Causa N° 6464 "I., A. s/ recurso de Casación" En la ciudad de La Plata a los veintitrés días del mes de diciembre del año dos mil cuatro, siendo las ............... horas, se reúnen en Acuerdo Ordinario los señores Jueces de la Sala Primera del Tribunal de Casación Penal de la Provincia de Buenos Aires, doctores Benjamín Ramón Sal Llargués, Carlos Angel Natiello y Horacio Daniel Piombo, para resolver en causa N° 6464 de este Tribunal, caratulada "I., A. s/ recurso de Casación". Practicado el sorteo de ley, resultó que en la votación debía observarse el orden siguiente: SAL LLARGUES — NATIELLO - PIOMBO, procediendo los mencionados magistrados al estudio de los siguientes: ANTECEDENTES Llega esta causa a este Tribunal por recurso propio interpuesto por el doctor Luis Alberto Grisolía, Defensor Particular de A. I. a quien el Tribunal Criminal N° 1 del Departamento Judicial San Martín condenara por infracción a los arts. 189 bis y 255 del C.P. La crisis del resolutorio la centra en la noción de arma de guerra como diferente de la de uso civil condicional, diferencia que no estaría en el calibre del arma "ya que en las dos clases éstas son del mismo calibre...". Sostiene que para que un arma sea de guerra deben estar inventariadas como tales en las instituciones armadas o de seguridad y registradas también como tales en el Ministerio de Defensa y RENAR, puesto que si hubieran sido dadas de baja serían de uso civil condicionado. Dice que el fallo era correcto a la luz de las normas del art. 189 bis 3er párrafo del C.P. y su decreto reglamentario pero que tras la reforma introducida por la ley 25.086 y el decreto 395/75, la conducta de tener las dos pistolas 9 mm. no sería tenencia de arma de guerra sino tenencia de arma de uso civil condicional, conducta atípica puesto que respecto de esta clase de armas- sólo está reprimida penalmente la portación y no la tenencia que sería una contravención. Por efecto de la norma del art. 2 del C.P. debería absolverse a I. por desincriminación de la conducta imputada. En relación al caso contingente, una de las armas estaría a nombre de una transportadora de caudales, lo revólveres no serían de guerra ni estarían a nombre de ninguna institución armada y otra de las pistolas estaría a nombre de un funcionario policial pero -por omisión de éste o de la Policía Bonaerense- no lo estaría en el RENAR como arma de guerra por lo que no se podría considerar a ninguna de las armas secuestradas como de esa especie. También critica las pautas de graduación de la sanción. Reclama por ello absolución. Llamadas las partes a la audiencia de informe, por la reclamante no se hizo presente el doctor Grisolía y -en cambio- por la acusadora, la doctora Alejandra Marcela Moretti, Fiscal Adjunta ante este Tribunal, sostuvo que el recurso no podía tener acogida. Parte de la premisa de que las dos pistolas 9 mm. que fueran secuestradas en poder del imputado son armas de guerra puesto que -aún cuando no se encontraran inscriptas en el RENAR- no muta la naturaleza de esos objetos. Destaca que el recurrente no ha tenido en cuenta que el párrafo del proyecto en que finca el argumento ha sido observado por el Poder Ejecutivo en su promulgación, razón por la que no rige. Afirma que no cuestionada la constitucionalidad del decreto de promulgación la inconstitucionalidad no podría ser declarada de oficio. Acepta en cambio que -aún cuando no lo ha solicitado la recurrente- la norma del actual art. 189 bis inc. 2° segundo párrafo (t.o. n° 25.886) amenaza una menor pena, por lo que -incriminada la conducta sin solución de continuidadcorrespondería disminuir la pena por tal razón. Asigna a la calidad de "arma de uso civil condicional" el carácter de subcategoría de las de guerra. Finalmente descarta que pueda recibirse la queja respecto de las pautas para graduar la sanción. Defiende así el concepto de armas de uso prohibido empleado por el "a quo" para agravar por su número y por la presencia de proyectiles de ese calibre. Ello porque no ha sido imputado el delito de tenencia, con lo cual la agravante procedería. Solicita el rechazo salvo en lo que propicia la disminución aludida. Hallándose la causa en estado de dictar sentencia, la Sala I del Tribunal dispuso plantear y resolver la siguientes: CUESTIONES 1ra.) ¿Es admisible el presente recurso? 