PRACTICA No. 6 MALARIA OJBETIVO GENERAL: Los estudiantes de práctica conocerán el ciclo infeccioso tonel que se presenta la malario o paludismo, sus clasificaciones, características principales, el cómo se produce y como prevenirlas. OBJETIVOS ESPECÍFICOS: Al terminar la clase los estudiantes serán capaces de: · Reconocer el Plasmodium en el microscopio. · Indicar los diferentes tipos de Plasmodium, su habitad. · Identificar los estadios del ciclo de vida. · Realizar la toma de muestra y en que etapa se debe tomar la muestra. · Mencionar como se transmite, y la prevención que se debe realizar para evitar la enfermedad. · Discernir la importancia la tema en salud. MARCO TERORICO: DEFINICÓN: Infección por alguna de las cuatro especies diferentes de Plasmodium, que causa paroxismos periódicos con escalofríos, fiebre y sudoración, anemia y esplenomegalia. Paludismo producido por Plasmodium falciparum El período de incubación suele ser de 12 a 14 d para P. falciparum. El período incubación se puede prolongar semanas después de suspender el fármaco. En lugar los escalofríos y la fiebre periódicos, el paciente puede presentar cefalea, dolor espalda y fiebre irregular; quizá resulte difícil detectar los parásitos en las muestras sangre. de de de de Las manifestaciones comunes a todas las formas de paludismo incluyen anemia, ictericia, esplenomegalia, hepatomegalia y el paroxismo palúdico (escalofríos o tiritona), que coincide con la liberación de merozoítos desde los hematíes rotos. El paroxismo comienza con malestar general, escalofríos súbitos y fiebre que sube hasta 39 a 41 ºC, pulso rápido y filiforme, poliuria y cefalea y náuseas progresivas. A continuación, disminuye la temperatura y se produce sudoración profusa durante un período de 2 o 3 h. Paludismo producido por Plasmodium vivax El período de incubación habitual (15 días) puede prolongarse a 8-9 meses e, incluso, superar el año. En la primera crisis, durante los 2 o 3 primeros días la fiebre es irregular, pero más adelante aparece la periodicidad paroxística terciaria. En las recidivas provocadas por formas intrahepáticas, los pródromos de cefalea y malestar general no suelen presentarse tan a menudo. Tampoco la periodicidad terciaria es evidente en estas recaídas. La duración media de una infección por P. vivax no tratada suele ser de 3-5 años. Paludismo producido por Plasmodium malariae Ésta es la más crónica de todas las formas de paludismo. Suele cursar con bajas parasitemias asintomáticas, aunque cabe esperar exacerbaciones agudas, a veces con intervalos de uno o varios años entre las crisis. Hasta el momento no se ha demostrado en esta especie la presencia de un ciclo extraeritrocitario intrahepático. La teoría prevaleciente postula que este plasmodio sería capaz de persistir en el hematíe burlando (mediante variaciones antigénicas) la defensa humoral y celular del huésped. Paludismo producido por Plasmodium ovale Las características clínicas son similares a las de P. vivax, pero la intensidad de las manifestaciones clínicas es menor y las recuperaciones espontáneas son aún más frecuentes. Las recaídas se producen a partir de hipnozoítos intrahepáticos. Ciclo de desarrollo del agente causante de la malaria Un mosquito Anopheles infectado con protozoos del género Plasmodium pica a una persona (arriba a la izquierda) Los gérmenes infecciosos (esporozoitos) penetran en las células hepáticas, donde se reproducen de forma asexual dando lugar a numerosas células hijas. Después de la ruptura de las células hepáticas, las células hijas infectan los eritrocitos o glóbulos rojos. Allí, se reproducen de forma asexual dando lugar a los merozoitos que causan la ruptura de los glóbulos rojos (lo que provoca los accesos de fiebre) En los glóbulos rojos se forman además gametos masculinos y femeninos. Cuando el mosquito Anopheles pica a una persona infectada chupa, junto con la sangre, estos gametos. En el tubo digestivo del mosquito se produce la fecundación. Se forman entonces cigotos a partir de los cuales se desarrollan los esporozoitos que pasan a las glándulas salivares del mosquito e inician un nuevo ciclo de infección. 2 DIAGNOSTICO DEL PALUDISMO Ya se ha señalado la importancia de la historia epidemiológica en un síndrome febril. La confirmación diagnóstica se obtiene por la observación microscópica directa del plasmodio, para lo cual deben solicitarse una gota gruesa y una extensión sanguínea teñidas por Giemsa, Leishman o Romanowski-eosina. Mediante la técnica de la gota gruesa se obtiene una gran acumulación de hematíes por campo, lo cual permite detectar manchas de pigmento malárico. Su objetivo es determinar la positividad o negatividad malárica, pero no permite discernir la especie. Para ello es necesaria una observación detenida de la extensión. Además de permitir el diagnóstico de la especie, con la extensión es posible cuantificar la parasitemia en porcentaje de hematíes parasitados (fig. 313.3), factor muy necesario tanto para el pronóstico como para seguir la evolución terapéutica. Dada la gravedad de la infección por P. falciparum, en casos de duda debe enviarse siempre la preparación a un centro de referencia con la mayor rapidez posible. Pese a sus ventajas, la gota gruesa no logra detectar bajas parasitemias, aun en manos de microscopistas experimentados. Sin embargo, en la actualidad es todavía el método de elección. La técnica del naranja de acridina o QBC no mejora la sensibilidad del procedimiento, pero sí ofrece mayor precisión en la determinación de especies y en el diagnóstico de infecciones mixtas. Actualmente existen kits para el diagnóstico rápido de P. falciparum con alta