DERECHO ADMINISTRATIVO II Autos: TELEFONICA DE ARGENTINA S.A c/GCBA s/SOBRE OTRAS CAUSAS CON TRAMITE DIRECTO ANTE LA CAMARA DE APEL. , Causa Nº 1984/0 , 14/02/2008. Contencioso, Administrativo y Tributario; Cámara de Apelaciones; Sala II Magistrados: Dr. Eduardo A. Russo; Dr. Esteban Centanaro; Dra. Nélida M. Daniele En la Ciudad de Buenos Aires, a los 14 días del mes de febrero de dos mil ocho, se reúnen en Acuerdo los Señores Jueces de la Sala II de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Dres. Nélida Mabel Daniele, Esteban Centanaro y Eduardo Angel Russo, para conocer en el recurso de apelación judicial interpuesto por la denunciada contra la resolución administrativa que le impuso la sanción de multa en autos los autos detallados en el epígrafe y habiéndose practicado el sorteo pertinente resulta que debe observarse el siguiente orden: Dr. Eduardo Angel Russo, el Dr. Esteban Centanaro y Dra. Nélida Mabel Daniele y, resolviendo plantear y votar la siguiente cuestión: ¿se ajusta a derecho la resolución apelada? El Dr. Eduardo Angel Russo dijo: ANTECEDENTES: 1. Las presentes actuaciones se inician con la denunciada incoada por la Sra. María Angélica Paleiro Arcos, quien manifestó haber suscripto una promoción conjunta con la empresa denunciada, que incluía el servicio de Speedy (internet, banda ancha) y telefonía por la que abonaría la suma de cuarenta pesos ($40) por el lapso de tres meses. Agregó que Telefónica le facturó lo acordado, pero que la empresa Advance Speedy le cobró entre ochenta y noventa pesos mensuales, solicitando explicaciones al respecto sin poder cortar el servicio, abonando en la actualidad la suma de doscientos veinticuatro pesos con 89/100 más la factura por el servicio de internet, esto es ciento setenta pesos por bimestre. 2. A fs. 10 obra glosada el acta de conciliación, mediante la que las partes lograron llegar a una amigable composición con fecha 30/4/04. La empresa denunciada ofreció la anulación de los cargos facturados y dados de baja, mediante una nota de crédito por la cantidad de pesos ciento setenta y dos con 53/100 ($172,53) y con referencia a la última factura se comprometió a anular el cargo correspondiente a Speedy, servicios de internet. A fs. 14 consta homologación del acuerdo mencionado y a fs. 15 la Sra. Paleiro denuncia su incumplimiento. 3. A fs. 18, corrido el correspondiente traslado, la empresa denunciada informa que el convenio ha sido cumplido, libelo que se tuvo por no presentado según informe de fs. 21. 4. A fs. 30 el Director General de Defensa y Protección 1 DERECHO ADMINISTRATIVO II al Consumidor le impuso a la denuncia una multa por infracción al art. 46 de la ley 24.240 por la suma de pesos dos mil ($2.000). Asimismo le impuso una sanción de multa de doscientos pesos ($200) por incomparecencia injustificada a la instancia conciliatoria. Ordenó la publicación de la sanción condenatoria en el diario Clarín. Señaló que la parte denunciada no aportó elementos que acrediten el cumplimiento del acuerdo homologado. Agregó que a los efectos de graduar la sanción se tuvo en cuenta la posición que la denunciada ocupa en el mercado y los perjuicios sociales derivados de la infracción. También sostuvo que la empresa es reincidente en los términos del art. 49 de la ley 24.240. 5. Corrido el pertinente traslado, a fs. 34 presentó recurso de apelación Telefónica de Argentina SA, quien se quejó por la inexistencia de infracción al art. 46 de la Ley de Defensa al Consumidor, cuando en realidad el acuerdo fue cumplido pero la Administración procedió a tener por no presentada la documentación que avala tal circunstancia por el solo hecho de haber presentado dos horas más tarde del plazo previsto por la norma, el escrito informando el cumplimiento. En esta línea agregó que la Administración se enfrenta a un excesivo rigorismo formal, sin tener en cuenta el informalismo a favor del administrado. Señaló que “[l]a inadecuación a las formas, no puede conllevar a la pérdida de un derecho dentro del procedimiento administrativo...” (v. fs. 36 vta.), considerando que éste es informal para el administrado. Así, sostuvo que el acto no se basó en un supuesto incumplimiento del acuerdo, sino que su fundamento es el formalismo riguroso. En forma subsidiaria solicitó se reduzca la sanción impuesta—$2.000 por infracción al art. 46 y $200 por incomparecencia injustificada a la audiencia de conciliación— por considerarla excesiva e irrazonable. Asimismo se quejó por la carencia de fundamentación al momento de graduar la multa, siendo por ello arbitraria e ilegítima. En la misma oportunidad hizo reserva del caso federal. 6. A fs. 49 se concedió el remedio procesal interpuesto y a fs. 67 contestó agravios la Procuración General de la Ciudad de Buenos Aires, pasando los presentes al acuerdo según constancia de fs. 70. CONSIDERANDO: 1. En primer lugar y atento lo expuesto por la empresa denunciada, debo aclarar que el procedimiento administrativo se encuentra imbuido de principios formativos que la Dirección General no puede desconocer. En este sentido, el art. 22 de la Ley de Procedimientos Administrativos de la Ciudad de Buenos Aires, dispone en lo que aquí nos interesa que: “[e]l procedimiento administrativo ante los órganos y entes mencionados en el art. 1º se ajustará a los siguientes requisitos: (...) c) Informalismo: excusación de la inobservancia por los interesados de exigencias formales no esenciales y que puedan ser cumplidas posteriormente (...)”