TEMA 5: LA LITERATURA BARROCA S. XVII EL SIGLO DE ORO DE LAS LETRAS 3º ESO 0.- Contexto histórico. Ver pág 260 1.- Características generales de la literatura barroca La literatura barroca difundió los valores sobre los que se sostenía el imperio español: monarquía absolutista, privilegios de cristianos viejos y los dogmas de catolicismo. De ahí que esté dirigida a un público muy amplio y heterogéneo: pueblo llano, burguesía y nobleza, es decir, espectadores cultos y analfabetos. Temas En el Barroco perviven los temas y tópicos del Renacimiento (donna angelicata, carpe diem, mitos grecolatinos…) pero hay que añadirle un tono pesimista o burlesco. Los temas propios del Barroco serán el desengaño y la angustia existencial surgidos de que la vida, belleza y poder humanos son efímeros. Solo cabe esperar ruina y muerte. Estilo literario Los escritores barrocos tienen el objetivo de sorprender, y como consecuencia, divertir a los lectores y espectadores. El escritor barroco aspira a ser original e ingenioso. Sus obras son juegos verbales muy elaborados, que sorprenden y retan la capacidad de comprensión del receptor. Los recursos literarios que se utilizaban en el Barroco ya se empleaban en el Renacimiento, pero ahora se acumulan y se exageran. En la literatura barroca se distinguen dos formas de expresión que oscurecen y dificultan la comprensión de los textos: el culteranismo y el conceptismo. 2.- La lírica barroca: conceptismo y culteranismo El conceptismo: Francisco de Quevedo 1 Es un modo de expresión que consiste en centrar en pocas palabras una gran cantidad de significados mediante una asociación ingeniosa de ideas. Se deben elegir expresiones que tengan un doble o un triple sentido. Las figuras literarias que suelen utilizar los conceptistas son símiles y metáforas, juegos de palabras, antítesis, paradojas e ironías, elipsis e hipérboles. El conceptismo alcanza su máxima expresión con autores como Fco. de Quevedo y Baltasar Gracián. Francisco de Quevedo Fue testigo de la crisis económica, política y militar de la España del siglo XVII y lo reflejó en sus obras. Sus reflexiones políticas, morales y religiosas alcanzan gran profundidad, pero tienen el contrapunto negativo de sus prejuicios antisemitas, racistas y misóginos. Su obra se puede dividir en: - Poesía satírica y burlesca: humor escéptico sobre la vida humana. - Poesía amorosa - Poesía filosófica y moral: basada en la fugacidad de la vida (tempus fugit) El culteranismo: Luis de Góngora Es un modo de expresión caracterizado por el empleo exagerado de figuras retóricas y latinismos, de manera que el significado del texto, a veces mínimo, queda en un segundo plano. Los escritores culteranos consiguieron sorprender en su época sobre todo por el ritmo y la musicalidad de sus versos, inventaron palabras nuevas (neologismos), emplearon numerosos adjetivos coloristas y metáforas poco habituales y usaron sus conocimientos de mitología. La forma predomina sobre el fondo. Luis de Góngora Sus poemas culteranos crearon una gran polémica entre defensores y detractores de su estilo novedoso. A partir de 1603 sostuvo una guerra literaria con Quevedo, en la que ambos se demostraron su mutua antipatía y su ingenio para dedicarse versos burlescos. Su obra se puede clasificar en: 2 - Poemas de inspiración popular: son composiciones de arte menor. Las podemos clasificar en romances y letrillas. - Poemas cultos: están escritos en arte mayor y con un estilo culterano muy oscuro. Pertenecen a este grupo La fábula de Polifemo y Galatea, Soledades y sonetos de tema amoroso, existencial y burlesco. La fábula de Polifemo y Galatea. Es una recreación de la fábula mitológica en donde el cíclope Polifemo está enamorado de la ninfa Galatea, pero esta mantiene un idilio con el joven Acis. Cuando se entera, el cíclope se venga arrojándole una roca que acaba con su vida, pero la sangre del chico se transforma en río. Está escrita en octavas reales. Soledades. Son cantos que exaltan la belleza de la naturaleza a la partir del punto de vista de un peregrino. Está escrita en silvas. La obra está inacabada, al parecer debería haber cuatro soledades. Soledad I. Cuenta la llegada de un náufrago a una playa desconocida y cómo unos cabreros le acogen. El peregrino goza de los placeres de la vida rústica y conoce de primera mano la filosofía de los personajes rurales, que viven apartados de la sociedad, desprecian la guerra, las ambiciones y el imperialismo. Como podemos observar, utiliza el tópico literario del aurea mediocritas. 3.- El teatro en el siglo de Oro: teatro popular y teatro de reyes 3.1.- Antecedentes A principios del siglo XVII, Lope de Vega llegó a la conclusión de que, en relación con el teatro, los gustos del público español eran radicalmente contrarios a las normas clásicas (regla de las tres unidades). Lope creó la llamada comedia nueva. Su teatro significó una revolución en la escena. Pero éste no partió de la nada. Antes que él tres comediógrafos, Torres Naharro, Juan de la Cueva y Lope de Rueda, también dieron con la fórmula del teatro. Lope de Vega aprendió en los corrales y en la calle que el éxito del teatro popular debía tener estas claves: - Temas nacionales: leyendas, romances y crónicas de la Edad Media. - Realismo: personajes cotidianos y temas que reflejaran preocupaciones vitales, honor, honra, celos, amor o venganza. 3 - Entretenimiento: mantenían el interés del público a través de los enredos (peleas, líos y palos). Después de cada acto, se amenizaba con la representación de obras cómicas breves, llamadas pasos, así como bailes. 3.2.