ARROLLAMIENTOS Norberto A. Lemozy 1 INTRODUCCIÓN La teoría clásica de las máquinas eléctricas está basada en el estudio de las interacciones entre fuerzas magnetomotrices, éstas son las dan lugar al campo magnético dentro de la máquina, a las tensiones inducidas, y a la denominada cupla electromagnética en las máquinas rotativas. Esas fuerzas magnetomotrices están producidas por las corrientes que circulan por los distintos arrollamientos. En este capítulo se hará una descripción de los distintos tipos de arrollamientos utilizados en las máquinas eléctricas, haciendo especial hincapié en los denominados distribuidos, que son los más difíciles de concebir. 2 FORMAS CONSTRUCTIVAS Y TIPOS DE ARROLLAMIENTOS En las máquinas eléctricas rotativas se encuentran dos formas constructivas básicas: las cilíndricas y con polos salientes. Estas se pueden encontrar en el estator, en el rotor o en ambos, lo que da lugar a cuatro posibilidades constructivas, que se muestran en la figura 1. a b c d Fig. 1. Combinación de formas constructivas. Los usos más frecuentes de las distintas combinaciones son: a) Estator y rotor cilíndricos: es la combinación característica de los motores asincrónicos y de las máquinas sincrónicas de alta velocidad. b) Estator cilíndrico y rotor con polos saliente es característico de las máquinas sincrónicas de baja velocidad. c) Estator con polos salientes y rotor cilíndrico es característico de las máquinas de corriente continua y de algunas máquinas sincrónicas de poca potencia. d) Estator y rotor con polos salientes se emplea en máquinas especiales, por ejemplo en los motores por pasos. 2.2 Formas cilíndricas En las formas cilíndricas de las máquinas se colocan arrollamientos distribuidos, estos arrollamientos están formados por bobinas ubicadas en toda o parte de esa superficie cilíndrica. 1 Para fijar las bobinas éstas se colocan en ranuras realizadas en la superficie o muy cerca de ella. En general esas bobinas se encuentran recorridas por corriente alterna y cumplen la función de inducido, (lugar donde se inducen tensiones). Como en esas formas cilíndricas el flujo es alterno, las mismas deben ser laminadas y con chapas finas, para disminuir las pérdidas por corrientes parásitas y permitir la rápida variación del flujo. En la figura 2 se muestra una máquina de corriente continua de dos polos donde se pueden apreciar el arrollamiento rotórico del tipo distribuido, que cumple la función de inducido. 2.1 Polos salientes En los polos salientes de las máquinas se colocan arrollamientos concentrados que son bobinas ubicadas alrededor de los polos. Esos arrollamientos concentrados generalmente se encuentran recorridos por corriente continua y cumplen la función de excitación. Los ejemplos característicos son las máquinas de corriente continua y las sincrónicas de baja velocidad. Como el flujo en esos polos salientes es constante, o varía lentamente, se los puede construir macizos, pero muchas veces se los hace laminados, con chapas relativamente gruesas, para facilitar su construcción, ya que es más fácil estampar chapas con la forma adecuada y luego apilarlas que mecanizar un bloque de acero. En la misma máquina de corriente continua de la figura 2 se pueden apreciar polos salientes con arrollamientos concentrados en el estator los que cumplen la función de excitación. Polo saliente con arrollamiento concentrado Inducido cilíndrico con arrollamiento distribuido Fig. 2. Máquina de corriente continua. Estos arrollamientos concentrados se fabrican sobre moldes y luego de aislarlos convenientemente, se colocan en los polos de la máquina. Si los conductores no tienen suficiente sección como para mantener la forma de la bobina, se utilizan carretes de soporte de material aislante. 2 3 ARROLLAMIENTOS DISTRIBUIDOS 3.1 Tipos de arrollamiento Así como los arrollamientos concentrados son simples bobinas, fáciles de concebir, los arrollamientos distribuidos son mucho más complejos ya que deben cumplir no solamente condiciones eléctricas y magnéticas, sino también constructivas: las bobinas deben ser sencillas de realizar, de colocar y minimizar el uso de materiales. Los arrollamientos rotóricos de las máquinas eléctricas se conectan a través de escobillas que puede apoyar sobre anillos rozantes, figura 3, que son aros conductores, continuos, conectados a los extremos del arrollamiento; o sobre un colector, figura 4, que está formado por segmentos conductores, denominados delgas, aisladas entre sí y conectadas a cada bobina. Paquete de chapas ranurado Conexiones Anillos rozantes Eje Eje Escobillas Cabezas de bobina Fig. 3. Anillos rozantes en un roto trifásico. Paquete de chapas ranurado Conexiones al colector Colector Eje Eje Escobillas Cabezas de bobina Fig. 4. Colector en un inducido. Esto da lugar a dos tipos de arrollamientos distribuidos, los primeros denominados a anillos, o de fases son eléctricamente abiertos y pueden estar tanto en el estator como en el rotor; mientras que los segundos, denominados a colector, son eléctricamente cerrados y se utilizan solamente en el rotor. 