La adaptación consiste en un ajuste del organismo al medio ambiente, del órgano a sus funciones, tienen como efecto poner al ser vivo en equilibrio con el medio, con las circunstancias. La adaptación se manifiesta en todos los niveles del organismo, tanto en las funciones como en los comportamientos innatos. Desde otro punto de vista, la adaptación se considera como una variación heredada o una combinación de características heredadas que aumentan las probabilidades del organismo para sobrevivir y reproducirse en determinado ambiente. Una especie se puede definir como una población o grupo de poblaciones formadas por individuos que, en su hábitat natural son potencialmente capaces de cruzarse. La capacidad de cruzamiento se interpreta como una evidencia de que tales individuos tienen, genéticamente, una estrecha relación y esto demuestra un alto grado de parentesco. Los diversos individuos que componen una especie varían enormemente por las diferencias de edad, sexo o de cualquier otro factor. Para sobrevivir en su medio, las especies han desarrollado ciertas adaptaciones, estas se resumen en tres categorías: 1. Las adaptaciones morfológicas o anatómicas: son las más evidentes, se perciben con mayor facilidad, por ejemplo se pueden citar, el ala de una ave es una adaptación para el vuelo, la relación entre los dientes y la dieta, entre extremidades inferiores y locomoción, entre forma de la planta y hábitat y muchas otras más. Basta revisar los diferentes ambientes tanto acuáticos como terrestres para apreciar las diferentes formas de los organismos que corresponden a cada uno de ellos. 2. Las adaptaciones fisiológicas: involucran ajustes funcionales que contribuyen a asegurar la supervivencia de los organismos, la adaptación fisiológica alcanza en ocasiones refinamientos extraordinarios, como los observados en los órganos sensoriales. Entre otros ejemplos se pueden mencionar, la utilización del oxígeno disuelto en el agua por las branquias, la producción de enzimas digestivas que actúan sobre el alimento del cual el organismo se nutre, la reducción en la transpiración vegetal, así como un gran número de modificaciones que benefician los procesos metabólicos de la respiración, la digestión y otras funciones. 3. Las adaptaciones de la conducta: éstas involucran modificaciones leves dadas bajo determinadas condiciones. Los comportamientos ofrecen una infinidad de adaptaciones al modo de vida, por ejemplo las reacciones de prevención desencadenadas por ciertas sensaciones son de naturaleza adaptativa. Es importante considerar que las especies están adaptadas al ambiente en el cual viven, sin embargo, la distribución geográfica de éste incluye una diversidad en las condiciones ambientales. La acción de selección natural tiende a acentuar diferentes características en cada una de las áreas geográficas de distribución, por lo que las especies casi siempre están formadas por un grupo de poblaciones capaces de fecundarse entre sí y cuyo patrón genético difiere ligeramente, las especies distribuidas en ambientes muy diferentes son poblaciones con muchas adaptaciones ligeramente distintas. Dichas poblaciones ligeramente diferentes, que constituyen una especie, reciben diversos nombres, entre otros: poblaciones locales, razas, variedades y subespecies.