- Félix Lope de Vega En 1609 el Fénix de los ingenios presentó públicamente su método para hacer teatro de éxito. Él lo llamó Arte nuevo de hacer comedias y consistía básicamente en incumplir los principios del teatro clásico. Características del Arte nuevo de hacer comedias 1. Se reducen a tres los actos del teatro clásico. Se corresponderán a planteamiento, nudo y desenlace. 2. Se rompe con la regla de las tres unidades. 3. Se mezclan estrofas y versos. El verso predominante era el octosílabo. 4. Se incluyen personajes como el galán, la dama, el gracioso, el villano, el poderoso… 5. Se defienden los valores de la sociedad del siglo XVII: el honor y la honra. 6. Final feliz o justo. En el caso de que este final feliz no sea posible, el rey o noble debe castigar a los malvados. Esto se denomina justicia poética. Clasificación de su obra Se conservan cerca de 400 obras de teatro. La mayoría siguen el modelo del Arte nuevo de hacer comedias. Su producción se suele clasificar en tres grupos: - Dramas de ambientación histórica: su tema principal es el poder injusto. En estas obras aparecen labradores ricos que son víctimas de los abusos de un poderoso noble. Destacan Fuenteovejuna, Peribáñez y el comendador de Ocaña. - Comedias de enredo amoroso y de capa y espada: son comedias con final feliz en las que se urden complicadas tramas que siguen la consigna de “el amor todo lo puede”. Destaca El perro del hortelano. - Tragicomedias: en estas obras el protagonista suele morir. Destaca El caballero de Olmedo. 4 Teatro para reyes: Pedro Calderón de la Barca Felipe IV lo convirtió en el dramaturgo oficial de la corte. Éste presenta en sus dramas un carácter pesimista y reflexivo. Calderón no se limitó a seguir las innovaciones de Lope de Vega. Las características de su obra son las siguientes: - Teatro de ideas. Aporta profundidad filosófica y moral a los temas barrocos como el honor; pero trata temas más controvertidos como la predestinación, la fe, la libertad, la dificultad para distinguir la apariencia de lo real… - Tiene un personaje central. Focaliza la tensión dramática en un protagonista. El resto de los personajes se subordinan a él de forma piramidal, según la importancia en la acción. - Lenguaje culto. En sus obras se mezclan los estilos conceptistas y culteranos. Fue el autor de dos dramas universales: La vida es sueño y El alcalde de Zalamea. La vida es sueño. Es un drama filosófico en el que plantea si el humano es un ser libre y no predestinado. Argumento: Basilio, rey de Polonia, encierra a su hijo Segismundo en una torre porque unos astrólogos han vaticinado que cuando crezca, el joven lo derrocará y asesinará. Pasados los años, el rey libera a su hijo de la torre y lo lleva a su palacio. Al ver que Segismundo se comporta cruelmente con todos, le suministran un narcótico y es encerrado de nuevo en la torre. Segismundo cree que su breve estancia en palacio ha sido un sueño. Tras una revolución, el pueblo libera a Segismundo y lo proclama rey. Al final, no se cumple el horóscopo porque éste perdona a su padre y se comporta como un gobernante reflexivo. En este fragmento, Segismundo se plantea qué es sueño y qué realidad: Sueña el rico en su riqueza Yo sueño que estoy aquí que más cuidados le ofrece, de estas cadenas cargado, sueña el pobre que padece y soñé que en otro estado su miseria y su pobreza; más lisonjero me vi. sueña el que a medrar empieza, ¿Qué es la vida? Una ilusión; sueña el que afana y pretende, una sombra, una ficción sueña el que agravia y ofende, y el mayor bien es pequeño. y en el mundo, en conclusión, ¡Que toda la vida es sueño todos sueñan lo que son, y los sueños, sueños son! aunque ninguno lo entiende. 5 El alcalde de Zalamea. Aquí denuncia las tropelías que llevaban a cabo los militares al pasar por zonas habitadas. El alcalde, Pedro Crespo, juzga y castiga con la pena de muerte a un capitán del ejército de Felipe II por haber violado a su hija. Con este drama de honor, Calderón quiere expresar una idea muy clara: la persona que comete un delito no puede quedar sin castigo por el hecho que pertenezca a una clase social más alta que su víctima. 4.- La prosa en el Barroco Podemos distinguir tres tipos de novelas: - Evolución de la novela picaresca. La siguiente novela picaresca que se escribió fue Vida del pícaro Guzmán de Alfarache, en la que también el pícaro sufre un desarrollo psicológico claro en la que se pretende justificar por qué ha sido condenado a galeras. En las siguientes novelas, El buscón, de Quevedo, y Vida del escudero Marcos de Obregón, de Vicente Espinel, ya no aparece este proceso psicológico evolutivo y realista. La picaresca se puso tan de moda que hubo novelas con protagonista femenina, como La pícara Justina, de López de Úbeda y La hija de Celestina, de Salas Barbadillo. - Relatos satíricos-fantásticos. Destaca Quevedo con Los sueños, en la que hace una crítica despiadada de la sociedad valiéndose de la libertad que nos permiten los sueños. El diablo cojuelo de Vélez de Guevara trata de un diablo travieso que levanta los tejados para enterarse de lo que hace la gente en sus casas y descubrir la verdad de lo que cada uno esconde. Nos muestra la hipocresía, los engaños y las falsas apariencias de las bases del comportamiento humano. - Novela alegórica. Baltasar Gracián. Sus obras reflejan la mentalidad pesimista del Barroco: la fugacidad de la vida, el desengaño, las falsas apariencias o la crueldad humana. Su obra más importante es El criticón. Se trata de una novela alegórica protagonizada por Andrenio y Critilo, símbolos de los instintos y la razón respectivamente, que viajan por España y Europa donde conocen la estupidez y maldad humanas. 6