Capítulo I.- Marco Teórico El proceso de innovación, puede ser abordado en diversas formas, por ejemplo, puede concebirse como la actividad racional dirigida hacia una meta, o por otro lado, como un proceso de ensayo y error, resultado de la suma acumulativa de ciertas modificaciones del proceso de producción, pequeñas y en gran medida accidentales (Elster, J. 1990). La concepción del proceso de innovación, varía de una u otra forma en las diferentes escuelas de pensamiento económico, las cuales han abordado el concepto desde diferentes perspectivas. La teoría neoclásica establece a los procesos de innovación como una tarea exclusiva de los centros de investigación exógenos a las empresas, y por lo tanto exógeno también al proceso de producción y a los esfuerzos de maximización de los beneficios. La teoría neoclásica, en su intento por establecer modelos con una gran capacidad predictiva, establece la información como un bien público al cual todo mundo puede acceder de manera libre y gratuita y por lo tanto, los costos de las transferencias tecnológicas y del aprendizaje son mínimos para la sociedad. La teoría ortodoxa se construye sobre el supuesto metodológico de que los actores toman decisiones “como…si” su objetivo exclusivo fuera el maximizar el beneficio o la utilidad (Friedman, M. 1986 en Lara, A. 2007). A diferencia de la teoría neoclásica, la teoría evolutiva viene a sustituir al agente neoclásico descrito anteriormente por un agente con capacidades limitadas el cual busca “satisfacer” necesidades de adaptación y supervivencia. La teoría evolutiva tiene su origen en los trabajos de Joseph Shumpeter y una de las tesis centrales de esta teoría sostiene que, para captar la naturaleza de la conducta de los agentes, es necesario poner en el centro del problema la adaptación y la práctica que ella trae aparejada (Lara, A. 2007). Uno de los principales problemas que se plantea esta teoría no es como el modo de producción capitalista administra las estructuras existentes sino como las crea y las destruye (origen del concepto “destrucción creadora”), por lo que los agentes se enfrentan al reto de la supervivencia. A diferencia también de la teoría neoclásica, la teoría evolutiva concibe a la información como un bien privado el cual se genera y se enfrenta a un proceso de apropiación, por lo que el desarrollo tecnológico se da de manera distinta entre los diversos agentes. La teoría evolutiva viene a constituir las bases fundamentales que han generado el desarrollo de nuevos enfoques y ha proporcionado las herramientas analíticas para la explicación de nuevos fenómenos para los cuales la teoría ortodoxa presenta modelos ineficientes. La evolución histórica de las teorías sobre los procesos de innovación y de la cual se desprende el enfoque de los Sistemas de innovación, tiene su antecedente principal en la teoría evolutiva antes mencionada y ha pasado desde su concepción por varias etapas, variando la forma en que el proceso es asimilado por el medio económico. La disrupción entre las dos corrientes principales de los procesos de innovación podemos encontrarla el último cuarto del siglo XX. Hacia la década de los 70’s, el modelo explicativo de la innovación posee un carácter lineal donde la importancia radica en identificar los factores determinantes de los resultados de la investigación tecnológica. Este modelo está basado en fundamentos neoclásicos y concibe a la innovación como un proceso que pasa por distintas etapas: investigación, invención, innovación y difusión, por otro lado, la transferencia de conocimientos se describe como un proceso natural y no se le asigna un costo significativo dentro del proceso. Figura 1. Modelo Lineal de Innovación Investigación y Desarrollo *Empresa *Universidades *Centros de Investigación Invención Aplicación de la innovación Mercado DIFUSIÓN Fuente: Elaboración propia. Una de las principales limitaciones de esta teoría es que tiende a subestimar la actividad innovadora de las pequeñas empresas, pues un indicador de innovación básico en este modelo es la inversión en Investigación y desarrollo (I+D). Sin embargo, numerosas empresas innovan con éxito con relativos pocos recursos destinados a este campo. Bajo esta serie de inconsistencias y disfuncionalidades para explicar la situación empírica de los procesos de innovación, surge a inicio de los años 80’s dentro del marco de la economía evolutiva el concepto de modelo interactivo de la innovación, el