2da.) ¿Es materialmente fundado de modo que autorice la casación? 3ra.) ¿Qué pronunciamiento corresponde dictar? A la primera cuestión planteada el señor Juez, doctor Sal Llargués, dijo: El recurso se trae contra sentencia definitiva en los términos del art. 450, se han cumplido las mandas en punto a los plazos a que alude el art. 451 y se invocan motivos de los contenidos en el art. 448, todos del rito. Voto por la afirmativa. A la misma primera cuestión planteada el señor Juez, doctor Natiello, dijo: Adhiero al voto del doctor Sal Llargués y doy el mío en igual sentido y por los mismos fundamentos. Voto por la afirmativa. A la misma primera cuestión planteada el señor Juez, doctor Piombo, dijo: Adhiero al voto de los colegas preopinantes en igual sentido y por los mismos fundamentos. Voto por la afirmativa. A la segunda cuestión planteada el señor Juez, doctor Sal Llargués, dijo: Como lo pone de resalto la doctora Moretti, todo el argumento del recurrente se sustenta en un error conceptual derivado de entender que la frase observada por el Poder Ejecutivo en su decreto de promulgación (n° 496/99, art. 2°) estuvo vigente en el texto que impusiera la ley 25.086, art. 2°. Como es de público y notorio, esa observación del poder administrador opera como veto parcial al texto de una ley y desde luego- no tiene validez como ley. Esta circunstancia hace que -a la luz de esa normativalas armas fueran de uso civil o de guerra conforme al calibre por exclusión a partir de la letra de los arts. 4 y 5 del Decreto 395/75. Empero tal como resalta la distinguida Fiscal Adjunta, opera el art. 2 del C.P. por haber estipulado la actual normativa -para el tipo de armas de referencia en autos- un mínimo menor (dos años) lo que impone una reducción de la penalidad impuesta. En esa faena, no cabe descartar las agravantes computadas por el "a quo" puesto que no es lo mismo, a la luz del monto de injusto, la tenencia de un arma prohibida o dos. Expresamente he acudido a la voz, arma prohibida puesto que eso es lo que se puede sin hesitación leer a la luz de las disposiciones legales comentadas en el nivel dogmático de la tipicidad. La particular interpretación del doctor Grisolía le ha hecho decir que puede hablarse de munición de uso prohibido pero que no podría motejarse de munición de guerra. Allí acude al recurso que critica en el fallo. No desconozco los graves alcances que puede irrogar olvidar la precisión terminológica a la hora de tipificar conductas pero no puedo dejar de decir que -tratándose la figura en examen de una de las denominadas de peligro abstracto, más allá de su legitimidad que no ha sido controvertida en la sub lite- poco importa el "nomen juris" que se asigne a los artefactos si su clasificación, contra lo que sostiene el recurrente, deviene de la vieja disposición de año 1975 que ha permanecido al margen de las sucesivas y defectuosas modificaciones legales que ha soportado el texto de fondo. Finalmente tal como contesta la acusadora, no ha sido I. condenado por la posesión de munición del mismo calibre de las pistolas cuestionadas, por lo que su presencia, a la luz de la independencia típica entre las armas, su munición y los elementos para su fabricación, tornan errado el planteo del recurrente. Con la salvedad hecha respecto de la aplicación de la ley más benigna, voto por la negativa. A la misma segunda cuestión planteada el señor Juez, doctor Natiello, dijo: Adhiero al voto del doctor Sal Llargués y doy el mío en igual sentido y por los mismos