3.2 Tipos de ranuras Como ya se dijo las bobinas de los arrollamientos distribuidos, y sus aislaciones, se alojan en ranuras o canaletas ubicadas en la superficie, o muy cerca de ella, del estator o del rotor o en ambas. Las partes magnéticas entre las ranuras se denominan dientes. Las ranuras pueden ser abiertas, semicerradas o cerradas como se muestran en la figura 5. 3 Abiertas Semicerradas Cerradas Fig. 5. Tipos de ranuras. Las ranuras abiertas, que poseen sus lados paralelos, se emplean en máquinas de potencia media o grande, por ejemplo más de 50 kW y en los inducidos a colector, salvo los muy pequeños, de pocos cientos de watt. Cuando las ranuras son abiertas, con sus lados paralelos, y están ubicadas sobre una estructura cilíndrica, los dientes resultan necesariamente trapezoidales, es decir no tienen la misma sección en toda su altura, lo que debe ser tenido en cuenta al considerar la inducción magnética y la saturación de los mismos. La razón por la cual se emplean las ranuras abiertas, con sus lados paralelos, es que las bobinas utilizadas en esas máquinas son prácticamente rígidas y no se podrían colocar si la abertura de la ranura fuera más estrecha. Las ranuras semiabiertas se emplean en máquinas de menor potencia, que utilizan bobinas formadas por conductores sueltos, los que se colocan individualmente o en pequeños grupos, muchas veces en forma manual y luego se terminan de conformar y de acomodar las cabezas de bobina, en la propia máquina. A fin de poder acomodar mejor los conductores en el fondo y en el tope de las ranuras, lo que mejora el factor de llenado de las mismas, conviene que ambos sean redondeados, como se muestra en la figura 5. Tanto en las ranuras abiertas como en las semicerradas, se debe evitar que los lados de las bobinas se salgan de las mismas, especialmente si están sometidas a la fuerza centrífuga del rotor, lo que provocaría un accidente catastrófico. El cerrado de las ranuras se hace por medio de una cuña de cierre construida con un material de la resistencia adecuada y que, en la mayoría de los casos, es no magnético. En los dientes de las ranuras abiertas se hacen unas entalladuras a fin de sostener esas cuñas de cierre. Las ranuras cerradas, que no necesariamente deben tener una sección circular como se muestra en la figura 6, se emplean principalmente en los rotores de las máquinas asincrónicas. Dentro de esas ranuras se colocan barras conductoras, normalmente sin aislación, que constituyen el arrollamiento rotórico de esas máquinas. Es común que las máquinas posean distintos tipos de ranuras en el estator y en el rotor, adecuándolas a los arrollamientos empleados. 3.3 Lados de bobinas y capas Dentro de cada ranura puede haber uno, dos o más lados de bobinas, al número de lados de bobina por ranura se lo designará con la letra u. Cuando hay un solo lado de bobina por ranura, se dice que el arrollamiento es de simple capa, cuando hay dos o más lados de bobina por ranura estos se disponen en dos capas y se dice que el arrollamiento es de doble capa, esto se muestra en la figura 6. 4 Simple Capa u=1 Doble Capa u=2 u=4 u=6 Fig. 6. Lados de bobina por ranura. Los arrollamientos de doble capa presentan mayor flexibilidad de diseño y son los más empleados. En los arrollamientos a anillos se utilizan hasta dos lados de bobina por ranura (u=2), valores mayores de u se emplean en los arrollamientos a colector. Cuando se dibujan arrollamientos de doble capa, los lados de las bobinas que no se ven, por quedar tapados por otras bobinas, se indican con líneas de trazos como lo establecen las normas del dibujo técnico. La cantidad de bobinas que se pueden colocar en Q ranuras depende del número de lados de bobina que se coloquen en cada una de ellas. En efecto, multiplicando el número total de ranuras Q por la cantidad de lados de bobina que hay en cada ranura u, se obtiene el número total de lados de bobina que caben en esas ranuras y, como cada bobina tienen dos lados, el número total de bobinas B será: u ⋅Q B= (1) 2 Como los casos más comunes son u = 1 y u = 2 resulta: Q 2 Si u = 2 ⇒ B = Q Si u = 1 ⇒ B = (2) 3.4 Formas de las bobinas Las partes de la bobina que se encuentran