especificidad y sensibilidad basados en pruebas de captura de antígeno. Se está experimentando la detección de P. falciparum utilizando métodos de hibridación del DNA del plasmodio marcado radiactivamente y que podrían detectar parasitemias de 0,0001% en 10 mL de sangre. De momento, se llevan a cabo sólo en laboratorios de investigación. Los métodos serológicos tienen valor para estudios epidemiológicos y para sustentar una sospecha en casos de parasitemia baja. También tienen aplicación entre las crisis agudas de P. vivax en las que no se pudo realizar una gota gruesa o cuando ésta fue negativa, pero haya podido tratarse de parasitemias bajas. Títulos de anticuerpos inmunofluorescentes superiores a 1/200 (IgM) serían muy sospechosos de una infección reciente o de una crisis de recaída. Sin embargo, los títulos superiores a 1/64 reflejan una inmunorrespuesta a la infección, pero no confirman necesariamente la presencia de parásitos circulantes. La utilización de un solo antígeno limita la especificidad de la serología; sin embargo, existe una reactividad cruzada entre las especies de plasmodios, aunque en grado de sensibilidad menor que el de la especie utilizada. TRATAMIENTO Las dosis recomendadas de fármacos antipalúdicos se enumeran en las tablas 161-3 y 161-4; más adelante se describen los efectos secundarios y las contraindicaciones más comunes. Si se sospecha afectación del SNC por P. falciparum, el tratamiento se debe iniciar inmediatamente sin esperar a una extensión positiva. 3 La halofantrina se puede utilizar para tratar la infección por P. falciparum resistente a la cloroquina, pero no se debe emplear para la profilaxis. El fármaco puede provocar prolongación del intervalo QT. El quinghaosu elimina con rapidez la parasitemia por P. falciparum, pero son frecuentes las recidivas. El proguanil se puede utilizar para la quimioprofilaxis en combinación cloroquina semanal, pero causa a veces anemia megaloblástica. Tratamiento del ataque agudo. La cloroquina es el fármaco de elección contra P. malariae y P. ovale, así como contra las cepas sensibles de P. falciparum y P. vivax. La fiebre suele ceder en 48 a 72 h. En caso de infección por P. falciparum puede estar indicada la administración i.v. lenta de cloroquina si el paciente no tolera la v.o. Si la parasitemia aumenta con rapidez, las exanguinotransfusiones combinadas con antipalúdicos parenterales pueden eliminar en poco tiempo los hematíes infectados y salvar la vida del paciente. Los corticosteroides están contraindicados en el paludismo cerebral. La infección por P. falciparum resistente a la cloroquina se trata con sulfato de quinina oral o, si la enfermedad es grave, con clorhidrato de quinina o quinidina i.v. El tratamiento parenteral se debe continuar hasta que la parasitemia baje a <1% o se tolere la medicación oral. Dado el riesgo de recidiva, este régimen se suele complementar con pirimetamina y sulfadoxina, tetraciclina o clindamicina. Entre los demás fármacos con posible utilidad se incluyen mefloquina, halofantrina y derivados de la artemisina. Se ha descrito P. vivax resistente a la cloroquina en Nueva Guinea y las Islas Solomon. Se recomienda el tratamiento con quinina y tetraciclina o con mefloquina. Tratamiento curativo. Para prevenir las recidivas del paludismo por P. vivax o P. ovale es necesario eliminar los hipnozoítos con primaquina. Este fármaco se puede administrar junto con la cloroquina o después de ella. Algunas cepas son refractarias y requieren tratamiento repetido. El tratamiento curativo no es necesario para P. falciparum o P. malariae, ya que estas especies no presentan una fase hepática persistente. Reacciones adversas y contraindicaciones. Los efectos secundarios menores de la cloroquina y la hidroxicloroquina, como molestias gastrointestinales, cefalea, mareos, visión borrosa o prurito, no obligan en general a suspender los fármacos. Ambos medicamentos pueden agravar la psoriasis. Se recomiendan exámenes oftalmológicos periódicos para las personas que toman cloroquina semanal durante >6 años, debido a los casos raros de retinopatía. La cloroquina es segura durante el embarazo. Aunque la quinina y la quinidina parenterales se suelen tolerar bien, sólo se deben usar en una unidad de cuidados intensivos, donde se pueda realizar monitorización hemodinámica y electrocardiográfica. Es imprescindible la atención cuidadosa a la hidratación y los niveles de glucemia. Los niveles plasmáticos de quinidina >6 mg/ml (18 mmol/l), el intervalo QT >0,6 seg o el ensanchamiento del QRS superior al 25% respecto a la línea basal, indican necesidad de disminuir la velocidad de infusión. La quinina puede producir acúfenos, náuseas y visión borrosa de forma transitoria. Se producen reacciones cutáneas fatales en 1/11.000 a 1/25.000 viajeros norteamericanos que utilizan pirimetamina-sulfadoxina semanal como profilaxis. El tratamiento se asocia también con eritema multiforme, síndrome de Stevens-Johnson, 4 neurólisis epidérmica tóxica, urticaria, dermatitis exfoliativa, enfermedad del suero y hepatitis. El fármaco está contraindicado en personas con antecedente de intolerancia a las sulfamidas y en niños £2 meses. La doxiciclina está contraindicada durante el embarazo y en niños £8 años. Son relativamente comunes las molestias gastrointestinales, la fotosensibilidad y la candidiasis vaginal. La mefloquina produce sensación de inestabilidad y trastornos gastrointestinales transitorios. El fármaco puede provocar también bradicardia sinusal y prolongación del intervalo QT, y no se debe utilizar en pacientes que reciben fármacos capaces de prolongar la conducción cardíaca (p. ej.), b-bloqueantes, bloqueantes