La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Informe Anual 2008 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano © MINISTERIO DE TRABAJO Y PROMOCIÓN DEL EMPLEO MANUELA GARCIA COCHAGNE Ministro de Trabajo y Promoción del Empleo ELISABED MERCEDES ZEVALLOS LAGUNA Viceministro de Trabajo JAVIER ALBERTO BARREDA JARA Viceministro de Promoción del Empleo y Capacitación Laboral IVAN ENRIQUE SÁNCHEZ GONZALES Secretario General TOMAS FLORES NORIEGA Director Nacional de Promoción del Empleo y Formación Profesional TATIANA VELAZCO PORTOCARRERO Coordinadora del Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL) EQUIPO TÉCNICO DEL PEEL VICENTE DANIEL CORZO VALDIGLESIAS Especialista JENNY CABRERA ERIQUE Especialista HILDEGARDI VENERO FARFÁN Consultora 1 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Contenido Introducción 1. Estado de la mujer en el mundo laboral 1.1 Tendencias en el panorama laboral internacional 1.2 Las brechas laborales por género y raza 1.3 La Crisis Financiera Internacional, empleo y género 2. Población femenina a nivel nacional 2.1. Composición por grupos de edad y área geográfica 2.2. Esperanza de vida al nacer 2.3. Tasa de alfabetismo de la población femenina 2.4 Protección social 2.5 Otros temas actuales relacionados a la Mujer 3 Situación de la mujer peruana en el mercado de trabajo 3.1 Población en Edad de Trabajar (PET), Población Económicamente Activa (PEA), y la tasa de actividad 3.2 Determinantes de la participación laboral femenina en el Perú 3.3. Niveles de empleo 4. Características de las mujeres ocupadas en el Perú 4.1 El empleo femenino según categoría ocupacional 4.2. El empleo femenino según ramas de actividad económica 4.3 Empleo femenino según estructura de mercado 4.4. Horas trabajadas de la PEA ocupada femenina 4.5. La informalidad del empleo 4.7 Protección social de la PEA femenina ocupada 5. La Población Femenina en Edad de Trabajar, capital humano y adecuación ocupacional 5.1 Condición de actividad y nivel educativo 5.2 La educación de la PET por rangos de edad 5.3 Educación por área de residencia 5.4 La PET femenina y capital humano en Lima Metropolitana. 5.5 La subutilización profesional 6. Características de las mujeres auto empleadas y de sus negocios 7. Mujeres jefes de hogar 8. Características de las mujeres desocupadas en el Perú 9. Diferenciales de ingreso por sexo (método de Oaxaca-Blinder) Conclusiones Referencias bibliográficas Anexos Glosario de Términos 2 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Introducción El año 2008 ha representado un año con grandes cambios en la economía mundial debido a los efectos de la crisis financiera internacional, lo cual representa un desafío para los diseñadores de políticas sociales y de género. Aún no se sabe cuanto va a durar la crisis y cual será su real magnitud, sin embargo es la primera vez en 60 años que el PBI mundial decrece,1 apreciándose una situación similar en casi todas las naciones del mundo. Sin embargo, en el caso específico de América Latina, las economías se han visto afectadas por la crisis, pero en circunstancias diferentes a las registradas por otras regiones: un contexto de baja inflación, superávit fiscales y externos, sistemas financieros sólidos y regulados, etc., que han determinado que las economías de países como el Perú hayan visto afectadas sus economías, pero en menor magnitud que las economías de Europa y Estados Unidos. Los efectos de la crisis financiera internacional podrían determinar variaciones en el nivel de empleo, especialmente, en la situación laboral de la mujer, debido a las condiciones de riesgo y vulnerabilidad en las que labora este grupo poblacional. Si bien, las estadísticas parecen indicar que la participación femenina y el capital humano se han elevado en los últimos años 2 al mismo tiempo se puede constatar que las condiciones del empleo de las mujeres, comparada con la de los hombres siguen siendo precarias y las brechas salariales entre hombres y mujeres persisten. Sin embargo, es necesario analizar en adelante si estas diferencias que se constatan en el ámbito laboral, respecto a las condiciones de empleo, se ven afectadas por el actual contexto. Si bien se hace difícil constatar, con la información que contamos, los efectos de la crisis mundial sobre la participación de la mujer en el mercado de trabajo, este informe debería ser tomado como una especie de línea de base, para comparar estos indicadores con los que se obtengan en el futuro. De ahí la importancia del Informe Anual de la Mujer 2008, porque como se verá a lo largo de este informe, aún los indicadores laborales en el 2008 han seguido las tendencias de los años de crecimiento para la economía peruana. Entre los aspectos que enriquecen este informe tenemos: la estimación de la oferta laboral de mujeres peruanas asalariadas y los factores que explican la diferencia salarial, de tal forma que pueda ser comparada con la estimada para los últimos años. Un segundo aspecto está relacionado con las características del capital humano de la Población en Edad de Trabajar (PET) femenina y la Población Económicamente Activa (PEA), y sus diferencias por área de residencia, diferenciando la educación básica y profesional de los cursos de capacitación. Un tercer aspecto está relacionado con las características de las mujeres ocupadas independientes y sus hogares. El Informe Anual de la Mujer 2008, presenta y utiliza para el análisis información estadística, principalmente, de la Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condición de Vida y Pobreza del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), 2008; la Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo del Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) del III trimestre del año 2008; y, el XI Censo de Población y Vivienda 2007. 1 Según 2 cifras publicadas por el Fondo Monetario Internacional. MTPE (2008) “Informe anual de la mujer en el mercado laboral peruano 2007” Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 3 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano El presente documento está organizado en nueve capítulos. Luego de una breve introducción, en la primera parte se presenta una breve revisión de la literatura respecto a los antecedentes referidos al presente estudio, un marco de referencial conceptual que explica la participación de la mujer en el mercado de trabajo, la determinación del ingreso laboral y los diferenciales de ingresos en el que se revisa la literatura sobre el tema a nivel nacional e internacional. En la segunda parte, se describe y analiza la población femenina a nivel nacional usando información de los Censos nacionales, tomando en cuenta el área de residencia de las personas. La tercera parte desarrolla la situación de la mujer peruana en el mercado de trabajo, así se analiza la participación de la mujer en el mercado de trabajo, sus determinantes y los niveles de empleo alcanzadas por las mujeres en relación al hombre en el año 2008. En la cuarta parte se analiza la Población Económicamente Activa (PEA) ocupada femenina tomando en consideración las actividades económicas donde participa, las ocupaciones donde se ha desarrollado, la situación en la estructura de mercado, entre otras principales variables del mercado de trabajo; además se presenta un análisis por área de residencia: urbano y rural. Una quinta parte está relacionada con el acervo de conocimientos adquiridos y aprendidos a través de la experiencia u otros medios denominado también capital humano (formación, experiencia, conocimientos, etc.) con que cuenta la PET y PEA ocupada femenina. Así también presentamos un análisis de la adecuación ocupacional y profesional de las trabajadoras, lo que permite ver el grado de subutilización de los ocupados. Una sexta parte del informe desarrolla el tema del negocio propio y el autoempleo de las mujeres, donde se presenta las principales variables que conjugan y determinan las características de este sector importante del mercado de trabajo. El séptimo capítulo describe la situación de las mujeres jefes de hogar y sus características. El octavo capítulo analiza el tema del desempleo y desarrolla las principales características de las mujeres desocupadas. En el noveno capítulo se estima los diferenciales de ingreso por género y el ingreso de la PEA ocupada femenina mediante el método propuesto por Oaxaca y Blinder. Finalmente, se exponen las conclusiones del informe. 4 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 1. Estado de la mujer en el mundo laboral El análisis de la situación laboral de la mujer implica la revisión de la literatura que se aproxima al tema desde diferentes perspectivas. Una primera aproximación implica la revisión de las tendencias laborales que se dan en el panorama internacional, otro aspecto que trata la literatura está relacionado con las brechas salariales por género y raza, en el que diversos países enfocan este análisis desde este punto de vista. Un último aspecto analizado, muy acorde con la coyuntura actual, es el relacionado a los efectos de la crisis financiera internacional con respecto al mercado laboral femenino, tal como se desarrolla en adelante. 1.1 Tendencias en el panorama laboral internacional La situación laboral de la mujer en el Perú no es ajena, a las tendencias que se encuentran en los 3 principales indicadores laborales a nivel regional o mundial. Tal como se puede ver en la literatura citada en el informe anual de la mujer del 2007, (Psacharopoulos y Tzannatos, 1989; Felices, 1996; OIT, 2007; OIT, 2008; Calónico y Ñopo, 2008; Blau et al., 2002, Ñopo, 2008; Pagan y Sánchez, 2000; Jaramillo, 2007) si bien en los últimos años se ha encontrado que muchas más mujeres se han incorporado al mercado de trabajo, aún persisten las diferencias con respecto a la situación laboral de los hombres y estas siguen siendo significativas. Las grandes tendencias4 mundiales sobre el empleo femenino (OIT, 2007; OIT, 2008) enfatizan que hay aspectos sobre los cuales se ha evolucionado de forma considerable en los últimos 10 años, pero al mismo tiempo hay otros sobre los que no hay mayor avance. Específicamente se encuentra que si bien hay una mayor participación de las mujeres, aún los niveles de desempleo de las mismas son relativamente elevados con respecto al observado para los hombres.5 Al respecto se encuentra que la diferencia en las tasas de desempleo entre los hombres y las mujeres en América Latina y el Caribe es mayor (3,5 puntos porcentuales) que la que se encuentra a nivel mundial (0,4 puntos porcentuales) y en el Perú en el año 2008. Cabe destacar que la brecha de desempleo de América Latina y el Caribe es tan grande que a nivel mundial sólo está por debajo de lo encontrado en Oriente Medio y África del Norte. Otro aspecto sobre el que aún no se ha logrado revertir las tendencias del pasado está relacionado con las condiciones laborales. En el caso de las mujeres que actualmente tienen un empleo, generalmente, están ubicadas en los sectores menos productivos de la economía y peor pagados, más riesgosos, mientras que en el caso de las que se encuentran buscando activamente un empleo, tienen menor probabilidad de encontrar un trabajo seguro que les brinde algún nivel de protección social. En este sentido, la evidencia demuestra que en América Latina y el Caribe la gran mayoría de mujeres trabaja en el sector servicios, donde la proporción de mujeres es más de dos veces a la proporción de mujeres con empleo vulnerable. En el caso de Perú se observa que más del 75% de las trabajadoras mujeres se ubican primero en el sector de agricultura, ganadería y pesca, segundo, en el sector servicio y tercero en la actividad de comercio al por menor, actividades con un amplio grado 6 de informalidad. 3 La tasa de participación femenina en el mercado de trabajo a nivel de América Latina ha subido en más de 5 puntos porcentuales en la última década. 4 OIT (2008), “Tendencias Mundiales del Empleo de las Mujeres”, marzo 2008, Ginebra. OIT (2009), “Tendencias Mundiales del Empleo de las Mujeres”, marzo 2009, Ginebra. El documento de la OIT pública una tasa de desempleo para el 2008, de 5,9% para los hombres y 6,3% para las mujeres. 6 Al respecto, la evidencia en el Perú demuestra que los ingresos obtenidos por las mujer en el sector informal representan aproximadamente un tercio de lo ingresos obtenidos en el sector formal. 5 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 5 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Los informes de la OIT, relacionados con las tendencias mundiales del empleo de las mujeres, resaltan al mismo tiempo un avance interesante de otro tipo de variables como es el caso del nivel educativo de las mujeres que se integran a la PEA,7 el cual es mayor que en el pasado, lo mismo sucede con los años de experiencia que también se han elevado, sin embargo las condiciones de trabajo no han mejorado. En este aspecto la evidencia demuestra que en el Perú, más del 21% de las mujeres ocupadas tienen educación superior y que este porcentaje se ha elevado con respecto al año anterior. 1.2 Las brechas laborales por género y raza Un aspecto que debe ser tomado en cuenta es que, si bien la brecha que hay en el mercado laboral entre varones y mujeres ha disminuido, este avance aún es insuficiente y también se debería pensar en el tiempo que llevará a la población femenina en su conjunto conseguir condiciones similares a las de los hombres. Por los estudios que se han hecho hasta ahora, se puede ver que el mayor acceso a la educación de parte de las mujeres podría mejorar las condiciones de acceso al mercado de trabajo de las mujeres, pero aún así, hay quienes piensan que las sociedades en su conjunto deben aceptar el nuevo papel que desempeñan las mujeres en la economía y se les debe permitir un mejor acceso al mercado de trabajo por medio de políticas laborales de parte de Estado.8 Si bien las tendencias mundiales o regionales podrían esconder los cambios que hay a nivel de cada país, al presentar datos agregados, se encuentra una tendencia clara en que los lugares o países con mayor crecimiento registran menores diferencias tanto en acceso como en la condición del empleo entre hombres y mujeres, como ejemplo se pueden tomar los países de Asia Oriental (OIT, 2007; OIT, 2008). Relacionado con este tema, Calónico y Ñopo (2008) mencionan que hay una segregación jerárquica, en el que por defecto el sistema brinda mayor acceso a puestos gerenciales a los hombres y de tipo subordinado a las mujeres, lo cual es comúnmente aceptado como una norma en el mercado laboral latinoamericano.9 Según este último estudio, hay evidencia de que la sociedad ha asignado roles tradicionales a la mujer, los cuales no están relacionados necesariamente con una eficiente asignación de los recursos humanos. En este sentido, el cambio sólo puede ser posible si es que se promueven políticas correctas como se mencionó previamente. En el análisis del caso peruano, se puede ver que si bien la situación de la mujer ha cambiado, este cambio es aún insuficiente. Aún cuando la participación de la mujer en el mercado laboral peruano se ha incrementado al igual que a nivel mundial, sin embargo, aún hay brechas de género muy importantes en comparación con el resto de países de América Latina (Jaramillo, 2007 et al; Ñopo, 2004). La literatura menciona que hay una alta segregación ocupacional por género y una alta brecha salarial, las cuales no han disminuido en los últimos 15 años. Dicha situación muestra aún, diferencias significativas con respecto a lo que sucedió en otros países de la región. Las diferencias en brechas salariales son tan importantes que hay una vasta literatura sobre el tema, entre éstos se encuentran Garavito (1994), Flores (1999), Felices (1996) y Ñopo (2004), en los que demuestran que el ingreso por hora de los hombres es entre 28% y 40% superior al que reciben las mujeres, encontrándose las brechas más grandes en la población con menores ingresos. Otro aspecto que encontraron Felices (1996) y Ñopo (2004), y que fue documentado por Jaramillo et. al. (2007), es que existe una alta volatilidad de salarios de las mujeres. Estos autores han encontrado que la brecha existente entre los salarios de los hombres y las mujeres tiende a aumentar en periodos de recesión y a acortarse en periodos de expansión económica. Tal comportamiento es atribuido a una mayor variabilidad en el tiempo de los salarios de las mujeres, factor que aún está sujeto a investigación. 7 Al respecto, aún no se encuentra literatura que diferencie si el mayor nivel de educación de las mujeres obedece a un factor que tiene que ver sólo con la PEA femenina, o si por el contrario en conjunto la PEA tiene mejores niveles de calificaciones. 8 Para el 2008 se puede ver que los varones registran más de un punto porcentual de personas ocupadas con educación superior que las mujeres. Es decir que aún hay brechas en la educación en Perú. 9 Al respecto menciona que hay evidencia estadística para México que dan cuenta de este nivel de segregación. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 6 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano En el 2009, Hugo Ñopo y otros autores de América Latina han venido trabajando temas relacionados con las diferencias salariales. Por ejemplo, en el caso del Ecuador, los retornos salariales con similares dotaciones de características productivas son influenciados por los que, según el sentido común no deberían jugar un rol en la determinación de los salarios: el género y la etnicidad. En un análisis del periodo 2003-2007, Gallardo y Ñopo (2009) encuentran que en Ecuador las brechas de salario por etnicidad son notablemente mayores que las brechas por género. Las diferencias en las características de capital humano, sin embargo, explican casi la mitad de las brechas de salario por etnicidad, pero sólo una pequeña fracción de la brecha de salario por género. Ambas brechas son más pronunciadas en los extremos menores de la distribución de ingresos analizada para este fin. Para el caso de Brasil, los autores Marquez, Ñopo y Salardi (2009), a partir de la información de 1996 al 2006 encuentran que, las brechas salariales por raza son más importantes que las basadas en la división por género, aunque ambas decrecieron a lo largo de la última década. En el caso de la brecha por raza, las características observables de capital humano como es la educación es un factor importante en la determinación de brechas de salario estimadas. Un aspecto similar sucede cuando se analiza las brechas por género; en suma, en ambos casos la educación es muy importante. 1.3 La Crisis Financiera Internacional, empleo y género. En cuanto a la crisis financiera internacional, en un estudio del Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA, 2009), se señala que “El horizonte de recesión de los países desarrollados reducirá el crecimiento latinoamericano y, en consecuencia, provocará nuevos desafíos sociales para la región. Ante una desaceleración económica es prioritario proteger a las poblaciones más vulnerables, [población que se enfrenta a factores contextuales que la hace más propensa a enfrentar situaciones adversas para su inserción social y desarrollo personal, el ejercicio de conductas que entrañan mayor exposición a eventos dañinos, o la presencia de un atributo básico compartido (edad, sexo o condición étnica) que se supone les origina riesgos o problemas comunes] a través de las políticas sociales”. Las mujeres constituyen un grupo vulnerable debido a la existente “desigualdad en términos de oportunidades, derechos, acceso y control de los recursos o su diferente exposición a riesgos vinculados con el desempeño de los roles de género”. 10 Según el análisis que viene realizando la Organización Internacional del Trabajo -OIT, “la crisis económica mundial se está agravando y los expertos prevén una prolongada recesión en los mercados laborales. A nivel mundial, después de cuatro años consecutivos de declinación, en el año 2008 el número de desempleados aumentó en 14 millones. A medida que la crisis sigue propagándose y que continúan las pérdidas de empleos, el desempleo a escala mundial podría aumentar en al menos 38 millones para fines del año 2009. Se prevé que la crisis ha de afectar mucho más el empleo de la mujer que el del hombre. Incluso fuera de los tiempos de recesión, las mujeres de muchos países estaban sujetas a tasas más elevadas de subempleo y desempleo, y eran segregadas hacia sectores laborales en los que predominaban los salarios bajos. Además, persiste una importante brecha salarial que no garantiza el principio de “igual remuneración por trabajo de igual valor”. Estas diferencias se acentúan en ciertos colectivos de mujeres, como puede ser el caso de la mujeres afrodescendientes, en donde existen importantes desigualdades; bajas tasas de participación y tipos de trabajo de menor calificación e ingresos bajos. 10 OIT (2008), “Tendencias Mundiales del Empleo” Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 7 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano “El Fondo de Población de Naciones Unidas advierte que las mujeres son las más afectadas por la crisis económica mundial. En tiempos de crisis, las desigualdades de género se acentúan y resulta fundamental asegurar a las mujeres los servicios sociales básicos, especialmente los de salud sexual y reproductiva.” “La crisis financiera mundial está obligándonos a todos a ahorrar y reducir los costos dondequiera que sea posible. Pero nuestra labor en pro de las mujeres del mundo debe continuar sin menoscabo. Al empoderar a una mujer, se empodera a una familia. Al empoderar a una mujer, se cambia el mundo”. Secretario General de las Naciones Unidad, Ban Ki-moon Como se puede ver a lo largo de esta revisión bibliográfica, en el último año los interesados en el estado de la situación laboral de la población femenina han seguido trabajando en torno al tema. En este sentido la literatura enfatiza que las diferencias por sexo de las condiciones laborales y los ingresos laborales, persisten a nivel de toda la PEA y por categoría ocupacional, diferencias que son evidentes a nivel nacional y mundial. Otro aspecto que también ha determinado cambios importantes en el actual contexto, es el efecto de la crisis financiera internacional que ha determinado mayores niveles de desempleo, principalmente, para el caso de las mujeres, tal como se puede ver en las cifras presentadas por la OIT para el 2008. 8 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 2. Población femenina a nivel nacional Los resultados del XI Censo Nacional de Población y VI de Vivienda, llevado a cabo en el año 2007 por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), dan cuenta que el Perú tiene una población que supera los 27,4 millones de peruanos. De esta el 50,3% corresponde a la población femenina, porcentaje similar al registrado en el censo previo de 1993, y prácticamente similar a los que se realizaron desde 1940. Es decir que la participación de mujeres en la población total se ha mantenido alrededor del 50% desde hace más de 68 años, hecho que nos hace pensar que no ha existido un cambio estructural que haya generado una variación en la distribución por sexo de la población total, esto a pesar de que la población total se ha cuadruplicado en dicho tiempo; tal como se aprecia en el cuadro Nº 1. Cuadro Nº 1 Perú: Evolución de la población según sexo: 1940, 1961, 1972, 1981, 1993 y 2007 Año 1940 1961 1972 1981 1993 2007 Total absoluto 6 207 967 9 906 746 13 538 208 17 005 210 22 048 356 27 412 157 Total relativo 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 Sexo Hombre 49,4 49,7 50,1 49,9 49,7 49,7 Mujer 50,6 50,3 49,9 50,1 50,3 50,3 Fuente: INEI – Censos Nacionales de Población y Vivienda. 1940, 1961, 1972, 1981, 1993 y 2007. Perfil sociodemográfico del Perú (Agosto de 2008). La tasa de crecimiento promedio anual estimada en base a los censos de población, demuestran que la población tuvo una tasa de crecimiento ascendente hasta el año 1972; a partir de este año, ha ido desacelerando su crecimiento llegando a registrar en el 2007 su valor mínimo (1,6%) de acuerdo a la información registrada en los 6 últimos censos (ver cuadro Nº 2). Cuando analizamos la tasa de crecimiento por sexo se puede verificar que ambos tienen un comportamiento muy parecido, mostrando sus mayores valores entre los años 1940 y 1961. 9 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 2 Perú: Tasa de crecimiento promedio anual según sexo: 1940, 1961, 1972, 1981, 1993 y 2007 (En porcentajes) Año Total (1) Hombre (2) Mujer (2) 1940 / 1961 1961 / 1972 1972 / 1 981 1981 / 1993 1993 / 2007 1,9 2,8 2,6 2,0 1,6 2,3 1,5 1,1 1,2 1,5 2,3 1,5 1,1 1,2 1,5 (1) Cifras oficiales. (2) Cifras estimadas. Fuente: INEI – Censos Nacionales de Población y Vivienda, 1940, 1961, 1972, 1981, 1993 y 2007. Perfil sociodemográfico del Perú (Agosto de 2008). Elaboración: Propia. 11 Entre otros resultados del Censo, según UNFPA (2009) muestra que existen distintos ciclos de vida en mujeres y hombres. En el 2007, la relación de hombres a mujeres según su estado civil era en el caso de los separados o divorciados de 1 a 2; mientras que en el caso de viudos era de 3 a 1; y había mayor cantidad de hombres solteros que mujeres solteras. Al examinar los censos de 1981, 1994 y 2007; se encuentra una reducción en el número de jefes solteros, se ha aumentado la cantidad de mujeres separadas, hay un incremento de la proporción de (mujeres) convivientes y ha caído la proporción de casadas. Estos datos revelarían un mayor empoderamiento de las mujeres, las que estarían optando por una modalidad que no es el matrimonio; esto a partir de la experiencia acumulada de varias generaciones y que se concreta en la población más joven. Se espera que quienes opten por la convivencia sean las mujeres con mayor nivel educativo, las mujeres rurales o las mujeres más jóvenes. Los datos del censo también evidencian que a mayor nivel educativo se produce mayor convivencia. En el mismo documento, Violeta Bermúdez señala, que el término “jefatura del hogar” debería erradicarse de futuros censos debido a que alude al hecho de que hay una persona que gobierna el hogar, concepto erradicado por la Ley de Igualdad entre Hombres y Mujeres, e introduce una distorsión en los datos: la jefatura es atribuida al hombre si está presente en el hogar, y a la mujer en ausencia de él. Al respecto, el censo muestra que 40% de las jefas de hogar eran viudas o separadas, así surge el cuestionamiento de sí ellas escogen ser jefas de hogar o si lo son porque debían asumir esta condición por su estado civil. Además, se debe resaltar que las mujeres jefas de hogar tienen mayor nivel de educación que las que no lo son (30% de ellas tienen educación superior; 54%, educación secundaria). Con respecto a la jefatura de hogar femenina por área de residencia, las jefas de hogar del área rural son de mayor edad que las del área urbana: más de la mitad son mayores de 50 años y más de 30% son mayores de 60 años. Los datos para el tamaño de familia muestran que 87% de las mujeres jefas de hogar tiene al menos un hijo, 33% uno o dos hijos, y 54% tres o más hijos. En promedio, en el área rural, el número promedio de hijos por mujer es 5,6 y en el área urbana es 3,2. 