colocadas dentro de las ranuras son las que están sometidas al flujo mutuo y consecuentemente donde se inducen las tensiones y se desarrollas las fuerzas útiles, ésos son los lados activos de la bobina, el resto se encuentra en el aire y constituyen las cabezas de bobina y las conexiones, éstas concatenan solamente flujo disperso y contribuyen en gran medida a la reactancia de dispersión, estas son las partes más afectada por los esfuerzos dinámicos que se producen particularmente en los cortocircuitos. En la figura 7 se muestran esquemáticamente las distintas partes de las bobinas. Las bobinas utilizadas en la mayoría de los arrollamientos a anillos de las máquinas de unos pocos kilowatts, suelen hacerse sobre un molde rectangular, con los vértices redondeados, manteniendo las espiras sueltas para luego colocarlas, generalmente a mano, de a una espira por vez o en pequeños grupos, dentro de ranuras semicerradas. La forma definitiva de las bobinas, el acomodado y fijación de las cabezas, se hace en la propia máquina. En las máquinas de mayor potencia las bobinas se construyen en moldes complejos que, en varias etapas, le confieren la forma definitiva. Antes de insertarlas en la máquina, las bobinas 5 están completamente aisladas y ensayadas, especialmente cuando las máquinas son de tensiones mayores a las industriales. Como esas bobinas son rígidas se las debe colocar, con mucho cuidado y en ranuras abiertas. Cuando el arrollamiento esta terminado debe quedar perfectamente aislado, con las cabezas de bobina y las conexiones bien acomodadas y fijas para soportar los esfuerzos a que estarán sometidas; todo eso, la experiencia, la facilidad del armado y la economía de materiales, ha establecido ciertas formas de bobinas como las más convenientes; entre las más empleadas se encuentran las de forma hexagonal (diamante), trapezoidal y rectangular, como se muestran en la figura 7. Cabezas Lados Cabezas Conexiones Fig. 7. Formas de bobinas. La forma más utilizada es la hexagonal o en diamante, especialmente en máquinas de mediana y gran potencia y con arrollamientos dispuestos en doble capa. Para que las cabezas de bobina queden perfectamente ordenadas, en sus extremos dan una media vuelta con lo que se consigue que sus lados queden a distintos niveles, figura 8. Conexiones Fig. 8. Cambio de capa. Como las ranuras están ubicadas en una superficie cilíndrica, las cabezas de bobina no son planas, figura 8 y, además, como las ranuras tienen dirección radial, los lados de las bobinas, también deben ser radiales. En la figura 9 se muestra la cabeza de una bobina, como la de la figura 8, colocada en un rotor cilíndrico. 6 Cambio de capa Capa superior Cabeza de bobina Capa inferior Centro del rotor Fig. 9. Ranuras radiales. 3.5 Pasos polar y de bobina Se denomina paso polar, τp a la distancia que hay de un polo al siguiente, figura 10. En una máquina con geometría cilíndrica hay que definir el radio al cual se mide esa distancia y hay varias posibilidades, tomar el radio del rotor, el interno del estator, el medio del entrehierro u otro; lo que en todos los casos deberá quedar claramente definido. Por ejemplo si se desea calcular el flujo por polo en el entrehierro, conviene utilizar el radio o el diámetro medio del entrehierro. τp Fig. 10. Paso polar. Por ser distancias, los pasos se deben expresar en unidades de longitud, por ejemplo metro o milímetro, como se hace cuando hay que dimensionar las bobinas, o construir los moldes, pero cuando interesa estudiar un arrollamiento, cuyas bobinas están colocadas en ranuras equiespaciadas, resulta muy cómodo utilizar como unidad de medida la “ranura” que es, precisamente, la distancia entre ranuras. La utilización de la ranura como unidad de medida para los pasos, tiene varias ventajas: la mayoría de los resultados son números enteros, relativamente pequeños y no se requiere ningún elemento de medición, simplemente se cuentan las ranuras. 7 A la distancia entre los lados de las bobinas se la denomina paso de bobina Y1 , como se muestra en las figuras 11 a 14. El paso de las bobinas puede ser igual, menor o mayor que el paso polar, y en esos casos se dice que la bobina es diametral, acortada o alargada respectivamente, tabla I. Tabla I. Pasos de bobina. Bobina Diametral Paso Y1 = τ p Acortada Y1 < τ p Alargada Y1 > τ p Como se verá más adelante las bobinas diametrales son comunes en los arrollamientos de simple capa, mientra que en los de doble capa, que poseen menos restricciones constructivas, son comunes las bobinas acortadas. En ambos casos hay muchas excepciones. Las bobinas acortadas, al ser más angostas, permiten un ahorro de material y mejoran la distribución del campo magnético en el entrehierro. Las bobinas alargadas producen la misma mejora del campo magnético en el entrehierro pero utilizan mayor cantidad de material, por lo tanto su empleo es muy limitado. 