EL PARQUE NATURAL LOS MONTES DE TOLEDO: DIVERSIDAD DE FORMACIONES Y COMUNIDADES FORESTALES ESCLEROFILAS EN LOS MONTES DE NAVAHERMOSA María Manuela REDONDO GARCIA Dpto. Análisis Geográfico Regional y Geografía Física. Facultad Geografía e Historia. UCM INTRODUCCION.El trabajo que se presenta forma parte de una investigación sobre las formaciones vegetales en la comarca Los Montes de Navahermosa en los Montes de Toledo. Las formaciones vegetales del territorio se han clasificado en función de las especies dominantes, como elemento diferenciador; así, cuando una especie deja de predominar frente a otras, nos encontramos ante una nueva formación vegetal. En función de sus caracteres ecológico-fisionómicos se pueden diferenciar en la comarca los siguientes tipos de bosques: a) Bosques esclerófilos: encinar, alcornocal, y sus mestos o híbridos b) Bosques caducifolios submesófilos: robledal, quejigar, castañar y formas híbridas. c) Comunidades ripícolas y mesohigrófilas relictas: Son comunidades forestales que precisan más humedad, se localizan en riberas y en enclaves puntuales favorables. La gama de especies arbóreas es muy variable (chopos, fresnos, abedules, tejos, etc). d) Repoblaciones forestales: Formaciones puras, o mixtas de pinos y eucaliptos, que por su carácter claramente artificial se analizan por separado. MATERIAL Y METODOS.Los Montes de Navahermosa se localizan en el sur de la provincia de Toledo y comprenden una superficie total de 830,69 km2. Los territorios forestales que se estudian pertenecen a los municipios de Hontanar, Menasalbas, Navahermosa, S. Martín de Montalbán, S. Pablo de los Montes y Las Ventas con Peña Aguilera. Todos ellos forman la comarca agraria Montes de Navahermosa desde 1977 momento en el que el MAPA "comarcaliza" España. Esta comarcalización viene a sustituir a la "codificación a efectos agrarios de regiones, provincias y comarcas". Dos años después, en 1979, el Servicio de Extensión Agraria reagrupa de nuevo el territorio en: Región Natural Natural ⇔ Mtes de Toledo sas ⇔ Comarca Natural ⇔ Area Comarca Agraria Mtes de Toledo y Jara Mtes de Toled⇓o y Dehe- Mtes de Navahermosa La metodología aplicada en el estudio ha sido la propia del análisis geográfico. Comprende basicamente de tres fases: La primera, consiste en una búsqueda exhaustiva de actas, pleitos, documentos, expedientes, etc. que tengan relación con el pasado de estas formaciones. La segunda, compuesta por una serie de trabajos de campo, para poder evaluar las actuaciones y ver los resultados. Por ello, es necesario analizar los elementos bióticos (cubierta vegetal, y fauna por sus elementos e interrelaciones con los demás elementos del paisaje), abióticos (modelado del relieve, clima y sus variantes más determinantes en el paisaje) y el suelo (como interfase de los elementos bióticos y abióticos, y como soporte de las actividades antrópicas), de los territorios en los que están insertos dichos enclaves. La tercera y última fase consiste en la realización de un protocolo con los siguientes items localización, altitud, superficie, sustrato, orientación, topografía, caracterización termopluviométrica, vegetación originaria, vegetación actual, fauna y grado de antropización. Entre los materiales básicos que se utilizan están las fotografías aéreas vuelo americano de 1956, Catátros de rústica, observación directa, inventarios, Cartografías temáticas, etc. RESULTADOS Y APLICACIÓN.1.- Los bosques esclerófilos: los encinares. La encina (Quercus ilex subespecie ballota) es una especie ampliamente distribuida en la comarca a todos los niveles altitudinales y en los más diversos medios. Con frecuencia suele acompañar a otras especies, con mayor o menor abundancia. En los encinares es dominante a nivel arbóreo y, con frecuencia, también a nivel arbustivo. La encina en la comarca participa, pues, en tres grandes tipos de formaciones: una formación de encinar puro, en la que la especie dominante es exclusiva o casi exclusivamente ella sóla; otra formación de encinar mixto, en la que la encina (Quercus