11 Fondo de Población de las Naciones Unidas, UNFPA, “Censo 2007: Análisis de temas poblacionales I”, junio 2009. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 10 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 2.1. Composición por grupos de edad y área geográfica Los resultados del último censo muestran que un 57,3% de la población femenina tiene menos de 29 años de edad. La concentración de la población femenina es mayor en el área urbana (77%) que en el área rural (23%). Hay un mayor porcentaje de mujeres jóvenes en el área rural (62,5%) de la Cuadro Nº 3 Perú: Población femenina por ámbito geográfico, según rangos de edad, 2007 (En porcentajes) Rangos de edad Total absoluto Menores de 15 años De 15 a 29 años De 30 a 44 años De 45 a 54 años De 55 a 64 años De 65 y más años Área de residencia Total relativo Urbano Rural 13 789 517 10 584 083 3 205 434 100,0 29,7 27,5 20,7 9,4 6,0 6,7 100,0 27,2 28,4 21,9 9,8 6,1 6,6 100,0 38,0 24,5 17,0 7,9 5,6 7,0 Fuente: INEI- Censos Nacionales 2007: XI de Población y VI de Vivienda. Perfil sociodemográfico del Perú (agosto del 2008). Elaboración: MTPE – Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL) Según regiones, se observa que una gran proporción de la población femenina se concentra en la región de Lima (31,2 %), lo cual demuestra el grado de centralización de la población femenina en las regiones de Lima. Otras regiones con alta concentración de población femenina son Piura (6,1%), La Libertad (5,9%), Cajamarca (5,0%) y Puno (4,6%). Cabe destacar que el caso de Cajamarca es peculiar debido a que un porcentaje importante de su población femenina se encuentra ubicada en las zonas rurales (14,5%); mientras que en el área urbana Lima concentra el 39,9% de la población urbana del país como se aprecia en el cuadro siguiente. (Ver Cuadro Nº 4) 11 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 4 Perú: Población femenina por ámbito geográfico, según regiones, 2007 (En porcentajes) Á r e a d e r e s id e n c ia R e g ió n T o ta l a b s o lu to T o t a l r e la t iv o A m azo nas Áncash A p u rím a c A r e q u ip a A ya c u c h o C a ja m a r c a P r o v . C o n s t . d e l C a ll a o C usco H u a n c a v e l ic a H uánuco Ic a J u n ín L a L ib e r t a d L a m b a ye q u e L im a L o re to M a d r e d e D io s M oquegua P asco P iu r a Puno S a n M a rtín Tacna Tum bes U c a y a li T o ta l 13 789 517 U rb a n o R u ra l 10 584 083 3 205 434 1 0 0 ,0 1 0 0 ,0 1 0 0 ,0 1 ,3 3 ,9 1 ,5 4 ,2 2 ,2 5 ,0 3 ,2 4 ,3 1 ,7 2 ,7 2 ,6 4 ,5 5 ,9 4 ,1 3 1 ,2 3 ,2 0 ,4 0 ,6 1 ,0 6 ,1 4 ,6 2 ,5 1 ,0 0 ,7 1 ,5 0 ,8 3 ,2 0 ,9 5 ,1 1 ,7 2 ,2 4 ,2 3 ,1 0 ,7 1 ,6 3 ,0 4 ,0 5 ,9 4 ,3 3 9 ,9 2 ,7 0 ,4 0 ,6 0 ,8 6 ,0 3 ,0 2 ,2 1 ,3 0 ,8 1 ,5 3 ,1 5 ,9 3 ,4 1 ,5 4 ,0 1 4 ,5 8 ,0 4 ,9 6 ,6 1 ,1 6 ,0 6 ,0 3 ,5 2 ,4 4 ,5 0 ,4 0 ,3 1 ,6 6 ,6 9 ,9 3 ,6 0 ,4 0 ,3 1 ,5 2.2. Esperanza de vida al nacer En el Perú, la esperanza de vida al nacer es mayor en la población femenina que en la masculina. Desde 1950 hasta el 2005 las mujeres han ganado 29 años de vida, mientras que en el caso de los hombres el crecimiento en años de este indicador bordea los 26 años. Así también, entre los años 2000 y 2005, las mujeres tenían una esperanza de vida al nacer de más de 74 años, el valor más alto observado en el periodo 1950 y 2000. Sin embargo, la variación interquinquenal de la esperanza de vida al nacer de las mujeres ha ido decreciendo de quinquenio en quinquenio desde los años 70s. Así, la variación quinquenal máxima de la esperanza de vida de las mujeres se dio en el quinquenio 1970-1975 (4,3 años), luego de dicho periodo el cambio en la esperanza de vida ha ido decreciendo a medida que han pasado los años. En el quinquenio 2000-2005, el cambio fue 2,5 años y según las proyecciones, el cambio en la esperanza de vida al nacer se irá reduciendo, (ver cuadro Nº 5). 12 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 5 Perú: Esperanza de vida al nacer por sexo, 1950-2050 (En porcentajes) S exo ( E n p o r c e n ta je s ) P e r io d o 1 9 5 0 -5 5 1 9 5 5 -6 0 1 9 6 0 -6 5 1 9 6 5 -7 0 1 9 7 0 -7 5 1 9 7 5 -8 0 1 9 8 0 -8 5 1 9 8 5 -9 0 1 9 9 0 -9 5 1 9 9 5 -0 0 2 0 0 0 -0 5 2 0 0 5 -1 0 2 0 1 0 -1 5 2 0 1 5 -2 0 2 0 2 0 -2 5 2 0 2 5 -3 0 2 0 3 0 -3 5 2 0 3 5 -4 0 2 0 4 0 -4 5 2 0 4 5 -5 0 H o m b re M u je r 4 2 ,9 4 5 ,1 4 7 ,8 5 0 ,1 5 3 ,9 5 6 ,7 5 9 ,5 6 2 ,1 6 4 ,4 6 6 ,8 6 9 ,0 6 9 ,0 7 1 ,5 7 2 ,5 7 3 ,4 7 4 ,1 7 4 ,7 7 5 ,3 7 5 ,8 7 6 ,3 4 5 ,0 4 7 ,5 5 0 ,5 5 3 ,0 5 7 ,3 6 0 ,5 6 3 ,8 6 6 ,8 6 9 ,2 7 1 ,9 7 4 ,3 7 4 ,3 7 6 ,8 7 7 ,8 7 8 ,6 7 9 ,4 8 0 ,1 8 0 ,7 8 1 ,4 8 1 ,9 C a m b io in te r q u in q u e n a l (E n a ñ o s ) H o m b re 2 ,3 2 ,7 2 ,3 3 ,8 2 ,8 2 ,8 2 ,6 2 ,3 2 ,4 2 ,2 0 ,0 2 ,5 1 ,0 0 ,9 0 ,7 0 ,6 0 ,6 0 ,5 0 ,5 M u je r 2 ,5 3 ,0 2 ,5 4 ,3 3 ,2 3 ,3 3 ,0 2 ,4 2 ,7 2 ,5 0 ,0 2 ,5 0 ,9 0 ,8 0 ,8 0 ,7 0 ,7 0 ,6 0 ,6 Fuente: INEI - Estimaciones y proyecciones de población 1950-2050 Elaboración: MTPE – Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL) BOX Nº 1 “El análisis de las condiciones laborales objetivas en la región [latinoamericana] muestra que la calidad de trabajo es baja y, en muchos casos, tiene tendencia a deteriorarse. Sin embargo, hay indicios de que un empleo informal, tradicionalmente considerado como una forma inferior y menos deseable de empleo, puede constituir una decisión sensata para algunas personas que encuentran en este tipo de empleo un nicho más apropiado para sus aptitudes, preferencias y condiciones que en el empleo formal: mucha gente que tiene un empleo asalariado preferiría trabajar por cuenta propia, mientras que hay muchas menos personas en la situación opuesta. Los asalariados mencionan la posibilidad de mayores ingresos, más flexibilidad y no tener un jefe como razones para preferir un empleo por cuenta propia”. “En América Latina y el Caribe la creación de empleos se ha intensificado a la par del crecimiento de la oferta de mano de obra impulsado por un crecimiento de la participación femenina y el aumento de la población en edad de trabajar. Lamentablemente, el dinamismo de la creación del empleo ha ido de la mano con un bajo crecimiento de la productividad laboral […] En consecuencia, la combinación del alto nivel de empleo y el bajo aumento de la productividad sugiere que la calidad de los empleos creados es bastante mala”. Por otra parte, “la percepción de inseguridad laboral es mayor entre los asalariados que entre los trabajadores por cuenta propia”, lo cual se podría deber a que los trabajadores independientes sientan que tienen más control sobre su situación laboral que los asalariados. Asimismo, “más importante que estar bien remunerado es la percepción de estar bien remunerado”. El 43% de las mujeres de la región dedica menos de 40 horas semanales a un trabajo remunerado, es decir, realiza un trabajo a tiempo parcial, mientras que sólo 27% de los hombres lo hace. Cabe agregar que “el trabajo a tiempo parcial está relacionado con una mayor participación de los jóvenes, las mujeres y los trabajadores de mayor edad en la fuerza laboral, lo cual parece indicar que el trabajo a tiempo parcial podría ser una forma útil de combinar el trabajo remunerado con otras actividades por las cuales las mujeres sacrifican poco en términos de satisfacción con el trabajo”. Calidad de vida. Más allá de los hechos. BID http://idbdocs.iadb.org/wsdocs/getdocument.aspx?docnum=1775347 13 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 2.3. Tasa de alfabetismo de la población femenina Otro de los aspectos que ilustra el censo del año 2007, es la tasa de alfabetismo (cuadro Nº 6). Según ésta, existe una diferencia de 8,2 puntos porcentuales entre la población alfabeta en las zonas urbanas y la población de las zonas rurales. Esta diferencia es mayor en el caso de las mujeres, donde la brecha asciende a 9,5 puntos porcentuales. Si bien en nuestro país se ha avanzado bastante en el tema, aún encontramos que 15,7% de la población total es iletrada, las cuales pertenecen en su mayoría al ámbito rural. Cuadro Nº 6 Perú: Tasa de alfabetismo por sexo, según ámbito geográfico, 2007 (Población de 3 a 24 años) Ámbito Total Urbano Rural Total 84,29 86,48 78,25 Sexo Hombre 84,33 86,24 79,24 Mujer 84,24 86,72 77,20 Nota: No se empadronó a la población del distrito de Carmen Alto, provincia de Huamanga, departamento de Ayacucho. Fuente: INEI - Censos Nacionales 2007: XI de Población y VI de Vivienda. Elaboración Propia. 2.4 Protección social Entre los otros temas que se pueden abordar a partir del censo se encuentra el acceso de la población a un seguro de salud. En un primer resultado se observa que alrededor del 58% de la población no cuenta con seguro de salud; esta es una característica que afecta a la población en general y refleja la falta de productos de seguros adecuados a la población con menores recursos. Sin embargo, los que cuentan con seguro de salud se concentran básicamente en el Seguro Integral de Salud –SIS12 (18%) y ESSALUD (17%). Según ámbito geográfico, una misma proporción (50% aproximadamente) de las personas tanto del ámbito rural como del ámbito urbano se atienden en el SIS y a su vez, tanto las mujeres como los hombres presentan una cercana distribución en este tipo de seguro en los dos ámbitos. De otro lado, los que tienen seguro de salud a través de ESSALUD, principalmente, se concentran en el ámbito urbano (95%) y casi tanto hombres como mujeres gozan de la misma proporción en este seguro de salud. (Ver cuadro Nº 7). 12 Este es un seguro que brinda el estado a las personas de bajos recursos, y, principalmente funciona como un subsidio a la salud. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 14 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro 7 Perú: Población por sexo y área de residencia, según tipo de seguro, 2007 (En porcentajes) Tipo de seguro Total relativo Hombre Total absoluto Urbano Mujer Rural Urbano Rural 100,00 27 412 157 100,0 37,3 12,4 38,6 11,7 42,31 11 598 698 100,0 37,2 12,3 38,3 12,3 18,43 5 051 559 100,0 23,6 24,1 26,8 25,5 SIS, ESSALUD y Otro 0,01 2 208 100,0 53,1 3,6 40,4 2,9 SIS y ESSALUD 0,04 12 145 100,0 50,9 6,4 39,2 3,5 SIS y Otro 0,04 9 867 100,0 44,7 12,4 33,8 9,1 ESSALUD y Otro 0,51 139 336 100,0 51,3 3,1 45,3 0,3 17,39 4 766 357 100,0 45,9 3,2 48,5 2,3 5,90 1 617 226 100,0 52,1 2,7 43,4 1,7 57,69 15 813 459 100,0 37,4 12,5 38,9 11,2 Algún seguro de salud Solo SIS Sólo ESSALUD Sólo Otro Ningun seguro Nota: SIS: Sistema Integral de Salud. Fuente: INEI - Censos Nacionales 2007: XI de Población y VI de Vivienda. Elaboración: Propia. 2.5 Otros temas actuales relacionados a la Mujer Finalmente, existen otros temas relacionados con la situación laboral de la mujer que se basan en la información del censo: entre estos encontramos el fenómeno de las madres solteras y el embarazo adolescente. Según Cecilia Blondet, se tiene evidencia que en el Perú existen 487 mil madres solteras (7%), de las cuales 40% se encuentran en Lima, mientras que en el caso del embarazo adolescente este ocurre con mayor frecuencia en la selva.13 Otra investigadora que analiza este tema es Jeanine Anderson quien señala que “la adolescencia es un momento crítico para la consolidación de la desigualdad entre los géneros, y los embarazos adolescentes anuncian un futuro muy diferente para hombres y mujeres […] la madre adolescente es la pieza más débil en la organización familiar, pues enfrenta mayores dificultades para defender sus intereses y plantear reclamos frente al uso de los recursos familiares, especialmente, en hogares en condición de pobreza. Los estudios de caso frente a una situación de embarazo adolescente sugieren: que la joven madre, fácilmente, se convierte en la principal encargada del sistema de cuidado en su hogar de origen”. Otro tema interesante, a partir del análisis del censo 2007 es el concepto de «economía del cuidado» (u organización social —económica, política, cultural y moral— del cuidado), que se refiere al desempeño de las mujeres (aunque también al de los hombres en menor medida) sobre todo en actividades informales, no remuneradas e “invisibles” como la atención a la familia, el cuidado de la salud de sus miembros, y la “producción de bienes y servicios necesarios para el funcionamiento de los hogares, que aseguran no solo la reproducción diaria, sino la integración y el bienestar de sus miembros en el mediano y largo plazo”. A manera de conclusión, se podría decir que el Censo nos proporciona información que permite afirmar que la desigualdad por género no es homogénea; sino que más bien implica un conjunto de problemas interrelacionados que requieren el desarrollo de estrategias oportunas que afecten no solo a las mujeres sino a la población en general.14 13 Ibid. 14 Conclusión recogida de la experta en temas de género: Cecilia Blondet, sobre los resultados del censo Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 15 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 3. Situación de la mujer peruana en el mercado de trabajo 3.1 Población en Edad de Trabajar (PET), Población Económicamente Activa (PEA), y la tasa de actividad La Población en Edad de Trabajar (PET), como su nombre lo indica comprende a todas aquellas personas que tienen más de 14 años y que debido a este atributo puede participar potencialmente en el mercado laboral. La estructura demográfica de la Población en Edad de Trabajar (PET) en el año 2008, indica que del total de personas (21,04 millones) las mujeres representan el 51,7%. Además, como se puede observar en el gráfico Nº 1, la PET está concentrada en la población más joven. Así, más del 38% de la PET se concentra en la población entre 15 y 29 años. Específicamente, se tiene un 17% de jóvenes cuya edad fluctúa entre 14 y 19 años. Generalmente, la población joven es la más vulnerable ya que no tiene el performance adecuado para una adecuada inserción laboral. Gráfico Nº 1 Perú: Estructura demográfica de la Población en Edad de Trabajar (PET), 2008 90 a más 85 - 89 80 - 84 75 - 79 70 - 74 65 - 69 60 - 64 55 - 59 50 - 54 45 - 49 40 - 44 35 - 39 30 - 34 25 - 29 20 - 24 14 - 19 2000 1500 1000 500 Mujer 0 500 1000 1500 2000 Hombre Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: MTPE – Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL) 16 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano La PET está compuesta por la fuerza de trabajo o Población Económicamente Activa (PEA) y la población inactiva. Es decir, la PEA15 lo conforman las personas ocupadas o que están buscando activamente un empleo; y los que se mantienen en condición de inactividad son las amas de casa, estudiantes, jubilados, entre otros. En el caso de la población femenina, en el año 2008 la PET ascendió a más de 10 millones de personas, de las cuales 7 millones pertenecieron a la Población Económicamente Activa (PEA). De ese modo, la tasa de actividad 16 femenina fue de 65%. Del total de la Población Económicamente Activa (PEA) femenina, el 95,2% correspondió a personas ocupadas. Sin embargo, llama la atención que sólo el 29,6% (aproximadamente 2 millones) de la PEA femenina sea asalariada, mientras que más de dos tercios de ésta corresponde a personas no asalariadas (4,7 millones). El 4,8% restante corresponde a las mujeres económicamente activas que se encuentran desocupadas (340 159 personas). 16 Gráfico Nº 2 Perú: Distribución de la población femenina según condición de actividad, 2008 Población en Edad de Trabajar (PET) (14 años y mas) 10 876 624 Poblacion Económicamente Activa (PEA) 7 072 443 100,0% PEA Ocupada 6 732 284 95,2% Asalariados 1 989 620 29,6% Inactivos 3 804 181 PEA desocupada 340 159 4,8% No Asalariados 4 742 664 70,4% Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 15 También se le conoce como la oferta de trabajo, dado que es la cantidad de personas que están predispuestas a entregar un número de horas determinado a cambio de alguna retribución monetaria o no monetaria. 16 La tasa de actividad es el cociente entre la PEA y la PET multiplicado por 100%. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 17 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Aunque las mujeres tengan una representación en la PET ligeramente mayor que los hombres, la tasa de actividad de ellos es mayor (82,9%, versus el 65% correspondiente a la población femenina). Esto se evidencia al observar que los hombres representan el 54,4% de la PEA, mientras que las mujeres solamente alcanzan el 45,6%. Esta distribución se mantiene para el caso de la PEA ocupada, donde los hombres obtienen un porcentaje ligeramente mayor (54,7%). En el caso de la PEA desocupada, la proporción correspondiente a las mujeres (52,3%) es ligeramente mayor a la de los hombres (47,7%). Lo cual es concordante con una tasa de desempleo mayor en el caso de las mujeres con 4,8% mientras que en el caso de los hombres fue del 3,7% en el año 2008. El detalle de esta información se puede apreciar en el cuadro Nº 8. Pese a la evolución de la participación femenina en el mercado laboral, aún se encuentra que la tasa de actividad es mayor en los hombres que en las mujeres (82,9% y 65%, respectivamente). Es decir que, hay una diferencia de 17,9 puntos porcentuales entre la tasa de participación masculina y femenina al igual que en el informe anterior se puede observar que estas diferencias, se deben a que persisten ciertos roles al interior de las familias, en los cuales el hombre trabaja en una actividad remunerada, mientras que más de un tercio de las mujeres desempeñan roles no remunerados y en el hogar. En cuanto a las personas ocupadas se puede apreciar que el 54,7% de la PEA ocupada son hombres y el resto mujeres. Esta diferencia entre la PEA masculina y femenina en términos absolutos representa a 1,4 millones de hombres, lo cual quiere decir que los hombres se encuentran más integrados al trabajo que las mujeres pese a que las mujeres en edad de trabajar son relativamente más que los hombres. Cuadro Nº 8 Perú: Población y fuerza de trabajo por sexo, 2008 (En porcentajes) Total relativo Hombre Mujer 21 042 544 100,0 48,3 51,7 15 504 613 14 853 975 650 638 5 537 931 100,0 100,0 100,0 100,0 54,4 54,7 47,7 31,3 45,6 45,3 52,3 68,7 Tasa de Actividad (PEA/PET) Ratio PEA ocupada/PET 73,7 70,6 82,9 79,9 65,0 61,9 Tasa de desempleo (PEA desocupada/PEA) 4,2 3,7 4,8 Diversas variables Población en Edad de Trabajar -PET Población Económicamente Activa -PEA PEA ocupada PEA desocupada Poblacion inactiva Total absoluto Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 18 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano En cuanto a la dinámica de la distribución de la PET por sexo en los últimos siete años, según el gráfico Nº 3, se observa que en promedio las mujeres representan 51%, mientras que los hombres significan 48%. Esto quiere decir que existen más hombres que mujeres que están en condiciones para trabajar, y que estas diferencias parecen mantenerse a lo largo del tiempo, lo cual es difícil revertirla en el corto plazo, tal como se aprecia en el gráfico Nº 3. Se puede apreciar también que los resultados no han variado significativamente en el último quinquenio. Gráfico Nº 3 Perú: Evolución de la PET según sexo, 2002, 2005-2008 (En porcentajes) 100% 90% 80% 70% 51,6 53,0 51,0 51,6 51,7 48,5 47,0 49,0 48,4 48,3 2002 2005 2006 2007 2008 60% 50% 40% 30% 20% 10% 0% Hom bre Mujer Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, IV trimestre 2002 y continua 2005 - 2008. Elaboración: Propia. Entre los años 2002 y 2008, la oferta de trabajo según sexo (Gráfico Nº 4) presenta una situación inversa a la evolución de la PET por sexo, básicamente, por la mayor cantidad de mujeres inactivas que varones en esta misma condición. La oferta laboral de las mujeres en este periodo bordea el 45% y la de los hombres el 55%, con 10 puntos de diferencia entre ambos sexos, es decir que estamos lejos de una oferta de trabajo similar por género. Lo que podría explicar esta diferencia entre la oferta de trabajo por sexo es la preferencia o decisión de las mujeres de no participar en el mercado de trabajo que representó el 35% de la PET en el año 2008.17 17 Esta cifra viene de dividir el total de mujeres inactivas entre el total de la Población en Edad de Trabajar mujer del gráfico Nº 02. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 19 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 4 Perú: Evolución de la PEA según sexo, 2002, 2005-2008 (En porcentajes) 100% 90% 80% 43,9 45,7 44,6 45,5 45,6 56,1 54,3 55,4 54,6 54,4 2007 2008 70% 60% 50% 40% 30% 20% Hombre 10% Mujer 0% 2002 2005 2006 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, IV trimestre 2002 y continua 2005 - 2008. Elaboración: Propia. En cuanto a la PET femenina por área de residencia, se muestra que significativamente existen más mujeres en edad de trabajar urbanas (69,7%) que en el área rural (30,3%). Sin embargo, existe un indicador que debe ser tomado en cuenta en el análisis y es que, si bien en las zonas rurales la participación de la PEA femenina es de 73,8% (lo cual es acorde con la distribución de la población total), el nivel de desempleo bordea el 0,9% frente a un 6,9% observado en las zonas urbanas, lo cual se debe a que las mujeres del sector rural apoyan con mano de obra en las actividades productivas familiares asociadas a la actividad agropecuaria y al comercio al por menor. 20 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 09 Perú: Población y fuerza de trabajo femenina por área de residencia, 2008 (En porcentajes) Total relativo Urbano Rural 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 69,7 65,6 64,2 93,5 77,3 30,3 34,4 35,8 6,5 22,7 Tasa de Actividad (PEA/PET) Ratio PEA ocupada/PET 65,0 61,9 61,2 57,0 73,8 73,1 Tasa de desempleo (PEA desocupada/PEA) 4,8 6,9 0,9 Diversas variables Población en Edad de Trabajar -PET Población Económicamente Activa -PEA PEA ocupada PEA desocupada Poblacion inactiva Total absoluto 10 876 624 7 072 443 6 732 284 340 159 3 804 181 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia . Respecto a la distribución geográfica de la PEA femenina en el Perú, se observa que Lima Metropolitana concentra una parte importante de la oferta de trabajo (30,1%), es decir de las mujeres en edad de trabajar que están ocupadas o buscando activamente un empleo. También se debe recalcar que Lima Metropolitana concentra a una parte importante de la población total y así como también representa el centralismo administrativo y financiero del país; en general se puede decir que Lima Metropolitana representa al sector moderno de la economía y convive con zonas urbano marginales o con ejes de desarrollo local en el Norte y Sur de Lima Metropolitana. El resto de la PEA femenina se reparte de forma similar entre el resto urbano y el área rural, con 35,5% y 34,4% respectivamente. Gráfico Nº 5 Perú: Distribución de la PEA femenina, según ámbito geográfico, 2008 (En porcentajes) Rural 34,4 Resto Urbano 35,5 Lima Metropolitana 30,1 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 21 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano En la tasa de actividad femenina de Lima Metropolitana se muestra una tendencia creciente –aunque con fluctuaciones- en los últimos 35 años. Así, de niveles cercanos al 35% en su tasa de participación registrados en la década de los 70s pasó a una tasa de actividad femenina superior a 50% en la presente década, aunque la tendencia es decreciente para los dos últimos años; lo cual, puede ser explicado por un mayor crecimiento económico, como el que ha experimentado nuestro país en los últimos años; por lo tanto, existe una mayor probabilidad de que la mujer no necesite participar en el mercado de trabajo, dado que el ingreso que obtienen los otros miembros del hogar cubren los requerimientos monetarios de la familia. Esta situación es concordante con el hecho de que existe un porcentaje de mujeres inactivas que se encuentran dedicadas a los quehaceres del hogar (más de 3,8 millones de mujeres a nivel nacional) y que en los últimos años no ha tenido incentivos para salir agresivamente a buscar un trabajo. Gráfico Nº 6 Lima Metropolitana: tasa de actividad femenina, 1970-2008 60 55 d 50 a id iv t c a 45 e d a s a T 40 35 30 1970 1972 1974 1976 1978 1980 1982 1984 1986 1988 1990 1992 1994 1996 1998 2000 2002 2004 2006 2008 Tasa de actividad femenina Tendencia Fuente: MTPE - Encuesta Nacional de Hogares Especializada en Niveles de Empleo, III Trimestre 1975 2005. MTPE – Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo 2006, 2007 y 2008. Elaboración: MTPE - Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL). Al analizar la PEA por sexo y rangos de edad para el caso peruano; se observa que la tasa de desempleo en las mujeres (4,8%) es mayor que en el caso de los hombres (3,7%). Sin embargo, al analizar por rango de edad y según sexo, en todos los rangos de edad, excepto la de jóvenes de 14 a 29 años, los ocupados representan alrededor de 97% de la PEA. Asimismo, según rangos de edad, la tasa de desempleo de los hombres (7,1%) como de las mujeres (9,0%) entre 14 y 29 años de edad es relativamente mayor a otros grupos de edad. Las menores tasas de desempleo para los hombres se encuentran en el rango de 30 a 45 años de edad (1,7%), cual es estadísticamente igual al rango de 46 a 55 años; en tanto que en ambos rangos de edad, las mujeres casi duplican dichas tasas de desempleo. Lo anterior implica que si bien el mercado de trabajo se está poniendo más dinámico, son aún los jóvenes los que menos oportunidades laborales tienen. En este sentido, el Estado debe enfocar como parte de su política de empleo, acciones que permitan a los jóvenes insertarse de una forma más rápida al mercado laboral (ver cuadro Nº 10). 22 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 10 Perú: Distribución de la PEA ocupada y desocupada, según sexo y rangos de edad, 2008 (En porcentajes) Sexo y rangos de edad Total absoluto Total relativo Condición de actividad Ocupados Desocupados Hombre 8 432 170 100,0 96,3 3,7 De 14 De 30 De 46 De 56 De 65 2 931 2 756 1 318 758 667 551 299 543 259 518 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 92,9 98,3 98,4 96,9 98,5 7,1 1,7 1,6 3,1 1,5 7 072 443 100,0 95,2 4,8 2 404 2 436 1 154 587 488 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 91,0 96,9 97,1 98,6 99,0 9,0 3,1 2,9 1,5 1,0 a 29 años a 45 años a 55 años a 64 años y más años Mujer De 14 De 30 De 46 De 56 De 65 a 29 años a 45 años a 55 años a 64 años y más años 826 459 598 771 790 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. Para el caso de Lima Metropolitana, se observa como en anteriores oportunidades que la tasa de actividad femenina presenta una tendencia negativa a medida que aumenta la edad. Así se puede observar, que mientras el rango de 14 a 29 años se presentó una tasa de actividad del 52% en el año 2008; en el rango de 56 años a más años, este porcentaje disminuye a 28%. Cabe precisar, en relación a los años analizados (2004 al 2008) que el comportamiento en el rango de 14 a 29 años fue similar. En cuanto al rango de 30 a 45 años de edad, en el año 2004 se presentó la tasa de actividad más alta que para el resto de años. Para el rango de 46 a 55 años, en el año 2005 se presentó la tasa más baja; al igual que en el rango de 56 años a más, debido a que muchas de ellas se retiran o jubilan del trabajo, tal como se puede observar en el gráfico Nº 7. En general, se nota un incremento del rango de edad donde se alcanzó la tasa de actividad máxima a medida que pasó el tiempo. Lo cual implica que las mujeres han estado más activas en cuanto a querer ofertar su fuerza de trabajo al mercado, sobre todo, en el año 2008; y según rangos de edad, es a partir de los 45 años, en donde se presenta las mayores tasas de actividad respecto a otros años. 23 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 7 Lima Metropolitana: Tasa de actividad femenina, según rangos de edad, 2004 – 2008 (En porcentajes) 80,0 70,0 60,0 50,0 40,0 30,0 20,0 10,0 0,0 14-29 30-45 2004 2005 46-55 2006 2007 56 a más 2008 BOX Nº 2 Los países latinoamericanos han avanzado en el cumplimiento de la primera meta del milenio, a saber, reducir a la mitad el porcentaje de personas con ingresos menores a un dólar diario entre 1990 y 2015. Con respecto a la meta de reducir la pobreza total a la mitad, ésta, a nivel regional, ha pasado de 48,3% en 1990 al 34,1% en 2007; estos avances han sido resultado de tendencias heterogéneas en nuestros países. Se debe resaltar que se puede lograr importantes avances en la reducción de la pobreza total con pequeñas mejoras distributivas: un crecimiento que favorezca en mayor medida a los más pobres puede aumentar significativamente la tasa de crecimiento. El rol de la mujer como jefa de hogar es un fenómeno que ha aumentado en paralelo con el de la participación femenina en la actividad económica. En muchos casos, es la ausencia de la pareja masculina la que obliga a las mujeres a hacerse cargo totalmente de la manutención del hogar. Dentro del marco de la reducción de la pobreza, las mujeres jefas de hogar desempeñan un papel relevante al participar en los programas que persiguen dicho propósito, principalmente en la administración de recursos de transferencias condicionadas. Actualmente, una de cada cuatro personas en América Latina vive en un hogar con jefe mujer, a inicios de los noventas, esta relación era de uno a siete. Estos hogares muestran mayor vulnerabilidad, aunque este es un fenómeno más urbano que rural, esto podría explicarse porque en las zonas rurales frecuentemente el cónyuge varón emigra o desempeña actividades en lugares apartados y por períodos prolongados (como en el caso de los trabajos temporales en faenas agrícolas). Panorama Social de América Latina, 2008. CEPAL http://www.cepal.org/publicaciones/xml/2/34732/PSE2008_Versioncompleta.PDF 24 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 3.2 Determinantes de la participación laboral femenina en el Perú 18 Las estadísticas sobre empleo de los últimos años demuestran que hay una mayor participación femenina en el mercado de trabajo peruano, latinoamericano y mundial. En este sentido cabe la pregunta de ¿Cuales son los factores que determinan la participación laboral de la mujer? ¿Qué hace que las mujeres prefieran ofertar su fuerza laboral en el mercado de trabajo a quedarse en el hogar desarrollando otro tipo de trabajo no remunerado? Para responder las preguntas anteriores, usaremos el método econométrico de estimación Heckman, que nos permite identificar los determinantes de la participación femenina en el mercado de trabajo y los determinantes de la oferta laboral femenina, los cuales no son necesariamente los mismos. Un factor clave en la determinación del modelo es entender que las mujeres toman dos tipos de decisiones de forma secuencial, primero, “si participan o no en el mercado laboral” y segundo, “que número de horas van a ofertar en dicho mercado”. En este sentido Heckman sugiere estimar un modelo en dos etapas tal que se estimen correctamente las ecuaciones de las remuneraciones y la participación femenina en el mercado de trabajo. Para la estimación del modelo se plantea la participación derivada de la teoría neoclásica de la oferta de trabajo. Este sostiene que las mujeres definen sus decisiones de participación en el mercado laboral a partir de la evaluación de un “salario de reserva”. Dado que este salario de reserva es inobservable, sólo se puede definir una variable binaria, la cual tomará el valor de uno si la mujer participa en el mercado laboral y 0 si no lo hace. Dado que la teoría que se presenta es parte del modelo clásico simple, el consumo de cada individuo será igual al valor de la producción. Dicha producción dependerá de las horas que la mujer destine al trabajo (Barro R., 1986). El estudio de la decisión de participar en el mercado laboral ha estado dominado en la literatura económica por un enfoque neoclásico en el que el individuo toma la decisión de participar, cuando maximiza su consumo de bienes y el tiempo de ocio del que dispone. En este contexto al analizar la decisión de participar o no, la predicción del modelo es que el efecto sustitución (positivo) es mayor que el efecto ingreso negativo.19 En relación a este tema Gary Becker presenta un modelo de producción doméstica, donde introduce en el análisis más de una actividad económica, a diferencia de los modelos anteriores que analizaron el tema. Así, presentan actividades que se producen en el hogar y que utilizan como insumo bienes de mercado y tiempo de ocio. La inactividad entonces se justifica en la fabricación y disfrute de éstos commodities y actividades. Tomando como base teórica el modelo de economía familiar de asignación de tiempo de Becker 20 (1957, 1965 ), para tomar la decisión de quien debe trabajar, en el interior del hogar se identifican además de las características individuales tales como la educación y la experiencia, características familiares y condiciones del mercado que determinan la entrada en el mercado laboral de los miembros del hogar, las cuales se detallan a continuación. Especificación teórica de los determinantes Específicamente, las variables que han sido incluidas como determinantes de la participación laboral son las siguientes: 18 Un análisis completo del marco teórico de este tema se presenta en el informe anual de la mujer del 2007. 19 20 Tomado del Boletín de la Economía Laboral Nº 16.Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo. Programa de Estadísticas Laborales. Abril del 2000. Esta publicación fue citada en el informe de mujer 2008 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 25 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Entre las características individuales, se tiene la edad de la mujer y la edad de la mujer al cuadrado. Éstas se incluyen como variables explicativas porque se espera que con los años la participación de las mujeres en el mercado laboral femenino se incremente, debido a que se incorpora a la PET aunque al llegar a la vejez podría declinar. Otra característica individual que es determinante de la participación, son los años de escolaridad, es decir que mientras más años de educación tiene la persona se incrementan las oportunidades de trabajo de las mujeres y a la vez se incrementa el costo de oportunidad de permanecer inactivo. Otra variable importante es el estado civil de la mujer, la presencia de un compañero podría desincentivar a las mujeres a trabajar, ya sea por una decisión de la pareja o por imposición del marido. También tenemos que el ingreso no laboral per cápita constituye una característica individual de la mujer que determina que las transferencias de dinero que reciben tienen el efecto de adquirir mayores unidades de ocio, lo cual disminuiría la probabilidad de trabajar. La asistencia a algún centro de enseñanza de las mujeres, es un determinante, porque debido a las restricciones de tiempo de las mismas, las mujeres que asisten a algún centro de enseñanza tendrán una menor participación laboral. En cuanto a las características familiares, se tiene el promedio de educación en el hogar, debido a que un mayor nivel educativo de los demás miembros de la familia, determinaría una mayor participación en el mercado laboral de los mismos, haciendo quizás poco necesario la participación de la mujer, con lo cual se podría tener un efecto negativo. Otra variable familiar es el número de enfermos crónicos en el hogar, debido a que en muchos casos la gravedad de sus dolencias sí requiere de especial cuidado. Si esta variable resulta ser importante y con signo negativo sería un indicador que las mujeres desempeñarían (al menos en parte) esta labor. Así también tenemos el número de niños de 0 a 6 años. Dado el rol de la mujer en la sociedad, como el de cuidar a los niños pequeños, un mayor número de ellos podría ser un desincentivo a participar en el mercado laboral. Debido a que en ese rango de edad los menores requieren de mayor cuidado, 21 ver Browning (1994) y Nakamura y Nakamura (1994 ). El ratio PET femenina / PET familiar, que determina que un mayor porcentaje de mujeres en la PET familiar podría estar relacionado con una mayor participación de las mismas. El ingreso de otros miembros del hogar, es decir que el ingreso de otros miembros del hogar, los ingresos de los abuelos, tíos, hermanos e hijos mayores podría desincentivar la participación laboral femenina. Estimación econométrica Para fines de la estimación, dividimos la muestra en dos grupos seleccionados a priori que demostraron tener patrones de conducta distintos: el grupo de mujeres que en promedio tiene secundaria completa, y el grupo con secundaria incompleta o que tiene en promedio menos de 11 años de estudio. La división se justifica debido a que el nivel educativo es un determinante importante en las posibilidades laborales de las personas, en especial de las mujeres. Las teorías sobre el capital humano manifiestan que la educación permite acumular conocimientos, desarrollar destrezas, incrementar aspiraciones personales, evaluar oportunidades, etc. Todas estas características pueden ser distintas para quienes terminaron el nivel secundario y para quienes tienen educación superior, en términos estadísticos los determinantes propuestos podrían mostrar un signo distinto y por ende un efecto distinto para cada grupo. Este efecto puede ser identificado con una variable dummy 21 Estos documentos fueron citados en el Informe anual de la mujer 2008. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 26 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 12 Perú: Estimación Probit de la participación laboral de la mujer, 2008 Secundaria Completa o Más Variables Coeficientes Edad Edad al cuadrado Total de enfermos crónicos en el hogar Años de escolaridad Promedio de educación de adultos en el hogar Número de niños menores de 6 años Ratio PET femenina / PET familiar Estado civil (1=casado, 0=otro caso) Ingreso no laboral per cápita Ingreso de otros miembros del hogar Asiste a algún centro de enseñanza? (1=Sí, 0=No) Constante 0.1160*** (16,76) -0.0015*** (-17.2333) -0,0136 (-1.0710) 0.1154*** (11,82) -0.0270*** (-3.5459) -0.1214*** (-5.6384) 0.3402*** (3,77) -0.1980*** (-4.5171) -0.0000*** (-3.0131) 0 (0,29) -0.4171*** (-8.2887) -2.5919*** (-16.4753) Efecto Marginal 0.0410*** (16,63) -0.0005*** (-17.0565) -0,0048 (-1.0713) 0.0408*** (11,77) -0.0095*** (-3.5400) -0.0429*** (-5.6413) 0.1203*** (3,78) -0.0713*** (-4.4431) -0.0000*** (-3.0066) 0 (0,29) -0.1564*** (-7.9808) Secundaria Completa o Menos Coeficientes Efecto Marginal 0.0841*** (22,96) -0.0010*** (-26.9036) -0.0843*** (-6.8127) 0.0132** (2,26) -0.0679*** (-13.4164) -0.0734*** (-4.5080) 0.4098*** (5,77) 0,0001 (0,00) -0.0001*** (-9.4411) 0 (0,31) -0.4797*** (-9.3231) -0.6731*** (-6.4060) 0.0316*** (22,63) -0.0004*** (-26.4975) -0.0317*** (-6.7953) 0.0050** (2,26) -0.0255*** (-13.4558) -0.0276*** (-4.5088) 0.1540*** (5,77) 0 (0,00) -0.0000*** (-9.4054) 0 (0,31) -0.1871*** (-9.2323) 18 905 18 905 Observaciones 12 249 12 249 Nota: Los t-estadísticos se encuentran entre paréntesis. ** La variable es significativa con un nivel de confianza de 99%. *** La variable es significativa con un nivel de confianza de 95%. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. De los resultados obtenidos en esta estimación econométrica de puede concluir que las variables que son significativas a un nivel de confianza del 95% en el grupo que alcanza el nivel de secundaria completa a más son: la edad, la edad al cuadrado, los años de escolaridad de la mujer, el promedio de educación de adultos en el hogar, el número de niños menores de 6 años, el ratio PET femenina/PET familiar, el estado civil de las mujeres y los ingresos. Es decir todas aquellas variables que la literatura señala como importantes, son las que confirman su relevancia a nivel econométrico. Respecto a los efectos marginales se puede apreciar, para el mismo grupo antes mencionado, que la edad, los años de escolaridad y el ratio PET femenina/PET familiar afectan positivamente la probabilidad de participación en el mercado laboral, el resto de las variables significativas afectan dicha probabilidad de manera negativa. Es decir, se cumple que la participación laboral se incrementa con la edad, pero empieza a declinar con los años. Los resultados parecen indicar que las mujeres sin educación no consideran importante participar en el mercado laboral, es decir que como en el caso anterior, las políticas deben estar dirigidas a incentivar la participación de las mujeres a través de políticas educativas dirigidas a este grupo para que mejoren sus niveles de educación. 27 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Es importante resaltar que los resultados obtenidos para el 2008 son similares al obtenido en el Informe Anual de la Mujer 2007, lo cual nos permite identificar con cierto nivel de certeza los factores que determinan la participación de la mujer en el mercado laboral. Oferta laboral femenina (Horas trabajadas con corrección de sesgo de selección) Como se ha podido observar en la primera parte de este ejercicio, la participación de la mujer en el mercado laboral, depende de dos decisiones importantes: i) la primera es si las mujeres entran al mercado laboral o no, en base a los determinantes analizados previamente y ii) si en una segunda etapa, la definición del número de horas que va a ofertar al mercado de trabajo. En este sentido, se debe determinar la oferta de horas de trabajo de las mujeres, la cual es una variable que se determina en base a aspectos o atributos individuales, familiares y de mercado, para todas aquellas que en un primer momento decidieron participar. Así de esta manera, el ejercicio que viene a continuación se dedicará a analizar los factores que determinan la oferta laboral de la mujer: El modelo teórico Dadas las características del modelo, la estimación se realiza en dos pasos, pues la muestra sufre del problema de sesgo de selección: solo se observan datos de salarios y horas trabajadas para aquellas mujeres que deciden trabajar y no para aquellas que se mantienen inactivas, lo que en términos econométricos corresponde a una estimación truncada. Sin embargo, es importante considerar la información que proporcionan las características de quienes no tienen ingresos laborales. Estos modelos han sido pensados para mujeres que trabajan por ingresos laborales fijos; por ello, sólo se considera a aquellas que trabajan de forma dependiente con remuneración.22 El modelo a ser estimado tiene dos ecuaciones: ln( wi ) = z i¢ a + vi (2) hi = b) xi¢ b + ui 0 ln( wi + (3) donde ln(wi ) es el logaritmo del salario; hi es la cantidad de horas por semana ofrecidas al mercado laboral; zi es un vector de determinantes de los salarios tales como la edad, experiencia y el nivel educativo; xi es un vector de variables individuales y de la familia que determinan la cantidad de horas que una mujer ofrece al mercado laboral para cada nivel de salario; y a y b son vectores de parámetros, siendo b 0 el parámetro de la pendiente de la oferta laboral. También vi y ui son dos términos de perturbación no correlacionados. La ecuación (2) representa a los determinantes de los salarios mientras que la ecuación (3) es la oferta laboral. Se plantean ambas ecuaciones pues las observaciones de trabajo de las mujeres son el resultado de la interacción de las dos ecuaciones (asumiéndose que los trabajadores son precio-aceptantes en el mercado laboral) .23 La ecuación (3) -que es nuestro principal objeto de interés- no puede ser estimada directamente por mínimos cuadrados ordinarios pues existe un problema de endogeneidad de la variable ln(wi ) , dado que en dicha ecuación está correlacionada con el término de perturbación ui . Por ello, el salario es una variable endógena que debe ser modelada (tal como se hace en la ecuación (2)) e instrumentalizada. 22 Véase Heckman (1974) y Heckman (1979) 23 Véase Maddala (1983) para una explicación detallada de estos métodos. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 28 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Estimación de los determinantes de los ingresos laborales El primer paso consiste en estimar la ecuación (2) por el método de Heckman para corregir el sesgo de selección mencionado antes. Los determinantes de la selección son los mismos que definieron la participación de la mujer en el mercado laboral. En el cuadro Nº 13 observamos las estimaciones de la ecuación (2) en donde solo se tomó en cuenta a la submuestra de trabajadores dependientes que incluyen a empleados públicos y privados, obreros públicos y privados, practicantes y trabajadores del hogar , así como a aquellos que actualmente no tienen empleo pero que lo están buscando. Se excluyó a los empleadores, trabajadores independientes y trabajadores familiares no remunerados pues el modelo a estimar no se aplica para este tipo de trabajos. La variable dependiente es el logaritmo del ingreso líquido semanal promedio en su ocupación principal y deflactado, la cual llamaremos en adelante “ingreso”. Podemos observar que las variables relevantes para estimar el ingreso obtenido por las mujeres dependientes son la edad, años de escolaridad, los años de experiencia, el ámbito geográfico, así como las variables correspondientes a la identificación del tipo de trabajo que desempeña la persona. Con la excepción de la edad, años de escolaridad y el ámbito geográfico todas estas variables tienen coeficientes positivos, es decir, afectan positivamente los ingresos. Así, podemos destacar que el incremento de la escolaridad en un año, disminuye en 26% el salario de las mujeres. Así también, cada año de experiencia laboral de la mujer incrementa 2% el ingreso laboral de las mujeres asalariadas. La ocupación profesional es un determinante de los sueldos y salarios de las mujeres; los coeficientes varían de acuerdo a la profesión entre las que se distingue el siguiente orden (de mayor a menor coeficiente): 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. Gerentes, administradores y funcionarios Empleados de oficina Profesionales, técnicos y afines Obreros, jornaleros y otras ocupaciones Vendedores Trabajadores de los servicios Artesanos y operarios La categoría excluida de la regresión es la de trabajadoras del hogar (además el software eliminó automáticamente a las categorías “mineros y canteros” y “conductores” por carecer de suficientes observaciones de mujeres en esos rubros. Al ser todos los coeficientes positivos se está afirmando que los ingresos promedio de esas actividades son más altos que los de las mujeres trabajadoras del hogar. Respecto a las diferencias geográficas, el ámbito urbano muestra un coeficiente de alrededor de 0,24 lo que evidencia diferencias entre los salarios urbanos y rurales. 29 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 13 Perú: Determinantes de los sueldos y salarios de las mujeres, 2008 V a riab les Edad E d a d a l c u a dra do A ñ o s de es c ola rid a d A ñ o s de ex p e rie n c ia e n e l trab a jo a c tu a l U rb a n o o rura l P ro fe s io n a le s, téc n ic o s y o c up a c io ne s a fine s G e re n te s , a d m in is tra do res y fu n cion a rio s E m p le a do s d e o ficina V e n de d o re s A rte sa n o s y o p e ra rios O b re ro s , jo rn a le ro s y oc u p ac io n e s no es p e cific a da s T ra b ajad o re s d e los s e rvic io s C o n stan te s ele ct Edad E d a d a l c u a dra do A ñ o s de es c ola rid a d T ota l d e e n fe rm o s c ró n ic os e n e l h og a r P ro m e d io d e e d u ca c ió n d e a d ulto s e n e l h o g a r N ú m ero d e n iñ o s m en o re s d e 6 a ñ o s R a tio P E T fe m en ina / P E T fam ilia r E s ta d o civil (1 =c a sa d o , 0= o tro ca so ) In g re s o n o la b o ra l p er c á pita In g re s o d e o tros m iem b ro s d e l ho g a r A s is te a a lgú n c e n tro de en s e ña n za ? (1 =S í, 0= N o ) C o n stan te a th rh o C o n stan te In s ig m a C o n stan te O b se rva c io n e s C o e ficie n te s -0.1 12 3 ** (-2 .0 8 4 0 ) 0 ,0 0 0 7 (1 ,1 0 ) -0 .2 5 73 *** (-1 0.0 63 2 ) 0.0 20 7 *** (4 ,0 8 ) -0 .2 4 59 *** (-2 .6 9 4 2 ) 1.3 31 7 *** (6 ,4 9 ) 1.6 39 4 *** (4 ,1 9 ) 1.0 26 9 *** (S /. 5 ,11 ) 1.3 86 2 *** (9 ,2 2 ) 0.9 14 3 *** (4 ,2 6 ) 1.0 65 9 *** (2 ,8 5 ) 0.7 91 4 *** (3 ,2 3 ) 1 2 .7 1 5 8*** (1 0 ,2 2 ) 0.1 33 5 *** (5 ,7 3 ) -0 .0 0 11 *** (-4 .1 6 0 0 ) 0.1 55 3 *** (1 2 ,3 3 ) 0 .0 2 1 6 * (1 ,8 8 ) 0 .01 2 7 ** (2 ,1 8 ) 0 .05 4 1 ** (2 ,5 2 ) 0 ,0 4 5 3 (0 ,7 7 ) -0 ,0 1 1 3 (-0 .3 6 4 3 ) -0 .0 0 00 *** (-3 .9 6 8 6 ) 0 (1 ,3 7 ) 0 .09 0 2 ** (2 ,0 8 ) -6 .9 0 56 *** (-1 2.7 90 7 ) -3 .1 8 00 *** (-9 .8 0 8 5 ) 0.6 23 1 *** (1 0 ,9 2 ) 6255 N ota: Lo s t-e s ta dís tic o s s e e nc ue ntra n en tre p aré nte s is . N o s e inc lu ye a la s m uje re s q u e tra ba ja n d e m a ne ra in d ep en d ien te ** L a va ria ble e s s ig n ific a tiva c o n un n ivel de c o nfian za d e 9 9 % *** L a v aria ble e s s ig nific ativa c o n u n niv el d e c o nfia n za de 9 5% F u en te : IN E I - E n c ue s ta N ac io n al d e H o ga re s , s ob re C on d ic ion e s d e V id a y P o b re za , c o n tinu a 20 0 8. E la b orac ión : P rop ia . 30 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano En la segunda etapa, se utiliza la predicción del logaritmo del ingreso para estimar la ecuación (3). En el Cuadro Nº 14 podemos observar los resultados de la estimación de esta oferta laboral. En esta estimación mantenemos la división sugerida en la parte anterior: es decir un grupo conformado por aquellas mujeres con secundaria completa o un nivel de educación mayor y otro grupo para aquellas con secundaria incompleta o un nivel menor de educación. Tal como se puede observar en los resultados, de las variables utilizadas para estimar las horas trabajadas de las mujeres en el mercado laboral, las que resultan significativas a un nivel de confianza de 99% para el grupo que alcanza un nivel de secundaria completa a más son el ámbito geográfico, el número de miembros del hogar; y, si la persona asiste a algún centro de enseñanza. Las que son significativas al 95% son el estado civil, el total de enfermos crónicos y la variable ratio de PET femenina sobre la familiar. De estas variables, las que influyen de manera positiva sobre el número de horas trabajadas son el ámbito geográfico, el número de miembros del hogar, el ratio de PET femenina sobre la PET familiar siendo el resto de coeficientes negativos (para las variables significativas que quedan). Para el grupo de mujeres cuyo nivel de educación no supera la secundaria incompleta o menos, las variables significativas a un nivel de confianza de 99% son el ámbito geográfico, el número de miembros del hogar, el estado civil, el número de niños menores de 6 años y si la persona asiste a algún centro de enseñanza. Tanto las variables correspondientes a la edad, el total de enfermos crónicos, como el ratio de PET femenina sobre la familiar son significativas a un nivel de confianza de 95%. En este caso, las variables con coeficientes positivos son el ámbito geográfico, el número de miembros del hogar y el ratio de PET femenina sobre la familiar. En el Cuadro Nº 15, comentando en primer lugar el impacto del salario sobre la oferta laboral, vemos que es positivo y significativo para las mujeres más educadas (las mayores elasticidades). Esto quiere decir que, el salario es una de las principales variables en afectar a la cantidad de horas trabajadas. Para el caso de las mujeres menos educadas es una variable no significativa. Comentando individualmente el resto de variables, vemos que su influencia es distinta a aquella en la participación laboral. Las discutiremos aquí siguiendo el orden establecido por las elasticidades, desde las más elásticas a las más inelásticas. En el caso de la edad, vemos que la cantidad de horas trabajadas declina constantemente con la edad de la mujer que poseen secundaria incompleta o menos. Para el caso de las mujeres con más educación la variable es no significativa. También se observa que, en el ámbito urbano, en promedio, se estaría trabajando más horas que en el ámbito rural. Asimismo, la elasticidad es menor en el caso de las mujeres que tienen secundaria completa o más educación, es decir que ellas están menos dispuestas a trabajar una mayor cantidad de horas que las que tienen menor educación. También podemos ver que el ratio PET femenina / PET familiar tiene un impacto positivo en el caso de la mujeres con secundaria incompleta o menos. Es decir, en hogares con un peso mayor de mujeres en la PET familiar se observará que dichas mujeres trabajan más horas en comparación con las mujeres que provienen de familias con un peso menor de mujeres en el hogar. Mientras que en el 31 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano caso de las mujeres con educación secundaria o más el efecto es inverso ya que, en hogares con más mujeres en edad de trabajar en su hogar disminuiría la oferta de horas de trabajo. Otra variable que tiene un impacto fuerte sobre las horas trabajadas es si la persona asiste actualmente o no a algún centro de enseñanza. Vemos que, para ambos grupos, esta variable es significativamente distinta de cero y tiene signo negativo. Al igual que en el caso de la participación de la mujer, al parecer las limitaciones de tiempo hacen que aquellas que dedican parte de sus días a estudiar no puedan ofrecer más horas de trabajo en el mercado laboral. En el caso de la variable estado civil, ésta influye negativamente en las horas trabajadas; en ambos casos son significativas al 95%, sin embargo, la elasticidad es mayor en el caso de las mujeres con educación secundaria incompleta o menor. Es decir, al casarse las mujeres con menor educación son las que están dispuestas a trabajar menos horas, esto puede explicarse porque se dedican a la crianza de los hijos y el mantenimiento del hogar, pasando a depender económicamente de sus esposos. Algo que debe rescatarse es que los niños menores de 6 años influyen negativamente, de modo significativo al 95%, en la cantidad de horas trabajadas para el caso de las mujeres con menor educación. Sobre las demás variables que tienen un impacto menor, el número de miembros del hogar también determina que las mujeres trabajen más horas, quizás por la necesidad de colaborar económicamente en un hogar con mayores necesidades. En el caso del número de enfermos crónicos en el hogar, esta variable tiene un impacto negativo relativamente pequeño sobre la oferta laboral significativa al 95%. Sobre el impacto de las variables ingreso no laboral per cápita e ingreso de otros miembros del hogar sobre las horas trabajadas, para ambos casos resultan siendo no significativas. 