3.6 Tipos de arrollamientos Los tipos básicos de arrollamientos distribuidos son dos: imbricados y ondulados, los que pueden tener variantes respecto a su forma básica. Los arrollamientos imbricados son los más utilizados, mientras que los ondulados suelen emplearse en máquinas de corriente alterna de gran porte o en algunos inducidos de máquinas de corriente continua. 3.6.1 Arrollamientos imbricados En ellos las sucesivas bobinas quedan parcialmente superpuestas En la figura 11 se muestra un grupo de dos bobinas de un arrollamiento imbricado. Donde: Y1 Paso de bobina. Y2 Paso de conexión. Y Paso total o del arrollamiento En los arrollamientos imbricados se cumple la siguiente relación entre los pasos: Y = Y1 − Y2 (3) Si bien en los arrollamientos a anillos es frecuente es que Y2 sea una ranura menor que Y1 , con lo que resulta Y = 1, en los arrollamientos a colector pueden presentarse otras variantes que dan lugar a arrollamientos con distinta características y denominaciones, como se verá en 5.1. 8 Y1 Y2 Y Cabezas Lados Cabezas Conexiones Fig. 11. Arrollamiento imbricado. El dibujo de los arrollamientos imbricados se simplifica suponiendo que las bobinas tienen una sola espira, figura 12. Y Y1 Y2 Cabezas Lados Conexiones Fig. 12. Arrollamiento imbricado, dibujo simplificado. Más adelante, se muestran algunos ejemplos de arrollamientos imbricados sencillos. 3.6.2 Arrollamientos ondulados En los arrollamientos ondulados dos bobinas sucesivas se encuentran distanciadas aproximadamente un paso polar, es decir no se superponen, figura 13. Los pasos indicados en la figura 13 tienen la misma denominación que en el arrollamiento imbricado de la figura 11. En los arrollamientos ondulados se cumple la siguiente relación entre los pasos: Además resulta: Y = Y1 + Y2 (4) Y1 ≅ Y2 ≅ τ p (5) 9 Y1 Y2 Y1 Y Cabezas Lados Cabezas Conexiones Fig. 13. Arrollamiento ondulado. El dibujo de estos arrollamientos también se simplifica suponiendo que las bobinas tienen una sola espira, figura 14. Y2 Y1 Y1 Y Cabezas Lados Conexiones Conexiones Fig. 14. Arrollamiento ondulado, dibujo simplificado. Este tipo de arrollamiento se emplea mucho menos que los imbricados y, en los a colector, también existen las variantes progresivo, regresivo, simple, doble, etc. 4 ARROLLAMIENTOS A ANILLOS Estos son los arrollamientos más utilizados, se emplean en el estator y en el rotor de las máquinas asincrónicas, en el inducido de las máquinas sincrónicas y en la excitación de las máquinas sincrónicas de gran velocidad. 4.1 Fases Como se mencionó en el punto 3.1 los arrollamientos a anillos están formados por fases, que por razones de simetría, deben ser de iguales características eléctricas y tener sus ejes magnéticos a: 10 θ= 360 m (6) Donde: θ m Ángulo eléctrico entre fases. Número de fases. La expresión (6) tiene como excepción los arrollamientos bifásicos en los cuales θ vale 90 grados eléctricos. En el caso de los arrollamientos trifásicos el ángulo θ debe ser de 120º eléctricos, lo que se puede expresar en ranuras teniendo en cuenta que al paso polar le corresponden 180º eléctricos; resultando: 120 2 Y120 = τp = τp (7) 180 3 De forma semejante se lo puede calcular para otro número de fases. Para que todas las fases puedan tener el mismo número de bobinas, la cantidad de bobinas por fase debe ser un número entero. B : entero (8) m Ésta es una condición de simetría del arrollamiento; por lo tanto los arrollamientos a anillos no pueden tener cualquier cantidad de ranuras y de bobinas. Se dice que estos arrollamientos son abiertos porque cada fase tiene un principio y un final, por ejemplo en el caso de un arrollamiento trifásico sus bornes se designan con las letras normalizadas indicadas en la figura 15 donde los puntos indican los bornes homólogos. U V W X Y Z Fig. 15. Bornes normalizados de un arrollamiento trifásico. A su vez cada una de las fases puede tener todas sus bobinas en serie o en alguna combinación serie paralelo, dependiente de los valores de la tensión y de la corriente de fase que se deseen. Cuando se conectan ramas en paralelo, las tensiones inducidas en las mismas deben ser iguales, a fin de evitar la circulación de corrientes entre las mismas. La cantidad de espiras en serie de cada rama se indica con Ns y se denomina número de espiras en serie por fase. 4.2 Grupos de bobinas Una característica distintiva de los