de los canales del calcio). La mefloquina puede causar vértigo, confusión, psicosis y convulsiones, y no se debe emplear en pacientes con historia de epilepsia o trastornos psiquiátricos, ni en personas cuyas ocupaciones requieren coordinación fina y discriminación espacial. La mefloquina no se debe utilizar en niños £15 kg ni en mujeres embarazadas. Puesto que la primaquina puede producir hemólisis intravascular grave en personas con deficiencia de G6FD, se debe descartar ese defecto antes del tratamiento. También se pueden producir retortijones abdominales y metahemoglobinuria, pero el fármaco se tolera bien por lo demás. Está contraindicado durante el embarazo. Fuera de Estados Unidos se dispone de varios fármacos antipalúdicos nuevos. La halofantrina se puede emplear para tratar la infección por P. falciparum resistente a la cloroquina, pero no se debe usar para la profilaxis. El fármaco puede causar prolongación del intervalo QT. El quinghaosu (artemisina) procede de un remedio de herbolario tradicional chino. Elimina con rapidez la parasitemia por P. falciparum, pero son comunes las recidivas. En algunos países se están valorando varios derivados de la sustancia original. El proguanil no se comercializa en Estados Unidos, pero se puede utilizar para la quimioprofilaxis en combinación con cloroquina semanal. El proguanil es un inhibidor de la dihidrofolato reductasa y, por tanto, puede causar anemia megaloblástica. PREVENCIÓN: Ninguna medida es por completo efectiva para prevenir el paludismo; la pronta valoración médica resulta necesaria para todos los cuadros febriles de pacientes de riesgo. El paludismo es particularmente peligroso en niños <5 años, embarazadas y visitantes de áreas endémicas no expuestos anteriormente. Se están realizando ensayos clínicos controlados con vacunas experimentales. La profilaxis contra los mosquitos comprende el uso de insecticidas de acción persistente con piretrinas, rociado con insecticida en los hogares y el exterior de los edificios, colocación de mosquiteras en puertas y ventanas, empleo de mosquiteros (preferiblemente impregnados con piretrinas) alrededor de las camas, uso de repelentes contra los mosquitos como la N,N-dietil-metatoluamida (deet) y empleo de prendas protectoras, sobre todo entre el atardecer y el amanecer. La quimioprofilaxis debe comenzar 1 a 2 semanas antes del viaje, y continuar hasta 4 semanas después de la vuelta del área endémica. La doxiciclina, sin embargo, se puede iniciar 1 a 2 d antes de llegar a la zona con endemia. La cloroquina semanal se 5 recomienda para viajeros a regiones con riesgo en las que no se haya descrito P. falciparum resistente al fármaco (p. ej., Haití en 1996). La cloroquina se suele tolerar bien. En caso contrario se puede emplear la hidroxicloroquina. La mefloquina se recomienda para viajeros a zonas donde existe P. falciparum resistente a la cloroquina. Una combinación fija de mefloquina, pirimetamina y sulfadoxina se comercializa bajo el nombre de Fansimef en algunos países. El Fansimef no se debe confundir con mefloquina, ya que no se recomienda para profilaxis del paludismo. La administración diaria de doxiciclina proporciona una alternativa para viajeros durante poco tiempo que no toleran la mefloquina o para personas en las que esté contraindicada (v. más adelante). Para viajeros que no pueden tomar mefloquina ni doxiciclina, mujeres embarazadas y niños £15 kg, se recomienda una dosis semanal de cloroquina. En caso de enfermedad clínica durante un viaje en el que no se puede obtener con facilidad atención médica profesional, las personas que están utilizando sólo cloroquina deben tomar lo antes posible una dosis de pirimetamina más sulfadoxina (excepto aquellas con antecedentes de intolerancia a las sulfamidas) o de halofantrina. Este llamado tratamiento presuntivo es sólo una medida temporal, y resulta imprescindible la pronta valoración. Hasta que pueda realizarse ésta, debe mantenerse la profilaxis semanal con cloroquina. Si la exposición a P. vivax o P. ovale fue intensa o la persona ha sido esplenectomizada, puede estar indicado un ciclo profiláctico con fosfato de primaquina en 14 d al volver al país de origen. El paludismo durante el embarazo supone una amenaza importante para la madre y el feto. Si el viaje al área endémica es inevitable, se debe administrar quimioprofilaxis al menos con cloroquina. Se está valorando la seguridad de la mefloquina durante la gestación, pero la limitada experiencia sugiere que puede ser segura después de la semana 16 del embarazo. No se ha demostrado la seguridad de la pirimetamina/sulfadoxina durante la gestación. La doxiciclina y la primaquina no se deben emplear en mujeres embarazadas. Cuando una persona sale del área endémica, la resistencia funcional dura pocos meses y sólo protege contra las cepas del parásito a las que estuvo expuesto el individuo. 6 ACTIVIDADES DE LA PRÁCTICA DE MALARIA 1.- Menciona las diferencias que existen en los diferentes tipos de plasmodium. 2.- Dibuja el ciclo vital del plasmodium 3.- ¿En qué etapa de la fiebre se debe obtener la muestra de sangre para el diagnóstico? 4.