32 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 14 Perú: Estimación de la oferta laboral de la mujer, 2008 Variables Secundaria completa o Secundaria incompleta o más menos lhoras Linear prediction Edad Urbano o rural Número de miembros en el hogar Estado civil (1=casado, 0=otro caso) Número de niños menores de 6 años Total de enfermos crónicos en el hogar Ingreso no laboral per capita Ingreso de otros miembros del hogar Asiste a algún centro de enseñanza? (1=Sí, 0=No) Ratio PET femenina / PET familiar Constante 0.0665*** (3,2602) 0,0007 (0,4322) 0.1995*** (4,6837) 0.0212*** (2,6961) -0.0653** (-2.1277) -0,028 (-1.5306) -0.0236** (-2.2108) 0 (1,0153) 0 (0,0323) -0.2710*** 0,0096 (0,3477) -0.0050** (-2.5681) 0.3140*** (6,9516) 0.0358*** (2,9155) -0.1741*** (-3.1091) -0.1004*** (-2.9532) -0.0442** (-1.9642) -0,0001 (-1.6281) 0 (-0.3414) -0.6533*** (-6.6334) 0.1660** (2,3888) 2.7659*** (14,1252) (-5.9623) 0.2245** (2,0148) 3.2102*** (10,2174) -0.0988*** (-3.6954) 0.0010*** (3,0303) -0.1085*** (-4.0005) 0,0202 (0,5176) 0,016 (0,6896) -0,0775 (-1.1249) -0,1385 (-0.5924) -0.2770** (-2.4719) 0 (-0.9388) 0 (-0.2298) -0,0291 -0,0074 (-0.2512) -0,0001 (-0.2456) -0.1664** (-2.0353) -0,005 (-0.0781) -0,0563 (-0.9606) -0,0596 (-0.5014) 0,0578 (0,1411) -0,2803 (-0.8992) -0,0001 (-1.3963) -0,0001 (-1.5815) 5.5256*** (-0.1665) 5.4003*** (8,4276) (6,6592) 5.0204*** (4,8498) 0.1783*** (4,2155) 0.2181** (2,1430) -0.5196*** (-21.7145) -0.2542*** (-9.7735) 6255 6255 select Edad Edad al cuadrado Años de escolaridad Total de enfermos cronicos en el hogar Promedio de educacion de adultos en el hogar Número de niños menores de 6 años Ratio PET femenina / PET familiar Estado civil (1=casado, 0=otro caso) Ingreso no laboral per capita Ingreso de otros miembros del hogar Asiste a algún centro de enseñanza? (1=Sí, 0=No) Constante athrho Constante lnsigma Constante Observaciones Nota: Los t-estadísticos se encuentran entre paréntesis. No se incluye a las mujeres que trabajan de manera independiente ** La variable es significativa con un nivel de confianza de 99% *** La variable es significativa con un nivel de confianza de 95% Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 33 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 15 Perú: Elasticidades de la oferta laboral de la mujer, 2008 Elasticidades para las mujeres con secundaria completa o más Variables ey / ex Std. Err z P>z [ 95% C.I.] X lsalhat edad urbano* miembros del hogar casado* # de niños < 6 años total de enfermos crónicos en el hogar. 0,0665 0,0007 0,1995 0,0212 -0,0653 -0,0280 0,0204 0,0017 0,0426 0,0079 0,0307 0,0183 3,26 0,43 4,68 2,7 -2,13 -1,53 0,001 0,666 0 0,007 0,033 0,126 [0,026527 [-0,002604 [0,116038 [0,005795 [-0,125505 [-0,063866 0,106497] 0,004078] 0,283039] 0,036655] -0,005151] 0,007857] 7,58909 34,2 0,852129 4,90679 0,240144 0,521079 -0,0236 0,0107 -2,21 0,027 [-0,044511 -0,002677] 1,24652 ingreso no laboral per cápita ingresos de otros mienbros del hogar 0,0000 0,0000 1,02 0,31 [-0,0000025 0,000008] 924,3 0,0000 0,0000 0,03 0,974 [-0,00000076 0,00000079] 1273,7 asiste algún centro de enseñanza* -0,2710 0,0409 -6,63 0 [-0,351036 -0,190909] 0,104259 ratio PET femenina/PET familiar 0,1660 0,0695 2,39 0,017 [0,029803 0,302197] 0,623501 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. Elasticidades para las mujeres con secundaria incompleta o menos Variables ey / ex Std. Err z P>z [ 95% C.I.] X lsalhat edad urbano* miembros del hogar casado* # de niños < 6 años total de enfermos crónicos en el hogar. ingreso no laboral per cápita ingresos de otros mienbros del hogar asiste algún centro de enseñanza* ratio PET femenina/PET familiar 0,0096 -0,0050 0,3140 0,0358 -0,1741 -0,1004 0,0277 0,0019 0,0452 0,0123 0,0560 0,0340 0,35 -2,57 6,95 2,92 -3,11 -2,95 0,728 0,01 0 0,004 0,002 0,003 [-0,044686 [-0,008757 [0,225457 [0,011743 [-0,283837 [-0,166988 0,063963] -0,001176] 0,40251] 0,059914] -0,064344] -0,033759] 7,58909 34,2 0,852129 4,90679 0,240144 0,521079 -0,0442 -0,0001 0,0225 0,0000 -1,96 -1,63 0,05 0,104 [-0,088351 [-0,000123 -0,000096] 0,000011] 1,24652 924,3 0,0000 0,0000 -0,34 0,733 [-0,000032 0,000023] 1273,7 -0,6533 0,2245 0,1096 0,1114 -5,96 2,01 0 0,044 [-0,868054 [0,006112 -0,438541] 0,442947] 0,104259 0,623501 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 3.3. Niveles de empleo El año 2008, ha sido sin duda el año con mayor porcentaje de la PEA que trabajan bajo la condición de empleo adecuado, lo cual también se manifiesta cuando analizamos este indicador por sexo. Así, el 54,8% de la PEA masculina y el 43,6% de la PEA femenina se encuentran con empleos adecuados. Así también podemos notar que, los niveles de desempleo han caído en casi todos los rangos de edad, salvo para el segmento de 14 a 29 años de edad, el cual sufre un ligero incremento respecto al año 2007, pero en general siempre ha habido una elevada tasa de desempleo tanto para mujeres como para hombres jóvenes (ver gráfico Nº 8). Lo que sí se puede apreciar claramente es que los niveles de subempleo femenino han disminuido respecto al año 2006 en 2,2 puntos porcentuales, sobre todo, ha disminuido el subempleo por ingresos,24 porque han mejorado los ingresos de la economía, en general, lo que de alguna forma ha redundado en el ingreso de las ocupadas. 24 Ver MTPE (2008), “Informe Anual de la Mujer 2007”. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 34 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 16 Perú: PEA por niveles de empleo, según sexo y rangos de edad, 2008 (En porcentajes) Sexo y rangos de edad Total Desempleo Subempleo Por horas Por ingresos Empleo adecuado PEA Total 100,0 4,2 9,7 36,4 49,7 Hombre De 14 a 29 años De 30 a 45 años De 46 a 55 años De 56 a 64 años De 65 y más años 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 3,7 7,1 1,7 1,6 3,1 1,5 7,1 9,8 4,2 5,5 8,9 7,8 34,5 36,9 31,3 30,6 35,0 44,5 54,8 46,2 62,8 62,3 53,1 46,2 Mujer De 14 a 29 años De 30 a 45 años De 46 a 55 años De 56 a 64 años De 65 y más años 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 4,8 9,0 3,1 2,9 1,5 1,0 12,9 12,4 15,2 12,6 10,7 7,6 38,7 38,7 36,5 38,9 44,9 42,0 43,6 39,9 45,2 45,7 43,0 49,4 Sin embargo, el subempleo sigue siendo un problema ya que las personas subempleadas son todas aquellas que se encuentran laborando en un empleo donde sus ingresos son insuficientes para acceder a una alimentación básica, así como deseando trabajar más horas para agenciarse de un mayor ingreso, no lo pueden hacer. Respecto al tipo de subempleo, tanto para hombres como para mujeres el más importante es el subempleo por ingresos, aunque en el caso de las mujeres se observan tasas mayores de subempleo por horas que las que se observan en los hombres. Cabe destacar que, el subempleo es un problema al que enfrentan ambos sexos debido a los altos niveles registrados Así también, la tasa de desempleo de las mujeres respecto al año 2006 no muestra un cambio importante por ser, en general, inercial o por mantenerse rígida a la baja. Sin embargo, como se puede observar en la evolución de las principales variables laborales, el empleo adecuado ha mantenido la tendencia ascendente de los años previos, como se puede ver en el gráfico Nº 8. 35 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 8 Tendencias de los niveles de empleo, 2008 36 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2006 – 2008. Elaboración: Propia 37 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 4. Características de las mujeres ocupadas en el Perú La PEA ocupada femenina está conformada por el conjunto de mujeres que trabaja en una actividad económica, sea o no remunerada en un determinado periodo de referencia. En el Perú, el 95,2% de la PEA femenina se encontró ocupada en el año 2008, cifra superior en 0,1 puntos porcentuales a la observada para el año 2006 (95,1%). 4.1 El empleo femenino según categoría ocupacional En el Perú, la PEA ocupada se encuentra concentrada en la categoría independiente (36,7%) y asalariado privado (30,9%). Según sexo, los hombres se concentran más en la categoría asalariado privado (38,2%), que sus pares mujeres, las cuales trabajan más como independientes (36,6%). Se aprecia también que, más del 50% de la mujeres trabajaría en condiciones laborales precarias (TFNR e independientes) y/o bajo la informalidad. Es decir, dicho porcentaje de mujeres no tendrían un trabajo decente y sus expectativas de desarrollo y para los hogares que sostienen no se vislumbraría un futuro mejor debido a que generalmente tienen baja productividad y por lo tanto, bajos ingresos laborales o ninguno, como es el caso de los TFNR. Cuadro Nº 17 Perú: PEA ocupada por sexo, según categoría ocupacional, 2008 (En porcentajes) Sexo Categoría ocupacional Total absoluto Total relativo Total 14 853 975 Hombres Mujeres 8 121 691 6 732 284 100,0 100,0 100,0 Asalariado público 7,7 7,9 7,5 Asalariado privado 30,9 38,2 22,0 Independiente 36,7 36,8 36,6 5,6 7,8 2,9 14,8 8,0 23,0 Trabajador del hogar 3,1 0,3 6,6 Otro 1,1 0,9 1,3 Empleador TFNR 1/ Nota: La categoría "otro", incluye a los practicantes y otros. La categoría "Asalariado", considera al empleado y obrero. 1/ Trabajador familiar no remunerado. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 38 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano En cuanto a la evolución de la PEA ocupada de los últimos 3 años se puede observar que hay una mayor participación laboral de las mujeres como trabajadoras independientes en los últimos tres años y una importante disminución en el grupo de mujeres que se dedican al trabajo familiar no remunerado, tal como se observa en el gráfico Nº 9. Gráfico Nº 9 Perú: Evolución de la PEA Ocupada por sexo, según categoría ocupacional 2006-2008 (En porcentajes) 2008 Mujeres Hom bres 2007 Mujeres Hom bres 2006 Mujeres Hom bres 0 5 10 A s alariado públic o 15 A s alariado priv ado 20 Independiente 25 Empleador 30 TFNR 1/ 35 Trabajador del hogar 40 45 Otro En cuanto a la distribución de la PEA femenina ocupada por estructura de mercado según ámbito geográfico encontramos que en el área urbana el grupo más representativo es el de las mujeres que tienen una actividad independiente no profesional (37%). En segundo lugar, el 16% de las mujeres se dedica a laborar en empresas urbanas de 2 a 9 trabajadores, del sector privado; y, un tercer grupo (10,2%), trabaja para el sector público urbano. En el caso del área rural, a diferencia de sus pares, un 49% de las mujeres son trabajadoras familiares no remuneradas. Luego se encuentran en orden de importancia, la actividad independiente no profesional (34%) y el trabajo en empresas de 2 a 9 trabajadores del sector privado (8,6%), tal como se puede observar en el siguiente cuadro. 39 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 18 Perú: PEA ocupada femenina por ámbito geográfico, según estructura de mercado, 2008 (En porcentajes) Ámbito geográfico Estructura de mercado Total Urbano Total Total relativo Sector público Sector privado De 2 a 9 trabajadores De 10 a 49 trabajadores De 50 y más trabajadores Independiente Profesional No Profesional TFNR 1/ Resto Rural 6 732 284 4 319 877 2 412 407 100,0 100,0 100,0 7,5 10,2 2,7 13,5 5,4 6,1 16,3 7,2 9,1 8,6 2,1 0,7 1,0 35,6 23,0 7,9 1,5 36,5 8,7 10,6 0,1 34,0 48,7 3,1 Nota: La categoría "Resto", incluye a los trabajadores del hogar, practicantes y otros. En el sector privado se incluyen a los empleadores. 1/ Trabajador Familiar No Remunerado. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. BOX Nº 3 Al consultar a los líderes políticos latinoamericanos sobre sus actitudes y opiniones acerca de la situación actual en sus respectivos países, de las desigualdades políticas entre hombres y mujeres, la paridad política como meta, y las acciones afirmativas (y las cuotas en particular) como instrumentos para alcanzar esa meta, se encontró que existe un respaldo mayoritario de los líderes regionales vinculados a la política y a las leyes que fijan cuotas para aumentar la presencia femenina en los parlamentos. Además, dicho aumento es un proceso que mayoritariamente se considera irreversible en la región. Esta actitud coincide con las de otras categorías de personas consultadas como los líderes de opinión y las personas pertenecientes a las élites académicas. Como era de esperarse, el respaldo a la adopción de leyes de cuotas en el corto plazo alcanza más del 80 % entre las mujeres y 58% entre los hombres. Asimismo, cuanto más específicas son las medidas para facilitar o aumentar la participación de las mujeres, menor es el respaldo que reciben entre los consultados. Los mayores aumentos porcentuales de la participación femenina en el parlamento entre 1997 y 2008 se registran en Costa Rica (21%), Ecuador (21%) y Perú (18%), mientras que países como Guatemala, Brasil y Colombia presentan decrecimientos en este indicador. Observatorio de igualdad de género en América Latina. CEPAL STAT 40 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 4.2. El empleo femenino según ramas de actividad económica Entre los años 2006 y 2008 se observa que hay una tendencia marcada en la orientación de la PEA femenina a trabajar en la actividad de establecimientos financieros y de seguros; y, servicios, principalmente en esta última rama, que emplea aproximadamente a un cuarto de esta población, porcentaje que se ha elevado en 2,5 puntos porcentuales en los últimos 3 años como se puede apreciar en el gráfico anterior. Otro sector que ha crecido es la rama de la industria en 1,23 puntos porcentuales. Una actividad que emplea a un 23% de la PEA femenina es la actividad Comercio al por menor, mientras que la rama de la agricultura, pesca y silvicultura ha empleado menos porcentaje de la PEA femenina, pasando de 33% a 29% tal como se aprecia en el gráfico Nº 10. Para el caso de los hombres, no se ve una recomposición de la PEA por rama de actividad económica salvo el caso de la agricultura, donde se observa 4,4 puntos porcentuales menos a la registrada en el 2006, al parecer se ha dado un desplazamiento de la PEA total de la actividad agropecuaria a otros actividades como tendencia para el total de la población. Cuadro Nº 19 Perú: PEA ocupada por sexo, según ramas de actividad económica, 2008 (En porcentajes) Ramas de actividad económica Total Hombre 14 853 975 8 121 691 6 732 284 100,0 100,0 35,4 29,0 Total relativo Agricultura,Ganadería,Pesca y Silvicultura Minería 1/ Industria Construcción Comercio por mayor Comercio por menor Transporte, almacenamiento y comunicaciones Establecimientos financieros y de seguros Servicios Hogar Sexo Total absoluto 4 831 453 Mujer 161 070 1,8 0,2 1 570 507 11,0 10,0 613 893 7,3 0,3 309 955 2,4 1,8 2 187 009 8,1 22,7 1 027 822 11,2 1,7 544 762 4,5 2,7 3 129 454 17,9 24,9 478 052 0,3 6,7 1/ Cifras referenciales. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 41 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 10 Perú: Evolución de participación en la PEA por sexo y ramas de actividad económica, 2006 – 2008 (En porcentajes) 45 40 35 Agricultura,Ganadería,Pesca y Silvicultura Minería 1/ 30 Industria 25 Construcción 20 Comercio por mayor Comercio por menor 15 Transporte, almacenamiento y comunicaciones Establecimientos financieros y de seguros Servicios 10 5 0 Hogar Hombres Mujeres Hombres 2006 2007 Mujeres Hombres Mujeres 2008 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2006 - 2008. Elaboración: Propia. Es importante analizar la evolución de la participación de la PEA por sexo y rama de actividad económica. La data 2006-2008 permite observar que hay una tendencia marcada de la orientación de la PEA femenina ha trabajar en comercio y servicios, principalmente, en esta última actividad, que emplea aproximadamente un cuarto de esta población, porcentaje que se ha elevado en 2,5 puntos porcentuales en los últimos 3 años como se puede apreciar en el gráfico anterior. Otra actividad que ha crecido de forma relativa es la rama de la industria en 1,23 puntos porcentuales. Una rama de actividad que emplea a un 22% de la PEA es la actividad comercio al por menor. Mientras que la rama de la agricultura, pesca y silvicultura a empleado menos porcentaje de la PEA femenina, pasando de 33% a 29%. Para el caso de los hombres no se ve una recomposición de la PEA por rama de actividad económica salvo el caso de la agricultura, donde se observa 4,4 puntos porcentuales menos a la registrada en el año 2006, al parecer se ha dado un desplazamiento de la PEA de la actividad agropecuaria a otra actividades económicas. 4.3 Empleo femenino según estructura de mercado La PEA ocupada por sexo según estructura de mercado indica que la importancia relativa del sector privado en el caso de los hombres es mayor de manera significativa para todos los tamaños de empresa con respecto al caso de las mujeres. Las categorías en las cuales las mujeres tienen una participación mayor a los hombres corresponden a los trabajadores familiares no remunerados. A modo de contraste, en el caso de los trabajadores independientes, tanto la importancia de la categoría como de los rubros que la conforman (profesionales y no profesionales) son similares para ambos sexos. 42 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 20 Perú: PEA ocupada por sexo, según estructura de mercado, 2008 (En porcentajes) Estructura de mercado Total absoluto Total 14 853 975 Total relativo Sexo Hombre Mujer 8 121 691 6 732 284 100,0 100,0 Sector público 1 151 148 7,9 7,5 Sector privado De 2 a 9 trabajadores De 10 a 49 trabajadores De 50 y más trabajadores 2 959 494 1 092 466 1 364 847 25,2 9,0 11,8 13,5 5,4 6,1 190 395 5 265 419 2 202 742 1,5 35,3 8,0 1,0 35,6 23,0 627 466 1,2 7,9 Independiente Profesional No profesional TFNR 1/ Resto Nota: La categoría "resto", incluye a los trabajadores del hogar, practicantes y otros. El sector privado incluye a los empleadores. 1/ Trabajador familiar no remunerado. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. En cuanto a la evolución de la estructura de mercado por sexo entre los años 2006 y 2008, esta no ha variado significativamente, ya que las mujeres han laborado como TFNR y en empresas privadas de 2 a 9 trabajadores, principalmente, en el periodo 2006-2008. Sin embargo, se nota una ligera disminución en la participación de las mujeres como TFNR en los años 2007 y 2008. En el caso de los hombres tampoco existen cambios importantes, ya que la han laborado como trabajadores independientes no profesionales y en empresas de 2 a 9 trabajadores, primordialmente. 43 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 11 Perú: Evolución de la PEA ocupada por sexo, según estructura de mercado, 2006-2008 (En porcentajes) 40 35 30 25 20 15 10 5 0 Hombre Mujer Hombre 2006 Mujer Hombre 2007 Mujer 2008 Sector público De 2 a 9 trabajadores De 10 a 49 trabajadores De 50 y más trabajadores Profesional No profesional TFNR 1/ Resto Nota: La categoría "resto", incluye a los trabajadores del hogar, practicantes y otros. El sector privado incluye a los empleadores. 1/ Trabajador familiar no remunerado. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, Continua 2006, 2007, 2008. Elaboración: Propia En el caso de la composición de la PEA femenina ocupada de Lima Metropolitana, para el periodo 1996-2008, las mujeres han laborado principalmente como trabajadoras independientes (34,4% en promedio) y en empresas de menos de 50 trabajadores (25,9%). En el caso de las trabajadoras independientes, dicha participación se ha reducido desde un 38,8% en el año 1996 a 29,3% en el año 2008. Mientras que, en el caso de la participación de las mujeres ocupadas en empresas de menos de 50 trabajadores se puede observar dos tramos en su participación en la PEA ocupada femenina. El primer tramo, entre los años 1996 y 2001 se presentó una serie de altibajos en dicha participación que terminó en una caída final del orden de 21,8% en el año 2001 y es a partir de dicho año que, la participación de las mujeres que laboran en empresas de menos de 50 trabajadores empieza a incrementarse constantemente hasta llegar a 30,5%. Otro caso interesante, es el de las trabajadoras familiares no remuneradas, donde se da un caso similar al de las trabajadoras independientes, pues a pesar de haber cierta variabilidad, en general, se da una tendencia decreciente en el periodo 1996-2008, llegando el año 2008 a representar solamente 4,5% del total. 44 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 12 Lima Metropolitana: PEA ocupada femenina según estructura de mercado, 1996-2008 (En porcentajes) 100% 10,8 12,2 12,6 9,1 7,2 90% 7,0 80% 15,2 7,4 12,5 14,7 12,9 13,4 13,5 8,4 7,1 7,0 6,2 7,4 37,3 35,3 34,6 70% 60% 38,8 37,2 34,2 30,3 36,8 36,0 10,6 11,8 11,6 11,8 7,0 6,1 4,1 4,5 31,6 32,3 33,5 29,3 13,1 13,4 13,0 29,1 28,0 30,0 30,5 50% 40% 14,6 13,1 25,0 23,4 9,1 6,2 1996 1997 9,2 10,2 15,5 10,4 10,0 10,4 12,5 10,4 25,7 23,5 21,8 22,6 24,6 27,3 7,9 8,2 8,4 10,3 9,7 8,1 6,8 8,5 8,3 7,9 8,5 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 30% 20% 25,0 10% 0% Informe Anual 2008 LaMujer enelMer cado Labor alPeruano 1 M inisterio deTrab ajoyPromocióndelEmpleo S e c to r públic o E m pre s a s priv a da s c o n m e no s de 5 0 tra ba ja do re s E m pre s a s priv a da s de 5 0 y má s t ra ba ja do re s Inde pe ndie nt e s T ra ba ja do r f a milia r no re m une ra do R e s to 1/ Notas: El tamaño de empresa se define por el volumen de trabajadores; así la microempresa está conformada por unidades empresariales que tienen 2 a 9 trabajadores, la pequeña empresa se sitúa en el rango de 10 a 49 trabajadores y la mediana y grande de 50 y más trabajadores. 1/ Resto: Incluye a las trabajadoras del hogar y otros Fuente: Convenio MTPS – INEI. Encuesta Nacional de Hogares, III T, 1996-2001. MTPE - Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo, 2002-2008. Elaboración: MTPE - Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL). En conclusión, se observa que la PEA femenina ocupada en Lima Metropolitana ha sufrido una recomposición importante, después de analizar las tendencias de acuerdo a la estructura de mercado, en donde su participación predomina en las empresas de 50 a más trabajadores, las cuales son actividades muchos más atractivas que las relacionadas con el trabajo independiente y como Trabajadoras Familiares No Remuneradas (TFNR). 45 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano BOX Nº 4 La década de 1990 se caracterizó por la participación creciente de la mujer en el mercado de trabajo. Entre 1993 y el 2001, las mujeres peruanas en edad de trabajar incrementaron su inserción en el mercado de 35% a 57%, mientras que en el mismo periodo la inserción masculina aumentó de 73% a 79%. El crecimiento de la oferta laboral se dio en un contexto de reestructuración de la economía, decrecimiento del empleo productivo e incremento vertiginosos de la informalidad. Por ello, al mayor parte de dicha oferta fue dirigida a trabajos de baja productividad, con exigencias mínimas de capacitación y carentes de protección y previsión social. El porcentaje de empleadas asalariadas en el sector no agrícola se mantuvo casi constante entre 1991 y el 2002, aunque aumentaron su participación en empleos calificados de 81% a 91% entre 1998 y el 2002. Por otro lado, durante toda la década, las mujeres predominaron en los grupos de vendedores no ambulantes y trabajadores manuales, dentro de los que se considera a los vendedores ambulantes y proveedores de servicios. Así pues, la mayoría de las mujeres entra al mercado laboral en una situación de inequidades persistentes. Los ingresos percibidos por la mujer son menores que los del hombre, aun en grupos de ocupación e instrucción similares. Además, la brecha entre los ingresos tiende a acentuarse conforme disminuye el nivel de calificación requerido. En cuanto al acceso al poder político, el porcentaje de puestos ocupados por mujeres en procesos electorales parlamentarios aumentó de 7,5% en el periodo 1990-1992 a 11,7% entre 2000 y 2001. ONU/Perú. Informe 2004 4.4. Horas trabajadas de la PEA ocupada femenina Informe Anual2008 LaMujer enel Mercado Laboral Peru ano 1 Ministerio deTrabajoyPro mo ciónd el Empleo La literatura que analiza el tema del empleo discriminando por sexo o por raza, encuentra que hay fuertes brechas en el ingreso y el número de horas trabajadas entre hombres y mujeres. Tal como se puede ver en el cuadro Nº 21, los hombres en promedio trabajan más horas (49 horas a la semana) a la semana que las mujeres (42 horas a la semana). Según estructura de mercado, para ambos casos el tamaño de empresa donde trabajan más horas (tanto hombres como mujeres) es en empresas de 50 y más trabajadores (54 horas a la semana), seguido de empresas de 2 y 9 trabajadores; y, 10 a 49 trabajadores (ambas con 49 horas a la semana). Según sexo, también es el sector privado donde los hombres y las mujeres trabajan más horas. En el caso de los hombres, ellos laboran más horas en empresas de 50 y más trabajadores (56 horas a la semana), mientras que las mujeres también trabajan más horas en dicha tamaño de empresa (49 horas a la semana). Así también, los hombres emplean menos horas de trabajo trabajando como Trabajadores Familiares No Remunerados (en promedio 37 horas a la semana); mientras que las mujeres ocupadas laboran menos tiempo a la semana como independientes profesionales y TFNR (35 horas a la semana). 