. Ha dicho la doctrina respecto a la interpretación del principio mencionado que: “...puede entenderse como un procedimiento reglado que los órganos administrativos están obligados a seguir, pero carente de formalidades rígidas y, por tanto, excusables para los administrados, usuarios, consumidores, vecinos, etc” (Agustín Gordillo, Mabel Daniele, Procedimiento Administrativo, Ed. Lexis Nexos, Buenos Aires, 2006, p. 38). De acuerdo al desarrollo de 2 DERECHO ADMINISTRATIVO II los presentes y continuando la línea expuesto, entiendo prudente destacar que la Administración ha caído en un extremado rigor formal al no tener por presentado el informe correspondiente al cumplimiento del acuerdo y la documental adjunta al mismo. Esto así, ya que el Director General entendió que el escrito había sido presentado en forma extemporánea y por ello no lo tuvo por presentado. Razón posee la Administración cuando lleva a cabo el planteo, pero también es cierto que el propio procedimiento administrativo se basa en el principio de informalismo, tal como lo detallara supra. Lo expuesto torna al acto agregado a fs. 30 arbitrario, considerando que basó su causa en un rigorismo formal innecesario y además impropio, lo que lleva a la necesidad de declararlo nulo. De aplicación análoga es lo dispuesto por nuestro más alto Tribunal en la causa “Colalillo Domingo c/ Cía. de Seguros España y Río de la Plata”, en la misma sostuvo: “Corresponde dejar sin efecto, por carecer de fundamentos bastantes para sustentarla, la sentencia que haciendo mérito únicamente de la presentación extemporánea de un documento del que podía depender la solución del pleito, rechaza la demanda omitiendo toda consideración del mismo. En el caso, tratábase de determinar si, a la fecha del accidente cuya indemnización se perseguiría en virtud de un contrato de seguro, el conductor del vehículo de propiedad del actor carecía o no del registro habilitante correspondiente, cuyo duplicado se acompañó a los autos después de dictada la sentencia de primera instancia”. En el caso citado, la Corte Suprema ha estimado que excesivo rigor formal puede derivas sin más en perjuicio de los justiciables, tornando innecesario el dictado de medidas que no hacen a la solución integral del expediente que se presenta a estos fines, soslayando muchas veces el derecho de defensa de las partes. 2. A pesar de lo expuesto, y considerando que el sub examine se ciñe exclusivamente en corroborar la existencia de cumplimiento del acuerdo al que han arribado oportunamente las partes, entiendo que el acto debe ser declarado nulo por existir un vicio en la causa, atento a no tener en cuenta la prueba aportada a los fines de comprobar el cumplimiento de lo convenido por las partes. 3. Las costas del presente serán impuestas al GCBA por no encontrar mérito suficiente para apartarme del principio objetivo de la derrota (art. 62 CCAyT). 4. Los honorarios de la representación letrada de la recurrente, serán regulados en la cantidad de pesos doscientos ($200.-). Por todo lo expuesto y en caso de que mi voto fuere compartido, propongo al acuerdo: I. Declarar la nulidad del acto recurrido. II. Imponer las costas al GCBA (art. 62 CCAyT). III. Regular los honorarios de la representación letrada de la empresa Telefónica de Argentina SA en la cantidad de pesos doscientos ($200.-). El Dr. Esteban Centanaro por los fundamentos expuestos por el Dr. Eduardo Angel Russo, adhiere a su voto. La Dra. Nélida Mabel Daniele dijo: 1. Si bien concuerdo con la solución a la que, en definitiva, arriba el Dr. Russo en su voto, discrepo en cuanto a los argumentos que sostienen tal parecer. 2. Cabe señalar que el procedimiento administrativo, en especial el sancionatorio, debe ser una garantía para el particular de que su conducta será juzgada con estricta observancia de las reglas del debido proceso. De tal manera, el procedimiento previo al acto importa el deber de la administración de instruirlo de forma tal de llegar a la verdad material de los 3 DERECHO ADMINISTRATIVO II hechos investigados y, a su vez, contemplar y considerar los argumentos y las pruebas pertinentes ofrecidas por quien está siendo investigado. 3. Es que el acto administrativo, como producto del ejercicio de la función previa, tiene necesariamente que ser la derivación del respeto de las garantías del administrado y una derivación razonada y razonable de las circunstancias esenciales (fácticas y jurídicas) allegadas y producidas en el expediente. No se puede admitir que la administración ignore que es ella quien tiene, principalmente, la carga de instruir las actuaciones de forma de llegar a la verdad de los hechos. 4. En el caso, aun cuando el actor presentó en forma extemporánea la documentación que corroboraba que había dado cumplimiento al acuerdo arribado con el consumidor, la demandada ignoró ese extremo, con un proceder que, a la postre, importó un excesivo rigor formal, lesivo del principio que rige al procedimiento administrativo basado en la búsqueda de la verdad material. En definitiva, el hecho de no contemplar que el actor sí dió cumplimiento al acuerdo celebrado con el consumidor, determinó que la decisión se encuentre viciada en su causa, acarreando su nulidad Esas razones son las que me llevan a coincidir con mis colegas en punto a que se debe decretar la nulidad de la disposición puesta en crisis. Así voto. Por todo lo expuesto, este Tribunal por unanimidad RESUELVE: I. Declarar la nulidad del acto recurrido. II. Imponer las costas al GCBA (art. 62 CCAyT). III. Regular los honorarios de la representación letrada de la empresa Telefónica de Argentina SA en la cantidad de pesos doscientos ($200.-). Regístrese, notifíquese y oportunamente devuélvase.- 4