- Describe el método de diagnóstico de la malaria o paludismo 7 PRACTICA No. 7 TRICOMONIASIS OBJETIVO GENERAL: OBJETIVOS ESPECIFICOS: Al finalizar la clase los estudiantes serán capaces de: · · · · · Reconocer al agente causal en el microscopio Indicar su sintomatología tanto en mujer y el hombre Identificar los estadios del ciclo de vida Mencionar a la población en riesgo MARCO TEORICO: Definición: La Tricomoniasis es una enfermedad de transmisión sexual producida por el patógeno urogenital Trichomonas vaginalis. Presenta un amplio abanico de síntomas que van desde una importante inflamación e irritación de las zonas afectas con exudado purulento maloliente, a un estado de portador relativamente asintomático que en un tercio de los casos desarrolla sintomatología en los siguientes 6 meses. La infección, una vez establecida, persiste durante largos períodos en la mujer; sin embargo, en el hombre se suele autolimitar antes de los 10 días. Afecta la próstata y la uretra en el varón, pero su principal manifestación clínica se produce en la mujer, siendo responsable del 20-30% de las vulvovaginitis. Etiología: Trichomonas vaginalis es un protozoo flagelado que parasita el tracto urogenital. Los trofozoítos presentan una forma y tamaño muy variables. En las preparaciones en fresco suelen aparecer piriformes, con unas dimensiones promedio de 10 ´ 7 mm. Poseen cuatro flagelos anteriores libres y un quinto flagelo que emerge de una membrana ondulante que les confiere una movilidad característica. No presenta forma quística; en condiciones desfavorables de crecimiento puede redondearse e internalizar sus flagelos. Se reproduce por fisión binaria. Tan sólo parasita a la especie humana y posee un tropismo altamente específico por el epitelio escamoso del tracto genital. Existen otros microorganismos de la misma familia que también aparecen parasitando al hombre (Trichomonas tenax, colonizando en el espacio peri-odontal de pacientes con piorrea, y Pentatrichomonas hominis, que se recupera de las heces de determinados individuos sin que se haya demostrado su papel causal en ninguna enfermedad). Cuadro clínico El período de incubación puede oscilar entre 4-28 días. En la mujer los síntomas se inician o se exacerban durante el período menstrual. Las principales manifestaciones clínicas son el aumento del flujo vaginal (leucorrea amarillo-verdosa mucopurulenta) con escozor, quemazón y prurito vulvovaginales. También puede aparecer dispareunia y, en ocasiones, disuria. 8 En la exploración se aprecia un exudado abundante, a veces espumoso, que se acumula en fórnix vaginal posterior. Las paredes vaginales y el exocérvix aparecen inflamados con hemorragias puntiformes (colpitis macularis). La infección es superficial sin existir invasión de las paredes vaginales. El exudado vaginal suele presentar un pH superior a 4,5. Aunque la vulvovaginitis es la manifestación más común, puede haber afección de las glándulas de Bartholino o de la uretra. Otras complicaciones asociadas con la tricomoniasis incluyen: anexitis, piosalpingitis, endometritis, infertilidad y, en mujeres embarazadas, rotura prematura de membranas, parto prematuro, recién nacido de bajo peso e infección post-aborto. Los hombres no suelen desarrollar síntomas. Sin embargo, pueden presentar exudado uretral transitorio, espumoso o purulento, con disuria y polaquiuria, sobre todo a primera hora de la mañana; sensación de quemazón tras las relaciones sexuales, leve irritación uretral y a veces exudado del meato uretral; molestias en el periné o más profundas en la pelvis; y exudado subprepucial (en los varones no circuncidados). La epididimitis y la prostatitis son complicaciones raras. Diagnóstico: En las mujeres se puede establecer muchas veces un diagnóstico inmediato con una suspensión no teñida de la secreción vaginal en solución salina; el examen en fresco es el método mejor y más simple, para buscar T. Vaginalis. La muestra puede tomarse con aplicador de algodón, pipetas capilares, etc., directamente de la vagina con o sin ayuda del espéculo vaginal. Si se utiliza aplicador con algodón, este debe humedecerse inmediatamente en solución salina estéril. Si la muestra no se examina inmediatamente, se debe colocar en un tubo con 1 ml de sol. salina. Las tricomonas se pueden teñir con los mismos colorantes descritos para protozoos intestinales, o con coloraciones Gram, Papanicolaou y otras especiales. En los hombres, si el examen se hace a primera hora de la mañana antes de la micción, puede existir un ligero exudado mucoide y quizá se encuentren algunos filamentos mucosos finos en la orina recogida en dos recipientes. La preparación húmeda de la secreción uretral masculina se debe examinar al microscopio en busca de tricomonas, y se harán cultivos. También puede ser útil el examen del sedimento de orina centrifugada y de las secreciones prostáticas. Tratamiento: Numerosos estudios han confirmado la eficacia de una monodosis de 2 g de metronidazol o tinidazol. El tratamiento debe realizarlo también la pareja, tanto si presenta síntomas como si no, para evitar la reinfección. En los casos de recidivas se indica la toma de 0,5 g de metronidazol 2 veces al día durante 7 días, acompañada también de 0,5 g 2 veces al día por vía vaginal (en óvulos o comprimidos vaginales) durante el mismo período. Prevención: La prevención se realiza aplicando los cuidados que se debe tener en cuenta en todas las enfermedades venéreas. 9 · Dar instrucción a la pareja en relación a la infección y su mecanismo de transmisión y efectuar un adecuado diagnóstico de laboratorio de todo individuo sintomático. · Realizar un aseo cuidadoso de los elementos de baño · Evitar baños comunales y no compartir tollas, ni prendas intimas. 10 ACTIVIDADES DE LA PRÁCTICA DE TRICOMONIASIS 1.- Indica los diferentes tipos de Trichomonas existen y cual es la más común en el hombre. 2.- Indica las diferencias que existen entre la T. Vaginalis y Giardia Lambia 3.- Describe el método de diagnóstico que existe para la tricomoniasis 4.