información y consulta de los trabajadores a nivel

IP/97/483
Bruselas, 4 de junio de 1997
INFORMACIÓN
Y
CONSULTA
TRABAJADORES A NIVEL NACIONAL
DE
LOS
La Comisión Europea ha decidido hoy consultar a los interlocutores
sociales a nivel de la Unión europea (UE) sobre la cuestión de la
información y la consulta de los trabajadores a nivel nacional. La Comisión
desea examinar con los interlocutores sociales la necesidad de crear un
marco para completar las prácticas nacionales y secundar la legislación de
la UE, que prevé la información y la consulta en circunstancias específicas
(transferencia de empresas, despidos colectivos). Esta consulta es
continuación de un amplio debate que se inició con la Comunicación de la
Comisión, de 14 de noviembre de 1995, sobre la información y consulta de
los trabajadores.. Los interlocutores sociales tienen seis semanas para
expresar su opinión en esta primera ronda de consultas. A raíz de este paso
inicial, la Comisión, si considera que debe actuarse a nivel de la UE,
publicará un segundo documento de consulta sobre el contenido de una
posible propuesta legislativa.
La importancia de esta cuestión se ha puesto de manifiesto con los
acontecimientos recientes relacionados con el cierre de la fábrica de Renault de
Vilvoorde. Aunque la eficacia de las disposiciones nacionales y comunitarias
existentes se ha visto confirmada por decisiones recientes de los tribunales
nacionales pertinentes, la Comisión considera necesario evaluar algunas de la
características más importantes de la información y la consulta a nivel nacional,
dada la preocupación cada vez mayor que muestran los ciudadanos europeos
por las repercusiones sociales que puedan tener las reestructuraciones
empresariales.
Esta consulta se basa también en el análisis detallado que el grupo Davignon ha
realizado sobre la cuestión de la participación de los trabajadores en relación con
el Estatuto de la Empresa europea.
El Sr. D. Padraig Flynn, miembro de la Comisión responsable de empleo y
asuntos sociales, ha señalado hoy que "el amplio análisis que ha realizado la
Comisión pone de manifiesto la necesidad de completar la acción de la UE y
llenar una serie de lagunas que existen en este ámbito tanto a nivel nacional
como comunitario. Espero que los interlocutores sociales europeos quieran y
puedan llegar a un acuerdo sobre las cuestiones que se plantean en el presente
documento de consulta. El reciente acuerdo sobre el trabajo a tiempo parcial y el
acuerdo de 1995 sobre el permiso parental muestran la eficacia de este proceso".
El Comisario continuó diciendo que "en mi opinión, cuando estas preocupaciones
se plasmen en normas comunitarias debe prestarse la debida atención a la
posibilidad de que los propios interlocutores sociales configuren, a nivel
empresarial, los procedimientos de información y de consulta de los trabajadores
y los adapten a las culturas específicas y a las situaciones locales".
Un derecho social fundamental
El Sr. Flynn ha hecho hincapié en la necesidad de que se revisen los marcos
comunitarios y nacionales existentes en materia de información y consulta de los
trabajadores a nivel nacional a fin de tener en cuenta la necesidad de garantizar:
·
el respeto del derecho social fundamental de los trabajadores a ser informados
y consultados por adelantado sobre cualquier decisión que pueda afectarles;
·
la eficacia del proceso de consulta de los trabajadores, que permitiría dar una
respuesta adecuada a los procesos de cambio derivados de las tendencias
económicas y técnicas;
·
el reconocimiento de que la mejora de la competitividad de las empresas
europeas se consigue mejor, a pesar del aumento de la productividad, con
trabajadores más comprometidos y más dispuestos a aceptar nuevos modos
de organización del trabajo;
·
que estos procedimientos aumenten la seguridad laboral en la convicción de
que, al hacer parrticipar a los trabajadores o a sus representantes, el proceso
de cambio se realizará de tal modo que se consiga un equilibrio entre las
necesidades y los intereses de los trabajadores y de la empresa;
·
la realización de una consulta eficaz que cree un espíritu de colaboración;
·
la importancia de prevenir los riesgos y anticipar los problemas introduciendo
sistemas eficaces de gestión previsora del empleo.
La gran mayoría de los Estados miembros de la Unión Europea dispone de un
conjunto importante de disposiciones, establecidas por ley o por convenio, que
prevén la información y la consulta en diferentes niveles (empresa, compañía,
grupo). No obstante, el respeto de estos derechos sociales fundamentales no
está siempre garantizado de manera efectiva, ya que las decisiones contrarias a
estas normas no se anulan automáticamente, especialmente cuando repercuten
en el contrato o en las condiciones de empleo.
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En algunos Estados miembros no se tiene en cuenta de manera adecuada la
relación entre la información y la consulta de los trabajadores en lo que atañe a
las decisiones estratégicas o económicas y a su incidencia social.. Ello se debe a
menudo a que la participación de los representantes de los trabajadores tiene
lugar en un momento demasiado tardío del proceso decisorio. La consulta y la
aplicación de medidas para evitar o atenuar las consecuencias sociales de los
cambios se producen a menudo demasiado tarde, es decir cuando la muerte
económica y estratégica es ya irremediable.
Procedimiento
El documento de consulta pide a los interlocutores sociales que den su opinión
sobre esta cuestión, de conformidad con el procedimiento previsto en el Acuerdo
sobre la política social. Los interlocutores sociales dispondrán de un plazo de seis
semanas para dar su opinión en esta primera ronda de consultas.
A raíz de este procedimiento inicial, la Comisión, si considera que debe actuarse
a nivel de la UE, publicará un segundo documento de consulta sobre el contenido
de una posible propuesta legislativa. En esta fase, los interlocutores sociales
pueden comunicar a la Comisión su deseo de negociar un acuerdo sobre los
temas planteados en dicho documento, en cuyo caso la Comisión suspenderá la
accción legislativa durante nueve meses para permitir la negociación y la
celebración de dicho acuerdo.
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