Durante el tratamiento es importante un buen asesoramiento psicológico y evaluación de la conducta. El beneficio del tratamiento sustitutivo con estrógenos en mujeres con SPW e hipoestronismo no ha podido ser comprobado hasta ahora. Entre las diferentes opciones de tratamientos estrogénicos sustitutivos, la utilización de parches o contraceptivos orales con dosis bajas parece ser el más adecuado. A la administración de estrógenos se debe añadir la administración de gestágenos para minimizar el riesgo de cáncer endometrial. En la mayoría de las mujeres con SPW no es necesario un tratamiento contraceptivo en sentido estricto, sin embargo se debe realizar un buen asesoramiento sexual en estas pacientes. La adrenarquía prematura no suele requerir tratamiento específico, ya que raramente plantea problemas clínicos o psicológicos. El control estricto del peso en estas pacientes no parece retrasar el desarrollo precoz de la adrenarquía. 4. OSTEOPOROSIS 4.1. Fisiopatología La osteoporosis o disminución de la densidad mineral ósea es un hallazgo frecuente en el SPW, provocando una mayor incidencia de fracturas óseas. Estos pacientes presentan también una mayor incidencia de escoliosis. Entre los factores que pueden jugar un papel importante en el desarrollo de la misma, se han destacado fundamentalmente la hipotonía muscular y la obesidad. Sin embargo, niños con SPW sin obesidad asociada, también presentan con frecuencia escoliosis. Recientes estudios ortopédicos indican la presencia de osteoporosis en la columna vertebral de estos pacientes, si bien no ha sido estudiado su posible papel patogénico en el desarrollo de la escoliosis. No han sido descritas alteraciones del metabolismo del calcio, fósforo, vitamina D, ni de la hormona paratiroidea que pudieran estar implicados en el desarrollo de la osteoporosis. Sin embargo el hipogonadismo y el déficit tanto de GH como de IGF-1 sí podrían jugar un papel importante en el desarrollo de la misma. En adultos con déficit de GH e hipogonadismo sí está clara su relación con la mayor incidencia de osteoporosis en estos pacientes. 4.2. Diagnóstico La tomodensitometría por aba doble es considerada como el mejor método para valorar la densidad mineral ósea, permitiendo realizar también mediciones de la composición corporal de la región estudiada. 59 Dada la alta incidencia de osteoporosis en el SPW, se deben realizar regularmente en estos pacientes densitometrías sobre todo en el período postpuberal. En caso de evidencia clínica de osteoporosis en pacientes más jóvenes, también estaría indicado realizarla. Mediciones de la densidad mineral ósea de la región lumbar de la columna vertebral proporcionan una buena información sobre el estado de calcificación ósea. La realización adicional de un escáner de todo el cuerpo, permite realizar mediciones objetivas de la composición corporal. Sería muy deseable disponer de estándares específicos para el SPW, que permitieran interpretar los valores de densidad mineral ósea obtenidos por densitometría y su relación con el riesgo de fracturas óseas. 4.3. Tratamiento de la osteoporosis El tratamiento incluye un aporte suplementario en la dieta de calcio y vitamina D, ejercicio y tratamiento de sustitución estrogénico. Se deberán tener en cuenta los siguientes aspectos. 1. La dieta prescrita a estos pacientes debe contener un aporte adecuado de calcio. En dietas muy restrictivas, se debe recomendar un aporte suplementario. 2. Generalmente no es necesario un aporte suplementario de vitamina D, si la exposición al sol es adecuada. En algunos pacientes con SPW debido a su estilo de vida sedentario la exposición solar no es suficiente. Es muy importante que el contenido de vitamina D en la dieta de estos pacientes sea adecuado. 3. El tratamiento sustitutivo con estrógenos parece disminuir el riesgo de osteoporosis, como se ha descrito en mujeres con hipogonadismo o en la menopausia. Lo mismo ocurre en hombres con hipogonadismo tratados con testosterona. 4. El trato con GH en adultos con déficit de GH ha demostrado ejercer un efecto beneficioso incrementando la mineralización ósea. Teniendo en cuenta todos los aspectos mencionados anteriormente, es importante resaltar que el tratamiento de la osteoporosis debe realizarse de forma individualizada y controlado mediante la realización periódica de densitometrías, que permita una evaluación continuada de la mineralización ósea. 5. HORMONAS TIROIDEAS, CORTISOL, PROLACTINA Y HORMONAS GASTROINTESTINALES No se han detectado alteraciones de función tiroidea, ni una mayor incidencia de tiroiditis autoinmune en pacientes con SPW. Los estudios realizados hasta ahora reflejan niveles normales de hormona tiroideas, de hormona estimuladora del tiroides (TSH) y de la respuesta de TSH a la administración parenteral de la hormona liberadora de la tirotropina (TRH). 60