ilex subespecie ballota) es especie codominante junto con otra u otras especies, y, finalmente, una formación con encinas, pero que ya no son encinares, pues la especie no domina sino que las especies dominantes son otras. Entre los rasgos geoecológicos de la encina merecen destacarse: - Su indiferencia a la orientación y exposición que posibilita que se localicen ejemplares aislados arbóreos y arbustivos en las solanas hasta las cumbres (hasta los 1.420 m en la comarca) - Su gran adaptabilidad a todo tipo de sustratos y suelos, aunque no tolera los salinos e hidromorfos, siendo considerada con razón indiferente edáfica. En suelos profundos y frescos puede ser desplazada por quejigos (Q. faginea) y/o robles (Q. pyrenaica) si las precipitaciones son suficientes para estas especies. - Su gran amplitud climática, tolerando fuertes contrastes térmicos, tanto elevadas temperaturas estivales superiores a los 40ºC como fuertes fríos invernales. En el plano hídrico es poco exigente en agua contentándose con precipitaciones escasas y soportando largas y acusadas sequías estivales. Al aumentar las precipitaciones va siendo sustituida por especies mas exigentes en agua como el quejigo, el alcornoque o el roble, los 900 ó 1.000 mm. suelen marcar el tránsito a los robledales. - Su gran capacidad de rebrote tras talas y ramoneos, sobreviviendo en forma de matorral indefinidamente. - Su aptitud para colonizar medios desfavorables, tales como terrenos abruptos y rocosos o como pedrizas. Por ello la encina tiene un valor muy importante ecologicamente, contribuyendo a la colonización de medios poco adecuados a otras especies, estabilizando y protegiendo el suelo. Impiden o frenan los posibles deslizamientos de materiales cuarcíticos; se desarrollan en proceso lento pero progresivo en áreas en donde sería imposible realizar una repoblación forestal por los desmesurados clastos; por ello su desarrollo adquiere una forma achaparrada, aunque en ocasiones tienen porte arbóreo. Se pueden diferenciar las facies siguientes: - Restos de encinares en tierras cultivadas.- En el piedemonte no quedan encinares con porte arbóreo debido a las roturaciones que han ido teniendo lugar en la comarca. Sin embargo, en ocasiones sobreviven en campos cultivados, pies arbóreos aislados de encina, como puede verse en numerosos enclaves de San Martín de Montalbán, Menasalbas y de Las Ventas con Peña Aguilera. Más frecuentes, aunque también escasos, son los rodales de encinas con porte arbustivo que, como las arbóreas, nos indican cuál fue la vegetación original en la que estaban representados dos tipos de encinares: basófilos y silicícolas. De los encinares basófilos, pertenecientes a la asociación manchego-aragonesa Quercetum rotundifoliae, localizados a altitudes inferiores a los 700m. sólo quedan en la actualidad restos de porte arbustivo en las proximidades de Melque, en San Martín de Montalbán y pies aisalados de porte arbóreo, en la zona del Castillo de Montalbán, en el cañón del Torcón, en donde colonizan el propio cañón. Incluso se encuentran dispersos en el extremo norte del término de Menasalbas. Como se muestra en el inventario correspondiente a dicha facies, las especies que constituyen el cortejo florístico de la encina son la retama de bolas (Retama sphaerocarpa), mejorana (Thymus mastichina), el espárrago (Asparagus acutifolius), etc. Los encinares silicícolas también han sufrido los efectos de la roturación aunque parte de ellos se han podido conservar, más o menos degradados, adehesados o no. En las áreas cultivadas sólo quedan pequeños retazos, como en La Moraleja (Navahermosa) ó bien pies aislados con porte arbóreo, como en el Navazo de la Encina (S. Martín de Montalbán). Estos restos de encinares silicícolas en campos cultivados cabe asignarlos a la asociación Pyro bourgaeanae-Querceto rotundifoliae, aunque dado su estado, carecen de los elementos indicadores típicos, como puede verse en el inventario; no obstante suelen acomparñarse de la retama de bolas (Retama sphaerocarpa), mejorana (Thymus mastichina), torvisco (Daphne gnidium), etc. - Encinares adehesados.