- ¿En qué forma se encuentra a la T. Vaginalis? (dibújalo e indica sus partes) 11 PRACTICA No. 8 TOXOPLASMOSIS OBJETIVO GENERAL: Los estudiantes de práctica conocerán el ciclo infeccioso de la toxoplasmosis, sus clasificaciones, características más sobresalientes, enfermedades que producen, complicaciones y su prevención. OBJETIVOS ESPECÍFICOS: Los estudiantes serán capaces de: Reconocer al toxoplasma en el microscopio Indicar huésped, complicaciones que produce Identificar estadios del ciclo de vida Identificar los grupos de riesgo MATERIALES: Muestras con toxoplasma para que sean identificados por los estudiantes Lugol para la preparación de la muestra Porta y cubre objetos Microscopio Equipo de limpieza del microscopio DEFINICIÓN.La infección humana con el protozoo Toxoplasma gondii se produce por ingerir carne cruda o tierra contaminadas, o por falta de cuidado al manipular el contenido de una caja para excrementos de gato infectada. Las mujeres embarazadas infectadas pueden transmitir la infección al feto (toxoplasmosis congénita). ESTRUCTURA.Toxoplasma gondii es un protozoo parásito ubicuo de aves y mamíferos. Este parásito intracelular obligado invade el citoplasma de cualquier célula nucleada y se multiplica asexualmente dentro de ella. Cuando el huésped desarrolla inmunidad, cesa la multiplicación de los taquizoítos y se forman quistes tisulares capaces de persistir durante años, sobre todo en el encéfalo y el músculo. La reproducción sexual de T. gondii sólo ocurre en tracto intestinal de los gatos; los ooquistes resultantes, eliminados con las heces, conservan su capacidad infecciosa en el suelo húmedo durante alrededor de un año. 12 La ingestión de ooquistes procedentes de los excrementos de los gatos representa el modo más común de contagio oral. La infección puede ocurrir también al comer carne cruda o poco cocinada que contiene quistes tisulares, la mayoría de las veces de cordero, cerdo o vaca. La toxoplasmosis se puede transmitir por vía transplacentaria si la madre se infecta durante el embarazo, o si la inmunosupresión reactiva una infección previa durante la gestación. También es posible la transmisión por transfusión de sangre completa o de concentrados de hematíes, o por trasplante de un órgano de un donante seropositivo. La reactivación de la infección latente se observa sobre todo en pacientes inmunodeprimidos o en personas por lo demás sanas con infección congénita de la retina. EPIDEMIOLOGÍA Y PATOGENIA.Las principales vías de transmisión al hombre son la oral y la transplacentaria. La infección suele producirse por ingestión de carne –fundamentalmente de cerdo o cordero y raramente de ternera– que contiene quistes tisulares, o de vegetales u otros productos contaminados con ooquistes a partir de materia fecal de gatos. No se ha descrito el contagio interhumano. Una vez ingeridos, la pared de los quistes tisulares, o de los ooquistes esporulados, es destruida por las enzimas digestivas, con lo cual se liberan los taquizoítos. Éstos se diseminan por vía hematógena o linfática tras invadir las células del epitelio intestinal y pueden alcanzar cualquier órgano, aunque se localizan sobre todo en los músculos esqueléticos, el corazón y el cerebro. Los taquizoítos se multiplican en el interior de las células y, al lisarlas, invaden por contigüidad las células próximas y pueden permanecer viables durante períodos muy prolongados en el interior de los macrófagos. El cese de la multiplicación coincide con la aparición de la respuesta inmunitaria (humoral y celular). Como consecuencia de ésta, los taquizoítos se enquistan, forma en la que pueden permanecer viables durante toda la vida del paciente. La proliferación de los taquizoítos se puede prolongar más tiempo en el SNC y en la retina de los pacientes, debido a la dificultad de los anticuerpos para alcanzar estas localizaciones o en caso de que la primoinfección se produzca en un huésped inmunodeprimido. Las reactivaciones coinciden con depresiones transitorias o permanentes de la inmunidad celular, siendo la infección por el virus de inmunodeficiencia humana (HIV) en fases avanzadas el ejemplo más paradigmático. Se ha demostrado la posibilidad de adquirir una toxoplasmosis también a partir de transfusiones de productos hemáticos (sangre total o leucocitos) provenientes de pacientes en fase de diseminación hematógena o bien a través de órganos trasplantados que contengan quistes del parásito. También se ha descrito la inoculación accidental en personal de laboratorio. Los taquizoítos pueden sobrevivir hasta 50 días en sangre total citratada y conservada a 4 °C. La toxoplasmosis congénita se transmite por vía transplacentaria y la condición necesaria es que la madre sufra durante el embarazo una diseminación hematógena. Ello 13 ocurre cuando la madre adquiere una primoinfección durante el embarazo y, mucho más raramente, si como consecuencia de una inmunodepresión coincidente con el embarazo se reactiva una toxoplasmosis latente. La probabilidad de una primoinfección durante el embarazo es de 0,5-1%, con independencia del área geográfica. La probabilidad global de transmisión maternofetal es del 50%, aunque parece ser considerablemente inferior durante el primer trimestre y superior durante el último, y puede reducirse al 5% o menos si la infección de la madre se detecta y se administra el tratamiento adecuado. La incidencia global de infección por toxoplasma es de 1-3 por cada 1.000 nacidos vivos. SÍNTOMAS Y SIGNOS.La infección suele ser asintomática, aunque puede causar linfadenopatía cervical o axilar leve. Las infecciones sintomáticas se pueden manifestar de diversas formas. La toxoplasmosis aguda puede imitar a la mononucleosis infecciosa con linfadenopatía, fiebre, malestar general, mialgia, hepatoesplenomegalia y