cual se basa en la idea de una interacción continua entre los distintos partícipes y elementos presentes durante todo el proceso de innovación y la comercialización posterior de resultados, considerando los ambientes de innovación, las redes interinstitucionales y las rutinas generadas dentro de las empresas como factores fundamentales de este proceso. La transferencia tecnológica es considerada como costosa y difícil, y el entendimiento de nuevas tecnologías cuesta mucho tiempo y recursos humanos. Este nuevo modelo implica cambios radicales para la gestión tecnológica de las empresas y el diseño de la política tecnológica por parte de las administraciones públicas. Figura 2. Modelo Interactivo de Innovación INVESTIGACIÓN CONOCIMIENTO MERCADO POTENCIAL INVENTO Y/O DISEÑO ANALÍTICO DETALLADO DISEÑO REDISEÑO Y Y PRUEBAS PRODUCCIÓN DISTRIBUCIÓN Y VENTAS Fuente: Elaboración propia a partir de Rosenberg (1982). A partir de la concepción integral de los procesos de innovación (o modelo interactivo), surgen diversos enfoques que justifican de una u otra manera la importancia del territorio para la creación de un entorno favorecedor a la innovación. Estos enfoques según la caracterización de Dahl (en Baumert T. y Heijs, J.; 2003), son los siguientes: Figura 3. Enfoques teóricos de territorio e innovación Teoría/Enfoque 1. La teoría del cambio tecnológico Autores Freeman, 1991; Pérez 1989; Dosi, 1989. 2. La teoría de los sistemas Dosi, 1989; Nelson, 1992; nacionales y regionales de Lundvall, 1992. innovación 3. Los trabajos que analizan los distritos Piory y Sabel, 1984; Camagni, industriales y el “mileu” innovador 1991; Pykes et al., 1992. 4. El enfoque basado en la importancia Porter, 1990; Freeman, 1991; de las redes de cooperación y los Debresson y Amesse, 1991. clusters industriales 5. La gestión de innovación en las Pavitt et al., 1987; Rothwell et al., empresas 1989; Acs y Audretsch, 1992; Dankbaar, 1993. 6. Y los estudios centrados en los Jacobs, 1969; Jaffe, 1986; Porter, “spillovers” de conocimiento y la 1990 ; Jaffe et al., 1993; Saggi, proximidad geográfica 2000. Fuente: Dahl 2001 (en Baumert y Heijs, 2003) En la figura 4 se demuestra como estos enfoques se complementan entre si al momento de señalar la importancia de la localización y concentración de la actividad innovadora de una región, sin embargo, estos estudios cuentan con diferencias significativas en otros aspectos, ya que enfatizan sobre distintos puntos respecto a la actividad innovadora o del propio sistema productivo. Figura 4. Escuelas que forman la teoría económica de la innovación Fuente: Dahl 2001 (en Baumert, T. y Heijs, J. 2003). Uno de los enfoques en los cuales se ha profundizado en los últimos años y se ha revalorizado de acuerdo a su relevancia analítica, es el enfoque de los sistemas de innovación. El conjunto de agentes, instituciones y normas, en el que se apoyan los procesos de incorporación de tecnología se ha denominado sistema de innovación, el cual determina el ritmo de generación, adaptación, adquisición y difusión de conocimientos tecnológicos en todas las actividades productivas (Nelson, 1993). 1.1 Sistema Regional de Innovación El termino Sistema Nacional de innovación (SNI) aparece por primera vez en una publicación del libro de Freeman (1987) sobre la innovación en Japón, aunque el propio Freeman señala que el término fue propuesto por Lundvall en los trabajos realizados por este y un grupo de académicos de la Universidad de Aalborg en Dinamarca, conocidos como IKE. Según autores pertenecientes al grupo como Lundvall cuatro fueron las vertientes que señalan como influyentes en el desarrollo de dicho término (Pellitero, 2002). 1. El enfoque estructuralista de los sistemas de producción. 2. La teoría del mercado doméstico en el mercado internacional. 3. Los factores determinantes del éxito innovador. 