Un nuevo salto de inestabilidad cambiaria: dólar (oficial) a 11,74 pesos a un año Equipo Bconomics Septiembre 2014 Finalizado agosto, el Monitor de Estabilidad Cambiaria (MEC) de Bconomics vuelve a mostrar una caída respecto de los meses precedentes. Construido en base a la evolución de cinco variables relevantes que directa o indirectamente capturan los desequilibrios en distintos mercados, el monitor cubre un período extenso de evolución cambiaria en Argentina. Desde enero de 1994 y a la actualidad, se construye en base al desempeño mensual de inflación, reservas, brecha cambiaria, tasa de interés y grado de pesificación del sistema financiero. Cada una de esas variables tiene un signo esperado y se combinan entre sí para construir el MEC según una forma funcional específica. El resultado es el que se presenta en los Gráficos N°1 y N°2 para el largo y el corto plazo, respectivamente. Gráfico N°1: MEC largo plazo (1994-2014) (Índice 2004=1) El gráfico de largo plazo muestra que, corrigiendo la serie por el impacto que representó la cancelación de la deuda con el FMI por el uso de reservas internacionales, desde agosto de 2006 la tendencia del MEC es decreciente. Es decir, desde ese momento se comienza a observar un continuo deterioro de la estabilidad del tipo de cambio, que se detiene hacia fines de 2008 y se mantiene relativamente constante durante más de dos años, hasta mediados de 2011. Desde ese momento se reinicia un período prolongado de inestabilidad cambiaria, que es coronado con el cepo cambiario para tenencia de dólares para ahorro a fines de ese año. El MEC marca su mínimo absoluto en enero de 2014, cuando el deterioro de la situación monetaria-cambiaria tuvo como implicancia la reacción del Banco Central, con una depreciación del tipo de cambio que superó el 22% de un día para el otro, y la suba de la tasa de interés. Esa situación es la que impulsó la mejora del MEC, que se recuperó fuertemente tras esas medidas tal cual lo muestra el Gráfico N°2 (aunque sólo en el primer semestre del año). www.bconomics.com Gráfico N°2: MEC corto plazo (2011-2014) (Índice 2004=1) Sin embargo, la combinación de malas noticias en el frente externo – conflicto con los holdouts, malas perspectivas para la evolución del precio de la soja y el ritmo de expansión de Brasil- que impactaron en la brecha cambiaria y la falta de resolución de los principales problemas a nivel local –aceleración de la inflación y caída de la tasa de interés real-, volvieron a presionar al MEC, lo cual se tradujo en una nueva caída en agosto, y lo sigue ubicando en zona de tensión. En relación a 2004, cuando se registra un período de elevada estabilidad, similar a la del período 1997-20001, la distancia es aún del 22%. Otra de las posibilidades que permite el MEC es trazar la comparación relativa entre períodos de más o menos estabilidad cambiaria, y así inferir momentos de menor o mayor expectativa de depreciación del tipo de cambio. A menor nivel del monitor, mayor la expectativa de depreciación y viceversa. En base a este potencial, considerando el nivel de estabilidad cambiaria de 2004 como benchmark, y el elevado poder de anticipación del MEC de la depreciación esperada en el mes 12 posterior2, los Gráficos N°3 y N°4 muestran la evolución observada del tipo de cambio y la estimación de Bconomics en base al MEC en el largo y corto plazo, respectivamente. El Gráfico N°3 muestra el elevado grado de convergencia que muestran las series de tipo de cambio nominal observado (oficial) y el estimado por Bconomics en base al MEC para el mismo momento del tiempo. Sin embargo, el tipo de cambio de Bconomics estimó ese valor 12 meses antes de que efectivamente se registrara. La diferencia promedio fue de 4 centavos entre ambas observaciones a lo largo del período 2004-2014 (la serie de Bconomics subestimó el tipo de cambio por ese valor promedio). 1 En este período bajo un esquema cambiario estructuralmente distinto, mucho más sólido, con tipo de cambio fijo, lo cual ubica a 2004 como un período mucho más sólido en términos relativos. 2 Coeficiente de correlación de 0,85 con el signo negativo, como lo esperado –a mayor estabilidad menor expectativa de depreciación y viceversa. www.bconomics.com Gráfico N°3: Tipos de cambio (2004-2014, u$s/$) El Gráfico N°4 presenta ambas series de tipo de cambio para un período más corto –desde 2011- y las completa con las estimaciones según la expectativa de depreciación indicada por el monitor de Bconomics y por los últimos precios de los contratos futuros de tipo de cambio operados en ROFEX. Según la cotización del oficial de fin de agosto de 8,42 pesos por dólar, el tipo de cambio a un año estimado en base al MEC es de 11,74 (una depreciación de 39,5%). En relación al contrato futuro en ROFEX a un año, el tipo de cambio estimado es levemente superior ($ 11,31 por dólar para la posición de agosto 2015 -depreciación anual de 34%). Gráfico N°4: Tipos de cambio (2011-2015, u$s/$) Más allá de las diferencias, en cualquiera de los dos casos, la incertidumbre sobre la evolución del tipo de cambio exige prudencia en el manejo de los ingresos y gastos. En la medida en que no se disipen los temores que recaen sobre la economía, sobre todo los relacionados al tema holdouts y la disponibilidad de financiamiento externo –y no tanto sobre su costo a esta altura- las dudas sobre la evolución del tipo de cambio se mantendrán. El objetivo debería ser seguir reduciendo la brecha, tal cual lo muestra el MEC desde enero de este año, evitando los sobresaltos excesivos que paralizan la toma de decisiones y afectan el nivel de actividad económica. www.bconomics.com