faringitis. Es frecuente la aparición de linfocitosis atípica, anemia leve, leucopenia y anomalías ligeras de las pruebas de función hepática. El síndrome puede persistir durante semanas o meses, pero casi siempre tiene carácter autolimitado. Se ha descrito una forma diseminada grave caracterizada por neumonitis, miocarditis, meningoencefalitis, polimiositis, exantema maculopapular difuso, fiebre alta, escalofríos y prostración. La enfermedad aguda fulminante es rara. La toxoplasmosis puede causar una enfermedad grave en pacientes inmunodeprimidos. Entre el 30 y el 40% de los enfermos con SIDA desarrollan toxoplasmosis clínicamente aparente, que la mayoría de las veces se debe a reactivación de una infección latente previa. La mayoría de los pacientes con SIDA y toxoplasmosis sufren encefalitis o meningoencefalitis en potencia letales o, con menos frecuencia, miocarditis, neumonitis, orquitis, afectación de otros órganos o enfermedad diseminada. La toxoplasmosis del SNC causa déficit neurológicos focales, como pérdida motora o sensorial, parálisis de pares craneales, anomalías visuales, convulsiones focales y anomalías generalizadas del SNC, por ejemplo cefalea, alteración del estado mental, 14 convulsiones, coma y fiebre. En la neumonitis por toxoplasma, los infiltrados intersticiales difusos pueden progresar con rapidez hasta la consolidación y causar insuficiencia respiratoria; la endarteritis puede conducir a infarto de pequeños segmentos pulmonares. Los defectos de conducción son comunes, aunque con frecuencia asintomáticos, en la miocarditis, que puede llevar en poco tiempo a la insuficiencia cardíaca. Las infecciones no tratadas suelen resultar fatales. La toxoplasmosis congénita suele ser resultado de una infección aguda primaria, con frecuencia asintomática, adquirida por la madre durante el embarazo. Las mujeres infectadas antes de la concepción no suelen transmitir la toxoplasmosis al feto, a menos que la infección se reactive durante el embarazo por inmunosupresión. El riesgo de infección transplacentaria aumenta desde el 15% hasta el 30 y el 60% cuando la madre se contagia durante el primero, el segundo o el tercer trimestre del embarazo, respectivamente. Las manifestaciones clínicas de la toxoplasmosis congénita son variables. El aborto espontáneo y el parto de feto muerto pueden ocurrir al principio de la gestación. La enfermedad del recién nacido puede ser grave, con ictericia, exantema y hepatoesplenomegalia, seguidas de una tétrada característica de anomalías: coriorretinitis bilateral, calcificaciones cerebrales, hidrocefalia o microcefalia y retraso psicomotor. El pronóstico es malo. Muchos niños con infecciones menos graves y la mayoría de los hijos de madres infectadas durante el tercer trimestre, parecen sanos al nacer, pero experimentan riesgo elevado de anomalías meses o incluso años más tarde. La mayoría de los casos de toxoplasmosis ocular se deben a una infección congénita reactivada en épocas posteriores de la vida (sobre todo en las décadas segunda y tercera). Se produce retinitis necrotizante focal y una inflamación granulomatosa secundaria de la coroides. Las recidivas de la coriorretinitis son frecuentes y pueden cursar con dolor ocular, visión borrosa y, a veces, ceguera. DIAGNÓSTICO.El diagnóstico se establece mediante pruebas serológicas. Los anticuerpos IgM específicos aparecen durante las dos primeras semanas de enfermedad, alcanzan un máximo a las 4-8 sem y después, en los casos típicos, se hacen indetectables al cabo de varios meses. Los anticuerpos IgG tardan más en aparecer, alcanzan títulos máximos al cabo de 1 o 2 meses y pueden permanecer altos y estables durante meses o años. La presencia de anticuerpos IgM o el aumento de cuatro veces en los títulos de anticuerpos IgG suelen indicar enfermedad aguda, que también se debe sospechar si los títulos de IgG por IFA o de la prueba con colorante son superiores a 1:1.000 en una embarazada con linfadenopatía o en un paciente inmunodeprimido con encefalitis. La infección pasada, que confiere resistencia frente a la reinfección, produce en los casos típicos positividad de los anticuerpos IgG con anticuerpos IgM negativos. La detección de anticuerpos IgM específicos en la enfermedad neonatal sugiere infección congénita. (La IgG materna cruza la placenta, cosa que no hace la IgM.) En la coriorretinitis por toxoplasma suelen existir títulos bajos de anticuerpos IgG, pero sin anticuerpos IgM específicos. La serología no es útil para diagnosticar la toxoplasmosis en pacientes con SIDA. No existen anticuerpos IgM en la reactivación, y los anticuerpos IgG frente a T. gondii no 15 distinguen entre infección latente y reactivada. Esta última afecta al 20-30% de los pacientes con SIDA de Estados Unidos, presenten o no toxoplasmosis clínica. El parásito puede ser aislado durante la fase aguda de la enfermedad mediante inoculación al ratón o por cultivos tisulares de material de biopsias o líquidos corporales, pero esto requiere hasta seis semanas. Los microorganismos se pueden demostrar en el estudio histológico. Los taquizoítos, presentes durante la infección aguda, se tiñen bien con el colorante de Giemsa o con el de Wright, aunque puede ser difícil hallarlos en los cortes tisulares teñidos con métodos rutinarios. Los quistes tisulares no distinguen entre infección aguda y crónica. Los toxoplasmas se deben diferenciar de otros microorganismos intracelulares, como Histoplasma, Trypanosoma cruzi y Leishmania. Se están investigando pruebas para la detección rápida de antígenos del parásito o ADN amplificado mediante PCR en sangre, LCR o líquido amniótico. El análisis del líquido amniótico con PCR parece ser el método más sensible para diagnosticar la toxoplasmosis in utero. En la toxoplasmosis del SNC, el LCR puede mostrar pleocitosis linfocítica y aumento de proteínas. La TC revela en los casos típicos múltiples lesiones densas redondeadas, con intensificación anular tras la inyección de contraste. La RM es más sensible que la TC. Aunque estas lesiones no son patognomónicas, su presencia en un paciente con SIDA y síntomas del SNC justifica un intento de tratamiento empírico. Si la sospecha diagnóstica de toxoplasmosis es correcta, se debe apreciar mejoría clínica o radiológica al cabo de 7 a 14 d. El diagnóstico específico requiere biopsia cerebral en los pacientes con SIDA y síntomas del SNC. 16 EJERCICIOS DE EVALUACIÓN (Toxoplasmosis) 1.