Práctica de anatomía Relajación articular: Hombros - cuello – cara Comenzamos acomodando al compañero. Primer contacto: una mano a nuestro corazón, la otra al corazón del compañero. Llevamos la atención a la respiración. Respiramos en nuestras manos. Y nos disponemos mentalmente a realizar la práctica. HOMBROS: Extendemos los dos brazos a la vertical: 1. 2. 3. 4. Realizamos vibraciones arriba y abajo. Realizamos movimientos ondulantes hacia delante y hacia detrás. Realizamos movimientos circulares en los dos sentidos. Abriendo los brazos un poco como si fueran alas, realizamos movimientos hacia el suelo y hacia arriba. 5. Tirar de un brazo y relajarlo, tirar del otro brazo y relajarlo. Alternar varias veces. 6. Tiramos de los dos brazos hacia arriba al espirar y al inspirar relajarlos. a. Repetir unas cuantas veces y después mantener un tiempo arriba. 7. Cruzar los brazos y tirarlos hacia atrás al expulsar y volverlos al centro al inspirar. 8. Después mantener un tiempo los brazos así cruzados en la vertical y tirando de ellos hacia arriba. Extendemos los brazos hacia atrás: 1. Tiramos hacia atrás de un brazo al expulsar y al inspirar lo relajamos. Luego lo mismo con el otro brazo. Ir alternando. 2. Mantener los dos brazos extendidos hacia atrás durante un tiempo. Relajar los brazos a lo largo del cuerpo. CUELLO: 1. Pellizcamos la zona del hombro al cuello. 2. Amasar el trapecio desde la 7ª cervical hacia el occipital. CABEZA: 1. Micromovimientos, tirar suavemente de ella y recolocarla en el suelo. CARA: 1. Con los pulgares, realizar pequeñas presiones con los dedos en el mentón para que se afloje. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17. Alisar con los dedos debajo de del labio inferior. Alisar con los dedos debajo de del labio superior. Alisar debajo de los ojos, del centro hacia las sienes. Alisar por debajo de los pómulos. Alisar por debajo de las cejas. Alisar alrededor de los ojos. Alisar la frente de un lado al otro a diferentes alturas. Con las yemas de los dedos, subir desde el mentón hacia las sienes y desde las sienes bajar hacia las orejas. Deslizar los pulgares desde el centro de las cejas hacia los lados, luego hacia las sienes y terminando hacia las orejas. Dar masaje en forma de círculo en las sienes, en los dos sentidos. Masaje en las orejas. Masajear las articulaciones de las mandíbulas, relajando bien la boca y la lengua. Presionar sobre los dos lados de la raíz de la nariz. Presionar a cada lado de las alas de la nariz. Presionar en los lados de los labios. Acariciar toda la cara con las yemas de los dedos. ARMONIZACIÓN ENERGETICA Y DESPEDIDA. 1. Frotar las manos y colocarlas en forma de cuenco en los ojos. 2. Frotar de nuevo las manos y las colocamos juntas encima del rostro para magnetizar la cabeza. 3. Frotar de nuevo las manos y colocarlas a un poco de distancia a la altura de las orejas creando un campo magnético entre las manos. 4. Nos separamos de ellos manteniendo los lazos desde el corazón y les dejamos sentir el trabajo. 5. Rompemos lazos desde el plexo frotándonos las manos y el plexo solar, manteniendo los lazos desde el corazón. Cosas a tener en cuenta en la práctica: Mantener el ritmo en los movimientos, dando tiempo a que cada movimiento tenga su efecto, la confianza del que recibe, el corazón del que da… Para coger las muñecas no presionar los lados para no hacer daño. Las cogemos por los laterales abriendo los dedos índice y corazón. Que el movimiento sea armónico y el estiramiento sea el justo favorecerá la liberación de tensiones y la relajación. Movimientos bruscos, con falta de ritmo o atención y/o estiramientos excesivos producirán un efecto contrario provocando la contracción de la zona que estamos trabajando. Realizar movimientos dulces y a la vez firmes, trasmitiendo confianza, permitirá que la otra persona se abandone disfrutando plenamente de los beneficios del trabajo realizado. Recordar también que quien realiza la práctica vaya revisando su postura durante la misma evitando así acumular tensiones posturales. Sadhana Valencia.