el trabajo común de padres, profesores y educadores

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EL TRABAJO COMÚN DE PADRES, PROFESORES Y EDUCADORES,
CLAVE PARA PONER REMEDIO AL FRACASO ESCOLAR
AUTORA : Mª del Mar Jiménez Rodríguez.
DNI: 44959634 –Q.
INTRODUCCIÓN: En este artículo vamos a tratar uno de los problemas
relacionados con el mundo de la educación que afecta más a la sociedad y a las
familias: el fracaso escolar. Para ello, trataremos de esclarecer cuáles son las
cifras reales de este problema en nuestro país y las causas que llevan a esta
problemática.
En primer lugar, antes de abordar el tema en cuestión, vamos a definir el término
“fracaso escolar”. Podemos definirlo como “un fenómeno dado en los escolares que
presentan bajo rendimiento escolar, discapacidad en las materias instrumentales como
lectura y escritura y cálculo”; “…desajuste negativo entre capacidad real de un alumno
y su rendimiento escolar valorado académicamente”.
Para afrontar este problema, que afecta a padres, profesores, la Administración
Educativa y a los propios alumnos en la actualidad en España (supone un 26% de
estudiantes superando en 6 puntos a la media europea en lo que respecta el rendimiento
académico), podemos tomar varias medidas que ya se están llevando a cabo:
•
Adaptar los contenidos del currículum de cada curso al nivel y al perfil del
alumnado, cosa ya se hace en los centros educativos.
•
Intentar motivar al alumnado.
•
Incorporar programas de diversificación curricular para aquellos alumnos/as que
tengan mayores dificultades de aprendizaje, en los cursos de 3º y 4º ESO.
•
Tras haber percatado que un alumno/a presenta problemas de aprendizaje, el
consejo de expertos también es importante. En este caso y en caso necesario, la
figura del orientador puede ofrecer un “tratamiento” adecuado para paliar el
problema.
Entre las causas que provocan este problema educativo podemos destacar:
-
Apatía del alumno.
-
Frustración del alumno/a al no alcanzar los objetivos mínimos marcados por las
materias del currículum y, con ello, las malas calificaciones.
-
Baja autoestima y sentimiento de inferioridad respecto al nivel del grupo clase.
-
Problemas emocionales del tipo ansiedad, depresiones, miradas, complejos,…
y/o familiares. En este caso (limitándome a la Educación Secundaria
Obligatoria), al tratarse de alumnos/as adolescentes de entre 12 y 16 años, es
frecuente que a esas edades ya comiencen a interesarse por personas del otro
sexo, tener problemas de amor, y dejen de lado un poco los estudios.
-
Baja capacidad intelectual (por problemas de dislexia, trastornos de aprendizaje,
problemas de lectura, escritura, comprensión,…), aspecto que puede repercutir
negativamente en la educación del alumno/a, pues presentan un gran “handicap”
que afecta a su propio proceso de enseñanza – aprendizaje.
-
Absentismo escolar por problemas de salud, cambio de residencia por motivos
laborales de la familia, etc.
Una vez expuestas líneas, incitar a la reflexión sobre todos estos puntos
tratados para ser conscientes del problema que nos afecta con varios
interrogantes: ¿Cuál será el coeficiente intelectual de las generaciones venideras
dentro de 20 años? ¿Nos encontraremos con jóvenes que representan una
sociedad fracasada con un nivel de conocimientos mínimos? ¿Habrá mayor o
menor número de estudiantes?
Como se suele decir, el tiempo lo dirá pero, a mi parecer, no todo
depende absolutamente de la figura del profesor y de los educadores, sino
también de los sujetos implicados y de las familias.
BIBLIOGRAFÍA: En este caso no reseño ninguna obra bibliográfica. Tan sólo
citar una página web de la que me he servido para definir el término “fracaso
escolar” http://www.psicopedagogia.com
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