- ¿Cuál es el principal reservorio del toxoplasma? R……………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………… 2.- ¿Cuál es el periodo de incubación del toxoplasma? R.............................................................................................................................................. ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ........................................................................................... 3.- ¿Esquematicé el ciclo de vida del toxoplasma Gondii? R 4.- ¿En qué alimentos se encuentra el toxoplasma? R……………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… …………………………………………………………………………………………… 5.- ¿En que forma se encuentra el toxoplasma en el gato? R……………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………… 6.- ¿Qué daños va a causar la toxoplasmosis en el feto? R……………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………… 17 PRACTICA No. 9 HELMINTOS OBJETIVOS ESEPCIFICOS: Al finalizar la clase los estudiantes serán capaces de: · · · · · Reconocer a un helminto en el microscopio Conocer los diferentes grupos en los que se clasifican Indicar su habitad y medios de transmisión Conocer las diferentes enfermedades que producen Mencionar la sintomatología MARCO TEORICO: Los helmintos o gusanos parásitos del hombre, según su forma y la naturaleza de su sistema reproductor se clasifican en dos grupos: Nemátodos o gusanos cilíndricos (sin segmentos o proglótides y con sexos separados) y Platelmintos o gusanos planos. Estos últimos se dividen a su vez en Céstodos (gusanos segmentados y hermafroditas) y Tremátodos (no segmentados, en forma de hoja, hermafroditas o con sexos separados). Es frecuente que los helmintos estén provistos de dientes, ganchos, ventosas u otras estructuras que les sirven para adherirse, penetrar o erosionar los tejidos del hospedador. Muchos de los helmintos parásitos poseen también glándulas secretoras de productos líticos que sirven para digerir los tejidos del hospedador con objeto de utilizarlos como alimento o para que el gusano pueda desplazarse a través de ellos hasta el lugar en donde se establece y madura. Cabe suponer que la pérdida total o parcial del tubo digestivo sea debida a que el parásito se localiza en un medio en el que abundan los alimentos predigeridos. Los órganos sexuales, por el contrario, se encuentran muy desarrollados. La necesidad de estos parásitos de producir huevos en grandes cantidades y provistos de una cubierta protectora se debe a las vicisitudes con que se encontrarán los huevos después que han salido del útero. Los huevos o las larvas salen del huésped definitivo (en el que el parásito se ha reproducido sexualmente) y llegan a un medio donde muchos de ellos suelen perecer antes de tener la ocasión de infectar un nuevo hospedador. Además, muchas especies de helmintos necesitan de uno o más hospedadores intermediarios en los que se lleva a cabo la reproducción asexual o el desarrollo de la larva. En algunas regiones del mundo, el clima y otras circunstancias del medio o las costumbres y hábitos alimenticios de sus habitantes favorecen el predominio de determinadas especies de helmintos. En la mayoría de helmintiasis humanas el gusano adulto tiene su hábitat en el intestino. 18 ACTIVIDADES DE LA PRÁCTICA DE HELMINTOS 1.- Describe las características más sobresalientes de los helmintos 2.- Explica el ciclo de vida del helminto que tú prefieras. 3.- ¿Cuál es el método más eficaz para el diagnóstico de los helmintos? 19 PRACTICA No. 10 TRIPANOSOMA CRUZI OBJETIVO GENERAL: Los estudiantes de práctica conocerán la enfermedad de la tripanosomiasis su clasificación, características más sobresalientes, transmisión, población en riesgo, complicaciones que producen y su prevención. OBJETIVOS ESPECÍFICOS: Los estudiantes serán capaces de: Reconocer los parásitos en el microscopio Indicar habitad y enfermedad que produce Identificar estadios del ciclo de vida Conocer el modo de prevención MATERIALES: Muestras con Tripanosoma Cruzi para que sean identificados por los estudiantes Porta y cubre objetos Microscopio Equipo de limpieza del microscopio DEFINICIÓN.Enfermedad parasitaria transmitida al hombre a través de la picadura de insectos hematófagos. La forma aguda se caracteriza por una lesión en la zona de la picadura, fiebre, debilidad, esplenomegalia y ganglios linfáticos aumentados de tamaño, edema de la cara y piernas y taquicardia. La forma crónica puede manifestarse por miocardiopatía o dilatación del esófago o colon. ETIOLOGÍA Y PATOGENIA.T. cruzi es transmitido por chinches triatómidos (reduvídeos, "chinches besuconas" o "asesinas"). Al picar, los chinches causantes depositan sobre la piel heces que contienen tripomastigotes metacíclicos. Estas formas infecciosas entran a través de la picadura o atraviesan las mucosas. Los parásitos invaden después los macrófagos en el punto de entrada, se transforman