,3 Bruselas, 13 de febrero de 2002 /DV ULJXURVDV QRUPDV VREUH ODV D\XGDV HVWDWDOHV DO VHFWRU VLGHU~UJLFR VHJXLUiQ YLJHQWHV WUDV OD H[SLUDFLyQGHO7UDWDGR&(&$ /D&RPLVLyQ(XURSHDKDDGRSWDGRXQDVGLUHFWULFHVFRQREMHWRGHPDQWHQHU HQ YLJRU OD SURKLELFLyQ GH ODV D\XGDV UHJLRQDOHV D OD LQYHUVLyQ \ GH ODV D\XGDVGHVDOYDPHQWR\GHUHHVWUXFWXUDFLyQHQHOVHFWRUVLGHU~UJLFRWUDVOD H[SLUDFLyQGHO7UDWDGR&(&$HOGHMXOLRGH&RQIRUPHDHVWH7UDWDGR ODVD\XGDVFRQFHGLGDVSRUORV(VWDGRVPLHPEURVDODLQGXVWULDVLGHU~UJLFD FXDOTXLHUDTXHVHDVXIRUPDHVWiQSURKLELGDV(ODFWXDO&yGLJRGHD\XGDVD OD VLGHUXUJLD VLQ HPEDUJR SHUPLWH RWRUJDU FLHUWRV WLSRV GH D\XGDV HVWDWDOHV D\XGDV GH LQYHVWLJDFLyQ \ GHVDUUROOR D\XGDV SDUD OD SURWHFFLyQ GHO PHGLR DPELHQWH \ D\XGDV DO FLHUUH SDUD IRPHQWDU HO FLHUUH FRPSOHWR R SDUFLDOGHSODQWDVVLGHU~UJLFDVRSDUDILQDQFLDUHOFHVHGHILQLWLYRGHWRGDVODV DFWLYLGDGHV&(&$ «Durante mucho tiempo, las empresas siderúrgicas en Europa han funcionado sin recurrir a algunos tipos de ayudas estatales disponibles para el resto de los sectores industriales y han integrado este factor en sus estrategias», ha subrayado Mario Monti, miembro de la Comisión responsable de la política de competencia. «El estricto régimen aplicado hasta ahora ha desempeñado un papel decisivo en asegurar la competencia leal en este sector.» En su Comunicación al Consejo, al Parlamento Europeo y al Comité Consultivo CECA de 5 de octubre de 1999, "La situación de la competitividad de la industria siderúrgica de la Unión Europea", la Comisión dejó claro que las rigurosas normas sobre las ayudas estatales en este sector debían mantenerse tras la expiración del Tratado CECA. El Parlamento Europeo, los Estados miembros, el Comité Consultivo CECA, así como las empresas siderúrgicas y sus asociaciones, también han expresado su apoyo a este planteamiento. Basándose en la experiencia del pasado, y teniendo en cuenta las características del sector siderúrgico, la Comisión considera que este objetivo puede lograrse mediante una prohibición de las ayudas regionales a la inversión y de las de salvamento y reestructuración a las empresas del sector. Por tanto, ha decidido que estos tipos de ayudas a la industria siderúrgica seguirán siendo incompatibles con el mercado común después la expiración del Tratado CECA. En las directrices adoptadas la Comisión también ha decidido que las ayudas al cierre, en las mismas estrictas condiciones que las aplicadas con arreglo al Código de ayudas a la siderurgia, seguirán siendo compatibles con el mercado común. Las ayudas para facilitar el ajuste estructural pueden contribuir al desarrollo de una industria siderúrgica más saneada, máxime si se tiene en cuenta el exceso de capacidad existente en el sector y la ineficacia que ello implica, así como la prohibición de las ayudas de salvamento y de reestructuración. Decisión nº 2496/96/CECA de la Comisión, de 18 de diciembre de 1996. En cuanto a los demás tipos de ayudas estatales —por ejemplo, las que se conceden para la protección del medio ambiente o las destinadas a actividades de investigación y desarrollo—, el sector siderúrgico estará sujeto a las mismas normas horizontales que los demás sectores económicos. El Tratado constitutivo de la Comunidad Europea del Carbón y del Acero, el Tratado CECA, se firmó para un período de 50 años a partir de su entrada en vigor y su expiración está prevista para el 23 de julio de 2002. 2