COMPRESIÓN DE TEXTOS Información relevante de un texto Esta información está determinada tanto por el autor como por el lector de ahí la necesidad de reconocer la: 1. Perspectiva del autor. 2. Perspectiva del lector. 1. Perspectiva del Autor Para reconocer esta perspectiva es fundamental reconocer la estructura que el autor da al texto así como las señales que utiliza para destacar conceptos importantes. Estructuras de un texto Una vez reconocida la estructura del texto, es decir, una vez que se está en condiciones de decir qué clase de texto se lee, es posible determinar claramente qué esperaba el autor con su creación. Es importante recordar que es posible encontrar una gama de estructuras dentro de un mismo texto, de ahí la necesidad de reconocerlas, ya que: “el autor recurre a un determinado estilo o estructura de texto según el objetivo que pretenda realizar” (Bustos, 1994). Señales de Relevancia Para reconocer aquella información en que el autor espera que el lector centre su atención se debe considerar: Tamaño de las letras: Títulos, subtítulos, apartados, subapartados. Otras señales gráficas “entrecomillado”, subrayado. como: Uso de negrita, cursiva, Señales léxicas: “Por lo tanto...”, “como conclusión, podemos afirmar que...”, “de todo ello podemos decir que...” Otros aportes gráficos: Texto al pie de fotografías, esquemas y gráficos, anotaciones al margen. 2. Perspectiva del Lector. La perspectiva del lector estará determinada por elementos tales como intereses personales, conocimientos previos, objetivo de la lectura y las predicciones que haga a partir del índice, las señales de relevancia dadas por el autor y la estructura del texto. Aun cuando muchos de los elementos involucrados en la lectura de un texto son realizados por el lector en forma inconsciente, se hace fundamental, para una comprensión óptima, la explicitación y toma de conciencia de cada uno de estos elementos, de tal forma que el lector sea capaz de reconocer su postura frente al tema leído, responder acerca de sus conocimientos previos, indagar acerca del objetivo para el cual lee y establecer las predicciones del tema. Una vez que estas áreas han sido consideradas el lector se encuentra en excelentes condiciones para abordar el texto a leer.