42 LATERCERA Miércoles 31 de agosto de 2016 Sociedad Cultura César Aira: “Estoy cansado de que me traten de prolífico” R El escritor argentino, de 67 años, autor de más de 70 títulos, obtuvo el Premio de Narrativa Manuel Rojas, que otorga US$ 60 mil. RR César Aira, en una de sus visitas a Chile, fue premiado ayer en forma unánime por el jurado. FOTO: ARCHIVO Javier García En mayo pasado estuvo promocionando sus libros en España, donde habló de arte, de jazz, de poesía, de Borges, de Kafka, de Joyce, y también dijo: “Yo hago pura literatura, por eso no me dan premios”. Con 67 años, César Aira sabe que el camino de los galardones no se cruza demasiado con su obra. Esto, a pesar de que Literatura Random House reeditó sus mejores libros en la colección Biblioteca César Aira. Ya están disponibles, entre otros, Ema, la cautiva, Las noches de Flores y El santo. “Estaba convencido, y se lo decía a todo el mundo, que yo nunca iba a ganar ningún premio importante. Me alegra de haber estado equivocado”, dijo ayer César Aira vía email a La Tercera, a pocas horas de enterarse de que era el nuevo Premio Iberoamericano de Narrativa Manuel Rojas, que otorga una medalla, un diploma y US$ 60 mil (unos 40 millones de pesos). “Como decía Borges, ‘Me he equivocado tantas veces que albergo la esperanza de volver a equivocarme’”, agrega el autor de más de 70 libros, quien el año pasado fue finalista del premio Man Booker. Luego de la traducción de sus libros al inglés y ante su estilo innovador, el diario The New York Times lo consideró “el Duchamp de la literatura latinoamericana”. El anuncio se realizó ayer en la mañana, en la Biblioteca de Santiago. “La asombrosa variedad de su obra, así como la calidad de las novelas y relatos que Aira ha publicado a lo largo de ya varias décadas de incansable labor literaria, lo hacen merecedor del premio”, señaló el acta del jurado, leída por el ministro de Cultura, Ernesto Ottone. El jurado del premio, que entrega el Consejo de la Cultura con el patrocinio de la Fundación Manuel Rojas, estuvo integrado por la nicaragüense Gioconda Belli, los mexicanos Margo Glantz y Christopher Domínguez Michael, y los escritores chilenos Alvaro Bisama y Poli Délano. Actos de caridad “Oigo muy mal, pero estoy muy sorprendido y feliz”, fueron las palabras de César Aira que se escucharon por teléfono cuando lo contactó el ministro Ottone, quien informó que su nombre fue elegido por unanimidad. El narrador, quien vive en Buenos Aires y en cuya lite- ratura se funde la historia, la fantasía, el humor y el delirio, es el segundo argentino premiado tras Ricardo Piglia (2013). A ellos se agregan Margo Glantz (2015) de México, Horacio Castellanos Moya (2014) de El Salvador y Rubem Fonseca (2012) de Brasil. “Es un escritor experimental, pero no un escritor para eruditos y que en efecto no había ganado premios importantes”, señaló el crítico Christopher Domínguez Michael sobre el autor nacido en Coronel Pringles, en 1949, quien ha desarrollado gran parte de su vida en el barrio porteño de Flores. Lugar que se ha convertido en escenario de sus narraciones. “Su sentido del humor es extraordinario y tiene una capacidad crítica a partir de lo que escribe que, por un lado, respeta la tradición, DESTACADOS Ema, la cautiva [CESAR AIRA] Literatura Random House 184 págs. $ 14.000 Continuación de ideas diversas [CESAR AIRA] Ediciones UDP, 88 págs. $ 8.500 Relatos reunidos [CESAR AIRA] Literatura Random House 224 págs. $ 13.000 pero por otro lado, la derrumba”, comentó Margo Glantz, quien dice haber leído de Aira, las novelas Canto castrato, Cómo me hice monja y Un episodio en la vida del pintor viajero. “La obra de Aira ha tenido una circulación muy particular y diversa, que en apariencia es vanguardista cuando es completamente nítida en muchos aspectos”, agregó Bisama sobre el también traductor, cuya producción, en parte, ha sido publicada en editoriales independientes. Por ejemplo, en Chile, Actos de caridad fue editado por el sello Hueders, y Yo era una mujer casada por editorial Cuneta. Además, sus ensayos Continuación de ideas diversas están incluidos en el catálogo de Ediciones UDP. “Estoy cansado de que me traten de prolífico. Por unos años escribiré sólo para mí”, dice Aira, en broma y en serio, acostumbrado a publicar en promedio dos a tres libros al año. “La literatura es mi placer cotidiano, tanto escribiendo como leyendo, eso no ha cambiado ni va a cambiar”, agrega. ¿Qué estaba haciendo cuando recibió la noticia? Estaba nervioso y preocupado por la inminencia de un viaje largo y complicado al que parto el lunes, a Alemania, Noruega, Suiza y Austria, un mes de ajetreo que ya no estoy en edad de soportar. Me consolaré pensando en la prosperidad futura que me augura la generosidad chilena. ¿Tuvo interés por los libros de Manuel Rojas? A Manuel Rojas lo he leído mucho, puede parecer puro agradecimiento o demagogia, pero creo que fue desde siempre mi gran favorito de la literatura chilena.b