arrollamientos a anillos es que sus fases están formadas por grupos de bobinas con q bobinas por grupo. Dentro de cada grupo las bobinas deben estar en 11 serie ya que las tensiones inducidas en las mismas no están en fase pero, según convenga, a los grupos se los puede conectar en serie, en paralelo o en una combinación serie-paralelo, siempre cuidando que las ramas en paralelo sean de iguales características para evitar las corrientes de circulación. En la mayoría de los casos, esos grupos de bobina son todos iguales, pero hay arrollamientos especiales con grupos secuencialmente distintos, por ejemplo un arrollamiento puede tener todos sus grupos de dos bobinas cada uno o, por ejemplo, la mitad de los grupos con una bobina y la otra mitad con dos bobinas, alternándose. En el primer cado resulta q = 2 y en el segundo caso el promedio da q = 1,5, en el primer caso se dice que el arrollamiento es de q entero y en el segundo que es de q fraccionario. El estudio de los arrollamientos de q fraccionario escapa al alcance de este texto. En los arrollamientos que tienen todos sus grupos iguales, q entero, la distancia entre grupos puede ser de un paso polar o de dos pasos polares. En el primer caso se suele decir que son grupos monopolares o que el arrollamiento es por polos y en el segundo caso se suele decir que son grupos bipolares o que el arrollamiento es de polos consecuentes. Los arrollamientos por polos, es decir los que tienen un grupo en cada polo, generalmente son de doble capa y son los más empleados; en la figura 16 se muestran dos grupos, de dos bobinas cada uno, de una fase de un arrollamiento imbricado de ese tipo. En el ejemplo de la figura 16 se puede observar que el paso de las bobinas es una ranura menor que el paso polar, es decir se trata de bobinas acortadas una ranura. En los arrollamientos de q entero, que tienen todos sus grupos iguales, éstos se pueden conectar en serie o en paralelo, pero siempre respetando la polaridad: cuando circula corriente por la fase los grupos deben desarrollar sucesivamente polos norte y sur. En una conexión serie, esto se logra uniendo principio con principio y final con final de cada grupo, como se muestra en la figura 16, en la que también se muestra la posibilidad de conectar los dos grupos en paralelo. τp τp Y1 S N Fig. 16. Arrollamiento imbricado, por polos, en doble capa. Como se verá en el punto 4.5, algunos arrollamientos de simple capa, también se pueden resolver con un grupo de bobinas en cada polo. 12 En la figura 17 se muestra esquemáticamente una fase de máquina cilíndrica, de cuatro polos, con de un arrollamiento por polos y se indica en forma aproximada el campo magnético resultante. N S S N Fig. 17. Máquina con grupos unipolares. Los arrollamientos de polos consecuentes, es decir los que tienen un grupo en cada par de polos, generalmente se utilizan en simple capa debido a la menor disponibilidad de ranuras libres; en la figura 18 se muestran dos grupos de dos bobinas cada uno, de una fase de un arrollamiento imbricado de este tipo. En el ejemplo de la figura 18 se puede observar que el paso de las bobinas es igual al paso polar, es decir se trata de bobinas diametrales. 2 τp Y1 S N S N Fig. 18. Arrollamiento imbricado, de polos consecuentes, en simple capa. También aquí, y si todos los grupos son iguales, éstos se pueden conectar en serie o en paralelo, pero siempre respetando la polaridad: todos los grupos deben desarrollar polos iguales para que en el espacio entre los mismos se generen polos opuestos. En una conexión serie, esto se logra uniendo el principio con el final de cada grupo, como se muestra en la figura 18. 13 A fin de comprender mejor el ejemplo de la figura 18 y ver cómo se cierran las líneas de fuerza y se generan los polos, en la figura 19 se muestra una fase con dos grupos, colocados en el estator de una máquina cilíndrica de cuatro polos y se indica la forma aproximada del campo resultante. N S S N Fig. 19. Máquina de polos consecuentes. En el ejemplo de las figuras 18 y 19 cada uno de los dos grupos de bobinas, genera un polo sur en el estator y, los polos norte del estator son consecuencia de esos polos sur, no es más que una forma de decir las cosas. La cantidad de bobinas de cada grupo depende de si el arrollamiento es por polos o de polos consecuentes y se calcula dividiendo el número de bobinas de la fase por el número de grupos. En arrollamientos por polos: q= B m Bobinas por polo y fase. 2p (9) En arrollamientos de polos consecuentes: q= B m Bobinas por par de polos y fase. p (10) Como ya se dijo, el valor de q calculado con la expresión (9) o (10) puede dar un número entero o fraccionario y en el presente texto solamente se estudiarán los arrollamientos con q entero. 