46 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 4.4. Horas trabajadas de la PEA ocupada femenina La literatura que analiza el tema del empleo discriminando por sexo o por raza, encuentra que hay fuertes brechas en el ingreso y el número de horas trabajadas entre hombres y mujeres. Tal como se puede ver en el cuadro Nº 21, los hombres en promedio trabajan más horas (49 horas a la semana) a la semana que las mujeres (42 horas a la semana). Según estructura de mercado, para ambos casos el tamaño de empresa donde trabajan más horas (tanto hombres como mujeres) es en empresas de 50 y más trabajadores (54 horas a la semana), seguido de empresas de 2 y 9 trabajadores; y, 10 a 49 trabajadores (ambas con 49 horas a la semana). Según sexo, también es el sector privado donde los hombres y las mujeres trabajan más horas. En el caso de los hombres, ellos laboran más horas en empresas de 50 y más trabajadores (56 horas a la semana), mientras que las mujeres también trabajan más horas en dicha tamaño de empresa (49 horas a la semana). Así también, los hombres emplean menos horas de trabajo trabajando como Trabajadores Familiares No Remunerados (en promedio 37 horas a la semana); mientras que las mujeres ocupadas laboran menos tiempo a la semana como independientes profesionales y TFNR (35 horas a la semana). Cuadro Nº 21 Perú: Horas promedio de trabajo a la semana de la PEA ocupada por sexo, según estructura de mercado, 2008 Sexo Estructura de mercado Total Hombre Mujer Total 46 49 42 Sector público 47 51 41 Sector privado De 2 a 9 trabajadores De 10 a 49 trabajadores De 50 a más trabajadores 49 49 54 50 51 56 46 44 49 Independiente Profesional No profesional 37 46 38 50 35 42 TFNR 1/ 36 37 35 Resto 46 37 47 Nota: La categoría "resto", incluye a los trabajadores del hogar, practicantes y otros. 1/ Trabajador familiar no remunerado. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 47 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano En cuanto a la evolución de estos indicadores, se puede observar un incremento de una hora de trabajo a la semana entre 2006 y 2008. Así también, entre los años 2006 y 2007, todos los trabajadores del sector privado y público, hombre o mujeres incrementaron sus horas de trabajo en promedio. Sin embargo, en el año 2008 se ha notado una reducción de las horas de trabajo en el sector privado y público. Así también los TFNR, generalmente, trabajaron menos horas a la semana al igual que los independientes profesionales entre los años 2006 y 2008. Cuadro Nº 22 Perú: Evolución de las horas promedio de trabajo a la semana de la PEA ocupada por sexo, según estructura de mercado, 2008 2006 2007 2008 Estructura de mercado Hombre Mujer Hombre Mujer Hombre Mujer Sector público 50 40 51 41 51 41 Sector privado De 9 a 10 trabajadores De 10 a 49 trabajadores De 50 a más trabajadores 49 51 56 46 45 50 50 52 57 47 45 51 50 51 56 46 44 49 Independiente Profesional No profesional 41 49 33 43 41 50 32 43 38 50 35 42 TFNR 1/ Resto 36 50 34 50 36 35 37 35 36 46 37 47 Nota: La categoría "resto", incluye a los trabajadores del hogar, practicantes y otros. 1/ Trabajador Familiar No Remunerado. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, Continua 2006, 2007, 2008. Elaboración: MTPE – Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL) En un análisis del número de horas trabajadas según ámbito geográfico, se observa que el ámbito urbano registra en promedio un mayor número de horas trabajadas a diferencia del promedio registrado en el sector rural, siendo esta diferencia de aproximadamente 6 horas. Las mayores brechas de horas de trabajo a la semana se encuentran en las mujeres ocupadas como profesionales independientes (13 horas) y trabajadoras familiares no remuneradas (6 horas). Esto estaría demostrando que en áreas rurales hay una menor oferta laboral (en número de horas) de trabajo calificado que el observado en el área urbana. 48 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 23 Perú: Horas promedio de trabajo a la semana de la PEA ocupada femenina por ámbito geográfico, según estructura de mercado, 2008 Ámbito geográfico Estructura de mercado Total Urbano Rural Total 46 44 38 Sector público 41 41 42 Sector privado De 2 a 9 trabajadores De 10 a 49 trabajadores De 50 a más trabajadores 46 44 49 48 45 49 40 44 51 Independiente Profesional No Profesional 35 42 35 43 22 41 TFNR 1/ 35 Resto 47 40 47 34 47 Nota: La categoría "resto", incluye a los practicantes y otros (no especifica). 1/ Trabajador familiar no remunerado. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. Informe Anual 2008 LaMujerenel Mercado Labor alPeruano 1 M inisterio deTrab ajoyPro mo cióndelEmpleo 4.5. La informalidad del empleo La informalidad en el mercado de trabajo es un fenómeno estructural que se manifiesta desde hace mucho tiempo en el Perú (ver gráfico 15). Este se caracteriza porque los trabajadores están insertos en actividades con baja productividad, así como por la ausencia de protección social, que los ubica en una situación precaria. En este sentido, el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, define como parte del sector informal a los trabajadores de las empresas de 2 a 9 trabajadores, los independientes no calificados y a los Trabajadores Familiares No Remunerados (TFNR).25 Dada esta definición se ha encontrado, que el ingreso laboral promedio correspondiente al sector formal es significativamente mayor al registrado en el sector informal (más del doble), siguiendo con la tendencia que se ha manifestado en los últimos años. Adicionalmente se observan diferencias por sexo entre ambos sectores y esta es significativa, siendo los hombres los que obtienen mayores ingresos. Tal como se puede observar en el siguiente gráfico, hay diferencias también por sexo, en el caso de los varones las diferencias entre los ingresos obtenidos entre el sector formal e informal es de 159%; mientras que, en el caso de las mujeres es superior a 154%. Dentro de esta escala de informalidad es evidente que la población que obtiene menores ingresos son las mujeres empleadas en el sector informal, que concentra un buen porcentaje de la PEA ocupada femenina. 25 Para una discusión y formas de medición recomendadas por la OIT y la Conferencia Internacional de Estadísticos de Trabajo (CIET) ver MTPE (2008) “Informe Anual del Empleo 2007” Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 49 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Grafico Nº 14 Perú: Ingreso laboral promedio de los trabajadores formales e informales, según sexo del jefe de hogar, 2008 (En nuevos soles) 2500 Nuevos soles 2000 1500 1935,7 1339,8 1102,3 1000 746,6 682,3 526,7 500 0 Formal Informal Hombre Total Mujer Nota: Se excluye a los Trabajadores Familiares no Remunerados en el cálculo del ingreso promedio. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. En cuanto a la evolución de la informalidad en Lima Metropolitana, según la Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo del MTPE, entre el periodo 1987-2008, se puede observar que la informalidad crece desde 1989 luego alcanza un nivel máximo, en el año 2004 para luego disminuir en adelante. El grado de informalidad es tan grande, que en este sector labora más del 50% de la PEA ocupada (ver gráfico Nº15). Como se puede apreciar, en el año 2004 se presenta la tasa más alta (64%), luego disminuye en el año 2008, por lo que se podría decir que la PEA ocupada haya pasado a laborar al sector formal. Por lo tanto, se podría afirmar que el empleo formal se estuvo incrementando, ciertamente en variaciones discretas. 50 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 15 Lima Metropolitana: PEA ocupada según sector, 1987-2008 (En porcentajes) 70,0 60,0 Porcentaje 50,0 40,0 30,0 20,0 10,0 Informal 2008 2006 2004 2002 2000 1998 1996 1994 1992 1990 1987 0,0 Formal Fuente: MTPE. Encuesta de Niveles de Empleo, 1986-1995. Convenio MTPS-INEI. Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO), continua, III trimestre 1996-2001. MTPE. Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo 2002-2008. Elaboración: MTPE - Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL). 4.7 Protección social de la PEA femenina ocupada En esta parte se abordará el tema de la protección social en salud de la mujer; es decir, el nivel de acceso efectivo, oportuno y de calidad a un bajo costo, al momento de la utilización y sin discriminación a los servicios de salud, ya sea para el caso de prevención, diagnostico, tratamiento y rehabilitación. Dadas las características de lo que implica la definición de protección social en salud, este tipo de servicios en la mayoría de casos esta asociado a un sistema nacional de salud, que garantiza el acceso de la población a estos servicios con características adecuadas. La información que se desarrolla en esta parte, da cuenta de un deficiente sistema de protección social. Como se puede comprobar en el cuadro N° 24, el 82,8% de la PEA ocupada femenina no está afiliada al sistema de pensiones. Según sexo, la proporción de hombres ocupados y afiliados a un sistema de pensiones (30,7%) es mayor que en el caso de sus pares mujeres (17,2%). 51 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 24 Perú: Población ocupada por sexo, según condición de afiliación al sistema de pensiones y seguridad social, 2008 (En porcentajes) Condición de afiliación Sexo Total Hombre Mujer 100,0 100,0 100,0 No está afiliado Si está afiliado 75,4 69,3 82,8 24,6 30,7 17,2 Seguro de salud 2/ 100,0 100,0 100,0 No está afiliado Si está afiliado 55,9 58,1 53,1 44,1 41,9 46,9 Sistema de pensiones 1/ 1/ Incluye a los trabajadores con Sistema privado de pensiones (AFP), Sistema Nacional de Pensiones: ley 19990, Sistema Nacional de Pensiones: Ley 20530 (Cédula viva) y otros. 2/ Incluye a los trabajadores con seguro de ESSALUD, seguro privado de salud, entidad prestadora de salud, FFAA. y Policiales, seguro integral de salud, seguro universitario, seguro escolar privado y otros. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de y Pobreza, continua 2008. Elaboración: MTPE – Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL) En lo que respecta al seguro de salud, la PEA ocupada goza de una mayor proporción de afiliación a un seguro de salud sea público o privado que en el caso de afiliación al sistema de pensiones. Sin embargo, existe aún una importante proporción de trabajadores (55,9%) que no estarían protegidos ante una eventual enfermedad que atente contra su salud en general, sobre todo, de enfermedades crónicas cuyo costo de tratamiento es muy caro. Según sexo, el 46,9% de las mujeres ocupadas tuvieron un seguro de salud en el año 2008, mientras que en el caso de los hombres fue de 41,9%. Cabe anotar que estas tasas de acceso a un seguro de salud son elevadas debido principalmente al seguro integral de salud (SIS), que en general más que un seguro de salud funcionando con aportes mensuales o periódicos de los trabajadores, es más un subsidio a la salud sobre todo de las personas más necesitadas o de bajos recursos económicos. 52 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 5. La Población Femenina en Edad de Trabajar, capital humano y adecuación ocupacional La definición de capital humano está asociada a la capacidad que tienen los trabajadores y a su formación para generar un nivel de productividad aceptable en el lugar donde laboran. Para fines del análisis se usa con frecuencia como indicador del capital humano de los trabajadores, el nivel educativo y la asistencia a cursos de capacitación, dado que el aprendizaje puede ser continuo. 5.1 Condición de actividad y nivel educativo El 67,1% de la población femenina en edad de trabajar en el año 2008 tuvo un nivel educativo de secundaria completa o menos, mientras que el 10,8% no tuvo educación básica ni superior. Así, las mujeres en edad de trabajar que no tienen algún nivel educativo mínimo, no estarían aptas y estarían en desventaja real para insertarse al mercado de trabajo de manera adecuada debido a las exigencias productivas del mercado de trabajo sobre todo para conseguir un empleo decente. En el otro extremo tenemos a la PET femenina con estudios superiores que es aproximadamente una quinta parte de la PET femenina total (22%), este representa el capital humano más capacitado con que cuenta el país. La distribución de la población femenina según condición de actividad y nivel educativo varía significativamente. Así, el 24,1% de la población femenina ocupada tiene educación superior y el otro 20,2% secundaria completa. Sin embargo, las cifras también demuestran que un 63,0% de la población femenina desocupada tiene un nivel de educación básica donde prima la educación secundaria (53,8%). En el caso de la mujeres inactivas, también se concentran en el nivel educativo básico (72,1%), donde las mujeres con nivel educativo secundaria representan el 46% de las inactivas, quizás este sea un factor importante de la inactividad ya que un la educación es una de las variables que generalmente permiten la inserción al mercado laboral de las personas. Cuadro Nº 25 Perú: Distribución de la población en edad de trabajar femenina por condición de actividad, según nivel educativo, 2008 (En porcentajes) Condición de actividad Nivel educativo Total Ocupado Desocupado Inactivo 6 732 284 340 159 3 804 181 100,0 100,0 100,0 100,0 Sin nivel 10,8 11,3 1,1 10,6 Educación básica 67,1 64,5 63,0 72,1 16,2 11,7 17,7 21,5 17,9 12 14,4 20,2 5,1 4,1 21,6 32,2 14,2 11,9 23,3 22,7 22,1 24,1 35,9 17,3 4,0 7,4 4,3 6,5 4 8,2 3,7 8,2 6 10,9 9,6 9,4 3,7 5,5 4,8 3,3 Total absoluto Total relativo Primaria incompleta Primaria completa Secundaria incompleta Secundaria completa Educación superior Superior no universitaria incompleta Superior no universitaria completa Superior universitaria incompleta Superior universitaria completa 10 876 624 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, Continua 2008 Elaboración: Propia 53 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 5.2 La educación de la PET por rangos de edad En general, las mujeres en edad de trabajar sea en cualquier rango de edad posee mayoritariamente un nivel básico de educación y principalmente educación secundaria. Esta situación es más resaltante en el caso de las mujeres de 14 a 29 años ya que 7 de cada 10 mujeres de 14 a 29 años de edad tuvieron a lo más educación básica (principalmente educación secundaria), y tan sólo 3 de cada 10 mujeres de 14 a 29 años estudiaron nivel superior. Esto es preocupante ya que en el Perú la mayoría de la PET femenina (40%) son mujeres jóvenes de 14 a 29 años de edad. Otro grupo importante en cuanto a edad lo representan las personas de 30 a 45 años de edad (alrededor de 3 millones de personas), donde el 65,1% tiene educación básica, proporción parecida a las mujeres de 46 a 55 años y de 56 a 64 años. Cuadro Nº 26 Perú: Población en edad de trabajar femenina por rangos de edad, según nivel educativo, 2008 (En porcentajes) Rangos de edad Nivel educativo Total absoluto Total relativo Sin nivel Educación básica Primaria incompleta Primaria completa Secundaria incompleta Secundaria completa Educación superior Superior no universitaria Superior universitaria Total 10 876 624 De 14 a 29 años De 30 a 45 De 46 a 55 De 56 a 64 De 65 y más años 4 100 756 3 149 664 1 494 056 927 123 1 205 026 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 10,8 1,4 5,8 12,4 24,7 43,1 67,1 74,8 65,1 67,4 60,8 50,9 16,2 11,7 17,7 21,5 8,1 8,3 30,1 28,3 17,0 12,6 13,4 22,1 22,2 15,0 10,5 19,7 25,2 16,6 7,3 11,6 27,4 13,3 4,0 6,2 22,1 23,8 29,2 20,2 14,5 6,0 11,3 10,8 12,2 11,7 16,1 13,1 9,6 10,7 5,5 9,0 2,8 3,2 Nota: Superior no universitaria incluye a las mujeres con nivel de educación superior no universitaria completa e incompleta; y superior universitaria a las mujeres con nivel superior completa e incompleta. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 54 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 5.3 Educación por área de residencia Si bien en el área urbana se concentran más las mujeres en edad de trabajar (más de 7 millones) que en el área rural (más de 3 millones), la realidad educativa de las mujeres es diferente y significativa en cada área. Una primera y significativa diferencia entre ambas área de residencia es que en el área rural, existe una mayor proporción de mujeres en edad de trabajar analfabetas, es decir no tienen ningún nivel educativo. También, en el área urbana 6 de cada 10 mujeres en edad de trabajar tienen educación básica, mientras que en el área rural, 7 de cada 10 poseen educación básica. Sin embargo, en el área rural sólo el 9,6% de las mujeres tuvo secundaria completa, y, en el caso del área urbana esta proporción es de 26,6%. En cuanto a la educación superior recibida, en el área urbana el 29,8% de las mujeres tuvo educación superior, mientras que en el área rural tan sólo el 4,4% de las mujeres poseen educación superior y principalmente educación superior no universitaria completa e incompleta (3,2%). Todo esto configura una realidad que contribuye al atraso en el desarrollo de la mujer y de su posible inserción productiva o generación de recursos económicos. Cuadro Nº 27 Perú: población femenina en edad de trabajar por ámbito geográfico, según nivel educativo, 2008 (En porcentajes Nivel educativo Total Área de residencia Urbano Total 10 876 624 Total relativo Rural 7 577 283 3 299 341 100,0 100,0 Sin nivel 1 171 235 5,4 23,1 Educación básica 7 300 433 64,8 72,5 1 760 825 1 274 967 1 929 900 2 334 740 10,6 9,7 17,9 26,6 29,0 16,4 17,5 9,6 2 404 956 29,8 4,4 430 937 799 579 465 990 708 449 5,1 9,7 5,9 9,1 1,3 1,9 0,6 0,6 Primaria incompleta Primaria completa Secundaria incompleta Secundaria completa Educación superior Superior no universitaria incompleta Superior no universitaria completa Superior universitaria incompleta Superior universitaria completa Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 55 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 5.4 La PET femenina y capital humano en Lima Metropolitana. La población en edad de trabajar de Lima Metropolitana en el año 2008 fue de 6 millones 489 mil 756 personas según la Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo del MTPE. Esta se encuentra casi igualmente distribuida según sexo. Sin embargo, según su participación en cursos de capacitación, el 66,5% de la PET no asistió a ningún curso de capacitación en el año 2008. Así también tenemos que, el 34,5% de las mujeres en edad de trabajar manifestaron haber asistido a algún curso de capacitación; siendo el porcentaje de hombres similar (32,5%), ver cuadro N° 28. Cuadro Nº 28 Lima Metropolitana: Distribución de la población en edad de trabajar que asiste a cursos de capacitación por sexo, 2008 (En porcentajes) Condicíon de asistencia Sexo Total Total Total relativo Hombre Mujer 6 489 756 3 134 584 3 355 172 100,0 33,5 66,5 100,0 32,5 67,5 100,0 34,5 65,5 Asiste No asiste Fuente: MTPE - Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo, 2008. Elaboración: Propia. Según condición de actividad se puede notar que, del total de las mujeres en edad de trabajar que asistieron a un curso de capacitación (1 millón 156 mil 372 mujeres), la mayoría estuvo ocupada o inactiva. Según rango de edad, una importante proporción fueron mujeres jóvenes de 14 a 29 años (alrededor de 490 mil personas), siguiendo en orden de importancia las mujeres de 30 a 45 años (aproximadamente 421 mil personas). Esta misma concentración por rango de edad se presenta cuando analizamos la condición de actividad. Así, los ocupados que llevaron algún curso de capacitación se concentraron más en el rango de edad de 30 a 45 años, mientras que en el caso de los desocupados o inactivos se concentraron entre los 14 y 29 años de edad. Cuadro Nº 29 Lima Metropolitana: Población en edad de trabajar femenina que asiste a cursos de capacitación, por condición de actividad, según rangos de edad, 2008 Condición de actividad Rangos de edad Total De 14 a 29 años De 30 a 45 años De 46 a 55 años De 56 a 64 años De 65 a más años Total Ocupada Desocupada Inactiva 1 156 372 709 386 63 650 383 336 490 309 421 342 136 280 64 145 44 295 280 547 294 501 95 926 27 726 10 687 40 125 17 655 4 253 1 616 - 169 636 109 187 36 100 34 803 33 609 Fuente: MTPE - Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo, 2008. Elaboración: Propia. 56 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Por otro lado, el mercado de trabajo no puede ser tratado como un mercado de bienes o servicios donde se intercambian bienes por dinero, pues en este caso el bien entregado por los oferentes (mano de obra) no puede estar desligado del oferente mismo. Además, las empresas demandan servicios profesionales o no profesionales específicos que les permitan satisfacer sus requerimientos de mano de obra y así elevar la productividad y maximizar beneficios, con el fin de ir mejorando y superando las expectativas de los consumidores a los que atienden. En general, los ocupados podrían ser trabajadores calificados como no calificados, esto debido a que habrían acumulado algún nivel de capital humano o ninguno, respectivamente. Para obtener capital humano, las personas, generalmente, acceden al mercado formativo (o educativo), donde participan como ofertantes de formación para el trabajo como los Centros Tecnológicos Productivos (CETPROs), los Centros Educativos Ocupacionales (CEOs), los Institutos Superiores Tecnológicos (ISTs), los Institutos Superiores Pedagógicos, Institutos de Formación Artística, y las universidades. Es de suma importancia, que el sistema productivo y el formativo se interrelacionen, articulando lo que las empresas demandan con lo que las instituciones formativas ofrecen para lograr finalmente que la producción y el bienestar se maximicen. No obstante, en nuestro país la articulación entre oferta formativa y demanda laboral es débil debido a factores como el exceso de oferta laboral, la falta de adaptación del sistema educativo y formativo a las demandas del sector empresarial, la deficiente calidad de las carreras ofertadas, la ampliación de la cobertura de la educación técnica y el incremento de universidades. En general, la PET o PEA femenina que culminó una carrera profesional universitaria o no universitaria se concentra en carreras ligadas al campo de la enfermería, ciencias sociales, administrativas, secretariales y docencia. En referencia a las mujeres que se insertaron al mercado laboral y que culminaron un estudio superior se observa que principalmente se concentran en grupos profesionales tales como personal de enfermería de nivel medio (técnico) y partera (16,0%), administración de empresas, contadores y economistas (12,2%); técnicos contables y técnicos en administración (11,3%); secretarias y archivistas (11,1%) y profesores de educación inicial o pre escolar (10,5%). Cuadro Nº 30 Lima Metropolitana: Distribución de la PET, PEA y la población ocupada femenina con estudios superiores completos según grupos de carreras profesionales, 2008 (En porcentajes) Grupos de carrera profesionales Total absoluto Total relativo PET PEA PEA ocupada 547 455 394 458 374 242 100,0 100,0 100,0 Personal de enfermería de nivel medio (técnico) y partera (248) 18,1 17,1 16,0 Administración de empresas / Contadores / Economistas (161, 162 y 163) 12,0 12,5 12,2 Técnicos contables / Técnicos en administración (272 y 273) 10,4 10,7 11,3 Secretarias y archivistas (291) 12,9 11,1 11,1 Profesores de educación inicial o pre-escolar (154) 10,1 10,7 10,5 Profesores y/o maestros de primaria (153) 10,0 9,5 9,7 Médicos / Personal de enfermería de nivel superior (141 y 147) 6,9 7,9 8,3 Profesores de educación secundaria y básica (152) 8,2 7,6 8,0 Técnicos en programación informática (214 y 215) 1/ 7,0 7,3 7,0 Abogados (165) 2/ 4,4 5,6 5,9 Nota: se muestra el código de ocupaciones a tres dígitos entre paréntesis 1/ Incluye a los profesionales técnicos en control de equipos infórmáticos 2/ Cifras referencial por tener pocos casos en la muestra. Fuente: MTPE - Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo, 2008. Elaboración: Propia. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 57 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 5.5 La subutilización profesional La adecuación ocupacional de las personas que estudian una carrera profesional universitaria o no universitaria, es un tema importante desde que muchas personas invierten tiempo y dinero en estudiar, muchas veces a expensas de otras necesidades personales o familiares. Así también, la sociedad destina muchos recursos públicos y privados en la formación profesional esperando que estos contribuyan a su desarrollo personal y de la misma sociedad. En ese sentido cabe siempre evaluar si realmente las personas que laboran trabajan en ocupaciones que realmente requieren el nivel de formación que posee la persona o no. En el fondo lo que se quiere es saber si el sistema formativo genera realmente las carreras profesionales que requiere el sistema productivo o las empresas. Para estudiar y estimar la adecuación ocupacional o la posible desarticulación entre el sistema formativo y el productivo, el Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL), creó un indicador de niveles de adecuación ocupacional que consiste en tres caracterizaciones: - Sobreutilizado, cuando el trabajador se desempeña en una ocupación que requiere un mayor nivel de formación que el adquirido - Subutilizado, cuando desempeña una ocupación que requiere menor nivel de formación que el adquirido - Adecuadamente utilizado, cuando el nivel de formación adquirido y el requerido por la ocupación son compatibles. Informe Anual2008 LaMujer enel Mercado Laboral Peru ano 1 Ministerio deTrabajoyPro mo ciónd el Empleo Estos indicadores muestran que “el esfuerzo y dedicación de quienes estudian una carrera profesional no se concreta en una adecuada inserción laboral al mercado de trabajo. Esto es más notorio en la ciudad de Lima Metropolitana ya que debido al centralismo concentra la gran mayoría de universidades e institutos de formación profesional” 26 En ese sentido, tenemos que las carreras profesionales donde las mujeres tienen mayor nivel de subutilización profesional son en las carreras de técnicos en ciencias físicas, químicas, matemática, estadística e informática (74,3%); técnicos en economía, administración de empresas, derecho y afines (70,8%); técnicos de nivel medio de la medicina moderna y la salud (55,6%). El menor grado de subutilización profesional se presenta en ciencias físicas, químicas, matemáticas, estadística e informática (28,4%) y profesoras (29,1). 