05 - Antonio Vivaldi Antonio Vivaldi es uno de los más grandes compositores musicales de todos los tiempos, destacándose por introducir nuevos elementos en los conciertos y operas. Su obra más famosa es “Il Cimento dell'Armonia e del'Inventione”, donde se encuentran las cuatro estaciones. El extraordinario músico barroco Antonio Lucio Vivaldi nació el 4 de marzo de 1678 en la ciudad de Venecia y es reconocido como uno de los grandes genios de la música y un referente de su época. En 1693 Vivaldi comenzó su carrera religiosa, en 1699 fue ordenado subdiácono, luego diácono y finalmente ungido sacerdote en marzo de 1703. Se desempeñó como sacerdote y violinista en la catedral de San Marcos hasta el año 1713 cuando comenzó a ser reconocido por toda su capacidad musical, lo que lo llevó a brindar conciertos por toda Italia y Europa. Se lo conocía como il prete rosso "el cura rojo" por ser sacerdote y pelirrojo. Su vida se dividió en 4 etapas importantes, primero se hizo famoso en Europa con su música instrumental, luego gran parte de su vida la dedicó a un orfanato para niñas de su ciudad, luego se ocupo en su oficio como compositor y empresario de ópera, para finalizar como compositor particular. Antonio Vivaldi escribió una gran cantidad de obras, donde se conocen más de 500 conciertos, 70 sonatas, 45 óperas y una extensa cantidad de composiciones de música religiosa. Johann Sebastian Bach fue un gran admirador de sus trabajos, donde incluso hay varias obras de Vivaldi que son únicamente conocidas por la interpretación posterior de Bach. A lo largo de su extensa carrera fue mucho más reconocido como violinista que como compositor. Sus composiciones marcaron una profunda innovación, incorporando elementos como: - la aparición de los instrumentos solistas dentro del concierto el formato de los tres tiempos nuevas formas de interpretar un instrumento como el violín Las cuatro estaciones de Antonio Vivaldi Dentro de esta magnífica obra se destacan los cuatro primeros conciertos (otoño, invierno, primavera y verano) los que representan las cuatro estaciones. En esta gran obra instrumental, Antonio Vivaldi transita por las cuatro estaciones en 3 movimientos: una primera parte que es rápida (allegro), una segunda intervención que es lenta (adagio) y la tercera nuevamente rápida (allegro). En cada una de las estaciones se interpretan brillantemente los sonidos de la naturaleza de cada época del año, reproduciendo lo más significativo de cada momento dependiendo de la estación que se trata. Antonio Vivaldi se deja llevar por las sensaciones y sonidos que le generaban la naturaleza y su comportamiento, componiendo así su gran obra maestra.