- Una dehesa sin constituir un ecosistema natural, como señala Devesa Alcaraz, "no es sino la formación fisionómica resultante de la eliminación selectiva por una parte del hombre de algunos elemento arbóreos y de la totalidad de los arbustivos que componen la vegetación natural, con fines exclusivamente agroganaderos (..) Consta únicamente de elementos arbóreos más o menos dispersos (fundamentalmente encinas y/o alcornoques) y del pastizal, considerándose la irrupción de elementos arbustivos como un claro indicio de abandono que entraña indefectiblemente la aparición de comunidades seriales". Las dehesas de encina localizadas en la comarca, y en general cualquier dehesa, tiene un papel ecológico muy importante porque suelen contribuir a la conservación del suelo y favorecer el desarrollo de los pastos en las proximidades de los pies arbóreos aislados. Para entender el por qué de la dehesa, de su funcionamiento e importancia habría que remontarse a la Edad Media, a la Mesta y a las vías pecuarias comarcales. Entre los encinares adehesados, todos ellos silicícolas y pertenecientes a la asociación Pyro bourgaeanae-Quercetum rotundifoliae se puede citar el paraje La Mesilla en la finca El Sotillo (Las Ventas con Peña Aguilera), o el paraje Las Suertes Llanas, en donde las encinas adehesadas son centenarias. Estas dehesas suelen presentar el óptimo sistema de explotación "agro-silvo-pastoril", debido a que se basa en un sistema de explotación de los recursos naturales, a camino entre la vegetación originaria inalterada y la explotación agrícola extensiva (Devesa Alcaraz, 1995). De esta forma, en la comarca, las dehesas suelen ir unidas a un aprovechamiento que, en unas ocasiones es de pastizal y en otras de cultivo; otro caso es en Menasalbas, en el camino hacia el Pantano del Torcón que sale de la C-401 Toledo-Guadalupe entre los PK. 40 y 41, en donde las dehesas tienen encinas y pastos para sus ganados, y suelen estar delimitadas, unas veces con pequeños muros de piedras para impedir la salida del ganado fuera de ellas, y otras veces con alambreras. - Encinares cumbreños de facies xerófila.- En el paraje Cerro el Colmenar (Las Ventas con Peña Aguilera), en Corral de Cantos (Hontanar), y otros lugares enclavados en el dominio general de los melojares se localizan encinares acompañados de especies xerófilas como la jara pringosa (Cistus ladanifer), romero (Rosmarinus officinalis), etc, que ocupan medios más o menos rocosos, con escaso suelo, por lo que pueden calificarse de una facies xerófila, aunque por su altitud cabría asignarlos a la asociación mesosupramediterránea Junipero oxycedri-Quercetum rotundifoliae, a pesar de la ausencia de enebro. - Encinares de facies subhúmeda.- En umbrías, los encinares se acompañan de arbustos más exigentes en lluvias, como madroños (Arbutus unedo) y brezos (Erica subsp.), y también otros árboles, como quejigos, alcornoques e incluso robles. No obstante, siguen apareciendo, además, especies más xerófilas, como la jara pringosa (Cistus ladanifer), el labiérnago (Phillyrea angustifolia), torvisco (Daphne gnidium), cantueso (Lavandula stoechas subsp. pedunculata) y romero (Rosmarinus officinalis), por lo que la riqueza florística es considerable. Buenos ejemplos pueden verse en la sierra de Hontanar. - Encinar con enebros.- En el monte de Valcavero (Navahermosa) y en el límite de Navahermosa y Hontanar, en altitudes en torno a los 800 y 850 m, la encina se acompaña de enebros de Miera, dando una formación mixta calificable de encinar con enebros. Este encinar es sustituído, a mayor altitud, por los melojares. Aunque en el mapa de series de vegetacion estas areas aparecen como pertenecientes a la serie del encinar con piruétanos, altitud, situación y abundancia de enebros permiten pensar en asignarlos a la asociación Junipero oxycedri-Quercetum rotundifoliae. INVENTARIO 1: FORMACIÓN DE ENCINAR ARBORESCENTE. Especies Estratos A1 A2 a sa h Global 3.4 4.4 1.1 1.1 5.4 1.1 1.1 1.1 E. LEÑOSAS encina (Quercus ilex subespecie ballota) retama (Retama sphaerocarpa) cantueso (Lavandula stoechas sp. pedunculata) 1.1 mejorana (Thymus mastichina) 1.1 3.4 3.4 1.1 E. HERBACEAS cardo corredor (Eryngium campestre) 1.1 1.1 margarita (Chrysanthemum leucanthemum) 1.1 1.1 achicoria (Cichorium intybus) + + tanaceto (Chrysanthemum vulgare) + + tagarnina (Scolymus hispanicus) + + gramíneas diversas 4.4 TOTAL ESTRATO 3 4 2 4.4 5 Leyenda: Localización: MTN 684 Municipio: Menasalbas: Carreterín al Pantano del Torcón, en ambos lados de él. (a 5 Km. del cruce con la C-401); Pendiente: 3-7% Altitud: 700m. aprox. Area inventariada: 100m2. Exposición: Solana. Orientación: N. Sustrato: Granito. ALTURA (m.) A1= más de 7 m; A2 = de 3 a 7 m; a = de 1 a 3 m; sa = de 1 a 0,5 m; h = menos de 0,5 m ABUNDANCIA/DOMINANCIA : += presencia; 1= <10%; 2= 10-25%; 3= 25-50%; 4= 50-75%; 5= 75-100%; 5= mancha densa SOCIABILIDAD: 1= individuos aislados ; 2= 2 a 3 individuos ; 3= 3 a 7 individuos ; 4= mancha poco densa 2.- Los bosques esclerófilos: los alcornocales. El alcornoque (Quercus suber) es un árbol típicamente mediterráneo, perennifolio, que no suele sobrepasar los 20 m. de altura. Por su porte, hojas y color se asemeja mucho a la encina (Quercus ilex subespecie ballota) pero se distingue de ella facilmente por su corteza "suberosa", de la que se obtiene el corcho. Los alcornocales de la comarca pertenecen a la asociación Sanguisorbo hybridae-Quercetum suberis. El alcornoque suele dominar el estrato arbóreo aunque pueden aparecer también otras especies, como el arce de Montpellier (Acer monspesulanum), encina (Quercus ilex subespecie ballota), quejigo (Q. faginea), roble (Q. pyrenaica) y pinos de repoblación (Pinus pinaster y P. pinea). Cuando está asociado a quejigos (Q. faginea) y robles (Q. pyrenaica) indica clima algo frío en invierno localizándose entonces en las laderas y solanas, huyendo de las umbrías y fondos de valles. Cuando está asociado a encinas (Quercus ilex subespecie ballota), como resultado del frío invernal, también se localiza en las laderas de solana, buscando el calor. El alcornocal destaca por la riqueza de su sobotobosque arbustivo, especialmente en arbustos de mediano o gran tamaño entre los que se puede destacar madroño (Arbutus unedo), espino albar (Crataegus monogyna), enebro (Juniperus oxycedrus), labiérnago (Phillyrea angustifolia), cornicabra (Pistacia terebinthus), brezo blanco (Erica arborea) etc. En facies más degradadas suelen abundar las cistáceas, jara pringosa (Cistus ladanifer), jaguarzo morisco (C. salvifolius), y jara cervuna (C. populifolius). Aunque la extensión que ocupan los alcornocales es muy reducida, se pueden distinguir las siguientes facies: - Facies de alcornocal puro y denso: Alcornocales bien desarrollados aparecen, por ejemplo, en áreas del Robledo de Montalbán (en Menasalbas) en laderas soleadas, en enclaves de la Sierra de S. Pablo y Valle del Robledillo (en San Pablo de los Montes), y de forma puntual en el Valle del Estena (en Hontanar), en donde abundan estos enclaves. - Facies mixta de alcornocal con encinas y quejigos: Se trata de facies más xéricas que tienen similitud con los encinares acidófilos. Hay buenos ejemplos en Las Ventas con Peña Aguilera, en la finca El Sotillo de Abajo. En este último se trata de una zona adehesada con dominio de encinas y alcornoques. - Facies mixtas de alcornocal con pinos de repoblación: En ocasiones las repoblaciones efectuadas en el dominio del alcornocal han conducido a pinares puros de repoblación, pero también hay casos en que han dado origen a formaciones mixtas de encinar-pinar, por ejemplo en enclaves serranos de Hontanar, como en la Sierra de La Majana, Sierra de Mesegarejos y Sierra de Cigüiñuelas. - Facies de bosques mixtos con alcornoques (Q. suber) dispersos: Alcornoques islados pueden aparecer en robledales y quejigares, por ejemplo en las laderas soleadas de la Sierra de la Montesina y de la Varuela (en Hontanar). La importancia territorial de esta facies no es muy grande. - Facies de alcornoques adehesados con