4.3 Ejemplo de arrollamiento imbricado A fin de aplicar los conceptos expuestos, a continuación se muestra cómo resulta una fase de un arrollamiento a anillos, trifásico (m = 3), imbricado (Y = Y1 –Y2), de doble capa (u = 2), 24 ranuras (Q = 24) por polos, de cuatro polos (p = 2) y con las bobinas acortadas en una ranura (Y1 = τp - 1). El número de bobinas es: B= u ⋅ Q 2 ⋅ 24 = = 24 Bobinas. 2 2 14 (11) Las bobinas por fase son: B 24 = = 8 Bobinas por fase. m 3 (12) Las bobinas por grupo son: q= B m = 8 = 2 Bobinas por polo y fase. 2p 2⋅2 (13) Q 24 = = 6 Ranuras. 2p 2⋅2 (14) El paso polar es: τp = El paso correspondiente a los 120 grados eléctricos es: El paso de bobina es: 2 2 Y120 = τ p = 6 = 4 Ranuras. 3 3 (15) Y1 = τ p − 1 = 6 − 1 = 5 Ranuras. (16) A fin de presentar mejor el dibujo, la fase U-X se comenzó en la ranura 1, figura 20, y se indicó el comienzo de las fases V-Y y W-Z. Para ver cómo cada uno de los grupos forma cada uno de los cuatro polos, se supuso una corriente constante entrando por el borne U y saliendo por el borne X. τp Y1 Y120 Y120 S N S N 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 U V W X Fig. 20. Arrollamiento imbricado, por polos, doble capa, fase U-X. En la figura 21 se muestra un corte esquemático de la fase dibujada en la figura 18, donde se ven las dos capas y el desplazamiento entre las mismas, debido al acortamiento del paso de las bobinas. La figura 21 muestra la razón por la cual los arrollamientos de doble capa son los más empleados: en éstos no hay restricciones respecto a la elección del paso de las bobinas ya que los 15 lados de las mismas se encuentran en capas diferentes y, por lo tanto, es posible utilizar el paso más conveniente desde el punto de vista del diseño. U X τp Y1 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 Fig. 21. Corte de la fase U-X del arrollamiento de la figura 20. En la figura 22 se muestra el arrollamiento completo, destacándose la fase U-X. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 Y U Z V W X Fig. 22. Arrollamiento de la figura 20 completo. 4.4 Arrollamientos de simple capa Los arrollamientos de simple capa no poseen libertad en la elección del paso de las bobinas, en efecto, una vez que se colocó un lado de bobina en una ranura la misma queda totalmente ocupada. Para una dada cantidad de ranuras, en los arrollamientos de simple capa se pueden colocar la mitad de las bobinas que si el arrollamiento fuera de doble capa. Esto hace que sea frecuente el diseño con grupos bipolares o de polos consecuentes. Por ejemplo si se resuelve el arrollamiento del punto 4.3 en simple capa, con grupos bipolares y bobinas diametrales, resulta: El número de bobinas es: B= u ⋅ Q 1 ⋅ 24 = = 12 Bobinas. 2 2 Las bobinas por fase son: 16 (17) B 12 = = 4 Bobinas por fase. m 3 (18) Se puede observar que son la mitad de las bobinas que en ejemplo con doble capa. Las bobinas por grupo se obtienen con la expresión (10): B 4 (19) q = m = = 2 Bobinas por polo y fase. p 2 El paso de las bobinas y el polar es: Y1 = τ p = Q 24 = = 6 Ranuras. 2p 2⋅2 (20) En este ejemplo, de simple capa y grupos bipolares, no es posible acortar el paso de las bobinas y las mismas deben ser diametrales. El paso correspondiente a los 120 grados eléctricos es: 2 2 Y120 = τ p = 6 = 4 Ranuras. 3 3 (21) En la figura 23 se muestra la fase U-X y el comienzo de las fases V-Y y W-Z. Para ver cómo cada uno de los grupos forma cada uno de los cuatro polos, se supuso una corriente entrando por el borne U y saliendo por el borne X. Y1 = τ p Y120 τp Y120 S N S N 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 U V W X Fig. 23. Arrollamiento imbricado de polos consecuentes, simple capa, fase U-X. En la figura 24 se muestra un corte de la fase U-X de la figura 23. Tanto en las figuras 23 como en la 24, se puede observar como la fase U-X ocupa dos ranuras sucesivas cada paso polar: las ranuras 1 y 2; 7 y 8; 13 y 14; 19 y 20 y que entre esas ranuras quedan cuatro ranuras libres, esto debe ser así para poder ubicar a las otras dos fases. Eso ocurre en todos los arrollamientos a fin de ocupar todas las ranuras y evitar superposiciones. En los arrollamientos de doble capa, como se puede observar en las figuras 20 y 21, también quedan la cantidad necesaria de ranuras libres para las otras dos fases, pero en cada una de las capas. 