Anexo 9 MENSAJE DE DESPEDIDA DE LA HNA. MARY JOHN La misa de apertura de esta Asamblea se inició con una pregunta relevante y vital ¿Qué significa la Resurrección personalmente en el contexto de esta Asamblea?. Durante estos cuatro días estuvimos reflexionando y compartiendo sobre nuestra presencia religiosa misionera en este continente. Latinoamérica, más que en otros lugares del mundo, tiene dos elementos importantes: - Una Iglesia llena de vida y con un impulso vibrante motivado por la Palabra de Dios. - Millones de personas que luchan con las realidades de la vida cotidiana. Estas dos realidades nos desafían y nos invita a convertir nuestra fe en acción. La fe sin obras es muerte y la acción sin fe es vacía. La congregación ha dado pasos para integrar JUPIC en su comprensión de Misión. En estos días hemos escuchado las luces y sombras de la Animación Misionera en nuestras provincias. También reflexionamos sobre la nueva comprensión y sobre la persona del misionero. Estoy sorprendida y orgullosa al ver como ustedes están abiertas y son capaces de aceptar la reestructuración que integra JUPIC y Animación Misionera. Yo deseo y rezo para que la próxima Asamblea que se realice, los miembros de JUPIC participe y sientan que ellos verdaderamente están en misión y los miembros de la Animación Misionera participen y sientan que ellos verdaderamente están en JUPIC. Me siento agradecida con todas y todos ustedes, porque siento que esta asamblea es una experiencia que me enriquece. Queridas Hermanas estoy abierta para recibir sugerencias y sé que puedo contar con su apoyo y oración para que juntas hagamos la misión más efectiva.