ESPAÑA 41 «La sociedad catalana quedó pulverizada tras el fracaso del año 1934» ∑ «El catalanismo traicionó a quien por primera vez le dio las competencias» ESTEBAN VILLAREJO MADRID s fieles a la República actúan antería, el 9 de caballería y el ligero de eron a las 02.00h. del día 7 a la plaza de cer el orden. El general Batet los lideró FOTOS: ARCHIVO DE ABC Quizá no quede políticamente correcto pero antes que el general Franco, fue también la Generalitat catalana presidida por Lluis Companys (líder de Esquerra Republicana de Catalunya, ERC) quien se alzó en armas contra la II República presidida por Niceto Alcalá Zamora y con jefe de Gobierno Alejandro Lerroux. El pretexto fue la entrada en octubre de 1934 de tres ministros de la CEDA en el Gobierno de Lerroux. No hay que olvidar que la coalición de derechas se alzó con la mayoría de diputados en noviembre del 33. «Que el republicanismo catalán traicionara a la República es algo que siempre se le reprochará. Por primera vez, tenía unas competencias que la Monarquía le había denegado durante siglos. El órdago de Companys proclamando el "Estado catalán dentro de la República federal española" dividió a una sociedad catalana que quedó pulverizada tras el fracaso militar y político de Companys en 1934. Además, el líder de ERC no contó con el apoyo de la población, ello explica que la rebelión militar catalanista fuera rápidamente sofocada por el Ejército de la República, que tan solo contaba con 600 hombres», explica Alejandro Nieto, autor del último libro que indaga sobre los sucesos del 6 de octubre de 1934 en Barcelona. El historiador y profesor emérito de la Universidad Complutense de Madrid reconoce que puede haber «rasgos que se repiten con la situación actual, aunque la naturaleza es muy distinta: para empezar el movimiento del 34 no era independentista, por mucho que se quiera vender El libro Título: «La rebelión militar de la Generalidad de Cataluña contra la República. El 6 de octubre de 1934 en Barcelona».. Autor: Alejandro Nieto, profesor emérito de la Universidad Complutense y Premio Nacional de Ensayo 1997. Editorial: Marcial Pons, Ediciones de Historia. 414 págs. Precio: 23,75 €. Alejandro Nieto M .N. así ahora. Además, claro está, a nadie se le pasa por la cabeza que hoy los catalanes cojan las ametralladoras para imponer un Estado catalán». En el sofoco de la rebelión militar de Barcelona jugó un papel fundamental el general tarraconense Domingo Batet, quien permaneció leal a Lerroux pese a que Companys le reclamó para su causa. Batet declaró el estado de guerra a instancias del presidente del consejo de ministros y tras cinco horas de enfrentamiento con los Mozos de Escuadra logró poner fin al aventurismo de Companys. En su haber: «Lo consigue con muy pocas bajas. Incluso sus hombres dispararon con balas de fogueo, a diferencia de los catalanes que hicieron más bajas en el Ejército republicano». Batet, leal a la República hasta el final, sería fusilado por el bando franquista en 1937. Esa ya es otra historia.