La comunicación interna y la formación La comunicación interna y la formación son hoy dos funciones de la empresa que, a priori, funcionan de forma independiente y sin embargo son muy complementarias. La formación y la comunicación se encuentran como en una especie de esquizofrenia. Cada una desempeña su función sin querer saber mucho la estrategia de la otra. En algunas empresas se puede incluso llegar a una situación de conflicto cuando se trata de unir fuerzas para conseguir objetivos comunes. Ambas funciones, no podemos olvidarlo, tienen por objetivo fundamental la gestión de personas- mediante la transmisión de un mensaje en el caso de la comunicación interna y por la adaptación de las competencias en el caso de la formación. ¿Si se persigue el mismo objetivo, por qué oponerse? ¿Por qué ignorarse? ¿Por qué no aunar esfuerzos? Estas preguntas pueden parecer nimiedades de cara al exterior. Pero cuando se conoce el funcionamiento de las grandes empresas uno se da cuenta de que se dan grandes conflictos. La formación en muchas No hay nada peor para la empresa y par a ocasiones es vista como un las propias personas, que una formación con poco entusiasmo y tiempo invertido y no recibida considerada como la enésima sesión de un productivo a corto plazo" programa obligatorio. Asimismo no hay nada peor que una campaña de comunicación interna que pasa por las personas de la compañía sin implicarlas o que provoque el sarcasmo. La comunicación interna y la formación se necesitan. Su sinergia evitará este tipo de problemas. La comunicación interna da sentido a la formación Comunicar de manera adecuada un programa de formación permite: Suscitar el interés: en un contexto de constantes presiones en términos de resultados y rentabilidad, la formación es percibida como un tiempo no directamente productivo. Se trata por tanto, de despertar mediante una buena estrategia de comunicación, el interés y la motivación por los distintos programas de formación. AEDIPE Asociación Española de Dirección y Desarrollo de Personas Moreto 10, bajo izquierda 28014 Madrid www.aedipe.es [email protected] Prolongar los efectos: muchas veces se piensa que la formación acaba en cuanto los empleados salen de la sala. Retomando la idea de una buena comunicación interna, se puede fácilmente recordar los conocimientos adquiridos, e incitarles a poner en práctica las nuevas competencias. Sacarla a la luz: una buena formación que repercute en la empresa no debe quedar en oculto. Hay que hablar de los resultados, de los beneficios que han percibido quienes la han recibido, de cómo la han puesto en práctica. La comunicación interna le puede dar el prestigio que merece. La formación es una auténtica herramienta para la comunicación interna. Toda formación tiene un sentido. Está orientada siempre hacia las directrices de la empresa, trata sobre la cultura empresarial, sobre la motivación… Todas las personas de la compañía son sensibles a esto. Uno se puede resignar o tomar partido y, en ese caso, se puede orientar la política de formación como continuación de la comunicación interna. Gracias a una formación construida en coherencia con el plan de comunicación interna se pueden abordar mas profundamente los mensajes que se quieren transmitir. Cuando, en ocasiones la comunicación no puede mas que evocar temas, lanzar mensajes y pistas para la reflexión, la formación puede trabajar en su puesta en práctica. De alguna manera podemos decir que la comunicación prepara el terreno y la formación puede modificar los comportamientos más en profundidad. A veces es difícil transmitir La formación permite, además, trasmitir los un mensaje de manera mensajes de manera más suave, adaptándolos a cada colectivo. Otra eficaz" manera de utilizar la formación es ganar tiempo y eficacia. La empresa puede ganar terreno a través de sus mandos intermedios que luego transmitirán los mensajes a todos sus equipos. En algunas empresas, sobre todo en las organizadas a modo de franquicias, es a veces difícil hacer llegar los mensajes de forma eficaz. Una solución alternativa puede ser un plan de formación ingenioso que permite llegar a los empleados y garantizar cierta eficacia. En definitiva los puntos de sinergia entre comunicación interna y formación pueden ser múltiples. Maria Gil-Casares Gasset. Profesora de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid. AEDIPE Asociación Española de Dirección y Desarrollo de Personas Moreto 10, bajo izquierda 28014 Madrid www.aedipe.es [email protected]