MM&G Mirande, Marchese & Gaetán Abogados España 766 S2000DBP - Rosario, Argentina T.E. / Fax: (54-341) 4257176 www.mmg-abogados.com.ar Voces: JUICIO EJECUTIVO - JUICIO DECLARATIVO POSTERIOR – REQUISITOS - RECURSO DE INCONSTITUCIONALIDAD- DERIVACIÓN NO RAZONADA DEL DERECHO VIGENTE Tribunal: Corte Suprema de Justicia de la Provincia de Santa Fe Fecha: 30/3/10 Partes: Banco de Santa Fe SAPEM c/Melamedoff, Esteban D. s/Recurso de inconstitucionalidad SUMARIO: I – A diferencia de lo que se verifica en la mayoría de los Códigos de Procedimiento Civil Nacionales -553 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación; 551 del Código Procesal Civil y Comercial de Buenos Aires-, el santafesino no subordina la promoción del juicio declarativo posterior al hecho de que estén cumplidas las condenas impuestas. II – El a quo vuelve a condicionar la promoción del juicio ordinario posterior al cumplimiento de la condena impuesta en la ejecución, interpretación del precepto en cuestión que -como ya se ha puesto de manifiesto- excede los límites de razonabilidad y logicidad tolerados, por consagrar un requisito legal inexistente. III – A la par de configurarse en la especie un claro apartamiento de los preceptos legales aplicables al caso, la decisión recurrida incumple con las pautas mentadas por esta Corte en el reenvío dispuesto (art. 11 de la Ley 7.055) correspondiendo su anulación como acto jurisdiccional válido. TEXTO COMPLETO: A la cuestión si es admisible el recurso interpuesto, la Dra. Gastaldi dijo: Mediante resolución registrada en A. y S., T. 232, págs. 360/361, esta Corte admitió la queja por denegación del recurso de inconstitucionalidad interpuesto por el Banco de Santa Fe SAPEM contra la Resolución del 3/4/08, dictada por la Cámara de Apelación en lo Civil, Comercial y Laboral de Reconquista por entender que la postulación de la recurrente contaba -prima facie- con suficiente asidero en las constancias de autos e importaba articular con seriedad planteos que podían configurar hipótesis de inconstitucionalidad con idoneidad suficiente como para operar la apertura de esta instancia de excepción. Lo mismo acontecía con las argumentaciones expuestas en torno a que el Sentenciante -inmotivada e -2injustamente- se habría apartado de las consideraciones jurídicas y normativas sentadas por este Tribunal en el precedente de remisión. El nuevo examen de admisibilidad que le compete efectuar a este Cuerpo por imperio del art. 11 de la Ley 7.055, con los principales a la vista, me conduce a ratificar dicha conclusión de conformidad con lo dictaminado por el Procurador General a fs. 312/314. Voto, pues, por la afirmativa. A la misma cuestión, los Dres. Netri, Erbetta y Spuler expresaron idénticos fundamentos a los expuestos por la Dra. Gastaldi y votaron en igual sentido. A la cuestión si, en su caso, es procedente, la Dra. Gastaldi dijo: 1. En el proceso seguido por el Banco de Santa Fe SA c/Esteban D. Melamedoff por cobro de la suma de $451.790,24, equivalentes a la planilla aprobada judicialmente en los autos "Melamedoff, Esteban D. c/Banco de Santa Fe (exBanco Provincial de Santa Fe) s/Apremio" (Expte. 423/95), en los cuales el Dr. Melamedoff reclamara el pago de los honorarios profesionales regulados oportunamente -en la suma de $247.393,63- por su actuación para dicha entidad financiera en la causa "Banco Provincial de Santa Fe c/Melbers, Guillermo L. y otros s/Ordinario" (Expte. 46/92), esta Corte por resolución registrada en A. y S., T. 211, pág. 457 anuló el pronunciamiento de la Alzada -que había rechazado la demanda por considerar que en el caso no se hallaban configurados los recaudos exigidos en orden a la procedencia del juicio declarativo posterior al ejecutivo que intentara el Banco de Santa Fe SA-, disponiendo la remisión de los autos al tribunal que corresponde a fin de que la causa sea nuevamente juzgada. 2. Recaídos los autos ante el subrogante legal, la Cámara de Apelación en lo Civil, Comercial y Laboral de Reconquista rechazó los recursos de apelación y nulidad interpuestos por el Banco de Santa Fe SAPEM con fundamento en que: "...Es evidente que con dicho pronunciamiento de la Corte Suprema Provincia (refiere a la causa ‘Reggiardo’) el intento de Melamedoff de percibir honorarios ignorando la reglamentación interna de la demandada no puede tener éxito. Ahora bien, si no puede tener éxito significa que no podrá percibir los fondos que tiene embargados por dicho concepto y como no consta en autos que los haya percibido la demanda con que se da inicio al sub examen es por los menos inoportuna, por que es contrario a la lógica y al sentido común que alguien pretenda la restitución de algo que nunca salió de su patrimonio..." (fs. 62/v.). 