17 El razonamiento de dejar las ranuras libres necesarias para las otras dos fases, puede ser muy útil cuando se debe dibujar un arrollamiento, especialmente si el mismo es de simple capa. Si en el ejemplo de las figuras 23 y 24 se acortaran las bobinas, ya no quedarían suficientes ranuras libres para alojar a las otras dos fases; por este motivo es que en los arrollamientos normales de simple capa y de polos consecuentes las bobinas son diametrales. U X Y1 = τ p τp 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 Fig. 24. Corte de la fase U-X del arrollamiento de la figura 23. En la figura 25 se muestra el arrollamiento completo, destacándose la fase U-X. 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 Z U V W X Y Fig. 25. Arrollamiento de la figura 23 completo. 4.5 Arrollamientos de simple capa por polos Cuando la cantidad de bobinas por grupo es un número par, los arrollamientos de simple capa se pueden resolver con grupos unipolares, es decir por polos. Por ejemplo, la fase de la figura 23 posee grupos de 2 bobinas, las que se pueden colocar una en cada polo y utilizando las mismas ranuras, figura 26. 18 τp Y1 Y120 Y120 S N S N 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 U V W X Fig. 26. Arrollamiento imbricado por polos, simple capa, fase U-X. Como se tienen las mismas corrientes y en las mismas ranuras, el campo magnético resultante es el mismo que el producido por la fase de la figura 23. Pero en este caso las bobinas resultan acortadas, lo que significa un ahorro de material. En la figura 27 se muestra un corte de la fase U-X de la figura 26. U X τp Y1 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 Fig. 27. Corte de la fase U-X de la figura 26. Cuando, en estos casos, para dibujar el arrollamiento se aplica el criterio de dejar las ranuras libres para las otras dos fases, hay que tener en cuenta que si bien el valor de q calculado con la fórmula (9) indica la cantidad la cantidad de bobinas por grupo, en las fases habrá grupos adyacente que ocuparán 2q ranuras sucesivas, y entonces habrá que dejar libres 4q ranuras libres para las otras dos fases. 4.6 Arrollamientos concéntricos. Ejemplo. En máquinas de poca potencia, pocos kilowatts, se pueden emplear arrollamientos sencillos, de pocas bobinas, generalmente de simple capa, sin desmerecer mayormente el funcionamiento de las mismas. En estos casos, y para simplificar su construcción, suelen emplearse una variante de los arrollamientos imbricados, que se denominan arrollamientos concéntricos debido a que las bobinas de cada grupo están concéntricamente dispuestas. En estas máquinas pequeñas se emplean bobinas de conductores sueltos, colocadas a mano y en ranuras semicerradas. 19 Estos grupos de bobinas de distinto paso, se fabrican sobre moldes coaxiales de distinto tamaño y luego se colocan en las ranuras de la máquina, acomodando las cabezas de bobina de los distintos grupos en dos o tres planos, según sea necesario. No obstante lo dicho, hay excepciones: los rotores cilíndricos de los grandes alternadores poseen arrollamientos concéntricos de construcción muy elaborada, pero que no dejan de responder a los mismos principios que rigen a los de pequeña potencia. En la figura 28 se muestra un grupo de dos bobinas concéntricas, en simple capa, semejante al ya mostrado en la figura 11. Cabezas Lados Cabezas Conexiones Fig. 28. Arrollamiento concéntrico. Con el mismo criterio empleado en los arrollamientos imbricados y ondulados se simplifica el dibujo suponiendo que las bobinas son de una sola espira, resultando el dibujo simplificado mostrado en la figura 29. Cabezas Lados Conexiones Fig. 29. Arrollamiento concéntrico, simplificado. Como la forma simplificada de dibujo de un arrollamiento concéntrico es una línea que forma un espiral, a estos arrollamientos veces se los llama en espiral. 20 El arrollamiento trifásico, de simple capa, cuya fase U-X se muestra en la figura 23, se puede resolver en forma de arrollamiento concéntrico, como se muestra en la figura 29. τp τp Y120 Y120 S N S N 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 U V W X Fig. 30. Fase de la figura 23 resuelta en forma concéntrica. En la figura 31 se muestra el corte de la fase U-X mostrada en la figura 30. U X τp τp 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 Fig. 31. Corte de la fase U-X del arrollamiento concéntrico de la figura 30. Comparando las figuras 23 – 24, 26 – 27 y 30 – 31 se puede observar que en todas ellas se tienen las mismas corrientes en las mismas ranuras, por lo tanto, y desde el punto de vista electromagnético, los tres arrollamientos son equivalentes; las pequeñas diferencias que hay son de naturaleza constructiva y en el de uso de material. Es importante hacer hincapié en que el campo magnético que un arrollamiento produce, depende de la