4. El papel de las instituciones para configurar las actividades innovadoras. A poco tiempo el concepto y tipo de análisis se extendió entre los economistas y dio lugar a tres notables publicaciones en las que colaboraron n significativo y cualificado número de analistas, editados respectivamente por Lundvall (1992), Nelson (1993) y Edquist (1997). Pero este nuevo enfoque no solo fue objeto de atención para los analistas del cambio tecnológico sino que también una serie de renombrados organismos oficiales lo hicieron suyo y lo impulsaron en sus grupos de trabajo y publicaciones. Así, hoy en día la OCDE, la Comisión Europea y la UNCTAD utilizan dicho concepto como parte integral de su perspectiva analítica (Navarro, M. 2001). El nuevo enfoque no solo se restringió al estudio de los Sistemas Nacionales de Innovación, sino que, al poco tiempo de su aparición, una serie de analistas comenzaron a aplicarlo al ámbito regional y al ámbito sectorial. A pesar de las diferencias en cuanto a la “territorialidad”, el enfoque presenta puntos comunes que permiten generalizar un marco conceptual de Sistemas de Innovación. El enfoque del Sistema de Innovación (Nacional, Local, Regional o Sectorial) es resultado de la fusión de varios enfoques y conceptos: primero se basa en el concepto de los distritos industriales desarrollado por Marshall en la primera mitad del siglo XX, también lo hace en la teoría de los polos de desarrollo generada principalmente por Perroux en la década de los 50´s y por último, en la teoría de los clusters de Porter, desarrollada en la década de los 90´s a partir de la publicación de “Las ventajas competitivas de las Naciones”. Estos enfoques tienen varios elementos en común, como lo es la importancia que adjudican a la proximidad espacial, las externalidades, la cultura e identidad y el proceso de aprendizaje colectivo (Joost Heisj, 2001). Según Romer y Lucas, las innovaciones generan externalidades positivas, las cuales pueden ser aprovechadas por los agentes de una nación, región o localidad. Según el enfoque de los sistemas de innovación, este se presenta de manera articulada en 4 niveles y cada uno adquiere una dinámica propia y que difiere con las otras, además de ofrecer un marco particular para la elaboración y aplicación de política económica. En primer plano, este enfoque visualiza a la empresa y las relaciones interempresariales como el ente contenedor de conocimientos los cuales están en sus rutinas operacionales y los cuales se van modificando con el paso del tiempo gracias a procesos de investigación, reglas de conducta, decisiones estratégicas, etc. En segundo lugar, la empresa se va vinculando con otras empresas e instituciones, como lo son las universidades, centros de investigación, etc. Esta vinculación origina una red de cooperación e integración donde, la actuación de la administración pública es fundamental para sentar las bases de un entorno favorecedor para el desarrollo tecnológico. Por ultimo, en un ámbito más amplio, se establecen un conjunto de factores entre los cuales están las relaciones sociales y la cultura innovadora de la región; en otras palabras, este último ámbito abarca principalmente la capacidad local de absorción de tecnología. Partiendo de lo anterior, el enfoque de los sistemas de innovación se puede establecer como un enfoque “holístico” ya que sitúa en el centro del análisis a la innovación y trata de analizar todos los factores que la determinan, e interdisciplinario al tomar en cuenta tanto factores económicos como sociales, políticos etc. En la figura 5 se presentan los elementos que conforman el sistema de innovación así como sus relaciones. Figura 5. El Sistema de Innovación y sus relaciones Fuente: (Buesa, M. 2000) La aplicación de los límites de un Sistema de Innovación es de vital importancia, es necesario conocer exactamente qué es lo que queda dentro de los límites y que está fuera de ellos, y verificar si estos límites están asociados a los determinantes de la innovación. En el proceso de desarrollo de los países encontramos que su evolución es desigual, unos países se desarrollan de una forma más acelerada que otros, o algunas regiones más que otras, como es el caso de los países desarrollados y los países en vías de desarrollo o de desarrollo tardío. Esta desigualdad en su desarrollo no elimina, en absoluto, las relaciones entre ellos generando una combinación entre los avances de las fuerzas productivas entre los países y su utilización, así vemos como en países como México se instalan empresas que incorporan las tecnologías de punta como la robótica y la microelectrónica en sus procesos productivos, este ha sido el caso de las maquiladoras y la planta Ford de Hermosillo (Borbón, 2006). Para el presente estudio, se ha decidido aplicar el enfoque del Sistema Regional de Innovación debido a que los agentes existentes no solo determinan la dinámica del sector manufacturero, si no que son instituciones relevantes para los distintos sectores de actividad y para el resto de la actividad económica en la entidad.