3. Este pronunciamiento se impugna por vía de recurso de inconstitucionalidad que gira en torno a que el a quo no ha juzgado nuevamente la litis a la luz de las pautas que este Tribunal expusiera en la primigenia intervención al anular la anterior sentencia de la Cámara. 4. Adelanto que le asiste razón a la recurrente. -3- Uno de los fundamentos que esta Corte expusiera para descalificar la primigenia resolución de la Cámara consistió en que ésta había exigido el cumplimiento previo de la condena impuesta en la sentencia de apremio para que prospere el juicio declarativo posterior (art. 483 del Código Procesal Civil y Comercial), criterio cuya adopción suponía imponer a la acción intentada un requisito legal inexistente (atribuyéndose así los jueces el rol propio del legislador), pues a diferencia de lo que -según la Alzada- se verifica "en la mayoría de los códigos de procedimiento civil nacionales", el Código Procesal Santafesino no subordina la promoción del juicio declarativo posterior al hecho de que estén "cumplidas las condenas impuestas" (como reza, por ejemplo, el art. 553 del Código Procesal Civil y Comercial Nacional; ídem, art. 551 del Código Procesal Civil y Comercial Buenos Aires.). Analizando la respuesta jurisdiccional ahora sometida a control de constitucionalidad se advierte que el Tribunal subrogante ha incurrido en el mismo vicio de arbitrariedad normativa explicitado. En efecto, la Alzada rechaza la demanda prevista en el art. 483 del Código Procesal Civil y Comercial en el entendimiento de la inoportunidad de su promoción, en tanto se pretendía restituir fondos que no habían sido percibidos por el actor de la ejecución. En tal sentido, el a quo vuelve a condicionar la promoción del juicio ordinario posterior al cumplimiento de la condena impuesta en la ejecución, interpretación del precepto en cuestión que -como ya se ha puesto de manifiesto- excede los límites de razonabilidad y logicidad tolerados por consagrar un requisito legal inexistente. La restante razón de la Cámara respecto de que lo resuelto por esta Corte in re "Reggiardo" (A. y S., T. 140, pág. 446) le impediría a la actora percibir lo reclamado en el apremio también merece reproche constitucional. Ello así, por cuanto la sola similitud de la presente causa con la fallada por este Cuerpo -en la que se juzgó la ausencia de un título sustancial que se invocara en la ejecución- no puede autorizar a trasvasar los límites de la cosa juzgada. Es que, en rigor de verdad, el rechazo de esta demanda implicaría la existencia de una sentencia de apremio con carácter de irrecurrible e inmutable que permitiría al ejecutante su cumplimiento conforme a las previsiones del Código de Rito (arts. 486 y sigtes.) y sin que en nada obste lo decidido por este Cuerpo en casos sustancialmente análogos en mérito a lo dispuesto por el art. 249 del Código Procesal Civil y Comercial, circunstancia por demás demostrativa de la irrazonabilidad del argumento brindado por el Tribunal. En síntesis, por vía de la arbitraria interpretación del derecho la Cámara deja sin fallar el caso, concretamente el análisis causal de la obligación condenada en el -4apremio que -como el propio Juzgador lo reconoció- ya ha merecido análisis y juzgamiento constitucional por esta Corte en causas sustancialmente similares, lo que bastaba para acoger la pretensión del Banco actor con todas las consecuencias jurídicas que ello trae aparejado. Colofón de lo expuesto es que a la par de configurarse en la especie un claro apartamiento de los preceptos legales aplicables al caso, la decisión recurrida incumple con las pautas sentadas por esta Corte en el reenvío dispuesto (art. 11 de la Ley 7.055), correspondiendo su anulación como acto jurisdiccional válido. Voto, pues, por la afirmativa. A la misma cuestión, los Dres. Netri, Erbetta y Spuler expresaron idénticos fundamentos a los expuestos por la Dra. Gastaldi y votaron en igual sentido. A la cuestión, en consecuencia, qué resolución corresponde dictar, la Dra. Gastaldi dijo: Atento el resultado obtenido al tratar la cuestión anterior, corresponde declarar procedente el recurso interpuesto y, en consecuencia, anular la sentencia impugnada, con costas al vencido (art. 12 de la Ley 7.055). Disponer la remisión de los autos al Tribunal que corresponda a fin de que la causa sea nuevamente juzgada. Así voto. A la misma cuestión los Dres. Netri, Erbetta y Spuler dijeron que la resolución que se debía adoptar era la propuesta por la Dra. Gastaldi y así votaron. Se resuelve: Declarar procedente el recurso interpuesto y, en consecuencia, anular la sentencia impugnada, con costas al vencido. Disponer la remisión de los autos al Tribunal que corresponda a fin de que la causa sea nuevamente juzgada. Spuler. Erbetta. Gastaldi. Netri.