LA NOVELA REALISTA Y NATURALISTA. SIGLO XIX CONTEXTO HISTÓRICO Y SOCIAL Movimiento que surge en la segunda mitad del siglo XIX como reacción al Romanticismo. Desde el punto de vista político: se produce el reinado de Isabel II con la alternancia entre moderados y progresistas, el breve reinado de Amadeo I, el paréntesis republicano y la Restauración borbónica en la persona de Alfonso XII, hijo de Isabel II. Termina este periodo con el Desastre del 98. Comienza un desarrollo inusitado de la industria con el consiguiente crecimiento de la ciudad en perjuicio del campo, aumentan los medios de comunicación y transporte, y se acrecientan los problemas sociales: se consolida la burguesía y aparece el proletariado. Todo gira en torno a una idea: la ciencia, entendiendo como tal aquella rama que se orienta solo a lo material, a lo experimental, a lo positivo. CARACTERÍSTICAS a. Preocupación por el hombre en particular, no en general. b. El escritor se preocupa de los problemas cotidianos y de la realidad circundante; ya no se preocupa de reflejar la vida en épocas pasadas, sino que aspira a que la literatura sea un trozo de vida, una reproducción de la realidad. c. Este hombre está en un medioambiente concreto, se reproducen con exactitud paisajes, ambientes. d. Representa el equilibrio frente a la exaltación romántica. Se busca la perfección. e. Todas las obras contienen una tesis moral o social. f. Pérdida de lo poético, dominio de lo conceptual. g. El lenguaje se aplebeya. h. El Naturalismo se inicia en Francia y es en este país donde más se desarrolla, deriva del Realismo y lo lleva al extremo. En España, se mezcla con el Realismo y aparecen resonancias naturalistas en Clarín, Pardo Bazán, Blasco Ibáñez, etc. Comparten el espíritu de lucha contra la ideología tradicional y, en algunos casos, su gesto subversivo. Dan importancia a la herencia biológica y al medioambiente, que determina el comportamiento de los personajes. GÉNEROS, AUTORES Y OBRAS Narrativa Pedro Antonio de Alarcón. El sombrero de tres picos plantea el tema tradicional de la honesta molinera pretendida por el Corregidor, persona vieja y libertina que da celos a su marido. La tesis moral está presente en esta obra. Juan Valera. Pepita Jiménez presenta a un joven seminarista al que intentan quitar su vocación una viuda y el padre del primero. Es un realista atípico, puesto que le interesa más retratar los estados de ánimo cambiantes de sus personajes que el entorno en que se mueven. José María Pereda. Posee grandes dotes de observación y refleja el paisaje y las gentes montañesas; transmite en sus obras sus ideas tradicionales y conservadoras. En estas novelas expresa la tesis de la paz y la ignorancia de las gentes de la montaña frente a la maldad de la ciudad con sus asechanzas políticas. En Sotileza y Peñas arriba los cántabros aparecen como gente sencilla con valores ancestrales; el paisaje es idílico. Benito Pérez Galdós. Uno de los más grandes narradores. Características de su novela: a. Los personajes transmiten los problemas de la clase media en su vida cotidiana. b. Elige un narrador omnisciente, que conoce todo lo que pasa y lo juzga. c. Alterna la narración y el diálogo, y con frecuencia los personajes descubren sus sentimientos a través del monólogo. d. La lengua suele reflejar el uso de la calle, coloquial y rico en matices (irónico, tierno, emocional,…) y en expresiones populares. Reflejará la historia de España entre la guerra de la Independencia y la Restauración en Los Episodios Nacionales, destacan: Trafalgar, Bailén, Gerona, etc. En ellos presenta hechos históricos, batallas y la vida cotidiana de muchos personajes. Están presentes todas las clases sociales y las distintas ideologías. La mezcla de realidad y ficción trasmite una imagen verosímil de la época. En sus primeras novelas los personajes representan una idea, son novelas de tesis: Doña Perfecta plantea el conflicto entre ideas liberales y conservadoras; Marianela (novela de carácter idealista) es la historia de una joven fea, pero de gran belleza espiritual, enamorada de un ciego que recobra la vista, muere cuando él se casa con otra. La vida madrileña se plasma en sus “novelas españolas contemporáneas”: Fortunata y Jacinta, Miau, Misericordia, etc. Reflejan la sociedad arruinada de burócratas y nobles, de personajes de bajos fondos y del proletariado que vive de forma miserable; retratan la avaricia, la caridad, la pasión, el tranquilo amor conyugal, las calles de Madrid,… Emilia Pardo Bazán. Defiende las ideas del Naturalismo y escribe según sus principios, pero de una manera más suave. Los Pazos de Ulloa reflejan la fuerza de la naturaleza y del instinto del ser humano, y presentan la decadencia de la aristocracia rural gallega. Leopoldo Alas, Clarín. Maestro del cuento y la novela. En Oviedo sitúa la gran novela del siglo XIX: La Regenta, a la que llama Vetusta, prototipo de ciudad tradicional y opresiva, donde presenta la vida de la burguesía y del clero (con tintes naturalistas). La trama se desarrolla en torno a un adulterio y la descripción de personajes revela una gran penetración psicológica, como el de Ana Ozores. Destaca la minuciosa descripción de ambientes, el humor, la ironía y la riqueza de los diálogos. Posee una intención moral: denuncia la falta de valores y la hipocresía de la sociedad de su época. Vicente Blasco Ibáñez. Refleja el mundo levantino en obras (de trágico final) como La barraca y Cañas y barro. Teatro En esta época es conocido como “alta comedia”, adopta las nuevas tendencias. Presenta estas características: generalmente escrito en prosa, de construcción perfecta, trata asuntos contemporáneos con finalidad moralizante, lenguaje sobrio y cuidado. Como autor destacado: Galdós con la obra El abuelo y el premio Nobel Echegaray. Poesía Es muy escasa. Ramón de Campoamor y Gaspar Núñez de Arce, que escriben un tipo de poesía grandilocuente con contenidos cívicos y sociales. Son los poetas más representativos.