26 Véase MTPE (2000; 2002), “Estimación de la compatibilidad entre la educación adquirida y la ocupación ejercida por los trabajadores” y “La adecuación ocupacional de los profesionales y técnicos”, en Boletín de Economía Laboral N º 17 y 22-24, respectivamente. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 58 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 31 Lima Metropolitana: Subutilización profesional de los ocupados con estudios superiores completos por sexo, según grupos de carreras profesionales, 2008 Hombre Mujer Grupos de carreras profesionales Absoluto Total 1/ Porcentual Absoluto Porcentual 42,1 200 867 40,5 204 829 Tecnicos en electricidad, electrónica, ingeniería y afines 49 250 45,7 - - Técnicos en ciencias físicas, químicas, matemática, estadisticas e informática 33 875 54,1 19 676 74,3 a/ Técnicos en economía, administración de empresas, derecho y afines 25 599 53,7 32 355 70,8 Técnicos de nivel medio de la medicina moderna y la salud - - 45 741 55,6 Técnicos de nivel medio de actividades artísticas, espectaculo y deportes 4/ - - 25 600 50,8 Profesoras (Maestras y/o Pedagogos) 3/ 57 302 36,2 60 504 29,1 Ciencias Físicas, químicas. Matemáticas, estadística e informática 2/ 34 841 29,1 20 954 28,4 a/ Nota: Considera a la población ocupada con nivel de educación superior completa, sin considerar a todas las profesiones relacionadas con las Fuerzas Armadas y policiales 1/ Excluye a todas las profesiones que no cuentan con casos necesarios en la muestra. 2/ Incluye al grupo profesional de Arquitectas, ingenieras y afines; profesionales en ciencias biológicas y otras disciplinas; y médicos y profesionales afines. 3/ Incluye a los profesionales del derecho, de las ciencias económicas y administrativas; y profesionales en ciencias sociales, humanas y religiosas. 4/ Incluye a las secretarias, telefonistas y otros técnicos de nivel medio. a/ Cifras referencial por tener pocos casos en la muestra. Fuente: MTPE - Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo, 2008. Elaboración: Propia. 59 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 6. Características de las mujeres auto empleadas y de sus negocios Las características del mercado laboral femenino han ido cambiando en los últimos años. La fuerza laboral femenina tiene un nivel de escolaridad más elevado y una mayor calificación profesional, respecto a años anteriores. Sin embargo, esto no se traduce en una retribución equitativa por su trabajo. Hay aún, un buen porcentaje de mujeres que laboran de forma independiente y/o en negocios, obteniendo por el desarrollo de los mismos, ingresos menores al que reciben los hombres. Se define como población independiente o con negocio propio a todos los que trabajan por cuenta propia y deciden iniciar su proyecto ocupacional bajo esta modalidad. Como se puede ver, en el Perú más de 6 millones de personas entre la PET se encuentran bajo esta condición, de éstas el 79,6% tienen esta actividad como actividad principal y sólo el 20,4% realiza un negocio independiente como actividad secundaria. Según ámbito geográfico, en el caso del área urbana es más importante la actividad independiente que en el caso rural. Así, 8 de cada 10 residentes urbanos informaron que el trabajo independiente era su actividad principal. Según sexo se muestra resultados similares tanto para hombres (82,2%) como para las mujeres independientes (81,7%) del área urbana. En el área rural, existen menos de trabajadores cuya actividad principal es el auto empleo (70,3%). Por sexo, 6 de cada 10 hombres independientes manifestaron que era su actividad principal el autoempleo, mientras que en el caso de las mujeres es mayor, ya que 8 de 10 mujeres tienen como actividad principal el ser autogestionarias en cuanto a generar su propios empleo. Cuadro Nº 32 Perú: Población con trabajo independiente por tipo de actividad, según área de residencia y sexo, 2008 Área de residencia y sexo Total absoluto Total relativo Actividad principal Actividad secundaria Total 6 193 625 100,0 79,6 20,4 Urbano Hombre Mujer Rural Hombre Mujer 4 956 934 2 397 874 2 559 059 1 236 691 519 717 716 974 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 81,9 82,2 81,7 70,3 57,5 79,6 18,1 17,8 18,3 29,7 42,5 20,4 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 60 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Las mujeres y hombres que dirigen su propio negocio son casi 5 millones, de ellos, el 46% son hombres mientras que el resto son mujeres emprendedoras. Así también se sabe que del total de hombres o mujeres dueños de su propio negocio, el 63,4% y el 61,3% no llevan las cuentas del mismo, respectivamente. Sólo el 2,9% de los hombres y el 1,3% de las mujeres registran sus cuentas por medio de libros o sistema contable. Estos resultados son esperables, dado que gran parte de estos negocios corresponden al sector informal y no son realizados en establecimientos comerciales. Cuadro Nº 33 Perú: Tipo de contabilidad del negocio que dirige el trabajador independiente en su actividad principal, según sexo 2008 (En porcentajes) Tipo de contabilidad Total absoluto Total relativo Por medio de libros o sistema contable Por medio de libros de ingresos y gastos Por medio de apuntes, registros o anotaciones No lleva las cuentas Total Hombre Mujer 4 930 360 2 270 212 2 660 148 100, 0 100,0 100,0 2,0 4,9 29,9 63,2 2,9 7,5 26,3 63,4 1,3 2,6 32,9 63,1 Nota: Se considera sólo a los trabajadores que tienen al negocio independiente como actividad principal. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. Según lugar de realización de sus actividades productivas u operaciones de los trabajadores independientes, una importante proporción de los independientes utiliza su vivienda o un espacio de ella (24,9%); le sigue en orden de importancia, el no tener un lugar específico para ofrecer sus bienes o servicios, es decir son ambulantes (14,5%); en un taller comercial dentro de su vivienda (12,3%); y en el domicilio de sus clientes (11,8%), principalmente. La mayoría de los independientes en cada una de las anteriores lugares donde desempeñan su trabajo son mujeres, principalmente, más que hombres. Por ejemplo, de los que laboran en su vivienda, el 75,5% son mujeres; mientras que en el caso de los que son ambulantes principalmente son mujeres (67,6%). En general, al observar el lugar donde los trabajadores realizan sus actividades se puede afirmar también que en el trabajo independiente sigue existiendo diferenciación por sexo. Esto porque en el transporte público tan sólo participa el 1,7% de las mujeres que trabajan independientemente, mientras que las mujeres constituyen la gran mayoría de trabajadores en puestos improvisados en la vía pública y en el mercado. 61 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 34 Perú: Distribución de los trabajadores independientes por sexo, según lugar donde desempeña la actividad económica principal, 2008 (En porcentajes) Lugar donde desempeñó su actividad Totales Dentro de las habitaciones de su vivienda Como ambulante En su taller comercial dentro de su vivienda En el domicilio de los clientes En vehículo para transporte de personas En taller, tienda, restaurante, hotel En local fijo en mercado público Otro En puesto improvisado en la vía pública En puesto improvisado en mercado público En puesto fijo en la vía pública Total absoluto 4 930 360 24,9 14,5 12,3 11,8 11,3 9,0 6,1 3,9 3,7 1,3 1,3 Total relativo Hombre Mujer 100,0 46,0 54,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 24,5 32,4 36,5 67,4 98,4 56,7 29,1 85,0 20,5 28,0 31,5 75,5 67,6 63,5 32,6 1,6 43,3 70,9 15,0 79,5 72,0 68,5 Nota: Se considera sólo a los trabajadores que tienen al negocio independiente como actividad principal. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia . Casi la mitad de mujeres con trabajo independiente realizan su actividad dentro de su vivienda (49,3%) ya sea dentro de las habitaciones (34,8%) o en un taller dentro de su vivienda (14,5%). Esto demuestra la informalidad en la que se encuentran estos negocios principalmente porque es difícil separar los activos del negocio y los bienes o servicios destinados al hogar. Un considerable porcentaje de las mujeres independientes se desenvuelve como ambulante (18,2%); otros lugares de trabajo donde se concentra este grupo de mujeres son los locales fijos en los mercados (8,0%), en talleres, tiendas, restaurantes u hoteles (7,2%), y en el domicilio de los clientes (7,1%). La distribución completa se observa a continuación. 62 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 16 Perú: Distribución de las mujeres con trabajo independiente, según lugar donde desempeña su actividad principal, 2008 (En porcentajes) 34,8 Dentro de las habitaciones de su vivienda 18,2 Como ambulante 14,5 En su taller comercial dentro de su vivienda 8,0 En local fijo en mercado público En taller, tienda, restaurante, hotel, etc 7,2 En el domicilio de los clientes 7,1 5,5 En puesto improvisado en la vía pública En puesto improvisado en mercado público 1,8 En puesto fijo en la vía pública 1,6 Otros 1/ 1,4 0 10 20 30 40 1/ Incluye a las mujeres que trabajan en vehículos para transporte de personas o mercaderías. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. Una de las características importantes sobre el trabajador independiente que trabaja en un establecimiento o local es el régimen de tenencia del local o establecimiento donde produce sus bienes o servicios. En general, el 60,8% de los independientes son propietarios de sus locales mientras que el 19,7% trabaja en lugares alquilados o prestados (13,3%). También, del total de personas que realizan su actividad independiente en un local o establecimiento, el 63,1% son mujeres, lo cual es en gran parte explicado por el importante número de ellas que realiza labores dentro de su vivienda. Asimismo, el 70,9% de locales propios y el 67,2% de los locales prestados tienen a mujeres como dirigentes del negocio independiente. De las personas que llevan a cabo (dirigen) su negocio independiente en locales alquilados, el 51,7% son mujeres y el 48,3% son hombres. 63 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 35 Perú: Distribución de los trabajadores independientes con local fijo por sexo según régimen de tenencia del local donde realiza su actividad principal, 2008 (En porcentajes) Régimen de tenencia del local Total Propio (propietario) Alquilado Prestado Otro Total absoluto Total relativo Hombre Mujer 2 830 707 100,0 60,8 19,7 13,3 6,2 100,0 36,9 63,1 100,0 100,0 100,0 100,0 29,1 48,3 32,8 85,2 70,9 51,7 67,2 14,8 Nota: Se considera sólo a los trabajadores que tienen al negocio independiente como actividad principal. También considera como lugares fijos donde desempeña su actividad principal a: puesto fijo en la vía pública; local fijo en mercado público; taller, tienda, restaurante, hotel; taller comercial dentro de su vivienda; las habitaciones de su vivienda; y otros. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, Continua 2008. Elaboración: Propia. Con respecto a los motivos de inserción en la actividad independiente como actividad principal, la mayoría de los trabajadores independientes lo hicieron por necesidad económica (44,6%) y para obtener un ingreso o mayores ingresos (20,8%). En ambos motivos señalados anteriormente, se puede notar que, son más las mujeres que los hombres quienes laboran como independientes. En cuanto a los motivos de inicio de actividad principal donde poco se concentran los trabajadores independientes porque quieren ser independientes (15,5%); porque no encontraron un trabajo asalariado (8,2%) o por tradición familiar (5,5%), son motivos donde se concentran más los hombres que las mujeres. De las personas que desearon ser independientes, el 59,5% fueron hombres y el resto mujeres. Así también, el 74,2% de los hombres y 25,8% de las mujeres fueron quienes iniciaron un trabajo independiente como actividad principal porque no encontraron un trabajo asalariado. 64 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 36 Perú: Trabajador independiente por sexo, según motivo por el cual inició su actividad principal, 2008 Motivo de inicio en la actividad principal Total absoluto 4 929 569 Total 1/ Total relativo Hombre Mujer 100,0 46,0 54,0 Por necesidad económica 44,6 100,0 36,1 63,9 Obtiene ingresos / mayores ingresos 20,8 100,0 39,4 60,6 Quiere ser independiente 15,5 100,0 59,5 40,5 No encontró trabajo asalariado 8,2 100,0 74,2 25,8 Por tradición familiar 5,5 100,0 58,0 42,0 Otro 5,4 100,0 60,7 39,3 Nota: Se considera sólo a los trabajadores independientes que tienen su negocio como actividad principal. 1/ El total excluye a los trabajadores independientes que no especificaron el motivo de inicio de su negocio. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, Continua 2008. Elaboración: Propia. Contrariamente a la creencia de que los trabajadores independientes lo son debido a que no han logrado encontrar un trabajo asalariado, se observa que sólo el 4,1% de las mujeres se iniciaron en la actividad independiente por esta razón. Más bien, la mayoría de mujeres (53,2%) se insertó en el trabajo independiente por necesidad económica, el 23,4% por la posibilidad de obtener mayores ingresos, y un nada despreciable 11,8% de ellas realiza una actividad independiente como actividad principal debido a que quería ser independiente. Gráfico Nº 17 Perú: Motivo de inserción de las mujeres en el trabajo independiente como actividad laboral principal, 2008 (En porcentajes) Otro 3,8 No encontró trabajo asalariado 4,1 Obtiene ingresos / mayores ingresos 22,7 Por necesidad económica 53,2 Por tradición familiar 4,4 Quiere ser independiente 11,8 Nota: Se considera sólo a los trabajadores que tienen al negocio independiente como actividad principal. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia . 65 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Las mujeres constituyen el 63,9% del grupo de trabajadores que tienen un año o menos en el negocio independiente como actividad principal. También, el 59,0% de ellas tienen de 2 a 3 años en el negocio, y el 51,0% de ellas de 4 a 5 años. Estas proporciones se invierten con respecto a los hombres al considerar mayor cantidad de años en el negocio independiente, lo cual es concordante con los motivos por los cuales las mujeres se desempeñan en actividades independientes, pues la mayoría de ellas lo hace por necesidad económica. Cuadro Nº 37 Perú: Distribución de los trabajadores independientes por sexo, según rango de antigüedad en el negocio, 2008 (En porcentajes) Rango de antigüedad en el negocio Total absoluto 4 930 360 Total 31,4 16,6 10,8 18,1 14,3 8,7 Un año o menos De 2 a 3 años De 4 a 5 años De 6 a 10 años De 11 a 20 años De 21 y más años Total relativo Hombre Mujer 100,0 46,0 54,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 100,0 36,1 41,0 49,0 50,9 55,7 62,0 63,9 59,0 51,0 49,1 44,3 38,0 Nota: Se considera sólo a los trabajadores que tienen al negocio independiente como actividad principal. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. Por otro lado, se observa una importante diferencia en el número de años promedio de los trabajadores independientes en sus respectivos negocios. Considerando la actividad independiente como la actividad principal del trabajador, el tiempo promedio de años en el negocio fue de 7,4, y en el caso de ser la actividad secundaria fue de 5,3 años. Al separar por sexo, el tiempo promedio de años en la actividad independiente sigue siendo mayor en el caso de que ésta sea la actividad principal; además, son los hombres los que tienen, en ambos casos, más años en el negocio. Cuadro Nº 38 Perú: Años promedio que trabaja en el negocio por actividad, según sexo, 2008 Sexo T o ta l H o m b re M u je r T o ta l 6 ,9 8 ,2 5 ,9 A c tiv id a d p rin c ip a l 7 ,4 8 ,8 6 ,1 A c tiv id a d s e c u n d a ria 5 ,3 5 ,8 4 ,7 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia Según tamaño de empresa se observa que casi todos los negocios independientes son principalmente de un solo trabajador (3 millones 196 mil 522 personas). Según sexo, el 45,0% de los trabajadores de este tipo de empresa son mujeres. En las empresas de 2 a 5 trabajadores y de 6 a 10 trabajadores, el 70,6% y el 67,1% de ellos son mujeres. 66 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 39 Perú: Número de trabajadores independientes por sexo, según tamaño de la empresa, 2008 Tamaño de empresa Total absoluto Total relativo Hombre M ujer Total 4 920 392 100,0 46,1 53,9 Un trabajador De 2 a 5 trabajadores De 6 a 10 trabajadores 3 196 522 1 700 270 23 600 100,0 100,0 100,0 55,1 29,4 32,9 45,0 70,6 67,1 Nota: Se considera sólo a los trabajadores que tienen al negocio independiente como actividad principal. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. El número promedio de trabajadores por empresa es de 2,3 en el caso de los hombres y 2,0 en el caso de las mujeres. No obstante, los trabajadores remunerados que realizan actividades independientes (como actividad principal o secundaria) son en promedio menos de uno por empresa, lo cual está relacionado a la importante proporción de empresas independientes con un solo trabajador, y que además evidencia el carácter familiar de muchos negocios independientes. Cuadro Nº 40 Perú: Número promedio de trabajadores por sexo, 2008 Número de trabajadores Total Trabajadores rem unerados Total Hombre Mujer 2,2 0,5 2,3 0,9 2,0 0,2 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. En cuanto a las ventas por actividad económica realizada, se observa un importante sesgo al considerar si la actividad se realiza principalmente o si es secundaria. Las ventas son mucho mayores en el primer caso, excepto en la actividad comercial. Más importante aún es la brecha de ventas por sexo, pues en los tres sectores considerados, y aún cuando la actividad realizada sea principal o secundaria para el trabajador, las mujeres siempre obtienen menores ventas promedio, y por ende, mucho menores ganancias netas promedio. Cuadro Nº 41 Perú: Ventas promedio mensuales por tipo de actividad, según actividad económica, 2008 (Nuevos soles) Actividad económica Actividad principal Actividad secundaria Hom bre M ujer Hombre M ujer Producción / Extracción 4 161 1 417 1 426 242 Actividad com ercial 6 732 1 912 7 439 942 Servicios 2 465 1 550 924 486 Total ganancia neta promedio 1 052 545 611 238 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. Al contrario de cómo ocurre con las empresas formales, el nivel de capacitación de los trabajadores de las empresas independientes es mayor mientras menos trabajadores tiene la empresa. No obstante, los niveles de capacitación son muy bajos, pues sólo 10,9% de los trabajadores independientes han recibido capacitación, y dichos niveles son mayores para los hombres (14,3%) que para las mujeres (7,9%). 67 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 42 Perú: Capacitación recibida por sexo, según tamaño de empresa, 2008 (En porcentaje) Tamaño de empresa Total Hombre Mujer Total 10,9 14,3 7,9 De un trabajador De 2 a 5 trabajadores De 6 a a10 trabajadores 12,0 9,0 0,0 14,1 15,5 0,0 9,4 6,1 0,0 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. Finalmente en esta parte última del capítulo, presentamos una caracterización de la mano de obra y el empleo del negocio o establecimiento que considera tan sólo a la actividad principal del dueño del negocio; este presentará información por sexo y ámbito geográfico por diversas variables del trabajador. La información presentada corresponde a los trabajadores remunerados (incluye familiares), al dueño del negocio, los trabajadores no remunerados y a los trabajadores familiares no remunerados. De esta manera podemos decir que, la edad promedio del trabajador del negocio varía significativamente, el intervalo se encuentra entre 25,9 y 30,2 años; y alrededor del 50% de los trabajadores, para ambos sexos y ámbitos, tiene entre 14 y 33 años. Así también, con respecto al nivel educativo, más del 80% de los trabajadores de estos negocios tienen hasta secundaria (27,8% hasta primaria y 54,2% secundaria); en ámbitos urbanos se observa que poco más del 20% de los trabajadores tiene hasta primaria, cerca de 60% secundaria y alrededor del 20% tienen educación superior; en el ámbito rural más del 40% de trabajadores tienen hasta primaria, otro 40% tiene secundaria, pero sólo un grupo menor a 10% tiene educación superior. Al considerar el género, llama la atención que tanto en el ámbito rural como urbano existan más mujeres que hombres con educación superior. En cuanto a la antigüedad del trabajador en el negocio, el número de años promedio en el negocio es de 2,9 años, siendo mayor para los hombres (3,3 años en el ámbito urbano y 2,9 años en el ámbito rural) que para las mujeres (2,7 años en ambos ámbitos). Las horas promedio trabajadas a la semana por los trabajadores son 27,3 horas semanales, sin embargo, el mayor número de horas trabajadas a la semana se registra para los hombres en el ámbito urbano (37,0 horas semanales) y el menor para las mujeres en el ámbito rural (14,7 horas). La remuneración bruta promedio mensual de estos trabajadores es mucho menor que la de la PEA ocupada del país (ingreso promedio) y se observan mayores sesgos por género y por ámbito geográfico. Mientras los hombres obtienen 472 y 421 nuevos soles en el sector urbano y rural, respectivamente, las mujeres sólo obtienen 307 y 146 nuevos soles mensuales en promedio en el ámbito urbano y rural, respectivamente. En cuanto a la cobertura de los seguros de salud, los trabajadores que cuentan con este beneficio son sólo el 1,3%, registrándose 1,7% y 1,4% de cobertura para hombres y mujeres del ámbito urbano, respectivamente, y tasas de 0% y 0,3% para hombres y mujeres del ámbito rural, respectivamente. Finalmente, la idea del carácter familiar de los negocios independientes se afirma al analizar el porcentaje de trabajadores que son familiares de su empleador, pues el 76,1% de los trabajadores de los establecimientos y negocios son familiares de su empleador, siendo mayor el porcentaje en el caso de las mujeres (87,3% en el ámbito urbano y 94,7% en el rural). 68 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Cuadro Nº 43 Perú: Características de la mano de obra en el trabajo independiente por ámbito geográfico y sexo, según diversas variables, 2008 (En porcentajes) Urbano Diversas variables Hombre Total Rural Total Mujer Hombre Mujer 2 456 583 1 065 479 902 897 256 507 231 701 Edad promedio 28,8 30,2 28,4 25,9 29,7 Rango de edad Menos de 14 de 14 a 23 años de 24 a 33 años de 34 a 43 años de 44 a 53 años de 54 a 63 años de 64 y más años 100,0 12,2 36,0 21,2 13,1 8,4 5,0 4,2 100,0 3,4 34,4 28,8 17,7 9,3 4,5 1,9 100,0 15,9 37,6 17,5 9,7 7,7 5,4 6,3 100,0 7,1 35,7 23,6 16,5 8,3 4,8 4,0 100,0 25,1 34,8 12,2 11,0 8,3 5,3 3,4 Nivel educativo Hasta primaria Secundaria Superior 100,0 27,8 54,2 17,9 100,0 20,8 61,2 18,0 100,0 25,7 51,8 22,6 100,0 48,3 46,4 5,3 100,0 43,5 48,1 8,4 2,9 3,3 2,7 2,9 2,7 27,3 37,0 23,5 27,0 14,7 Remuneración bruta promedio 1/ (nuevos soles) 422 472 307 421 146 Sí cuenta con seguro de salud 1,3 1,7 1,4 0,0 0,3 76,1 56,2 87,3 68,0 94,7 Años promedio en el negocio Horas promedio trabajadas la semana pasada Es familiar del empleador Nota: la información de este cuadro incluye a los trabajadores remunerados y no remunerados del negocio o establecimiento; y al empleador. Así también, considera a la actividad principal del dueño del negocio o establecimiento. 1/ considera solo a los trabajadores que tienen remuneración bruta mensual mayor a cero. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. BOX Nº 5 Las brechas de salario por condición étnica en Ecuador para el periodo 2003-2007 son notablemente mayores que las brechas salariales por género para el mismo periodo. Las diferencias en las características de capital humano, explican casi la mitad de las brechas de salario por etnicidad, pero sólo una pequeña fracción de la brecha de salario por género. Ambas brechas son más pronunciadas en los extremos más pobres de la distribución de ingresos; la segregación ocupacional impone notablemente penalidades de salario sobre los trabajadores, especialmente sobre aquellos con menores ingresos laborales. La educación en particular y el capital humano en general parecen ser la herramienta obvia para reducir la brecha de salarios por condición étnica; pero esto no promete traer reducciones en la brecha de salarios por género. Por otro lado, para los individuos de menores ingresos, las políticas que buscan reducir la segregación ocupacional también parecen ser buenas herramientas para reducir tanto las brechas de salario por condición étnica como por género; en este aspecto, los servicios de intermediación laboral y las campañas de información (ambas en mercados laborales y educacionales) han dado buenos resultados en otras economías. Así, si género y etnicidad son características que van en detrimento del buen desenvolvimiento de los individuos en los mercados de trabajo, parece natural que una estrategia de largo plazo deba centrarse en las niñas indígenas. Ellas no poseen un buen desenvolvimiento en una serie de indicadores educacionales con respecto a los niños. Entonces, se deben generar los incentivos necesarios para enviar a las niñas a la escuela. Una herramienta para lograrlo parece haber sido implementada en Ecuador con el Bono Solidario y el Bono de Desarrollo Humano. Por supuesto, esto debe ser acompañado con una oferta de servicios educacionales de calidad y programas especiales como el de educación bilingüe, los mismos que podrían llegar a asegurar bajas tasas de deserción escolar . Ethnic and gender wage gaps in Ecuador. Gallardo y Ñopo. BID 2009. http://www.iadb.org/res/includes/pub_hits.cfm?pub_id=WP-679&pub_file_name=pubWP-679.pdf 69 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 7. Mujeres jefes de hogar En el Perú en el año 2008, existieron 7 millones de personas jefes de hogar. De este total, solamente el 23,1% son mujeres, cifra bastante menor al 76,9% restante que corresponde a los hombres jefes de hogar. Entre los años 2002 y 2008, la cantidad de jefes de hogar mujeres se ha venido incrementando, así se incrementó en 724 mil el número de jefas de hogar en el Perú entre el año 2002 y 2008. Cuadro Nº 44 Perú: Jefes de hogar según sexo, 2008 Sexo Valor absoluto Porcentaje Total 7 063 633 100,0 Hombre 5 429 405 76,9 Mujer 1 634 228 23,1 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, Continua 2008. Elaboración: Propia. Gráfico Nº 18 Perú: Evolución de los jefes de hogar por sexo, 2002, 2006 – 2008 (En personas) 5 310 808 6 000 000 5 312 162 5 429 405 5 000 000 4 000 000 3 022 475 3 000 000 2 000 000 1 634 228 1 546 556 1 495 022 909 679 1 000 000 0 2002 2006 Hombre 2007 2008 Mujer Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, IV trimestre 2002 y continua 2006 - 2008. Elaboración: Propia. 