de los ganglios paraórticos y la localización únicamente pelviana de la enfermedad. (5) Exenteración pelviana: 20-50% enfermedad no resecable en la laparotomía, 25-60% complicaciones postquirurgicas, supervivencia 35-60% a los 5 años, mortalidad perioperatoria entre el 5-10%. (2) Recidivas centropélvicas: la indicación terapéutica está en función del tratamiento instaurado en el episodio primario. (3) Si el tratamiento primario fue cirugía, la RDT-QMT es el tratamiento de elección. (6) Histerectomía: indicado en pequeñas recidivas centrales después del tratamiento quimioradioterápico primario. Técnicamente difícil y con una morbilidad elevada (complicaciones severas en el 40%). Supervivencia elevada en lesiones menores de 2 cm. (4) Si la paciente ya ha recibido RDT la opción terapéutica es la cirugía. El objetivo de la cirugía es la exéresis completa del tumor con margen sano (exéresis de recto y vejiga si se requiere) y con finalidad curativa. El único tratamiento potencialmente curativo es la exenteración. La exenteración pelviana se indica únicamente • El mejor pronóstico se obtiene en pacientes con un intervalo libre mayor de 6 meses, una recurrencia menor de 3 cm y localización central sin fijación a la pared pelviana. 18 Algoritmo 9. Tratamiento de la enfermedad metastásica Enfermedad metastásica Tratamiento paliativo. Siempre individualización RDT paliativa (1) QMT paliativa (2) Individualizando los casos · Posibilidad de RDT-QMT en caso de enfermedad ganglionar paraórtica (3) · Posibilidad de tratamiento quirúrgico en caso de metástasis aisladas (4) (1) RDT paliativa: El tratamiento local con radioterapia paliativa está indicado en pacientes con enfermedad metastásica y afectación sintomática (dolor secundario a metástasis óseas, afectación ganglionar voluminosa paraaórtica o supraclavicular, metástasis cerebral, etc.). (3) Posibilidad de tratamiento RDT-QMT en caso de enfermedad ganglionar paraórtica (reportados casos con larga supervivencia). (4) Posibilidad de tratamiento quirúrgico ante metástasis únicas (aisladas) en situaciones que deben individualizarse de manera estricta. (2) QMT paliativa: En las pacientes con diseminación sistémica de la enfermedad en las que no se puede realizar un tratamiento quirúrgico o radioterápico con intención radical el tratamiento con quimioterapia paliativa es el tratamiento de elección. El tiempo medio a la progresión o muerte es de 3 y 7 meses respectivamente. 19 REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS extraperitoenal versus laparoscopic approach”. Eur. J. Obstet. Gynecol. Reprod. Biol. 2006; 126: 159-63. Park j, et al. The comparison of accuracy between PET and PET/CT for detecting lymph node metastasis in cervical cancer: Prospective surgicopathologic study. Proc ASCO 2007, 5587. Creasman WT, Fetler BF, Clarke-Pearson DL, et al. “Management of stage Ia carcinoma of the cervix”. Am. J. Obstet. Gynecol. 1985; 153: 164-72. Yildirim Y. Integrated PET/CT for the evaluation of para-aortic nodal metastasis in locally advanced cervical cancer with negative conventional CT findings. Gynecol Oncol 2008; 108: 154-159. 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