distribución de las corrientes en el espacio, es decir de las corrientes en las distintas ranuras. Dos arrollamientos que generen la misma distribución de corrientes, aunque las bobinas tengan distinta forma o estén conectadas de otra manera, producirán el mismo campo en el entrehierro de la máquina. De lo anterior se desprende que las distintas formas de las bobinas y de sus conexiones responden a cuestiones de facilidad constructiva y economía de materiales. Los arrollamientos concéntricos son un ejemplo de ello. En la figura 32 se muestra el arrollamiento completo, destacándose la fase U-X. 21 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 Z U X V Y W Fig. 32. Arrollamiento concéntrico de la figura 29 completo. En el dibujo del arrollamiento completo de la figura 32, se puede observar que cada una de las fases tiene un grupo de altura “normal” y otro de mayor altura. Si bien esto favorece el dibujo, evitando que se superpongan las cabezas de bobina de las distintas fases, también guarda relación con la disposición geométrica de las cabezas de las bobinas, las que deben ubicarse en dos o tres planos para poder acomodarlas. 4.7 Arrollamientos ondulados Los arrollamientos ondulados, cuyos fundamentos se han descriptos en el punto 3.6.2 y mostrados en las figuras 13 y 14, que se emplean en máquinas a anillos de gran porte, normalmente son de doble capa y con grupos unipolares, por lo tanto el número de bobinas iguala al número de ranuras (2). Como además, se debe cumplir la condición de simetría (8), se deben hacer cambios en las conexiones de las bobinas para poder formar los grupos en el lugar correspondiente; por otra parte, las bobinas se mantienen todas iguales. Por ejemplo, sea una máquina de cuatro polos, 24 ranuras, con bobinas y conexiones diametrales, figura 33. Por comodidad se ha comenzado en la ranura 1 y se han colocado dos bobinas, una en el primer grupo y la otra resulta en el tercer grupo, completando una vuelta en sentido horario. Si se vuelve a hacer una conexión diametral, seis ranuras en este ejemplo, y tal como se muestra en la figura 33, se vuelve a la ranura 1, donde se ha comenzado la primera vuelta y la fase se cerraría sobre sí misma, con solamente dos bobinas; lo que no es correcto. Para evitar lo anterior, a esta última conexión, se la hace una ranura más larga o una ranura más corta, en este ejemplo se optó por hacer esa conexión una ranura más corta, comenzando la segunda vuelta en la ranura 24, figura 34. 22 U Conexión 1 19 Bobinas 7 13 Conexión Fig. 33. Arrollamiento ondulado, primera vuelta. Al completarse la segunda vuelta del arrollamiento, ya se tienen las dos bobinas en el primer y en el tercer grupo, figura 34. U Conexión más corta 24 1 19 18 Bobinas 13 12 6 7 Conexiones normales Fig. 34. Arrollamiento ondulado, segunda vuelta. Si se continúa con el criterio anterior, de acortar la conexión y continuar la fase en el mismo sentido horario, se seguirían agregando bobinas en esos grupos, que ya están completos. Pero como se desea que el arrollamiento sea por polos, se deben colocar bobinas para formar el segundo y el cuarto grupo. Para ello se comienza una nueva vuelta, pero en sentido contrario a la anterior, antihorario en este ejemplo, como se muestra en la figura 35. 23 U Conexion normal antihoraria 24 1 Bobinas X Conexión antihoraria más corta 6 7 19 18 Conexión antihoraria 13 12 Fig. 35. Tercera vuelta. En la figura 35 la conexión antihoraria va desde la capa interna de la ranura 18 a la capa interna de la ranura 12. En esa misma figura, y para no complicarla, se indicaron solamente una bobina del segundo y otra del cuarto grupo y se indicó el comienzo y el final de la fase. En el ejemplo analizado, en el que hay dos bobinas en cada grupo, es necesario realizar dos vueltas en sentido horario y otras dos en sentido antihorario para completar la fase. A fin de mostrar el resultado final, en la figura 36 se muestra la fase U-X completa, en forma desarrollada, y se indica el comienzo de las otras dos. Y1= τ p Y120 Y120 S N S N 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 V W X Fig. 36. Arrollamiento ondulado, diametral, fase U-X. 24 U El arrollamiento mostrado es diametral, pero también se podría resolver con bobinas acortadas; a modo de ejemplo en la figura 37 se muestra la fase U-X con bobinas acortadas una ranura. τp Y1 Y120 Y120 S N S N 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 V W X U Fig. 37. Arrollamiento ondulado, acortado, fase U-X. Se deja al lector el ejercicio de identificar las conexiones más cortas y las realizadas en sentido inverso en las fases de las figuras 36 y 37. 25