Materia SUJETO Y PRAXIS Coordinador Alfonso García Marqués Invitado Título Quintín Racionero (Catedrático UNED) FUNDAMENTOS Y PROBLEMAS DE LA DEMOCRACIA Jorge Novella LENGUAJE, MENTE Y REALIDAD María Cerezo Lallana MODERNIDAD Y GLOBALIZACIÓN Eugenio Moya Cantero CUESTIONES ESTÉTICAS CONTEMPORÁNEAS Francisca Pérez Carreño Evaristo Prieto “Los dos modelos de la argumentación persuasiva en la Retórica de Aristóteles” Martes, 10 de mayo 17 horas "De comunidades, enemigos y extraños". Martes, 10 de mayo 19 horas (Profesor Titular Univ. Autónoma de Madrid) Josefa Toribio “La acción de juzgar” (Investigadora del ICREA-Univ. Autónoma de Barcelona) Manuel Cruz “Responsabilidad en tiempos de globalización” (Catedrático Univ. Barcelona) Jordi Ibáñez (Profesor Titular Univ. Pompeu Fabra) Día y hora de intervención “Memoria y representación artística en la España de la democracia:1990-2010” Lunes, 9 de mayo 19 horas Miércoles, 11 de mayo 18:00 horas Lunes, 9 de mayo 17 horas RESÚMENES • Quintín Racionero: La constatación de la existencia de dos modelos en el desarrollo de la argumentación retórica fue ya señalada por los comentaristas antiguos de Aristóteles, quienes, en vista de su carácter fuertemente contrastante, trataron de reducirlos a un canon común. Este canon, fijado en forma definitiva por Quintiliano en las Institutiones oratoriae, ha definido la recepción histórica de esta parte fundamental de la Retórica aristotélica, al menos hasta la incorporación de los métodos genéticos introducidos por Werner Jaeger. De acuerdo con tales métodos, que, para el caso de la Retórica, fueron defendidos por Fr. Solmsen y P. Gohlke, el problema debe ser replanteado en el sentido de, 1º, enfatizar las diferencias existentes entre aquellos dos modelos, 2º, declarar su incompatibilidad intrínseca y, 3º, proponer como solución la existencia de una evolución en el pensamiento de Aristóteles, que habría dado lugar a la redacción de dos o más versiones de la Retórica, incontroladamente mezcladas por Andrónico de Rodas. Por múltiples causas, que serán expuestas en el curso de esta ponencia, ni la propuesta tradicional unitaria ni la fragmentación que procede de los métodos genéticos parecen hoy posiciones hermenéuticas que puedan ser defendidas. En su lugar, desarrollaremos una interpretación sintética, que, ante todo, mostrará cómo los dos citados modelos responden efectivamente a distintas fases de la enseñanza de Aristóteles, para argüir, después, en qué forma resultan compatibles, por virtud de qué motivos puede decirse que el resultado final procede con toda certeza del pensamiento aristotélico y cómo este resultado final da pie a una concepción de la argumentación retórica que, en línea con algunas de las preocupaciones actuales, busca específicamente introducir y rentabilizar productivamente los factores afectivos en el marco de un modelo fuerte y racionalmente fundado de persuasión. • Evaristo Prieto: "La teoría política liberal se ha visto superada en los últimos tiempos por la reemergencia de lo político bajo el ropaje de la nueva centralidad adquirida por la excepción y la enemistad. En esta última clave, la construcción comunitaria, al menos en algunas de sus variantes, parece incorporar como momento constitutivo casi inderogable la erección de imágenes de enemigos y extraños (procesos de alogénesis). Trataremos de indagar su presunta inevitabilidad, y los recursos de que la teoría liberal dispone para enfrentar este reto a su autocomprensión originaria, de modo compatible con un realismo lúcido y con las exigencias irrenunciables que su núcleo normativo plantea". • Josefa Toribio • Manuel Cruz: Han pasado demasiadas cosas en el mundo como para que continúen valiendo los enfoques heredados en materia de responsabilidad. Bastará con señalar dos transformaciones en el panorama del mundo. La crisis del Estado del Bienestar que se viene produciendo en los paises europeos desarrollados -y que la actual crisis económica ha agudizado hasta extremos cada vez más difíciles de soportar- está comportando el desvanecimiento de una de las instancias llamadas a asumir a partir de la segunda posguerra mundial los desperfectos que el mal natural y social producían en nuestro entorno. ¿De quien es responsabilidad ahora cualquiera de las gripes pandémicas que se desata periódicamente, el agujero de la capa de ozono o las devastadoras hambrunas? Por otro lado, a través del desarrollo tecnológico, nuestro poder se ha multiplicado en proporciones hasta hace poco tiempo inimaginables. Hoy el hombre puede provocar, por acción y por omisión, unas transformaciones a corto y a medio plazo que comprometan el futuro mismo de la especie. Los interlocutores ante los que eventualmente habrá que responder lo son también de nuevo tipo: aún no son. Incluso un esquema tan apresurado como el presente deja traslucir la necesidad de llevar a cabo una reflexión como ésta. • Jordi Ibáñez: