GRIPE PORCINA GRIPE PORCINA La gripe (o influenza) porcina es una infección vírica altamente contagiosa de los cerdos. Está causada por el virus de influenza tipo A, de la familia Orthomyxoviridae. El subtipo se determina por las propiedades antigénicas y genéticas de las proteínas de superficie hemaglutinina (H) y neuraminidasa (N). Existen 16 tipos de hemaglutininas y 9 de neuraminidasas. En Europa, los subtipos más frecuentemente implicados en los casos de influenza porcina son H1N1, H1N2 y H3N2. El virus de influenza puede presentar variaciones antigénicas debidas a la aparición de mutaciones puntuales, incluso dentro del mismo subtipo. También pueden surgir nuevos virus de la combinación genética de dos o más virus diferentes. PATOGENIA La vía de transmisión más común de la enfermedad es la nasofaringea. Tras la entrada, el virus se adhiere a los cilios y replica en el epitelio del tracto respiratorio anterior. Desde ahí se extiende hacia los bronquios y bronquiolos, provocando daños en el aparato mucociliar: • • • • pérdida de cilios aumento de la producción de moco necrosis y metaplasia del epitelio de las vías aéreas exudado compuesto por neutrófilos y macrófagos. El virus también se extiende al epitelio alveolar y macrófagos alveolares, dando lugar a un exudado serofibrinoso. El daño al aparato mucociliar junto a la alteración de la función de los macrófagos alveolares predispone los cerdos a la aparición de infecciones bacterianas secundarias. CONTAGIO La vía de transmisión más común de la enfermedad es la nasofaringea. Las secreciones nasales son una fuente de infección para los animales susceptibles. La transmisión del virus entre cerdos se puede producir de dos formas: • Directa: el virus se disemina rápidamente en la granja a través de aerosoles y por contacto directo entre animales. • Indirecta: a través de aerosoles entre granjas, sobre todo en regiones de alta densidad porcina. Los cerdos portadores suelen ser los responsables de la introducción del virus en explotaciones no afectadas previamente por la enfermedad. Los virus de influenza porcina se han hallado principalmente en cerdos, aunque también han sido hallados en otras especies, incluyendo el hombre, pavos y patos. GRIPE PORCINA SÍNTOMAS Y LESIONES La mayoría de cepas europeas pueden circular en cerdos con escasos/sin signos clínicos. Sin embargo, la infección por el virus de la gripe porcina puede quedar enmascarada por la presencia conjunta de otros virus y bacterias, en lo que se conoce como Complejo Respiratorio Porcino (CRP). Se pueden observar diversos signos clínicos que varían según diversos factores: • • • • • Los casos más agudos de influenza porcina se caracterizan por fiebre, respiración abdominal, letargia, anorexia, pérdida de peso, descarga nasal, tos seca y dificultad en la respiración. La morbilidad es muy alta pero la mortalidad es muy baja. La fiebre puede producir disminución de la producción de semen en machos y abortos en las cerdas. Cuando no existen complicaciones, la recuperación se produce a los 2-6 días. Las complicaciones incluyen infecciones secundarias bacterianas o víricas y ocasionalmente se puede ver bronconeumonía grave. Las lesiones que se observan en infecciones no complicadas son las de una neumonía vírica: partes afectadas de los pulmones consolidadas, de color rojo oscuro a rojo púrpura, vías aéreas a menudo dilatadas y llenas de exudado, y aumento de tamaño de nódulos linfáticos traqueobronquiales y mediastínicos. Algunas cepas producen lesiones más marcadas que otras. DIAGNÓSTICO Diagnóstico clínico • Aparición de signos clínicos y lesiones típicas. Diagnóstico laboratorial • • • • Detección del antígeno (inmunofluorescencia o inmunoperoxidasa) Kits de captura de antígenos para diagnóstico rápido (muestras nasales o bronquiales) Aislamiento vírico (muestras nasales o de tejido pulmonar) Serología (inhibición de la hemaglutinación, inmunofluorescencia indirecta y ELISA). EFECTOS El impacto económico de la enfermedad está relacionado con un retraso en la ganancia de peso, que aumenta el número de días para alcanzar el peso de mercado. Los virus de la influenza porcina no se transmiten por los alimentos. Por tanto, no se puede contraer influenza porcina por manipular o comer carne de cerdo o sus productos derivados, ya que es un virus de transmisión aérea. GRIPE PORCINA TRATAMIENTO No existe tratamiento eficaz, solamente tratamiento paliativo (provisión de agua para mantener la hidratación, antipiréticos para la reducción de fiebre y administración de antibacterianos para controlar las infecciones bacterianas concomitantes). Las vacunas del virus de la influenza porcina son la única medida eficaz para el control de la infección y se recomienda en zonas o épocas de alta prevalencia. PREVENCIÓN Las reglas básicas de bioseguridad son esenciales para prevenir la enfermedad, pero incluso aplicándolas con sumo cuidado, la infección puede suceder en zonas con alta densidad de población porcina, ya que el virus se difunde principalmente vía respiratoria y es altamente transmisible entre cerdos. Algunas medidas de bioseguridad recomendadas son: • Higiene: adecuada limpieza, sistemas de manejo tipo todo dentro/todo fuera, aislar animales enfermos, evitar el contacto de personal con gripe con los animales (en caso necesario, uso de mascarilla), medidas sanitarias del personal ante un brote para evitar el contagio dentro de la explotación (mascarillas, guantes, cambio de ropa y calzado, etc.). • Vacunación: se aconseja vacunar de forma periódica a todos los animales, principalmente en otoño y principios de invierno. • Manejo: evitar someter a los animales a factores estresantes, evitar las variaciones de temperatura, cuarentena de lotes nuevos. • Alimentación: evitar los cambios en la dieta, asegurar una adecuada ingesta de calostro, administrar alimento y agua de calidad y en cantidad suficiente. • Instalación: suficientemente aislada de vías públicas, evitar el paso de animales sensibles a la influenza (caballos y aves). CURIOSIDADES • Los virus de la gripe porcina en Europa y Estados Unidos son genéticamente distintos a pesar de tener la misma clasificación de subtipo. • Los cerdos tienen receptores en su tracto respiratorio que reconocen virus de la gripe porcina, humana y aviar. En consecuencia, se han considerado como “recipientes de mezcla” para el desarrollo de nuevos virus cuando los virus de la gripe porcina, aviar y/o humana se recombinan en ellos. • El subtipo H1N1 fue el agente etiológico de la mayoría de gripes hasta mediados de los años 90, y ha sido la cepa que históricamente más se ha asociado con la gripe porcina clásica. Desde entonces, han aparecido virus de varios subtipos y variantes. • Los virus que circulan actualmente y afectan a los cerdos incluyen también componentes genéticos o virus de influenza aviares y humanos enteros. GRIPE PORCINA QUÉ HACE EL CReSA ANTE LA GRIPE PORCINA Unidad de Inmunología • Desarrollo de nuevas estrategias de control: nuevas estrategias vacunales e inmunomoduladoras basadas en la estimulación de las células dendriticas porcinas. Unidad de Epidemiología • Estudios epidemiológicos: estudio de la prevalencia, subtipos existentes y modelo epidemiológico de evolución de la infección en granjas de porcino en España. • Asesoría y divulgación científica: asesoría científica al sector público y privado, participación como autores y/o revisores en publicaciones especializadas y elaboración de material técnico sobre la enfermedad.