70 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Un aspecto que se debe explorar al analizar a este grupo poblacional, es que en poblaciones femeninas la probabilidad de ser jefe de hogar está relacionada con hogares monoparentales, es decir de familias que han pasado un proceso de separación, divorcio o muerte del cónyuge. En este sentido se encuentra que el mayor porcentaje de jefes de hogar hombres, está concentrado en grupos de casados y convivientes, las mujeres jefas de hogar tienden a ser viudas o divorciadas. Es así que los jefes de hogar convivientes, casados y solteros son en su mayoría hombres mientras que aquellos que son viudos, divorciados o separados son en su mayoría mujeres, ver cuadro 45. Cuadro Nº 45 Perú: Distribución de los jefes de hogar por sexo, según estado civil, 2008 Sexo Estado civil Total Hombre Mujer 7 063 633 5 429 405 1 634 228 Total relativo 100,0 100,0 100,0 Conviviente Casado(a) Viudo(a) Divorciado(a) Separado(a) Soltero(a) 26,4 43,9 10,9 0,7 11,1 7,0 32,3 54,7 3,7 0,4 3,9 5,0 6,7 7,8 34,8 1,9 35,3 13,5 Total absoluto Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. En cuanto a la categoría ocupacional de los jefes de hogar, para ambos sexos las categorías más importantes son independiente (47,6% para los hombres y 58,7% para las mujeres) y asalariado (39,1% para los hombres y 25,2% para las mujeres). Cuadro Nº 46 Perú: Distribución de los jefes de hogar ocupados, según categoría ocupacional, 2008 Categoría ocupacional Total absoluto Total relativo Asalariado 1/ Empleador Independiente TFNR 2/ Otros 3/ Sexo Total Hombre Mujer 6 065 508 4 892 246 1 173 262 100,0 36,4 10,2 49,7 1,8 1,9 100,0 39,1 11,1 47,6 1,7 0,5 100,0 25,2 6,5 58,7 2,1 7,5 1/ Considera a los obreros y empleados públicos y privados. 2/ Trabajador familiar no remunerado. 3/ Incluye trabajadores del hogar, practicantes y otros. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 71 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano En el caso de las mujeres jefes de hogar, la mayor parte de estas se concentra en el nivel primario, seguidas del nivel secundario. Llama la atención el hecho que aquellas sin nivel representen una importante cantidad (18,5%). Es así que las mujeres jefes de hogar con educación superior y de postgrado representan ambas solamente 11,4% (ver cuadro N° 47). Cuadro Nº 47 Perú: Distribución de los jefes de hogar por sexo, según nivel educativo, 2008 (En porcentajes) Nivel educativo Sexo Total Total absoluto 7 063 633 Total relativo Sin nivel Primaria incompleta Primaria completa Secundaria incompleta Secundaria completa Superior no universitaria incompleta Superior no universitaria completa Superior universitaria incompleta Superior universitaria completa Hombre Mujer 5 429 405 1 634 228 100,0 100,0 100,0 7,2 19,8 15,7 13,0 21,4 3,0 7,1 3,7 9,1 3,8 19,2 16,5 13,8 23,0 3,1 7,0 4,2 9,4 18,5 21,6 12,9 10,4 16,3 2,6 7,4 2,3 8,0 El ingreso promedio mensual de los jefes de hogar hombres es significativamente mayor en relación a los jefes de hogar mujeres (S/. 1,106 al mes versus S/. 689 al mes), tal como se puede apreciar en el siguiente cuadro. Es decir que las diferencias por sexo son significativas, y determinan de algún modo que un hogar liderado por una mujer tiene en promedio 689 soles de ingresos menos que en el caso de haber sido liderado por un hombre, o dicho de otra forma un jefe de familia varón gana 1,6 veces el ingreso de una mujer jefe de hogar (tal como se puede ver en la siguiente información). Cuadro Nº 48 Perú: Ingreso laboral mensual del jefe de hogar por sexo, según estructura de mercado, 2008 (En nuevos soles) Promedio Mediana Estructura de mercado Total Hombre Mujer Total Hombre Mujer Total Sector público 1 025,6 1 761,2 1 105,6 1 834,4 688,6 1 431,8 622,4 1 416,8 681,7 1 427,0 355,0 1 313,0 Sector privado De 2 a 9 trabajadores De 10 a 49 trabajadores De 50 y más trabajadores 1 109,7 1 355,7 2 370,7 1 101,2 1 408,7 2 456,0 1 166,6 1 010,8 1 360,0 663,8 879,3 1 432,4 701,3 896,5 1 454,7 463,8 710,7 1 022,9 Independiente Profesional No profesional 1 559,1 531,9 1 501,4 578,2 1 872,5 377,3 1 015,3 362,0 1 025,9 410,1 727,4 210,5 572,2 838,9 533,4 524,1 803,5 498,2 Resto 1/ Nota: El ingreso laboral excluye a los Trabajadores Familiares No Remunerados y a los que no perciben ingresos. 1/ Considera a los trabajadores del hogar y otros. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 72 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 19 Perú: Ingreso laboral promedio mensual de los jefes de hogar, según sexo, 2008 (Nuevos Soles) 1105,6 1200 1025,6 1000 688,6 800 600 400 200 0 Hom bre Mujer Total Nota: El ingreso laboral excluye a los Trabajadores Familiares No Remunerados y a los que no perciben ingresos. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. BOX Nº 6 En Brasil, las brechas salariales por raza (color de piel) son más pronunciadas que las brechas basadas en la división por género, aunque ambas decrecieron notablemente a lo largo de la última década. Pero al considerar las características observables individuales, la situación se revierte. Las características observables individuales, como la educación y las características del mercado de trabajo (ocupación, sector económico y formalidad), juegan un importante rol en la explicación de los diferenciales de salario entre blancos y no-blancos, pero menos importante en las brechas de salario por género. Las características del mercado de trabajo operan formando una especie de barreras de acceso, así, casi la mitad de los diferenciales de salario entre blancos y no-blancos puede ser explicada por el hecho de que los primeros tienen acceso a ciertas ocupaciones, en ciertos sectores y con un cierto grado de formalidad, que los no-blancos no pueden alcanzar. En otras palabras, si bien la educación importa, la segregación en los mercados de trabajo sigue siendo relevante. Por otra parte, las brechas de salario por género y por raza no explicadas se incrementan con la edad y el nivel educativo de los trabajadores: la brecha salarial por género no explicada es la más alta entre los individuos más pobres y la menor entre los individuos de ingreso medio, y aumenta para los individuos con mayores ingresos; la brecha de salario por raza no explicada se incrementa monotónicamente, aunque lentamente, con el mayor nivel de ingreso. Gender and racial wage gaps in Brazil 1996-2006. Marques, Ñopo y Salardi. BID 2009. http://www.iadb.org/res/includes/pub_hits.cfm?pub_id=WP-679&pub_file_name=pubWP-679.pdf 73 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 8. Características de las mujeres desocupadas en el Perú Los niveles de desempleo en el 2008 han sido mayores que los registrados para años previos, en el caso del grupo poblacional de las mujeres, el 4,8% de las mujeres a nivel nacional se encontró bajo la condición de desocupada en el año 2008. Las mujeres desocupadas constituyeron un segmento de la PEA que se encontró buscando activamente trabajo. A nivel nacional la tasa de desempleo resultó mayor para el ámbito urbano en el caso de las mujeres (6,9% versus el 5,2% correspondiente a los hombres). Si bien en el ámbito rural no se da el mismo fenómeno, tanto la tasa como la diferencia entre ambos sexos es bastante reducida (0,9% para las mujeres versus 0,8% para los hombres). En el caso de la tasa de desempleo por dominio geográfico, son en los dominios urbanos donde se encuentran las mayores tasas de desempleo para ambos sexos. Generalmente, en el área rural hay más empleo independiente y TFNR (sobre todo dedicados a la actividad agrícola y ganadera) que son trabajos sin salario o asalariados, por lo que el desempleo es reducido a diferencia del urbano. Si bien las tasas de desempleo son mayores para las mujeres en casi la totalidad de dominios (exceptuando a la sierra rural donde son iguales), las diferencias más importantes se encuentran en Lima Metropolitana y la Costa Urbana. Cuadro Nº 49 Perú: Tasa de desempleo por sexo, según ámbito geográfico y dominio geográfico, 2008 (En porcentajes) Ámbito y dominio geográfico Total absoluto Total Sexo Total Hombre Mujer 650 638 310 479 340 159 4,2 3,7 4,8 6,0 0,9 5,2 0,9 6,9 0,9 6,8 5,6 1,6 5,6 0,8 4,2 0,8 5,4 5,2 1,1 5,6 0,9 4,0 0,6 8,3 6,1 2,4 5,5 0,6 4,6 0,2 Ámbito geográfico Urbano Rural Dominio geográfico Lima Metropolitana Costa urbana Costa rural Sierra urbana Sierra rural Selva urbana Selva rural Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 74 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Dentro de las características de los desempleados, se observa que estos se concentran en el rango de 14 a 24 años. Cabe resaltar que dentro de este grupo etáreo, el porcentaje de la población masculina es significativamente mayor en relación a la población femenina, con 55,1% y 48% respectivamente. Por nivel educativo, el desempleo, si bien este se concentra en las personas con nivel de educación secundaria, en el caso de la población que alcanzó el nivel superior las personas desempleadas para la población femenina (35,9%) es parecido a la registrada en la población masculina (36,9%). Este resultado debe estar relacionado con el caso de los hogares monoparentales donde las responsabilidades en relación a la carga familiar desciende y deja al jefe de hogar una mayor capacidad de libertad de acción, ya que sólo debe velar por sí mismo. Con relación a la ocupación anterior de los desempleados; la categoría empleado presenta los más altos porcentajes de desempleo para ambos sexos; aunque el más significativo se da para el caso de las mujeres (55,6% en comparación al 42,5% obtenido por los hombres). De igual forma, en sucesión de importancia encontramos que fueron obreros, aquellos que se quedaron sin empleo el año pasado, en el caso de los hombres su probabilidad de ser desempleados ascendió a 34,9% y en el caso de las mujeres llegó a 15,9%. Comparativamente las mujeres que realizan labores de obrera tienen relativamente menor probabilidad de quedarse sin empleo que los hombres. Cuadro Nº 50 Perú: Características del desempleo por sexo, según diversas variables, 2008 (En porcentajes) Diversas variables Total Hombre Mujer 650 638 310 479 340 159 Rango de edad De 14 a 24 años De 25 a 34 años De 35 a 44 años De 45 y más años 100,0 100,0 100,0 51,4 22,1 10,4 16,1 55,1 18,6 8,5 17,9 48,0 25,3 12,2 14,6 Nivel educativo Hasta primaria Secundaria Superior 100,0 9,0 54,6 36,4 100,0 7,7 55,4 36,9 100,0 10,3 53,8 35,9 Estado Civil Soltero(a) Casado(a) / conviviente Viudo(a) / Separado(a) / Divorciado(a) 100,0 61,7 31,3 7,0 100,0 68,6 26,2 5,2 100,0 55,5 35,9 8,7 Ocupación anterior Empleador o patrono 1/ Trabajador independiente Empleado Obrero Otro 2/ 100,0 1,5 13,2 49,6 24,7 11,0 100,0 3,0 13,6 42,5 34,9 5,9 100,0 0,2 12,9 55,6 15,9 15,4 Total 1/ Cifras referenciales. 2/ Incluye a los trabajadores no remunerados, trabajadores del hogar, otros. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 75 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Si observamos el nivel educativo de los jóvenes desempleados, del total de desocupados más del 65% poseen educación secundaria, siendo el porcentaje de la población masculina joven mayor al de la población femenina joven, 71% y 68% respectivamente. Para los niveles de educación primaria y secundaria, los hombres jóvenes muestran una mayor tasa de desempleo, mientras que en caso de los jóvenes que alcanzaron los niveles de educación superior (no universitaria y universitaria), las mujeres son las que muestran mayores tasas de desempleo. Grafico Nº 20 Perú: Distribución de los jóvenes desocupados por sexo, según nivel educativo, 2008 (En porcentajes) 70.0 61,6 Ho m b re 58,0 60.0 M ujer 50.0 40.0 30.0 21,9 20.0 19,8 16,8 13,1 10.0 3,4 5,4 0.0 Prim aria Sec un d ari a Sup erio r n o un iv ers itaria Sup erio r un iv ers i tari a Nota: Se considera en la categoría de “Jóvenes” a todas aquellas personas que tienen una edad entre 15-29 años. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. El desempleo según rangos de edad se concentra entre las mujeres más jóvenes y que poseen educación secundaria. Así, el 70,7% de las mujeres entre 15 y 23 años de edad poseen educación secundaria, seguido de las que tienen educación superior universitaria (16,4%). Así también tenemos que, en el rango de edad de 24 a 29 años de edad, existe mayor nivel de preparación de mujeres desempleadas, ya que el 31,4% posee educación superior universitaria y el 29,6% estudio una carrera superior no universitaria. Sin embargo, no deja de ser preocupante que el 33,2% de las mujeres desempleadas tenga educación secundaria. 76 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Grafico Nº 21 Perú: Distribución de las jóvenes desocupadas, según nivel educativo y rangos de edad, 2008 (En porcentajes) 80.0 70,7 De 15 a 23 años 70.0 De 24 a 29 años 60.0 50.0 40.0 33,2 16,4 20.0 10.0 31,4 29,6 30.0 3,9 9,0 5,9 0.0 Hasta primaria Secundaria Superior no universitaria Superior universitaria Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia 77 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 9. Diferenciales de ingreso por sexo (método de Oaxaca-Blinder) En esta sección se estudia la diferencia o brecha entre los ingresos de las mujeres y hombres peruanos, utilizando las técnicas de descomposición de Oaxaca y Blinder. El objetivo de esta técnica es descomponer los diferenciales del ingreso laboral en dos componentes importantes: aquella parte atribuible a las diferentes características con que cuentan los individuos, en este caso los hombres y las mujeres, al momento de ofrecerse en el mercado laboral, y aquella parte que solo se explica por diferencias en los parámetros o coeficientes de las variables que determinan el ingreso y que se atribuye a la discriminación en el mercado laboral. En ecuaciones, si estimamos una ecuación del ingreso laboral Minceriana para ambos grupos, donde H = hombres y M = Mujeres, K H H Yi H = b b X Hji + u iH å 0 + j= 1 j K M M Yi M = b b XM u iM å 0 + ji + j= 1 j donde Yi H y Yi M son logaritmos de los ingresos por hora de ambos grupos, las K variables X j corresponden a los determinantes de los ingresos, y las u i son los términos de perturbación. Después de estimarse estas dos ecuaciones por mínimos cuadrados ordinarios, Blinder muestra que la diferencia de los promedios de Yi se puede descomponer en los dos efectos señalados de esta forma: K ˆH K H M ˆH ˆM )+ ˆH ˆM ) YH YM = (b b b ( X X ) + XM b å å 0 0 j j j j (b j j j= 1 j= 1 ˆ es la estimación del parámetro b donde b , y Y H , Y M , X Hj , y X M son los promedios j muestrales de las respectivas variables. Blinder llama a los términos de esta ecuación con letras de esta forma: R= U+ E+ C donde R es el diferencial de los ingresos , E es la parte del diferencial explicada por distintas características de los grupos, C es la parte explicada por diferencias en los coeficientes y U es la parte del diferencial no explicada por la variables (diferencia de las constantes). Se considera a la parte atribuible a discriminación a la suma U + C. 27 Nos basamos fundamentalmente en el trabajo de Blinder (1973) “Wage discrimination: reduced form and structural estimates”. The Journal of Human Resources, vol. VIII, N°4. 28 Se le denomina así por que fue planteado por Mincer J. (1974). Schooling, Experience and Earning. New York. National Bureau of Economics Research-NBER. Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo 78 Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 2 ln(Wi ) = b b b b b 0 + 1 EDADi + 2 EDAD + 3 ESCOLARIDAD + 4 EXPERIENCIA + b b b ui 5URBANO + 6 CASTELLANO + 7 ENF .CRONICA + donde ESCOLARIDAD son los años de estudio de la persona; EXPERIENCIA son los años de trabajo en la ocupación principal actual; URBANO es una variable “dummy” que toma el valor 1 si la persona vive en zonas urbanas, y 0 si vive en zonas rurales; CASTELLANO es una dummy que toma el valor de 1 si el castellano es su lengua materna, 0 en los demás casos; y ENF.CRONICA es una dummy que toma 1 si la persona sufre alguna enfermedad crónica. En esta ocasión, en vez de hacer la estimación para el total de individuos de la muestra, se decidió subdividirla por tipo de ocupación. Se hizo esto por dos razones: una es que en algunos grupos ocupacionales, virtualmente solo existen observaciones de uno solo de los sexos. La segunda razón es que es posible que las variables mencionadas en la ecuación anterior afecten de diferente forma a la discriminación y al diferencial según los grupos ocupacionales. En general, la PEA ocupada se concentra en los grupos ocupacionales afines a las actividades económicas extractivas, servicios, comercio. Esto configura el bajo valor agregado e ingresos que poseen los ocupados en estas ocupaciones. Principalmente, la PEA ocupada se concentra en los grupos ocupacionales de agricultores, ganaderos y pescadores (32,9%); vendedores (16,3%); y, trabajadores de los servicios (11,5%), ver cuadro 51. También se puede notar en que, existen grupos ocupacionales donde la mujer participa menos que los varones, este es el caso de conductores (1,1%); obreros, jornaleros y otras ocupaciones (5,6%); y, artesanos y operarios (34,5%), principalmente. Cuadro Nº 51 Perú: PEA ocupada por sexo, según grupo ocupacional, 2008 (En porcentajes) Grupo ocupacional Total absoluto Total relativo Total 14 853 975 100,0 Sexo Total relativo Hombre Mujer 100,0 8 121 691 54,7 6 732 285 45,3 Agricultores, ganaderos y pescadores 2/ 32,9 100,0 60,0 40,0 Vendedores 16,3 100,0 28,0 72,0 Trabajadores de los servicios 11,5 100,0 48,9 51,1 Profesionales, técnicos y ocupaciones afines 1/ 11,0 100,0 56,2 43,8 Artesanos y operarios 10,6 100,0 65,5 34,5 Empleados de oficina 5,8 100,0 51,1 48,9 Conductores 5,1 100,0 98,9 Obreros, jornaleros y otras ocupaciones Trabajadores del hogar 3,6 3,1 100,0 100,0 94,4 4,1 1,1 a/ 5,6 96,0 1/ Incluye a los gerentes administradores y funcionarios. 2/ incluye a los mineros y canteros. a/ Cifra referencial por tener pocos casos en la muestra. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 79 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano El gráfico 22, nos describe que, en general, los hombres tienen ingresos semanales superiores a las mujeres, en todos los grupos ocupacionales, excepto en el grupo ocupacional de conductores (en esta ocupación, casi el 100% son hombres). Las mayores diferencias de ingresos se dan principalmente entre las familias de ocupaciones tales como gerentes, administradores y funcionarios; profesionales, técnicos y ocupaciones afines; y, mineros y canteros. Así también, se puede notar que, en cada uno de estos grupos de ocupaciones se concentran más los hombres que las mujeres. Las menores diferencias en los ingresos semanales por género se encontraron fundamentalmente en las ocupaciones elementales o que requieren un menor nivel de preparación o calificación tales como trabajadores del hogar (casi el 100% son mujeres); obreros, jornaleros, y otras ocupaciones; conductores; y, agricultores, ganaderos y pescadores. Gráfico Nº 22 Perú: Ingreso laboral semanal por sexo, según grupo ocupacional, 2008 (En Nuevos Soles) Profesionales, técnicos y ocupaciones afines Gerentes administradores y funcionarios Empleados de oficina Vendedores Agricultores, ganaderos y pescadores Minero s y canteros Artesanos y operarios Obreros, jornaleros y otras ocupaciones Co nductores Trabajadores de los servicios Trabajadores del hogar 0 200 Hombre 400 600 800 1000 1200 Mujer Nota: El ingreso laboral excluye a los Trabajadores Familiares No Remunerados y a los que no perciben ingresos. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 80 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Los resultados de la descomposición de los ingresos de cada grupo ocupacional basado en la metodología de Oaxaca-Blinder se describe a continuación. En general, existe un diferencial de ingresos en casi todos los grupos de ocupaciones. Principalmente, las ocupaciones donde existen importantes diferenciales de ingresos (R) y discriminación (C+U) son los siguientes: gerentes administradores y funcionarios; artesanos y operarios; y, obreros, jornaleros y otras ocupaciones. Mientras que las ocupaciones en donde existe bajas diferencias en los ingresos y discriminación son profesionales, técnicos y ocupaciones afines; y, empleados de oficina. En la ocupación conductores, las mujeres tienen mayores ventajas en sus ingresos respecto a los hombres. Cuadro Nº 51 Perú: Descomposición de la discriminación en el diferencial de ingresos, 2008 Grupo ocupacional Total Gerentes administradores y funcionarios Artesanos y operarios Obreros, jornaleros y otras ocupaciones Vendedores Agricultores, ganaderos y pescadores Trabajadores de los servicios Mineros y canteros Profesionales, técnicos y ocupaciones afines Empleados de oficina Conductores Atribuible a Diferencial de características ingresos individuales Atribuible a No explicada coeficientes discriminación discriminación R E C U 315,1 191,4 126,6 117,4 76,5 70,1 64,7 37,6 5,1 -14,9 -49,2 20,8 2,4 19,6 10,8 3,1 6,9 1,0 -2,4 -21,0 861,7 43,5 1866,9 34,1 14,7 81,7 556,5 61,2 -55,6 119,8 -497,4 127,0 -1742,7 63,6 50,9 -14,6 -498,7 -24,6 63,0 -113,7 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. En general se puede decir que la discriminación explica una gran parte del diferencial de ingresos entre hombres y mujeres en casi todas las ocupaciones, y en menor medida la discriminación puede ser explicada por características individuales de las personas. Cuadro Nº 52 Perú: Peso de la discriminación en el diferencial de ingresos, según grupo ocupacional, 2008 (En porcentajes) G ru p o o cu p acio n al P rofesionales, técnicos y oc upaciones afines G erentes adm inistradores y funcionarios E m pleados de oficina V endedores A gricultores, ganaderos y pescadores M ineros y canteros A rtes anos y operarios O breros, jornaleros y otras ocupaciones C onductores T rabajadores de los servicios P eso d e características E /R P eso d e la d iscrim in ació n (C +U ) / R 2,6 -15,6 -47,6 16,7 14,2 10,7 10,9 1,9 141,5 4,4 97,4 115,6 147,6 83,3 85,8 89,3 89,1 98,1 -41,5 95,6 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 81 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Ingresos promedio Un aspecto que es relevante cuando se analiza el mercado de trabajo de las mujeres está relacionado con el ingreso laboral que generan y con las diferencias de ingresos con respecto al obtenido por los hombres. Se puede observar que hay diferencias de ingreso significativas por sexo según estructura de mercado de trabajo. En ese sentido, las brechas son mayores en las empresas privadas que requieren una mayor calificación de su personal como es el caso de las empresas de 50 a más trabajadores; y en los trabajadores independientes profesionales. Así, en promedio la diferencia supera los 500 nuevos soles para el caso de las empresas de 50 a más trabajadores y de más de 130 nuevos soles en el caso de los profesionales. Cuadro Nº 53 Perú: Ingreso laboral promedio por sexo, según estructura de mercado, 2008 (En nuevos soles) Ingreso laboral promedio Estructura de mercado Total Hombre Mujer Total Sector público 860 1 002 653 1 514 1 691 1 287 Sector privado De 2 a 9 trabajadores De 10 a 49 trabajadores De 50 y más trabajadores 1 114 816 1 051 1 810 1 218 873 1 147 2 009 883 689 854 1 341 Independiente Profesional No profesional 501 1 155 478 592 1 201 565 391 1 068 373 529 596 522 Resto 1/ Nota: el cálculo del ingreso laboral excluye a los Trabajadores Familiares No Remunerados y a los que no perciben ingresos. 1/ Considera a los trabajadores del hogar y otros. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. En general, si bien tanto los ingresos laborales de los hombres como de las mujeres se han incrementado entre los años 2006 y 2008; también se ha incrementado la brecha de dichos ingresos en dicho periodo de tiempo. Así, en el año 2006 la brecha de ingresos entre hombres y mujeres era de 248 nuevos soles, mientras que en el año 2008 llegó a 349 nuevos soles. También se puede decir que, los ingresos de las mujeres no han evolucionado a la misma velocidad que las de los hombres. Así, entre los años 2006 y 2008 el ingreso laboral de las mujeres creció 14,4% mientras que las de los hombres fue 24,8%. Estas diferencias se podrían explicar básicamente por la brecha en la calificación que existe entre hombres y mujeres; a las actividades económicas de bajo valor agregado que principalmente realizan las mujeres, sobre todo en el área rural. 82 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Gráfico Nº 23 Perú: Evolución del ingreso laboral promedio, 2006 – 2008 (En nuevos soles) Brecha: 349 1100 Bercha:260 1002 Brecha: 248 1000 892 900 803 800 700 653 631 600 555 500 400 2006 2007 Hombre 2008 Mujer Fuente: INEI – Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2006 – 2008. Elaboración: Propia. Según estructura de mercado y área de residencia de las mujeres, los ingresos son casi la mitad, en promedio, en el área rural en comparación con el área urbana. Las mujeres tanto del área urbana como rural ganan más trabajando en las empresas privadas. Así, una trabajadora urbana gana S/. 1 368 en las empresas privadas de 50 a más trabajadores, mientras que en el área rural recibe ingresos por S/. 732. Cuadro Nº 54 Perú: Ingreso laboral femenino por ámbito geográfico, según estructura de mercado, 2008 (En nuevos soles) E structura de m ercad o T otal Área de residencia U rbano R ural T otal Secto r público 653 1 287 764 1 361 295 775 Secto r privado D e 2 a 9 trabajadores D e 10 a 49 trabajadores D e 50 y m ás trabajadores 689 854 1 341 803 923 1 368 304 429 732 Indep endiente Profesional 1/ N o profesional 1 068 373 1 103 445 61 234 522 541 365 R esto 2/ Nota: El ingreso laboral excluye a los Trabajadores Familiares No Remunerados y a los que no perciben ingresos. 1/ en el caso del ingreso rural de las mujeres profesionales este es bajo debido a que se está considerando a las trabajadoras que laboran en grupos ocupacionales profesionales que no necesariamente estudian un nivel educativo superior. 2/ Considera a los trabajadores del hogar y otros. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 83 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Comparando los ingresos laborales promedio a nivel nacional y el de Lima Metropolitana, se puede ver que los ingresos en la capital del país son más altos que el promedio nacional. Este es el caso de los ingresos laborales en el sector público, en todos los tamaños de empresas, pero sobre todo en las empresas de más de 50 trabajadores; y en el trabajo independiente. Gráfico Nº 24 Lima Metropolitana: Brechas de ingreso promedio mensual por estructura de mercado, 2008 (En nuevos soles) 1666 Total 962 665 657 Trabajador del hogar 1017 Independientes o d a v ri p r o t c e S 638 2804 De 50 y más trabajadores 1688 1600 De 10 a 49 trabajadores 1034 1217 De 2 a 9 trabajadores 755 2110 Sector público 1517 0 500 1 000 1 500 2 000 2 500 3 000 Nuevos soles Hombre Mujer Nota: El sector privado incluye a todos los trabajadores de las empresas no públicas de 2 a 9 trabajadores, de 10 a 49 trabajadores y de 50 y más trabajadores. Nota: Se excluye a los Trabajadores Familiares no Remunerados en el cálculo de del ingreso. Fuente: MTPE, Encuesta de Hogares Especializada en Niveles de Empleo 2008. Elaboración: MTPE - Programa de Estadísticas y Estudios Laborales (PEEL). Según sexo en Lima Metropolitana se puede percibir que en general los hombres reciben un ingreso mensual promedio mayor que las mujeres. Además, se observa que en el sector privado (empresa de 50 y más trabajadores) y en el sector público, ambos sexos perciben ingresos promedio mensuales por encima de mil nuevos soles mensuales, pero son los hombres quienes gozan de un estipendio promedio mayor. 84 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Conclusiones En los últimos 6 censos realizados en nuestro país la población está repartida en 50% para los hombres y 50% para las mujeres y no existe una tendencia al cambio de esta estructura. Según el censo del año 2007 la población total asciende a 27 millones y medio de personas. Sin embargo, 2 de cada 10 mujeres habitan en el área rural, y existen más mujeres analfabetas en el área rural que la urbana. Según la Encuesta Nacional de Hogares sobre Niveles de Vida y Pobreza del año 2008, la población en edad de trabajar está compuesta principalmente por jóvenes (38%). Sin embargo, 7 de cada 10 mujeres en la PET ofrecen su fuerza de trabajo al mercado de trabajo. La PET femenina fue más urbana que rural al igual que la PEA. También, en Lima Metropolitana se concentra la tercera parte de la oferta laboral del país, y en los últimos años la tendencia de la tasa de actividad femenina se ha mantenido constante. En el Perú, las personas ocupadas mujeres son principalmente jóvenes de 14 a 29 años. Sin embargo, la tasa de actividad femenina estuvo alcanzando su nivel máximo entre las mujeres de 30 a 45 años de edad, sin embargo en el año 2008 este empieza a moverse hacia los años 46 a 55 años de edad. La participación de las mujeres en el mercado de trabajo depende principalmente de la edad de la mujer, los años de escolaridad, la educación promedio de los adultos en el hogar, el número de hijos menores de 6 años; el ratio de PET femenina a PET; y, los ingresos de la oferta laboral de las mujeres. En la estimación de la oferta de trabajo de las mujeres se puede decir que la oferta de trabajo para las mujeres con educación secundaria es diferente a la de las mujeres con menos del nivel educativo secundario, esto en cuanto a las variables que las afectan, las elasticidades y el efecto final sobre la oferta de horas de trabajo. Aunque, existen variables que afectan de las misma forma a ambos grupos. Por otro lado, si bien el desempleo es bajo porque las personas tienen que ocuparse en algo para vivir, el problema principal que afrontan tanto hombres como mujeres es el subempleo ocupacional, sobre todo por ingresos, denominado también por insuficiencia de ingresos. Aunque este problema data de muchos años atrás, se ha ido reduciendo muy lentamente en el tiempo, pero persiste aún y sobre todo en el caso de las mujeres (38,7%). Las mujeres ocupadas en el año 2008, principalmente, se han auto empleado, principalmente como independientes no profesionales, y se ha notado que este grupo ha estado creciendo en los últimos años. Mientras que, otro grupo importante donde se ocupan las mujeres es como Trabajadoras Familiares No Remuneradas (TFNR), las cuales se han reducido en los últimos años. 85 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Asimismo cabe resaltar que en el sector privado, las mujeres se han ocupado principalmente en empresas de 2 a 9 trabajadores, y estas se concentran más en las empresas del área urbana, mientras que en el caso del sector privado rural se concentran en menor proporción. Las actividades donde se concentran más las mujeres ocupadas fueron en actividades extractivas, comercio al por menor y en servicios, estas en general de bajo nivel agregado. A nivel de Lima Metropolitana, la realidad es un poco diferente a la del país. Las mujeres también generan su propio empleo principalmente, pero se concentran más en empresas de 50 a más trabajadores, dicha proporción se ha incrementado en el tiempo. Aquí las mujeres trabajan como TFNR también, pero esta se ha ido reduciendo con el transcurrir del tiempo. En el Perú, los hombres trabajan más horas semanales que las mujeres en promedio. Así, laboran más de 48 horas a la semana y esto ocurre, principalmente, en las empresas de 50 a más trabajadores. En cuanto al empleo en el sector informal, este se ha venido reduciendo en los últimos años en Lima Metropolitana, pero aún es muy alto ya que llega al 50% de los ocupados, los cuales están condenados a bajos ingresos y bajas condiciones laborales entre otros factores que aquejan a este importante sector productivo. En el Perú, las mujeres que están ocupadas tanto en el sector formal como en el sector informal ganan mucho menos que los hombres que también laboran en los mismos sectores. En cuanto a la protección social de las mujeres ocupadas se ha encontrado que principalmente tienen más acceso a un seguro de salud que al sistema de pensiones. Aunque en comparación con los hombres, las mujeres tienen menos acceso a algún sistema de pensiones. Los bajos ingresos de las mujeres ocupadas se podrían explicar por el bajo nivel educativo y pocas calificaciones que posee la mujer, sobre todo del ámbito rural donde muy pocas mujeres han tenido acceso a la educación superior. Este bajo nivel de educación transversa a todas las condiciones de actividad: ocupados, desocupados e inactivos, siendo más alto en las mujeres inactivas. Las mujeres jóvenes han tenido bajos niveles de educación, principalmente educación básica lo que merma su capacidad productiva y redunda en bajos ingresos, finalmente. En Lima Metropolitana, 3 de cada 10 mujeres de la PET llevaron cursos de capacitación, aunque 4 de cada 10 mujeres que llevaron cursos fueron jóvenes de 14 a 29 años. Las carreras profesionales que han seguido las mujeres ocupadas, están relacionadas a la enfermería; las ciencias administrativas, contables y económicas; carreras secretariales y técnicas contables y administrativas. Sin embargo, los mayores niveles de subutilización profesional se han presentado en las carreras de técnicos en ciencias físicas, químicas, matemática, estadísticas e informática; técnicos en economía, administración de empresas, derecho y afines; y, técnicos de nivel medio de la medicina moderna y la salud. 86 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano En el Perú existieron en el año 2008, 6 millones 193 mil personas con trabajo independiente, que principalmente realizaron dicha actividad como principal. Estos se han concentrado en el área urbana primordialmente. Generalmente, el negocio que realizan o dirigen las trabajadoras independientes se caracterizan por no llevar algún tipo de contabilidad; usan sus viviendas para sus negocios o son ambulantes; en el caso de las trabajadoras independientes con local fijo generalmente son propietarias de dicho local o alquilan dichos locales fijos. También, se encontró que una gran proporción de estas actividades o negocios tienen menos de un año de vida, son de un solo trabajador, sus ventas o ganancias son bajas sobre todo en el caso de las mujeres independientes. Otras de las características del mercado de trabajo, es la existencia de madres jefas de hogar. Este grupo de personas ha ido creciendo en el tiempo y en general son mujeres viudas o separadas. Ellas principalmente son trabajadoras independientes o asalariadas, que se caracterizan por tener a lo más nivel secundario, obtener bajos ingresos sobre todo las no profesionales y las que laboran en empresa de 2 a 9 trabajadores. En general, hay más desempleadas que desempleados en el Perú, sobre todo el desempleado femenino es más alto en el área urbana que en la rural. También, en Lima Metropolitana y la costa urbana del país, el desempleo de las mujeres es alto relativamente a los hombres. Las mujeres desempleadas son principalmente jóvenes y estas tienen educación secundaria primordialmente. En cuanto a la desigualdad salarial, esta aún persiste y principalmente se explica por la discriminación existente en casi todos los grupos ocupacionales analizados. La brecha de ingresos se ha incrementado en los últimos tres años, sobre todo, la brecha de ingresos laborales es amplia en las empresas de 50 a más trabajadores y en los trabajadores independientes. Sin embargo, son notables las diferencias del ingreso entre las mujeres que laboran en el ámbito urbano y rural. 87 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Referencias bibliográficas ALIDE (2009), El papel contracíclico de la banca de desarrollo frente a la crisis económica internacional. Ponencia presentada en la 38 Asamblea. Barro R. (1986). Macroeconomía, McGraw- Hill, 1986. Becker G. (1957), The Economics of Discrimination, University of Chicago Press. Blinder (1973), “Wage discrimination: reduced form and structural estimates”. The Journal of Human Resources, vol. VIII, Nº 4. Calónico S. y H. Ñopo H. (2008), Gender Segregation in the Workplace and the wage gaps: Evidence from urban Mexico. CEPAL (2007), Panorama Social de América Latina 2008. Publicación de las Naciones Unidas. Santiago de Chile. 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Discussion Paper Series. IZA DP No 979, Institute for the Study of Labor (IZA). Ñopo H. (2004a), Gender and Racial Discrimination in Hiring: A Pseudo Audit Study for Three Selected Occupations in Metropolitan Lima. IZA. Discussion Paper 979. Institute for the Study of Labor (IZA). 88 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Ñopo H. (2004b), Matching as a Tool to Decompose Wage Gaps. IZA. Discussion Paper 981. Institute for the Study of Labor (IZA). Ñopo H. (2008), Gender Segregation in the Workplace and the wage gaps: Evidence from urban Mexico. OIT (2007), Tendencias Mundiales del Empleo de las Mujeres 2007. Trabajo. Ginebra. Oficina Internacional del OIT (2008), Tendencias Mundiales del Empleo de las Mujeres. Oficina Internacional del Trabajo. Ginebra. PEEL (2000), Participación Laboral: Un enfoque de oferta familiar de trabajo. Boletín de Economía Laboral 16.MTPE. PEEL (2008), Informe Anual 2005. La Mujer en el Mercado Laboral Peruano. MTPE. PEEL (2007), La Mujer en el Mercado Laboral de Lima Metropolitana. Informe Anual 2008. MTPE. Lima. UNFPA (2009), Ser mujer en tiempos de crisis. Uruguay. Julio del 2009. UNFPA CIES INEI, 2009 Censo del 2007. Análisis de temas poblacionales. 89 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Anexos La población ocupada se concentra en la región Lima, siendo la población ocupada masculina mayor que la femenina. En el caso de los hombres, la concentración de la población ocupada –luego de Lima- se presenta en las regiones de Piura, Cajamarca, La Libertad y Puno; mientras que para las mujeres luego de Lima la población mayormente ocupada se encuentra en las regiones de Cajamarca y Puno. La población empleada de hombres es mayor a la de mujeres en la mayoría de regiones, con las excepciones de Puno y Huancavelica. Anexo 1 Perú: Población ocupada por sexo, según regiones, 2008 Sexo Regiones Total Hombre Total Amazonas Ancash Apurímac Arequipa Ayacucho Cajamarca Callao Cusco Huancavelica Huánuco Ica Junín La Libertad Lambayeque Lima Loreto Madre de Dios Moquegua Pasco Piura Puno San Martín Tacna Tumbes Ucayali Mujer 14 853 975 8 121 691 6 732 284 230 450 632 346 264 463 602 167 319 019 915 634 401 958 692 504 256 661 444 602 385 005 700 181 790 458 577 754 4 269 292 437 313 62 363 92 959 141 580 870 285 820 556 404 624 187 377 117 771 236 653 135 075 340 754 136 887 328 256 166 182 480 850 228 030 359 238 125 665 242 992 215 586 363 321 451 081 323 505 2 302 201 261 420 36 821 52 657 80 496 512 485 413 852 248 876 104 103 69 574 141 783 95 375 291 592 127 575 273 911 152 837 434 783 173 928 333 267 130 996 201 611 169 419 336 861 339 377 254 249 1 967 091 175 893 25 542 40 302 61 083 357 800 406 704 155 748 83 274 48 197 94 870 Informe Anual 2008 La Mujer en el MercadoLaboral Peruano 1 Ministerio de Trabajo y Promoció n del Empleo Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 90 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Al igual que en el caso de la población ocupada, la región Lima concentra la mayor cantidad de desocupados. Sin embargo, en sentido contrario a los niveles de ocupación en este caso la población femenina desocupada es mayor que la masculina. Para el caso de los hombres, las mayores significancias de población desocupada luego de la región Lima se presenta en las regiones de Piura, La Libertad, Arequipa, Lambayeque, Callao y Junín. En el caso de las mujeres, las mayores representaciones de la población desocupada luego de la región Lima se presenta en las regiones de Piura, Arequipa, Lambayeque, Callao, Cusco y Junín. Anexo 2 Perú: Población desocupada por sexo, según regiones, 2008 Regiones Total Amazonas Ancash Apurímac Arequipa Ayacucho Cajamarca Callao Cusco Huancavelica Huánuco Ica Junín La Libertad Lambayeque Lima Loreto Madre de Dios Moquegua Pasco Piura Puno San Martín Tacna Tumbes Ucayali Total Sexo Hombre Mujer 650 638 310 480 340 159 2 664 17 641 3 901 28 542 5 531 14 661 33 573 21 535 2 064 11 357 18 295 26 316 23 966 34 450 287 993 14 223 1 162 5 899 6 264 41 730 16 805 9 867 8 345 5 953 7 902 1 557 8 891 2 310 13 427 2 710 8 461 13 853 10 299 1 038 6 705 8 726 14 347 13 427 19 101 126 644 7 382 632 2 762 4 293 20 559 8 963 4 654 2 781 2 515 4 443 1 107 8 750 1 591 15 115 2 822 6 200 19 719 11 236 1 026 4 652 9 569 11 969 10 539 15 349 161 349 6 842 529 3 138 1 971 21 171 7 842 5 213 5 565 3 438 3 459 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 91 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano La población inactiva se concentra –para ambos sexos- en la región Lima, siendo la población masculina menor que la femenina. En el caso de los hombres –luego de Lima- la concentración de la población en estado de inactividad se da en La Libertad, Piura y Arequipa. En el caso de las mujeres, la concentración de la población inactiva luego Lima ocurre en Piura, La Libertad, Lambayeque y Arequipa. Cabe resaltar que la población inactiva, sin excepciones, es mayor en todas las regiones para las mujeres. Anexo 3 Perú: Población inactiva por sexo, según regiones, 2008 Regiones Total Amazonas Ancash Apurímac Arequipa Ayacucho Cajamarca Callao Cusco Huancavelica Huánuco Ica Junín La Libertad Lambayeque Lima Loreto Madre de Dios Moquegua Pasco Piura Puno San Martín Tacna Tumbes Ucayali Total 5 537 931 65 677 196 673 63 429 290 590 79 447 164 359 217 080 157 686 45 548 133 827 166 753 215 632 359 440 241 508 2 007 228 175 694 16 030 39 764 62 689 346 472 154 286 151 538 67 509 43 395 75 678 Sexo Hombre 1 733 750 18 097 62 084 23 040 100 042 24 574 42 886 64 396 52 874 19 929 42 951 52 796 73 225 111 856 71 338 633 731 52 677 4 969 15 160 19 723 92 867 64 258 35 958 22 011 11 364 20 946 Mujer 3 804 181 47 579 134 588 40 389 190 548 54 872 121 473 152 684 104 812 25 619 90 877 113 957 142 407 247 585 170 170 1 373 497 123 016 11 061 24 604 42 966 253 605 90 028 115 581 45 498 32 031 54 732 Nota: Se considera como “inactivos” a todas las personas que pertenecen a la población en edad de trabajar, y que no han trabajado ni buscado trabajo y no desean trabajar. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 92 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Respecto a las diferencias en la tasa de desempleo por género y región, las regiones con mayores tasas de desempleo son, en el caso de los hombres, Callao (7,7%) y Moquegua (6%), mientras que las más bajas son para Huancavelica (0,8%), Amazonas (1,1%) y Cajamarca (1,6%). En el caso de las mujeres, las tasas de desempleo más altas se encuentran en las regiones de Callao (10,2%), Lima (7,6%) y Moquegua (7,2%). Anexo 4 Perú: Tasa de desempleo por sexo, según regiones, 2008 Regiones Sexo Total Hombre Total Amazonas Ancash Apurímac Arequipa Ayacucho Cajamarca Callao Cusco Huancavelica Huánuco Ica Junín La Libertad Lambayeque Lima Loreto Madre de Dios Moquegua Pasco Piura Puno San Martín Tacna Tumbes Ucayali 4,2 1,1 2,7 1,5 4,5 1,7 1,6 7,7 3,0 0,8 2,5 4,5 3,6 2,9 5,6 6,3 3,1 1,8 6,0 4,2 4,6 2,0 2,4 4,3 4,8 3,2 3,7 1,1 2,5 1,7 3,9 1,6 1,7 5,7 2,8 0,8 2,7 3,9 3,8 2,9 5,6 5,2 2,7 1,7 5,0 5,1 3,9 2,1 1,8 2,6 3,5 3,0 Mujer 4,8 1,1 2,9 1,2 5,2 1,8 1,4 10,2 3,3 0,8 2,3 5,3 3,4 3,0 5,7 7,6 3,7 2,0 7,2 3,1 5,6 1,9 3,2 6,3 6,7 3,5 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 93 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano El ingreso promedio mensual es mayor –en todas las regiones- para la población masculina. De estos, los que perciben mayores ingresos son los correspondientes a las regiones de Lima, Moquegua, Madre de Dios, Callao y Tacna (más de mil Nuevos Soles en todos los casos), mientras que la región donde, en promedio, se obtiene los salarios más bajos es Huancavelica. En el caso de las mujeres, son las de las regiones de Madre de Dios, Lima, y Callao, las que obtienen los más altos ingresos promedio mensuales (más de 800 Nuevos Soles), mientras que las que trabajan en Huancavelica obtienen los menores ingresos. Anexo 5 Perú: Ingreso laboral promedio mensual de la PEA ocupada por sexo, según regiones, 2008 (En nuevos soles) Regiones Total Amazonas Ancash Apurímac Arequipa Ayacucho Cajamarca Callao Cusco Huancavelica Huánuco Ica Junín La Libertad Lambayeque Lima Loreto Madre de Dios Moquegua Pasco Piura Puno San Martín Tacna Tumbes Ucayali Total 859,5 595,6 685,2 449,7 969,6 473,5 479,8 1 083,5 597,7 372,5 499,4 762,1 774,8 739,4 615,1 1 237,5 688,3 1 168,8 1 240,1 675,0 611,4 411,6 734,2 1 065,7 744,3 727,2 Sexo Hombre Mujer 1 001,9 640,4 816,6 483,9 1 203,5 532,5 577,4 1 284,8 686,8 416,4 571,7 893,8 951,1 886,7 762,1 1 481,7 744,7 1 270,3 1 604,7 795,7 724,1 505,4 805,1 1 346,6 895,6 772,8 652,7 496,2 459,8 377,6 667,7 376,2 318,1 815,2 453,0 292,9 368,4 586,3 534,8 509,2 406,9 941,9 580,5 982,0 643,5 444,5 415,8 277,7 590,7 674,5 516,5 644,6 Nota: Se excluye en el cálculo de ingresos a los Trabajadores Familiares no Remunerados y a los que no perciben ingresos. Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 94 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Respecto a las diferencias en el número de horas trabajadas por región, en el caso de los hombres, la mayor cantidad se presentan en las regiones de Madre de Dios, Tacna, Lima, Callao, (con 53 o más horas a la semana). En el caso de las mujeres, la mayor cantidad de horas de trabajo se presentan en las regiones de Madre de Dios (con 52 horas a la semana). Es importante resaltar que en todas las regiones el número de horas trabajadas por las mujeres resultan siendo menores en relación a las que trabaja la población masculina. Anexo 6 Perú: Número de horas promedio trabajadas a la semana de la PEA ocupada por sexo, según regiones, 2008 Regiones Total Amazonas Ancash Apurímac Arequipa Ayacucho Cajamarca Callao Cusco Huancavelica Huánuco Ica Junín La Libertad Lambayeque Lima Loreto Madre de Dios Moquegua Pasco Piura Puno San Martín Tacna Tumbes Ucayali Total 46,0 42 46 44 47 43 38 49 46 38 40 48 47 46 47 50 46 54 50 48 44 40 45 51 46 45 Sexo Hombre Mujer 49,4 45 50 48 49 44 42 53 49 41 43 51 51 51 51 53 46 55 54 51 49 41 47 53 50 48 41,9 38 40 40 44 41 34 44 43 36 37 43 42 40 43 45 46 52 44 43 37 39 42 48 40 41 Fuente: INEI - Encuesta Nacional de Hogares, sobre Condiciones de Vida y Pobreza, continua 2008. Elaboración: Propia. 95 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano Glosario de Términos 1. Población en Edad de Trabajar (PET) Conjunto de personas que están aptas en cuanto a edad para el ejercicio de funciones productivas. Este límite etéreo es diferente para cada país y depende de la legislación, el acceso a la educación y las costumbres nacionales. En el Perú, se considera a toda la población de 14 años y más como población en edad activa o población en edad de trabajar (PET). 2. Población Económicamente Activa (PEA) Son todas las personas en edad de trabajar que en la semana de referencia se encontraban trabajando (ocupados) o buscando activamente trabajo (desocupados). 3. Población No Económicamente Activa (inactivos) Son todas las personas que pertenecen a la población en edad de trabajar que en la semana de referencia no han trabajado ni buscado trabajo y no desean trabajar. Dentro de este grupo se encuentran las amas de casa, los estudiantes, los rentistas y los jubilados, que no se encontraban trabajando ni buscando trabajo. También se consideran dentro de este grupo a los familiares no remunerados que trabajan menos de 15 horas de trabajo semanales durante el periodo de referencia. 4. PEA ocupada Es el conjunto de la PEA que trabaja en una actividad económica, sea o no en forma remunerada en el periodo de referencia. En este grupo se encuentra las personas que: § Tienen una ocupación o trabajo al servicio de un empleador o por cuenta propia y perciben a cambio una remuneración en dinero o especie. § Tienen una ocupación remunerada, no trabajaron por encontrarse enfermos, de vacaciones, licencia, en huelga o cierre temporal del establecimiento. § El independiente que se encontraba temporalmente ausente de su trabajo durante el periodo de referencia pero la empresa o negocio siguió funcionando. § Las personas que prestan servicios en las Fuerzas Armadas, Fuerzas Policiales o en el Clero. 5. PEA subempleada Son los trabajadores cuya ocupación no es adecuada cuantitativa y cualitativamente, respecto a determinadas normas. En el caso del Perú se considera dos grupos de subempleo, por horas y por ingresos. 6. Subempleo por horas (visible) Es aquel en el que se labora menos de 35 horas a la semana, se desea trabajar horas adicionales y se esta en disposición de hacerlo. 96 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano 7. Subempleo por ingresos (invisible) Es aquel en el que se labora 35 o más horas semanales, pero su ingreso es menor al ingreso mínimo de referencia. 8. Ingreso Mínimo Referencial Es aquel que se obtiene de dividir el costo de la Canasta Mínima de Consumo (elaborado en base a los requerimientos mínimos nutricionales en calorías y proteínas) entre el número promedio de perceptores del hogar. Se asumen que existen dos perceptores de ingreso por hogar. 9. PEA adecuadamente empleada Está conformada por dos grupos de trabajadores: Aquellos que laboran 35 horas o más a la semana y reciben ingresos por encima del ingreso mínimo referencial, y aquellos que laboran menos de 35 horas semanales y no desean trabajar más horas. 10. PEA desocupada Se considera en esta categoría a las personas de 14 años y más que en el período de referencia no tenían trabajo, buscaron activamente trabajo durante la semana de referencia y no lo encontraron. 11. Desalentados Conformado por las personas que sin trabajar y estando dispuesto hacerlo no buscaron empleo por considerar que eran malas las posibilidades ofrecidas por el mercado y por lo tanto sabían que no lo encontrarían, pero que sí lo buscarían si tuviesen una percepción más positiva de las posibilidades laborales. 12. Período de referencia Se entiende por periodo de referencia al mes o semana que corresponde recoger información. 13. Estructura de mercado Clasificación que se hace a los diferentes grupos de ocupados que existen diferenciados básicamente por quién es el demandante de trabajo: sector público, sector privado, hogares, y el grupo de independientes que son demandantes y oferentes de trabajo a la vez. El sector privado incluye a empleadores y asalariados y se subdivide en: § Microempresas: de 2 a 9 trabajadores. § Pequeña empresa: de 10 a 49 trabajadores. § Mediana y gran empresa: de 50 a más trabajadores. 14. Principales indicadores § Tasa de actividad: Mide la participación de la población en edad de trabajar (PET) en el mercado de trabajo, sea trabajando o buscando trabajo. La tasa de actividad nos indica qué porcentaje de la PET constituye la oferta laboral (es decir la Población Económicamente Activa – PEA). 97 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo Informe Anual 2008 La Mujer en el Mercado Laboral Peruano § Tasa de Desempleo: Nos indica que proporción de la oferta laboral (PEA) se encuentra desempleada. § Tasa de Subempleo: Nos indica que proporción de la oferta laboral (PEA) se encuentra subempleada. § Tasa de Adecuadamente Empleado: Mide la proporción de la oferta laboral (PEA) que se encuentra adecuadamente empleada. § Ratio empleo / población: Mide el porcentaje de las personas de la (PET) que se encuentran trabajando. 15. Categoría ocupacional La PEA ocupada se agrupa en seis categorías de ocupaciones § Empleador / patrono: Es aquella persona que es titular o director en la explotación de una empresa, negocio o profesión y tiene trabajadores remunerados a su cargo. § Empleado: Es el trabajador que desempeña de preferencia en actividades de índole no manual, presta sus servicios a un empleador pública o privado, y que percibe una remuneración mensual (sueldo). § Obrero: Se denomina así, al trabajador que desempeña actividades de carácter manual, que trabaja para un empleador público o privado, y que percibe una remuneración semanal (salario). § Trabajador independiente: Es aquella persona que trabaja en forma individual o asociada, explotando una empresa, negocio o profesión, y que no tiene trabajadores remunerados a su cargo. § Trabajador doméstico: Es la persona que presta servicios en une vivienda particular y recibe una remuneración mensual por sus servicios, y generalmente recibe alimentos. Nota: los trabajadores que prestan servicios domésticos (lavado, cocina, limpieza, etc.) para una empresa o establecimiento público o privado y no para una familia particular, debe ser considerado obrero y no trabajador doméstico. Trabajador familiar no remunerado: Es la persona que presta sus servicios en una empresa o negocio, con cuyo patrón o dueño tiene lazos de parentesco, sin percibir remuneración. En algunos casos recibe propina u otras formas de pago diferentes a sueldo, salario o comisiones. (OIT, Octava Conferencia Internacional de Estadígrafos del Trabajo). 98 Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo