TEMA: LA IMPORTANCIA DE UN BUEN FUNDAMENTO

TEMA: LA IMPORTANCIA DE UN BUEN FUNDAMENTO
TEXTO: (Sal. 11)
TÍTULO: LO QUE SOSTIENE MI VIDA
Introducción
El Señor está trabajando en su iglesia de manera linda y sobrenatural. Se están dando
manifestaciones espirituales para nuestra edificación y servicio. Muchas vidas han entrado
en un proceso de renovación, restauración y equipamiento para la visión hacia la cual Dios
nos está guiando. Pero en medio de todo esto nos está llamando la atención hacia algo de
suma importancia: ¿Cuál es nuestro fundamento?
Fundamento: Principio y cimiento sobre el que se apoya un edificio u otra cosa.
Cimiento: Principio o raíz de algo. Ej. Los fundamentos de la fe.
Los fundamentos son la parte invisible que sostiene lo visible. Es lo que determina la
duración de lo que se puede ver. No solo se edifican casas sino también vidas, familias,
amistades, fe y todas ellas se edifican sobre algún fundamento. Muchas veces cuando se
evidencias problemas en nuestras vidas la causa de los mismos se halla en los
fundamentos. Resulta infructuoso trabajar en la superficie porque se repetirá la misma
situación una y otra vez. Es solo cuestión de tiempo.
La consulta que se hizo el Rey David estaba relacionada con la vida del ser humano. Más
que una pregunta fue la expresión de la conclusión a la cual había llegado: “Si son
destruidos los fundamentos, ¿qué puede hacer el justo?” (vs. 3)
DESARROLLO
I. La necesidad de un buen fundamento (Mt. 7: 24-27)
 Todos seremos probados en la vida para que nos sea revelado nuestro fundamento
(tanto el prudente como el insensato recibieron los embates del mal tiempo)
 La revelación escrita de Dios nos anuncia que hay tiempo para todo debajo del cielo
(Ecl. 3: 1-8)
 La permanencia o la ruina dependen del fundamento que no se ve y no de las
manifestaciones externas. (Nótese el pasaje anterior a raíz del cual viene esta enseñanza de
Jesús Mt. 7: 15-26)
II. Un buen fundamento nos da seguridad y libertad (1 Ped. 5: 6-11)
La altura hasta la cual se pueda elevar un edificio depende de su fundamento. Mientras
más profundo sea más podrá resistir los embates del mal tiempo. Algo parecido sucede con
un árbol y sus raíces. Mientras más profundan estén en la tierra su tronco será menos
abatible. De la misma manera mientras nos sometamos a la voluntad de Dios con mayor
profundidad y reverencia, Él mismo se encargará de edificarnos y exaltarnos con su poder.
En los días difíciles podremos depositar la carga y la ansiedad en Él porque cuidará de
nosotros.
II. a Fundamentados sobre la fe en Él
Es la fe lo que nos ayuda a resistir los embates de nuestros enemigos y mediante la cual
nos mantendremos firmes ante sus ataques y las pruebas. La fe también es descrita como
“la certeza de lo que no se ve” por lo que tiene la cualidad para fundamentar nuestras
vidas y de ella depende la calidad espiritual que se manifestará externamente en nuestras
obras y frutos. La fe nos ayuda a entender el principio vital de menguar para que Dios
crezca y nos conducirá a experimentar sus beneficios (Ef. 3: 16-21)
II. a Una fe sólida y eterna solo en el Señor
Esta es una fe que no depende de cosas externas ni visibles, sino de Dios por ser Él quien
es. Una fe que proviene del poder de sus palabras y no de la calidad de nuestras obras. Este
es el fundamento sólido que nos lleva a vivir de sus promesas y no de nuestras habilidades.
Esta es el tipo de confianza que nos da libertad en todos los aspectos y situaciones porque
espera y descansa en Él, y Dios, en su fidelidad, siempre responde conforme como lo ha
prometido (vs. 10-11)
Ej. El tema de la salvación ¿Se puede perder o no?
III. Dios ofrece el mejor fundamento: Jesucristo (1 Cor. 3: 10-14)
Él único fundamento que nos ayudará a permanecer firme en el día del juicio es
Jesucristo. Sobre Él podemos edificar nuestras vidas confiadamente y sin temor alguno. En
este pasaje hay una alusión al fuego de juicio que tendrá una doble función:
1. Quemará y consumirá toda obra que no es aceptada por Dios pues no fue realizada
en sus parámetros de justicia, fe, santidad y amor.
2. Le dará esplendor y recompensa a todo aquel que tiene a Jesucristo como cimiento.
Estos brillarán después de la prueba.
Conclusiones
Si tu vida está fundada en Jesucristo puedes vivir confiado y seguro. La Biblia dice que
aunque nos haga pasar por el fuego o por el agua Él nos sacará a la abundancia
(Sal. 66: 12) Si estás sostenido por la fe genuina en el Salvador, ni siquiera temerás a los
juicios de Dios porque sabes que son justos y ayudan para nuestro bien. Lejos de
atemorizarte, encontrarás en ellos tu delicia, sabiendo que Dios a quien ama disciplina y
corrige.
Si el Señor está demandando tener al 100 % el control de nuestras vidas no es egoísmo ni
pretensión, sino que quiere colocar en ti un fundamento estable que te ayude a permanecer
firme en todo tiempo. Un cimiento que te ayude a experimentar una completa libertad y
una eterna paz. (Sal. 46: 1-7)