en amastigotes que se multiplican mediante fisión binaria, y son liberados como tripomastigotes hacia la sangre y los espacios tisulares, desde donde infectan a otras células. Las células afectadas con más frecuencia son las del sistema reticuloendotelial, el miocardio, los músculos y el sistema nervioso. Otros reservorios importantes son los perros, gatos, zarigüeyas, ratas y otros mamíferos. La 20 infección puede ser transmitida también mediante transfusiones de sangre o a través de la placenta. Se encuentran chinches triatómidos infectados en América del Norte, del Sur y Central. Más de 20 millones de americanos están infectados por T. cruzi. La transmisión a través de vectores es infrecuente en Estados Unidos; sólo se han descrito unos pocos casos en Texas y California. Sin embargo, más de 100.000 hispanoamericanos residentes en Estados Unidos sufren infección crónica; estas personas constituyen fuentes potenciales de contagio por transfusiones de sangre. En ciertas partes de Sudamérica, la enfermedad de Chagas es la causa principal de muerte entre los varones con menos de 45 años de edad. SÍNTOMAS Y SIGNOS La infección inicial suele ser asintomática. Los signos en el punto de entrada del parásito resultan raros, pero puede existir una lesión cutánea eritematosa indurada (chagoma) o edema periocular y palpebral unilateral, con conjuntivitis y linfadenopatía preauricular (conocidos en conjunto como signo de Romaña) cuando la inoculación se produce a través de la conjuntiva. En los casos que desarrollan enfermedad aguda clínicamente aparente, los síntomas comienzan tras un período de incubación de 1 a 2 sem, y consisten en fiebre (que persiste durante semanas), malestar general, linfadenopatía generalizada y hepatoesplenomegalia. Menos del 10% de los pacientes con enfermedad de Chagas aguda desarrollan miocarditis aguda con insuficiencia cardíaca, o meningoencefalitis aguda con crisis convulsivas. La enfermedad aguda es fatal en alrededor del 10% de los casos, pero cede sin tratamiento en el resto. Después de una fase aguda sintomática o asintomática, las personas infectadas entran en una fase latente que puede durar años, décadas o toda la vida. Entre el 20 y el 40% de esos individuos desarrollan signos clínicos de enfermedad de Chagas crónica. La cardiomiopatía crónica provoca hipertrofia flácida de todas las cámaras, aneurismas apicales y lesiones degenerativas localizadas en el sistema de conducción, lo que puede conducir a insuficiencia cardíaca, crisis de Stokes-Adams, muerte repentina por bloqueo cardíaco o arritmias ventriculares, y tromboembolismo. La anomalía más común del ECG es el bloqueo de rama derecha. La enfermedad gastrointestinal crónica produce síntomas que recuerdan a la achalasia o la enfermedad de Hirschsprung. El megaesófago de Chagas se presenta como disfagia o regurgitación y puede conducir a infecciones pulmonares por aspiración o desnutrición intensa. El megacolon puede provocar largos períodos de estreñimiento y vólvulo intestinal. La inmunosupresión de los pacientes con infección crónica puede conducir a reactivación, con parasitemia intensa y una segunda fase aguda. La enfermedad de Chagas aguda primaria en pacientes inmunodeprimidos, por ejemplo con SIDA, puede ser grave y atípica, con lesiones cutáneas y formación de masas en el SNC. La transmisión congénita puede causar aborto, parto de feto muerto o enfermedad neonatal crónica con mortalidad elevada. La transmisión se produce en el 1 al 5% de las embarazadas con infección crónica. 21 DIAGNÓSTICO.- Tripanosoma Cruzi El número de tripanosomas en sangre periférica es alto durante la fase aguda, y los parásitos se detectan con facilidad en el examen de las extensiones finas o en las gotas gruesas. Por el contrario, durante la infección latente crónica y en la fase crónica de la enfermedad, existen pocos parásitos en la sangre; el diagnóstico definitivo puede requerir entonces hemocultivo (o cultivo del aspirado de órganos como los ganglios linfáticos). Otras técnicas diagnósticas son el xenodiagnóstico (examen del contenido rectal de chinches criados en el laboratorio, después alimentarlos en un paciente sospechoso o en animales a los que se ha inoculado sangre humana) y detección de ADN del parásito mediante PCR en la sangre o los tejidos corporales. Las pruebas serológicas pueden proporcionar resultados positivos falsos en pacientes con leishmaniasis visceral o mucocutánea. 22 EJERCICIOS DE EVALUACIÓN (Tripanosoma Cruzi) 1.- ¿Cómo se manifiesta el mal de chagas en el humano? R……………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………… 2.- ¿Cuál son otros reservorios del tripanosoma cruzi? R.............................................................................................................................................. ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ................................................................................................................................................ ........................................................................................... 3.- ¿Esquematicé el ciclo de vida del tripanosoma cruzi? R 4.- ¿En qué forma se encuentra el tripanosoma Cruzi en la sangre humana? R……………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… …………………………………………………………………………………………… 5.- ¿En que forma se encuentra el tripanosoma cruzi en la vinchuca o chinche? R……………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………… 6.- ¿En que consiste el xenodiagnostico explique? R……………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… ………………………………………………………………………………………………………… …………………………………………………………………………………………… 23