fundamentos. Voto por la negativa. A la misma segunda cuestión planteada el señor Juez, doctor Piombo, dijo: Adhiero al voto de los colegas preopinantes en igual sentido y por los mismos fundamentos. Voto por la negativa. A la tercera cuestión planteada el señor Juez, doctor Sal Llargués, dijo: Visto el modo en que han sido resueltas las cuestiones precedentes corresponde: 1) declarar admisible el recurso de Casación interpuesto en favor de A. I.; 2) hacer lugar al mismo y en consecuencia, conforme lo solicita la señora Fiscal Adjunta ante este Tribunal, doctora Alejandra Moretti, casar parcialmente el resolutorio en crisis, disminuyendo la pena impuesta, fijándola en 2 años y 3 meses de prisión e inhabilitación especial por el término de 4 años y 6 meses para ejercer cargos públicos dentro de la policía de esta provincia, con costas; y en lo restante rechazar el recurso por no haberse demostrado las violaciones legales denunciadas, sin costas en esta instancia. (Arts. 2, 20 bis y 189 bis inc. 2° segundo párrafo del C.P. -ley 25886- ; 448, 450, 451, 456 primer párrafo a contrario, 460; 530 y 531 del C.P.P.); 3) regular los honorarios profesionales al letrado interviniente, doctor Luis Alberto Grisolía, por la labor profesional desplegada en esta sede, en la cantidad de ocho (8) unidades jus con más los aportes de ley. Artículos 171 de la Constitución Provincial; 1, 9, 16, 31, 33 y 51 de la ley Nº 8904; 1 y 12 inciso a) de la ley Nº 8455 y artículo 534 del C.P.P. -ley Nº 11.922- debiendo procederse como lo determina el art. 22 de la ley Nº 6716, modificado por el art. 12 de la ley Nº 10.268 y; 4) tener presente la reserva del caso federal planteada por el recurrente a tenor del art. 14 de la ley 48. Así lo voto. A la misma tercera cuestión planteada el señor Juez, doctor Natiello, dijo: Adhiero por sus fundamentos al preopinante dejando sólo a salvo mi criterio contrario a fijar pena en esta sede. Así lo voto. A la misma tercera cuestión planteada el señor Juez, doctor Piombo, dijo: Adhiero al voto del doctor Sal Llargués en igual sentido y por los mismos fundamentos. Así lo voto. Con lo que terminó el Acuerdo dictándose la siguiente: SENTENCIA Por lo expuesto en el Acuerdo que antecede el Tribunal resuelve: I.- Declarar admisible el recurso de Casación interpuesto por el Defensor Particular de A. I., doctor Luis Alberto Grisolía. II.- Hacer lugar al mismo y en consecuencia, conforme lo solicita la señora Fiscal Adjunta ante este Tribunal, doctora Alejandra Moretti, casar parcialmente el resolutorio en crisis, disminuyendo la pena impuesta, fijándola en 2 años y 3 meses de prisión, e inhabilitación especial por el término de 4 años y 6 meses para ejercer cargos públicos dentro de la policía de esta provincia, con costas; y en lo restante rechazar el recurso por no haberse demostrado las violaciones legales denunciadas, sin costas en esta instancia. Arts. 2, 20 bis y 189 bis inc. 2° segundo párrafo del C.P. -t.o según ley 25886- ; 448, 450, 451, 456 primer párrafo a contrario, 460; 530 y 531 del C.P.P. III.- Regular los honorarios profesionales al letrado interviniente, doctor Luis Alberto Grisolía, por la labor profesional desplegada en esta sede, en la cantidad de ocho (8) unidades jus con más los aportes de ley. Artículos 171 de la Constitución Provincial; 1, 9, 16, 31, 33 y 51 de la ley Nº 8904; 1 y 12 inciso a) de la ley Nº 8455 y artículo 534 del C.P.P. -ley Nº 11.922- debiendo procederse como lo determina el art. 22 de la ley Nº 6716, modificado por el art. 12 de la ley Nº 10.268. IV.- Tener presente la reserva del caso federal planteada por el recurrente a tenor del art. 14 de la ley 48. Regístrese. Notifíquese. Remítase copia certificada de lo aquí resuelto al Tribunal Criminal N° 1 del Departamento Judicial San Martín. Oportunamente archívese. Fdo.: BENJAMIN R. SAL LLARGUES; CARLOS A. NATIELLO; HORACIO D. PIOMBO. ANTE MI: CRISTINA PLACHE