aprovechamiento de pastos: Menos frecuentes que las de encina, por ser bellota de inferior calidad, también el alcornoque está a veces adehesado, por ejemplo Dehesa de alcornoque del Valle del Robledillo (S. Pablo de los Montes. INVENTARIO 2: FORMACIÓN DE ALCORNOCAL-ENCINAR CON PINO DE REPOBLACIÓN. Especies Estratos A1 A2 a sa h Global E. FORESTALES alcornoque (Quercus suber) 4.3 madroño (Arbutus unedo) 1.1 2.2 1.1 + 2.2 encina (Quercus ilex subespecie ballota) 2.2 1.1 1.1 1.1 4.2 quejigo (Quercus faginea) + brezo blanco (Erica arborea) 4.3 + 1.1 2.2 1.1 3.2 + 4.4 E. DE REPOBLACION. pino (Pinus pinaster) 3.3 1.1 E. DE MATORRAL. retama (Retama sphaerocarpa) 1.1 1.1 + 2.1 piorno florido (Genista florida) 1.1 1.1 + 2.1 1.1 1.1 2.2 1.1 3.3 jaguarzo morisco (Cistus Salviflolius) 2.1 1.1 2.1 jara cervuna (Cistus Populiflolius) 1.1 1.1 2.1 mejorana (Thymus mastichina) 2.2 2.2 brecina (Calluna vulgaris) 1.1 1.1 3.2 cantueso (Lavandula stoechas subsp. pedunculata) jara pringosa (Cistus ladanifer) 1.1 brezo rojo (Erica australis) TOTAL ESTRATO 5 1.1 2.2 1.1 3 4 3 Leyenda: Localización: MTN. 683 Municipio: Hontanar. Situación: Sierra de Mesegarejo. Km. 27/26 de la Carretera al Cijara. Pendiente: 20-29% Altitud: 900m. Area inventariada: 100 m2. Exposición: Umbría. Orientación: W. Sustrato: Silíceo. CONCLUSIONES.1.- En este territorio están presentes tres series mesomediterráneas de vegetación esclerófila con su matorrales y pastizales: la castellano-aragonesa basófila de la encina (Quercus ilex subespecie ballota) Bupleuro rigidi-Querceto rotundifoliae S., la lusoextremadurense silicícola de la encina (Quercus ilex subespecie ballota) Pyro bourgaeanae-Querceto rotundifoliae S y la lusoextremadurense y bética subhúmeda-húmeda del alcornoque (Quercus suber) Sanguisorbo hibridae-Querceto suberis S. 2.- La presencia potencial de la encina (Quercus ilex subespecie ballota) se extiende por toda la comarca; las limitaciones de su presencia actual se pueden explicar por la degradacion antrópica continua que se manifiesta en todo el piedemonte, mitad septentrional comarcal, donde al roturar las tierras fue fuertemente atacada. La encina sólo permanece en estrato arbóreo, en forma de pies aislados y en los encinares adehesados, con fines ganadero-forestales (proporcionando leños, bellotas, y pastos), o agrícola-forestales (el pastizal se sustituye por tierra de labor). Un ejemplo de dehesa de encina con pastizal lo encontramos en numerosos enclaves en el término municipal de Menasalbas, y otro de dehesa de encina con tierra de labor en Las Ventas con Peña Aguilera. 3.- La presencia potencial del alcornoque (Quercus suber) es reducida y localizada, se extiende por las sierras de Hontanar y de San Pablo de los Montes, Valle de Robledillo, permaneciendo en estrato arbóreo dominante, e incluso aparece formando dehesas. 4.- La acción antrópica ha sido y es factor delimitante para el desarrollo óptimo de encinares y alcornocales en la comarca, por sus actividades de tals, carboneos, roturaciones, etc BIBLIOGRAFIA REDONDO GARCÍA, M.M. (1998) El Paisaje integrado de la comarca Los Montes de Navahermosa. Toledo Tesis doctoral U.C.M. inédita.Madrid REDONDO GARCÍA, M.M & FERRERAS CHASCO, C (2000) Los Montes de Toledo: diversidad biogeográfica de una montaña media de la Meseta. Libro de las Jornadas de Campo de Geografía Física. Editores: Sanz Donaire & Pérez González. Madrid (83-109) RESUMEN En este trabajo se estudia las comunidades vegetales en las que la especie dominante son encinares, alcornocales y mestos en la Comarca Agraria en los Montes de Navahermosa en el Parque Natural de los Montes de Toledo. Palabras clave: Montes de Navahermosa, Montes de Toledo, Encinar, Alcornocal ABSTRACT In this work vegetation communities in which dominant species are evergreen oak (Quercus ilex subespecie ballota), cork oak (Quercus suber), hybrids in the Agrarian District in the Mounts of Navahermosa in the Natural Park Mount of Toledo, are studied. Key word: Montes de Navahermosa, Montes de Toledo, evergreen oak, cork oak.